Disculpen los errores ortográficos.

"hablar" personaje hablando.

"Hablar" personaje pensando.

"Hablar" nombres de las técnicas.

(Hablar) palabras del autor o aclaraciones.

############ Cambio de escenario o lugar.

Capítulo 9: Dudas y represalia.

Azula pocas veces se sentía tensa o acorralada, después de todo siempre tenia un plan para todo, siempre todas sus acciones tenían una razón y al final del día todo salía a su favor, o eso fue hasta que lo conoció a el.

Uzumaki Naruto

Fue un niño difícil de manipular, no porque tuviera una voluntad inquebrantable o fuera recto como la hoja de una espada, si ella hubiera tenido un poco mas de información del niño hubiera sido sencillo rascar la superficie y llegar a el para tenerlo de su lado.

Nadie era inquebrantable, y todos podían ser controlados si se sabía que palancas mover.

Si el hubiera estado solo unos días mas en sus manos, Azula lo hubiera tenido a sus pies como guerrero, socio o mascota, no había diferencia. Pero que el haya huido y burlado de ella como si todo fuera solo un juego, hizo que la princesa del fuego sintiera algo que hace tiempo no sentía.

Euforia por la casería.

"Ty lee deja eso" Regaño Azula a la niña de circo que estaba mirando un costoso jarrón en la esquina de la habitación.

"Pero si solo lo estoy mirando" con un puchero la castaña se cruzo de brazos para mirar por la ventana de la habitación a donde fueron llevadas, hace dos días fueron buscadas por un mensajero de la nación del fuego, que traía un mensaje de emergencia mandado por el mismo señor del fuego.

"¿Por qué crees que nos llamó?" desde que recibieron el mensaje Mai a estado muy estresada, no todos los días se tiene una audiencia con el señor del fuego y nada garantizaba que fuera por buena causa que estuvieran aquí, "¿Crees que los rumores…?"

"Siempre todo se sabe, solo era cuestión de tiempo" con una mirada dura Azula hizo callar a su amiga y bajando la mirada paso sus dedos de forma delicada por la banda que colgaba de su cuello.

"Entiendo" sin querer discutir con la princesa Mai solo guardo silenció, la sola mención de la palabra 'Naruto' era casi tabú entre ellas, nadie quiere provocar la ira de la princesa de la nación del fuego.

Tras algunos minutos la tensa atmósfera en el habitación fue interrumpida cuando un soldado entró y las escoltó por los interminables pasillos de la gran mansión del señor del fuego, una gran estructura con cientos de habitaciones y pasillos donde incluso podrías llegar a perderte.

Mientras caminaban pasaron junto a un hermoso jardín que tenia algunos arboles, plantas y estanque con agua cristalina con varios peces Koi nadando en ella, la mirada de Azula por un momento se poso en un banco que estaba junto con el estanque.

"¡Mamá! ¡Mamá! ¡Mira como creció la flor que estoy cuidando!"

"Es hermosa hija, crecerá para ser tan bella y fuerte como tú…"

"¿En serió?"

"Si… cuando cuidas algo con tanto cariño y amor, esta crecerá para ser fuerte y hermosa…"

"¡Yo quiero llegar a ser fuerte y hermosa como tu mamá!"

"No mi niña, tu lo serás mucho mas…"

La mirada de Azula se oscureció cuando llego a la sala del trono, con un paso seguro camino y su rostro fue iluminado por las llamas que rodeaban un gran trono, donde estaba sentado su padre que lucia con orgullo un adorno en su cabeza con el símbolo del fuego, el era el señor del fuego, el hombre mas poderoso de la nación…

O eso decían.

"Buenos días padre" Azula se inclino junto a sus dos compañeras que se inclinaron también, "Es bueno verte luego de varios meses y…" la boca de la adolecente se cerro cuando la mano de su padre fue levantada.

Ty lee y Mai se tensaron cuando el señor del fuego provoco que las llamas a sus pies crecieran de forma amenazadora.

"Hace ocho días uno de los bunkers más seguros de nuestra nación, levantada por mi padre el gran Azulon fue invadida y derribada, causando la perdida de una buena parte de mi ejercito y de miles de sucios prisioneros, entre ellos un 13% eran maestros tierra…" la voz del gobernante siguió pasiva, pero el brillo en sus ojos era todo lo contrario, "Nuestro gobierno esta sangrando y todo por un mísero mocoso de 12 años…"

"Padre…"

"¡Silencio!" esta fue la única vez que Azula escucho a su padre gritarle, las llamas que rodeaban el trono amenazaba con quemar a las tres chicas, pero ninguna se movió, "¡¿Cómo es que esto a sucedido?! ¡Es inaceptable!"

"Te aseguro que estoy tan sorprendida como usted padre" manteniendo una expresión solemne Azula levanto la mirada para mirar a los ojos a su padre.

"Estas sobre terreno peligroso Azula, se que tuviste como prisionero a ese chico" la mirada de la princesa casi se quebró, pero mantuvo la compostura, "¿Tienes algo que decir a tu favor? ¿Por que no mataste a ese chico cuando tenias la oportunidad?"

"…" Ty lee y Mai miraron preocupadas a su amiga que solo se mantuvo de rodillas en silenció, pero las dos se sorprendieron cuando ella levanto la mirada para sonreír con calma.

"Es simple padre, estamos ante la presencia de alguien que puede rivalizar con el Avatar, tiene una fuerza, velocidad, técnica y poder que jamás hemos presenciado, ¿No hubiera sido un desperdicio matarlo?" Azula en ningún momento perdió su sonrisa y solo creció al ver la mirada curiosa de su padre.

"Sigue…"

"Según escuche dos guerreras Kyoshi influenciaron en este ataque, ellas manipularon a Uzumaki Naruto para que atacara, no te confundas padre, pero ese chico solo es un niño tonto, inocente e idealista, es como una hoja en blanco, sus decisiones pueden ser escritas y se que yo puedo ser ese pincel que marque sus acciones…" dijo con seguridad y una sonrisa un tanto oscura que estremeció a sus dos compañeras, "Solo necesito tiempo padre y te aseguro que Uzumaki Naruto será un fiel sirviente de la nación del fuego y con él nada ni nadie, ni siquiera el Avatar podrá interponerse en nuestro objetivo"

Tras largos minutos en silencio, el señor del fuego asintió con la cabeza.

"Nunca me has fallado Azula y se que no lo harás ahora…" la princesa asintió con la cabeza orgullosa de la fe que su padre tenia por ella, poniéndose de pie iba a proceder a retirarse, "Pero si fallas, lo que le hice a tu hermano Zuko será nada comparado a lo que te haré a ti" con la amenaza impuesta las tres adolecentes.

"No fallare padre" perdiendo su sonrisa Azula se dio la vuelta para irse caminando seguida de sus compañeras, una vez fuera de la habitación la princesa se detuvo.

"¿Azula-a?" Ty lee estaba preocupada y tocó el hombro de su amiga, pero retrocedió cuando vio su oscura mirada.

"Mai ve a hablar con el comandante Yuwao y el armero Wong, necesito todo lo que este a nuestra disposición, tenemos una presa que cazar" Azula nunca fallaba en sus objetivos y cazar a Uzumaki no sería la excepción.

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"Sabes no quiero que Aang deje de actuar como el mismo, pero solo pienso que debe ver que mientras mas tardemos mas problemas habrá"

"…"

"Ero-sennin decía que aunque la situación sea mala no debo sentirme responsable de todo lo que sucede, que a veces solo debo de disfrutar el momento, recuerdo esa frase que decía 'no solo centrarse en el destino, sino de disfrutar el viaje' después de todo no sabes si puedes morir al día de mañana"

"Ghhhhhhh"

"¿Creo que debo de tomarlo con mas calma verdad? Creo que tienes razón, eres bueno para escuchar"

"¿Qué demonios estas haciendo?" el Kyubi se estaba hartando de escuchar a su jinchuriki hablar con esa cosa llamada 'Appa', "Sabes que hablas con una cosa que come madera y huele traseros de otros animales ¿verdad?"

"¡Oye! No digas eso, Appa es listo ¿no amigo?" sonriente Naruto miro como la gran bestia solo dio un gruñido bajo.

"Yo solo veo un buen bocadillo" el zorro se río entre dientes preguntándose qué tan bien podría saber esa cosas, tenia un buen tamaño y seria lo suficiente para un buen bocado, tal vez estaba hecho de chakra y no necesitaba comer, pero aun así el placer de comer algo era bueno.

"No te vas a comer a Appa" con un suspiro el rubio solo acaricio el pelaje de la gran bestia que solo se mantuvo quieto disfrutando el contacto. Hace algunas horas que Aang, Katara y Sokka se fueron a un pueblo del reino tierra, se llamaba Omashu si no recordaba mal.

Bueno la cuestión era que decidió quedarse a cuidar de Appa y Momo, ya que podía notar que Aang se sentía algo sombrío luego de discusión de ayer, bueno no era como si algo malo pudiera llegar a suceder.

"¿Y por que hablas con esa cosa de todos modos?" el zorro estaba aburrido y luego de mas de una década de encierro hablar con el mocoso era lo único que podía hacer además de dormir.

"Oye lo dices como si fuera una roca" gruño Naruto que saco de su bolsillo una manzana y se la lanzo al bisonte, que solo se la trago, iba a necesitar algo mas que una manzana ¿tal vez una carreta llena seria un comienzo, "Él es un gran animal que siente dolor, felicidad y tristeza, todos sentimos eso, incluso tú…" sonriendo Naruto fue empujado por la gran lengua de Appa que al parecer le estaba dando las gracias por la manzana, "Tal vez eso es lo que nos hace iguales… ¿No lo crees?"

"…"

"…"

"No me compares con ustedes…" gruño con disgusto la gran bestia para cerrar los ojos, ya había escuchado suficiente mierda por un día, "Las bolsas de carne están cerca, ve a molestar a ellos"

"¿Cómo?" Naruto no tuvo oportunidad de preguntar como el Biju sabia eso, pero la conexión que los comunicaba fue cortada, segundos después Naruto vio a unos cansados Sokka y Katara llegar, acompañados de un pensativo Aang, "¿Cómo les fue?"

"Define como es cuando casi eres convertido en un adorno de cristal" el hermano mayor dejo caer su cabeza contra Appa para tomar un respiro.

"No fue como planeamos, pero estuvo bien" Katara solo sonrió al rubio para sentarse junto a su hermano y también descansar, tenia que quitarse fragmentos de cristales en lugares que no podía nombrar en voz alta.

El Uzumaki solo miro extrañado a los dos hermanos de la tribu agua.

"Un viejo amigo me dijo que debo buscar a alguien que escuche antes de actuar, es la clave para el tierra control" el acertijo que le dijo Bumi era algo extraño para el nómada, pero era claro cual era el mensaje, que el no podía abandonar su pueblo para enseñarle tierra control y si se quedaba toda la armada de la nación del fuego los atacaría.

"Suena bien" encogiéndose de hombros Naruto siguió pensando en la charla que tuvo con Appa, de no solo centrarse en el destino, sino de disfrutar el viaje, "Pasamos por un pueblo hace rato, ¿no quieren ir a ver que hay?" pregunto con torpeza mirando a sus compañeros de viaje.

"Si, necesitamos varias cosas que comprar" Sokka no tenia problemas en ir, la verdad necesitaba ir, tenia que comprar un nuevo saco de dormir.

"Pero Sokka no tienes dinero"

"Claro que si" ofendido por el comentario de su hermana menor, el chico saco su billetera y la abrió, "…"

"…" Katara, Aang y Naruto vieron con una mirada en blanco como una polilla salía de la billetera, los tres tuvieron que ahogar una carcajada ente la mirada desencajada de Sokka.

"Esto no es divertido, es triste" encogiéndose de hombros Naruto saco su billetera para abrirla y ver que solo tenia dos monedas de plata, "Oh…"

"Yo tengo dos chelines" sonriente Aang saco dos míseras monedas del chaleco.

"Esto es malo" Katara fue la última en revisar sus bolsillos y bueno no podía seguir riéndose de su hermano mayor, "¿Podríamos conseguir algún empleo?" esa fue una opción.

"O podríamos robarle a alguien" Naruto no tenía problemas en robar a personas que tenían mas de lo necesario, lo hizo antes de ser un genin y lo haría varias veces mas de ser necesario.

"Robar es malo, seremos pobres, pero honrados" Katara tiro de la mejillas a Naruto que gruño adolorido.

"¡Wowowowow! ¡Ok! ¡Ok!" el Uzumaki se froto adolorido su mejilla enrojecida bajo la dura mirada de Katara que asintió con la cabeza.

"Bien, estoy seguro que podremos hacer algo, como vender comestibles, aún tenemos cosas que nos dieron las chicas Kyoshi"

"¿No es malo vender cosas que nos regalaron?" cuestiono Naruto a la chica que tuvo que sonrojarse avergonzada.

"Pues-s… ¡Esta bien lo haremos a tu modo! Pero sin robar"

"¡Ok!" sonriente Naruto asintió con la cabeza, "Escuchen, esta es una treta que una vez hice con Ero-sennin, tuvimos que hacerlo para pagarle los daños de una casa de baños femeninos cuando el estaba espiando"

"¿Estabas espiando en baños femeninos?" Naruto ignoro la pregunta inocente de Aang y la mala mirada de Katara para seguir con el plan.

"Si todo sale bien no tendremos que preocuparnos por dinero por mucho tiempo" sonriente el ninja paso sus brazos sobre los hombros de Katara y Aang formando un circulo con Sokka que tuvo una mirada dudosa todo el tiempo, "Se llamara operación marmota que vuela y cada uno tiene un papel así que presten atención"

"No tengo mucha fe en ti niño hechicero"

"Oye, es esto o trabajar bajo el sol ardiente sembrando semillas por una moneda al día"

"¿Qué debo hacer?"

"Bien escuchen" formando un circulo el singular equipo se junto para escuchar el plan del shinobi.

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El pueblo de Tawa no era exactamente un lugar turístico, estando ubicado cerca del limite entre las tierra de la Nación del fuego y el reino tierra no era viable vivir si se es perjudicado por cualquiera de los dos lados, por eso solo era un pueblo en su mayoría de mercenarios, piratas, mercaderes o renegados que solo buscaban un lugar para beber un trago y comer.

Pero hoy fue un día tranquilo, ya que muchas personas se estaban reuniendo alrededor de un pequeño escenario.

"¡Vengan y prueben su fuerza!" parada sobre el escenario de madera estaba una mujer de extraño cabello dorado atado en dos largas coletas, un rostro fino y bello que era adornado por raras marcas en sus mejillas, unos brillantes ojos azules y finalmente lo que hizo que más de uno tuviera que acomodarse sus pantalones por la gigantescas tetas y caderas que esa mujer tenia, ninguno de los presentes había visto esas medidas en una mujer.

Sonriente la rubia se cruzo de brazos haciendo que sus pechos rebotaran en su chaqueta naranja, "¡Hoy les he traído una prueba difícil! ¡Pero satisfactoria que les hará ganar mucho dinero! Asistente~" llamando con una voz cantarina, una tímida Katara se asomó detrás del escenario cargando una bolsa de tela, llegando ante el publico la abrió.

"Demonios" más de uno de los presentes tuvo que frotarse los ojos al ver un bloque de oro, fácilmente podría tener unos diez kilos y eso ya era mucho al ser oro puro.

"Por solo diez monedas de plata pueden participar y ganar esta pequeña fortuna" con un silbido Naruko hizo que detrás de ella apareciera Sokka que cargaba una caja de madera bastante grande que coloco en el centro del escenario, "La forma de ganar es simple, solo tienen que levantar el premio de la mesa y es todo suyo"

"¿Cuál es el truco?" un joven pirata que cargaba una guadaña miraba con sospecha todo el concurso.

"No hay truco mi joven amigo, solo tienes que levantarla y listo, pero recuerda solo que tengan la mente serena y fuerza bruta en equilibrio podrán levantar este premio" muchos se emocionaron por la prueba tan sencilla y se empezaron a formar, aunque muchos otros se mantuvieron reacios ante la idea, "¿Y quien sabe tal vez el ganador no solo se lleve el oro? Si no también algo de diversión" sonriendo de forma seductora Naruko dio un espectáculo al jugar con sus propios pechos, que hizo que al final todos corrieran a la fila.

Una hora después

"¡Ahhhhhhh!" Un hombre de gran tamaño grito con todas sus fuerzas para jalar la bolsa de oro, pero ni siquiera la movió un centímetro, luego de varios segundos de forcejeo termino cayendo de espaldas desmayado.

"Oh my~" sonriente Naruko pateo el cuerpo fuera del escenario y detrás de ella una cansada Katara sostenía una gran bolsa llena de monedas, fácilmente tenían suficiente dinero para comprar una mansión en alguna gran ciudad, "¿Alguien mas que quiera intentarlo?"

Todos le dieron miradas de odio a la rubio tetona, nadie pudo ni siquiera mover la pieza de oro y todos se sentían frustrados.

"¿Puedo intentarlo?" todos dirigieron su mirada a un extraño anciano de cabello blanco y gran bigote, que era algo enano y vestía ropas naranjas, apoyándose en un bastón subió hasta el escenario.

"Oye abuelo no tenemos un seguro que cubra tus gastos médicos si te rompes la espalda en el intento" se burlo la rubia que solo dio un paso al costado para dejar que el viejo lo intente.

Aang debajo de su disfraz iba a intentarlo, pero de pronto escucho una conmoción.

"Vaya ¿Qué tenemos aquí?" todos los mercenarios se apartaron cuando alguien nuevo llego, era un gran grupo de piratas encabezado por un hombre mayor de cabello canoso que vestía ropas oscuras y un gran sombrero típico de un pirata, con una especie de loro lagarto apoyado en su hombro.

"Es lo que le decía jefe, es un premio gordo" uno de sus seguidores sonrió al ver la belleza rubia que cargaba una gran bolsa con monedas y junto a ella la pieza de oro.

"¿Quiere intentarlo señor?" Sin dejar de sonreír Naruko no se intimido cuando el gran pirata camino hasta ella seguido de todo su grupo armado con espadas y otras armas blancas.

"¿Por qué no lo hacemos interesante cariño?" devorando con la mirada a la curvilínea mujer, el pirata saco de su bolsillo las diez monedas de plata, "Si yo levanto esa cosa, me llevo el oro y todo lo que ganaste hoy en mi territorio…"

"¿Y si no puedes?" la rubia miro interesada como el pirata abrió su abrigo para sacar un pergamino azul con un curioso símbolo.

"Esto es un pergamino de un maestro agua que tiene una serie de pasos avanzados de agua control, lo iba a vender a un noble del reino tierra, vale 200 piezas de oro"

"¿Ehhh?" los ojos de Katara brillaron al ver ese articulo.

"hummmm" con interés la rubia se froto la barbilla.

"Y sumo la apuesta con cien piezas de oro… pero solo si me aseguras algo de diversión esta noche" propuso de forma descarada mirando los grandes pechos de la mujer que solo sonrió aun mas.

"¡Trato!"

Katara, Sokka y Aang miraron todo con escepticismo , su amigo se estaba arriesgando demasiado.

El pirata con calma camino por el escenario para mirar la caja que tenia la bolsa de oro, sacando su espada atravesó la caja tensando a los cuatro amigos, una nube de humo salió de los bordes de la caja, "Interesante truco, pero no todos podemos ser engañados"

"Uy~" Naruko podía sentir las miradas mortales de todos los presentes.

"Trabajo fácil" tomando la bolsa el pirata la abrió para ver la roca de oro solido, pero antes que pudiera hacer algo fue empujado.

"¡Gracias por participar!" Naruko lo tomo todo, la bolsa de oro de las manos del pirata, la bolsa con monedas de las manos de Katara e incluso tomo el pergamino del sujeto que apenas pudo levantarse antes de ser pisado, "¡Nos vemos~!" sacando de su escote una bomba de humo la lanzo al suelo y luego bajando del escenario salió corriendo entre la multitud.

"¡Quinientas piezas de oro por la cabeza de esa zorra!" El capitán de los piratas se alzo con furia para desenvainar su espada e ir en la búsqueda de la maldita que se atrevió a estafarlo. Con un grito de euforia todos los mercenarios corrieron en multitud en la búsqueda de la 'Zorra dorada' que corría mas rápido de lo que uno pensaría posible.

Al final solo quedaron Katara, Sokka y Aang en el escenario.

"Eso no salió tan bien como pensé" hablo con decepción el Avatar que se quito el cabello falso y el bigote, los dos hermanos de la tribu agua se miraron entre ellos y suspiraron, ahora tenían que ir por el ninja y salvarlo.

"Todo lo contrario mi amigo" los tres se exaltaron cuando escucharon esa voz, saliendo debajo del escenario un sonriente Naruto estaba cargando todo lo que 'Naruko' supuestamente se había llevado.

"¿Entonces tu eres el real?" pregunto con duda Sokka, era tan extraño ver las habilidades del hechicero, verlo convertirse en una mujer sexy fue algo perturbador, ¿era un varón al final? Esperaba que si, no solo tenia que lidiar con el Avatar sino un hechicero de apariencia cambiante.

"Sip"

"¿Y que sucederá con los piratas? Vendrán a buscarnos?" hablo preocupada Katara. La sonrisa maliciosa del Uzumaki fue su única respuesta.

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"No tienes a donde huir perra" el capitán de los piratas sonrió de forma pervertida al ver a la 'zorra dorada' arrinconada contra un risco y rodeada de todos los mercenarios y piratas armados.

"Oh no… ¿Qué me van hacer?" mas de uno sintió una incomoda erección al ver a la vulgar mujer tocar sus pechos y abrir lentamente su chaqueta dejando ver que no llevaba siquiera sostén.

"Nos divertiremos contigo y luego te quitaremos mi recompensa" el capitán sonrió con lujuria, y sin pensarlo corrió por su premio maniobrando su espada, pensando en solo someterla para atarla y tenerla en su barco toda la… "¿Qué-" se tuvo que cubrir los ojos y detenerse cuando una nube de humo envolvió a la mujer.

"ku ku ku… ven por tu recompensa"

Ninguno de ellos olvidaría tal escena que quedaría marcado en sus memorias hasta el día de sus muertes, ante ellos apareció un sujeto piel muy blanca, largo cabello oscuro, ojos de serpiente y lo peor de todo, completamente desnudo.

"¡Whhhaa~!" el capitán devolvió su desayuno y se arrojo al suelo para tomar puñados de tierra y tirarlo a sus ojos.

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Mas tarde en esa noche, luego de comprar casi todo lo que encontraron interesante el equipo Avatar estaba acampando a los pies de una montaña con una gran fogata en el medio del campamento.

"…" Katara no pudo evitar mirar extraño a su hermano.

Que tenía una especie de gorro de detective, una pipa y gran chaqueta marrón que era algo grande para él, "Sabes nunca llegue a apreciar el estilo de esto" orgulloso el adolescente se sintió importante vistiendo esos trajes, "Me siento mas importante" con una sonrisa petulante saco un fósforo para encender su pipa, *Cof cof* con solo probarlo termino tosiendo de forma ruidosa.

"¿En verdad pensante que fumar era una buena idea?" Katara se palmeo la frente al ver a su hermano seguir tratando de fumar por la pipa sin éxito.

"Oye no digas nada, yo no fui la que gasto casi un cuarto del dinero en ropa y zapatos" señalo de forma acosadora a la maestra agua que tímidamente escondió varias cajas detrás de los arbustos.

"¡Pue-e-s Naruto dijo que podríamos comprar lo que queramos!" molesta se cruzo de brazos.

"Sabes que si le pones un vestido a un oso malhumorada solo seguirá siendo un oso ¿verdad?" la sonrisa de Sokka desapareció cuando su hermana se lanzo contra él y la pelea de forcejeos comenzó.

"Estan muy animados hoy" sonriente Aang solo le dio a su gran amigo peludo un barril lleno de manzanas, al ser un monje no creía en las cosas materiales, por solo compro toda fruta y vegetales que pudo para Appa y Momo, también un silbato que aun no sabia si funcionaba, "¿Tu qué crees Naruto?"

"…"

"¿Naruto?" el monje levanto una ceja al ver al rubio estar concentrado mirando un tazón de sopa con fideos y varios vegetales más, él con una mirada determinada tomo el tazón para dar una probada y devorando varios fideos.

"¡Otro fallo!" dramáticamente el adolescente dejo el tazón sobre la mesa y volvió a mirar la olla que tenía su lado.

"¿Fallo?" curioso Aang se acercó para tomar el tazón y al ver que no había rastro de carne sonrió, comida vegetariana, tomando los palillos empezó, "Wow…" los fideos eran tan suaves, la sopa era tan ligera y sabrosa, y los vegetales estaban en su punto justo, era el mejor plato de sopa con fideos que había probado.

"Veo que te gusto" Sonriente Naruto tomo tres tazones y los coloco sobre la mesa en la que estuvo cocinando toda la noche, con un cucharón empezó a servir.

"¿Qué es eso?" los dos hermanos dejaron de pelear al sentir un tentador aroma en el aire, Katara dejo de pisar la espalda de su hermano para acercarse y tomar uno de los tazones.

"Es la comida de los dioses Katara-chan" revolviendo la olla el rubio estuvo en silencio mirando como los dos hermanos se sentaban para comer.

"Esto está bueno" Sokka hundió su cabeza en el tazón, necesitaba combustible luego de un día tan largo como el de hoy.

"Tiene razón" la chica mostró su aprecio por el platillo al servirse otro, "Nunca probé nada como esto ¿Cómo se llama?"

"Es ramen, la mejor comida del mundo" echando algo de sal siguió dando algunos giros con el cucharón, para luego dar una probada, "Lastima que no está ni cerca de ser tan bueno como el del viejo del Ramen y Ayame-nee"

El día que supo que en este mundo no existía el ramen, fue un día muy negro para Naruto.

Pero luego de rogarle casi de rodillas a Yuei que le enseñara a cocinar, recordó cada ingrediente que se utilizaba para el ramen, aunque habían cosas que no conseguiría por razones de ubicación, al menos tenia lo básico, fideos y el caldo. Todo para hacer un ramen tan bueno como el Ichiraku.

Lastima que aun sintiera que le faltaba décadas para hacer uno tan bueno. Las horas pasaron y el pequeño grupo estaba satisfecho sentados alrededor del fuego, disfrutando de la calma luego de un día tan agitado.

"Naruto… ¿tú tienes padres?" el Uzumaki levanto la mirada del fuego para mirar los suaves ojos azules de Katara, Sokka y Aang también miraron al ninja curiosos.

"No, soy huérfano desde que tengo memoria, según me dijeron ellos murieron el día que nací" hablo sin problemas el rubio que solo atizo las brasas para avivar las llamas del fuego.

"Lo siento…" rápidamente Katara quiso disculparse, pero el chico solo le sonrió con calma, "Nuestro padre se embarco en la guerra hace ya bastante tiempo… y yo perdí a mi madre hace ya muchos años" bajando la mirada sintió que era un tema muy delicado aun si ya pasaron años, pero ella levanto la mirada cuando una mano firme se apoyo en su hombro.

"Estoy seguro que tu padre esta bien y tu madre donde sea que este no quería verte así de triste, debes de sonreír… ¡así!" dando su mejor sonrisa consiguió que la niña riera, al final la sonrisa fue contagiada a los cuatro que luego de algunos minutos volvieron al silencio.

"Esta guerra nos ha quitado mucho, no puedo esperar para derrotar a la nación del fuego y que todo acabe" tomando la palabra Sokka apretó el agarre en el mango de su boomerang.

"Así será" pensando igual que su amigo el monje lo secundo.

"Me hubiese gustado que esto tuviera una mejor solución" llamando la atención del grupo, Naruto tenía una mirada triste en sus ojos, "Una mejor solución que solo vencer a la nación del Fuego"

"¿De que hablas?"

"Paz"

"Bueno…" el Avatar estaba confundido por la mejor 'solución' de la que hablaba el ninja, "Si vencemos a la nación del fuego volverá el equilibrio con cada nación viviendo en paz en sus respectivos hogares"

"Ese es el problema" frotando su cuello con duda fue el blanco de las miradas extrañadas de sus amigos, "Una vez la guerra termine todos volverán a ser como antes hasta que la siguiente guerra empiece…"

"¿A que quieres llegar?" cuestiono Sokka que estaba igual de confundido que su hermana y el monje.

"¿Por qué tiene que ser así? ¿Por qué tienen que estar tan divididos? ¿Por qué no juntar lo mejor de cada lugar y… formar algo mas grande que las cuatro tierras elementales?"

"Porque así no funciona" Aang se mostró serio ante esa idea y tuvo que refutarla, "Las cosas siempre fueron de esta manera y si intentamos cambiarla… ¿Quién sabe que tanto daño pueda haber?"

"Tiene razón" Sokka tuvo que estar de acuerdo con el monje, "Después de estar casi cien años en guerra, no vas a esperar que todos queramos vivir en el mismo lugar que la nación del fuego, ellos ya han causado demasiado daño"

"No todos los de las Nación del fuego quieren esto" frunciendo el ceño Naruto se mantuvo firme, "Es una guerra lo se y también se que solo parara hasta que uno de los lados sea destruido… pero…" frunciendo el ceño miro un momento el fuego, "¿Todo será siempre así? un ciclo de odio donde todos ustedes odiaran a quienes sean de la nación del fuego, y si en unos años el reino tierra toma la misma decisión que tomo la nación del fuego con los nómades del aire"

"Naruto" Katara quiso detener la charla que estaba tomando un rumbo peligroso.

"Yo no dejare que eso pase" dijo con determinación el Avatar que se apuntó a sí mismo, no volvería a fallar en su destino.

"¿Y si fallas?"

El tiempo parecía haberse deteniendo con esa pregunta, las brasas chasquearon cuando el fuego seguía iluminando la oscura noche e iluminaba el rostro de ambos niños que se miraban uno al otro con sus propios sentimientos.

"¿Siempre el mundo tendrá que depender de ti? ¿Nunca podrán llegar a una solución sin ti?" No sabía porque, pero Naruto sentía frustración que Aang pensara que todo estaba en sus manos, como si el destino de este mundo dependiera de él, como si solo el fuera la solución, como si su destino estuviera escrito en piedra, siempre odio cuando las personas mencionaban que estaban destinados a cosas grandes solo porque eran especiales.

"Ese es el trabajo del Avatar" frunciendo el ceño Aang no se dejó intimidar y respondió con la misma mirada dura que tenía el shinobi.

"¿Y nadie mas puede hacerlo? Un niño que lo perdió todo por esta guerra no puede levantarse y querer ponerle fin, una madre que perdió a sus hijos en el campo de batalla no puede intentar ponerle fin a esos combates sin sentido…" Naruto aguardo un momento en silencio, dando un suspiro paso su mano por su cabello, "Todos podemos levantarnos… todos podemos decir ya basta…"

"¿Y tu quieres matar al Señor del fuego?" Katara y Sokka se miraron preocupados ante la tensión formada por la discusión.

"No, yo quiero que la guerra acabe, entre tantas personas que se hacen pedazos, solo deseo que todo llegue a su fin, empezar algo nuevo y garantizar la paz" los minutos pasaron con la misma atmósfera pesada que se podía cortar con un cuchillo, al final fue roto por Naruto se dio la vuelta y se dejo caer en su bolsa de dormir, "Mañana será otro día, buenas noches"

Los hermanos de la tribu agua solo se miraron en silencio para luego también irse a dormir, dejando solo a Aang que tenía una mirada vacía en el fuego, él no lo noto pero sus ojos tuvieron un destello blanco, cansado se fue a dormir.

Chan

Channnn

Channnnnnnnn

Channnnnnnnnnnnnn

¿Qué les pareció?

Próximo capitulo: El maestro fuego y separación…