CAPÍTULO IX

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

#Charlys #Asgard #Crossover

UNIVERSO ALTERNO MARVEL

ASGARD

Los pasos de grandes botas pesadas resonaban en todos los pasillos de ese enorme castillo, hogar de la familia de Odín, antiguo rey de Asgard. Había habitantes yendo de un lugar a otro, intentando esconderse del ejército oscuro que improvisaba para rescatar a Loki de la prisión que lo mantenía incauto. Lo que no sabían, ni ellos ni los guardias que peleaban protegiendo a su pueblo como habían jurado, era que Thor había sacado a Loki días antes de que comenzara esa gran disputa. 

Con las manos atadas con esposas asgardianas que el mismo Odín había mandado a forjar para detener a sus más feroces enemigos, se encontraba Thor inmóvil. Despertaba de un largo y muy molesto sueño, donde su hermano había estado fastidiándolo convirtiéndose de nuevo en serpiente y asustándolo con ese truco tan infantil, pasaba a otro sueño donde bebían juntos antes de ir con él a la nave y ayudarlo, como le prometió, a salvar la Tierra de Ultrón; y de pronto solo se oía el ruido de una de esas maquinarias de cuchillas en su cabeza. Eso no lo podía permitir. Su cabello era sagrado. Y nadie lo iba a despojar de él.

Sacudió la cabeza y apretó los ojos con fuerza al sentir que despertaba con resaca. De pronto se sintió diferente, un poco más ligero. No había sido un sueño. Loki le había cortado su preciosa cabellera dorada. 

Gruñó.

—¡Loki!

—¡Thor, hijo de Odín! —saludó con respeto su moreno amigo y guardián centinela que todo lo ve y escucha, abriendo una gran puerta pesada de una caverna oscura. Su armadura dorada comenzó a brillar un poco con la luz externa—. ¿Cómo llegaste hasta aquí?

—Se supone que tú lo sabes todo —recitó molesto, mientras le rompían las esposas—. ¿Dónde estoy? ¿Cuánto tiempo llevo aquí?

—En Vanaheim llevas dos días —respondió ayudándolo a ponerse de pie—. ¿Por qué viniste acá?

—Tuve una visión y, quería respuestas.

—¿Y por qué trajiste a Loki contigo?

—Este mundo lo comprende mejor él que yo. Y prometió ayudarme a encontrar respuestas si lo dejaba venir conmigo. 

Su amigo resopló furioso y salió de la cueva con Thor detrás de él. 

—Fueron a buscarlo al palacio —comentó y el rubio lo miró preocupado—. Un débil ejército, ya está contenido. También llegaron 5 polisones... y medio —ironizó con una mueca al recordar a esos payasos seres extraños—, dijeron que querían ayudar, aunque más bien están buscando un refugio porque hicieron enojar a la Suma Sacerdotisa de los soberanos. 

—Eso es suicidio —comentó. 

—Ahora lo saben.

—Heimdall —lo llamó—. ¿Recuerdas la chica midgardiana de la que te hablé?

—La que no es Jane Foster. Sí.

—Loki tiene un interés especial en ella. Pero no entiendo por qué. Sólo es alguien de la Tierra. Y creo que es bruja porque desaparece como las ilusiones de mi madre. 

El moreno lo tomó de los hombros y lo miró fijamente.

—Ella es de la Tierra, pero no de la que conocemos —Thor se quedó en silencio, cuando el guardián del puente Bifrost dejaba de hablar, no le podían sacar más información por dos cosas: no quería decirlo o, era peligroso decirlo—. Vámonos, arreglaré tu cabello.

—¿Lo puedes hacer crecer de nuevo? —cuestiona como un niño pequeño y se encoge ante la severa mirada del moreno—. Sólo decía.

Veo dormir a Charly profundamente en mi cama, el reloj de pared marcaba las cuatro de la mañana, pero no estaba cansada. Estaba aterrada de lo que acababa de descubrir: Loki estaba en la Tierra de nuevo, y se hacía pasar por Thor. Y yo esperaba que alguien más se diera cuenta pronto.

