capítulo 10

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Editado: 01/ 01/ 2021

Perdidamente enamorado.

Apenas despertamos bajamos a tomar el desayuno, Nath no hizo comentarios sobre lo que había ocurrido el día anterior, pero ayer... Descubrí, sorpresivamente, que Nath de verdad se siente muy inferior en comparación a Kevin, aunque no lo es.

—Entonces... ¿Ya tienes elegido el lugar al cual iremos?

—Si, ya lo tengo en mente, pero no te lo diré... Tú solo debes seguir mis indicaciones para llegar.

—Muy bien, entonces vayamos a tu casa.

Apenas terminó con mi desayuno él se apresura a llévarme al auto para ponernos en marcha. Entre por mi cuenta arreglando mis cosas, al poco rato baje con una pequeña maleta, él me espera en la sala y al verme bajar se apresura a tomar mi maleta.

—Vamos, no queremos llevar tarde.

—Nath... —lo detengo por el brazo.

Mis labios van sobre los suyos y él no se contiene al besarme, al separarnos me muestra esa mirada y sonrisa llena de seducción, apenas pensaba apartarlo cuando mi mochila cayó al suelo y él atrapó mis labios; retrocedimos hacia el sofá sus labios jugan con los míos y mientras mis brazos descansan en su hombros él ataca mi cuello entre besos... Nath siempre ataca el cuello.

—Nath... Para un segundo, —su pelvis chica contra mi trasero —la escuela Nath...

Sus labios no se detiene y su mano ya se adentra bajo mi camisa acariciando mi pecho, cuando sus labios buscan los míos no puedo contenerme y en un instante ya he caído en su juego... Mi miembro está erecto presionando contra mi; cada toque, cada beso... Lo que viniera de él era una sensación que me hacía estremecer... Mi cuerpo se contrae al sentir su mano deslizarse sobre mi pantalón, mi mano se desliza por su mejilla buscando un beso y levemente me alejo entre mi respiración agitada.

—Tenemos un problema Mejillas dulces...

—Si... Me has puesto duro, —mi mano se desliza hacia su entrepierna —y tú también lo estás.

—Exacto... —sonrie contra mis labios — ¿Qué quieres que hagamos?

—Quisiera intentar algo, pero... No sé si te guste...

— ¿Qué es? ¿Qué no me podría gustar de tí?

Tragando grueso preparó mi voz para decirlo... Y lo digo, lo sigo sin más tapujos, sin murmuros, cuando estoy con él siento que puedo decir lo que sea y Nath nunca me odiara por eso. Oral... O-R-A-L. La sorpresa lleno levemente su cara, pero al instante sonrío con entusiasmo... Besando mis labios se sentó a prisa esperando por mí, algo divertido me enderezo en el sofá y mordiendo mi labio inferior exhaló un gran suspiro mientras me preparo mentalmente. Se que lo que estoy a punto de hacer es algo sucio, pero sinceramente tengo curiosidad de saber cómo se siente. Levantándome, me inclinó levemente besando sus labios y enseguida me pongo de rodillas entre sus piernas comenzando a desabrochar su cinturón y pantalón.

—No puedo creer que hayas sugerido ésto —expresa con rapidez y emoción —simplemente no lo creo, es increíble y te ves hermoso haciéndolo —me sujeta por las mejillas —pero es... Es... Vaya... Es —su sonrisa se agranda mientras niega.

—Nath —sujeto sus manos.

— ¿Si? —me mira emocionado.

—Cierra la boca un segundo.

Mi pareja asiente con la emoción aún pintada en su rostro, con un suspiro saco su miembro tomándolo entre mi mano... Es de un tamaño normal, un poco rosa... Un poco obscuro... Un poco grueso... Mis dedos se deslizan por su frenillo hasta llegar a la punta; y mientras mi corazón late intensamente acerco mis labios a la punta de su pene, poco a poco lamo la punta y rodeo toda su piel con mi lengua... Él suspira Sujetando mi hombro; con la saliva llenando mi boca lo introduzco sobre mi lengua hasta rodearlo con mi boca, suavemente continúo acariciandolo mientras mi boca succiona la punta y la lame. Tal vez no lo esté haciendo de forma perfecta, es mi primera vez haciendo ésto, pero si Nath lo disfruta... Aún cuando no lo haga como en aquellos videos. De pronto su mano se aferra a mi ropa y con la izquierda aprieta mi cabello presionandome contra su miembro... Mi vista sube a sus ojos cerrados, parece disfrutarlo... Un sonrojo está sobre sus mejillas e intenta aferrarse a los cojines para no volver a presionarme con ésto.

—E... Edd... Mueve... Muévete...

Hago caso a sus palabras apartandome, pero al ver su mano dirigirse a su miembro lo detengo, él me mirá con los ojos llorosos y me permite seguir haciéndolo con la mano. Hasta que logro hacerlo venirse.

—Nath...

De pronto me sujeta por las mejillas besándome sin importarle nada, y tomándome de los brazos me hace subir al sillón hasta recostarme.

— ¿Acaso nuestra relación solo será sexo? —rie comenzando a desabrochar mi ropa —venga, me toca ayudarte.

—No creo que nuestra relación sea solo... —me estremezco al sentirlo tocarme —sexo... Tú me haces sentir tantas... —su lengua me rodea —tantas cosas, es solo que... —sube mis piernas sobre sus hombros —eres muy... Muy pervertido.

Él ríe y enseguida se pone manos a la obra obteniendo que me venga en un menor tiempo, después de todo Nath es un experto en todo lo que tenga que ver con sexo. Al terminar limpiamos todo, pero...

—Lo siento bebé, creo que aún así llegaremos tarde... —me mira arrepentido — ¿Te parece si llegamos para el receso?

—Bueno... No veo otra opción así que... ¿Qué hacemos mientras tanto?

— ¿Un helado?

Mi sonrisa se expande — ¡Si!

Apenas me levantó del sofá él me detiene jalandome de la cintura contra su cuerpo, yo sonrío y sujetandome de su pecho me acerco a sus labios depositando un suave beso que él se encarga de seguir; y entonces sonríe para entrelazar su mano entre la mía mientras nos dirigimos a su auto. El paseo es tranquilo y apenas Nath encuentra un lugar donde estacionarse me dirije una enorme sonrisa.

— ¡Bien, helado, ahí vamos!

—Es... Espera Nath, —salgo rápidamente detrás de él — ¡Oye, vayamos juntos! —él se detiene y yo comienzo a reír entre mi carrera por alcanzarlo.

Después de elegir un helado para cada quien nos dirigimos al auto caminando uno al lado del otro.

—Oye... Creo que tú helado tiene algo raro... —apunta inclinandose.

— ¡Oye! —aparto mi helado al verlo comer de el.

Nath comienza a reír y entre mi diversión acerco el cono contra su nariz haciéndolo retroceder por el frío, él me mirá con sorpresa y al instante sonríe comenzando a perseguir me. Entre mi huida de su helado me siento chocar contra alguien, enseguida retrocedo arrepentido.

— ¡Oh, lo siento mucho! ¡Discúlpeme es que no venía atento al camino!

— ¡Fíjate mocoso idiota! ¡Maldito imbécil!

—Per... Perdone... De verdad lo lamento...

—Maldito Gay de mierda.

Nath avanzó un paso rápido encestado su cono directamente en el rostro del hombre, la gente comenzó a susurrar mientras entre mi sorpresa aparto a Nath por el brazo, el hombre se quitó con enfado la nieve de la cara y aparto a Nath de mis manos tomándolo por la camisa, aterrado intento avanzar, pero Nath sonríe tomando una gran respiración.

— ¡Ayuda policías!

Un silbatzo lleno el lugar y ví a los policías venir rápidamente tomando al tipo por los brazos, por mi parte me aseguro de que Nath se encuentre bien.

— ¡He, suelte me! —se jala — ¡Ese estúpido mocoso me tiró el helado directo a la cara!

—Yo le pedí disculpas, —finge llorar —me había tropezado, fue un error, —se gira apuntando al hombre entre su desesperanza —pero usted solo me tomo de la camisa intentando golpearme.

— ¡Eres un mentiroso, maldito mocoso de mierda!

—Bien, —exige jalandolo —deje de decirle palabrotas, hay niños presentes... Señora disculpe —hace señas a una señora — ¿A visto lo que ha ocurrido?

—Ha... Yo...

Nath la mirá casi suplicando de su ayuda, el hombre estaba furioso y los policías simplemente se aferraban al agarre.

—El... El niño tropezó... Y —su mirada viene a mí —y si le pidió disculpas...

—Bien, —suspira apartando al hombre —ya que no le hizo nada al chico lo dejaremos —el hombre gruñe con enfado —pero si llega a golpear a un menor... Supongo que ya conoce las leyes, —regresa la mirada a nosotros —Hijo, ten más cuidado la próxima vez... No todas las personas están cuerdas —susurra al final haciéndonos reír un poco.

—Malditos maricas de mierda —se arregla el saco notando la hora — ¡Mierda, ya es tarde!

A nosotros se acerca el policía que amablemente le da algunos consejos a Nath mientras mi mirada se dirige a la mujer que nos ayudó con la mentira y ahora se acerca despidiendose del policía como él de ella.

— ¡Muchas gracias de verdad! —grita Nath muy animado.

—Le doy mi más sincero agradecimiento señorita —sujeto su mano con respeto inclinando un poco la cabeza.

—No hay de qué... —acaricia levemente mi cabeza —personas como ese sujeto de verdad merecen un golpe —aprieta el puño con rudeza, y luego nos sonríe —tengan cuidado para la próxima, ahora me tengo que ir, adiós.

Ambos la despedimos con la mano y apenas veo que se ha marchado puedo sentir el brazo de Nath rodear mi hombro, con una sonrisa en cara se inclina hacia mí.

—Que mal que no me golpeó, si lo hubiera hecho ahora mismo estaría encerrado en la carcel.

—No seas bobo, si te hubiera golpeado ahora estarías lastimado...

—Pero él estaría tras las rejas por molestarte —sonrie ampliamente —bueno... Vayamos de una vez, o si quieres podemos faltar por completo a la escuela.

—Ni loco —sujeto su mano —vamonos Nath.

Al llegar entramos a paso rápido hacia la cafetería donde todos los chicos ya estaban sentados en la misma mesa, avanzamos hacia ellos saludando con la mano y Nath de encargó de apartar un poco a Jhonny para que pudiéramos sentarnos al lado del otro.

— ¿¡Dónde te metiste cabeza de calcetín!? —expresa molesto.

—Bueno... —tranquilo me abraza por el hombro —despertamos tarde, cosas que pasan... Ya después —se aparta con tranquilidad —ya después quisimos un helado así que fuimos por el... Luego me peleé con un idiota.

— ¿Por qué? —cuestiona interesado Kevin.

— ¿Qué pasó Nath? —esta vez Nazz es quien parece preocupada.

—Fue... Fue mi culpa, no me fijé y choque con el hombre así que él...

—Claramente, ¡Si van a insultar a mi novio tendrán que verselas conmigo! Eso es muy obvio... —me mira con una leve sonrisa —no fue nada muy malo, llegó la policía y le dió una advertencia al sujeto.

— ¡Si vuelve a molestar a doble D —deja caer la palma contra la mesa —Yo los golpeare!

—Gente estúpida —expresa con disgusto Shara —siempre es igual con algunos.

—No te preocupes Doble D —extiende la mano hacia mi —siempre estaremos para tí.

— ¡Tablón golpeará a quien te moleste!

Y nuevamente, después de las palabras de Jhonny la bebida de Nazz termino sobre Kevin quien enojado se apartaba de la mesa dejando escurrir la bebida de su cuerpo. Todos nos sorprendimos de verlo ahí.

— ¡Jhonny, avisa cuando llegues! ¿¡Y porqué siempre te sientas a mi lado!?

—Tranquila Nazz, —expresa sin problemas —es que ya no había otro lugar disponible.

— ¡Maldita sea Pelón! —se levanta limpiandose con un pañuelo — ¡Otra vez quede empapado!... —exhala un suspiro —ire a lavarme.

— ¿Cómo llegaste allá pelón? —rie Nath —estabas a mi lado.

Las risas siguen por boca de Eddy y siguen en boca de Nath, todos en la mesa siguieron riendo mientras empujaban a Jhonny, entre mi risa puedo sentir la mano de Nath tomar la mía, al mirarlo sonríe. Apenas terminamos de comer todos tomamos camino a nuestro salón de clases, Nath me despidió con un beso en mi mejilla y enseguida entre al salón. Las clases pasaron con total normalidad y al tocar el timbre de salida se me hizo algo raro que Nath no me estuviera esperando, pero antes de pensarlo de más Jhonny llegó tomándome del brazo.

—Ese chico de Internet del que te hable, ¿Lo recuerdas?

—Claro, ¿Qué pasa con él?

—Bueno, él y yo nos llevamos muy bien, tal vez pronto podamos ser pareja, pero estoy esperando a que él diga algo.

— ¡Eso suena genial Jimmy! ¡Ojalá puedas presentarme lo algún día!

— ¡Claro que sí, serás el primero!

— ¡Jimmy! —Shara eleva la mano.

—Bueno, tengo que ir, —avanza animado —Nos vemos luego doble D, ¡Ya voy Shara!

El sonido de mi celular atrae mi mirada, es Nath. Al contestar le informó del lugar en el cual me encuentro y él me pide que espere aquí. Tranquilamente saco un libro para pasar la espera con algo de distracción, pero de pronto la risa de Nazz me hace subir la mirada... Ella sale tomaba del brazo de un chico entre una charla animada, pero no duda en volverse hacia mí y despedirse con la mano, lo hago del mismo modo y vuelvo la mirada a mi libro, pero...

— ¿He? —tomando mi libro en manos lo cierra — ¿Qué lees? ¿Ecuaciones de...? Vaya... —me mira sorprendido — ¿No son muy adelantados estos libros?

—Soy muy inteligente Kevin, —le dedicó una sonrisa —sinceramente solo estoy aquí porque quería estudiar normalmente como todos los chicos de mi edad —recibo mi libro agradecido —ademas de que no me creo capaz de compartir aula con chicos mayores... ¿Te estás yendo?

— ¿Me... —sonrie incrédulo —estas corriendo? —entre una risa acaricia mi cabeza desacomodando mi gorro —bueno, si pareces un cerebrito... Dime —se recarga de la pared a mi lado — ¿Qué piensas estudiar luego de ésto?

—Pensaba ser doctor, —sonrio acomodando mi gorro —y no es que te esté corriendo, simplemente era una pregunta.

Él ríe — ¿Hoy vas solo?

—No, estoy esperando a Nath, es que iremos a un lugar.

—Oh... Bueno, vaya, que bien —golpea mi hombro levemente —am... Sobre la mañana, ¿Qué pasó con ese tipo del que hablaban?

—Nath se encargó de eso.

—Pero... ¿Qué te hizo o dijo?

—Fue mi error, —confiezo sin pena —pero le pedí disculpas... Me encontraba algo distraído y entre mi carrera choque contra él, no fue nada grave solo dijo algunas cosas... Nada muy malo.

—Das muchas vueltas doble D, yo solo quiero saber que fue lo que te dijo.

—Bien, bien... —suspiro avergonzado —esto no es muy común en mi vocabulario, pero dijo... Maldito Gay de mierda... Solo eso, nada importante.

—Bueno... Solo espero que el idiota de Nath lo golpeará fuerte, ese tipo era un idiota... —suspira apartandome de la pared —nos vemos luego Edd.

Su mano se posa nuevamente sobre mi gorro desarreglando en un intento de acariciar mi cabeza, y al segundo mete sus manos en sus bolsillos para avanzar.

—Por cierto Edd, sobre el almuerzo...

—No estaré en casa por la semana... Lo lamento.

—No, está bien... ¿En dónde... Estarás?

—Con...

Mis palabras se acortan al sentir un brazo rodear mis hombros, Nath se inclina sonriendo hacia mí y solo sonrío de igual forma.

—En mi casa, estará conmigo toda la semana... Ya sabes Kevin.

Sorpresivamente la mirada de Nath me pareció un poco desafiante hacia Kevin que solo sonreía levemente con algo de enfado, Kevin saco las manos de sus bolsillos y avanza hacia nosotros mientras Nath me suelta y se pone delante mío... Sus rostros se encuentran en una batalla de miradas llenas de molestia, los dientes de Kevin rechinan de furia y de un momento a otro toma a Nath por el cuello de la camisa.

—Estoy harto de esto Nathan, ¿Qué demonios tienes? Te la pasas apartando a doble D como si tuvieras celos de mí, —lo empuja —nos hemos conocido de toda la vida, ya deberías de saber que no soy Gay, y sobre todo... —me observa de reojo —que no me gusta Eddward, ¿Te queda claro? No me gusta.

Riendo niega —No te creo. Primero deberías de conocerte un poco mejor —lo empuja levemente haciéndolo retroceder —y luego ven a decirme otra vez ésto con la misma intensidad, —me toma de la mano —Doble D es mío, que te quede claro Kevin, nunca te dejaré acercarte a él... Vamosnos Eddward.

Sin poder resistirme le sigo el paso dejando a Kevin en la entrada del lugar algo cabizbajo y muy enfadado, mientras nos marchamos puedo escuchar como Kevin patea un contenedor de basura con total enfado. Durante todo nuestro andar Nath lucía un semblante enfadado, pero al llegar a su auto me abrió la puerta con una reluciente sonrisa.

—Vamos, sube bebé.

—Nath, lo que pasó allá atrás no me agradó en absoluto, —suspiro posando mi mano en su pecho —yo no quisiera ser la causa de separación entre ustedes, pero... No te quiero dejar, ¿Qué puedo hacer entonces?

Su rostro dudoso se enconde en mi hombro mientras me da un fuerte abrazo y le devuelvo tan lindo y cálido gesto.

—Solo... Quédate tranquilo y permanece a mi lado, solo quédate tranquilo, de verdad, todo está bien.

Ante mi asentir él besa suavemente mi frente y luego solo sonríe subiendo al coche para comenzar a seguir mis indicaciones para nuestro lugar de cita, no seria una cita normal... De eso estoy seguro. Apenas llegamos él me cuestiona con sus gestos sobre el lugar, pero sin más comenzó a reír y rápidamente me abrazo por el hombro para entrar a mi lado. Es un museo donde exhiben muchas especies de animales, pedimos los boletos y nos adentramos al lugar; Nath se la paso muy interesado admirando las especies y finalmente se detuvo en uno ya que no logra encontrarlo.

— ¡Espera un segundo! —me sostiene del brazo pegando su rostro al cristal — ¡Aún no logro verlo!

Entre mi risa me acercó apuntando lo —Ahi está Nath, mira bien, ahí... Justo ahí.
Aún acercando bastante su rostro no logra verlo causando que mi risa estalle a su lado, él también ríe levemente tratando de que no lo noté; apretando mis labios me acerco a su cuerpo descansando mi mano en su hombro, él me mirá de reojo y yo me acerco para besar su mejilla haciéndolo sonreír.

—Ya lo ví, parece una pequeña rama.

— ¿Ves? Te lo dije, ahí estaba.

—Bien... —sonrie contra mis labios —vayamos por el siguiente ahora.

Tomando mi mano me guío hacia los arácnidos que eran la siguiente atracción, pero apenas nos adentramos Nath se aferró a mi brazo escondiéndose de las pequeñas arañas.

— ¿Qué pasa? ¿Te dan miedo?

— ¿Mi... Miedo? ¡No, no para nada!

— ¿Quieres que toquemos una? Creo que pueden sacar algunas si se los pedimos...

Apenas me alejaba para ir a buscar un encargado cuando él me jaló del brazo, su rostro está pálido, pero al segundo comenzó a reír y sonreír levemente acercándome a su cuerpo, divertido trato de disimular mi gracia.

—Esta mejor que las veamos así... —no es necesario tocarlas cariño.

—Bien, bien, lo entiendo —sonrio —pero yo les tomaré algunas fotos, tengo un álbum especial para estos bonitos y pequeños arácnidos.

—Bien, tómala rápido y vayamos ya.

— ¿Acaso no te gusta nuestra cita?

—Es... Es especial... —rie nervioso —apresurate bebé...

Luego de sacar algunas fotos, entrelazó su mano con la mía para sacarlo del lugar, él sonríe más aliviado.

—Lo siento, sabía que no te gustaría tanto —sonrio apenado —pero ya tenía muchas ganas de venir aquí.

—No, no es así, los primeros bichitos me gustaron mucho, pero... Las arañas no son del todo lo mío.

— ¿No te gustaba el hombre araña? —cuestiono divertido.

—Si... Pero él es humano...

—Un humano que fue picado por una araña, —le dedico una sonrisa divertida —anda, vayamos al cine.

—Si, vayamos... Pero te insisto, él sigue siendo humano, pero bueno... Al menos me enseñaste algunas cosas en esta cita y tenemos fotos de ello, —sonrie abriendo la puerta del coche —pero antes de irnos... —me sonríe — ¿Por qué no nos tomamos una foto frente al lugar?

—Claro que si, —sonrio mirando a un trabajador del lugar — ¡Disculpe!  ¿Nos podría tomar una foto? Por favor.

—Oh, claro.

Al estar al lado de Nath la amistosa mujer comenzó a contar mientras nos enfocaba, mi mirada sube hacia Nath que también me sonríe y tranquilamente volvemos la vista al frente, pero apenas la mujer cuenta tres Nath se abalanza sobre mis labios brindándome un beso que le sigo; al separarnos del beso puedo ver la sorpresa de la mujer que nos tomó la foto, pero ella sonríe enseguida devolviendo la cámara. Tranquilamente volvemos hacia el coche para ponernos en marca.

— ¡Bien, vamos al cine! Ha y... No quería molestarte con eso, pero... Tengo tarea de matemáticas para más tarde y... ¿Quisieras ser mi tutor? Es que... Es un poco complicado para mí... —confieza apenado.

—Claro que si Nathan, anda, vayamos.

Al llegar al cine nos encontramos con la suerte de que no había tanta gente, compramos los boletos y entramos en la sala; aun siendo una pelicula de accion Nath no solto mi mano en ningun minuto mientras brincaba de entusiasmo en su asiento. Al terminar fuimos a almorzar y luego volvimos a casa para iniciar con la tarea de Nath.

— ¿Un premio de beso si lo hago bien? —sonrie juguetón.

—Bien, solo comencemos Nath.

— ¡Genial! ¡Entonces comencemos Bebé!

Él beso mi mejilla y saco su libreta muy decidido a aceptar mi tutoría, la demás tarde transcurrió con tranquilidad y finalmente ambos terminamos acostados en el suelo.

— ¿Qué harás cuando seas más grande bebé?

—Pienso ser... Doctor, ¿Y tú Nath?

—Tengo que seguir con la empresa familiar, —exhala un suspiro —tal vez... —se aferra a mí mano —no te vea en un tiempo luego de terminar la escuela.

— ¿Eso es lo quieres?... —giro la mirada —mantener la empresa de tú familia...

—No, —se recuesta sobre mi hombro —pero es lo que debo de hacer, además... —suspira —aun cuando quiera hacer algo más, si terminó la carrera aún así sería muy difícil conseguir trabajo en lo que quiero...

— ¿Qué quieres hacer?

—Manejar autos de carrera —confiesa con ánimos sin mirarme —soy bueno para eso, de verdad lo soy.

—Es bueno escuchar eso, que te apasione tanto... —beso su frente — ¿Y cuánto tiempo estarías lejos por lo de la empresa familiar?

—El plan era ir fuera del país para terminar mis estudios y obtener el diploma, pero sinceramente no tengo idea de cuántos años dure... Jamás lo investigue.

— ¿Creés que sigamos juntos para ese entonces?

—Creo —eleva la mirada —que no te quiero lejos de mí ni siquiera un minuto, haría lo imposible por permanecer a tu lado —acomoda los cabellos detrás de mi oreja.

—Yo también... Quiero hacer lo imposible por estar a tú lado Nath.

Aún que normalmente es él quien siempre está sobre mí, por esta vez me subo a horcajas sobre su cuerpo suspirando sobre sus labios, mientras nos miramos intensamente comienzo a besar sus labios y él me sigue con entusiasmo deslizando sus manos por mi cuello y cadera. Me he enamorado perdidamente de este hombre.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro