Festival de la luna roja
Demian
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Me coloque la camisa blanca dejando el primer y segundo botón desabrochado, remangue la camisa para dejar expuesto mi tatuaje. Los vaqueros negros estaban bien colocados y mis zapatos negros no llamaban mucho la atención. Peino mi cabello con mis dedos dejándolo un poco alborotado y suspiro viéndome al espejo, ya estoy listo para el festival. Unas manos me abrazan apretando mi pecho ni siquiera me muevo por que se de quien se trata.

– Mi lobo te vez muy sexy para la luna – hablo Liz cerca de mi oído causando que un escalofrió recorriera mi espina dorsal. Sacando sus manos de mi pecho gire para verla con un vestido sin mangas que se sostenía por su busto y caía desde hay en varias capas de tul. Era corto al frente y largo atrás de un azul Francia muy llamativo y pedrería recorriendo su busto. En la cabeza tenía una diadema de color negro que dejaba despejado su rostro salvo por su cerquillo y su cabello pelirrojo caía por sus hombros en forma de risos. Liz se veía hermosa hasta más alta y fue cuando note sus plataformas de color negro, la pelirroja es alta, pero con zapatos altos se ve casi de mi altura.

– Estas muy hermosa mi vida – tomando su mano la hice dar una vuelta y me detuve viendo su tatuaje, distinto al mío por ser de otra manada. De igual modo no importara mucho si yo me llego a casar con ella Liz dejara de pertenecer a esa manada si la luna me dice que ella es mi mate.

– Gracias ahora vámonos – entrelazando nuestros dedos salimos de la habitación donde nos cruzamos con Angelic que iba saliendo metida en su pijama. Un pantalón de tela fina de hombre y una remera que dejaba al descubierto su ombligo, la castaña tenía un tarro vacío de helado entre las manos y su mentón estaba un poco manchado de chocolate. – Buenas noches Angelic – mi novia saludo a Angelic que apenas sonrió y se volvió a meter en la habitación. Los ladridos de Duque no se hicieron esperar, pero no los escuche más cuando baje por las escaleras. Abajo ya estaban mis padres bien vestidos prontos para irnos al festival que se celebra en medio del bosque lejos de los curiosos humanos y un lugar prohibido para vampiros y valius.

– Ya estamos todos ahora podemos irnos – mi padre hablo, pero pude notar como miraba las escaleras como si esperara que Angelic bajara. Antes de que cualquiera pudiera responder bajo Duque corriendo por las escaleras seguido de Angelic que corría con mucha emoción hacia la puerta. Pero la única diferencia que ahora no tenía el mentón manchado de chocolate, pero si la cara llena de lágrimas que nos alarmo a todos. La castaña abrió la puerta y tres voces gritaron a la vez que Angelic también grito.

– Idiotas vinieron – de un momento a otro tres jóvenes se abalanzaron encima de Angelic y terminaron cayendo al suelo mientras se carcajeaban. – Me aplastan simios – se pusieron de pie y pude reconocer a esas tres figuras, Luke, Benjamín y Marcus.

– Cómo crees íbamos a perdernos la unión con tu mate – hablo Marcus abrazando de nuevo a Angelic y besando su coronilla para luego soltarla.

– Además quiero ver con mis propios ojos lo que se siente dejar la soltería – tomando a Angelic por los cachetes Luke la movió un poco para luego besar su frente.

– También te extrañe enana – Ben revolvió el pelo de Angelic y paso a su lado para saludar a mi madre besando el dorso de su mano – hermosa como siempre señora Black – mi padre gruño ante el gesto galante del amigo de Angelic. La castaña tomo del brazo a Benjamín alejándolo de mamá y se dispuso a hablar antes de que papá ataque al castaño en la yugular.

– Los chicos vinieron a verme porque les conté que la luna al fin revelara a mi mate – los ojos azules de Angelic mostraron un brillo especial que hace mucho tiempo que no veía.

– Bueno hora de irnos – mamá interrumpió el silencio que se formó y besando la mejilla de Angelic se despidió de los chicos cordialmente. Di una última mirada al trió de chicos que estaban cómodamente sentados en el sillón y noté como Angelic estaba feliz con la compañía de los jóvenes.

Nos montamos en el auto para llegar hasta donde se podía en el bosque al bajarnos continuamos caminando hasta que nos encontramos con el resto de la manada. Se encendió una enorme fogata donde se podía bailar alrededor de esta mientras músicas alegres sonaban. Esperábamos la salida de la luna roja que pasaba solo una noche al año por eso celebrábamos el festival además que esta bendecía nuestras uniones románticas. La madre Luna nos cubría con su luz roja y nuestros destinos quedaban sellados. Por más que nos alejáramos nos distanciemos e intentemos alejarnos de la otra persona la diosa Luna volverá a unirnos para que sucumbamos ante el otro revelando al amor.

La música paro cuando escuchamos a la diosa Luna hablar y Alec fue convocado justo debajo de su luz. Bailey fue hipnotizada por la voz de la Luna, su luz roja los cubrió revelando que la castaña es la mate de Alec y su unión es bendecida por la diosa Luna. Cuando la luz se fue todos aplaudimos su unión y comenzamos a celebrar bailando alrededor de la fogata. Así fueron pasando parejas y Liz comenzó a alterarse al ver que la diosa Luna no la convocaba a ella ni a mí.

– Creo que este año tampoco nos dará su bendición – la pelirroja me abrazo y tomo un trago de una de las bebidas que habían preparado para el festival.

– Demian hijo mío acércate a mí ha llegado el momento – con voz dulce me hablo la diosa Luna atrayéndome a su luz. Alejándome de Liz camine siendo atraído por la Luna me pare bajo está dejándome envolver por su presencia hipnótica, hasta que el murmullo de muchas voces me hizo mirar hacia donde debería estar la pelirroja.

Angelic
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Nos sentamos en la sala para hablar acerca de lo que me había pasado anoche. Los chicos en cuanto les conté que la Luna me había hablado ellos vinieron casi de inmediato. Nunca vieron a una Red Hood unirse con su mate y en lo personal yo tampoco. Tan sólo espero que Carter escuché el llamado de la Luna, tengo la certeza de que él es mi mate.

– ¿Angelic estas más delgada o tus pechos se hincharon? ¿segura que no estás embarazada? – pregunto Ben mirándome dubitativo y Luke golpeó su nuca a lo que yo sonreí.

– Los nervios de la boda me cerraron el apetito y además paso encerrada en mi habitación comiendo comida chatarra – levanté la bolsa de papas fritas argumentando mis palabras. No había querido salir a comer durante estas dos últimas semanas y lo que comía era algo liviano o algún sándwich. – Vuelvo a repetir que no estoy embarazada – mordí una papa rodando los ojos, quería seguir comiendo helado, pero ya no quedaba más en la heladera.

– Mejor hablemos de la novia de Ben – deje la bolsa de papas a un lado para ver al nombrado que de inmediato se puso rojo. No es una broma de verdad el mujeriego de Benjamín ya tiene una novia. Cubrí mi boca conteniendo la enorme sonrisa que estaba por aflorar y arrollando mis piernas sobre el sillón mire a Ben esperando que él sea que me cuente de la gran noticia.

– ¿Recuerdas a Lucía la española? – no pude contener más mi sonrisa y la emoción comenzó a recorrer mi cuerpo esa chica me caía súper bien. – Estuvimos saliendo durante un tiempo y ya es mi novia – la seriedad con la que hablaba Ben hizo que le creyera en un instante. Fui hacia Ben para abrasarlo por ver sus mejillas algo coloradas mi play boy favorito al fin encontró a su media naranja.

Estuvimos rato hablando acerca de todo lo que me había perdido desde que había decidido venir a casa de mis padres. Los chicos aún no habían sido llamados por los cazadores, pero al igual que yo temían que ese día llegara pelear contra una manada de lobos no es tarea sencilla y mucho menos matar a un alpha. Me aterra solo pensar que podría lastimar a la gente de mi padre John y no quiero decepcionarlo, pero no puedo hacer nada a menos que me echen del grupo de cazadoras cosa que no es nada sencillo. Los chicos son hijos de grandes cazadores, pero la ventaja que ellos tienen es que en su familia no cuentan con un legado tan grande como el mío. Cosa que los deja como soldados y no tienen oportunidad de dirigir a los cazadores eso solo es para los herederos de los primeros cazadores o los que murieron con honor habiendo matado a muchos lobos.

– ¿Angi tu papá aun no descubrió que Carter es un valiu? – mire a Marcus que me veía con cierta preocupación. Yo estaba tranquila ya que mi padre se iba en unos días de nuevo a los Angeles y no había descubierto que estaba metido en casa de unos come carne y conviviendo con chupa sangres.

– Logramos ocultarlo muy bien y cuando se valla podremos volver a respirar con normalidad...

– Angelic ven al bosque – dejo de hablar de golpe cuando escucho esa voz dulce que ayer me había hablado. Parándome comencé a caminar a la cocina donde fui seguida por los chicos que me hablaban, pero yo no entendía lo que decían. – Solo prepárate hija mía – la noche era algo fría pero como si un manto me cubriera deje de sentir frió y continué caminando. Mi ropa cambio por una luz algo roja yo no le preste mucha atención pues esa voz continuaba diciéndome que siguiera avanzando. Tarde mucho hasta que encontré la fogata donde se celebraba el festival de la Luna roja, los lobos se fueron corriendo a medida que yo iba avanzando. Murmullos se escuchaban, pero yo continuaba sin entender nada solo escuchaba a esa dulce voz. – Unidos bajo mi bendición estarán juntos por siempre – una luz roja me cubrió y luego una mano tomo la mía. Mi corazón comenzó a bombear de forma desesperada y sentía que nos estábamos uniendo en uno solo bajo la luna. Había encontrado a mi mate gracias a la luna, estaba completa mi alma se sentía llena y mi corazón quería ver a la persona que conviviría conmigo por siempre.

La mano de alguien tocando mi hombro hace que salga de mi trance y giro mi rostro hacia donde esperaba ver a Carter. Su cabellera rubia no estaba solo pude ver una castaña, los ojos color miel se volvieron cafés y su complexión no era la misma, pero si conocía a esta persona y muy bien.

– NO – el grito desgarrador de Liz hizo que me separara de Demian y agache la cabeza viendo que mi pijama había sido remplazado por un vestido blanco. Largo hasta los pies de una tela muy ligera pero que brillaba bajo la Luna, pero ni teniendo ese hermoso vestido pude sentirme bien. – ¿Por qué tiene que robarme todo lo que amo? – la furia de la pelirroja hizo que todos se movilizaran y los murmullos dejaron de escucharse. Demian sostenía de la cintura a la pelirroja que parecía estar teniendo un ataque psicótico.

– Yo... – la respiración comenzó a fallarme y no podía lograr hablar. Todo a mi alrededor comenzó a darme vueltas, mi respiración fallaba cada vez más y sentía que mi pecho me explotaría. – yo no...

– ¿Tú no qué? Eres un error que jamás debí dejar con vida maldita Red Hood – tras escuchar esas palabras de Liz las lágrimas comenzaron a salir y me fui corriendo hasta donde pude. Mi respiración se volvió más agitada y caí al suelo de rodillas a unos cuantos metros lejos del tumulto.

El rostro de Marcus apareció frente a mi ayudándome a sentarme mejor y haciendo ejercicios de respiración para que lograra calmarme. Luego aparecieron Benjamín y Luke que me llevaron de regreso a mi casa sin decir una palabra, dejándome llorar a gusto sacando todos mis sentimientos hacia fuera. Cuando ellos se fueron dejándome sola en la habitación camine a la ventana donde podía ver a la Luna.

– ¿Porque lo hiciste? – pregunte entre lágrimas esperando que me contestara, pero no lo hizo – Dime... dime, si yo amo a Carter ¿porque me uniste a Demian? – continúo ignorando mi berrinche de niña pequeña entre lágrimas amargas y un sentimiento de culpa. No quiero que mi mate sea Demian... no quiero este destino.

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Hola mis cazadores ¿Cómo están? ¿Qué les pareció el capítulo?

Prepárense por que ahora se viene el drama, el dolor, la traición y mucho pero mucho suspenso.