Una pelea de idiotas

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng


Últimamente dos jóvenes de la aldea de Konoha peleaban más que de costumbre causando un gran alboroto con su andar, y la causante de ese conflicto era una joven muchacha muy conocida en la aldea...

Uzumaki Himawari de diecisiete años de edad, una jovencita que con el pasar de los días de volvía más bella atrayendo así la atención de los varones de la aldea. Todo comenzó una tarde cualquier luego de una mañana llena de obsequios para la menor, con el sol de la tarde los jóvenes se encontraban discutiendo en la mesa de su restaurante favorito de hamburguesas.

—Te digo que es mía —golpea la mesa con el puño —Es totalmente claro que le gustó —sonrie orgulloso recargandose del asiento.

El rubio era el primer lugar en la lista filtrada de jóvenes ninjas apuestos de Konoha, Yamanaka Inojin, un excelente Jounin muy destacado en todas sus misiones y un excelente artista.

— ¿¡Estás bromeando idiota!? —se burla negando —Ella totalmente me prefiere a mí —Dice con total seguridad.

El azabache de coleta que se posiciona en el tercer puesto de la lista de popularidad, Nara Shikadai, reconocido por sus ataques de sombra los cuales siempre le han Sido muy efectivos en todas sus misiones como ANBU con colegas nuevos. El muy conocido y popular equipo Ino-Shika-Cho se disolvió con los descendientes del grupo y la calma en el mundo Ninja y su aldea; gracias a su gran inteligencia y habilidad Shikadai fue el primero en destacar convirtiéndose así en un ANBU, mientras que por otro lado Inojin se quedó atrás ante sus distracciones dolescentes.

— ¿Pueden dejar de hablar de eso? —deja su hamburguesa en el plato con furia — ¡Realmente son molestos par de idiotas! —golpea la nuca del rubio a su lado — ¡Están hablando de mi hermana otra vez!!

Quitando sus miradas retadoras de su contrincante dirigieron la mirada al rubio que golpeaba con ambos puños la mesa, molesto; Mitsuki fue quien se atrevió a sujetar el hombro del rubio para intentar calmarlo y volver a estar en paz.

— ¿Cómo es que siempre terminan peleando por Himawari frente a Boruto? —les sonríe amenzador —Saben que es su preciada hermana menor.

— ¡Además solo son un par de idiotas! —se cruza de brazos molesto —Es Obvio que Hima no tiene tan malos gusto como para elegir a alguno de ustedes.

—Por favor Boruto —Se recarga de su hombro —Sabes que soy muy popular con las chicas.

—Y que yo —comenta con tranquilidad y orgullo —realmente cuídare a tu hermana como si fuera una reina —golpea el brazo del rubio más alto —No como esté idiota.

Molesto Inojin enseguida se le fue sobre con palabras; el rubio de menor estatura tomo un palillo de la mesa y de la furia lo llevo a su boca mordiendo con furia el pequeño palillo, mientras su compañero suspiraba cansado de aquella pelea constante.

— ¿Por qué no terminan con ésto y hacen una competencia? Al final del día pedirán a Hima que sea su novia, así de ella dependere a quien le de el sí.

Sorprendidos todos regresaron la mirada al joven que sonreia tan tranquilamente como siempre, Boruto sacudió sus ideas y levemente golpeó el brazo de Mitsuki.

—No es una mala idea.

— ¿Qué? —sorprendido se acerca — ¿Estás de acuerdo con ello?

—Estamos hablando de ligar con tu hermana menor amigo... —comentaba dudoso el rubio.

El rubio de ojos azules y baja estatura cerro sus ojos y apretando los puños y dientes ante las palabras del rubio a su lado solo gruño por lo bajo.

—Pero —sonrie burlón —Sabiendo como eres, seguro que Hima prefiere quedarse con Shikadai... —desvia la mirada a su hamburguesa —y eso no me molesta del todo.

— ¿¡He!? —se queja totalmente sorprendido — ¡Pero si es un pervertido de Clóset! —apunta al azabache.

— ¿¡A quien le dijes pervertido de Clóset!? —lo sujeta por el cuello de la camisa — ¡Tú maldito mujeriego!

Y la pelea dió inicio nuevamente, con un suspiro Mitsuki desviaba la mirada mientras irritado Boruto llevaba su palma directa a su cara; apenas la mirada del Uzumaki subía cuando noto entrar a un grupo de chicas conocidas; Uchiha Sarada, ANBU, única decendiente del clan Uchiha que fue masacrado en el pasado, Akimichi Choucho integrante del grupo Ino-Shika- cho una jounin de calidad y... Uzumaki Himawari, con una sonrisa en cara su hermano mayor fue el primero en levantarse haciéndose notar.

— ¡Oi Hima!

La nombrada con prisa noto a su hermano y lo saludaba alegremente mientras sus compañeras hacian el pedido de comida. Ambos jóvenes de alta popularidad se detuvieron en su pelea mirando a aquella chica por sobre el sillón en el cual estaban sentados; Boruto apenas tomaba asiento cuando los jóvenes al lado de ellos golpearon la mesa con sus palmas mirandolos con decisión.

— ¡Acepto! —afirmaba el rubio.

— ¡Acepto! —sonreia animado.

—Genial —sonrie Boruto apuntando a Shikadai —Los declaró Marido y —observa a Inojin —Mujer —con su risa estruendosa los ignoraba por completo.

—Muy bien —observaba el reloj de su muñeca —Apenas son las tres de la tarde... Boruto ¿A qué hora Hima y tú vuelven a casa?

Mira a los jóvenes —Solo por ustedes par de idiotas... Volveremos a las diez.

—Bien —asiente con calma Mitsuki —Antesde esa hora ustedes deben declararse por separado a Hima, los estaremos siguiendo de cerca...

Ambos chicos asintieron y enseguida Shikadai fue el primero en acercarse a las chicas rascando su nuca.

—Hola Hima ¿Necesitas ayuda?

—No es necesario —tomaba la charola con comida —Pero gracias Shikadai Kun.

—Venga, no importa, te ayudo.

Sin más tomo aquella charola rozando levemente la mano de la joven que sonrojada hacia una leve reverencia. Apenas llegaron a la mesa Shikadai intentó mover de asiento a Inojin, pero el se nego.

—Hermano mayor —se acercaba a ambos rubios —Me sorprende que estés aquí, mamá me había dicho...

—Oye... —extiende su mano para detenerla — ¿Y si mejor te sientas de aquel lado?

— ¿Ah? —confundida esbozaba una leve sonrisa —Si, está bien hermano... Yo...

—Esta es tu orden ¿No?

—Si —le dedica una sonrisa —me sorprende que Shikadai conozca tan bien mis gustos.

—Ey Hima, ten una pajilla.

Extendiendo la mano la joven recibio aquel gesto con una sonrisa asintiendo, apenas Choucho y Sarada llegaron Mitsuki se levantó dejando a ambas tomar asiento.

—Ire a buscar una silla —apunta una mesa de cerca.

—Oye, pide más papas para mí.

Con un suspiro la morena comía una patata —Ojala hubieran más chicos como él.

—Por desgracia no hay —exhala un suspiro tomando su bebida — ¿Que tal te fue en tu misión de la mañana?

—Todo bien —dice relajado llevado sus manos detrás de su rubio cabello —Solo debía dejar un mensaje, salí temprano así que no hubo mucho movimiento.

Ambas chicas tomaban sus órdenes mientras Shikadai hacia sus movimientos con la peliazul, desde ponerle ketchup a sus alimentos hasta darle servilletas a lo que molesto Inojin lo pisaba con fuerza por debajo de la mesa. Al llegar Mitsuki con su silla pudo notar fácilmente como bajo la mesa de llevaba un espectáculo entre los dos contrincantes, Boruto los miraba molesto vigilando que ninguno de esos dos fuera a pasarse de la raya con su hermana.

Saliendo del local Sarada y Choucho fueron las primeras en despedirse mientras que Hima no tenía ni idea de que ese día irían más tarde de lo normal a su hogar; con una sonrisa en cara la peliazul se dirigió a tomar el brazo de su hermano, pero Boruto se aparto sorprendiendola.

—Tengo que a hacer unas cosas con Mitsuki —lo abraza por el hombro — ¿Por qué no vas a distraerte por allá mientras tanto? —se gira meneando su mano sin importancia —Que éstos imbéciles te hagan compañía o algo...

Sin dejarla decir nada el Uzumaki se alejo junto a Mitsuki desapareciendo enseguida, detrás de aquella decaída y dudosa chica se encontraban dos jóvenes jugando piedra papel o tijeras para elegir quien tomaría la siguiente ronda con la joven.

— ¡Diablos! —renegaba por lo bajo.

— ¡Voy yo! —festejaba burlón.

Mostrándole el dedo medio al azabache Inojin avanzaba abrazando a la joven por los hombros.

— ¿Quieres dar una vuelta conmigo? —sonrie seductor.

—Pero... —regresa la mirada —Shikadai...

—No te preocupes —sonrie fingiendo calma —de hecho tengo algo que hacer...

—Oh, bueno —dice decaida —pero aún así... Solo quisiera ir a mi casa.

El pelinegro reía por lo bajo mirando como el rubio entraba en pánico, por otra parte Mitsuki y Boruto se encontraban mirando desde los techos como transcurrían las cosas.

—No veo la necesidad de hacerlo sufrir —gira la mirada al rubio — ¿No piensas decirles?

—Es divertido verlos hacer el tonto...

—No puedo negar eso —rie.

La menor sonreía de lado excusándose, pero definitivamente aquel rubio no perderia su oportunidad así que la seguía insistente.

—Pero Boruto dijo que lo esperarás... ¿No lo van a regañar o algo así si llegas antes que él?

—Bueno... —se detiene pensativa —Es verdad que a Mamá no le gusta dejarme tanto tiempo sola... Creo que... —exhalo un suspiro —Sera mejor esperarlo.

— ¡Genial! Entonces... ¿Te parece ir a traer un helado?

La menor sonrío asintiendo mientras Seguía con la plática de aquel chico que la abrazaba por el hombro poniéndola un poco nerviosa; en los techos de cerca Shikadai se había unido a los otros dos espías mirando como Shikadai intentaba sujetar a la no en por la cintura, pero la joven lo evitaba amablemente.

— ¿¡Cómo se atreve el muy idiota!? —golpea el hombro del rubio — ¿Y tú no piensas hacer nada?

—Lo voy a golpear luego —se encoge de hombros.

—Vaya cosa —Dice molesto —Normalmente estás de sobreprotector con ella... ¿Te has golpeado la cabeza quizá?

—No imbécil, no estoy de humor...

Apenas ambos obtuvieron su helado Inojin aprovecho de verla distraída para sujetarla por la cintura a lo que aunque incómoda ella solo le sonrío.

—Muchas gracias por el helado.

—Oye Hima —se detiene mirándola de frente —No se, si quizá no te has dado cuenta —aparta algunos cabellos azules de su rostro —Pero eres realmente linda y...

— ¿Linda? —sonriendo su mirada baja —Boruto siempre lo dice...

—Tú... —aleja sus manos —Realmente aprecias mucho a Boruto ¿No es así? 

—Bueno —sonrie avergonzada —Para mí, mi hermano mayor siempre ha Sido el mejor ninja de todos, y aunque él no quiera aceptarlo su actitud es similar a la de nuestro padre, por ejemplo —Dice entusiasmada —él ayuda a la gente sin pedir nada a cambio ¡Y siempre intenta animar a todos! Realmente es... El mejor.

El rubio trago saliva al verla con esas mejillas ruborizadas y esa mirada baja y feliz, sin poder contenerse tomo las manos de la joven entre las suyas y la miró directo.

— ¡Hima! Tú lo sabes ¿No?

— ¿Perdón?... —menciona confundida.

— ¡Realmente eres una chica muy linda... Eres dulce y hermosa! Hima... Hima tú me gustas.

Ante la sorpresa se quedó sin poder moverse, pero tragando grueso solo se alejo con lentitud mirándolo directo, el rostro del rubio se volvió confundido y triste mientras en el tejado Shikadai esbozaba una sonrisa listo para bajar, estaba seguro de que ese chico sería rechazado y esa era su oportunidad.

—Lo siento Inojin Kun... —sonrie levemente —Nunca podría ser capaz de verte de forma romántica, de verdad me disculpo —haciendo una reverencia se mantiene cabizbaja —Pero... Lo único que vez en mí, es mi cuerpo y cara enderezandose mantiene la mirada baja —A pesar de que eres una persona genial, yo no puedo aceptar tu propuesta.

— ¿En... En serio? —traga grueso — ¿De verdad parece que solo veo tu cuerpo?

—Si, es muy obvio... Yo no te gusto, lo he... —rasca su mejilla desviando la mirada—escuchado de mi hermano, sobre tu gusto por las mujeres... Y yo, sinceramente no quiero ser una más de tantas... Quiero poder seguir viéndote de frente, sin vergüenza y sin problemas... Quiero que sigamos siendo buenos amigos.

Conteniendo su risa lo mejor posible Shikadai no podía evitar su sonrisa burlona ante la cara rendida de su amigo de cabello largo, Inojin estaba completamente en blanco, aquella palabra "amigo" lo había derribado por completo...

—Bueno, creo que llegó mi hora de bajar —sonrie con seguridad —Deseen me suerte, en especial tú Boruto.

— ¡Ja! —se burlaba —Ni quien te la desee.

Desesperada la peliazul intentaba quedar en buenos términos con su amigo a lo que ni siquiera se percató del acercamiento de Shikadai que sonriendo con calma posaba su mano en el hombro de ella.

— ¿Todo... —mira a su amigo levantando la ceja —bien por aquí? —bajaba la mirada a la joven.

— ¡Shikadai! —Decia con total ánimos —Bueno.... Bueno yo...

—Nos vemos mañana Hima —Decia sin ganas —me voy yendo...

Como un zombie, sin reacción en su cara parecía como si su alma abandonará su cuerpo en cada paso de retirada que daba, preocupada lo siguió con la mirada hasta perderlo de vista y enseguida miro de frente a su otro amigo sujetando sus manos.

— ¿Que pasa? —cuestiona sonriente.

—Di me Shikadai... ¿Yo... Yo hice bien al decirle que no?

—Bueno...

El chico se desconectó por un segundo, parecía no saber que decir ni como actuar, solo podía mirar a esa joven que sujetaba su mano con desespero intentando obtener una respuesta... Por un momento se perdió en aquellos ojos azules.

— ¿Que... Que fue lo que pasó?

—Inojin acaba de confesarme que le gustó románticamente, le... Le contesté sinceramente, que solo puedo verlo como un amigo... Además al ver cómo me trata solo puedo pensar que para él soy... Una conquista más por lo que...

—Pero... ¿Él te gusta?

—No me gusta —niega sin dudas —totalmente lo veo como a un amigo... Jamás me interese de esa forma por él, pero... Creo que yo... Lo he lastimado al decirle eso...

Ante la mirada cristalina de la peliazul Shikadai suspira y acaricia su cabello para guiarla a una banca dónde hablar más tranquilamente.

—Si no te gusta, yo creo que has hecho totalmente lo correcto, si tú... Salieras con él sin sentir nada, seguramente él terminaría más lastimado al final —sujeta su pierna reconfortandola —Te aseguro que ahora mismo solo le tomara unos días o horas, para que vuelva a hablarte con normalidad, después de todo eres tú Hima —le sonríe acariciando su cabello — ¿Quien te podría odiar?

La chica lo miraba directo, aquellas palabras de verdad la habían reconfortado, sin más ella se abalanzó sobre él abrazándolo con fuerza a lo que él azabache se sorprendió, pero sonriendo la sujeto con cariño.

—Gracias... De verdad eres el mejor Shikadai.

Aún más tranquilo mantuvo la cercanía, pero cuando ella comenzó a separarse con esa calidad sonrisa en su rostro él no pudo contenerse más, sujetando sus mejillas Shikadai avanzó hacia sus labios; en un arbusto Boruto se levantaba furioso listo para golpear al azabache, pero Mitsuki se interpuso taclenadolo contra el suelo y cubriendo su boca, pero... Había alguien más que observaba la escena y por igual quería meterse en ello, convocando un Jutsu Mitsuki detuvo al otro rubio mientras los tres veían como aquella chica detenía por el pecho del azabache aquel acercamiento, cabizbaja apretaba sus labios.

—Lo siento...

Avergonzado el joven se hecho hacia atrás y solo rasco su nuca mirando el paisaje de la tarde yéndose.

—No, está bien... —la mira con una sonrisa —Supongo que has de tener a alguien.

—Algo así... Es complicado —sujeta su mano —Te aprecio mucho y si yo no tuviera estos sentimientos por esa persona, definitivamente te escogeria sin dudar, pero... No es posible.

—No puedo saber su nombre ¿Cierto? —Dice con total calma.

La chica se encogió de hombros recibiendo un suspiro y una leve risa por el azabache a su lado quien levantándose la despeinaba nuevamente para llevar las manos a sus bolsillos.

—Igual... Si llegas a cambiar de parecer, por favor cumple tu promesa de que me elegiras.

Ella sonrío animada mirando como ese chico se alejaba con tranquilidad; apenas el grupo de chicos se unió, ambos tontos se miraron exhalando un suspiro.

—Aun así —sonrie vencedor —La escuchaste, tengo más oportunidad que tú.

— ¡Eso no es verdad! Seguro que solo lo dijo para que no te sintieras mal.

Suspirando agachaba la mirada —Tal parece ustedes no van a cambiar.

—Me voy yendo para de idiotas, adiós Mitsuki.

[Boruto]

Levantándome del suelo observo como Mitsuki intenta detener la pelea, así es... Hima tiene a alguien especial.

— ¡Hima! —la llamo a la distancia —Vamos a casa.

Sonreí al mirar como sus ojos brillan al escucharme, ella sonríe con prisa y levantándose se toma de mi brazo.

—Estabas tardando hermano...

Si, ella tiene a alguien especial... Mirando de reojo al rededor la hago detenerse y sosteniendo sus mejillas la beso sin más, ella sonríe de gran manera.

— ¿Todo bien entonces? —rie levemente sujetandose a mi brazo —En la mañana parecias un tanto molesto conmigo...

—No contigo... Nunca podría estar molesto contigo, era un tema con los chicos... ¿Que tal estuvo tu tarde?

—Algo... —rie divertida —problematica.

Tomando su mano seguimos nuestro camino a casa, un día... Simplemente paso, pero solo una persona sabe de ésto así que... ¿Por qué no guardan nuestro secreto?

[Narrador normal]

En su camino a casa aquel rubio y el azabache seguían discutiendo sobre quién tenía más oportunidad con aquella joven, la sonrisa en la cara de Mitsuki era claramente de molestia, enfadado levanto ambas manos y golpeó sus nucas haciendolos sorprenderse una vez tocaron los labios de su contrincante, pasando de largo Mitsuki siguió su camino.

— ¿Por qué no dejan de ser unos tontos y se dan cuenta que ella nunca los va a mirar de esa forma? En todo caso —se gira para mirarlos — ¿Porqué no dejan de darle vueltas al asunto y se dicen que se aman?

Ambos se chicos se sobresaltaron ante aquellas palabras y avergonzados subieron la mirada a aquel joven que sonreia divertido con lo que acababa de decir.

— ¿Tú cómo demonios... —cuestionaba el rubio.

—Es más que obvio —se giraba con tranquilidad —No hace mucho iniciaron con lo de Hima, pero nunca antes lo habían mencionado a pesar de que su trato con ella era el de siempre... Ambos han estado raros y no paran de pelear —continua su camino —no soy tan despistado... ¿Les gusta Hima? —los mira de reojo burlón — ¿Porque mejor no miran frente a ustedes

Ambos chicos se miraron avergonzados, el sonrojo pintaba la piel blanquecina del Inojin hasta las orejas mientras él siempre stoico Shikadai no podía mantener la mirada fija al joven a su lado, ante la vergüenza ambos iban a pelear con Mitsuki, pero al buscarlo con la mirada se encontraron solos en aquella calle...

Posiblemente un romance florezca en aquellas solitarias calles de Konoha, un romance raro para muchos y... Quizá hasta para los mismo enamorados.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro