-Capítulo IX-

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[...Acenix...]

Bueno...estamos vivos, eso es lo bueno pero ahora no tengo idea de donde estamos, creo que me alejé mucho de casa, o eso era hasta que la perdí.

Dejando eso de lado, después de varias remadas con nuestras patas y mucho esfuerzo, por fin logramos pisar tierra. Ya lo he dicho, no tengo idea de donde estamos pero al frente nuestro, varios árboles inmensos se asomaban desde las alturas.

Las ganas por explorar estaban destrozándome, pero recordé que debo de darle un tiempo a mi cuerpo, estoy realmente adolorido, a lo igual que Mike.

Ambos reposando sobre nuestras piernas, agitados, eso no sería un problema en principio...no hasta que otros factores esenciales atacarían.

-...Mike...- Diría entre suspiros debido a la fuerza usada para llegar aquí.

No me respondería, realmente estaba cansado, yo me dispondría a esperar el tiempo necesario para poder hablar tranquilamente.

Pasado unos segundos, Mike tomaría mucho aire para luego soltarlo, al parecer ya se siente mejor.

-¿Qué pasa Acenix?

-No quiero ponernos bajo presión...pero tengo hambre...

-¿En serio?, pensé que era el único, estoy muriendo de hambre- Mencionaba mientras estiraba su cuerpo que se encontraba todo sucio por el agua y la tierra junta, el gatuno se encontraba igual.

-Bueno, supongo que debemos buscar algo...hm...

Recorrería con mi vista todos los lugares en los que nos encontrábamos hasta poder divisar algo para comer.

-Oye.

-¿Sí?

-¿Te gusta comer fruta?

-¿Por qué lo dices?

-En esas palmeras, ahí arriba, hay un gran puñado de bananas.

-¿Piensas bajarlas?

-Aún no me dices si te gustan.

-No lo sé, probablemente no me guste pero no quiero morir de hambre.

-¿Entonces...?

-Venga, estaré aquí en caso de que te pase algo.

-Pff, soy un gato, no me va a pasar nada.

-Por las dudas, ¿ok?

Procedería a reírme un poco, era algo irónico decirle que tenga cuidado en escalar a un gato, je...pero bueno, supongo que está bien que esté junto a mí, le tiraré la comida para cuando la alcance.

Sin más preámbulo subí lo más rápido posible por aquella delicia, de verdad que tenía mucha hambre.

Una vez llegado a la punta, agarre todo lo que pude para nosotros dos.

-¡Bien, atrapa!- Gritaba para que este atento a lo que se le venía encima. Mike en todos sus sentidos logró atraparlas para luego ponerlas en el suelo.

Ahora sólo necesitaba bajar, pero antes de hacer eso...me percate de algo a la distancia, aprovechando de estar en altura.

Un destello azul resaltaba a lo lejos, quede maravillado por lo que veía, un gran lago cristalino con un color azulino fosforescente, era hermoso, muchas ideas pasaban por mi cabeza: "Después de esto, deberíamos ir para allá, ¡ya sé, no se lo diré a Mike, que sea una sorpresa!, ¡ya quiero ver lo maravillado que quedará!", la emoción fue tanta que después de un largo rato, me percate de algo, mis garras...se desprenden...

"Oh no..."

[...]

El grito de Acenix fue lo suficientemente fuerte como para poner en onda a Mike, púes este rápidamente iría en su rescate, sin embargo, su carrera sería interrumpida por un tropiezo que lograría tumbarlo, a pesar de esto, él no quería que su amigo tuviese un mal aterrizaje, así que se puso de bajo suyo extendiendo ambas patas para atraparlo, pero lo que este no esperaba, era que lo que dicen de los gatos era verdad, pues...estos siempre caen de pie.

Acenix en los últimos segundos logro caer en cuatro patas evitando una mortífera caída, afortunadamente no aplastaría a su amigo, solo lo evitaría, y ahí fue cuando el momento donde ambos se sintieron "ESTUPIDOS" comenzó.

Se quedaron mirando por un buen rato, sin decir ni una sola palabra. Por cosas del destino, las dos patas extendidas de Mike lograron tocar los costados del estómago del contrario, eso a ambos les haría experimentar algo que hasta ahora era nuevo para ellos, alguna que otra mariposa en el estómago digamos.

...

...

...

-...¿Ya te dije que soy un gato no?

-Sí...jeje...lo olvidé.

...

...

...

-Estamos un poco cerca...

-¡Oh lo siento!

Acenix se apartaría de encima de Mike para que este se ponga en pie, ambos se volvieron a mirar y solo mostraban una sonrisa nerviosa, pero el momento aún no pasaba, de hecho, los notorios sonrojos aún se mostraban visibles.

-Ten...más cuidado la próxima...

Mike diría esto para recoger la comida y irse a unos metros suyos.

El gato estaría confundido respecto a sus sentimientos, sintió un calor inmenso al momento, le temblaban las patas y su ritmo cardíaco subió repentinamente.

Este en su mente pensaba: "¿Qué me pasa...?, se siente como si quisiera gritar...carajo que incómoda sensación"

-¿...?, ¿Acenix?, ¿te duele el pecho?

Acenix sería sacado de sus pensamientos rápidamente por Mike, este no entendía de lo que hablaba hasta que se dio cuenta de que su pata derecha estaba haciendo presión en su pecho, este dejaría de hacerlo al instante.

-No, no...es solo que...me pegue un buen susto.

-Si, yo también, temía que te sucediera algo.

-¿En serio?

-Si...esas coseduras en tu brazo y estómago son frágiles...una caída con eso encima te hubiese hecho un gran daño, además del parche que traes encima.

-Oh...cierto, hablando de eso, creo que ya me quitaré este asqueroso parche.

El gatuno se sacaría el parche pirata para comprobar la hinchazón de su ojo, por mera suerte, su ojo ya no tenía esa inflamación, se veía como uno común y corriente.

-¿Se ve bien?

-Si, mucho mejor, ahora ven, ayúdame a repartir esto.

Acenix con forme pasaba el tiempo, esa rara sensación se iba yendo de su cuerpo, hasta estar más tranquilo.

Los sonrojos de ambos desaparecieron por completo, o saben ocultar sus emociones o simplemente lo olvidaron de un momento para el otro.

-Bueno, hay 8 de estas cosas.

-Bananas.

-Eso, toma 4- Diría para lanzarle un puñado de la fruta mencionada, Mike haría una señal para moverse a un lugar donde puedan comer.

Situados en un tronco cortado, sentados contemplando un atardecer maravilloso, pues el tiempo había pasado demasiado rápido.

Una vez más, ambos se mantendrían en silencio, de verdad nadie tenía la intención de hablar, solo se mostraban comiendo.

Pasado el rato, Acenix ya había terminado con mucho gusto, por otro lado, Mike se mostraba insatisfecho con lo que probaba, pues era más fanático de la carne fresca, lamentablemente no le quedaba de otra, acabó comiéndose todo con mucho esfuerzo.

Acenix se daría cuenta de esto y no dudaría en preguntar.

-¿Te hubiera gustado comer pescado?

-...¿Qué?...

-Veras, había uno que otro pececito nadando por la orilla, tal vez hubiésemos esperado, cazábamos un poco de esos, hacíamos algo de fuego y...ya.

Mike quedo algo asqueado con la propuesta, y si, ya había probado uno de esos, no le terminó de gustar, además, teniendo en cuenta que su especie no come esos...obviamente por el respeto Mike trataría de rechazar la idea planeada de manera educada.

-Hm...no estaría mal, aunque si tengo que elegir entre esto y un pescado, lamento decirlo pero prefiero esto- Diría para juntar las cáscaras y ponerlas en sus piernas.

-Esta bien, tampoco es que iba a hacerlo.

-¿A ti no te gusta?

-¡Me encanta!, solo que es algo aburrido y costoso arrodillarse en el mar, y esperar por un buen rato a que pase uno.

-Yo te puedo ayudar si aún no estas lleno.

-No te preocupes Mike, igual...dudo que tú puedas hacerlo.

-...

-...

-¿Qué quieres decir?

-Escucha, sé que lo de ser un gato y un perro no interesa mucho llegado hasta este punto, después de todo ambos tenemos conciencia...la cosa es que...no vi a ningún otro animal que no sea un gato hacer eso, y tiene una razón, me contaron que solo nosotros lo hacíamos por que teníamos un instinto más agudo, ya que los pececitos son muy rápidos y escurridizos.

-Ajam...oye, ¿de verdad no quieres que te ayude?

-...¡¿Acaso me escuchaste?!

-Sip, solo me dijiste que el 100% de animales, exceptuando gatos, son lentos.

-Eso no era lo que quería decir.

-¿Entonces?

-...

-Mira, olvidaré lo que acabas de decir sobre TODOS NOSOTROS, a cambio de que me dejes ayudarte a atrapar aunque sea uno.

...

...

...

-¿Solo uno verdad?

-Sip, solo uno.

Acenix llevaba ambas patas a su rostro tratando de no alterarse, pues le resultaba fastidioso que el can tratase de demostrar lo contrario, a pesar de que el gatuno estaba 100% seguro del resultado.

Pensando entre sí, se le ocurrió una gran idea.

-Hm...que no sea uno, que te parece si hacemos una competencia Mike.

-¿Una competencia?

-Si, me subiste los ánimos para hacer una de esas.

-Hm...bien de que tratará.

-El que capture más peces, que es claro que seré yo, el perdedor hará todo lo que desee el ganador.

-De nuevo, haré como que no escuche nada exceptuando tú competencia, está bien, solo te digo, luego no te sorprendas por el resultado.

-Ja, y yo te digo, espero que tú no te estés quejando por lo que te haga hacer luego de que gane.

Mike procedería a reírse de forma burlona...en realidad, este sabía que iba a perder, pero tenía la confianza de que pase algo mientras compiten, un milagro, ¿sabes?

-Bien, entonces es un trato, ¿gato?- Diría para extender su pata para dar comienzo con la competencia.

Acenix solo mostraría una sonrisa superior a su rival.

-Es un trato, perro.

Apenas ambos se estrecharon, Mike lo empujó fuertemente contra la arena para luego irse corriendo al mar.

-¡Tramposo!

-¡Dije que no te sorprendas por el resultado, jajaja!

-Jeje...no se por qué, pero estoy seguro de que sabe lo que hace.

Acenix se levantaría rápidamente para perseguirlo y de paso para ir rápido al mar, una batalla amistosa había iniciado.

Fin del capítulo IX

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