3

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Space unicorn, soaring through the stars...

—Marco, te están llamando por teléfono.

Delivering the rainbows all around the world...

—Marco, mira, es Jackie.

Star se acercó al móvil de su mejor amigo, que se hallaba tumbado en el frío suelo de su habitación, con la mirada clavada en algún punto del techo.

Space unicorn, shining in the night...

La rubia suspiró y observó el teléfono sobre la mesita de noche, vibrando con la pantalla mostrando el nombre de Jackie bajo una imagen de ella.

—Lleva días intentando contactar contigo. Deberías responder.

—Déjame en paz, Star —gruñó Marco—. No me apetece hablar con ella.

Smiles and hugs fore--...

El aparato quedó en silencio de golpe. La pantalla se apagó, dando a entender que Jackie había dejado de intentar llamar a su ex novio.

—Ni con ella ni con nadie, por lo que veo. No has salido de casa en dos semanas. —Star se tumbó junto al castaño, mirando también al techo—. Tienes que volver al instituto, a quedar con tus amigos. Tus padres están preocupados.

—La única persona con la que necesito hablar eres tú.

Marco entrelazó sus dedos con los de Star, que cerró los ojos mientras se mordía el labio inferior.

—No es cierto. Ni siquiera soy real.

—¿Acaso eso importa?

—Claro que importa.

Los dos giraron sus rostros para poder mirarse a los ojos. La mirada de Marco era ahora más cansada y apagada que antaño, y estaba terriblemente pálido. Parecía enfermo.

Marco acarició la mejilla de Star. Ella sólo siguió mirando a su amigo.

—¿Por qué te estás haciendo esto? —murmuró.

—Porque te quiero.

—Eso no es una respuesta válida.

—Te quiero, y necesito tenerte a mi lado.

El castaño besó a Star. Parecía tan real...

—Pues hay gente que te quiere y te necesita a su lado ahí fuera —respondió la chica una vez hubo separado sus labios de los de Marco.

—Creo que pueden sobrevivir sin mí.

—¿Es que tú no puedes sobrevivir sin mí?

Marco sonrió con nostalgia, y sin responder, volvió a besarla. Besar y abrazar al aire era lo único que hacía desde que Star había muerto.

—No puedo —dijo finalmente—. Por eso te quedarás conmigo para siempre. Estaremos juntos hasta que la muerte nos separe, como en el matrimonio.

Star sonrió ante aquella broma, pero dos lágrimas ya empezaban a brotar de sus ojos.

—Marco... —susurró— La muerte ya nos separó.


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro