9 de junio de 1930, Berun, The Empire

Elya Roth se levantó y se estiró con un gemido. 

Elya: Voy a ir a buscar a ciegas a través de estos trozos de papel. ¿Cómo puede alguien entender esta basura?

Sin obtener respuesta, resopló y miró a su alrededor. Como había predicho meses atrás, la oficina estaba calurosa y cargada, el verano europeo era casi tan malo como los trópicos.

Mary estaba medio dormida en un rincón, luchando por mantener los ojos abiertos mientras repasaba las listas de transferencias de dinero. En una silla cercana, mirando al techo, estaba el pequeño y extraño Francois que se había unido a su equipo de Interpol durante las últimas semanas.

Elya: ¿Está buscando inspiración en los cielos, Sr. Paquet? - bromeó.

Mirándola, el hombre movió su bigote encerado y le dedicó una sonrisa agradable. 

Sr paquet: ¿Por qué mirar arriba, cuando la belleza de los Cielos está justo frente a mí?

Elya se rió. Nunca había esperado que le gustara un Francois, pero el hombrecito calvo de mediana edad con el ridículo bigote tenía una forma de responder a sus bromas que era graciosa sin siquiera esforzarse demasiado.

Sr paquet: Pero no, lo que he estado tratando de adivinar, mademoiselle, es el probable próximo paso de nuestra formidable madame Degurechaff. Y para ello debemos recurrir a la psicología de la mujer, - continuó Paquet, mientras indicaba los registros frente a él.

Elya miró hacia arriba y vio que no estaba revisando los registros financieros, sino el registro militar de Degurechaff.

Elya: Has mencionado eso antes. Que las personas son criaturas de hábitos, e incluso en nuevas circunstancias, seguirán buscando la familiaridad.

Sr paquet: Así es. Degurechaff podría ser una fugitiva, pero si miramos sus actividades conocidas, podemos encontrar ciertas similitudes con cómo se condujo durante la guerra.

Elya asintió.

Elya: Ella reunió un grupo de magos a su alrededor tan pronto como pudo.

Sr Paquet: Cerca, pero no del todo. Lo importante es la parte del cuadro, no la parte del mago. Degurechaff es alguien que busca el control y se rodea de personas a las que puede entrenar para ser leales. Incluso a la edad de ocho años, específicamente pidió un rango de oficial. Durante la guerra, el 203º se formó por recomendación suya, un batallón que operaba casi por completo de forma independiente. Como comandante del 203º tenía más control sobre sus fuerzas que cualquier otra persona que no fuera el capitán de un barco.

Elya: ¿Entonces ella es una fanática del control?

Sr paquet: No, no del todo. Está claro que esperaba que sus subordinados de confianza actuaran de forma independiente y mostraran su propia iniciativa. Es una cosa extraña, es como si encontrara consuelo en posiciones de poder, pero tiene muy poco interés en ejercer ese poder.Excepto en la búsqueda de objetivos específicos. Ciertamente es fascinante. La mayoría de los tipos de personalidad que buscan ávidamente el poder lo hacen para tener la libertad de satisfacer sus vicios. Sin embargo, Degurechaff, como personalidad, está en gran parte libre de cualquier vicio obvio. Ni siquiera parece disfrutar del poder por el bien del poder, a menudo evitando privilegios que los oficiales dan por sentados.

Elya: Bueno, solo tenía doce años cuando se dio a la fuga. ¿Quizás ha desarrollado algunos vicios desde entonces? Definitivamente un buen sabor de vino.

Sr paquet: Sí, la falta de información para una parte tan vital de sus años de formación es ciertamente irritante. Sin embargo, he identificado ciertos patrones de pensamiento que parecen haber sido ciertos.

Mary:¿Oh? - Elya pudo ver a Mary sentada y dándose cuenta también.

Sr pasquet: De hecho. Para empezar, a pesar de la propaganda imperial que la describió como un brillante ejemplo de coraje y nobleza, su historial de batalla indica que ella prefiere luchar solo cuando la relación de fuerza está muy a su favor.

Elya: Un soldado que prefiere superar en número al enemigo. - Elya enarcó una ceja. - Impactante.

Sr paquet: Es más que una mera preferencia. En todos los casos en los que tuvo la iniciativa, sus ataques están calculados para golpear al enemigo en su punto más débil, hacer el mayor daño posible y luego retirarse al primer indicio de oposición seria. Las pocas veces que ella se mantiene firme contra una fuerza más fuerte casi siempre porque alguien más se lo ha ordenado, incluida la acción que le valió las Alas de Plata .

Mary: Así que le gusta golpear y correr. ¿Y qué? - murmuró Mary.

Sr paquet: Ah, señorita Sioux, existe el genio de la señorita Degurechaff. El atropello y fuga, es una táctica obvia, ¿no? Tan obvio que incluso con los mejores orbes del mundo, los ejércitos todavía encontrarían formas de protegerse contra él. . Sin embargo, a pesar de las mejores precauciones de todos, ella constantemente encuentra una debilidad que explotar. A menudo, son cosas que la sabiduría convencional ni siquiera llamaría una debilidad, hasta que ella vino para demostrar que todos estaban equivocados. - El hombre estaba cada vez más emocionado mientras sacaba los papeles, esta vez de la carrera más reciente de Degurechaff. - Mirando ahora sus actividades criminales, se puede ver lo mismo. Encuentre una debilidad y explótela. Desaparezca a la primera señal de oposición seria. En Nueva York, ella explotó el vientre criminal para crear un negocio de protección que mantiene exitosamente un barniz de legalidad .A cargo de ello, colocó subordinados leales que podrían trabajar por su propia iniciativa. Y a la primera señal de persecución, huye del país a Colombia. Donde una vez más encuentra una debilidad para explotar, la aprovecha y huye a la primera señal de problemas. El Congo, una vez más, lo mismo.

Elya: Entonces ... ¿a dónde crees que se fue ahora? - preguntó Elya.

Sr paquet: Ah, esa es la dificultad, ¿no? Suponiendo que se refugió temporalmente en las Seychelles, hay tantos lugares a los que podría haber ido desde allí. ¿Explotar las tensiones raciales en Sudáfrica? ¿La creciente inestabilidad en el Imperio turcomano? ¿Desestabilizar? ¿Suez? Creo que lo mejor que podemos hacer es escuchar la actividad inusual. No violenta ni caótica, sino inusual. Porque la señorita Degurechaff ve cosas que otros no ven, y el efecto es una señal propia.

Mary: ¿De Verdad? - fue la respuesta sardónica de Mary. - Porque en ese caso, tengo algo. - Agitó un trozo de papel. - Alguien compró una gran cantidad de acciones de Cold Steel con efectivo en una venta privada. Excepto que el comprador es anónimo y el vendedor es un desconocido de Waldstatten.

Elya: ¿Waldstatten? Con sus leyes bancarias, tendríamos más suerte persiguiendo a Degurechaff a pie, - comentó Elya.

Sr paquet: De hecho. Y sin embargo, si estos números son correctos, este comprador compró una cantidad muy grande con una prima, mientras hacía un esfuerzo considerable para minimizar la fanfarria, - dijo Paquet.

Elya miró a los demás. 

Elya: Entonces, ¿alguno de ustedes está pensando en lo que yo estoy pensando? Porque yo estoy pensando, alguien acaba de ser pagado.

23 de junio de 1930, a cierta distancia de Addis Abeba, Abisinia

Durante el último mes, mis compañeros magos se han reunido de todo el mundo. Y a lo largo del camino, parece que se han multiplicado. Koenig y Becker se habían quedado en África Central para vigilar las cosas. Sin embargo, cuando Royce, Teyanen, Walther y Vogel se unieron a mí en Abisinia, estaban acompañados por tres nativos africanos que habían probado con fuerza el potencial mago.

Dos eran hombres jóvenes que Koenig había encontrado en Rhodesia, pero el tercero era una niña de quince años que había sido enviada a Royce por el chamán Abara el mismo día que planeaba partir hacia Abisinia. A veces, la adivinación era simplemente una trampa.

Afortunadamente, Emilie se había presentado sola. Pero me sorprendió encontrar a Joe Barrow presente, y acompañado por una chica Qinese de diecinueve años llamada Mei Lin. Aparentemente, era el hermana de la prima de una media hermana ... Honestamente, no podía entender su relación exacta con Changying, el director ejecutivo de Household Magicks, pero al menos estaba avalada y era muy poco probable que fuera una policía encubierta.

Todos los recién llegados, y el propio Barrow, solo habían recibido un entrenamiento de unos pocos meses con orbes de vuelo, lo que significa que podían volar en línea recta. Bueno, no importa. Ibamos a estar entrenando a los reclutas del rey Tafari, ellos simplemente podrían unirse.

No había estado inactivo durante el último mes. Boris y Svetlana se habían disculpado y se habían marchado a lugares desconocidos. Y, a su vez, había resucitado mi personaje de Jennifer Ecks. Aunque no como miembro de Velvet Iron. Dudaba que Lena me agradeciera por arrastrarla a este lío. En cambio, ahora era el líder de una corporación de seguridad privada, a la que decidí llamar Silver Lance, Inc.

En este punto ya había practicado lo suficiente con pelucas y maquillaje que no necesitaba una ilusión para mantener el disfraz (al menos desde la distancia), por lo que pude participar en ejercicios de máxima potencia sin preocuparme por la audiencia. Además de sacudirnos el óxido, Visha y yo también habíamos iniciado nuestro plan de poner freno a los señores. Con la bendición del rey Tafari, más y más señores recalcitantes se vieron repentinamente transportados a la presencia de su rey en pijama. Solo unos pocos no captaron la indirecta, y el sabotaje y la esclavitud desaparecieron de la construcción del ferrocarril.

Mientras Visha y yo estábamos manejando eso, los demás habían estado preparando el campo de entrenamiento y entrenando a los nuevos reclutas en los conceptos básicos del empuje mágico. Y hoy, tomaré mi primera clase, con el lote más avanzado.

Puedo admitir que lo estaba esperando. Si bien había entrenado a novatos antes, en ese entonces había estado limitado por las reglas y regulaciones imperiales. Esta vez, sin embargo, podría darme un capricho.

Salí a los terrenos con precisión militar y me planté firmemente frente a los catorce cadetes de la clase avanzada (incluidos los cinco de mi propia gente). Los catorce me miraron estupefactos. Miré a cada uno de ellos por turno, y luego grité

Tanya/Jennifer: ¡¿Por qué diablos están todos boca abajo ?!

Barrow, habiendo tenido experiencia con mis métodos, se orientó de la manera correcta de inmediato. Los demás gritaron un poco más.

Unas horas más tarde, Visha y yo estábamos caminando de regreso y discutiendo la lección. 

Tanya/Jennifer: Es esencial que logremos que los novatos piensen en 3 dimensiones lo antes posible. Los magos imperiales forman tantos malos hábitos que luego necesitan ser desaprendidos en medio de la batalla, todo porque el Imperio insistió en que mantuvieran ambos pies apuntando al suelo.

Visha asintió con entusiasmo. 

Visha: ¡Eso explica por qué siempre parecías volar de manera tan diferente a todos los demás cuando nos conocimos! ¡También es tan obvio!

Me reí. 

Tanya/Jennifer: Las mejores ideas a menudo son obvias en retrospectiva.

Finalmente llegamos a nuestro nuevo alojamiento. Aunque estaba muy lejos de la lujosa morada que el rey Tafari había otorgado a su consejero favorito, me encontré prefiriendo las espartanas cabañas de troncos por varias razones. En primer lugar, privacidad. Sin sirvientes que me pisotearan, pude relajarme por completo por primera vez en semanas.

La segunda fue una bendición mixta, en el sentido de que Visha finalmente había vuelto a dormir en sus propias habitaciones. Si bien una parte de mí extrañó su abrazo, sentí que necesitábamos restablecer un poco la distancia profesional, y tener cabañas individuales para nuestra empresa significaba que ya no necesitábamos compartir espacio vital. Definitivamente Visha se había sentido un poco decepcionada por perder su almohada, pero tendría que aprender a vivir con ella. Con toda la responsabilidad y el peligro que suponía esta nueva empresa, no podía permitirme distracciones.

En este momento, mi compañía era lo único que aseguraba los cielos de Abisinia. Incluso con el curso de capacitación masivamente truncado que estaba organizando, pasarían al menos seis meses antes de que los lugareños pudieran comenzar a hacerse cargo de la carga. Mientras tanto, no tendría que lidiar con la gente que me persigue. También tendría que manejar los inevitables intentos de las potencias europeas de interferir en el desarrollo del país. Este sería el primer contrato aceptado por Silver Lance, y no podría permitirme arruinarlo si quisiera que la organización sirviera al menos como una cobertura semipermanente para mis actividades.

Había una última preocupación. Estaba empezando a preocuparme de que pasar tanto tiempo con Visha pudiera haberme infectado con su espíritu imprudente. Porque a pesar de los enormes riesgos a los que me enfrentaba más o menos por el capricho de una mujer, no pude evitar esperarlo.