capítulo 11

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Editado: 04/ 06/ 2021

El árbol guía.

[Shikadai]

Luego de que Hima uniera fuerzas con su padre y sacaran al nueve colas, algunos nos dividimos para quitarles los setsus de encima mientras otros luchábamos en tierra firme, pero entre mi lucha contra cuatro setsus vi como entre seis de ellos secuestraron a la chica con la cual habíamos charlado por la mañana... no había nadie cerca a quién decirle así que simplemente decidí aventurarme por el túnel que ellos tomaron, debajo de las piedras que se levantaron; no tarde en atacarlos, y apenas ella estuvo libre comenzamos a atacarlos juntos. Apenas los derrotamos no esperamos más y nos apresuramos a un escondite... delante nuestro más y más de ellos siguen subiendo a la lucha, por eso mismo parecemos no avanzar contra ellos.

— ¿Qué... qué vamos a hacer? son demasiados como para que pasemos entre ellos, y definitivamente no podemos pelear contra todos ellos.

—Tenemos... —controlo mi respiración —tenemos que ser pacientes, solo míralos... se están yendo a otro lado, seguro algún equipo esta dando una buena lucha que requiere de muchos de ellos, solo... esperemos a que se vayan.

Ella da un asentimiento y simplemente nos mantenemos con las armas en mano mientras esperamos hasta que los últimos Setsus se marchen, pero entre la espera la idea de seguirlos me viene a la mente y ahora mismo vamos detrás del último, tal parece todos avanzan al mismo lugar... y entre más avanzamos más difícil es esconderse.

— ¡Bien Setsus, informé!

—Los de la nube nos están dando con todo, y Naruto Uzumaki los esta respaldando junto a su hijo.

—Igual con Konoha, la hija y el padre atacan con todo, tienen a la arena con ellos.

Las voces en informe seguían surgiendo de todos lados entre susurros, pero entre tanto setsu no podíamos ver al responsable.

— ¡Bien, Setsus! ¡Vuelvan a sus trabajos, ataquen con todo, quiero la cabeza de los jefes de las aldeas!

— ¡Si señor!

Todos comienzan a moverse en hileras completamente ordenadas mientras toman distintos túneles para salir, con prisa sujeto el brazo de la chica para acercarnos a nuestro escondite en la obscuridad. Apenas vemos a todos salir me atrevo a asomarme en busca de cualquier enemigo que nos pueda detectar, pero ya no hay nadie, tan solo un árbol frondoso.

—Entonces... —susurra a mi lado — ¿Quién nos está atacando?

—No logre ver nada, —poso mi índice sobre mis labios —silencio... hay uno por ahí.

Escondiéndonos detrás de una roca mantenemos la vista sobre aquel Setsu que se mantiene hablando con... el árbol, y al cabo de lo segundo caigo en cuenta de la persona que los esta dirigiendo... ese raro árbol es quién manda.

—Setsu principal, necesitamos más Setsus en donde llevamos la batalla con el hijo... ambos son muy fuertes.

—La hija... ¿Cómo se encuentra la hija?

—Parece contenerse, no esta mostrando todo su poder... está cediendo el mando a su padre, pero es una buena diligente, y sabe como atacar mientras protege a los suyos, aun si es a costa de su vida.

—Necesito a esa niña, ella nos dará la victoria.

—Si señor, nos ocuparemos de traerla para usted... ¿Y qué hay del chico?

—Manden refuerzos.

La extraña cara desapareció del árbol apenas la charla se vio terminada, y sin dudarlo corrimos hacia el túnel por el cual habíamos llegado; el evitar que nos miraran fue lo más complicado, y aun peor fue encontrar a diez setsus en la salida del túnel. Al terminar nuestra batalla subimos al campo principal con algunos setsu detrás de nosotros... mi vista sube hacia Hima que parece sorprendida de verme, y luego vuelve atrás cuando escucho el llamado de mi ahora compañera que avisa la llegada de otros setsus, pero antes de iniciar a pelear Hima cae cerca de nosotros, solo basto encender su Byakugan y utilizar su puño suave para derribar a muchos.

—Es un árbol al centro de toda la lucha, el setsu que los dirige es un árbol, y tal parece esta detrás de ti... él pregunto por ti.

—Te esta buscando, —prosigue la chica a nuestro lado —ya sabemos más o menos la ubicación. Tenemos... —tomando su Kunai se lanza contra un setsu — ¡Qué atacar el árbol de inmediato, hay miles de setsus listos para atacarnos! —retrocede a nuestro circulo —Cada vez están subiendo más, pronto estaremos completamente agotados y ellos serán capaces de llevarte.

Durante nuestra batalla siento una conexión con mi padre que me habla pidiendo información sobre nuestra batalla, rápidamente le explico lo que ha ocurrido y él se encarga de pasar la información a los demás grupos, con la ubicación dada solo bastaba comenzar a movernos según el plan; en los campos de batalla el señor Naruto se quedaría distrayendo a los setsus junto a nuestros guerreros restantes mientras los líderes de equipo y las manos derechas nos pondríamos en marcha hacia aquel raro árbol.

El señor Naruto emite un rugido feroz y mi padre nos informa que todos debemos agacharnos, con todos en el suelo los puños del señor Kurama se crearon y de un solo golpe giratorio lanzó a todos los setsus por los aires, sin esperar la aprobación Hima, la chica a nuestro lado y yo comenzamos nuestro camino a los túneles subterráneos. Al estar dentro me ocupo de capturar a los setsus cercanos con mi sombra mientras ellas atacan destruyendo al enemigo, nuestro camino sigue del mismo modo; aquí dentro no tenemos aparatos de comunicación para hablar con los otros equipos, y solamente si mi padre crea la conexión nos será posible saber ubicaciones y cercanía. Nuestra carrera termina ante el enorme árbol que rápidamente saca el rostro principal tras el ataque. El setsu original.

—Himawari Uzumaki, un placer tenerte aquí, seguro no me conoces... la verdad no tengo un nombre específico, solo me conocen como el setsu blanco así que puedes llamarme de ese modo, verás... durante la guerra solo una pequeña parte de mi fue salvada de la destrucción, logre evolucionar, y cree un ejercito de setsus... la verdad no tenía idea de que podía hacer eso, ¡Pero míranos! ¡Somos casi perfectos! Y ahora... te necesito a ti.

— ¿A mí? —traga grueso manteniendo su pose.

—No es que seas débil pequeña, de hecho, pues es todo lo contrario... eres muy fuerte y necesitamos tú chakra, dime tú... ¿Acaso conoces la historia de Pain? Seguro tu padre llego a contarte de él alguna vez, bueno... básicamente terminarás como él.

— ¡No creo conocerlo! ¡Pero te aseguro que no terminaré como él! ¡Ten esto en mente, voy a destruirte!

Al momento que Hima saco su Byakugan pude ver a los líderes de equipo llegar por los túneles, tal parecía por la furia en su rostro, qué Boruto llego a escuchar las palabras del Setus pues al segundo se lanzo a la batalla, aunque su pierna fue atrapada por una rama del árbol y él salió volando por los aires, Hima retrocede y ahora Shinki y Sarada avanzan en ataque al mismo tiempo que yo en un intento de no quedarme atrás.

El tío Gaara saca su arena, el señor Choujuro saca su espada Hiramekarei, el Raikage Darui alista los puños y suelta el seguro de su espada zambato para utilizarla si es necesario mientras la Tsuchikage posa las manos sobre la tierra preparada para crear cualquier ataque; los ataques de todos son rápidos y coordinados, pero poco certeros pues las raíces del árbol se elevan con rapidez evitando los ataques y arrojando lejos al atacante. Ente mi cansancio puedo ver a Bruto levantarse una y otra vez con más molestia deformando su rostro, pero entonces todo se detiene... una raíz sale bajo los pies de Hima haciéndola volar por los aires, todos detenemos los ataques y apenas me lanzó en su rescate al igual que Boruto, una raíz se aproxima rodeando su cintura y jalándola lejos de nosotros.

Al caer al suelo puedo ver como unos Setsus acercan una maquina hacia la poca luz del túnel. Mi pelea con el Setsu termina mientras mi mente comienza su trabajo.

— ¡Suéltame! —utilizando distintos golpes rompe las raíces que vuelven a crecer y atraparla al instante — ¡Suéltame maldito loco!

De pronto las raíces la rodean por completo inmovilizando así sus manos. Sin dudarlo me lanzo en una carrera hacia aquella extraña maquina mientras evito las raíces que emergen del suelo y los setsus que llegan para atacarme... mi mirada vuelve sobre Hima y al ver como la arrojan con dirección a la maquina me apresuro a ponerme en el medio recibiendo su cuerpo para después arrojarla al suelo cuando la máquina me atrapa... la maldita maquina se enciende por su cuenta.

—Diablos, ese chico esta arruinando mi plan... ¡Setsus, no necesito un cuerpo humano inservible! ¡Quiten a ese joven antes de que muera! ¡Y metan a la mocosa en la máquina!

Mi cuerpo se debilita sintiéndose muy cansado... las voces son lejanas, los sonidos se apartar mientras mis ojos se cierran con pesadez. Lo último que puedo ver son sus ojos volverse blancos, las marcas de sus mejillas se extienden mientras colmillos surgen de entre sus dientes y tres colas se forman detrás de ella... su rostro se deforma un poco...

— ¿Estás bien? —pronuncia preocupada una distorsionada voz —Ey, Shikadai reacciona hombre... ¡Oigan! ¿Cómo están allá?

— ¡Concéntrate en él Boruto!

— ¡Mierda!... ¡Shikadai reacciona maldita sea!

— ¡Trae el botiquín, su piel esta muy quemada! ¡Rápido, debemos llevarla a algún lugar con más luz y equipo para poder tratarla! —expresaba alterada — ¡Necesitamos un médico especializado!

— ¡Ya trajimos la camilla, Sarada! —informaba Shinki.

— ¡Súbanla de inmediato hijo! ¡Vamos, yo la llevaré!

— ¡Despierta, vuelve a tus sentidos!

Entre la desesperación que me agita puedo sentir el calor de una tremenda bofetada sobre mi mejilla, pero la debilidad de mi cuerpo no me permite ni siquiera abrir los ojos correctamente... apenas y puedo ver su cabello azul a la lejanía, su piel... con la poca fuerza que tengo trato de mover mi mano en su dirección... quiero alcanzarla.

— ¡No hagan eso par de tontos! ¡Esa máquina succionó mucho del chakra de mi primo! Si esa rama no hubiera roto la máquina... posiblemente Shikadai no estaría aquí ahora...

Mis ojos pesan, mi respiración... siento una opresión en el pecho, apenas y puedo respirar... Shinki se escucha preocupado, al igual que Boruto... Hima, mi hima... ¿Cómo se encuentra mi dulce Himawari?

...

Siento la calidez de una mano que toma la mía, y una voz a la lejanía llega a pronunciar mi nombre con dificultad. Girando mi cabeza puedo ver sus obscuros cabellos azules, su rostro esta totalmente vendado al igual que su cuello y manos. Me levanto sin sentir mi cuerpo y bajo los pies de la cama... me siento ajeno al cuerpo que poseo, pero mi deseo de comprobar su estado me hace ponerme de pie y tratar, en vano, de llegar a ella... el dolor me invade al caer duramente al suelo.

—Hima... —sujeto su cama.

—A... ayuda... ayuden...lo... Shika... Shikadai... ayudenlo... ayuda...

Su cuerpo esta completamente vendado, y voz es ronca, apenas audible... mi hima...

— ¡Shikadai, por dios santo! —apresurada se adentra haciéndome rodear su cuello con mi brazo —Niño... —suspira levantándome con cuidado —estás muy débil como para caminar, debes reposar y dejar que tu chakra regrese del todo... —me hace tomar asiento —ella esta bien, las quemaduras no fueron tan graves, además tiene el mismo tipo de recuperación que su padre... —revisa mi estado —le tomará un poco de tiempo, pero va a recuperarse.

— ¡Hola bebé, vine a verte mi pequeña Him...! —baja el ramo de rosas que cubría su rostro — ¡Shikadai! —eleva las cejas con algo de entusiasmo — ¿Ha pasado algo malo Sakura? ¿Cómo esta? —se acerca analizando la tabla de datos.

—No es nada, —lo aparta —simplemente se preocupo por el estado de Himawari y en su intento por acercarse termino cayendo al piso... sus piernas no pudieron sostenerlo, —vuelve una mirada seria hacia el séptimo —tengo que tratarlo.

Con un asentimiento permanece aun lado —Qué bueno que ya has despertado hijo, yo... bueno, —apenado sujeta su nuca —te debo demasiado, de verdad, —da una reverencia —te agradezco haber salvado a mi hija de aquella maldita máquina, yo... mi clon logro ver ese momento, pero al instante Hima lo destruyo —confiesa entre una leve risa —tuvimos suerte de poder controlarla.

—No creo que sea algo de lo cual reírse tarado —expresa disgustada la señora Haruno.

—Yo, bueno... —avanza para acomodar las flores en un florero —si esa máquina la hubiera atrapado... —suspira con un semblante decaído —la verdad no me hubiera gustado verla como Pain, ese hombre... él de verdad sufrió mucho, pero no tienes de qué preocuparte, te aseguro que ella estará bien... —sujeta suavemente el rostro de hima —algo así me paso cuando era más chico, sé por experiencia que las quemaduras sanan, y con especial rapidez en cuerpos como los nuestros. —sonríe orgulloso —todo estará bien, —vuelve la mirada a mí —quizá para mañana ella ya este mejor que tú, aunque sus ojos... creo que esos tomaran un poco de tiempo para recuperarse...

Analizo las vendas que cubren sus ojos, la señora Sakura parece triste al escuchar esas palabras, pero su padre no muestra tanta preocupación sobre ello.

—Mi pequeña es increíble, simplemente no puedo creer que soportará el poder del Byakugan mezclado con el modo ermitaño, ambas técnicas utilizan bastante chakra, y ya se exigía mucho con sus clones de sombra... pero, —vuelve la mirada sobre mí —tú y yo sabemos que ella es muy fuerte, así que por eso mismo debes tratar de mejorarte pronto... así en lugar de qué ella te cuide, tú cuidarás de ella —sonríe —o... oye Sakura, —se acerca preocupado — ¿Estás bien?

—Si... —sujeta su cabeza —sí, no tienes que preocuparte por mí, simplemente... —suspira —voy a llamar a Ino para que terminé con este tratamiento.

—Señor... su... hija, bueno ella me...

—No es momento para decirme eso... —retrocede hasta besar la mejilla de hima —hablemos cuando estés en mejor estado, ¡Oh! Y... les traje algo de fruta, —deja una canasta repleta sobre la mesa de al lado —y además sus amigos vendrán en un rato.

—Gra... gracias papá... te qui... quiero.

— ¡Dejen de hablar los dos! —ríe levemente — ¡Ahora me voy!

Al verlo salir puedo volver la mirada sobre la chica que amo, sus hermosos ojos azules están heridos... hima, de verdad te amo, así que no te preocupes, yo cuidaré de ti.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro

#shikahima