Capítulo 3

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-Nos iremos a una antigua casa en el bosque, no está tan lejos de esta casa pero no irán a buscarnos allí, además solo será temporal-Dijo Elizabeth.

-¿Oh ya veo entonces cuando nos iremos?-Pregunto Akira.

-¿No te lo dije?-Preguntó Elizabeth.-Nos iremos en la madrugada-

-Entonces....¿me llevarás contigo?-Menciono Akira.

-Claro que sí-Dijo Elizabeth.-Bien pruébate este vestido-Le dijo extendiendo el vestido.

-Ve a tu cuarto y pruébate el vestido- Menciono Elizabeth

-Ok-Dijo sonriendo Akira.

-Fugu-Mencionó Elizabeth.

-Woof-

-Tú cuidas la casa, si viene alguien, muerde-Dijo Elizabeth acariciando a su mascota.

Al salir Akira esta estaba viendo su vestido.

-Te queda bien-Menciono Elizabeth.

-Gracias-Dijo Akira volviendo a sonreirle.

-De nada y pronto tendras que ir al pueblo a buscar lo necesario- Dijo Elizabeth.

-Está bien-Dijo sonriendo Akira.

-Mientras tanto desayuna-Menciono Elizabeth.

-Ok-Dijo Akira.

Ya en la mesa mientras Akira y Elizabeth desayunaban , Akira pregunto algo repentino.

-Elizabeth-Menciono Akira.

-Diga-Dijo Elizabeth

-Porque me aceptaste en esta casa y no ... ¿Me excluyes?- Pregunto cabizbaja Akira.

-Simple al solo verte por primera vez y ver lo lastimada que estabas me recordaste a mi cuando más pequeña-Dijo Elizabeth.-Supuse que te maltrataban mucho y no eras apreciada tal y como eras en realidad.-Volvió a decir Elizabeth.

-Entonces me acogiste porque me tuviste pena-Dijo Akira.

-No-Nego Elizabeth.

-¿Entonces porqué?- Pregunto Akira

-Porque vi una luz en ti de esperanza que casi nadie la tiene y sabiendo eso sé que podrías reconfortarte rápido así que no dejaré que nadie te lastime para que esa luz no se vaya-Le dijo sonriendo Elizabeth.

-Gracias-Dijo Akira.

-No tienes que agradecerme y además por fin ya no estaré sola-Mencionó Elizabeth.

-Sí-dijo sonriendo Akira.

Ya en el anochecer empacaron y Akira tenía que buscar un poco de comida.

-Bien cuidate y no hables con nadie-Dijo Elizabeth.

-Ok-Dijo Akira.

Ya al salir Akira para el pueblo estuvo alerta.

-[Es curioso ver como los humanos venden sus esfuerzos para poder vivir,que vida mas miserable]-Dijo Akira en su mente.

-[Bien, Elizabeth me dijo que comprara verduras]-Menciono Akira mentalmente.

-[Bueno allí venden verduras]-Mencionó en su mente esta misma.

-Buenas señor- Dijo Akira.

-Qué necesita señorita-Dijo el señor.

-¿Me puede dar un poco de esto?-Pregunto Akira mientras señalaba unos tomates y lechuga.

-Claro-Mencionó el señor.

Después de que Akira comprara las verdaduras y cinco manzanas, volvio a la casa.

-Ya llegué!-Dijo Akira.

-Bienvenida-Menciono Elizabeth.

-Compré lo que me dijiste-Mencionó Akira.

-Bien dame eso lo pondré en la cesta más grande-Dijo Elizabeth cogiendo la pequeña cesta.

Ya estando Elizabeth en la cocina.

-Emmm Akira porque compraste manzana?-Dijo Elizabeth.

-Bueno a mi me gusta y había sobrado dinero-Menciono Akira.

-Aa ya ,entonces esta bien también me gusta la manzana-Dijo Elizabeth.

Mas tarde cuando eran cerca de las 9 de la noche apagaron las luces para disimular que allí se duerme.Cuando ya era las 2 de la mañana salieron de allí en camino para casa.

-Aquí es-Dijo Elizabeth.

-Wao-Mencionó Akira mientras miraba la casa.

Ya cuando entraron en la casa esta estaba en mal estado así que empezaron a buscar materiales para poder ponerla bien o por lo menos disimunable para los curiosos.Akira vio un conejo lastimado y...

-Como estas pequeñín? -preguntó Akira.

El conejo emitió un chillido.

-Asi que fue él-dijo seria.

-Bien te desataré- dijo Akira.

Al desatarlo lo llevo junto a Elizabeth que estaba consiguiendo troncos.

-Eli.....Como tienes tanta fuerza!-Dijo Akira.

-Shhhh si alguien pasara por aqui que pensarían-Aclaró Elizabeth.

-Bueno despues si quieres me dices el porque de tanta fuerza, pero necesito que me ayudes-Dijo Akira.

-Está bien-Dijo Elizabeth.

Elizabeth dejó los troncos al frente de la casa y siguió a Akira.

-Puedes ayudarlo-Le preguntó Akira a Elizabeth señalando al conejo.

-Sí-afirmó Elizabeth.

En eso llegó Fugu que estaba dormida en una cesta especial para ella, esta al saber que tendría una madrugada entera se echó una siesta.

-Fugu llegas en el momento indicado, en la cesta hay vendas, traeme un rollo y un poco de alcohol-Le ordenó a su mascota.

-Woof-Ladró Fugu.

Cuando por fin Fugu trajo las vendas y pudieron curar al animal siguieron en su misión de reconstruir la casa. Al terminarla acomodaron todo.

-Las luces la ponemos?-Preguntó Akira.

-No-Dijo Elizabeth sacando los alimentos.

-Bueno está bien-Menciono Akira.

Al terminar amaneció rapido llevarse toda la noche haciendo todo es cansado.Al paso de los días los guardias estaban en busca de ella pero para la mala suerte de una chica a esta mujer la llevaron al castillo.

Era ya de noche

-Dios santo ese rey sí que es caprichoso-Menciono Elizabeth.

-Sí-Dijo mientras tomaba un poco de cafe.

-Qué milagro que todavía tengamos comida-Menciono Akira.

-Mjm-Dijo Elizabeth.

-Pronto volveremos a la casa-Dijo Elizabeth.

-Respecto a ella ...nadie robó?-Dijo Akira.

-No-Nego Elizabeth.

-Cómo lo sabes?-Pregunto Akira.

-Bueno he mandado a Fugu allá y-Se detuvo Elizabeth.

-Woof Woof Woof Woof Woof!!-Ladraba Fugu.

-Fugu-Dijeron Elizabeth y Akira al unísono.

Akira se transformó y salió corriendo hacia de donde venía el sonido mientras en su lomo tenía a Elizabeth montada.

Al llegar era...

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