Capítulo #27

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

El fin de semana Janna y Tom fueron a visitar al empresario para ver como seguía. De acuerdo al parte médico, David ya estaba listo para ser dado de alta. Al momento de encontrarse con su hijo y su novia, David ofreció una disculpa a ambos, cosa que Janna aceptó aunque su molestia no se aplacó en su totalidad. Estuvieron conversando durante un rato intercambiando puntos de vista y uno que otro desacuerdo sobre la forma de ser del padre del foráneo. Cuando regresaron a los departamentos, Tom empezó a buscar en internet un vuelo para su padre, ya que él deseaba regresar a Rumania lo más pronto posible y saber de la condición de su esposa en persona; también quería hablar con ella y ofrecer una disculpa por todo lo que había sucedido en todos esos años donde dejó de lado a su familia para enfocarse en la empresa. Mientras tanto, Star y Marco, quienes estaban revisando algunas notas de la escuela en el comedor de sus vecinos, empezaron a conversar.

Marco: ¿Cómo vas con el proyecto?

Star: Bien, ya casi lo terminamos.

Marco: ¿Raúl no te ha dado problemas?

Star: Para nada; ha resultado ser mejor de lo que esperaba para esto.

Marco: Ya veo.

Star: Por cierto, me contó que pronto publicarán algo sobre un simposio de ciencias médicas.

Marco: ¿Cómo es que se enteró de algo así?

Star: Me dijo que su primo le contó.

Marco: Mmmmmmm.

Star: ¿Sucede algo?

Marco: Es solo que la última vez que nos topamos con Roy...

2 días antes

Marco: ¿Ya lo darán de alta? Es una buena noticia.

Tom: Así es, hermano; será este lunes que viene.

Marco: ¿Y qué has sabido de tu mamá?

Tom: Aún continua hospitalizada pero me dicen que está estable; no tengo de otra sino confiar en lo que me dicen por teléfono.

Marco: Es una pena que esté en esta situación.

Tom: ... Yo solo espero que todo esté bien.

Los 2 amigos estaban a la espera de que las chicas salieran de la facultad. En eso Marco vio a Star hablando con Raúl, Claudia y Roy, quien ya había regresado a clases después de su accidente. Los 3 se estaban acercando cuando Star vio a Marco y corrió para saludarlo con un beso lleno de amor.

Star: Hola amor.

Marco: Hola preciosa.

Tom a la distancia sonreía al contemplar lo felices que se notaban sus amigos al verse para después apuntar su mirada hacía Roy y chocar con la mirada del actual novio de su ex. Los ojos de Roy mostraban algo bastante fácil de identificar: enojo, uno bastante grande. Un instante después, los primos apuntaron sus miradas brevemente hacia la pareja de novios.

Roy: (Solo espera maldito y verás)

Raúl: (Yo soy mejor hombre para ti, Star)

Fue entonces que en un gesto de cortesía, Marco saludó a los primos y a la chica para solo recibir una respuesta seca de parte de Roy.

Marco: Hola a todos.

Roy: Díaz.

Claudia: Vamos amor.

Roy: Está bien. Vamos, primo.

Raúl: ...

Marco: Es bueno saber que ya estás bien.

Roy: (Como si de verdad te importara) Así es. Hasta luego.

En el presente

Marco: Parecía estar enojado conmigo.

Star: No le des importancia. ¿Qué me dices de tu nuevo trabajo como... tutor de tu amiga?

Marco: Pues parece ser que ya quedó todo comprendido así que puedo decir que ya terminé.

Star: Que bueno.

Janna: Lastima, quería utilizar tu cuerpo sin vida para diseccionarlo.

Marco: ¿Qué te pasa?

Janna: Sabes bien que si andas detrás de otra chica...

Marco: No tienes que recordármelo todo el tiempo.

Star: Janna, ya es suficiente.

Janna: Está bien, está bien; solo era una broma.

Marco: (A mi no me lo pareció) Por cierto, dinos lo que sabes de ese simposio.

Star: Cuando regrese Tom les cuento bien a todos. ¿Qué vamos a comer, Janna?

Janna: Hice algo más sencillo, espero que sí haya quedado bien esta vez. Deja voy por ellos.

Unos instantes después Janna trajo un plato con varios sándwiches; en ese instante Tom estaba entrando al departamento y les contó a sus amigos que todo estaba bien en el hospital con su padre y que lo llevaría al aeropuerto el martes. También les contó que el negocio de una forma u otra pudo concretarse en su habitación de hospital, lo cual tenía más calmado a su padre. Fue entonces que Star empezó a contarles a todos lo que sabía sobre aquel evento al tiempo que todos comían un sándwich.

Star: Bueno, lo que sé es que es un evento bastante grande organizado en conjunto por la UNAM, el IPN, el Tecnológico de Monterrey y la Universidad Autónoma Metropolitana.

Janna: Wow. Para que se unan las 4 universidades es que se piensan tirar la casa por la ventana.

Marco: Suena bastante bien.

Tom: ¿Dónde y cuándo va a ser?

Star: Tengo entendido que sería o en el campus del Tecnológico de Monterrey en Toluca o en el Centro de Convenciones de Toluca. Y sería a mediados o finales de marzo.

Janna: ¿Hasta allá?

Marco: Pues no se me hace tan lejos.

Tom: Como no he estado por allá...

Star: Pero solo les digo lo que sé. Se supone que estarán publicando un aviso para aquellos que quieran inscribirse.

Marco: A mí sí me interesa.

Janna: A mí también. De hecho les mandaré un mensaje a mis padres para avisarles.

Tom: Yo también voy.

Star: Bien, iremos todos juntos.

Marco: Será interesante ver a futuros colegas de las otras escuelas.

Lo que Marco y los demás es que alguien a quien no habían visto desde diciembre pensaba acudir para divertirse. Además, aun conservaba a su contacto en la UNAM para que le informara si aquel chico castaño acudiría al evento.

???: Ya solo falta que lo hagan oficial. Te espero acá, Marco; verás que te haré gozar mucho más que esa chica rubia.

Los días pasaron rápido, los 4 amigos fueron a ver al padre de Tom quien agradeció todas las atenciones recibidas por parte del personal médico del hospital. Después de eso, se dirigieron al hotel que aún mantenía las cosas del empresario en la habitación que estaba ocupando para dejarlo descansar. Por petición de David, Tom y los demás fueron al aeropuerto a recoger el boleto de avión que lo llevaría, previa escala en Madrid, de regreso a su país. Y por fin llegó el día en que David regresaría a Rumania. Esa mañana Tom fue a ver a su padre al hotel.

Tom: Padre.

David: Hijo, pasa por favor.

Tom: ¿Todo listo?

David: Solo traía una maleta pequeña, nada que estorbe mucho.

Tom: Esta bien, me la llevo entonces.

David: Antes de eso quiero hablar un momento contigo.

El hombre de negocios se sentó en la cama y pidió a su hijo que también lo hiciera. Fue entonces que se dio una charla que era necesaria entre ellos.

David: Hijo... lamento mucho todo lo que ha sucedido entre nosotros todo este tiempo; sé que perdí muchas cosas y no será posible recuperarlas pero espero me des la oportunidad de formar parte de tu vida a partir de este momento.

Tom: Descuida. Solo te pido que trates muy bien a mamá y que ya no la hagas sufrir.

David: Es lo menos que quiero que suceda. Por cierto, tu novia es bastante temperamental, aún recuerdo aquel golpe que me dio para defenderte.

Tom: ¿Qué puedo decirte? Tiene su carácter pero así la quiero y mucho.

David: Eso es bueno, hijo mío. Y quiero que sepas que no importa el camino que hayas elegido siempre que estés satisfecho y sobre todo contento con él. Y cuando haya problemas, respáldate con tus amigos, los cuales se nota que te aprecian bastante.

Tom: Así es; y yo a ellos.

Fue entonces que padre e hijo se armaron de valor y se dieron un abrazo que terminó por romper aquel muro que se había formado entre ellos por culpa del padre y su necedad de imponer todo a su voluntad. Al parecer el haberse enterado de que su esposa estaba grave, su experiencia cercana a la muerte y el hecho de que su hijo y la chica pelinegra lo ayudaron pese a lo sucedido lo hicieron reflexionar lo suficiente para hacerlo cambiar un poco su perspectiva y abrirse a tratar con las personas y sobre todo aceptar puntos de vista diferentes al suyo. Ambos se separaron, Tom fue por la maleta de su padre para después irse con rumbo al aeropuerto. Y estando ahí se despidieron con un apretón de manos y un abrazo sincero entre ambos.

Tom: Ten mucho cuidado.

David: Tu también hijo mío.

La semana pasó sin muchos inconvenientes: Marco continuaba haciendo de tutor de Jackie y a veces de Tom y Violeta, que no se despegaba de Tom en ocasiones; Star y Raúl trabajaron para dejar listo ese trabajo en equipo aunque había ocasiones en que el chico le coqueteaba con descaro a la rubia; Janna y Gustavo se la pasaban hablando cada vez más y riéndose de anécdotas que se contaban del tiempo que no convivieron en el pasado.

El fin de semana, la chica de cabello oscuro y ojos azules nuevamente satisfacía sus deseos carnales en departamento de un alumno de primer año de Economía, el cual sucumbió rápidamente ante los encantos de la hermosa chica.

???: Aaaahhh... aaaahhh... aaaahhh...

Violeta: No me digas que ya te cansaste.

???: Aaaahhh... aún puedo... ¿ y tú?

Violeta: ¿Bromeas guapo? Solo llevamos 3 y apenas estoy calentándome.

???: Pues.... aaaahhh... sigamos entonces...

Violeta: No te contengas.

El chico sacó fuerzas de flaqueza y cumplió con la orden de la chica que, a pesar de sentir placer, seguía con la mente en otro lado.

Violeta: (Tu amigo se me escapó por culpa de esa güera, pero tú no Tom... quiero que me sientas... quiero hacerte mío...) Aaaahhh... Aaaahhh... Aaaahhh... ¡Más profundo! ¡Aaaahhh!

Y en aquel edificio que ayudaron a reparar los 4 amigos...

Jackie: No... el ya tiene novia... pero esto que siento por él... ya no es solo atracción física. Se ha vuelto un verdadero caballero, es muy listo y amable. Sigue conservando esa tenacidad que tanto le admiré cuando éramos niños. ¿Habría sido diferente si me hubiera dicho lo que siente? Bueno, de nada sirve pensar en eso. Podría intentarlo, pero sería faltarle al respeto; mejor sigo como hasta ahora (Vaya que eres afortunada, Star. Te sacaste el premio mayor de la lotería con Marco).

Y por fin inició el mes de marzo y con el llegaba una de las cosas que más odian los estudiantes de todos niveles: los exámenes. Tom, para no varias, estaba sufriendo con la entrega de trabajos previos a las evaluaciones, Janna entregaba las cosas a duras penas mientras que Star y Marco cumplían sin muchos inconvenientes. Todo estaba marchando bien para todos en sus respectivas clases; pero el jueves de esa semana pasó algo grave en las instalaciones de la Torre de Rectoría.

Star: Ufff, por fin.

Janna: No se cómo libramos esta tortura; cada vez es peor todo esto.

Star: No hagas drama. Ahora vayamos a esperar a los chicos para irnos a comer.

En eso entró una llamada al teléfono de la rubia, se trataba de Marco.

Star: Hola Marco.

Marco: ¿Janna está contigo?

Star: ¿Qué sucede? Suenas alterado.

Marco: Dime si esta Janna contigo.

Star: Sí, ¿Por qué?

Marco: ¡Regresen de inmediato a su facultad y no salgan!

Star: Me estas asustando, Marco. ¿Qué te pasa?

Marco: ¡Háganlo rápido!

Fue entonces que se alcanzaron a escuchar a la distancia un par de explosiones, las cuales alarmaron a todos los que estaban saliendo de la facultad de medicina y a otros que iban pasando por ahí ya sea caminando o en algún transporte. Las chicas de inmediato corrieron para resguardarse. La rubia aun mantenía la comunicación con su novio.

Star: ¿Qué está pasando?

Marco: ¡Los porros están tratando de entrar por la fuerza a Rectoría!

Star: ¿Dónde estás? ¿Tom está contigo?

Marco: Estamos bien aunque encerrados en la facultad.

Estando cerca de la entrada del imponente edificio, Gustavo recibió a las chicas y las llevó con él al interior; ahí se toparon con Raúl y Claudia, quienes se notaban alterados por lo que estaba pasando. Star continuaba hablando con Marco para saber lo que sucedía mientras que Janna se quedó hablando con Raúl y Gustavo; Claudia solo se alejó.

Raúl: ¿De dónde vino esa explosión?

Janna: Parece ser que viene de Rectoría.

Gustavo: ¿Es que están locos? ¿Cómo se les ocurre usar bombas?

Janna: No creo que sean bombas de esas que tú te imaginas. Más bien deben ser bombas molotov.

Gustavo: ¿Y qué quieren hacer con eso?

Janna: Causar desmanes y asustar a todos. No se me ocurre alguna otra cosa.

Raúl: Alguien debería matarlos, así...

Janna: ¿Estás loco? Mejor cállate si no vas a decir algo inteligente.

Gustavo: ¿Y que espera la policía para hacer algo? ¿Tienes idea de quién pudo hacer algo así?

Janna: Seguro son los porros de CU.

Mientras permanecían en resguardo, en el emblemático edificio se estaba dando una batalla campal entre policías de la ciudad y un grupo nutrido de manifestantes quienes exigían ver al rector de la institución para pedir la destitución de un par de profesoras que fueron acusadas de tener relaciones intimas con estudiantes de nivel preparatoria, así como pedir que se esclareciera el asesinato de 2 estudiantes, uno de preparatoria y una de la facultad de Filosofía. La pelea fue muy violenta, ya que los porros iban armados con algunos machetes y bombas molotov mientras que los policías eran superiores en número. Pasó cerca de una hora para que todo se calmara y se permitiera la salida a los estudiantes de las facultades; Marco y Tom llegaron rápido a la facultad de Medicina para asegurarse de que todo estuviera bien con Star y Janna.

Marco: ¡Star!

Star: Marco, acá estamos.

Cuando se encontraron, cada pareja de enamorados se fundió en un cálido abrazo con el cual se fueron apaciguando aquellos sentimientos de angustia y miedo derivados de la horrenda situación.

Tom: ¿Están bien?

Janna: Ahora lo estamos.

Star: ¿Qué pasó?

Marco: Parece ser que hubo otra "manifestación" de los porros.

Janna: Pues sí que saben causar miedo.

Star: ¿Qué querrán ahora?

Tom: Ni la mas mínima idea; pero eso ahora es lo de menos. Creo que tendremos que salir por otro lado para evitar algún problema.

Star: Denme un momento.

Marco: ¿A quién llamas?

Star: A Melissa.

Mientras tanto, en el Eclipse

Melissa: ¿Ya habrá pasado?

Jaime: Y tan bien que estaba el día.

Emilia: No podemos hacer mucho ahora, mi amor. Confiemos en que vengan más personas en la tarde.

Jaime: Ojalá.

Melissa: (Es Star) ¿Hola?... Sí, estamos todos bien ¿Qué hay de ustedes?... Es bueno saberlo... No, por este lado no... De acuerdo, tendremos mucho cuidado... Si, los esperamos mañana... Claro, y les digo... Saludos a todos... Vayan con mucho cuidado.

Emilia: ¿Todo bien, mi cielo?

Melissa: Sí mama, era Star para saber como estábamos.

Jaime: ¿Cómo están ellos?

Melissa: Me dice que todos están bien pero que tengamos mucho cuidado porque hay porros.

Emilia: ¿Cuándo llegará el día en que los detengan a todos?

Jaime: No lo sé, amor.

Melissa: Por ahora ya pasó todo. Creo que es mejor que estemos pendientes por si viene alguien.

Emilia: Esta bien.

Ya estando en los departamentos...

Star: Solo espero que no se repita esto otra vez.

Marco: Yo también.

Star: Voy a hacerme un café. ¿Te preparo uno?

Marco: Por favor, cariño.

Star: Por cierto, ¿ya hablaste con tus padres sobre el simposio?

Marco: Ya lo hice; solo espero a que salga todo lo relacionado con los costos para avisarles. ¿Qué hay de ti?

Star: Al principio mi mamá no quería que fuera pero terminé por convencerla. ¿Crees que podamos ir y regresar?

Marco: Ese tipo de eventos no duran un solo día o eso es lo que me cuenta mi mamá.

Star: Entonces tendríamos que ver donde quedarnos.

Marco: Pero todo depende de cómo esté organizado el evento. Tenemos que esperar un poco.

Star: Bueno. Ya está listo.

Marco: Gracias.

Star: ¿Y los exámenes?

Marco: Todo bien, pero fue más difícil de lo que esperaba.

Star: Supongo que esas veces que ayudaste a Jackie te sirvieron para repasar.

Marco: Pues sí. Igual a ti cuando te quedabas con Raúl.

Star: Jejeje.

Marco: Y como premio...

Star: ¿Un premio? ¿Qué me vas a dar?

Marco: Cierra los ojos.

La rubia, quien se emocionó al escuchar que le darían un premio, hizo caso a la petición de su novio y cerró ambos ojos; el castaño se acercó a su novia y le dio un beso lleno de amor para después de un minuto separarse de ella. La chica quedó con ganas de más.

Star: Ah, no. Fue un premio muy pequeño y como estudié mucho merezco uno más grande.

Marco: Tú lo pediste.

El castaño tomo de las manos a su novia y le ayudó a ponerse de pie para después abrazarla con cariño y luego unir sus labios a los de ella. Poco a poco el momento se fue volviendo más pasional ya que se había desatado una lucha de lenguas entre ambos novios. Pasaron cerca de 5 minutos y se separaron.

Star: No me canso de tus besos, mi amor.

Marco: Ni yo de los tuyos, mi hermosa estrella.

La relación entre Star y Marco se notaba sólida como roca. Ella disfrutaba el pasar al lado del chico del que estaba enamorada cada vez más, al igual que su novio. Pero dentro de poco ese amor tan brillante como el sol se sometería a una prueba cruel y, sobre todo, dolorosa.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro