Bueno.

Vamo a juga.

. . . .

Base Subterránea de la SP.

- ¿Tienes novia? – Preguntaba Kurose a Aki quien miraba el collar que Himeno le dejó aquel día que discutieron.

-...

-Uy ¿toqué un tema delicado? ¿Te dejó o qué?

-No seas chismoso, cabeza hueca. – Regañó Tendou a Kurose quien se encogió de hombros. – No le prestes atención, no todos con 22 años ya tiene esposa e hija.

-¿Tienes familia? – Preguntaba Aki viendo a Kurose quien rio un poco por eso, de su bolsillo sacó una foto donde estaba él, su esposa y sus dos hijos (un niño entre 2-3 años y una niña de 1 año). - ¿Y cuantos años es que tienes?

-Tengo realmente 23. – Rio Kurose guardando la foto. – Siendo franco, nada fue planeado, fue un accidente que hizo que tuviera que abandonar la universidad y buscar trabajo.

- ¿Y elegiste Devil Hunter? – Preguntaba Aki.

-Era el de mejor paga, además que si algo me llega a pasar... les puedo garantizar una vida plena y sin complicaciones. – Dijo Kurose riendo. – Después de todo tengo más de 4 años trabajando como Devil Hunter.

-...

- ¿Y tú qué? ¿No piensas tener en familia o algo así? – Preguntó Kurose pero recibió un codazo por parte de Tendou para que se callara. – Ya ya, ya me callo.

-Como sea. – Dijo Tendou para ver a Aki con una mirada seria. – Supongo que para obtener un contrato con un demonio poderoso, pondrá unos términos brutales para el contrato del mismo... y una vez que establezcan dicho contrato, volverás ser arrojado a la jaula de leones, por lo que preguntaré una última vez ¿seguro que no quieres renunciar? Las cosas se pondrán feas a partir de ahora.

Aki miró el collar de Himeno por escasos segundos para meter este en su bolsillo y tener una mirada decidida, Kurose miró a Tendou quien suspiró algo rezagada por lo que al llegar al último subnivel, los tres caminaron por los largos y tristes pasillos donde habían varias puertas donde encerraban a los demonios que eran peligrosos o muy poderosos para tú hacer un contrato con estos.

Los tres llegaron a una puerta en común.

-Te haremos contratar al demonio que está encerrado aquí: el Demonio del Futuro. – Explicaba Kurose. – Hay solo dos personas que hicieron un contrato con él; una intercambió la mitad de su vida y la otra persona sus dos ojos, su sentido del gusto y sentido del olfato.

Aki miraba a la puerta que se abría lentamente para dejar ver el profundo oscuro de la habitación misma.

-Si se interesa en ti, capaz lo que debas pagar sea un poco más barato. – Dijo Kurose con una sonrisa mientras veía que Aki entraba de lleno a la habitación. – Huh, realmente los de la 4ta división son unos locos desquiciados, recuérdame porque decidiste aceptar la oferta de Makima para tu transferencia acá Michiko.

-Parecía una buena oportunidad, además de que la división quedó casi en los cimientos la paga era muy buena para ser verdad... - Murmuró Tendou. – Además que Makima es muy buena con sus palabras y siempre quise probarme en otra sección.

-Claro... - Suspiró Kurose no muy seguro de ello, siempre sintió que había algo mal con Makima y sinceramente quería a la mujer lo más lejos posible de él, aunque no tanto para Tendou viendo que respetaba a la jefa de la 4ta división más que temerla.

Aún así; siempre pensó que Makima tenía muchos tornillos zafados.

Mientras que dentro de la habitación Aki miraba con seriedad a un único ojo que flotaba en la oscuridad de la habitación.

Los ojos azules de Aki veían el tétrico ojo hasta que una risa jubilosa rodeó toda la habitación que se encendió las luces de golpe haciendo que el devil hunter se pusiera un poco en alerta.

-¡JOJOJOJOOOOWW~! ¡El futuro es el mejor! ¡El mejoooooooooooooooooor~~! – Reía el Demonio del Futuro siendo una especie de persona o tronco con cierto aíre feliz alrededor de él, con pelaje rodeando sus brazos y cabeza que formaba unas especies de cuernos, era una especie de hombre árbol. - ¡El futuro es el mejor, siiiiiii!

Cantaba este como porrista.

- ¡El futuro manda! ¡Dilo! – Apuntaba Futuro a Aki quien ignoró eso para hacer una pequeña reverencia.

-Estoy aquí para hacer un contrato contigo, dime ¿qué quieres? – Preguntó directo al grano Aki haciendo que Futuro se desinflara de manera animada como un personaje caricaturesco.

-No eres cool, para nada. – Bufaba Futuro para abrir sus brazos y apuntar su estomago abierto donde estaba el ojo. – Aun así ¡Muestrame tu futuro! Así que apurate y mete tu cabeza en mi panza para poder verlo.

-... - Aki sin emitir ni una palabra caminó hacia el demonio y con una cara con algo de extrañeza metió su cabeza en la panza del demonio quien hacía un "hmmmmmmmmmmmm", sus seis ojos se abrieron de golpe y entonces empezó a reír con todo.

-¡EHEHEHEHEHEHEHEHEHEHEHEHEHEHEHEEEEEEEEEEEEEEEEE! – Reía extasiado Futuro para estallar en carcajadas más fuertes, Aki sacó su cabeza de la panza del demonio. - ¡Increíble! ¡INCREÍBLE! ¡¿Quién diría que me encontraría una gema en bruto?! ¡ERES ASOMBROSOOOOOO!

-Eh... - Aki no sabía que decir, el demonio lo tomó del mentón con delicadeza.

-Fíjate primor, estos serán los términos del contrato; déjame vivir en tu ojo derecho y te ayudaré. – Dijo Futuro mientras que Aki lo miraba con incertidumbre.

- ¿Así de fácil? – Preguntó el muchacho a lo cual Futuro apuntó su dedo al rostro de Aki.

- ¡En todos mis milenios viviendo, nunca vi que el futuro de una persona fuera impredecible! – Dijo Futuro riendo. – Hay una interferencia rara que no hace que vea bien tu futuro, ni siquiera puedo predecir en que punto de la vida morirás o no.

-Me estás diciendo que... quieres hacer el contrato conmigo ¿solo para ver que sucederá?

- ¡En efecto! ¿acaso morirás, vivirás, desaparecerás? ¡Es tan incierto tu futuro que hace que me emocioneeeeee~! Por lo que es por eso que haré el contrato contigo Aki Hayakawa.

-Está bien. – Dijo Aki para girar su cabeza a la izquierda mostrando su ojo derecho al demonio. – Adelante, metete en mi ojo derecho.

Y así, Aki Hayakawa hizo su contrato con el Demonio del Futuro.

Después de todo, el futuro siempre manda.

...

Cementerio de Tokyo, Ya en la noche.

-Volveré por ustedes mañana, así que preparen esos culos. – Dijo Kishibe para dejar a una Power y Denji en el suelo mirando al cielo estrellado.

Power tenía su alma saliendo de su boca mientras que moretones, su corbata deshecha y su camisa llena de sangre mientras que Denji andaba sin camisa con los brazos desparramados y unos ojos tan blancos como una pared al haber recibido de nuevas cuentas una de las peores palizas de su vida.

"Si es así con el vejestorio... ¿cómo carajos derrotaré a Makima si ni siquiera puedo con el perro loco de Kishibe?" Pensaba Denji con su cerebro reiniciándose varias veces ante la brutalidad enseñada por el viejo cazador.

-Como... ¿30? No sé, cada que te mataba, me noqueaba así que no estoy segura. – Explicaba Power sentándose con una mirada perdida. – Acaso ¿ese es el nivel de las grandes ligas? Pues si es así entonces soy una mierda.

-Eso... no es parte de ti, siempre te pones a ti misma por encima de los demás ¿qué cambió?

-Siempre soy mejor que los demás, no sé de que hablas. – Bufó Power parándose para limpiarse sus pantalones. – Lo que quiero decir es que si ese es el nivel de Makima y ese loco ¿qué quedara para nosotros? Ni siquiera estamos al nivel de esos... esos monstruos.

-Huh. – Era raro ver a Power en su mundo sin vociferar caos por su boca, en esta ocasión parecía tan impactada por la diferencia de niveles como para poder articular como realmente se sentía.

Se sentía anonadada y no la culpaba, Kishibe era ligas superiores a ellos y los demás de la 4ta división, estaba casi un peldaño por debajo que Makima, por algo fue de los pocos sobrevivientes del ataque de la demonio de la conquista en su momento.

-... No por eso dejaré que esto me frustre. – Dijo Denji parándose mientras gruñía, se tronó su espalda para ver las estrellas. – Él lleva más tiempo haciendo esto que todos nosotros combinados, así que es cuestión de seguir supongo.

-Cárgame. – Decía Power casi cayéndose de espalda ya que al intentar dar un paso, sus piernas cedieron mientras que Denji solo la atrapó para luego ponerla en su espalda y cargarla de caballito con ella hundiendo su rostro en el cuello del rubio. – Esto apesta, me duele todo.

-Ya nos ingeniaremos algo. – Dijo Denji para proceder a caminar por la solitaria calle de noche con las estrellas brillando encima de ellos. – No es el fin del mundo, Powy.

- ¿Powy? – Murmuró Power al escuchar dicho apodo, sintiendo levemente como su corazón se aceleró por fracción de segundo al escucharlo.

- ¿Te molesta?

-... La reina te da permiso que uses dichoso apodo con ella. – Murmuró Power para poco a poco quedarse dormida en la espalda del pibe de la motosierra mientras que él reía levemente y continuaba su camino largo a casa.

"No sé que tantas cosas cambiaron o no... pero creo que viviré un día a la vez y ver que haré con mi vida a partir de ahora" Pensaba Denji mientras ajustaba a Power en su espalda mientras pensaba en como proceder ahora que en unos días iba a ser una de las operaciones más importantes de la 4ta división para que puedan subexistir y era el de la caza de Katana Man.

Él no sabía que hacer con el sujeto una vez vencerlo porque sabía bien que Makima usaría a Katana Man como un eslabón para su juego macabro, aunque siendo sinceros Denji no le caía bien al sujeto, después de todo su familia yakuza lo tuvo de esclavo 16 años completos de su vida por una deuda que ni siquiera era suya así que poco o nada le importaba a Denji lo que sucedería con el hombre de los sables.

Aunque una parte de él sentía que no merecía dicho destino.

Si que era una mierda pensar en los demás y preocuparse por estas cosas para que Makima no cumpliera su plan loco, como extrañaba ser ese chico ignorante de todo y que solo se preocupaba por tetas y culos.

"Eso es parte de madurar, creo" Pensaba Denji suspirando.

Por alguna razón, una voz pasó por la cabeza de Denji dejandolo algo inquieto al recordar que después de esto vendría una de las peleas más voraces que ha peleado él en su vida.

Dime Denji... ¿qué prefieres ser? ¿Ratón de campo o ratón de ciudad?

Su respiración se cortó de repente, sabía bien que después de lidiar con Katana Man, ella vendrá y será una reunión explosiva tanto para él como su pobre corazón,

-... - Denji se mordió su labio intentando no pensar en lo que pudieron haber sido, no sabía como sentirse al respecto, sus sentimientos (o los pocos que tenía) estaban dispersos pensando en su pronta reunión con aquella que puso por momentos su vida de cabezas en muchos sentidos.

Estaba ansioso.

No sabía como reaccionar una vez que él se la encontrase.

-Esto apesta, realmente apesta. – Murmuró Denji para negar y seguir su camino.

Después de todo, serían unos días muy ajetreados para ellos y necesitaban prepararse con todo.

...

Al día siguiente, complejo de apartamentos, Hogar de Aki Hayakawa.

- ¡Ahora pondremos en marcha; plan super duper inteligente! – Exclamaba Power con su cabello atado en una cola de caballo, en su uniforme de devil hunter y lentes de nerd mientras sonreía con estrellas volando alrededor de sus ojos. – Ya puedo sentir el olor del viejo borracho acercándose.

-Aquellos que osan perturbar nuestra placida vida... muerte. – Decía Denji en tono castellano con lentes en sus ojos y descalzo también.

Dentro de él sabía que iban a fallar estrepitosamente como la primera vez, aunque de todas formas quería intentar algo distinto a ver si podía sorprender al viejo Kishibe después de todo, ya que él parecía muerto en alma.

Mientras que eso pasaba, Kishibe con una expresión monótona pero algo fastidiado subiendo las escaleras para ir al hogar de Aki con los animos por los suelos viendo que se le habían acabado los cigarrillos y quería comprar los más antes posible estos.

-Idiotas que flojean en mi entrenamiento. – Decía exasperado Kishibe para ponerse enfrente de la puerta del hogar de Aki, para proceder a tocar el timbre.

Al mismo tiempo que Power formaba una lanza de sangre y con una precisión increíble corrió como una atleta profesional y lanzó esta con una precisión que solo pocos podrían tener, ya que la lanza atravesó el hoyo de la puerta para ver al otro lado, pero Kishibe al sentir que algo no cuadraba y sintió que algo se le venía a la cabeza, inclinó esta de manera rápida para que sus ojos sin sentimientos vieran una lanza emerger de manera violenta de la puerta.

-Oh, un arma de sangre... la maldita me apuntó a la cabeza. – Dijo Kishibe partiendo la lanza para arrojarla al suelo. – Y me tienden una emboscada, ahora me toca a mi ser al que cazan ¿eh~?

Power usando sus poderes de sangre hizo que unos potes de sangre que estaban arriba de Kishibe, se vaciaran de manera tal que arriba de este se formaron puas de sangre para hacerle daño al devil hunter experimentado, pero él predijo esto y destruyó a puño limpio todas las púas que Power hizo con una agilidad monstruosa digna del cazador más poderoso.

Al mismo tiempo Denji saltó de donde estaba con su hacha entre sus dientes para caer en el barandal detrás de Kishibe, el mayor sintiendo la presencia de Denji rápidamente le propinaría una patada pero para su gracia y sorpresa, Denji predijo esto y puso su hacha para bloquear la patada de Kishibe.

-¡HAHA! ¡No me pegaste, maricón-

Mal Denji ¿por qué tenías que abrir la boca? Ya que Kishibe dando una pirueta a lo bestia, le clavó una patada en toda la cara usando su otro pie, pero fue a una velocidad tal que ni el propio Denji ni notó esta, tal patada hizo que sangre saliera de su boca disparada hacia el suelo y el rubio cayó de rostro contra el suelo mientras gruñía e intentaba que las estrellas abandonasen su visión después de la patada.

-Con que eso fueron lo mejor que pudieron haber hecho. – Decía Kishibe sacudiéndose la ropa. – Realmente pusieron a trabajar la única neurona que ambos comparten, al punto de que está tan quemada que no pensaron en lo después.

-Auuuuu... - Se quejaba Denji, Kishibe solo sacó su cantina de su saco para beberla y notar que estaba vacía y se puso un poco triste debido a eso, quería su alcohol, el mundo si era un lugar cruel.

-Pero debo decir que hicieron un trabajo "de mierda decente" dentro de lo que cabe. – Respondía Kishibe mientras guardaba su cantina, la escena cambió a una Power tirada en el suelo con baba saliendo de su boca en un estado algo catatónico. – Power usó demasiada sangre y de seguro está sufriendo anemia en esa habitación y tú Denji, a pesar de que bloqueaste mi ataque, fuiste incapaz de mantener el ritmo... lo hicieron bastante bien, por lo que me iré por un trago.

Sentenció el cazador para irse y dejar solo a Denji en el pasillo mientras que este se reincorporaba.

-Dime que se fue por favooooooooooooooooooooooooooor~. – Exclamaba Power desde dentro del apartamento y el rubio no dijo nada, ya que sin vacilar atrapó como pudo un cuchillo que vino a toda velocidad a su frente.

Aunque atrapó el cuchillo por el filo de esta haciéndolo sangrar un poco, Kishibe reapareció y conectó miradas con un sonriente Denji y sus ojos brillaron de un intenso rojo sangre mientras mostraba sus afilados colmillos.

-Hm, pudiste salvarte de esa, a medias. – Dijo Kishibe para volver a mirar a Denji.

-Seeh, aunque fue un bastardo que me enseñó a nunca confiar en lo que diga el cazador. – Dijo el rubio mostrando sus dientes en una sonrisa tan mórbida y sádica que hizo que por momentos Kishibe sintiera sus labios sonreír de manera tenue.

-Me caes bien, eres lo suficientemente loco para el trabajo, me encanta. – Dijo Kishibe para tronarse los dedos, a lo que Denji sudó frío y ya podía imaginar que Power intentaría escapar dejándolo a su suerte. – Es hora del verdadero entrenamiento.

-Ah mierda.

...

-Buen trabajo, sé que has estado ocupado. – Decía Makima a Kishibe, los dos se encontraban sentados en una larga mesa que los separaba mientras bebían té. – Cuento contigo para que sigas entrenando a Denji y a Power.

Kishibe bebió de su té para luego decir en tono monótono. – Me harté de ellos.

Makima por momentos no supo que responder a eso, pero ladeó la cabeza curiosa para que Kishibe continuase hablando.

-Cada que entreno un perro, este muere, haciendo que beba más y más... pensé que con juguetes no sentiría tanta culpa, pero mi cabeza si se ablandó con tanto alcohol y por la edad, que incluso encuentro sentimiento en los juguetes... - Decía Kishibe mirando a su té fijamente. – Denji... ese nuevo perro tuyo me recuerda de cierta forma a mi en mis años más jóvenes, e incluso por alguna razón a alguien cercano pero no sé porque.

-Ya veo... - Decía Makima, ciertamente hallaba intrigante que Kishibe pudiera decir que Denji se parecía a él de alguna forma u otra, el viejo perro ha perdido de cierta forma la habilidad de decir lo que sentía con el pasar de los años. – Entonces ¿de qué querías hablar?

-La emboscada a la división especial, los de seguridad pública no son idiotas, sabías que esto ocurriría ¿no? – Acusó Kishibe a lo que Makima sonrió.

-Fui victima del asalto también, lo sabes.

-Cuales sean los tratos inhumanos que haces, que mates a mis perros... mientras estés del lado de la humanidad, no veré nada. – Dijo Kishibe seco y con ojos vacíos. – Solo mientras eso sea cierto.

-... Lo que quiero hacer es salvar a cuantos pueda de los demonios, se decidió que, si se cumple esta misión, entonces la 4ta división será ampliamente reconocida junto con sus nuevos integrantes. – Decía Makima viendo a los ojos de Kishibe. – Entonces la 4ta división tendrá más libertad a la hora de operar y así podremos salvar a más personas de los demonios.

Los dos se miraron fijamente por varios segundos, hasta que Kishibe apuntó a Makima con su dedo.

-Mentirosa. – Dijo Kishibe con tono apagado, Makima solo sonrió, ahí Kishibe le hizo otra pregunta. – Háblame de Denji, ese día que fuiste al cementerio con ellos vi reacciones en ti que jamás creí volver a ver.

-...

-Cómo la habilidad de enojarte, siempre creí que eras una marioneta sin sentimientos, pero ese día en el cementerio vi algo que jamás creí ver; expresaste de una forma u otra tus emociones.

-Te imaginas cosas. – Dijo rápidamente Makima para la curiosidad de Kishibe quien vio como ella apretó levemente su taza. – Solo es un perro muy desobediente, eso es todo.

-Es la primera vez que encuentras alguien así ¿no? – Preguntó Kishibe a lo que Makima se quedó viendo su té.

Denji.

Alguien un tanto despreciable, contestón y maleducado entre sus filas no le es de utilidad, pero a pesar de eso, Denji ha demostrado ser alguien que siga ordenes a pesar de quejarse, tenía el corazón del motosierra después de todo, aunque le quedaba unas dudas ¿por qué Motosierra lo escogió a él de todos los seres vivos? ¿Qué había de especial en Denji? Aunque realmente podía ver ya que el joven rubio tenía potencial.

-Nunca... me ha llamado la atención las relaciones entre humanos. – Murmuró Makima viendo a la nada. – Y Denji me saca mucho de quicio (en la gran mayoría de veces), aún me debe respuesta a algo y es a veces muy simple... pero no sé que más decir de él, lo único que sé es que siento cierta curiosidad hacia él después de todo.

Kishibe vio como Makima bufaba al recordar de seguro una discusión que habrá tenido con Denji, él escuchó decir de alguien en la 4ta división que cuando Denji y Makima discutían, parecían una pareja de casados peleando, siendo franco le sorprendía de sobremanera ver a al siempre enigmática y sádica de Makima tener este tipo de reacciones.

Es lo más humano que ha visto de la mujer en años que la lleva conociendo.

Aunque había algo en su mente que no pudo evitar pensar en cuanto a Denji y su situación con Makima.

"Muchacho, no sé si sentir admiración o pena ya que Makima tiene sus ojos bien puestos en ti" Pensó Kishibe suspirando, no había hora para que él pudiera ir a tomar alcohol y fumarse una buena cajetilla de cigarrillos.

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Centro de la ciudad, en una cafetería.

-Entonces irás a una misión peligrosa. – Dijo Aoi tomando un sorbo de su café con leche.

-Algo así. – Decía Denji devorando las galletas como si fuera un animal, Aoi miró eso con una sonrisa chueca ya que el rubio estaba llamando mucho la atención. – Eso es hoy al mediodía, por lo que te recomiendo que estés en casa o algo así ya que la pelea no será gratificante para nada.

-Pues gracias por las advertencias. – Dijo Aoi para luego mirar preocupada al rubio. - ¿Seguro que estarás bien?

-Seeh, me han sucedido cosas peores. – Dijo Denji restándole importancia a lo que pasaba.

Aoi frunció el ceño. – Aún así debes de tener cuidado, es más, ten...

Denji parpadeó cuando sintió que ella tomaba de su muñeca derecha y amarraba algo alrededor de esta, miró con curiosidad un lazo azul amarrado de manera suave alrededor de dicha muñeca, sintió como Aoi pasaba sus dedos por toda esta hasta tomar la mano de Denji y pasar sus dedos por los callos de la mano del rubio haciéndole algo de cosquillas en un principio.

-Estas manos me salvaron la vida, por lo que te daré uno de mis objetos más preciados; mi lazo de la suerte, siempre lo llevo conmigo a todo momento. – Sonreía Aoi. – La llevo desde que era adolescente y tengo buenos recuerdos de este, pero ya creo que es hora de darle suerte a alguien que verdaderamente lo necesitará ¿no crees?

-... - El rostro de Denji hizo una mueca, su corazón por momentos se detuvo para luego empezar a latir de manera lenta. – No tienes que porque darme esto.

-Pero lo haré. – Dijo Aoi sonriente mientras se levantaba y veía a Denji con una sonrisa de par en par. – Eres como el hermanito que nunca tuve Denji... realmente te aprecio.

-Dejar de decir cosas vergonzosas. – Murmuró Denji avergonzado con las orejas rojas como un pimentón, Aoi sonrió de oreja a oreja y procedió a abrazar al rubio, él hundió su rostro en el hombro de la joven secretaria quien le desordenaba los cabellos de manera feliz y reí, en una muestra de afecto que hacía que el chico tuviera un sinfín de emociones positivas.

Más de las que alguna vez sintió en su vida.

-No en serio ¿por qué te relaciones conmigo? Soy un demonio y tú una humana...

-Demonio o no, para mi solo eres Denji y nada más.

Aoi realmente era una mujer magnifica.

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De camino a la base de la SP, Al mismo tiempo.

En el auto de camino a la base de la SP, Kurose se encontraba conduciendo mientras que Tendou veía a la ventana con mucho desinterés a pesar que era cuestión de horas que la operación para atrapar a Akane y Katana Man iba a ponerse en marcha.

-Estoy seguro que no los volveré a ver; después de todo Tendou ya fue transferida a la 4ta división. – Dijo Kurose sonriendo a su compañera quien lo ignoró. – Y cómo sé que no nos volveremos a ver, chico emo ¿te puedo hacer una pregunta?

-...

-Escuché que van tras el Demonio Pistola ¿en serio creen que lo pueden matar? – Preguntó sincero Kurose con los ojos en el camino.

-Perdiste contra un tipo cuya organización erradicó a casi toda la 4ta división, ¿y crees que puedes contra algo que mató a millones en cuestión de meros segundos? – Preguntó Kurose ante el silencio de Aki. – Honestamente, yo y Michiko nos unimos a la división debido a nuestro resentimiento contra el Pistola, pero no tenemos realmente ilusión de matarlo (aunque Tendou se unió a ustedes), y si solo lo piensas en una locura total, cuando te veo me fastidias un poco, eres jodidamente débil y aún así quieres ser el estereotipo de héroe manga, me da escalofríos ¿ves Michiko? Tengo la piel de gallina.

-No tienes nada, idiota. – Bufó Tendou fastidiada de lo parlanchín que estaba Kurose.

Aki se quedó pensando su respuesta, iba a responder de mala gana, hasta que se acordó de un cierto pibe de la motosierra y una cierta demonio sangre que habitaban en su humilde de hogar en estos momentos.

-Si, creo que si lo mataremos. – Dijo Aki a lo que Kurose lo miró por el espejo del auto. – Tenemos a algunos de los Devil Hunters más voraces que he visto en los últimos años, sangre fresca si puedes así decirlo, sé que tienen una visión de mi y no me molestaré en cambiarla, pero nunca antes en tantos años que llevo haciendo esto me sentía así de positivo.

-Huh, eres un desquiciado total. – Reía Kurose y sonrió de oreja a oreja.

Kurose estacionó el auto frente a la base de la SP, Aki salió del auto para ir caminando a la base sin mirar atrás. – Gracias por la guía-

- ¡Atrapa! – Aki sorprendido atrapó un refresco en lata que le arrojó Kurose, una Coca-Cola.

-No me caes bien ¡Pero te estaré animando! – Señaló Kurose y sonrió de oreja a oreja. – Nunca había conocido a un sujeto como tú, pensar de manera fuerte que si pueden matar al Demonio Pistola y por alguna razón no puedo evitar que puede ser así... ¡Así que suerte, Aki Hayakawa! La necesitarás.

Aki parpadeó unas cuantas veces hasta asentir y hacer una leve reverencia al auto que se perdía entre los demás autos de la calle, ya no había tiempo que perder.

Era hora de iniciar la operación "ATRAPAR A KATANA-MAN".

...

En las afueras de la ciudad.

-Invitados de la SP, déjeme traerle un buen té. – Dijo el líder de un grupo local criminal a Makima quien estaba sentada en sofá frente al líder con varios sujetos viéndola con distinto tipos de miradas desde unas lascivas hasta unas con repugna.

-Muchas gracias por su cooperación. – Dijo Makima sonriente y sin inmutarse.

-Algunos de nuestros jóvenes estuvieron involucrados en un tiroteo en Tokyo, podré responder a lo que pueda. – Decía el líder algo apenado, aunque no lo demostró. – Pero quiero que entiendan que no fue bajo mis ordenes, por lo que oí Akane Sawatari es quien está moviendo los hilos de toda esta operación macabra con el Demonio Pistola, ella engañó a nuestros jóvenes para hacer un contrato con este último.

- ¿Los detalles del contrato?

-A cambio de pagar 20,000 yenes ($150,14 americanos), los contratistas recibirán armas y balas. – Respondió el líder. – Que los demonios también necesiten dinero... supongo que no nos hacen tan diferentes uno del otro.

-Me gustaría que escribieras los nombres de todos en tu organización que hicieron el contrato con el Demonio Pistola.

-Oooh, claro, envíelos a una prisión para que piensen lo que hicieron.

-No entiendes, también quiero nombres de otros grupos. – Makima se quedó viendo al líder quien suspiró fastidiado.

-Mujer ¿acaso no entiendes? Eso causaría una guerra sin precedentes entre las familias. – Murmuró el líder mientras prendía un habano.

-Ya estamos en una guerra de todas maneras, un poco de su colaboración no vendría mal. – Dijo Makima sin mostrar emoción alguna, sus ojos brillaron más fuerte. – La seguridad de las personas es nuestro objetivo.

-... ¿Acaso has escuchado del termino "males necesarios"? No nos las pasamos destruyendo a otros grupos yakuza, no somos nadie para mostrar de ejemplo, grupos de China y Rusia hicieron cosas peores que nosotros, no somos así, así como ustedes protegen a las personas de los demonios, nosotros protegemos a los japoneses de los extranjeros. – Rio el jefe mientras fumaba de su tabaco. – Supongo que es normal entre los Devil Hunters, son idiotas con verdadera educación.

Makima escuchó las risas de los demás sujetos detrás de ella al igual que el del líder, ella suspiró levemente, realmente no quería llegar a esto, pero bueno, no todo sale como uno quiere como que uno dice.

Ella sacó de la parte de debajo de la mesita una bolsa de papel y la puso en ésta, el líder vio la bolsa con curiosidad y bufó. – No venderé a mi familia por una miseria.

-No es dinero... - Dijo Makima y el aíre de repente se puso pesado, era tan asfixiante que el líder se puso rígido al igual que los demás hombres detrás de la mujer. – Realmente si quería su cooperación, estas personas que intentar proteger de todas formas atentaron contra personas de nacionalidad japonesa, por lo que me dices no tendría mucho sentido ¿o sí? Sé que los yakuza son conocidos por su lealtad ante todo, son iguales a unos perros...

-Tch, ¿a qué quieres llegar?

-Lo que quiero decir es que tomaré cualquier medio para que mis objetivos nunca se vean interferidos por personas como tú. – Dijo Makima y sonrió, haciendo la escena más tenebrosa ya que sus ojos amarillos con espirales no cerraron en ningún momento. – El mal necesario del cual habla es una simple excusa para justificar las cosas malas que hacen... la nación normalmente toma los males necesarios y les pone una correa corta.

-... - El líder no paraba de ver la bolsa, sus ojos estaban dilatados y sudaban frío, sus palabras no salían de él.

-Padres, madres, hermanos, hermanas, abuelos, abuelas, amantes, esposas... son sus ojos. – Dijo Makima haciendo callar todo sonido y sonrió de manera simple pero con un aura tan asesina que hizo por momentos que las ventanas se agrietaran de fuerte intensidad que rodeaba a la pelirroja.

Desde fuera de la casa donde estaban, los gritos y disparos se hicieron en el lugar asustando a los pocos pájaros que estaban en los árboles.

. . . .

FIN~.

DEJEN SU VOTO Y OPINIÓN~.

Pd: El próximo capitulo será el fin de Katanas y Motosierras que llegaría a 5 partes como tal, bien aquí es donde la mierda se pone seria y ya en el próximo también se aclarará quien formará parte de la nueva 4ta división.

Me ha sido un tanto complicado escribir a Makima porque es alguien tan despreciable que no me siento tan cómodo de escribirla, pero mierda como es una de las mejores personajes que ha parido la vida porque carajo, Fujimoto eres dios por crear a Makima (no, no soy simp de Makima, solo alabo lo buen personaje que es ella).

Ah, mañana inscribo semestre para comenzar de manera oficial el 27 de marzo T_T, deséenme suerte que odio esta vaina.

Pd2: Sé que no es un capitulo taaaaaaaaaaaaaan entretenido, pero sigue la linea que quiero armar y tal.

Pd3: Me causa gracia que algunas personas me han comentado que les gustan mucho las interacciones de Denji y Makima, es que es tan divertido de hacerlas XD, me alegra bastante que les haya gustado, hasta un punto realmente no sabía que hacer para que la relación de ellos fuera "distinta" a lo que tuvieron la primera vez.

Imagen del día:

Sin más que decir, nos vemos~.

https://youtu.be/qrKkf9Riywo