Información.

[Presente]

Frunciendo el ceño en pánico contuvo las lágrimas antes de que corrieran por sus mejillas, elevó la mirada y en un parpadeo asintió dando las gracias a su contacto que luego de tocarle el hombro se marchó.

No era momento, Kakashi había terminado su conexión con los Anbu, y Sasuke estaba a punto de salir en misión justo para esa noche. Al salir de la academia observó a su hijo esperando con una sonrisa en labios mientras hablaba con la joven Hyuga que reía ante sus palabras, al acercarse Hinata dió una leve reverencia pero Sasuke siguió con su plática permitiéndole saber un poco.

—Vamos, anímate, estoy seguro de que Hanabi te ha propuesto lo mismo, mandarlos al...

En una risa nerviosa Hinata abría los ojos ampliamente llevando las palmas contra los labios del Uchiha para acallarlo. Sasuke sonrío contra sus palmas mirándola con bastante tranquilidad, tomó sus muñecas y apartó suavemente sus manos.

—Sasuke Uchiha, eres un tremendo mal ejemplo para tal jovencita.

— ¿Y luego? Ella ha sido demasiado recta durante bastante tiempo —rodea los hombros ajenos —es tiempo de que se salga un poco de control. Es lo justo.

Ante la vergüenza de la chica Iruka tan solo niega cruzándose de brazos mientras ambos jóvenes se despiden. Hinata se marcha con unas cuantas reverencias y al encontrarse solos Iruka observa de reojo a su enamorado hijo.

— ¿Qué te gusta de ella?

—Su amabilidad sin distinción. Su empatía. Su esfuerzo... —encoge los hombros volviendo la mirada sobre su padre —no es muy notorio, pero ella intenta ser mejor cada día en varios aspectos. Y si hablamos de algo físico... La verdad es que es muy atractiva, no puedes negarlo.

—Es guapa.

El resto del viaje a casa fue mayormente dirigido sobre sus días de trabajo, pero al estar a unas cuadras de su hogar Iruka se atrevió a indagar en otro asunto.

— ¿Qué harás durante la misión? He investigado y parece que su padre le ha conseguido un prospecto de su edad con bastante dinero y conexiones, sinceramente... El chico es atractivo.

— ¿Qué haré?... Posiblemente ver cómo ella no puede enamorarse de él.

— ¿Y si la situación cambia? Hinata no sabe que sientes algo por ella.

Frunce el entrecejo —Entonces intervendría sin dudarlo, aún si eso significa pelear de frente con Neji.

—Neji es bastante habilidoso, deberías pensarlo mejor.

— ¿Mi padre me subestima?

—El chico es un prodigio.

Entre sus miradas retadoras terminan riendo al conjunto, Iruka palmea el hombro de su hijo y ambos se adentran al patio de su casa para adentrarse por completo, ante ellos Kakashi aparece sin su máscara y con una espátula de madera en mano.

—Estaba preparando un emparedado ¿Se les antoja?

—El mío con bastante tomate, por favor.

—Ya sabes cómo me gusta.

— ¿A dónde había ido Naruto? —cuestiona el Uchiha avanzando a la cocina con dirección a la nevera —Lo olvidé.

—A una misión de entrega de un día, volverá mañana por la tarde —informa el Hatake cortando las rebanas de pan —y tú te vas hoy por la noche ¿Cierto?

—Si. —sirve dos vasos de jugo y se encamina al sofá de la sala entregando uno a su padre —Nos quedaremos en la residencia del señorito "no puedo conseguir novia por mi cuenta" durante tres días y dos noches hasta que Hinata decida que no le gusta.

— ¿Oyes esa confianza? He visto la tarjeta de información del chico y déjame decirte Kakashi, es atractivo y tiene dinero.

— ¿Debo sentirme celoso? Porque la verdad si me molesta un poco saber eso... —comenta con una sonrisa.

Iruka entorna la mirada en su gracia y solo saca los documentos de su trabajo mientras Kakashi dejá los primeros emparedados sobre la mesa de centro y vuelve por el suyo para tomar asiento en el sofá individual.

—Claro que tengo confianza papá, no soy el único que le recomienda a Hinata no casarse, Kiba y Shino también piensan que es una tontería, ella es más que capaz de tomar el mando del clan por si sola, no necesita de un idiota para nada.

Llegada la hora el chico salió con dirección a su misión, se encontraría con el grupo de los Hyuga en la casa de Hinata, normalmente solo acudía Neji y otros dos Hyuga más, su presencia había sido pedimento de la hokage para mantenerse enterada de la situación con respecto al clan.

Iruka esperaba en la cama con su pijama bien puesta y la mirada sobre la ventana, un suspiro escapó de sus labios al momento en que la puerta de su habitación se abrió, ahí estaba Kakashi con el torso descubierto y algo mojado debido a su reciente baño, Iruka intentó sonreírle, pero el Hatake tenía la costumbre de poner toda su atención sobre él así que conocía de sobra las expresiones de su pareja.

— ¿A ocurrido algo? —toma asiento el borde de la cama.

—Tu cabello sigue mojado...

Avanzando de rodillas sobre la cama llegaba hasta su esposo y cuidadosamente tomaba la toalla sobre sus hombros para secarle el cabello.

—Han... Encontrado información sobre Itachi, parece ser que... Por algún motivo ha tenido una pelea contra Orochimaru y... Básicamente lo ha dejado más malherido de lo que había salido durante su enfrentamiento contra el tercero. Se encuentra cerca...

— ¿Por qué atacaría a Orochimaru? ¿Habrá descubierto lo que pasó con Sasuke?

—No lo sé, no entiendo los motivos de ese chico... Solo sé que se encuentra cerca.

Detiene las manos de su pareja para mirarlo a los ojos — ¿Eso que significa?

—Qué podemos hablar con él, o que él se puede encontrar primero con Sasuke o Naruto. No sabemos cuál es su objetivo.

—Y... ¿Qué sugieres que hagamos?

Iruka detuvo sus manos dejando de secar el cabello de su pareja para mirarlo, Kakashi correspondía aquella mirada confusa y nerviosa con la misma inquietud siendo el primero en asentir en comprensión, tampoco él sabía lo que era correcto hacer; habían dejado que Sasuke se embarcará en su misión sin saber que su hermano se encontraba cerca aún cuando le habían prometido no volver a guardarle un secreto semejante.

—No sería buena idea enviarle la información a través de un mensaje, no podríamos saber si se comportará mal o bien. Y no podríamos hacer nada si se le ocurre hacer una locura.

— ¿Y si lo enviamos a Hinata? La chica no solo le gusta Kakashi, creo que de verdad existe una conexión entre ellos, ella sabrá decirle con tacto y sin dudarlo nos informará de la situación.

—Enviemos la información a primera hora mañana, —toma las manos de su pareja entre las suyas —pero redactamos la carta juntos.

Sonriendo de manera tenue, Iruka se levanta de la cama dirigiéndose al apagador para encender la luz, avanza hasta su escritorio y saca algunas hojas limpias acomodando todo mientras Kakashi rodea la cama llegando a su lado, con la luna brillante tras la ventana piensa hasta cinco veces en sus palabras y luego observa a su pareja haciéndole saber que se encuentra listo.

— ¿Cómo iniciamos?

—Dile que ha sido una información de último minuto, además, será dirigida a Hinata así que explícale y pídele que se lo comenté con sumo cuidado a Sasuke, es más que seguro que él intentará leer la carta por si mismo así que no digas nada sobre haberlo escuchado antes de que se marchara en la misión. —aprieta el hombro de su pareja —Ella sabrá dirigir la información, tranquilo.

