-N. O.-

Guillermo estaba nervioso, más de lo que le gustaría admitir. Después de aquella cita falsa que había resultado un éxito, pero al mismo tiempo un completo fracaso, realmente quería hacerlo bien esta vez.

David.- Me sorprendió bastante que me invitaras
Guillermo.- Y a mí que aceptaras
David.- *Ríe* Lo que pasó en esa cita falsa no me molestó, a final de cuentas todo era mentira, así que no podía molestarme por algo así... Más que eso... Me sentí... No sé, ni siquiera sé qué sentí con exactitud, pero cuando me pediste tener una cita... Es vergonzoso, pero me sentí bastante feliz

Guillermo le miró y se centró en su sonrisa, era bastante linda, debía admitir.

Guillermo.- Yo también me sentí feliz cuando me dijiste que sí... Realmente siento lo que sucedió... Espero que esta cita pueda recompensar lo mal que te hice sentir
David.- *Sonríe* Gracias, yo también espero que nos divirtamos.

Y así continuaron caminando con tranquilidad, mientras hablaban, nerviosos y deseando que aquella cita terminara bien.

Rubén.- Sam, sabes que David y Guillermo tendrán una cita hoy ¿Verdad?
Samuel.- Sí, lo sé
Rubén.- ¿Sabes a dónde irán?
Samuel.- Eh... No, David no me dijo nada con detalle, sólo que Guillermo lo había invitado
Rubén.- Mierda...
Samuel.- ¿Por qué preguntas?
Rubén.- No, por nada, sólo curiosidad
Samuel.- Ya, claro, dime qué hiciste
Rubén.- ... ¿Prometes no molestarte?
Samuel.- No
Rubén.- Pero-
Samuel.- Habla
Rubén.- *Suspiro* Aún no he hecho nada ¿Vale?
Samuel.- ¿Qué tenías planeado hacer?
Rubén.- Bueno... Recuerdas el incidente en nuestra cita ¿No? Las pulseras, y tal...
Samuel.- *Ríe* Cómo podría olvidarlo
Rubén.- Sí, bueno, deja de reírte... Aún no he perdonado a Guillermo por eso, te juro que quería irme en ese mismo momento, pero no lo hice porque realmente quería estar contigo, así que... Como sea, sólo quiero devolverle el favor ¿Vale?
Samuel.- Pero no puedes, porque no sabes a dónde irán
Rubén.- No, pero puedo averiguarlo

Rubén tomó su móvil y comenzó a teclear en la pantalla, ante la vista curiosa y divertida de Samuel. Doblas realmente tenía una amistad bastante única con sus amigos.

Rubén.- Sam, salgamos
Samuel.- ¿Eh?
Rubén.- Me gustaría ir al parque que está cerca del centro comercial, ahora, vamos
Samuel.- Guillermo y David están ahí ¿Verdad?
Rubén.-... No... ¿Por qué tendrían que estar ellos ahí?
Samuel.- Rubén...
Rubén.-... Sólo vamos ¿Sí? Es un buen día para salir e ir al parque
Samuel.- *Suspiro* Si algo sale mal en esa cita, será tu culpa
Rubén.- Oh, vamos ¿Qué podría salir mal?
Samuel.- Muchas cosas podrían salir mal, Rub
Rubén.- Si nuestra relación salió bien después de todas las tonterías que hicieron ¿Por qué la de ellos saldría mal?
Samuel.- *Suspiro* Sé que voy a terminar arrepintiendome de esto...
Rubén.- *Sonríe* ¡Gracias Sam, te amo! Venga, vamos
Samuel.- Vale, ya voy

Samuel se levantó del sofá con desgano, realmente esperaba que lo que sea que estuviera planeando no afectara de forma negativa la cita de aquellos dos, porque si algo salía mal, parte de la culpa sería suya por permitirle a Doblas hacer aquella tontería.

Durante la pequeña "cita" de Frank y Jesús, el primer nombrado había tenido una "charla" con Alex.

En realidad habían intercambiado un par de mensajes, aunque no había terminado bien.

Frank no consideraba aquello una charla, así que cuando Jesús le preguntó si no había hablado con él, decidió decir que no, a final de cuentas no es como si se hubieran dicho demasiado.

Suspiró al releer aquella conversación, no es que quisiera salir con Alex, tenía ya una relación con aquella chica y no sería él quien se interpondría en ella, sin embargo su amistad estaba en peligro... ¿Qué se supone que debía hacer para arreglarlo?

Siempre se había conformado con la amistad del chico, a final de cuentas sabía que Alex no era su tipo con respecto al afecto, Frank se veía en una relación pública y con muestras de cariño mutuo, conocía a Alex, y cada vez que se imaginaba saliendo con él, no podía ver al de menor estatura siendo cariñoso... Sinceramente no era la actitud de Alex, y para él era imposible que cambiara solo por él... Ni siquiera había sido capaz de decirle que tenía una relación ¿Cómo podría demostrarle cariño?

Aunque le doliera, sabía que aunque tuviera la oportunidad, aquella relación sería difícil de llevar para ambos...

Un par de mensajes lo sacaron de sus pensamientos, era Jesús.

Frank sonreía, realmente Jesús le hacía olvidarse de todo.

*Horas antes*

Rubén.- ¡Oh, ahí están!
Samuel.- Rub ¿En serio vas a hacer esto?
Rubén.- Sí, definitivamente lo haré, y por favor no digas nada, Sam

Samuel suspiró y siguió a su novio, pensando en si realmente era una buena idea...

Rubén.- Oh, hola chicos
Guillermo.- Rubén, Samuel... Qué tal
Rubén.- Perdón si interrumpimos, los vimos y quisimos acercarnos para ver qué tal iban las cosas
David.- Bueno, todo va bien
Rubén.- ¡Me alegro escucharlo!
Guillermo.- ¿Están en una cita también?
Rubén.- Algo así, queríamos venir un rato al parque, no pensé que nos encontraríamos aquí
Samuel.- Bueno, deberíamos dejarlos solos, ya que están en una cita
Rubén.- Oh, sí, tienes razón, que se diviertan

Antes de irse, se acercó un poco a Díaz discretamente, y aunque la acción se vio un poco extraña tampoco fue de gran importancia para Guillermo y David.

Samuel y Rubén se retiraron, dejando nuevamente al otro par a solas.

David.- Bueno, eh... ¿Hay algo que quieras hacer?
Guillermo.- No realmente...
David.- Por ahora ¿Te gustaría un helado? Podemos dar una vuelta por el parque... Oh, y conozco un lugar que seguro te gustará, podemos ir en un rato más, si gustas
Guillermo.- Vale, me gusta la idea

Ambos chicos se dirigieron a una heladería, y mientras comían lo que habían pedido, habían decidido sentarse un momento en el césped del lugar, para hablar y tontear tranquilamente.
Reían y jugaban como si fuesen tan solo ellos dos, mostrándo su lado más inmaduro al otro, sintiéndose en total confianza como para actuar de forma torpe.

Ambos se divertían, y eso era agradable para ambos.

Mientras corrían y tonteaban, David se percató de que algo había caído del bolsillo de su cita, por lo que deteniendo su juego, le indicó que había dejado caer algo.

Díaz miró hacia dónde señalaba David, pues no recordaba llevar nada en el bolsillo de su sudadera...

Guillermo.- ¿Pero qué cojones-?

Si todo sale tal cual lo tengo planeado, tendrán más de un capítulo hoy mismo.

Quiero aportar mi pequeño granito de arena a todo lo que está pasando actualmente.

Espero que esto les sirva al menos como un escape de la realidad aunque sea por unos minutos, y que puedan distraerse leyendo.

Esto es lo que puedo hacer por ustedes, y realmente espero que les sirva aunque sea un poco.

Colombia, CDMX, díganme ¿Qué clase de historias les gusta leer?
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¿Qué temática?
Cuéntenme acerca de sus gustos de lectura.

Los amo muchísimo, Colombia, CDMX, estamos con ustedes.