Dairiki46 Aka Dyrroth

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Writer: ¿Que te parece un fanfic de Yami?

Narrador Omnisciente

Eren, Mikasa, Connie, Jean, Armin, Annie, Reiner, Bertholdt, Sasha y Krista se encuentran en la cima de la Muralla Rose, Ymir yace en una camilla, herida, mientras Reiner tiene un brazo vendado, la tensión en el aire es palpable

Me ha quedado claro -- Dice Reiner con solemnidad, su mirada fija en Eren

¿De qué estás hablando? -- Pregunta Eren, confundido por la seriedad en el rostro de Reiner

Lo siento mucho, pero no tenemos otra opción -- Responde Reiner, con un dejo de pesar en su voz

Reiner, ¿acaso lo haremos? -- Pregunta Bertholdt, con incredulidad en sus ojos

En ese momento, Rico aparece corriendo hacia el grupo, con una expresión de alarma en su rostro

¡Reiner y Bertonto son el Titán Acorazado y el Titán Colosal! -- Exclama Rico, con los ojos muy abiertos

¡Se dice Bertholdt! -- Interviene Bertholdt, corrigiendo a Rico con impaciencia

Reiner muestra su brazo vendado, y todos observan asombrados cómo comienza a sanar a una velocidad sorprendente

Se acabó -- Declara Reiner, con una sonrisa confiada en su rostro, mientras el grupo queda paralizado por la revelación

¡Eren, corre! -- Grita Mikasa, golpeando a Reiner y mandándolo a volar unos pocos metros, mientras el caos estalla en la cima de la Muralla Rose

Luego de esquivar un ataque de Bertholdt, Mikasa contraataca con determinación, hiriéndolo gravemente, Bertholdt cae al suelo, sujetando su garganta herida con desesperación

Te voy a exterminar -- Declara Mikasa con frialdad, su mirada fija en Bertholdt

En ese momento, Reiner embiste a Mikasa, arrojándola fuera de la Muralla Rose y hacia el territorio de la Muralla Maria, Mikasa, con determinación, regresa con su equipo 3D y corta los brazos de Reiner, quien grita de dolor y frustración

¡Maldita! -- Exclama Reiner, mientras lucha por contener el dolor de sus heridas

Reiner se transforma en el Titán Acorazado de 15 metros y agarra a Eren, mientras Bertholdt se transforma solo en la mitad superior de su Titán Colosal de 60 metros

¡Traidores! -- Grita Eren, lleno de rabia, mientras la batalla alcanza su punto álgido en el territorio de la Muralla Maria

¡Los voy a matar! -- Exclama Eren, con una determinación feroz en su voz

Eren se transforma en el Titán de Ataque de 15 metros, destruyendo la mano del Titán Acorazado de Reiner, y ambos caen al territorio de los Titanes fuera de la Muralla Rose

¡Reiner! -- Exclama Eren, levantándose con rapidez, preparado para el enfrentamiento que se avecina

Los Titanes de Ataque y Acorazado están a punto de pelear, y la tensión en el aire es palpable, Reiner corre hacia Eren y lanza un golpe, pero Eren logra esquivarlo y, con una llave experta, logra inmovilizar a Reiner

¡Te voy a destruir! -- Exclama Eren, lleno de resentimiento, mientras se prepara para infligir un daño aún mayor a su oponente

Con un movimiento rápido, Eren arranca el brazo del Titán Acorazado de Reiner, quien grita de dolor y frustración

No podrás ganarme, Braun -- Dice Eren, con los ojos llenos de rabia -- No permitiré que ganes -- Añade, con una determinación feroz en su voz, la batalla entre los dos titanes alcanza su punto más intenso, con el destino de todos en juego

Reiner se libera de la llave de Eren y, con un poderoso golpe, lo arroja por los aires, desatando el caos en el campo de batalla

Mikasa, Connie, Jean y Sasha utilizan sus equipos 3D para acercarse a Reiner y atacar las partes no acorazadas de su Titán Acorazado, buscando debilitarlo

Rico aterriza en el hombro de Eren, visiblemente preocupada

Eren-Kun, debes tener cuidado, Reiner debe estar planeando algo -- Advierte Rico con inquietud

No te preocupes, Rico, ya sé lo que está planeando -- Responde Eren, levantándose con determinación

Reiner corre hacia Eren, y Rico se aleja con su equipo 3D para evitar el enfrentamiento directo Reiner embiste a Eren, estrellándolo contra la muralla con fuerza

Maldito bastardo -- Murmura Eren entre dientes, mientras se recupera del impacto

Eren contraataca con un certero cabezazo, logrando hacer retroceder a Reiner unos pocos pasos, en un intento por recuperar el control de la situación, la batalla alcanza un nuevo nivel de intensidad, con cada movimiento determinante para el desenlace de la confrontación

Eren se acerca lentamente a Reiner, el brazo de este último aún está en proceso de regeneración, una masa de carne y hueso que se retuerce y se reforma lentamente

Reiner, -- Dice Eren con una confianza palpable en su voz -- Ya no tienes forma de derrotarme -- Su tono está impregnado de arrogancia, una seguridad que parece emanar de cada fibra de su ser

Reiner, por su parte, siente una oleada de alarma recorrer su cuerpo

Maldita sea, ¿desde cuándo es tan fuerte? -- Reiner piensa para sí mismo, sus ojos azules centelleando con preocupación

Sin perder un segundo, Reiner corre hacia Eren, su único puño en alto, listo para lanzar un golpe devastador, Eren, con una agilidad sorprendente, logra esquivar el golpe, pero antes de que pueda reaccionar, Reiner embiste con toda su fuerza, empujando a Eren hacia la muralla Rose con una determinación feroz

¿Acaso crees que puedes derrotarme así? -- Pregunta Eren, su voz llena de arrogancia y desdén, mientras lucha por mantener su equilibrio bajo el embate de Reiner

En ese momento, de forma repentina, el Titán Colosal, cae con un estruendo ensordecedor sobre Eren y Reiner, el impacto es devastador, sacudiendo el suelo y enviando escombros y polvo por los aires, Eren queda momentáneamente aturdido, su visión nublada por el repentino caos que lo rodea, mientras Reiner yace inmóvil a su lado, ambos Titanes derrotados por la intervención sorpresiva del Colosal

Salto de Tiempo

Eren despertó con un fuerte dolor en los brazos, el frío viento del bosque del territorio de la Muralla Maria golpeaba su rostro. Al abrir los ojos, se encontró en lo alto de uno de los árboles gigantes que se alzaban a 80 metros de altura. A su lado, yacía Ymir, quien parecía estar observando el paisaje con una expresión imperturbable. En una rama frente a ellos, se encontraban Reiner y Bertholdt, cuyas miradas se dirigieron hacia Eren en el momento en que este se incorporó.

¡Hijos de puta! -- Exclamó Eren, su voz resonando entre las ramas del árbol.

Apenas despiertas y ya estás gritando -- Comentó Ymir con un tono de voz tranquilo.

¡Los voy a matar! -- Gritó Eren, su rostro enrojecido por la ira que lo consumía.

Eren se disponía a morder su mano para desencadenar su transformación en Titán, pero al mirar hacia abajo, se dio cuenta de que sus manos habían sido arrancadas y que ahora estaban en proceso de regeneración.

¡¿Y mis malditas manos!? -- Exclamó Eren, su voz llena de desesperación y furia.

Lo siento, tuve que sacarte de la nuca del Titán y tenía prisa -- Explicó Reiner con un dejo de arrepentimiento en su voz.

¡Ahora sí! ¡Te voy a matar x2! ¡Idiota! -- Gritó Eren, su enojo alcanzando un nuevo nivel de intensidad mientras dirigía su mirada hacia Reiner con una ferocidad inigualable.

¿Qué quieren de nosotros? ¿Por qué seguimos aquí? -- Preguntó Ymir, su voz resonando con una mezcla de confusión y determinación.

Los titanes puros están cerca y no podemos arriesgarnos -- Respondió Reiner, su tono de voz revelando una preocupación genuina.

Eres una molestia, Reiner -- Espetó Eren con amargura -- ¿Qué buscas con esto? -- Inquirió, su mirada fija en el rostro de Reiner.

Lo siento, Eren, pero no lo entenderías -- Murmuró Reiner, desviando la mirada.

¿Me estás jodiendo? -- Exclamó Eren, su voz llena de desprecio -- Eres un asesino, un monstruo repugnante, un maldito bastardo -- Acusó con furia desenfrenada.

Eren -- Intervino Ymir, tratando de calmar la situación.

¡No eres un humano! ¡Eres un maldito bastardo! ¡Un genocida! -- Gritó Eren, su voz resonando a través del bosque.

¿Crees que no lo sabemos!? ¡Gritarnos no cambiará nada! ¡Si gritarnos te hace sentir mejor, entonces hazlo! -- Exclamó Reiner, su voz cargada de resignación.

No tienen derecho -- Murmuró Eren, su mirada llena de desesperación -- Oye, tú, maldito segundón -- Dijo Eren, dirigiéndose a Bertholdt con una furia incontenible.

¿Qué, Eren? -- Preguntó Bertholdt, su voz temblorosa ante la ira desatada de Eren.

¿Qué pensaste cuando te dije que mi madre casi fue devorada por un Titán? -- Preguntó Eren, su voz cargada de dolor y resentimiento.

Solo sentí lástima por ti -- Respondió Bertholdt con sinceridad.

Malditos bastardos, no tienen derecho -- Murmuró Eren entre dientes -- Juro que los voy a matar de la peor forma posible -- Amenazó con una ferocidad que helaba el ambiente.

Eren, no ayudas en nada -- Intervino Ymir, su tono de voz reflejando una mezcla de frustración y preocupación.

Y no quiero ayudarlos -- Replicó Eren, su resentimiento palpable en cada palabra.

Reiner, ¿quién es el simio? -- Preguntó Ymir, su mirada fija en el rostro de Reiner -- Pude ver tu mirada, el Titán Bestia venía por ustedes -- Agregó con determinación.

No importa, partiremos por la noche -- Respondió Reiner, desviando la mirada.

Ymir, ¿tienes recuerdos del anterior portador del Titán Mandíbula? -- Preguntó Bertholdt, su voz temblorosa.

No -- Respondió Ymir con firmeza.

¡Ymir! ¡No hables con ellos! ¡Son el enemigo! -- Exclamó Eren, su enojo alcanzando un nuevo nivel de intensidad.

Ymir, si vienes con nosotros, podemos salvar a Krista -- Instó Reiner, con un matiz de urgencia en su voz.

¿Quién es el enemigo? -- Preguntó Eren, con una mirada desafiante dirigida a Ymir.

¿Quién sabe? -- Respondió Ymir con un deje de resignación, consciente de la gravedad de la situación.

Sin previo aviso, las manos de Eren se regeneraron por completo, y en un instante, sujetó a Ymir del cuello con una fuerza desgarradora.

¡También te mataré a ti! -- Exclamó Eren con una ferocidad que heló el aire a su alrededor -- ¡No dejaré a ninguno de mis enemigos con vida! -- Añadió, con una determinación que dejó a Reiner, Ymir y Bertholdt atónitos

Reiner actuó con rapidez, apartando a Eren de Ymir en un intento desesperado por contener la situación.

Mierda, ¿desde cuándo Eren es tan fuerte? -- Pensó Ymir, llevando una mano a su cuello, sintiendo la presión de los dedos de Eren grabada en su piel.

¡Eren, cálmate! -- Exclamó Reiner, con un tono que denotaba preocupación y desesperación.

¡Me calmaré cuando tú y el resto de tu gente mueran! -- Gritó Eren, con una furia desenfrenada -- Los mataré a todos antes de que maten a mi gente -- Añadió, con una determinación que resonó en el aire como un juramento de venganza.

Reiner sujetó a Eren con firmeza contra el árbol, su mirada seria reflejaba determinación.

Cálmate ahora -- Reiner le instó, su voz resonando con autoridad.

¡No me voy a calmar! -- Gritó Eren, su rostro enrojecido por la ira, sus ojos destellando con furia contenida.

Bertholdt observó hacia abajo, su expresión preocupada al notar la presencia de numerosos titanes, cada uno de ellos acercándose a una velocidad alarmante, con alturas que oscilaban entre los 10 y 15 metros.

Reiner -- Llamó Bertholdt, su voz temblorosa revelando la gravedad de la situación.

¡Los voy a matar! -- Exclamó Eren, su voz llena de desesperación mientras se mordía la lengua con fuerza, provocando que la sangre brotara y se transformara en el Titán de Ataque

El suelo tembló con la fuerza del impacto cuando Eren cayó desde una altura de 60 metros, pero él permaneció imperturbable, su determinación inquebrantable.

¡Vengan para acá! ¡Que los voy a matar! -- Rugió Eren, su voz resonando con una ferocidad que helaba la sangre.

Con una fuerza sobrenatural, potenciada por la presencia de su segundo poder titánico, Eren derribó el árbol de 80 metros con asombrosa facilidad, su determinación y poder desafiando las leyes mismas de la naturaleza.

Reiner, Bertholdt y Ymir cayeron al suelo, observando con temor cómo el cabello del Titán de Eren se mecía al compás del viento, mientras los titanes puros lo ignoraban por completo.

Han cometido un error enorme -- Declaró Eren, acercándose con determinación a Ymir, Reiner y Bertholdt, su presencia imponente llenando el aire con una sensación de inminente peligro.

Está utilizando el poder de la coordenada -- Reflexionó Reiner, su mente trabajando a toda velocidad para comprender la magnitud de la situación.

Reiner, Bertholdt y Ymir eran conscientes de que se encontraban en una situación desesperada. El Titán Acorazado de Reiner resultaba inútil contra el poder combinado del Titán de Ataque y la coordenada de Eren, el Titán Mandíbula de Ymir enfrentaba el mismo problema, y Bertholdt se veía imposibilitado de transformarse.

De repente, un estruendo ensordecedor resonó a una gran distancia, un estallido de proporciones colosales que sacudió el suelo bajo sus pies, anunciando la llegada de un evento que cambiaría el curso de la batalla.

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