Nuestro amor resistirá.

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Tragando grueso chico bestia parpadeaba inseguro de sus palabras, pero ese rostro varonil frente a él parecía tan... Preocupado, era Raven, era SU Raven.

—No creo que sea un problema... Pero —bajaba la mirada inseguro — ¿Cuánto va a durar? ¿Que ocurrió? Realmente estoy preocupado —sujeta sus manos — ¿Estás bien, te sientes bien?

—Estoy bien —sonrie tranquila —Solo... Un pequeño percance en nuestra misión con Star, el invento del pequeño geniecillo malvado, Gizmo... Hizo ésto en ambas.

— ¿¡Ambas!?

Un fuerte y atroz grito llenó toda la torre de los Titanes sorprendiendo a chico Bestia y haciendo suspirar a Raven quien ya se imaginaba lo que ocurría.

— ¡Pero Robin, insisto en que sigo siendo Star! —aquella voz gruesa llenaba los pasillos — ¡Por favor Robin, comprende!

— ¡No eres Star, me niego a pensar que eres Star, Star no tiene esa barba en la cara y sus brazos no son tan... Grandes!

— ¡Robin por favor! ¡Es cuestión de tiempo, Cyborg está sacando información de Gizmo para volvernos a la normalidad!

— ¡No eres Star, me niego!

Con prisa aquel chico se adentraba en la habitación de chico bestia mientras respiraba alterado. La pareja de miro insegura de si sería bueno que mirará el estado de Raven, pero antes de poder hacer algo aquel chico se giró notando a su otra amiga... Ahora amigo.

— ¡HAAAAAAAAAAAAA! ¡Cyborg! —luchaba por abrir la puerta — ¡Algo malo está pasando, algo muy malo está pasando! ¡Cybooorrrggg! —salia con desespero.

Ante tal acción ambos chicos se miraron y de un momento a otro comenzaron a reír, era raro ver a Raven así, pero... Él sabía que seguía siendo ella así que con delicadeza tomaba su mano para guiarla a la cama donde tomaban asiento.

— ¿Que ocurre?

—No me incómoda demasiado que ahora seas un chico —sujeta su nuca avergonzado —Perooo... Debo admitir que es un poco extraño, déjame tomar un rato para tratar de acostumbrarme.

Con una leve sonrisa aquel chico peliazul abrazaba a chico bestia con cariño, y aunque aquel contacto se sentía raro, chico bestia lo abrazo por igual.

—Fue una pelea dura —se aleja —Jinx a aprendido nuevos movimientos, estoy exhausta.

Dejándose caer en la cama cerraba los ojos con la cara directa al techo, chico bestia admiraba el rostro de su... Pareja, y tragando grueso se acercaba posando su mano al lado del rostro de Raven en la cama inclinandose sobre... Ella, y al abrir los ojos Raven se encontraba con su sonrojada pareja decidido a besarla, Raven sonrío feliz por la idea, pero poso las manos en el pecho de chico bestia deteniendolo.

— ¿Estás seguro? Comprendo muy bien si ésto te incómoda, no tienes porque obligarte a besarme viéndome así... Debe ser muy raro para tí.

—Pero... Eres Raven —sujetaba una de sus manos acercándola a sus labios —mi Raven, eres tú.

La sorpresa se hacía de aquella chica, y sin más sonreía asientiendo y dejando que los labios de su pareja se posaran sobre los suyos en el inicio de un beso. Le gustaba besarlo. Chico bestia era especial para ella, era... Muy especial, y ver tal aceptación le ponía muy feliz... Pero también era un problema; alejandose del beso suspiro mirándolo acostarse a su lado con esa habitual sonrisa.

—Lamento que haya ocurrido ésto... Justo cuando acabábamos de decidir sobre —acaricia el cabello verde de su pareja —nuestra primera vez juntos.

Avergonzado solo atinaba a sonreír y asentía acariciando la mejilla de aquel chico con algo de nervio.

—Esta bien Raven, la verdad... Aunque tuviera muchas ganas... Estoy dispuesto a esperar.

Por alguna razón aquello no hacia completamente feliz a Raven, era bueno, chico bestia la había esperado ante su inseguridad sobre el tema, pero ahora no era inseguridad... Ella de verdad quería avanzar más en esa relación y... Llegó el tema de ser un varón para detenerlos por un tiempo indefinido.

— ¿Porqué estás triste? —acariciaba su mejilla.

—De verdad quería hacerlo —confesaba con sinceridad.

—Yo también, pero... No solo es en tema de ser hombre, el sexo debe ser muy diferente con un cuerpo masculino... Temo lastimarte o... No lo sé, puede haber tantas cosas que me detengan...

— ¿Te daría asco?

Aquello lo había sorprendido, pero sabía que Raven debía tener sus razones para preguntarlo, aún cuando hubiera veces que no lo entendía por completo, él estaba dispuesto a darlo todo de si.

—La verdad no lo sé... Es que no me lo imagino —se incorpora en la cama —Si quieres intentarlo... —observa su cuerpo nervioso —Yo podría tratar, pero no sé... No sé si será bueno para tu primera vez... —rie sujetando su nuca —Aunque estoy seguro que será algo raro y único para mí, aunque sinceramente jamás querría contárselo a alguien.

Ella río divertida con la idea y solo asintió incorporandose en la cama. Podría esperar, no pensaba obligar a chico bestia con eso, si él pudo esperar por ella, ella debía esperar por él.

— ¡Código rojo chicos! ¡Hay una emergencia! —anunciaba entre gritos por el pasillo.

Con rapidez todos salían de sus habitaciones dirigiendose a la sala de la torre donde Cyborg suspiraba cubriendo su rostro.

— ¡Muy bien... Hay un serio problema —aclaraba mirandolos —he terminado de hablar con Gizmo sobre el problema de... Cambio de sexo, tanto para él como para ustedes... Chicas... ¡En fin! Él desconoce el motivo, al parecer hubo una falla en el cableado durante la pelea, algo se desconectó y se conecto de otra forma... Cables unidos por error —se encoge de hombros —por suerte Gizmo no quiere seguir siendo chica por mucho tiempo así que me ha entregado los planos de la máquina, debo ir a revisar la máquina a la fábrica abandonada, pero... Ésto podría tardar... Seré sincero —unia sus manos con suspenso —la máquina se terminó de destruir durante la pelea, está achicharrada hasta donde se...

Ambas chicas se encoge en su asiento muy desanimadas por tal noticia.

—Tomara tiempo saber que ocurrió, al menos... Un mesa sin haber revisado la máquina aun, pero si se encuentra en peor condición podría tardarme algunos meses en reconstruir y encontrar la falla, será difícil...

Ante la mirada apenada de Cybor hacias sus ahora nuevos colegas, Robin observa a el nuevo Star, su cabello corto y esas facciones masculinas, su pecho... El bulto entre sus piernas, era extraño, sería difícil, pero... Era Star, o algo asi.

—Bien, no hay más remedio ni nada que podamos hacer —se levanta con seriedad —por favor trata de encontrar una cura cuanto antes Cyborg, las chicas deben sentirse raras con un cuerpo masculino.

—Claro amigo.

— ¡De hecho no se siente tan mal! —vuelva con ánimos — ¡Me siento mucho más fuerte! ¡Y es muy cómodo volar sin la falda!

—Star —menciona Raven —la falda puedes quitarte la cuando quieras y usar otra cosa.

— ¡Lo sé! —salia volando con rapidez.

—Entonces, Raven, Bestita —sonreia —ire a ver esa máquina para ver qué tanto tardaremos así.

—Suerte amigo —Decia con calma.

Raven notaba esa calma en su pareja, y por alguna razón se sentía muy tranquila al verlo llevarlo tan bien.

[Ir al baño]

Entre un suspiro Robin limpiaba su arma cuando de pronto el cabello rojizo de Starfire se asomo por la puerta junto a su sonrojo.

—Robin... Necesito un poco de ayuda —apenada unía sus dedos índice.

— ¿Que pasa Star? —lo miraba de reojo.

—Necesito ir... Al baño y yo no sé cómo...

— ¡NOOOOOO! —cubria sus oídos aterrado.

— ¡Pero Robin!

Mientras esa disputa se llevaba acabo entre ellos, Raven cerraba los ojos tratando de concentrarse en cualquier cosa que no fuera el orinar. Apretando sus labios miraba de reojo a chico bestia; el día era tranquilo y ambos estaban en la sala mirando televisión, Raven estaba sobre el hombro de chico bestia muy relajado, pero... Había bebido mucha agua.

—Haa... —dudaba levantándose —Ahora vengo.

Asientiendo chico bestia lo veía levantarse con algo de prisa y nerviosismo, al verlo perderse por el pasillo no pudo evitar apagar el televisor para seguirla, él había entrado en la habitación y luego al cuarto de baño. Nerviosa apretaba los ojos y ciegamente sacaba aquel miembro de su ropa, era extraño, jamás había tocado uno... Mucho menos orinado con uno, se sentía raro el simple hecho de tocarlo, no quieres ni verlo, ni hacerlo, apretaba los ojos asqueada.

— ¿Necesitas ayuda?

La sorpresa se hacía de ella, tragando grueso sentía la extraña sensación de la orina saliendo.

— ¡Sal por favor chico Bestia! ¡Ésto es sumamente incómodo!

—Si, debe serlo, pero juro que no te estoy mirando —menciona con calma —solo no quiero que te compliques con ésto, se que eres reservada, pero yo puedo ayudarte si lo necesitas... Después de todo he vivido mucho tiempo con el cuerpo de un hombre —rie bromista.

—Bu... Bueno, he terminado... ¿Co... Cómo prosigo?

Chico bestia sonrío ante la confianza y comenzó a guiarla platicando le un poco sobre el miembro masculino y como ir más tranquilamente al baño la próxima vez.

[Más de un mes]

Con un suspiro chico bestia se recostaba junto a Raven, él le miraba sonriente

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