Seguían recordando aquella vez en que hablaron sobre cuántos hijos querían tener, llegaron a la conclusión en que dos pequeños estarían mejor para hacerse compañía el uno al otro, no importaba si era una niña o un niño mientras tuviera salud lo que era más importante para ellos dos.

Así que mientras YoonGi le ayudaba a ponerse la camisa y los zapatos pensó en que no importaba si solo tenían un hijo, le preocupaba más la salud de su esposo luego de que Jessi les dijera en una de sus consultas mensuales que el parto de JiMin podría ser complicado debido a que su cuerpo parecía no poder con un segundo embarazo si llegaban a tener mss hijos, ambos conocían los riegos y el dolor que traería el parto y los increíbles cambios que seguirían en el cuerpo del omega.

-¿No te parece que mi panza es muy grande para tener solo cuatro meses?

YoonGi lo miro y dejó un beso en su mejilla y otro en su vientre al darse cuenta que las pequeñas manos de su esposo se iban paseando por su piel viendo con amor al pequeño o pequeña que estaba en él esperando por su nacimiento en un hogar lleno de amor y comprensión.

-Tal vez nuestro bebé será muy grande, no te preocupes cariño.

-¿Me seguirás queriendo igual aunque mi cuerpo no sea el mismo después del parto? -La pregunta de JiMin confundió al alfa que elevó su mirada para ponerle atención, creía que habían hablado lo suficiente sobre el embarazo y los cambios que tenía como para que su esposo entendiera que no importaba lo mucho que cambiará.

-Mimi, yo te amo por todo lo que eres tú, desde tu personalidad hasta todo tu físico pero para mí nunca existira algo más maravilloso que tú, así tu cuerpo cambie totalmente seguiré amándote como desde el primer día, seguiré viéndote como un bobo enamorado e incluso te daré más amor del que ahora recibes por haberte esforzado tanto en tener a nuestro bebé y arriesgarte a los cambios y peligros aún después de enterarte.

Lo abrazó con un poquito de dificultad por su pancita, pero JiMin asintió limpiando sus mejillas y estirar sus brazos para rodearlo, se sentía feliz y tranquilo aunque ya sabía que YoonGi amaría cada versión suya.

-Ahora vamos Mimi, hoy por fin nos dirán el género de nuestro bebé -lo besó antes de tomar sus manos y encargarse de llevar el bolso de JiMin con él hasta que llegaron al auto y estuvo asegurado en el interior del vehículo.

-De regreso quisiera comprar un helado, ¿está bien? -YoonGi asintió mientras manejaba y le sonrió sin despegar su mirada del frente.

-Pero debe ser sin azúcar como lo puso Jessi en tu dieta.

Había un poco de tráfico por lo que su cita se retrasaría unos minutos, pero YoonGi aprovechaba cada una de esas paradas para observar a su esposo que sonriente acariciaba su vientre y sobre él ponía los audífonos que compraron juntos para que su bebé comenzará a oír algo estando aún en su vientre. JiMin se dió cuenta de que su esposo lo veía y sintió sus mejillas acalorarse, totalmente rojo ya que aunque con el pasar de los años habían visto cada faceta de ellos sin excepción el ver ahora la manera en que trataban a su bebé era totalmente nueva, más allá de que YoonGi solo hubiera observado sus acciones también se deleitó observando el bonito perfil de su esposo, asombrado una vez más con su belleza inigualable y recapacitando una vez más en la gran fortuna que tuvo el día en que ambos se conocieron y que desde entonces una marea de sentimientos se fueron desarrollando.

En días y momentos como ese era que agradecía aún más a JiMin por seguir junto a él a pesar de cada altibajo que juntos enfrentaron; era simplemente maravilloso recorrer el tiempo entre sus recuerdos y darse cuenta de todos los años que tenían juntos.

-¿Qué ocurre, Gigi? -Le preguntó apenado cuando su alfa se acercó a él aprovechando que el tráfico no avanzaba y lo besó con tanta lentitud y amor entre sus belfos que su corazón se aceleró y el baile de sus latidos iba sincronizado con el temblor en sus manos mientras tomaba el rostro de YoonGi para seguir besándolo con tanta vehemencia como en esos segundos que estaban viviendo plenamente enamorados.

-Te amo, demasiado como para ser sincero en una sola palabra, Mimi -susurró en su boca sin abrir los ojos, tocando sus mejillas y cabello bajando su boca hasta su cuello y besarlo ahí también dejando algunas pequeñas marcas que le fascinaban al ver el contraste de colores en la piel blanca de su esposo y el color rojizo que sus labios dejaban.

Su camino siguió poco después cuando los autos avanzaron y lograron llegar al consultorio luego de unos veinte minutos de retraso. La morena esperaba por ellos preparando todo a su lado en una mesa de metal y poniendo una sábana blanca sobre la camilla para que el cuero frío no tocara la piel de su paciente.

Así que cuando la puerta se abrió mostrando la cabellera negra de YoonGi pidiendo permiso para pasar se aseguro de sonreír para ambos y darles la bienvenida llevando a JiMin hacía el vestidor donde se cambió para no manchar sus ropas con el gel y le dieron una bata que podía abrirse en su vientre.

-¿Están emocionados? -Ambos asintieron seguros y sonrientes al ver que Jessi pre-calentaba el gel con sus dedos y lentamente lo esparcía en la piel de su estómago. JiMin se sintió nervioso y el lazo con su esposo se lo hizo saber al alfa así que tomo su mano y le dió un beso en la frente cuando la alfa movió el aparato en su vientre.

YoonGi había visto muchas veces los ultrasonidos de otras personas, así que conocía e identificaba las formar y figuras en la pantalla a blanco y negro. Así que cuando Jessi sonrió viéndolos el también lo hizo con los ojos bañados en lágrimas, su mano temblaba sosteniendo a JiMin y su mano libre fue a su cabello para llevarlo hacia atrás sin poder creer lo que estaba viendo con claridad.

-¿Yoon? -Lo llamo el omega al verlo llorar y limpiar sus mejillas con tanto sentimiento que logro contagiarse sin saber la razón de su alegría.

-S-son... -comenzó con la voz rota pero Jessi lo calmó y lo ayudo a sentarse en el espacio sobrante de la camilla tomando la mano de JiMin para darle la noticia.

-Son tres JiMin, tendrán tres varones.

Entonces comprendió a su esposo, rebosante de felicidad se sentó en la camilla y lo abrazó sin poder creerlo, habían pensando que solamente tendrían un hijo debido a sus complicaciones, pero saber que en su primer embarazo eran tres bebés que nacerían en unos meses más.

-Los dejaré solos un momento -se despidió la mujer con una sonrisa y tomando antes su libreta para realizar una nueva dieta para el omega.

YoonGi lo abrazó con los brazos débiles y besando su mejilla repetidas veces, el omega se aferró a él con su corazón latiendo fuerte en su pecho y minutos después el alfa limpió el gel en su barriga.

-Creo que tendremos muchas cosas que pensar ahora que nuestra familia se hará más grande, Gigi.

Ya tenía planeado darles una familia grande a los chicos, así que este capítulo ha sido de los que más esperaba escribir.

¿Parte favorita?

Los amo bebés. 💜

2/3