Adrenalina y Placer

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Las relaciones inter-especies deberían ser catalogadas como un deporte extremo de alto riesgo, y es qué lo digo muy enserio, no hay día en que no vea reflejada en las páginas de internet y periódicos, en cualquier maldito medio... "El trágico suceso que llevó de la noche de pasión a una inminente muerte"

No importa lo que se haga, sabemos que simplemente es imposible mezclar a los herbívoros con los carnívoros, los instintos naturales de los carnívoros son tan fuertes que no importa si la persona se niega a ceder, solo basta un segundo entre el éxtasis descontrolado para... ¡Clap! Clavar sus afilados incisivos en el cuello de su pareja.

Por eso mismo pienso que aquellos que lo intentan deben estar muy mal de la cabeza, completamente dementes, posiblemente necesiten ayuda psiquiátrica, o algo así...

— ¡Ey! —eleva el brazo con animosidad —Llegaste justo a la hora.

Exhalando un suspiro se pone de pie al lado de su hermano —No creas que llegamos temprano porqué estés muy bueno... —sonríe engreído —simplemente que el impaciente de mi hermano tenía muchas ganas de probar venado.

Observo a ambos sin mostrar importancia —Bueno, genial, yo solo quiero coger. ¿Vamos?

Mis pasos van antes que los suyos y puedo sentir como me siguen de cerca entre susurros. Detrás de mí vienen caminando dos guepardos, hermanos que comparten tanto la comida cómo a las personas que se cogen, y si... Sé que toda la mierda que dije está de más si al final de cuentas encajo en el puto papel de lunático empedernido, pero...

— ¿Por qué sonríes? —cuestiona con emoción inclinando el rostro hasta mi campo de visión.

—Debe tener muchas ganas... —palmea mi trasero —de que le metamos lo nuestro.

Mi risa sale con superioridad —Por favor, he tenido mejores cosas adentro. Solo... —encogiendo los hombros elevo mi palma derecha —Quiero probar a un par de incestuosos hermanos.

—Uh... —detiene su andar haciéndome volver la mirada —No somos incestuosos amigo, así que más vale no quieras que montemos un espectáculo de ese tipo.

—Til tiene razón, —interfiere el mayor —no entramos a esa cosa, simplemente nos gusta... —inclina el rostro hacia mí mostrándome su sonrisa —compartir la comida.

—Si. Lo que digan par de idiotas, solo vayamos a ello que no tengo mucho tiempo.

— ¿Tienes una cita después de nosotros? —cuestiona el hiperactivo.

—Si.

Me encanta la adrenalina intermedia a la hora de tener el mejor y más malditamente candente sexo con un desgraciado carnívoro. Estos hijos de la Naturaleza ceden a sus malditos impulsos de dominar cuándo están en el sexo, les encanta estás arriba y dominarte completamente mientras te escupen palabras obscenas y te ahorcan... Y eso me vuelve algo loco, de solo pensarlo siento el calor subir por mis caderas siguiendo mi espina dorsal.

Me estremezco al sentir las manos de los dos hermanos cruzarse para sujetarme de las caderas, ellos se acercan a mis orejas y no puedo evitar el cosquilleo que las hace mover.

—Te vamos a coger tan duro que saldrás sin esa puta cara de amargado.

—Voy a saborear cada centímetro de tu jugosa piel... —expresa Til

Demonios ¡Si! Vuelvo mi maldita mirada lasciva sobre el estúpido hermano menor, y él sonríe mostrando justamente lo que deseaba ver... Esa mirada de superioridad.

—Una habitación especial, con juguetes incluidos.

Pide el mayor a la recepcionistas mientras Til me agarra el trasero manteniendo mi mirada.

— ¿Van a ser los tres? ¿O el herbívoro solo va a ver?

— ¡Qué no hacemos esa mierda del incesto! —aparta la vista con enfado para encaminarse a la recepcionistas —Seremos los tres, dos carnívoros y un herbívoro teniendo sexo, ¿Dónde están los malditos papeles que debemos firmar?

El mayor exhala un suspiro para entornar la mirada con cansancio, y luego posa su vista sobre mí, me analiza y puedo ver con claridad que a pesar de hablar en forma brusca y parecer un imbécil, ese chico posiblemente tiene más corazón que su hermano menor.

— ¡Oye! —interfiere en nuestro campo de visión —Firma.

— ¿Uh? Si... —avanzo ajustando mi mochila.

Ésto se volvió algo normal desde el primer ataque durante las relaciones sexuales inter-especies, ahora debemos firmar un acuerdo dónde el hotel se deslinde del posible próximo asesinato, ya que ciertamente ellos no tienen nada que ver.

—Solo por precaución se ha implementado una medida extra, —señala la habitación a su lado —Necesito que el herbívoro pase conmigo para hacerle unas preguntas.

— ¿Es algo que están implementando todos los hoteles? —cuestiono con enfado y cansancio.

—Lamentablemente si.

Observo a ambos y simplemente me encamino detrás de la recepcionista. Al entrar puedo ver una videocámara, ella la enciende y me centra para comenzar a grabar.

—Hoy ha venido a las once treinta de la mañana junto a dos guepardos de casi la misma edad ¿Estoy en lo correcto?

—Así es...

— ¿Ha venido contra su voluntad? ¿Esos hombres lo están obligando?

—No, acordamos está cita con anticipación.

— ¿Han tenido citas previas?

—No. ¿Algo más? —ajusto mi mochila entre el desviar de mi mirada —Siento que está grabando alguna mierda porno.

—Solo... —apaga el vídeo — ¿Sabe que su vida podría correr peligro?

—Si, y no me importa demasiado, los carnívoros son buenos para tener sexo... ¿Le hace esa pregunta a todos los herbívoros que vienen con carnívoros?

—No... —rasca bajo su oreja de can —lo que sucede... Es que pude ver cómo uno de esos chicos parecía no tan convencido de lo que estaban por hacer.

— ¿Qué? —analizo su rostro cubierto por su melena negra — ¿Habla del mayor? Parece ser un bombón algo quemado, duro por fuera, pero quizá hasta sea su primera vez en ésto.

—Yo... —agacha la mirada —lamento si me he metido en algo que no me importa, pero ese chico parecía algo inquieto al verlos juntos.

—Quizá sean celos o algo así... —meneo la mano sin importancia.

Un par de toques son dados sobre la puerta con fuerza, y nuestras miradas regresan hacia la voz que emerge.

— ¿Está todo bien ahí dentro? ¿Archibald? ¿Estás bien?

La vergüenza me llena al escucharlo nombrarme y simplemente me levanto parar abrir encontrándome con su rostro sorprendido, su mirada se dirige al interior y al segundo sujeto su muñeca para guiarlo a la ventanilla de la recepción donde su hermano nos espera con un semblante aburrido mientras revisa sus uñas. La chica perro nos entrega la llave, y es Pil quién las toma para adelantarse mientras yo detengo a su hermano por la muñeca.

—No me importa si eres un novato en ésto, pero déjemos algo claro, no nos vamos a llamar por nuestros nombres porque al final de cuentas somos desconocidos.

—Lo sé, y lamento haberlo dicho, pero tardaste demasiado en una habitación de hotel en donde pudieron haberte raptado y desaparecido, no lo sé, —suspirando lleva la mano sobre su nuca rascándose —simplemente quería saber que estabas bien.

—Estoy... Bien.

Nuestras miradas permanecen sobre el otro y yo soy el primero en apartarme para comenzar a subir. Este chico es extraño, no debería estar haciendo ésto... Él no parece de este tipo.

Al llegar a la habitación solo veo volar la camisa del hermano menor que se dirige a la ducha sin siquiera informarnos, y nosotros dos nos quedamos afuera en el incómodo silencio de una habitación de hotel; mi mirada se dirige sobre su rostro que aunque parece calmado, por momentos se inquieta. Observo los juguetes.

— ¿Sabes cómo funcionan los juguetes?

— ¿Qué? —vuelve la mirada con sorpresa.

—Lo juguetes, vibradores, Plug, demás cosas... —señalo con el mentón — ¿Te gusta algo de eso?

Su mirada viaja sobre el tablero con cosas, aquí únicamente hay juguetes sexuales básicos, algunos anillos para el pene... Nada que vaya a asustar a un novato.

—No lo sé... —frota su cuello —los vibradores pequeños lucen lindos...

— ¿Lindo? —aprieto los labios para contener mi risa y simplemente doy un asentimiento para levantarme a la barra de aparatos — ¿Quisieras usar algo en mí? No sé que tengan planeado tu hermano y tú, pero ahora mismo es el mejor momento para pensar en qué más podrías hacerme.

Tomo una pequeña bala vibradora y comienzo a quitarme la playera sin apartar mis ojos de los suyos, él se mantiene atento, demasiado, como si estuviera a punto de atacar a su presa... La camisa sale y suavemente poso la bala sobre mi cuello para comenzar a descender lentamente entre abriendos mis labios, sería ridículo fingir que no estoy disfrutando el verlo tan desesperado por brincar sobre mí... Mis pezones se erizan al momento que la bala cruza mi clavícula, y lo veo tensar el cuerpo aferrando sus palmas a las mantas de la cama.

—Terry... —musito con inquietud.

Sus pasos son veloces, en un momento él está bajo mi brazo con el rostro entre mi cuello y hombro respirando con fuerza mientras nuestras entrepiernas se frotan... Me aferró a su nuca acercándolo a mi piel.

— ¿Quieres morderme? —acerco mi boca a su oreja dando una pequeña mordida para luego susurrar —Solo muerde mi piel Terry... Hazlo...

Sus manos hacen temblar la pequeña barra de madera y de un momento a otro me estremezco de felicidad sintiendo sus manos sobre mi espalda baja, sus pulgares están dentro de mi pantalón mientras aprieta la tela con intencidad y sus colmillos se deslizan contra mi piel.

—Archi...

— ¿Mm?

Mis manos se deslizan por sus omóplatos, y él se estremece, gruñe haciendo que su mano se deslice bajo mi pantalón tocando mi trasero... Delineando mi ropa interior con la abertura posterior... Su miembro erecto crece un poco más y yo deslizó mis manos sobre su cuello atrayendo su rostro... Su pelaje es suave y se desliza entre mis dedos, sus mejillas se han vuelto un poco regordetas por mi agarre, y aunque luce tierno, es malditamente atractivo. Nos miramos de manera intermitente, boca, ojos, boca, ojos... Y mientras nuestras respiraciones chocan nos acercamos cada vez más.

—Cómeme completamente... —susurro en un suspiro — ¿Si?

Y él gruñe mientras nuestros ojos se cierran, lo siguiente que puedo sentir es el calor de sus labios deslizándose contra los míos; ellos dos son un poco más bajos de estatura que yo, seguramente debe estar de puntillas o algo así para poder besar mis labios, y aún así... Su brusquedad, la forma en que toma mi nuca para comenzar a guiarme... Quizá me ha engañado, quizá no es un primerizo, quizá.... Um... Mierda... Su lengua entrando a mi boca, delineando bajo mí lengua y luego subiendo a mi paladar, sorbiendo... Jadeo extasiado apenas nos separamos... y puedo verlo relamer sus labios con su larga lengua.

Mis manos se cierran sobre su camisa — ¿Quieres seguir?

—Definitivamente, pero... —toma la balita vibradora — ¿Puedo?

Mi sonrisa crece — ¿En donde?

—Tus pezones... —baja la mirada sobre mi pecho.

—Podrías lamerlos... —busco su mirada inclinando el rostro —si eso quieres.

Me observa y sin apartar la mirada enciende la balita vibradora sobre mi pezón derecho mientras que su boca desciende al izquierdo, yo me estremezco extasiado, elevando la mirada al techo mientras tomo un profundo respiro.

—Mierda... —aferro mi mano a su espalda —se siente tan bien...

Cierro mis ojos y sus labios suben mientras que la balita baja sobre mi entrepierna... Nuestras bocas se unen nuevamente en un beso, un largo y apasionado beso que nos deja sin aliento. Sus colmillos se cierran sobre la piel de mi cuello, y cierro los ojos estremecido en placer... Pero un movimiento brusco me hace abrir los ojos, su hermano ha llegado a nuestro lado y no ha dudado en abrir la boca de gran tamaño sobre el lado solitario de mi cuello... Pero su brusquedad... La de su mirada... Veo como Terry posa la palma sobre el pecho de su hermano en un intento de apartarlo, se dan una mirada retadora... Y Til sonríe para cerrar sus incisivos sobre mi piel.

Lo que viene después son mis jadeos, la sensación de sus dedos deslizándose por mi pecho hasta palpar tanto mi trasero como mi miembro erecto, ambos me besan, saborean mi piel y me llevan hasta la cama en dónde uno me quita el pantalón y otro me come la boca. Yo muerdo mis labios palpando los hombros, el pecho y los muslos de Terry quién no me aparta la mirada de encima... Y las sensaciones que me entrega su hermano terminan de hacer magnífica la escena, él está entre mis piernas lamiendo mi erecto miembro, dejando fluir su saliva sobre la piel rojiza para después deslizarme por su lengua... Cierro mis ojos sintiendo la caliente sensación, y jadeo aferrándome a la almohada bajo mi cabeza, mis piernas se contraen...

—Archi... —susurra sobre mi orejas.

Mi mirada regresa cristalizada en placer — ¡Mm! ¿Qué?

—Eres... —desliza su palma sobre mi pecho poniendo presión sobre mis pezones —jodidamente sexy.

Y sonrió para él, su erección crece y la acerca a mi boca dejándome probar su excitación creciente mientras su hermano comienza a lamer mi entrada logrando que me estremezca y mis piernas tiemblen.

Al tener mi entrada lista ambos suben sobre mi cuerpo besando cada centímetro de piel hasta que, puedo escuchar el gruñido de Terry dirigiéndose hacia su hermano, mis ojos se abren para observar la escena delante de mí... Terry está enojado mientras su hermano entorna la mirada con cansancio.

—Solo vuelve a lo tuyo y déjame en paz.

—Ey... —sujeto su mejilla atrayendo su atención —Terry, tranquilo. Solo disfruta el momento.

Agacha el rostro cediendo a mis palabras y se inclina sobre mis labios pidiendo un beso que le proporciono sin dudarlo.

Terry es dulce a comparación de su hermano que se adentra en mí sin siquiera pedir permiso o informarlo, Terry gruñe ante mi gemido contra sus labios y vira el rostro con la nariz contraída y los colmillos de fuera, su hermano exhala un suspiro de agotamiento.

— ¡Acordamos hacer está estupidez juntos así que dejá de comportarte como un imbécil! ¡Estoy harto! —aferra mis caderas jalándome contra las suyas — ¡Lárgate si no quieres ver cómo me lo cojo!

—Eres un imbécil.

— ¡Y lo sabías, así que puedes aguantarlo o largarte!

Por un momento Terry parece pensarlo, su mirada desciende y sus orejas se elevan con el siguiente quejido que escapa de mi boca cuando su hermano se inclina sobre mí con ambas palmas sobre mis costados y las caderas en un profundo y brutal vaivén. Mis ojos se encuentran con los suyos y no puedo negar que su preocupación me encanta, le tomo la muñeca y él lo piensa.

—Dale la vuelta. —murmura.

— ¿Qué? —jadea, volviéndose con enfado y desinterés hacia su hermano — ¿Que dices?

—Que le des la vuelta. Lo estás acaparando.

Una leve sonrisa invade el rostro engreído de Til quién asiente una vez y sale de mi interior, Terry mismo me ayuda a levantarme en la cama haciéndome abrazar a su cuello mientras su hermano me penetra nuevamente sin aviso, la mano del mayor se desliza de mi mentón a mi barbilla recubriendo mi pelaje con el suyo mientras me observa directamente sin duda ni asco, solo me observa mientras palpa mi labio con su pulgar.

—Te... Terry ¡Mngh!

Mi rostro baja tratando de contener los gemidos, pero la sorpresa me invade al sentir sus manos en mi miembro, cualquier acción de Terry borra totalmente los movimientos de su hermano que está siendo por más agresivo y no pierde el tiempo a la hora de morderme los hombros y la espalda, de lamer todo de mí, pero Terry... Él, él no para de mirarme, me acaricia y me mira, me sujeta firmemente acercándome a mi cuerpo.

— ¡Acaba de una vez maldito!

Me abrazo aún más profundamente acunando su cabeza mientras nuestros labios se unen, puedo sentir las garras de su hermano extenderse sobre mis hombros y un quejido lastimero logra interrumpir mi beso con su hermano, pero Terry no detiene su mano que frota mi miembro y en cambio siento su brazo fluir detrás de mi nuca... Su rostro se frunce, y la sangre caliente se derrama sobre mi piel, sobre mi espalda.

—Maldito... —murmuro — ¡Idiota! ¡Lo has mordido a él!

Til se separa de golpe al punto de que cae de espaldas al suelo alfombrado, Terry por su parte se arrodilla sujetándose el brazo sangrante con una clara y profunda mordida.

— ¡Llama a la recepción para que pidan una ambulancia! ¡No te quedes como un idiota ahí!

Bajo de la cama a prisa tomando mi propia playera del suelo para detener el sangrado, Terry mantiene el ceño fruncido al verse la herida y la cantidad de sangre que fluye de ella, y su hermano lloriquea al teléfono.

Luego de algunas horas para reponerle la sangre perdida y desinfectar además de suturar, los doctores por fin permiten que Til entre en la habitación de su hermano y al segundo él sale con la culpa en cara para mirarme.

—Pide verte.

—Como sea. Necesito que me pague por la playera que ensució de sangre.

—Maldito.

—Yo no metí su brazo entre tus colmillos. Deja de ser tan imbécil.

Al entrar lo puedo ver incorporarse en la cama, me sonríe con cierta vergüenza y yo avanzó lo más calmado que puedo hasta llegar a su lado en la cama y tomar asiento en la silla vacía.

— ¿Por qué has hecho salir tan rápido a tu hermano? ¿Utilizarás la herida para jugar con él?

Ríe —Quizá un poco. Um... —observa su brazo vendado —mi verdadero nombre es Theo, lamento no haberlo dicho cuando me dijiste tu nombre.

—Nunca te lo pregunté. —confieso con una leve sonrisa —Pero en cambio tú preguntaste por el mío. Casi nadie lo hace, note desde un principio que eras nuevo en ese mundo, pero... Al verte me hiciste creer que quizá me equivocaba.

Inhala sus palabras — ¿Crees... Que podríamos vernos fuera de esa aplicación de sexo?

—Bueno... —froto mi nuca —te debo una grande.

Él sonríe. Se ve tierno. Sí... Iniciar una relación inter-especies no te asegura que tú pareja no caerá a sus impulsos naturales y terminará matandote en la cama, pero... Theo es... Bastante interesante.

—Um... Lo del sexo, mordidas y todo eso, quiero dejarte claro que de verdad me gusta aunque corra el riesgo de...

—Podemos intentarlo, pero quiero tener el mayor cuidado posible en ese aspecto porque no quisiera que ocurriera...

—Nadie lo quiere Theo. Yo tampoco. Pongamos reglas y tengamos cuidado, lo primero es confiar en el otro y... —toco su pierna —creo que puedo confiar en ti.

Él sonríe dejándome ver sus colmillos, aunque los oculta casi enseguida haciéndome reír. Si, bueno... Un ambiente seguro puede apagar un tanto la llama del riesgo que tanto buscaba, pero... Creo que este tipo vale la pena.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro