Te Marchaste sin avisar.

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Capítulo dedicado para: AndreaUzumaki1
A través de la dinámica hago está historia basándome en la canción: ¿A dónde vas? De Marco Antonio Solis
(Añadida al final de su lectura)
-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

[Cercanías de *Bang sing seng]

Nuestros días de aventura poco a poco fueron cambiando. Sokka y yo formamos un buen equipo, su forma de divertirse durante una lucha a veces puede ser desesperante, pero... Aún así, hasta al luchar juntos somos los mejores.

— ¿Ya llegas? —exhalo un suspiro — ¿Adónde has estado yendo últimamente Sokka?

—Por ahí... —menea la mano dejando algunas cosas —nada muy importante, verifico el lugar, las cercanías... —cuelga los excesos de ropa —Además con Aang y la ciudad república en construcción voy a ayudarles cada tanto.

—Yo también Sokka, pero cada vez que voy, —me acercó hasta tocar su mano —es contigo.

—Lo sé Sukki...

Y ahí va de nuevo, esa mirada arrepentida... Lo he sospechado desde hace algún tiempo, pero aún no tengo certeza de la persona con la cual me está engañando... Y eso es frustrante.

Suspirando aparta su mano —De verdad no es nada Sukki.

—Bien, —suspiro cansada —la cena ya está servida, puedes tomarla cuando quieras, iré a darme un baño, y si, ya comí.

Su mano toma mi dirección y abre su boca, pero finalmente no dice nada y simplemente avanza a la cocina. Sin más que hacer aquí me dirijo a la ducha sacándome la ropa con molestia.

—Si, claro, ciudad república... Si claro, si claro, ya me lo creí todo maldita sea... —me acercó a la tina con agua — ¿Es qué piensa que soy una idiota? Obviamente no es eso... —doy una bandejada de agua —Llega tan tarde por las noches, me evade... —exhalo un suspiro —pero simplemente...

No encuentro nada que lo pruebe, no quisiera hacerlo, no quisiera seguirlo en secreto para confirmar lo que imagino, pero... Creo que ya no hay más opción.

[Día siguiente]

—Sukki, voy saliendo, Toph me informó de una aldea cercana que necesita ayuda, la voy a respaldar.

— ¿Y no quieres que vaya a ayudarles? —cuestiono con una sonrisa.

— ¿Hu? No... —nervioso finge pensarlo —No, para nada, —sonríe ampliamente —es algo sencillo, lo solucionaremos muy rápido.

—Si, bien... —suspiro —ve a por ello campeón.

Él ríe divertido y simplemente toma camino. Ahora es mi momento, guardando nuestro campamento me apresuró a seguirle el paso, Sokka siempre ha Sido muy descuidado a la hora de andar, aunque se niegue a creerme.

Las horas pasan y la culpa me llena pues su camino si es hacía la construcción de ciudad república, y sobre todo, hacía un pueblito como me ha dicho.

—Debo estar demente, creo que... Me decía la verdad.

Deteniendome en la lejanía me mantengo mirando como Sokka ríe animadamente dando palmadas amistosas en la espalda de Toph, pero... Ella parece irritada, al segundo puedo ver a Sokka recibir una palmada que lo arrojá contra el piso; muy divertida cubro mi boca tratando de contener mi risa. Todos los presentes evitan su risa desviando la mirada, pero entonces Sokka le dice algo a Toph y ella estalla en risas.

Mi pesar lleno de culpa hace que me sienta decaída y solo golpeó mis mejillas para volverme a la realidad, Sokka no podría irse como si nada de mi lado, nos amamos, me ama.

[Pueblito cercano, narradora al habla]

—Ya deja de decir idioteces y mejor vayamos...

—Ha... Toph, —se levanta pidiendo un momento —primero... Quiero ir a ver a Zuko, me llegó la noticia de que enfermo recientemente así que quería pedirte el prototipo de auto prestado.

Levemente sorprendida pide con una señal de manos para que busquen las llaves del prototipo y se las den al moreno de coleta que sonríe al instante.

—Gracias Toph, enseguida te alcanzo...

—Antes —sujeta su hombro —Necesito que me digas lo que estás haciendo.

— ¿Qué? —nervioso gira la mirada —Pues... Yendo a ver a Zuko ¿No?

—No exactamente, —menciona con seguridad —ultimente has estado viniendo muy seguido, y la mayoría de las veces no llegas a ayudarme... —abraza por los hombros al moreno haciéndolo inclinarse — ¿Qué exactamente es lo que estás haciendo?

—Haa...

—Tu voz tiembla Sokka, sé que dirás una mentira.

Pensativo muerde su labio inferior para después suspirar rendido a su amiga.

—Tengo... algo con zuko.

—Algo como... ¿Qué?

—Mmm... —balbucea entre susurros —bueno yo... Cómoque
estoysaliendoconZukooalgo así...

Suspirando el chico vuelve su mirada temerosa a la mujer que a su lado se mantiene confundida con sus rápidas palabras.

— ¡Déjate de boberías —da un zape en su nuca —y dime de una vez lo que pasa!

— ¡Auh!... —dolido, se mantiene mirando a su amiga con inseguridad —Es Zuko... Zuko me gusta y estamos saliendo... O algo así.

Una leve sorpresa se pinta sobre aquel duro rostro, y Toph se aleja rascando su nuca con enojo y disgusto. Sokka duda y entre sus nervios comienza a retroceder, pero entonces la mujer de cabello azabache suspira con incomodidad.

—No puedes ser tan idiota Sokka, sé que aún sales con Sukki.

Cruzándose de brazos la chica negaba con decepción hacia Sokka quien simplemente exhalaba con profundidad terriblemente arrepentido.

— ¿De verdad Sokka? ¿¡Pero qué tenías en la cabeza idiota!?

Un nuevo golpe termina sobre su nuca, pero su quejido se ve interrumpido por su culpa.

—Lo siento...

—No es a mí a quién deberías decirle eso.

—Ya lo sé...

Cansada frota su rostro dándole la espalda — ¿Cómo pasó?

—Fue... Durante la misión que Aang me encomendó, tenía que ir a la nación del fuego en busca de algunos materiales.... Entonces llegué a pasar tiempo con Zuko mientras todo se completaba, así... Me dí cuenta de qué, no lo sé —sujeta su cuello inseguro de sus palabras —habia... Algo de conexión entre nosotros, y las cosas —hace ademanes entre su búsqueda de un explicación correcta —siguieron dándose poco a poco...

Con vergüenza vuelve la vista hacia aquel duro rostro que ya no lo juzgaba tanto.

— ¿Toph...?

—Simplemente eres un tonto, bueno... —suspira —si decidiste ir a su lado y dejar a Sukki, simplemente no puedo decirte que vuelvas con ella, así que... ¡Termina todo de buena manera con ella cabeza de chorlito!

El chico duda un segundo y antes de decir su respuesta comienza a tomar camino al auto prestado para marcharse cuando antes.

[Cercanías de *Ba sing se, Sukki]

Las cosas... Fluyeron muy rápido, le comenté a Sokka mi desconfianza y lo que hice para comprobar la verdad en sus palabras, él se miró sorprendido, pero en lugar de fingir enojo o simplemente enojarse... Sonrío levemente y se metió a bañar sin decir palabra, esa noche tomamos la cena justos... Él estaba distante. Los días pasaron y las cosas seguían igual aún después de que le confesé lo que pensaba, había días en los que parecía querer decirme algo, pero finalmente... Nada.

Y hoy...

—Por fin te has ido... Sin dejar una nota, sin decir nada... Ni si quiera se dónde estás yendo Sokka... —suspiro tomando asiento —mucho menos con quién... Pero...

En el fondo sé que no vale la pena buscarte. Fuimos buenos juntos, nos amamos y tuvimos lo nuestro... Y al final, estuvimos bien, pero... Lo que no esta destinado a ser no lo será. Quizá lo nuestro era ser solo amigos desde el principio.

—Ahora, puedes ir al lado de quién te parezca, que sabes que yo no voy a derrumbarme... —sonrío entre lágrimas —soy demasiado buena como para llorar por tí Sokka.

Las lágrimas comenzaron a caer aun ante mis palabras, aún ante mis sentimientos. Pero jamás será malo llorar, ésto no es debilidad, ésto es... Mis sentimientos y no está mal dejarlos fluir de vez en cuando.

[Años después, Boda de Sokka y Zuko, Sukki]

Al final descubrí con quién te marchaste, pero no fue hasta el termino de ciudad república cuando decidiste dejarlo claro. Agradezco la invitación, después de todo yo también encontré una buena pareja con la cual pasar el resto de mi vida.

— ¡Sukki, Yue! —eleva la mano entusiasta.

Divertida tomo la mano de mi novia para guiarla había mi ahora amigo Sokka, con un sonrisa puedo ver a Zuko a su lado y sin dudarlo me acerco hasta abrazarlos con cariño, Yue hace lo mismo saludando a su antiguo amorío.

—Se ven muy bien juntas.

—Gracias Sokka, Suki y yo somos muy felices juntas.

—Aunque oi por ahí que tu padre la puso difícil para dejarlas estar juntas.

—Lo siento Yue, pero sinceramente fue un pesado...

Avergonzada la veo reír y asentir a mis palabras mientras le explicó tranquilamente a Sokka lo que me hizo pasar el padre de Yue.

Al finalizar nuestra charla en grupo Sokka sé ofreció para llevar a Yue a la pista, y antes de que Zuko me lo pidiera he decido pedirle un momento para hablar. Ahora mismo estamos en el jardín mirando el paisaje.

—Yo nunca tuve tiempo de pedir perdón por lo que ocurrió con Sokka, la verdad... —sujeta su nuca avergonzado —no sabía que aún no habían terminado, siempre que le preguntaba Sokka evadía el tema.

—Creo que jamás quiere ser el malo de la historia, por eso no te dijo nada, ni a mí... Si huye ya no existe peso en sus hombros.

—Yo no lo creo de esa forma, huir es de cobardes... Pase toda mi vida persiguiendo a Aang para recobrar mi honor, y sé muy bien lo que es... Ser un cobarde, pude haber enfrentado a mi padre ahí mismo, pero no lo hice...

—Es muy diferente, —doy palmadas de consuelo en su hombro —lo tuyo era decisión de vida o muerte, si hubieras luchado de frente con el antiguo señor del fuego... Posiblemente ahora mismo no estarías aquí, pero... Con Sokka es distinto, Sokka solo tenía que hablar conmigo y decirme...

—Lo siento Sukki, creo que me enamoré de alguien más, tengo planeado... —exhala un suspiro —irme para cuidarlo en su enfermedad, y no creo volver.

Sokka dirige la mirada al suelo, y al volver la mirada puedo ver cómo Zuko sonríe levemente despidiéndose en silencio de mí, yo suspiro.

—El pasado es pasado, en su momento me pregunte adónde ibas, pero ahora lo veo, y parece un lugar feliz Sokka... —tiendo mi mano a él —estoy feliz por tí.

—Gracias Sukki, de verdad necesitaba decirte eso... —estrecha mi mano con cariño —fue tonto de mi parte marcharme en silencio.

—Lo fué, —poso mis manos sobre mi vestido —pero... —sonrío hacia él —me diste un buen viaje hasta mi presente, —riendo dejó caer mi mano sobre su hombro —Yue es una chica genial, un verdadero ángel.

—De hecho una diosa... —rie —dejame recordarte nuestra misión en...

La plática entre nosotros puede seguir horas y horas, así somos, un par de buenos amigos con una gran charla. Así estamos bien.

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

Esperó les haya gustado, tuve que moverle un poco a pedimento de mi querida AndreaUzumaki1
Que no deseaba ver un final triste.

La canción:

https://www.youtube.com/watch?v=zuGZ0f1TKXU

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro