Capítulo VI

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Capítulo VI: La Fuerza del Acero

("Galaxian Wars", OST 1 de "Saint Seiya")

https://youtu.be/4Q8frDNktW4

Todo parecía haber pasado en tan solo un segundo: Nadie podía describir el momento en el que las "Mareas del Cataclismo" azotaron a Royal Woods y varias partes del Mundo, desatando terremotos, tsunamis, inundaciones, erupciones volcánicas y demás eventos naturales. Pero aquella Ciudad del Estado de Michigan se llevó la peor parte cuando Lincoln y sus amigos se hallaban en las calles, listos para pasar un momento de tranquilidad hasta que sucedió. Recuperados del sismo, observando la devastación pero no hubo ni tiempo para nada: Allí estaban los dos "Enviados del Olimpo". Geo, hijo de Zeus y Hera, acompañado por Junk Hurk, el "Guardaespaldas" asignado por los padres del chico albino.

Los primeros segundos fueron el detonante cuando el joven desenfundó su Espada y comenzó con su misión: Asesinar al Emperador del Inframundo. Bobby y Ronnie Anne fueron detenidos por el "Guardaespaldas" de Geo, quien ofreció una tenaz resistencia, a pesar de los golpes y ataque recibió de los dos hermanos de la Familia Casagrande. El combate que ambos tuvieron contra Junk duró bastante hasta la llegada de Dimitri, mientras que Clyde llevaba su mensaje de advertencia a las hermanas, siendo Lynn junto a Leni y Alexander los que partieron para ayudar al albino del peligro que representaba Geo.

Aún quedaba mucho para Lincoln sobre quién era esa persona, ya que le costaba creer que éste fuera el hijo de Zeus y Hera. Tal vez se trataba de algún último remanente de las UnLoud o del otro Universo con el que habían combatido, sin embargo, la temible aura de Cosmos que desplegaba Geo era sumamente aterradora. Y en medio del fragor del combate, con el choque de las Espadas, una contra la otra, saltando chispas y el feroz chirrido que el acero emitía por su contacto con la otra, provocaba que al más sensible de esos sonidos pudiera darse la vuelta o caer al suelo, rendido. Sin embargo, para el Emperador del Inframundo, el cual estaba acostumbrado a las batallas, no iba a ceder ni un ápice del terreno.

Esquivó otro tajo que Geo le lanzó, quedando la Espada de éste atorada en un farol inclinado por el terremoto, cosa que le dio unos segundos muy valiosos para recuperar la posición y atacarlo. Pero el otro no era ningún idiota ni un débil, todo lo contrario, estaba dejando su guardia baja para que el contrincante cayera en su trampa. Desde el suelo, unos misteriosos rayos emergieron y fueron subiendo por su cuerpo, poco a poco hasta alcanzar las manos del albino enemigo, quien fue desplegando una Esfera blanca y que chispeaba a más no poder.

- No sé si será verdad de lo que me has dicho, de que eres el hijo de Zeus y Hera, pero no voy a creer en esa farsa.- Dijo Lincoln con seriedad.- ¡Y si lo fueras, responde a mi pregunta: ¿Qué está buscan? ¿Por qué han causado todo esto?!.- Exigió saber, apuntando hacia las destruidas calles de Royal Woods.

- Jejejejeje.- La risa de Geo era sumamente gélida y se dibujaba una sonrisa de pura maldad en su rostro.- Eres un idiota, Hades. Tal vez la respuesta la tengas tú mismo, ¿no lo crees, asesino?.- Preguntó y tras girarse, teniendo a Lincoln a unos escasos metros, lanzó un poderoso rayo que le dio contra el pecho de su Armadura Divina, siendo lanzado hacia atrás e impactando contra un negocio que estaba con las persianas bajas, quedando éstas abolladas por el impacto.

Se recuperó y vio que otro rayo iba en su dirección, por lo que tomó su Espada, rodó por el suelo y se salvó de una explosión en aquel inmueble.

- ¿Asesino?. No sé de qué me estás hablando. Si esto es una broma, más te vale que te retires de aquí o te enviaré a lo más profundo del Infierno.- Le advirtió el albino, apuntándole con su arma.

- Sí, de la misma manera con la que mataron a Apolo hace tiempo atrás.- Apostilló Geo con furia.- ¡Maldito monstruo, tú y tus Aliados destrozaron el corazón de Artemisa!.- Bramó y cargó contra él, protegiéndose Lincoln con su Espada.

- ¡Ja! ¡¿Hablas del mismo Apolo que quiso destruir a Athena y toda la vida en la Tierra porque los Dioses vieron que los Caballeros de ella pudieron vencer a uno de los suyos?! ¡No me hagas reír, Seiya y su Aprendiz le dieron su merecido y fue la propia Artemisa quien los perdonó a los Santos de Oro, quienes volvieron a la vida! ¡El errado eres tú, Geo, para creerte ese tipo de tonterías!.- Señaló el chico Loud al tener esas imágenes del Pasado, cosa que terminaron por provocar un feroz estallido de odio en el otro albino, quien se vio rodeado de aquella actividad eléctrica.- ¡Nosotros lo hicimos por una causa: ¿Acaso dejarías que Apolo destruyera este Mundo, que lo volviera a reconstruir?! ¡Arruinaría todo el trabajo, esfuerzo y lucha que los Caballeros de Athena han dado!.

- Qué malas palabras has escogido, "amigo".- Sentenció el oponente con frialdad, mientras que alzaba sus manos y los rayos comenzaron a crepitar con mucha más fuerza.- ¡DESAPARECE BAJO MI TORMENTA!.- Exclamó con furia y lanzó su ofensiva hacia el albino.

Lincoln sabía que contra ese poder estaba en desventaja, por lo que iba a dar todo lo que tenía para resistir y luego volver a atacar, sin embargo, en aquel momento en el que el primer rayo fue disparado junto a los otros, alguien se interpuso, llamando su atención en aquel momento.

- ¡OYE, DEJA A MI HERMANITO EN PAZ!.- Se oyó la voz de una cierta castaña deportista y que se hallaba con su Sapuris puesta.-

- Hmmm.- Bufó Geo para sus adentros.- ¿Otro Espectro más que se suma a la pelea?.- Preguntó con asco hacia el "Ejército de las 108 Estrellas Malignas"?.-

- Para tu información, no somos ninguna bola de perdedores. Ahora lamentarás lo que has hecho: Yo soy Lynn de la Arpía, la Estrella Celeste del Lamento y no he venido sola. ¡Estamos contigo, Lincoln!.- Se presentó la muchacha y antes de que el oponente pudiera reaccionar, varios "Hilos" atraparon con su cintura, además de enredarse alrededor de sus manos y piernas.

- Ya me estaba temiendo lo peor; pero con estar detrás de toda esta devastación, eso hace que mi corazón sufra, pero ahora va a haber Justicia: ¡Leni de Grifos, la Estrella Celeste de la Nobleza y Juez del Infierno da por iniciada la Cesión!.- Habló la rubia mayor, quien se hallaba acompañada por su novio.

- Me sorprende, Amor mío, que todavía hayan escorias que no aprenden más.- Dijo aquel peli blanco-plateado, el cual estaba a su lado.- ¡Yo soy Alexander de Mefistófeles/Kairos, la Estrella Celeste del Liderazgo y la Reencarnación del Dios del Tiempo!.-

Aquellas palabras, esa información calaron en lo más hondo del subconsciente de Geo, quien sintió una profunda rabia al ver a todas esas personas reunidas.

- ¿Kairos? ¡Kairos, maldito monstruo, tú fuiste expulsado del "Olimpo" y encerrado en los cuerpos de los Mortales para que reencarnaras infinitas veces, ¿cómo es posible que lo hayas evadido?!.- Preguntó el albino hacia Alexander.

- Esta pelea no es conmigo, chico. No intentes buscar una distracción sobre el por qué mi Reencarnación.- Advirtió el Bosnio con seriedad, mientras que aparecían una serie de "Agujas del Reloj" a su lado.- Lamentarás haber atacado al Señor Hades. ¡Leni, Mi Amor!.-

- ¡Sí!.- Respondió la rubia y se tomó de las manos de su novio, yendo hacia el frente.

Mientras tanto, Dimitri se hallaba mirando a Junk Hurk, el cual había intentado derrotar a Bobby y Ronnie Anne, pero su plan fue saboteado cuando llegó aquel ruso-japonés castaño, quien lo miraba con frialdad en sus ojos, analizando cada movimiento, pulsación, centímetro o metro de sus ataques. Había desarrollado muy bien su forma de combatir tras los acontecimientos que lo llevaron a una carrera contra el Tiempo para salvar la Sapuris que le pertenecía.

- No me esperaba de que el Espectro del Vampiro, aquel cuyo nombre era Earhart, te designado como su "Sucesor".- Dijo el peli negro-gris con seriedad.- Tengo entendido de que, según las fuentes del "Olimpo", él cayó derrotado en el Siglo XVIII a manos de Aspros de Géminis y una amiga suya.- Señaló y el castaño le dio su respuesta.

- Correcto, sin embargo, su espíritu vivió en la Sapuris y una vez que él llamó, acudí a su encuentro, ayudado por mis amigos. Pero basta de charlas, que esto no es una pelea de 2 segundos en las que el villano es derrotado mediante que se vuelve bueno o porque el "Héroe" lo vence fácilmente. ¡Lucharemos como es debido!.- Anunció el joven y eso fue una excelente "invitación" para Junk, quien tomó posición de batalla, mostrando una sonrisa de futuro respeto, listo para cargar.

- Que así sea.- Finalizó y ambos contrincantes chocaron con una brutal fuerza que hizo temblar y resquebrajar el asfalto, haciendo volar sus restos por los aires.

Una feroz explosión se hizo sentir a unos metros de donde se hallaban Lincoln y los demás. Alexander pudo sentir el creciente Cosmos de su amigo y "Hermano Menor", el cual se elevaba y formaba un enorme "Pilar" carmesí que parecía rasgar los Cielos. Lynn, por su parte, voló y cayó como una bomba en picada hacia Geo, quien reaccionó tardíamente y una feroz patada dio contra su pecho, haciéndolo retroceder pero no sin antes ganarse una feroz descarga eléctrica por parte del oponente, provocando que se estrellara contra el piso.

- ¡Lynn!.- Gritaron Lincoln, Leni y Alexander, quienes fueron para verla pero el albino rival no se iba a quedar con solo eso.

- Ya te tenemos atrapado, ríndete, no queremos lastimarte, solo deja en paz a nuestro Señor.- Le pidió Leni con tono autoritario.

- Jejejejejeje.- La sonrisa del oponente se ensanchó al oír esas palabras, mientras que el suelo parecía temblar y crepitar, los Cielos se nublaban a más no poder, llevando a que una densa nubosidad se cerniera sobre las cabezas de todos ellos.-

- ¿Qué es tan gracioso?.- Preguntó Alexander pero pudo sentir una horrible punzada al descubrir lo que el rival tenía consigo.

- Todos ustedes me dan pena, lástima y asco a la vez: Espectros, Dioses de Asgard, Caballeros de Athena y Generales Marinos unidos con sus estandartes y banderas, venciendo a todos sus enemigos pero ¿se piensan que el "Olimpo" es tan ciego como para olvidar sus crímenes?.- Ladeó la cabeza y de ahí los "Hilos" comenzaron a temblar.- ¡Pagarán muy caro por sus Pecados!.- Juró el chico y los rayos destruyeron sus "ataduras".- ¡LO LAMENTARÁN! ¡YO SOY GEO, AQUEL QUE ES CONOCIDO COMO EL HIJO DE ZEUS Y HERA. VINE AQUÍ PARA HACER JUSTICIA POR LO QUE HAN HECHO Y ESTE ES SU FINAL!.- Bramó y con ello fue hacia donde estaba Lincoln con Lynn.

- ¡No te lo permitiré! ¡"CONTROL DE AGUJAS"!.- Alexander extendió su brazo derecho, apuntándolo y dando la orden para que se disparara su ofensiva contra Geo.

- ¡No me pongas a prueba, Kairos!.- Le advirtió Geo y con sus rayos logró destruir varios de los proyectiles, sin embargo, no vio que uno llegaba a herirlo en el muslo derecho, enterrándose justo en la zona donde no estaba protegida, llevando a que perdiera la estabilidad de su línea de ataque y cayendo al piso. El albino rival se levantó con brusquedad, sentía un profundo dolor en esa parte de pierna y pudo notar el daño que había sufrido en carne propia. A pesar del profundo malestar que sentía en el muslo derecho, tiró con fuerza la "Aguja del Reloj", arrojándola a la calle y de ahí volvía a sentirse mejor.

- ¡Lincoln, cuidado!.- Le alertó Leni y fue entonces que el muchacho protegió a Lynn, pero ésta no dejaría que su hermano sufriera, así que se interpuso y recibió un golpe que la hizo trastabillar.

- ¡No, déjala, es conmigo el asunto!.- Exclamó el Emperador del Inframundo, justo cuando Geo tomaba su Espada y se preparaba para ejecutarla. En un acto de amor hacia ella y las demás, el chico trazó un arco ascendente, bloqueando el ataque de Geo, pero sus fuerzas comenzaban a menguar.

- Oh, ¿qué pasa, Hades? ¿Te cansaste?. Una lástima, yo apenas estoy entrando en calor.- Le espetó el oponente con burla y fue bajando su Espada hasta quedar a pocos centímetros del cuello de Lincoln.

- No...No...¡NO TE LO PERMITIRÉ!.- Exclamó Lynn, quien pegó un salto y se elevó en los Cielos. Acto seguido, una Esfera Violeta Oscura fue formándose en sus manos, adquiriendo características eléctricas junto a un "Núcleo" formado en su Centro. Fue adquiriendo un cierto tamaño hasta que alcanzó el de una pelota de fútbol y de ahí creció aún más hasta quedar en ambas manos de la deportista.- ¡ESTO NUNCA TE LO PERDONARÉ, MALDITO! ¡TOMA ESTO: "LA AVARICIA DE LA VIDA"!.- Y de ahí lanzó una feroz ofensiva que tomó desprevenido a Geo. Lincoln lo pateó y voló hasta entrar en contacto con el ataque de Lynn, siendo "engullido" por la Oscuridad y de ahí estallaba por los aires.

Hubo un momento de tensión, cuando la "Avaricia de la Vida" de Lynn había terminado, quedó un profundo silencio pero sin rastro alguno de Geo.

La explosión de color violeta-oscuro terminó por desaparecer y Junk Hurk apretó los dientes con rabia al no poder sentir la presencia de aquel albino. Éste se giró y vio que Dimitri levitaba a escasos centímetros del suelo, mirándolo con seriedad y sus ojos parecían estar "centellando" ante la furia que le recorría al "Guardaespaldas" por la posible captura del hijo de Zeus y Hera. Pero también tenía un duelo por el cual continuar, así que se preparó y cargó contra el castaño de Rusia y Japón, quien respondió y esquivó el puñetazo, el cual quedó enterrado en una pared detrás suyo.

- Buena esquivada.- Le felicitó Junk y regresó para atacarlo. Dimitri respondió y una patada dio contra el pecho del oponente, haciendo saltar sangre y gotículas de saliva al suelo, empapando al mismo, pero no gritó ni nada, sino de que ahogó el dolor y se limpió el líquido rojo que caía por sus comisuras, mostrando una sonrisa de complicidad.- Es hora de empezar a dejar de lado las "niñerías".- Sentenció con seriedad y atacó repetidas veces al ruso-japonés.

Las manos del "Guardaespaldas" comenzaron a sentar y arder bajo un intenso "Fuego Negro". Éste se "dividió" en varias partes, cinco Esferas que se alzaron en lo alto y se dispusieron a ser lanzadas como proyectiles contra el oponente que tenía delante suyo.

- Ahora, desde este mismo momento, la lucha se vuelve un poco más "caliente".- Especuló el rival.

- No te copies de Luan. Je, aunque fue una "broma".- Respondió Dimitri y fue entonces que éste fue preparándose para responder.

Junk no dijo nada, solamente se limitó a estirar ambas manos y fue entonces que disparó su ataque. Las Esferas de "Fuego Negro" volaron en dirección hacia Dimitri. Éste no tuvo tiempo para poder reaccionar, la ofensiva había sido muy rápida y de ahí empezó a lanzarlo para atrás, sin embargo, mirando hacia abajo, el muchacho trazó un extraño "Pilar" que comenzaba desde el suelo.

- ¡"CRUZ CARMESÍ"!.- Exclamó y se formó una enorme "Cruz" de energía y que lanzaba destello de rayos. Los mismos se dirigieron hacia el oponente y que se conectaba con las Dimensiones, llevando a que el "Fuego" Negro" desapareciera en ese "Vacío".

- ¡¿Qué?!.- Se preguntó Junk cuando una feroz embestida de energía lo lanzó hacia atrás, estrellándose contra un edificio.

Dimitri volvió al suelo, pisó la superficie, unas finas capas de polvo se levantaron pero tenía una doble cuestión: Lincoln lo necesitaba, pero tampoco podía quitarle el ojo de encima al "Guardaespaldas" de Geo, quien había recibido el impacto de su "Cruz Carmesí". Se detuvo y pensó por unos segundos hasta que, guiado por el viento, fue hasta el edificio siniestrado.

Desde el "Salón Imperial", la Diosa Eris contemplaba los últimos acontecimientos desarrollados en la Tierra, había visto cómo Geo desaparecía, "engullido" por esa ofensiva que Lynn le había lanzado, pero no quedaron rastros suyos, ¿en dónde podía estar?. No era que le importara pero sabía que Zeus y Hera no estarían para nada contentos, por lo que se lo tomó con suma facilidad. Detrás suyo pudo oír los pasos de su Teniente, quien entró al sitio y se arrodilló ante su Gobernante.

- Mi Señorita, Até de la Ruina reportándose a sus servicios.- Habló la muchacha de gran belleza.

- Me alegra de que hayas vuelto a la vida, Até.- Dijo Eris y caminó hasta ella, tomando el rostro de la peli negra-azulada, desde su mentón, viéndola a los ojos.- Hay una misión que quiero encargarte a ti y un par más de mis "Ghost Saints".-

- Dígalo y lo cumpliré.- Le dio su palabra, mientras que la Diosa de la Discordia le daba sus instrucciones.

La reunión duró poco, por lo que Até partió de allí pero no estaba sola, ya que fue escoltada por Jäger, Jan y otros tres "Ghost Saints" que tenía bajo sus órdenes, mientras que su Teniente se llevaría tres de sus "Dríades" consigo. Eris contempló esa salida, volvía a sentir cómo las "Semillas del Caos" regresaban para florecer en los corazones de la Humanidad y todo gracias al trabajo de Zeus y Hera. Aquellos Dioses podían mostrar su cara más oscura, su verdadera Naturaleza cuando querían y ahora era testigo de ello.

Lincoln fue ayudado por Lynn, Leni y Alexander para que se pusiera de pie, ya que la batalla le había consumido gran parte de sus fuerzas físicas. Utilizando su Espada como "bastón", el joven buscó con la mirada a su oponente pero solo vio un enorme cráter en el Centro de las calles. Lynn, por su parte, se encontraba agitada pero bien, alzando su pulgar para dar rienda suelta de que no había sufrido ningún golpe mortal ni nada por el estilo, sin embargo, eso no parecía apaciguar las aguas, ya que el rival seguía allí, tal vez se estaba ocultando o habría empleado alguna técnica que le permitiera evadir, por escasos segundos, el golpe final.

- Geo no está por ninguna parte.- Dijo Lincoln y dio unos pasos al frente.

De las ruinas humeantes, solo podía verse fuego por el estallido que dejó una fuga de gas subterránea pero nada más que eso. El albino lo buscaba con la mirada, cada centímetro de ese cráter tendría que dar una señal sobre el misterioso oponente. Oyó los pasos de Lynn, Leni y Alexander, quienes se detuvieron ante la señal del chico.

- ¿Así que ese es su nombre, Geo?.- Preguntó Lynn y él asintió con la cabeza.

- Y parece que está muy enojado por la muerte de Apolo hace tiempo atrás.- Remarcó Leni, cosa que Alexander debió asentir con la cabeza.

- Uno nunca aprende de sus errores, ese demente casi destruye toda la vida en la Tierra, pero se nota que mis palabras estaban en lo correcto: Los mismos Dioses también cometen errores y los repiten, como nueva "información".- Dijo el Bosnio con tono serio al respecto. Acto seguido, el chico se volteó, podía sentir el Cosmos de Dimitri a unas calles más abajo, por lo que debía de haber terminado con su lucha contra el "Guardaespaldas" de Geo.

Justo en aquel momento, Lincoln tomó su Espada Imperial cuando el viento cambió de dirección. Podía sentir su presencia pero no sabía cuál era su posición. Estaba debilitado pero se mantendría en el acto, listo para pelear cuando notó un repentino destello que cayó, cual rayo, en su contra, haciendo que impactara de lleno contra él y arrojando a sus hermanas y amigo hacia atrás. La "deflagración" fue lo suficientemente como para partir el cráter aún más, mientras que el albino se protegía con su arma en ristre, Geo había emergido, sangrando, herido debajo de la Máscara que portaba junto a una línea de sangre que bajaba hasta tocar el suelo.

Con las Espadas de ambos chocando, chirriando, lanzando chispas y sin ceder ni un ápice de terreno, Geo parecía ser el que llevaba todas las de ganar, pero, en un momento dado, su poder comenzó a menguar, cosa que le dio la oportunidad a Lincoln de atacar repetidas veces, pero eso no significaba que el hijo de Zeus y Hera se fuera a rendir. Con una feroz embestida, ambos colisionaron, pero el Emperador del Inframundo llegó a ponerlo contra las cuerdas.

- ¡Dile a tus padres que nosotros lo hicimos por el bien de este Mundo! ¡Todos corríamos peligro!.- Bramó Lincoln y sus ojos parecían brillar de la furia por todo lo que la Tierra estaba sufriendo.

- ¡No me hagas reír, Hades, eres cómplice de Athena y Poseidón. Nunca serán perdonados! ¡TOMA ESTO!.- Le replicó Geo pero, en aquel momento, Lynn llegó con Leni y Alexander para darle cobertura. La chica de la Arpía atacó al oponente con sus afiladas garras metálicas que su Sapuris poseía, llegando a herirlo en las zonas que no estaban protegidas por la Armadura, haciendo que la sangre cayera contra el piso.

En un momento dado, cuando la Juez de Grifo y el Dios del Tiempo estaban por dar su golpe, una feroz explosión surgió de la nada.

- ¿Qué?.- Se preguntó Leni al ver como el polvo desaparecía.

Dimitri había llegado hasta el tercer piso del edificio pero no veía señales de Junk Hurk, ¿adónde había ido?. Solo halló escombros y humo pero ni rastros del adversario, sin embargo, algo llamó su atención, por lo que se giró y voló en dirección hacia donde estaban Lincoln y los otros.

Lynn no llegó a ver cómo un feroz puñetazo daba contra su abdomen, tirándola contra el piso, sacándole el aire de sus pulmones y agarrándose el estómago con fuerza. Alzó la vista y pudo notar a una misteriosa joven adulta, atractiva, cuerpo atlético, cabello claro y listo junto a una cicatriz. Ésta se hallaba delante de la "Vanguardia" que había venido en auxilio de Geo, quien los miró con seriedad.

- ¿Qué están haciendo aquí?.- Preguntó el joven.-

- La Señorita Eris nos ha enviado para ayudarte, Geo.- Habló otra mujer de gran belleza y cabellos negro-azulado, quien estaba a cargo de esa misión.

- No puede ser.- Quedó el peli blanco sin palabras.- ¡Até...Até de la Ruina, tú estabas muerta después de ser derrotada por la Saintia Shoko de Caballo Menor!.- Reconoció el hijo de Zeus y Hera a aquella persona.

La Teniente de Eris miró con seriedad a cada uno de los presentes, Lincoln seguía con su arma en ristre, yendo para ayudar a Lynn, protegido por Leni y Alexander. En ese instante, otros Guerreros aparecieron, saltando desde los edificios, aterrizando en las calles destruidas.

- ¡Jäger de Orión y Jan de Escudo!.- Los reconoció Geo con asco, sobre todo al primero, quien era muy orgulloso pero también extremadamente violento.

- ¿Así que estas ratas lastimaron al hijo de Zeus y Hera?. Jajajaja, me dan pena, realmente.- Habló un joven de edad desconocida, cuerpo atlético, tez blanca, cabello rubio y despeinado, el cual era un poco largo y que llegaba hasta el cuello. De rostro delgado, barbilla triangular, sus ojos eran de color verde y el rasgo más notorio era que tenía una uniceja. Éste dio unos pasos al frente pero fue inmovilizado por Leni y sus Hilos.- Jejejeje, ¿crees que eso me va a detener, amiga?.- Preguntó con burla.- Yo soy Christ de la Cruz del Sur, integrante de los "Ghost Saint" de la Señorita Eris, logrando salirse del agarre y llevando a que la rubia pegara un salto en el aire.- Tienen suerte de que no los haya matado, la próxima no tendrán tanta suerte.

- ¡Ya basta, Christ, esta es mi pelea, vuelvan con Eris ya mismo!.- Ordenó Geo pero sus heridas eran bastante serias por la lucha que había tenido, además de que comenzaba a sangrar bastante.

- Será mejor que no te muevas. Te llevaremos de vuelta al "Olimpo".- Le pidió otro de los Guerreros de la Diosa de la Discordia.

- Puedo pelear, Maya de Sagitta.- Respondió el albino pero cayó al piso.

- No, no lo estás. Christ, Jan, vengan.- Llamó el último de esos Soldados, quien resultó ser un muchacho de apariencia delicada, elegante, cuerpo atlético como sus Camaradas de Armas. De tez blanca, cabello azul despeinado, rostro delgado y ojos de color negro. Además de llevar una Lira en sus brazos.

- Orpheus de Lira.- Lo reconoció Geo, quien dirigió una mirada hacia Lincoln, escupiendo sangre.- Ga...Ganas esta vez, Hades, pero la próxima no tendrás tanta suerte.

Herido pero sin su honor dañado, Junk Hurk había vuelto para reunirse con Geo, sin embargo, al toparse con los "Ghost Saint" y "Dríades" de Eris le provocó que una furia interna se adueña de su interior, debido a que no tenía muy buena relación con esas Fuerzas del "Olimpo". Sentía asco y repulsión, sobre todo a las "Dríades", quienes personificaban la Oscuridad propia de la Naturaleza Humana, buscando sembrar el conflicto entre las partes del Mundo.

- Vaya, Junk, ¿qué te pasó?. Parece que los años te han hecho mella.- Se burló Jäger, cosa que no le cayó para nada bien al "Guardaespaldas" de Geo.

- Cierra la boca, que contino es el asunto.- Le espetó y fue para reunirse con el albino, arrodillándose.- Lamento mucho no haber podido estar a su lado, Joven Geo, disculpe mi inacción y fracaso.- Ofreció su perdón pero éste lo tranquilizó.

- ¿Inacción?. Para nada, Junk, peleaste como es debido, diste una muy buena batalla. Mis padres te felicitarán y honrarán por esto.- Le dijo Geo con amabilidad.

- ¡Ustedes no se van de aquí, malditos!.- Bramó Lynn, lista para atacar pero la mujer de la cicatriz volvió a adelantarse y la golpeó repetidas veces, tirándola contra el piso.

- Je, una lástima, creí que serías una digna rival pero veo que te agostaste desde hace mucho.- Le espetó la peli clara pero cuando estuvo por dar el golpe final, un resplandor dorado intervino, apareciendo cierto Caballero peli negro y mirada seria, quien utilizó su brazo, provocándole una herida sangrante a la muchacha y protegiendo a la castaña.- ¡AGH!...No...no puede ser verdad...-

- ¿Así que ustedes los enviados del "Olimpo"?. Se nota, su odio se puede sentir hasta en el Cosmos de ustedes.- Dijo aquel joven proveniente de España.- Ha pasado un tiempo desde la última vez que nos vimos, Lincoln, Lynn, Leni, Alexander.- Se dirigió hacia los presentes y el albino lo reconoció.

- No puedo creerlo...¡Shura de Capricornio!.- Reconoció al peli negro, quien estaba en su posición de defensa.

- Un gusto en verlos de nuevo, amigos. Descuiden, los refuerzos están en mi camino: Athena y Poseidón están enterados de lo ocurrido y esto se va a poner muy intenso.- Sostuvo el español, mientras que Lincoln se llevaba a Lynn de allí.

- ¡Atrás, Caballero Dorado!.- Le desafió la mujer de la cicatriz.

- Juro que seré yo quien te derrote.- Lanzó Lynn su promesa.

- Entonces te estaré esperando: Soy Androktasia de Massacre, mocosa.- Aceptó el desafío.

- No soy ninguna mocosa, yo soy Lynn de la Arpía, la Estrella Celeste del Lamento y juro que barreré el piso con tu rostro.- Sentenció ella y tras lanzar esas miradas de pronta guerra, Androktasia se dirigió hacia sus Camaradas.

No se dijo más, Dimitri llegó hasta ellos, encontrándose con Lincoln y los demás. Los enemigos habían desaparecido con Geo, volviendo al "Olimpo" y de ahí, todo volvió a la calma. Shura bajó la "Excalibur" y cerró los ojos. Se giró y contempló a los hermanos Loud y a los dos amigos de Bosnia-Herzegovina y Rusia y Japón, caminando y deteniendo su marcha.

- ¿Están bien?.- Preguntó el español.

- Sí, gracias por venir, Shura.- Respondió el albino, quien era llevado por Lynn y Leni.

El Caballero Dorado caminó hasta donde estaba el chico, dándoles una mano a ambas hermanas para llevarlo en sus hombros hasta la Casa Loud. Dimitri se hallaba con Alexander, relatando su batalla contra Junk Hurk y de lo ocurrido durante la pelea que tuvo Lincoln contra Geo.

- Oigan, ¿no creen que esto es solo el principio de algo mucho más siniestro?.- Alegó el ruso-japonés.

- Por desgracia, sí pero eso lo veremos cuando volvamos a casa. Nos encontraremos con Bobby y Ronnie Anne más abajo y de ahí llamaremos a una reunión. Luego iremos al Santuario.- Sostuvo el albino ante aquella interrogante.

[La Batalla del Centro de Royal Woods ha terminado, pero esto es apenas el principio.

Las "Dríades" y "Ghost Saints" ya han aparecido en escena (vuelvo a señalar que las primeras aparecen en el manga de "Saintia Shö" y los segundos en la película: "Saint Seiya: Eris, Diosa Maligna") y Geo ha vuelto al "Olimpo", pero ¿qué pasará ahora? ¿Cómo serán los eventos posteriores al combate?. Eso lo veremos en el capítulo que viene.

Antes que nada, la parte sobre Earhart del Vampiro, el Espectro que portaba dicha Sapuris y su derrota lo pueden ver en mi otro fic, del 2018, llamado "Saint Simpson: The Lost Canvas/Hades Mithology Gaiden", en lo que es la historia de Aspros de Géminis.

Bueno, amigos, espero que les guste este nuevo capítulo. Mando saludos y agradecimientos para Linterna Verde Franco, RCurrent, eltíorob95, marati2011, J0nas Nagera, FreedomGundam96 y los demás.

Cuídense, amigos y buen comienzo de día Martes de mi parte.].

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