Capitulo 32

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Habían pasado los días, y ya había llegado el día de la gran cita, aunque aún faltaba mucho para la gran noche. Perla comenzó a abrir poco a poco sus hermosos ojos hasta tener una visión algo borrosa que poco a poco se estaba aclarando.

Perla: - bosteza - Ya es de mañana. ¿Que día es... - pero no pudo terminar la frase ya que abrío los ojos de la impresión y se levantó de golpe de su cama de hojas - ¡Hoy es mi cita con Blu! - grito de la emoción.

Tanto fue la emoción que salió del nido, gritando a todo pulmón que hoy sería su cita con Blu.

Perla: ¡Hoy es mi cita con Blu! ¡Hoy es mi cita con mi Blu! - grito mas emocionada que nunca.

Perla regreso al nido mientras saltaba más de la emoción, pero tanto fue el grito que su tía salió con algo de sueño y algo molesta por tanto griterio.

Mimi: ¡Perla! ¿¡Por qué tanto griterío!? - preguntó con algo de sueño y molestia.

Perla: Tía, ¡Hoy es mi cita con Blu! - gritó emocionada.

Mimi: ¿¡Qué!? - grito sorprendida.

Perla: Así es tía. ¡Estoy tan emocionada! - gritó con una sonrisa y emoción.

Mimi: Solo calmate un poco querida. Literalmente estás por despertar a los niños de su siesta jeje - dijo mirando a las habitaciones donde los niños estaban durmiendo.

Perla: Perdón - dijo mientras se tapa el pico con sus alas.

Mimi: Tranquila, yo también me emocionaria también por tener un cita con el ave de mis sueños jeje - dijo entre risas.

Perla: Ay tía, no me avergüenzes así jeje - dijo tapándose las alas con sonrojo.

Mimi: Bueno querida, aun tenemos todo el día para poder hacer que te veas hermosa para Blu - dijo en tono coqueto.

Perla: El ya piensa que soy hermosa, aunque tienes razón, debo verme hermosa para mí ave especial - dijo romántica.

Mimi: Exacto, ahora hay que tener todo listo, por suerte conozco muchas cosas para hacer que te veas la más hermosa en tu cita, recuerda que un macho como Blu cae bien redondo en tus encantos - dijo con una sonrisa.

Perla: Yo tengo fe en que si tía - dijo con una sonrisa determinada.

En eso aparece Eduardo un tanto dormilón, ya que hacían mucho ruido.

Eduardo: ¿Por qué hacen tanto ruido? - preguntó con una cara de cansancio.

Perla: ¡Papi, hoy día es mi cita con Blu! - grito de la emoción.

Eduardo: Que bueno hi...espera. ¿En serio? - preguntó con mucha sorpresa.

Mimi: Así es hermano, Perla tendrá su cita con su ave, así que tenemos que tenerla lista para el atardecer - dijo poniéndose al lado de Perla.

Eduardo: ¡Entonces no hay tiempo que perder! - grito para luego irse volando a lavarse la cara.

Mimi: Bueno querida, antes de arreglarte, hay que despertar a Mike y Lili - dijo dándole la idea a Perla.

Perla: Esta bien tía, todavía tenemos muchos tiempo para la gran noche - dijo con una voz romántica mientras en su mente le llegaba la imagen de Blu, poniendo sus ojos de corazón.

[Con Blu]

Blu se encontraba durmiendo hasta que los rayos solares se hicieron presentes en la habitación. Poco a poco comenzó a abrir los ojos y vio que ya era de día, por lo que se estiró y dio un largo bostezo.

Blu: ¿Qué hora es? - preguntó mirando el pequeño reloj que tenía en su habitación.

Vio que eran las 8 de la mañana, por lo que decidió levantarse para así comenzar el día.

Blu: Veamos el calendario - dijo dirigiéndose a ver la fecha que presentaba el calendario. Y en efecto, la fecha era viernes.

Blu: Un momento, ¡Hoy es el gran día! - grito de la sorpresa y de la emoción.

Blu comenzó a emocionarse de alegría y comenzó a dar vueltas, hasta que por un descuido, no se dio cuenta, y chocó con la puerta de su habitación.

Blu: A pesar de haber cambiado, sigo siendo igual de torpe jaja - dijo entre risas para así abrir la puerta.

Una vez salió de su habitación, fue a ver a sus hijos para poder despertarlos, abrió la puerta de su habitación y los acarició la cabeza.

Blu: Despierten mis pequeños ¡Hora de levantarse! - dijo con una sonrisa.

Los niños comenzaron a abrir poco a poco sus hermosos ojos, hasta ver a su padre ahí al medio.

Bia: Hola papi - dijo levantándose para darle un abrazo.

Blu: Hola mi niña - dijo para ver si los demás se levantaban, pero al parecer, ninguno se levantó, ya que todos estaban todavía dormidos.

Bia: Creo que no funcionó todo esto, ¿Los despierto a la manera tradicional? - preguntó

Blu: No mi pequeña, en cualquier momento se levantan, vayamos a mi habitación, tengo que decirte algo.

Bia: Esta bien papá - dijo acompañando a su padre a su habitación.

Blu: Bueno, ahí te va. Hoy tengo mi cita con tu madre Perla - dijo con una sonrisa.

Esas palabras dejaron más que sorprendida a Bia, quien grito de la emoción, pero muy bajo, para que sus hermanos no se despertarán.

Bia: ¡Eso es genial papi! ¿Y a donde la piensas llevar? - preguntó de manera curiosa.

Blu: Pienso llevarla a los lugares por los cuales pasamos ella y yo cuando nos conocimos, y cuando tuvimos momentos románticos, y tal vez la lleve al lugar especial que de seguro le encantará. - dijo contando su plan.

Bia: Eso suena un muy buen plan - dijo dándole el visto bueno al plan de su padre.

Blu: Pero antes, quisiera que todo esté bien hecho, y arreglarme un poco para la cita, no quiero presentarme así como siempre jeje - dijo entre risas.

Bia: Pero papi, mami te ama así como eres, además, me dijiste que la otra vez, te vestiste bien para la cita y ella te arreglo como estabas jeje - dijo recordando lo que su padre le contó.

Blu: Es cierto, pero al menos quiero verme un poco bien para ella - dijo con una sonrisa.

Bia: Esta bien, te ayudaré en eso papi - dijo con una sonrisa.

Blu: Sabía que podía contar contigo mi pequeña - dijo abrazando a su pequeña.

Bia: De nada padre, pero ya no soy pequeña jeje - dijo algo avergonzada.

Blu: Aun así serás mi pequeña siempre - dijo abrazando más a Bia.

Bia: Esta bien papi, siempre seré tu pequeña jeje - dijo abrazando a su padre.

Blu: Bueno, ¿Quieres acompañarme a traerle el desayuno a tus hermanos? - preguntó con una sonrisa en su rostro.

Bia: Claro que sí, no tengo otra cosa que hacer - dijo devolviendole la sonrisa.

Blu y Bia emprendieron el vuelo por el desayuno, y no le tomaron más de 10 minutos en recolectar todo y regresar al nido.

[Con Perla]

Perla se encontraba en una laguna lavandose y tratando de verse hermosa para Blu. Su tía la veía con una sonrisa aunque le pareció algo exagerado.

Mimi: Querida, si sabes que tu cita es hasta la noche ¿no? solo han pasado unos cuantos minutos - dijo entre risas.

Perla: Lo siento tía, pero es que estoy impaciente, quiero que todo salga bien, además, quiero que pase unos días mas para que podamos volver a ser pareja, solo unos pocos días, eso es todo - dijo con una sonrisa.

Mimi: Veo que ya tienes todo planeado, pero me alegra que tomes esto poco a poco. Solo no actúes tan rápido, y aguanta tus ganas de hacerlo con el - dijo entre risas.

Perla: ¡Tía! - grito con un sonrojo en sus mejillas.

Mimi: Lo siento. No volveré a decir eso jeje, pero se nota que no te aguantas las ganas de hacerlo con el - dijo con una sonrisa pícara.

Perla: ¡Tía, ya! - grito con más molestia.

Mimi: Esta bien, ya me cayó - dijo poniéndose las alas en su pico.

Perla: Bueno, seguiré lavandome más, para verme bien para mí cita - dijo volviéndose a mojar para comenzar a lavarse más por sus alas y su cuerpo.

Mimi: Cuando era pequeña, dijo que no se enamoria tan fácilmente de nadie, pero ahora, esta tan enamorada de un ave de buen corazón, y quiere verse bien para el, mi niña si que tiene amor del mas puro hacia Blu. Solo espero que esta vez nada los separe - dijo en sus pensamientos.

Perla: ¿Tía? ¿Te encuentras bien? - preguntó algo confundida a su tía al verla que estaba mirándola muy detenidamente.

Mimi: Oh sí, lo siento jeje, es que estaba pensando en algunas cosas. Bueno, iré a ver si los niños ya terminaron de desayunar, luego vendré con ellos - dijo con una sonrisa.

Perla: Esta bien tía, no te preocupes por eso - dijo con una sonrisa.

Mimi le sonrió y salió volando al nido donde se encontraban los niños. Perla seguía lavandose hasta que se pasó sus alas por su cuerpo y recordó esa vez donde Blu la lavaba cuando su ala estaba rota, claro, poniendo nervioso al spix y dándole un beso para tranquilizarlo y que siguiera lavandola, eso hizo que Perla se pusiera muy contenta.

Perla: Ay Blu, como quisiera que ya estuviéramos juntos, pero debo ser paciente, no quiero arruinar nuestra cita así, debo esperar - dijo suspirando para continuar lavandose su cuerpo.

Con Blu

Luego del desayuno, Blu les dijo a los niños que saldria, asi que tuvo que dejar a cargo a Bia para que ella se hiciera cargo del orden, despues de todo ya estaban grandes, por lo que se fue en dirección a donde estaban sus amigos Rafael, Nico y Pedro.

Nico: Bueno, veo que el club de samba se encuentra de nuevo bien, pero esta vez mas renovado que nunca - dijo con una sonrisa.

Pedro: Asi es, solo esperemos a que no le pase nada de nuevo - dijo algo cansado de renovar el club de samba.

Rafael: Estan siendo muy duros con ustedes mismos, ademas ya necesitaban una renovación urgente. Mirenle el lado positivo, ahora ya tienen un nuevo club pero esta vez mejor y muchas aves iran alli - dijo con una sonrisa.

Nico: Debemos admitir que eso si que es cierto - dijo asintiendo con la cabeza.

Luis: ¡Oigan chicos! - gritó el bulldog.

Pedro: ¿Qué sucede Luis? - preguntó el gordito.

Luis: Nuestro amigo Blu esta aquí - dijo el perro dejando pasar a Blu.

Blu: Gracias Luis - dijo con una sonrisa.

Luis: No hay de que hermano - dijo dándole un golpe en la espalda.

El golpe hizo que Blu resbalara con la saliva de Luis y se fuera directo a unos baldes, donde se golpe cayendo al suelo.

Luis: ¡Lo siento hermano! - grito apenado.

Blu: No importa Luis, ya me esperaba eso de ti - dijo sacudiendose la saliva que tenía en las patas.

Nico: Blu, ¿Como has estado hermano? - preguntó con una sonrisa.

Pedro: Si, no nos visitaste en estos días. ¿Acaso pasó algo en especial? - preguntó curioso.

Blu: Todavía no pasa nada aún, les tengo buenas noticias, aunque no se si sean buenas para ustedes - dijo poniéndose el ala en el pico.

Rafael: Entonces dinos hermano, ¿Qué clase de buena noticia es? - preguntó con una sonrisa.

Blu: Bueno, esta bien...ahi va...¡Tengo una cita con Perla! ¡Yeah! - dijo con una sonrisa en su rostro.

Nico: ¿¡En serio!? - gritó muy sorprendido.

Pedro: ¡Eso es genial hermano! ¿Y que piensan hacer en su cita? - preguntó curioso.

Blu: Ya tengo todo listo, y necesito su ayuda para que el club de samba esté lleno para la noche, ya que la quiero llevar allí después de unos cuantos lugares que visitaremos. Quiero que sea como la primera vez que nos conocimos - dijo con una sonrisa.

Pedro: Recordar sus momentos regresando a los lugares que más pasaron juntos. ¡Me gusta ese plan! Lo voy a anotar para usarlo algún día. - dijo yendo por una hoja de papel y un lápiz.

Nico: Ignoralo hermano, siempre es así, además, sigue fracasando en todo esto del amor jaja - dijo entre risas.

Rafael: Que bueno que al fin los dos tengan una cita, y por eso viniste aquí, para pedirnos ayuda y consejos ¿no? - preguntó con una sonrisa.

Blu: Así es Rafael, ¿Creen que me puedan ayudar con eso? - preguntó el spix.

Rafael: Por supuesto hermano, ten fe en nosotros, ya verás que todo saldrá bien - dijo con una sonrisa.

Blu: Gracias chicos, sabía que podía contar con ustedes - dijo con una sonrisa.

Nico: Siempre estaremos aquí para ti Blu, somos tus amigos después de todo - dijo sacándose el sombrero de su cabeza.

Pedro: ¡Gracias Blu por el consejo y la idea! - gritó a lo lejos.

Blu: Mmm...De nada - dijo algo confundió.

Ese día fue muy complicado, ya que estaban dando consejos, arreglando cosas, planificando, etc. Hasta que las horas pasaron y pasaron, y llegó la gran noche para la cita. Blu se encontraba en su nido vistiendose un poco para verse muy presentable ante Perla, aunque la guacamaya no era la excepción, ya que ella se estaba poniendo hermosa para Blu.

Blu: Listo. Que bueno que el peinado me salió bien - dijo viéndose al espejo, pero no duró mucho ya que el peinado volvió a su forma original - Rayos - dijo mirando al suelo.

Bia: ¿Que pasa papá? - preguntó su hija algo confundida al ver a su padre de esa manera.

Blu: Es que estaba peinandome, y el peinado no se queda como quiero que esté, y no se que hacer - dijo agachando la cabeza al ver que su peinado no era el adecuado.

Bia: Papi, no te preocupes por eso, como tu siempre dices, solo debes de ser tu mismo. Además, mamá te ama tal y como eres. No necesitas cambiar para verte mejor de lo que ya estás - dijo con una sonrisa.

Blu: Gracias hija, era todo lo que necesitaba escuchar - dijo con una sonrisa en su rostro.

Bia: De nada papá, ahora solo debes estar listo, en cualquier momento, mamá llega, y de seguro estará nerviosa al igual que tu jeje - dijo entre risas.

Blu: Con qué estas graciosa ¿eh? - dijo también tratando de aguantar la risa.

Bia: Jejeje, puede ser... - dijo con una sonrisa.

Blu: Bueno, veré si ya tengo todo listo, y espero que todo salga bien como lo planee.

Bia: Ya verás que si papá - dijo sonriendo.

[Con Perla]

Perla se estaba haciendo algunos retoques para que quedara hermosa como a ella le encantaba, y ya estaba lista para poder irse a ver a su macho.

Mimi: Bien querida, ya estas más que lista, ahora deberías ir de una vez - dijo con una sonrisa.

Perla: Eso haré tía, deseame mucha suerte - dijo sonriendo.

Mimi: Me recuerdas mucho a tu madre, eres igual a ella, ahora ve por Blu, y asegúrate esta vez de no hacer nada inapropiado - dijo con una sonrisa.

Perla: Ya verás que así será tía, esta vez no haré ninguna estupidez, no está vez - dijo para así salir volando en busca de Blu.

Perla siguió su camino volando, hasta llegar al nido de Blu, ya que vivían cerca de su casa, así que no le tomó tanto tiempo en llegar. Al mirar, ahí estaba Blu hablando con Bia, así que Perla decidió aterrizar para intentar sorprender a Blu.

Blu: Vale, te voy a confiar a tus hermanos, además, no creo que tardemos mucho, pero si pasa, ya sabes lo que tienes que hacer - dijo sonriendo.

Bia: Si, nos vamos a dormir, y no dejamos que Tiago se coma todas las minisalchichas - dijo asintiendo la cabeza.

Blu: ¡Esa es mi pequeña! - dijo acariciando la cabeza de Bia.

Perla: Hola Blu - dijo comenzando a descender hasta estar al lado de Blu.

Blu: Oh, Hola Pe...

Pero el spix no pudo terminar ya que vio a Perla como si fuera una rosa blanca en persona y la luna misma. Sus plumas estaban bien cuidadas y brillaban, al igual que sus ojos y tenía un olor a fresas.

Blu: Perla, te ves...hermosa - dijo admirando a Perla de patas a cabeza.

Perla: Gracias Blu, es muy lindo de tu parte - dijo con un sonrojo en sus ojos.

Perla se quedó algo extrañada, ya que Blu tenía un minismokin en su cuerpo, dejándola confundida, pues no sabía porque llevaba eso.

Perla: Blu. ¿Qué es eso? - preguntó confundida señalando el smokin.

Blu: Esto es un smokin jeje, Linda me lo dio para verme presentable en su graduación, así que lo conserve para una ocasión especial, y hoy es el momento - dijo con una sonrisa.

Perla: Bueno, no voy a decirte nada por eso, aunque ese smokin se te ve muy bien - dijo con una sonrisa.

Blu: Gracias, y tranquila, me lo quitaré en algún punto de nuestra cita, pero quiero verme al menos así de bien para la cena jeje - dijo con una sonrisa.

Perla: Bueno, entonces ¿Nos vamos? - preguntó con una mirada coqueta.

Blu: Claro Perla, pero antes de irnos. Bia, ya sabes lo que te dije ¿no? - preguntó a su hija.

Bia: Claro papi, entendido y anotado - dijo asintiendo la cabeza.

Blu: Bien, ahora si vámonos Perla - dijo tomando el ala de Perla, y así ambos se fueron volando hacia su cita.

Bia: Suerte papá - dijo con una sonrisa.

Tiago: ¡Todas las minisalchichas serán mías! - gritó eufóricamente para salir con rapidez a la cocina.

Bia: Tenía que ser mi hermano - dijo dándose una palmada en la cara - ¡Tiago, detente ahora mismo! - gritó para seguir a Tiago y evitar que se coma las salchichas.

Carla: No te preocupes hermana, ya lo tengo rodeado a Tiago - dijo con una sonrisa mientras lo sostenía.

Tiago: ¡Eso no es justo! - grito enojado.

Bia: Es por tu bien, ya fueron muchas minisalchichas. - dijo poniendo sus alas en sus caderas.

Carla: Oye, ahora que lo pienso ¿Sabes donde esta María? No la he visto por ningún lado. - dijo con algo de preocupación.

Bia: Es cierto, ¿En donde podrá estar? - preguntó también.

Blu y Perla se encontraban volando, pero no se percataban de que atrás suyo se encontraba María quienes lo venia siguiendo a escondidas, cosa que ninguno se estaba percatando, incluso se escondía para no llamar tanto la atención.

Blu sentía como si alguien los estuviera siguiendo, así que volteo su cabeza, pero no había encontrado a nadie, cosa que lo hizo dudar un poco, regresando su cabeza al frente.

Perla: ¿Qué pasa Blu? - preguntó curiosa la guacamaya.

Blu: Nada importante, pensé que había visto a alguien. Eso es todo - dijo mirando a Perla.

Perla: Me sorprende que puedas volar con ese smokin puesto - dijo señalando el smokin de Blu.

Blu: Así, es que le hice unas modificaciones, además de que estuve practicando mi vuelo para poder usar el smokin, y si funciona jeje - dijo con una sonrisa.

Perla: Entonces ¿Lo tenias todo planificado? - preguntó sorprendida.

Blu: Claro que sí, tú ya me conoces como soy Perla - dijo con una sonrisa.

Perla: Lo sé, y por eso no quiero que cambies nunca - dijo con un sonrojo.

Blu: Gracias por el halago jeje - dijo con un sonrojo.

Blu y Perla siguieron su camino, mientras en los árboles, se encontraba María observando a lo lejos a su padre como se iba con Perla.

María: Los observare, y trataré de impedir de que se den un beso los dos, no se besara para nada, no lo voy a permitir - dijo con una mirada seria para luego seguir el vuelo y tratar de mantener la distancia para que no descubrieran que ella se encontraba allí escondida.

Perla: ¿A dónde iremos? - preguntó con mucha curiosidad.

Blu: A un lugar que de seguro te traerá muchos recuerdos - dijo con una sonrisa.

Perla: Oh, así que es un lugar que yo conozco - dijo sorprendida.

Blu: Así es - dijo aumentando la velocidad.

Perla: ¡Esperame! - grito volando y siguiéndole el paso a Blu para no perderse.

Blu comenzó a volar muy rápidamente hasta llegar al lugar que lo reconoció al instante, en donde aterrizó y Perla hizo lo mismo.

Perla: ¿Acaso eso es? - preguntó sorprendida.

Blu: Así es, es La Atayala. En donde tuvimos nuestra primera noche cuando nos conocimos. - dijo con una sonrisa.

Perla: Es hermoso, no recordaba que lo habían remodelado este sitio - dijo asombrada.

Blu: Vamos...espera un momento - dijo parando repentinamente.

Perla: ¿Qué pasa? ¿Por qué te detienes? - preguntó confundida.

Blu: Me acorde que debo hacer esto - dijo volando atrás de Perla y tomándola con sus garras y con cuidado su cuerpo, volando hasta la Atayala.

Perla: Espera...¡Blu! - dijo sorprendida.

Blu: ¿Recuerdas que yo te lleve hasta arriba? - dijo con una sonrisa burlona dejando a Perla confundida - ¿Y quien está arrastrando el trasero de quien? - preguntó con una sonrisa.

Perla se sorprendió, pues recordó que Blu le dijo eso llevándola hasta arriba de la Atayala, recuerdos se presentaron, y una sonrisa se formó en su rostro, siguiéndole el juego.

Perla: Jaja, muy gracioso - dijo rodando los ojos con una sonrisa.

Blu: Me traer recuerdos esto - dijo poniéndola en el palo donde estaba la atayala.

Perla: Si, ahí te creíste mejor que yo en eso no mas jeje - dijo entre risas.

Blu: Si, además está vista ha sido una de las mejores de todas, a parte de la de la estatua de Cristo, aquí puedo ver todo desde arriba. Ahora que estoy aquí, me trae una buena vista - dijo mirando el paisaje.

Perla: Si, además recuerdo que fue la primera vez que fue amable y sincera contigo esa noche, después de toda esa tensión - dijo mirando el cielo y el paisaje.

Blu: Lo sé, pero eso fue para mi un consejo de vida, y vaya que si funciono para mi - dijo con una sonrisa.

Perla: Pero a pesar de todo, me pareciste muy listo y nerd, pero aún así, me sacabas de situaciones que para mí eran difíciles - dijo tomando su ala con una sonrisa.

Blu: Si. Aún me acuerdo de muchas cosas jeje - dijo con un sonrojo.

Perla: Entonces ¿Vinimos aquí para recordar momentos juntos de los dos? - preguntó curiosa.

Blu: Bueno, algo así, pero recuerda que es nuestra cita, y puede ser que ya tenga todo listo para ti - dijo con una sonrisa.

Perla: Eres tan lindo, pero quiero quedarme un rato más contemplando el paisaje - dijo mirando los árboles y la ciudad.

Blu: A mi también me gustaría ver el paisaje - dijo con una sonrisa.

Perla se acercó a Blu poco a poco hasta ponerse en su hombro y mirar el paisaje, cosa que Blu notó y se sorprendió un poco.

Perla: ¿No te molesta? - preguntó mirándolo a los ojos.

Blu: Claro que no - dijo con una sonrisa.

Blu con una ala, abrazo a Perla y juntos miraron el hermoso paisaje que había al frente de ellos. En un árbol se encontraba María quien veía a su padre abrazando a Perla, comenzando a molestarse por ello.

María: ¿Esa señora se quiere ganar a mi padre así? Pues no lo va a conseguir, haré todo lo posible para poder interrumpir si es que se besan, evitare eso a toda costa, pero debo esperar, o tal vez debería arruinar la cita. No, eso no funcionaria, ya que me descubriría mi padre - dijo a sí misma.