Suspiro profundo y me marcho a mi laboratorio subterráneo llevándome conmigo la carpeta del borrador de la nueva historia y todas las notas que ha hecho Charly en mi ausencia. 

Me paso el resto de la madrugada leyendo toda la información, que en realidad no es mucha y, al amanecer, regreso a mi habitación para tomar un baño caliente. 

Durante mi estadía en casa de Clint, los baños deben ser rápidos para que todos alcancemos agua caliente, por lo que pienso en aprovechar todo el tiempo posible en casa para apreciar los pequeños detalles: un buen baño largo y tibio con esencias florales y duraderas burbujas de jabón. Y me sumerjo en mi mente.

La disculpa de Tony. Mi conexión con Bruce. El abrazo de Steve. La protección de Thor. La sobreprotección de Clint —sonrío al pensar eso—. La confesión de Nat. 

Se siente como una familia de verdad. Y eso me hace pensar en mi padre. Y, pronto, abro los ojos con sorpresa. 

—El borrador es de mi padre. La letra... la historia es de él. Por eso mi madre no puede cambiar el webtoon. 

Salgo a toda prisa del baño, me cambio con la ropa que ya tenía preparada: unos jeans azules, una blusa lila de manga larga y decido ponerme otras zapatillas deportivas, nunca se sabe cuándo volveré de nuevo. Al estar lista, veo que Charly comienza a despertar y a levantarse.

—Estás despierto —cometo, asustándolo y haciendo que se sobresalte al enredarse con la sábana que le coloqué cuando llegué—. Ven conmigo.

Él se queda confundido al verme salir de la habitación aún con el cabello goteando la alfombra y oscureciéndola al impacto. 

—¿Cuándo volviste, Shar? —cuestiona acercándose a mí luego de asearse un poco y depositar un corto beso en mis labios. Ese gesto me deja inmóvil un segundo, luego recuerdo que somos pareja y debo actuar como tal, ser una. Aunque me es raro ya que he pasado bastante tiempo en compañía de otro hombre. Que en realidad no ha dejado de gustarme. 

—Recién —informo poniendo espacio entre nosotros con mis manos. Él lo nota y frunce el ceño. 

—¿Y qué tal?

—Loki volvió —Charly abre los ojos tanto que puedo ver perfectamente sus iris oceánicos muy redondos. 

—Eso no aparece en el borrador de Nikki...

—Lo sé, leí tus notas. 

Ambos tomamos asiento en el comedor y Greta nos deja el desayuno frente a nosotros, al que como con ímpetu, eso no ha cambiado en nada.

—Necesito ir a ver a mi padre —comento y él se atraganta con su jugo de limón.

—¿Estás segura? —cuestiona cuando logra tragar. Asiento una vez.

—Él es el autor de la historia —le confieso y él se sorprende—. Por eso se fue. Mi madre le robó su trabajo. 

Tuvo que tomar todo el contenido de su vaso para no atragantarse con la comida de nuevo. En otros tiempos yo me habría reído de él y después él me habría besado los labios por nuestra relación de "amigovios" que se burlan y luego se besan. Pero ahora me sentía extraña en su compañía. Era como si me hubieran obligado a comer con un primo lejano que sólo viene de visita cada año bisiesto, y no supiera cómo comenzar una conversación. 

Dos ingenieros en robótica llegaron a un modesto apartamento en Queens, donde los había recibido un hombre de aspecto mayor a lo que era, pero que compartía los ojos castaño claros con la muchacha frente a él.

Ese era el hogar de David Hendricks.

—Sólo dime cómo detenerlo —le pedía su unigénita en un rencoroso susurro, luego de relatar de todo lo que había sucedido, lo más relevante.

—Ya te lo dije: no lo sé —refutó. 

—Cuando hiciste ese borrador con la segunda parte, pensaste ponerle un fin, ¿no?

—Pues no, yo sólo escribí tonterías. Esto no debería estar pasando. 

—Pero lo está. 