El viaje había iniciado durante la noche y apenas fueron instalados por la madrugada se pusieron a dormir, tendrían un almuerzo a más tardar a las doce, pero apenas despertó Hinata pudo observar una carta sobre el mueble de noche, la tomó observando una nota exterior.

—La han mandado con urgencia para usted, pero no quisimos despertarla después de su largo viaje... —frunce el ceño dando una negativa entre el abrir del sobre —si es urgente, es urgente.

Dos golpes sobre la puerta la hicieron levantarse de la cama, al abrir se encontró el rostro de su primo y enseguida le mostró el sobre.

—De la villa. —informaba entre su volver al interior para tomar asiento frente a una mesa de dos ocupas —De los padres de Sasuke... ¿Por qué me lo enviarían a mí?

—Quien sabe... —exhala un suspiro adentrándose tras cerrar la puerta —quizá ya notaron el interés de su hijo por ti y han decidido rogar en su nombre por tu mano.

— ¿Qué dices? —expone en una negativa sacando el papel —Es... Mucho más importante... Y serio... —exhala un suspiro — ¿Sasuke sigue dormido?

—Lo vi rondar como un buitre alrededor de tu pretendiente, creo que quiere sacar algún mal chisme al seguirlo a hurtadillas.

Ella lo observa con seriedad absoluta y guardando el documento entre sus prendas se levanta dispuesta a salir cuánto antes.

—Sigues en paños menores —informa sin mayor interés.

Avergonzada detiene cualquier movimiento y se encamina de regreso a sus mochilas sacando sus ropas sin ningún cuidado, Neji se levanta y sale de aquella habitación sin mayor charla. Al encontrarse lista abre la puerta de su habitación sorprendiendo a Sasuke que apenas levantaba los nudillos para despertarla.

—Ey, buenos días, Hinata.

—Sasuke... —expresaba sin aire mirándolo con una tenue sonrisa.

Él la analizó con cierta duda por su expresión nada genuina, pero antes de poder preguntarle nada ella lo tomó por la muñeca obligándolo a entrar, desencajado por la situación Sasuke solo espero a que ella cerrará la puerta y regresará hasta tomar su mano, lo hizo tomar asiento en la cama y aferrando su mano se inclinó hasta abrazarlo.

—Me ha llegado una carta de tus padres, por favor, déjame hablar antes de que decidas hacer cualquier cosa. —delicadamente se apartó para mirarlo.

— ¿Naruto se encuentra en peligro?

Ella negó —Ni tus padres. No es eso.

— ¿Qué ocurre?

Ella frunció los labios —Le ha llegado información a Iruka san sobre... Itachi...

Cualquier preocupación o alivio, cualquier mínima gracia o sensación de su rostro se dispersó dejando a su paso una perplejidad sin rasgos y una sensación fría y onda en el fondo de su vientre, apretó las manos de la chica frunciendo el ceño de a poco.

— ¿Dónde?

—En las cercanías, a tres días de viaje de aquí, al parecer se enfrentó a Orochimaru dejándolo malherido, no saben la razón del enfrentamiento ni el cursó que pudo haber tomado después del avistamiento, pero... Me dieron el punto exacto —saca la carta —me pidieron que te lo dijera.

Él toma la carta leyendo atentamente cada línea de texto y analizando la letra tan conocida que empleaba su padre, mantuvo la mirada atenta sobre aquel nombre... El nombre de su hermano... Y con un nudo en la boca del estómago subió su mirada casi aterrada hacia la joven de ojos perla que lo observaba en apoyo.

— ¿Qué planeas hacer? Sasuke si tú... Si tú quieres ir a enfrentarlo, yo puedo poner en pausa este encuentro para servirte de apoyo en lo que desees hacer.

Su mirada carbón viaja sobre el suelo  elevándose hasta las manos de la joven que le aprietan las rodillas en busca de anclarlo al presente, luego sube hasta el rostro de la joven ninja que le sonríe con la comisura izquierda, él traga grueso y tomando aire deja caer su rostro sobre el hombro de la joven para cerrar sus ojos y aferrarse a la pequeña cadera de ella, Hinata suspira abrazándolo con fuerza.

—También podríamos...

— ¿De verdad pasarías de ésto por mí? —susurra contra su cuello.

—Sasuke. Lo que ocurre aquí ni siquiera es algo que yo quiera, es el deseo de mi padre, lo tuyo es importante. ¿Qué quieres hacer?

Apartándose de ella dirige la mirada al enorme ventanal de aquella habitación que da una vista hermosa sobre el extenso jardín de flores.

—Ver... Cómo declinas su propuesta.

Ella sonríe —Luces muy confiado sobre eso.

—No es para ti.

—Y... —detiene su habla notando la cercanía de sus cuerpos y la mirada del chico sobre sus ojos — ¿Quién si lo es?...

—Alguien a quien ames de verdad.

Sus ojos perla descienden en sus pensamientos para finalizar con un asentimiento sencillo, se levanta observando la habitación y finalmente se observa en el espejo notando como el chico sentado en su cama observa con cierto conflicto la carta entre sus manos.

—Si al final decides marcharte para buscarlo, por lo menos déjame una carta, quiero saber en dónde buscarte si cualquier cosa...

—Siempre te avisaré.

Ella sonríe observando la sonrisa de él a través del espejo. Al salir ambos se encuentran con Neji y su cara de enfado, el Hyuga toma una profunda respiración y los sigue de cerca mientras llegan al comedor principal, el chico presente en la habitación sonríe radiante mostrando sus dientes blancos y un poco grandes, su único defecto, su cabello se abría con una línea central mostrándose un poco más corto a los costados de su frente y mas largo por sobre sus orejas, fino, castaño, y sus ojos eran dulces, grandes y del tono suave de la madera recién pulida, era un joven de complexión alta y hombros anchos con una cintura cúbica, delgado en un grosor fuerte, y tenía un lunar bajo el ojo derecho, pequeño, lindo.

—Buenos días, espero su estancia haya sido agradable. ¿Qué le ha parecido su habitación? Creí correcto ofrecerle esa alcoba, yo mismo he cuidado de varias de esas plantas aunque mi madre fue la que inició con todo.

Hablaba mucho, quizá por nerviosismo. Hinata sonrío y se acercó a la mesa observandolo cruzar la estancia para alejar la silla y luego acomodarla una vez ella tomó asiento, le sonrió y caminó con porte recto hasta el otro extremo de la mesa rectangular tomando su sitio.

—Fue... En todo momento agradable, también el olor de las flores me ha permitido descansar mucho mejor, tienen un olor exquisito. Tengo un amigo al que seguramente le encantaría apreciar cada espécimen, son... ¿Extranjeras?

—Asi es. —observa al Uchiha y Hyuga que permanecen al lado de la chica —Pueden tomar asiento, no se preocupen. —vuelve la vista sobre la chica que abre la boca en busca de decirles algo a sus acompañantes —Su amigo, será bienvenido cuando guste, estaré encantado de conocer a otro apasionado por las plantas. ¿Usted tiene el gusto por la jardinería?

—Bueno... —observa al chico pedir dos platos más y acomodarlos al lado de ella —Mi clan es demasiado estricto, mi tiempo se va entre entrenamientos y estudios, jamás he probado tener un pasatiempo como la jardinería así que no sabría decirle si me sentiría apasionada por ello, en todo caso me gusta apreciarlas.

—Apreciarlas es la palabra clave. Son hermosas en todos los sentidos, el tacto, el olor y a la vista, alguna que otra hasta puede saber deliciosamente dulce y ni hablar de sus componentes curativos o para algunas otras cosas. Pero bueno... —ríe decorosamente —he hablado mucho de mis pasatiempos. ¿Quiere preguntarme algo?

— ¿No tomaremos la comida con sus padres?

—Oh, ellos han salido, decidieron que sería mejor que nos conociéramos en privado, para quitar un poco el peso del arreglo matrimonial.

—Aun no hay un arreglo como tal —aclara dulcemente.

—Lo tengo muy en cuenta, pero ya me entiende.

El resto del día se la pasaron charlando sobre varias cosas, puntos de vista por parte de ambos que llegaban a acuerdos para evitar una batalla sobre la certeza de los asuntos, hasta que finalmente llegó la noche Sasuke se adentró con el rostro fruncido en su enfado mientras Hinata desempacaba sus prendas para poder darse un baño.

— ¿Por qué tienes esa cara? —cuestiona divertida.

—Te ves muy feliz.

—Es divertido, inteligente, sabe escuchar, le gusta mantener una conversación y acepta los puntos de vista diferentes a los suyos, es un hombre espectacular.

— ¿Hombre?

— ¿Chico? No sé cómo quieres que lo llame, Sasuke.

— ¿Él te gusta?

—Es atractivo y tiene todas estas cualidades que ya te he dicho, es un muy buen prospecto comparado a los que hemos visto antes, ciertamente es de mi agrado.

— ¿Te gusta? —insiste.

—Llevo... —frunce el ceño —un día de conocerlo, claramente no me gusta, pero me agrada.

En su inquietud Sasuke se levanta caminando hasta la cama en dónde ella doblaba su ropa sin mirarlo, al estar detrás de ella y verse ignorado la toma por la muñeca haciéndola girar para encontrar su mirada.

— ¿Te interesa?

—Me interesa conocerlo, quiera o no debo contraer matrimonio para cumplir los deseos de mi padre, y al menos quisiera que fuese una persona que me agrade.

Tragando grueso sujeta el rostro ajeno acunando la mejilla de la chica mientras se inclina en su dirección, Hinata eleva las manos con prisa alejando al Uchiha.

— ¿Es por lo de tu hermano?

— ¿Por qué estaría relacionado con el querer besarte?

—Porque te sientes incómodo con la situación y no poder asistir a su encuentro por cuidar de mí. Debes estar enojado. Muchos... —agacha la mirada —acuden a las relaciones carnales para... Liberar su frustración.

—Jamás me atrevería a utilizarte de ese modo Hinata. —acaricia el brazo ajeno —Tan solo deseo besarte porque me gustas.

— ¿Por qué te gustaría alguien como yo? —niega centrando su atención en doblar su ropa —No puedes hacer esto. No en esta situación.

— ¿Y que situación es la adecuada?

—Una en donde ninguno de los dos se encuentra bajo presión. —aprieta la prenda entre sus manos enfrentando al chico —Estoy siendo obligada a desposarme Sasuke, y tú acabas de ser informado sobre... Tu hermano... No me digas ésto ahora mientras necesitas una forma de mantenerte anclado, no mientras yo también necesito mantenerme centrada. Harás... Qué los días siguientes sean incómodos...

—Nada de eso cambia el hecho de que me gustes, me gustabas desde antes de saber de Itachi, desde hace bastante tiempo en realidad. Pero pareces encantada por ese tipo y eso... Me hizo dudar.

—Dudar ¿sobre que?

—Tenía la confianza de que no te enamorarias de nadie, pero al verlos hablar... Puede que él llegué a gustarte.

Hinata baja la mirada dejando las prendas aún lado, aprieta los labios tragando duramente y enseguida se gira para observarlo de frente, Sasuke Uchiha jamás había sido una posibilidad para ella por el simple hecho de que ese chico era considerado uno de los más guapos y tenía cientos de pretendientes, pero... Él estaba interesado en ella, y ahora todos sus intentos por no sentirse atraída por él comenzaban a flaquear. Decidida, Hinata Hyuga tomó aire y se encaminó hasta el joven de melena azabache hasta tomarlo por el cuello de su camisa y así besarlo. Sasuke cerró los ojos al tomarla por la cintura y comenzó a guiar la unión de sus labios.