En eso Blu voltea y María se esconde rápido, por suerte, el spix no logró verla, por lo que sólo volteo a ver el paisaje de nuevo.

Perla: ¿Qué pasó? - preguntó mirando a Blu.

Blu: No es nada...solo imaginaciones mías - dijo mirando el paisaje.

María: Uff...eso estuvo cerca, por poco y me descubre - dijo entre susurros mientras limpiaba el sudor de su frente.

Pasaron unos 30 min contemplando abrazados el hermoso paisaje, hasta que luego, Blu decidió cambiar de lugar para poder continuar con su cita.

Blu: Muy bien Perla, ahora sígueme, iremos a un lugar que de seguro reconocerás - dijo muy amablemente.

Perla: Te sigo mi Bl...digo, ahí te sigo Blu jeje - dijo con nervios.

Blu: Esta bien, entonces vamos - dijo tomando el vuelo.

Perla también comenzó a volar, hasta alcanzar a Blu y así volar los dos juntos. Hasta que María vio cómo su padre y Perla se alejaban, así que espero unos minutos y así decidió seguirlos para no perderlos, y ver que no pasara a mayores si se querían besar.

Perla veía mucho de la ciudad, y eso que antes ella quería estar en el bosque, aunque siendo sincera, ella también echaba de menos la ciudad, aunque también quería estar con Blu, y no importaba si debía estar en la ciudad, esta vez sería mejor que antes. Blu seguía volando hasta que pudo localizar el mercado donde se encontraba el club de samba de Nico y Pedro.

Blu: ¡Ya llegamos! - dijo con una sonrisa.

Perla: Que rápido - dijo sorprendida.

Blu comenzó a descender hasta llegar al suelo del mercado junto a Perla, quien vio algunos cambios en el mercado.

Perla: Veo que las cosas cambiaron un poco por aquí - dijo mirando el lugar.

Blu: Si, en estos años se concentraron en mejorar mucho estos sitios, así que por eso es que ves cosas así de bonitas y cambios - dijo con una sonrisa.

Perla: Ya veo, ¿Entonces me trajiste al mercado para comer algo? - preguntó curiosa.

Blu: Bueno, realmente no tanto, venimos aquí para poder entrar a ese lugar - dijo señalando el lugar.

Perla: Eso se parece a una cueva - dijo mirando extrañada el lugar.

Blu: Venga, no te preocupes, además, este lugar te encantará, y espero lo recuerdes jeje - dijo entre risas.

Perla: Espera, es un lugar que yo conosco. No me dejes con la duda Blu, espera - dijo pero seguía siendo llevada por Blu del ala.

En eso aterriza María en el mismo lugar que su padre y se esconde rápido, para ver como Blu se llevaba a Perla hacia aquella cueva negra.

María: ¿Ese lugar nunca lo había visto? - dijo dudosa y con algo de curiosidad.

Cuando vio que su padre y Perla entraron del todo a la misteriosa cueva, ella comenzó a seguirlos, esta vez siendo más sigilosa, ya que podía ser que su padre lo viera.

Perla: Blu, no veo nada - dijo al no ver el lugar y estar a oscuras.

Blu: Tranquila, aun le falta poner pequeñas luces, pero así es. Además, te tengo del ala, así que es imposible que te pierdas - dijo con una sonrisa aunque no se noto del todo.

Perla: Entonces guíame, mi pequeño nerd jeje - dijo entre risas.

Blu: Con qué bromas ¿eh? - dijo entre risas pero luego vio una luz al final de la cueva - Mira ya casi llegamos al final - dijo señalando.

Perla miró con detenimiento, hasta ver que en efecto, había una luz al final de aquella cueva, una vez llegaron al final, Perla se quedó boquiabierta, pues se trataba del club de samba, aunque estaba más diferente, esta vez todo se veía un poco mejor, como una verdadera pista de baile y lugar de diversión, sin cajas de mercado, ni latas, todo había cambiado.

Perla: ¡El club de samba! Pero...

Blu: Nico y Pedro querían hacerle unas modificaciones a su lugar, así que les heche una ala para poder hacer este lugar, y la verdad que se ve genial - dijo con una sonrisa.

Perla: Lo sé, esto se ve genial, no puedo creer que ellos hayan hecho esto - dijo más que asombrada.

Nico: ¡Vaya vaya, pero miren a quienes tenemos aquí chicos! - dijo eufórico el ave.

Pedro: Se trata de Perla y de Blu - dijo con una felicidad tremenda de fiesta.

Todos voltearon a ver a la pareja, dejándolos algo incómodos, pues no esperaban que todas las miradas estuvieran en los dos, pero eso no fue todo. Un grupo de guacamayas se acercó y abrazaron a Blu.

...: Vaya, pero si es nuestro salvador del avión - dijo tocando su mejilla.

...: Sabes, deberías de bailar conmigo, venga, la pasaremos fenomenal - dijo en un tono coqueto.

...: O si no quieres, podemos ir a otro lugar para poder hacer lo que tu quieras - dijo otra con una sonrisa seductora.

Esto causó que Perla ardiera de celos, y en un acto de impulso, mando a volar a las guacamayas de Blu.

Perla: Ni se les ocurra hacer eso de nuevo resbalosas - dijo con enojo.

Pedro: Bueno, dejemos eso, venga, vamos a divertirnos todos, quiero que todos aplaudan y pongan las manos arriba, vamos todos - dijo comenzando a saltar.

Nico: Esta canción es para Blu y Perla - dijo para comenzar a tocar algunos pequeños tambores.

El dúo comenzó a cantar la canción de I wanna party, dejando sorprendida a Perla, y una ola de recuerdos se vino de golpe a Perla, recordando cuando ella y Blu bailaron por primera vez.

Perla: Esta canción me trae muchos recuerdos - dijo con una sonrisa.

Blu: A mi también me trae muchos recuerdos - dijo comenzando a sentir que su cola comenzaba a moverse de un lado a otro, y volvió a recordar cuando bailaba de pequeño y cuando bailo enfrente de Perla.

Blu: Bueno, aqui vamos - dijo comenzando a bailar a su ritmo la música.

Perla se quedó más que asombrada la ver como Blu bailaba la pista de música, dejándola sin palabras, comenzando a enamorarse más de él, pues cambió mucho en todos estos años.

Perla: ¡Wow, bailas muy bien Blu! - dijo admirada por los pasos de baile de Blu.

Blu: He recibido muchas clases por Rafael y los demás, así que ya me se el ritmo de esta música - dijo siguiendo bailando.

Perla lo miró con una sonrisa, y comenzó a bailar también, pero esta vez de una manera muy seductora mientras miraba a Blu, el spix notó eso y entonces se impresionó como la primera vez que vio a Perla bailar de esa manera.

Blu: Wow, si que baila muy bien - dijo sonriendo mientras se acercaba a ella.

Perla cerró los ojos mientras se dejaba llevar por la música que estaba escuchando, hasta que abrió los ojos y vio a Blu que le estaba mostrando el ala para poder bailar.

Blu: ¿Me concede esta pieza musical? - preguntó con una sonrisa.

Perla: Claro que sí - dijo sonriendo mientras tomaba el ala de Blu y se sonrojada.

Blu la llevó a la pista de baile, y ambos comenzaron a bailar al ritmo de la música, comenzando sus pasos. Ambos cerraron los ojos y recordaron su momento cuando bailaron los dos juntos por primera vez, y eso que fue hace mucho tiempo. Blu tomó a Perla de las alas y ambos comenzaron a seguir el ritmo de la música. Blu le sonrió y Perla lo miraba con unos ojos de enamorada y coquetos.

En un lado, en una mesa que habían hecho Nico y Pedro para el club. María se escondía con una hoja para no ser vista, mientras observaba como su padre bailaba muy bien con Perla.

María: Ellos dos sí que se están divirtiendo mucho - dijo observando todo.

Blu y Perla siguieron bailando, hasta que escucharon que ya estaban llegando al final de la canción, por lo que Perla decidió hacer lo mismo que hizo hace tiempo.

Perla: Blu...lanzame al aire - dijo con una sonrisa.

Blu: Ok - dijo sonriendo igualmente.

Ambos se dieron varias vueltas, hasta que Blu lanzó a Perla al aire y ella volvió a cantar la misma parte que antes.

Perla comenzó a cantar y Blu se quedó sorprendido de nuevo, como si hubiera sido la primera vez que la escuchó cantar y entonces vio como la luz rosa se ponía en su cuerpo, dejándola ver su hermosa figura. Perla descendió para estar frente a Blu y terminar de cantar. Blu se quedó sorprendido y miro a Perla con una sonrisa. Perla también lo miró con una sonrisa. Poco a poco comenzaban a acercarse el uno al otro para poder besarse. María vio esto y se le vino lo primero a la mente.

María piso la cola de uno de los invitados con mucha fuerza haciendo que este gritara tan fuerte que todos se asustaron, incluyendo Blu y Perla. Nico y Pedro pararon la música para ver a la guacamaya que grito estar avergonzada por el grito que había pegado.

...: Disculpen, es que me pisaron la cola muy fuerte. Lamento interrumpirlos - dijo avergonzada.

Nico comenzó a sospechar, Pedro de igual manera, pero lo dejaron pasar por esta vez, hasta que regresaron a sus asuntos. Blu y Perla también se miraron, Perla estaba molesta porque interrumpieron su beso con Blu.

Blu: Deberíamos de irnos al siguiente lugar - dijo con una sonrisa.

Perla: Esta bien, te sigo Blu - dijo sonriendo de igual modo.

Así ambos salieron del club de samba, despidiéndose de sus amigos y así salir del lugar, María vio esto y los siguió de nuevo tomando el mismo papel y no mostrar su rostro. Nico vio esto y se quedó dudando y sospechando de aquella ave que salió después de Blu y Perla.

Perla: Interrumpieron un momento tan importante para mí que iba a revivir con Blu, pero parece que esa guacamaya no sabe guardar el dolor de que le pisen la cola. Que mal - dijo en sus pensamientos.

Blu: Bueno, al menos nos la pasamos bien allí, bailando unos minutos jeje - dijo entre risas.

Perla: Lo sé Blu, pero aún así me hubiera gustado seguir bailando un poco más contigo. - dijo con una sonrisa.

Blu: Esta bien, pero será para otra ocasión - dijo con una sonrisa.

Perla: ¿Ahora a dónde vamos? - preguntó nuevamente curiosa.

Blu: Pues, adivina. Debes de recordar en tu mente, ¿Que pasó luego cuando terminamos de bailar por primera vez? - preguntó el spix.

Perla se quedó pensativa, hasta que tuvo la respuesta en su pico.

Perla: Bueno, cuando bailamos y casi nos besamos hace años, unos monos nos atacaron y escapamos al tranvia de...

Blu: Bingo - dijo aterrizando el en tranvia.

Perla: ¿Así que este era el lugar que me ibas a traer después del club de samba? - preguntó con una sonrisa.

Blu: Así es, ahora que te parece si nos sentamos y disfrutamos de esto - dijo con una sonrisa de amabilidad, haciendo sonrojar a Perla.

Perla: Por supuesto - dijo con el sonrojo en sus mejillas y se sentaron tranquilamente para ver las hojas de los árboles y el hermoso viaje.

Perla miró tranquilamente el viaje, mientras que Blu miraba hacia abajo a un costado, y miro a su amigo Rafael que estaba ahí en el tranvia. Blu le hizo señas de que comenzarán con la fase del plan, que era el modo romántico. Rafael le guiño el ojo y y salió volando para poder cumplir con ello, cuando estuvo volando, comenzó a tirar las hojas de los árboles, que caigan de manera romántica.

Perla: Wow, esto me recuerda mucho a ese momento romántico e incómodo jeje - dijo mirando a Blu.

Blu: Si, lo sé. En esa vez me ahogue con una hoja, pero esta vez, no pasara 2 veces de nuevo - dijo con una sonrisa confiada.

Perla: Si...eso esperemos... - dijo entre risas.

Blu: Bueno, que tal si comemos algo - dijo para tomar el vuelo y de unos árboles desapareció entre las hojas. Esto hizo que Perla se preocupara algo, pero luego apareció el spix con 2 nueces de Brasil en sus garras - Aquí tiene my lady - dijo en inglés.

Perla: Gracias - dijo con una sonrisa tomando las nueces de Brasil y comenzando a comer tranquilamente - Oye Blu, estas seguro de poder comer es...

Pero en eso vio como Blu estaba comiendo tranquilo la nuez de Brasil, dejando sorprendida a Perla, por ver eso, esto hizo que una sonrisa se plasmara en su rostro, Blu miró algo confundido a Perla.

Blu: ¿Pasa algo? - preguntó confundido.

Perla: No nada Blu, es que te ves lindo, aun con ese smokin jeje - dijo entre risas.

Blu: Ah si, al siguiente lugar que vamos me quitaré el smokin, ya no lo necesito, o mejor, me lo quitaré ahora - dijo quitándose el smokin poco a poco.

Perla se quedó paralizada al ver como Blu se quitaba el smokin, hasta que al quitarse el smokin, dejó ver su atractivo cuerpo que había desarrollado por los ejercicios, haciendo sonrojar a Perla más de lo que ya estaba.

Blu: Mucho mejor, ya casi termina el paseo, ahora que te parece si disfrutamos este último momento viendo esto - dijo mirando como las hojas caían.

Perla: Claro - dijo mirando a él paisaje y las hojas que caían.

Rafael, que estaba escondido en una de las vías del tren, estaba con una sonrisa en su rostro, orgulloso de su amigo, hasta que se distrajo ya que escuchó un ruido entre las hojas de los árboles, se volteo a mirar para ver de que se trataba pero no vio nada, aún así le pareció sospechoso por lo que sólo lo ignoro. Blu miró a Rafael y le dio la seña para que se retirara a su casa, por lo que el tucan le sonrió y le guiño el ojo y así se fue de regreso a su hogar, ya cumplió con su plan.

Blu: Bueno Perla, ¿Nos vamos al último lugar? - dijo con amabilidad.

Perla: Estoy más que lista Blu - dijo parándose y sonriendo.

Blu: Bien, vamos - dijo volando al igual que Perla para ir al último lugar de su cita con Blu. María estaba escondida en los árboles, pasando de un lado a otro para seguirlos, hasta que los vio abandonar el tranvia en dirección desconocida, así que espero unos segundos, y así comenzó a seguirlos para ver a donde iban esta vez.

Blu y Perla continuaron volando tranquilamente por la zona, hasta que llegaron a la estatua de de Cristo, donde Perla se preguntaba porque se encontraban precisamente en ese lugar.

Perla: Blu, ¿Por qué vinimos aquí? - preguntó confundida.

Pero se quedó callada al ver que en la estatua, más precisamente el el brazo de Cristo, había una pequeña mesa con dos sillas y algo de comida, dejando sorprendida a Perla.

Perla: ¿Tu preparaste todo esto para mí? ¿Cómo fue que lograste hacer esto en el brazo? - preguntó con asombro.

Blu: Creeme, lo que sea por una cita, yo podría hacerlo por ti - dijo con una sonrisa.

Perla se sonrojo al escuchar las palabras de Blu, no sabía que decir por lo que acaba de presenciar y escuchar.

Blu: Bueno, y unas 2 horas que estuve que hacer para que la mesa no se cayera jeje - dijo yendo a la mesa seguido de Perla.

Perla: Wow Blu, esto es más que lindo - dijo viendo la mesa decorada.

Blu: Y no sólo eso, mira bien la mesa - dijo señalandola.

Perla miró atentamente la mesa y se asombro de ver una carta escrita en ella junto a una Perla y una rosa linda como regalo para ella. La guacamaya tomó el regalo y la rosa se la puso en su cabeza, al igual que tomó la perla y vio como brillaba.

Perla: Blu...esto es lo más lindo que me hayas dado - dijo con brillo en sus ojos.

Blu: Siempre me esfuerzo para darte una buena cita - dijo con una sonrisa.

Perla: Si, me recuerda cuando me preparaste todo por nuestro...aniversario - dijo en voz baja.

Esas palabras hicieron que Perla agachara la cabeza, comenzando a sacar lágrimas de sus ojos. Blu notó eso y fue a consolarla.

Blu: Perla...

Perla: Nuestro aniversario...pudo haber sido perfecto...pero yo lo arruine...no debí...todo fue mi culpa...hubieramos...

Blu: Perla, lo pasado es pasado. Ya no te culpes por lo que pasó en el pasado. Ahora debemos concentrarnos en el presente. Ya no llores por cosas como esas, ahora lo mejor de todo será continuar con la cita. No quiero que llores por eso - dijo tomando sus mejillas para luego limpiarlas poco a poco.

Perla tomó las alas de Blu, y fue directo a abrazarlo con mucha fuerza mientras se desahogaba por todo lo del pasado.

Blu: Tranquila...ahora debemos seguir con esta linda velada Perla. Me harías el honor - dijo con una sonrisa.

Perla: Claro Blu - dijo limpiándose las pocas lágrimas que tenía en su rostro.

Blu movió a Perla, y la sentó en su asiento y este se puso en el suyo, trajo la comida, un surtido de frutas para los dos, con dos popotes y un solo vaso.

Perla: Surtido de frutas - dijo asombrada.

Blu: Así es, deberíamos aprovechar en tomarlo, antes de que se ponga feo - dijo comenzando a tomar el jugo.

Perla: Hace tiempo que no pruebo esto - dijo comenzando a beber del surtido de frutas.

Los dos seguían bebiendo tranquilamente, mirándose el uno al otro mientras veían el hermoso paisaje. María se encontraba allí mirando todo desde lejos, para ver que nada pasará entre los dos, ya no quería que Perla se atreviera a besar a su padre.

Perla: Sabes, siempre soñé en volver a tener una cita así contigo. Esta cita fue como la cita de los recuerdos - dijo con una sonrisa.

Blu: Yo también reviví eso por el momento, pero aún así, me siento bien por ello, ya que me recuerda mucho a todo lo que vivimos juntos. Y me gusta esto - dijo mirando con una sonrisa a Perla.

Perla: A mi también, siempre quise esto, y hasta parece un sueño de que estemos aquí, los dos, en una cita juntos, y que ahora se que tengo todo lo que necesito. Tengo a mis hijos, a mi tía, a mi padre, pero sobre todo. Te tengo a ti, a mi ave especial, al ave que nunca me abandono en todo momento y que siempre estuvo conmigo. Blu, eres el ave más pura que conocí, no me arrepiento de haberte conocido - dijo con un brillo en los ojos.

Blu se asombro por las palabras de Perla, estaba a punto de decir algo, pero sintió algo en su ala, y al verlo, era el ala de Perla tomando la suya, cosa que hizo sorprenderlo al instante. Perla le sonrió mientras se acercaba a él poco a poco, Blu entendía a lo que Perla quería llegar, por lo que poco a poco comenzó a acercarse a ella de igual forma.

María: ¡No puede ser, tengo que detener esto! ¡No me importa si me descubren, no dejaré que ella bese a mi padre! - grito con enojo.

Pero justo cuando estaba por ir a detener el beso, unas alas la tomaron desprevenida, y la agarraron tapandole la boca y ojos, para así llevársela a otro lado.

Blu y Perla se acercaron más hasta que sus pico chocaron al instante, mientras sonreían los dos al mismo tiempo, para así darse un beso lleno de amor, pero no metieron sus lenguas ni nada de eso, a pesar de que Perla lo quería, no lo hizo, ya habría tiempo para eso. Pero por ahora, se conformaba con ese beso mágico que estaba dándose con Blu. Al igual que el spix pensaba lo mismo, y así siguieron besándose, hasta que se separaron por falta de aire. Ambos se miraron con mucho amor y sonrisa, hasta que Blu se paro de la mesa.

Blu: ¿Quieres volver a casa? - preguntó con una sonrisa.

Perla: Me encantaría Blu, vayamos a casa - dijo con una voz tierna.

Y así ambos emprendieron el vuelo hacia el nido de Blu, para concluir con su mágica cita que habían tenido.

María estaba intentando forcejear todo lo posible para que pudiera escapar de quien la tenía capturada aunque no sabía quién era, ya que le tenía tapado sus ojos, hasta que al fin pudo terminar todo esto, y el ave la soltó. Cúando volteo se dio cuenta de que se trataba de su madre Esmeralda.

Esmeralda: Hija...

María: ¿Qué haces aquí? - preguntó con cierta molestia.

Esmeralda: Estaba pasando por aquí para ver el paisaje, pero te vi a ti observando algo, y cuando me di cuenta de que era, escuché todo lo que dijiste sobre interrumpirlos, así que evite que hicieras eso - dijo muy seria.

María: ¡Papá no puede estar con ella, no es para el, no quiero que sufra por ello! - grito con todas sus fuerzas.

Esmeralda: Hija, todos merecen una segunda oportunidad, y eso es lo que le di a Blu y también a Perla, para que los dos se den una segunda chance. Estoy segura que ellos serán más que felices los dos juntos.

María: Te equivocas, ella lo hará sufrir, ya verás de lo que hablo, y cuando eso pase, te acordaras de mis palabras. - dijo molesta.

Esmeralda: Algún día verás a Perla como si fuera de la familia, ya lo verás, y cuando eso pase, sabrás que cometiste un error hija. - dijo con tranquilidad.

María: Te desconozco por completo, tu ya no eres mi madre...ya no eres nadie para mi - dijo alejándose de Esmeralda, la cual estaba callada por lo que escucho.

Esmeralda solo agachó la cabeza, para luego mirar hacia otro lado y comenzar a sollozar, las palabras que le dijo su hija le dolieron en el alma, pues no quería que fuera así. Quería a su hija, pero ella le dejó más que claro que ya no quería saber más de ella, por lo que tuvo que secar sus lágrimas.

Esmeralda: Hija...snif...no...

Mientras tanto, Blu y Perla estaban llegado al nido de Blu, una vez aterrizaron. El spix volteo ver a Perla para poder hablar con ella antes de irse a dormir.

Blu: Fue una noche increíble Perla. Gracias por esta cita - dijo con una sonrisa.

Perla: No Blu, gracias a ti por esta maravillosa cita. Ahora podré estar tranquila sabiendo que al fin podemos estar juntos de nuevo, pero poco a poco.

Blu: Así es, poco a poco - dijo con una sonrisa.

Perla: Bueno, buenas noches - dijo sonriendo.

Blu: Si, buenas noches - dijo para darle un beso en la mejilla pero ambos se tocaron los picos mirándose el uno al otro.

Perla le dio un beso a Blu en sus labios con mucho amor, a lo cual Blu correspondió, Perla estaba en las nubes al sentir los labios de Blu. Después de unos cuantos segundos de beso, ambos se separaron por falta de oxígeno, para luego verse con una mirada muy tierna.

Perla: Hasta luego Blu - dijo con una sonrisa.

Blu: Hasta luego Perla - dijo con una sonrisa.

Perla se fue volando en dirección a su nido para poder dormir. Blu la vio alejarse poco a poco hasta que la perdió de vista. El spix soltó una sonrisa para luego entrar a su nido y poder dormir un poco. Ahí entró a su habitación y se tiro en su cama de hojas, mirando con una sonrisa el techo.

Blu: Poco a poco Perla, poco a poco - dijo con una sonrisa.

A las afueras del nido, María había regresado, y camino de puntitas hasta donde estaba su cuarto, al entrar, vio a sus hermanos que estaban ahí durmiendo, así que hizo todo lo posible para no despertarlos, y por suerte no lo hizo. Se acostó en su cama, para poder dormir, y cerró los ojos, aunque las palabras de su madre resonaban una y otra vez en sus pensamientos, no dejaba de pensar en eso.

María: No pienso cambiar de opinión. Ella no es para mí padre ¡No lo es! - grito con enojo en voz baja.

Mientras que Perla había llegado a su nido y se fue directo a su habitación para poder descansar y dormir para el día siguiente. Se acostó tranquilamente miéntras recordaba la grandiosa cita que tuvo con Blu.

Perla: Blu, te prometo que nada nos va a separar. Nada nos separara - dijo con una sonrisa para luego cerrar los ojos.

CONTINUARÁ...

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