—Señor Hendricks —interrumpe el muchacho hablándole por primera vez—, ¿usted sabe por qué?

El hombre hizo un gesto de desconcierto; antes, hace algunos años, ese chiquillo lo llamaba Tío David, pues ambas familias habían sido muy unidas. Y ahora, luego del divorcio, lo llamaba "Señor Hendricks", como si fuera un total desconocido para él. 

Soltó un largo suspiro y arrugó sus labios. Estaba molesto.

—No.

Y claro que lo sabía, pero no iba a decirle nada a ese hombrecillo que había sustituido su lugar en el comedor del que por mucho tiempo fue su hogar. Y ahora también le quitaba el amor de su hija. Por culpa de él, su pequeña niña nunca fue a visitarlo. Charly se había mantenido como un pilar para su hija.

—Dime algo que no me haga pensar que venir a verte fue una pérdida de tiempo —le reclamó ella, llamando su atención. 

El hombre le dirige una mirada molesta y luego observa al muchacho haciendo un gesto de cabeza. 

—Charly, ¿nos darías un minuto?

—¿Segura? 

—Soy su padre —le informa, aún más furioso. 

El ingeniero, en signo de protección, besa la coronilla de la muchacha frente a su padre y sale al pasillo del departamento. 

—¿Cómo haz estado Tyty? —le cuestiona con voz más gentil. Ahora es turno de Charly de mirarlo furiosa. ¿Cómo se atrevía a usar ese apodo con ella? 

Respiró molesta y con ganas de llorar. "Tyty" le decían su abuela paterna y su padre de cariño. Pero su abuela murió y su padre se fue de la casa. Ese era su apodo sagrado. No Charly. No Loty. No Shar. No nena. Sólo Tyty. 

—¡Basta! —gruñó con voz alta, sus ojos estaban cristalizados, pero no era momento de mostrar fragilidad con ese hombre que decía ser su padre y nunca la había visitado desde que se separó de su mamá, desde hacía casi año y medio.

El hombre la miró con tristeza. Él la quería. Y había querido llevársela consigo luego de la separación. Era su hija, ¡por Dios santo! ¿Qué padre querría estar lejos de sus hijos? Era su Charly.

Pero Nicole le prohibió verla luego del divorcio. Ella temía que se enterara que le había robado el trabajo a su papá y que él se había quedado desempleado por su culpa. Porque Charly lo odiaría por destruir aún más a su familia. Y ella y Nikki eran sus más preciados tesoros; aunque su ex esposa le hubiera robado su trabajo y el amor de su hija. Él no destruiría el amor de madre e hija que aún se tenían. 

Respiró profundo. Si algo iba a hacer, sería ayudar a su Tyty a salir de ese caos.

—Cuando regreses —habló por fin—, busca a Stephen Strange. 

Charly frunció el entrecejo. ¿Cuántos más personajes iban a aparecer?

—¿Dónde lo busco? —preguntó esperanzada, pero lo único que recibió fue una mirada de fastidio—. Bueno, ¿cómo lo encuentro? Es... ¿es uno de esos super héroes mutantes? ¿O como un Señor Increíble? ¿Qué poder tiene para derrotar a Ultrón? 

Estaba impaciente y no sabía cómo comenzar a buscar a esa persona que le decía su padre. 

—Es neurocirujano.










***

Diiiiisculpen la demora, mi mascota ha estado un poco enfermo, y ya perdí a uno muy especial y no quiero perder a otro 😭, así que me la he pasado cuidando de él.
Pero como ofrenda de paz, les dejo este regalo:







Adivina adivinador...

¿Quién es el mejor narrador? 😜

(Sí, también me hecho flores :P)

Y si te ha gustado, recuerda cambiar la estrellita de ------ a------>
Y también puedes dejarme algún comentario, duda o sugerencia, esto me impulsa a seguir subiendo capítulos

Y la pregunta del millón: ¿Cuántos más personajes van a aparecer?

Nos seguiremos leyendo...

Au revour!!! ஐﻬ

Jessy's کτγℓع

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro