Después de la conversación con Cyrax, Raiden y Logan se encontraban en una intensa discusión en el templo del Dios del Trueno. Mientras Raiden mantenía su posición sobre no tomar vidas, Logan argumentaba apasionadamente que la única forma de nivelar el campo de juego en el Mortal Kombat era ser tan despiadados como sus enemigos.

Raiden: (con determinación) Wolverine, entiendo tu perspectiva y tu experiencia, pero no podemos permitirnos descender al mismo nivel que nuestros rivales. Si perdemos nuestra moral y matamos, nos convertiremos en monstruos como ellos.

Logan: (frustrado) ¡La moral no nos salvará en este torneo, Raiden! Estos tipos no juegan limpio. Necesitan saber que no somos un blanco fácil.

Raiden: (sereno) No podemos sacrificar nuestra integridad por la victoria. Debemos encontrar una manera de prevalecer sin manchar nuestras almas.

La tensión en la habitación era palpable mientras los dos héroes continuaban debatiendo. Logan se dio cuenta de que no iba a cambiar la opinión de Raiden y finalmente salió del templo, frustrado y enojado.

Lo que ninguno de ellos sabía era que en las sombras, el hechicero Shang Tsung observaba con interés la discusión entre Raiden y Logan. Había notado la frustración y la ira en el corazón de Logan y planeaba aprovecharla. Shang Tsung sabía que la ira y la venganza podían ser armas poderosas, y tenía la intención de explotar la rabia de Logan para sus propios fines.

Shang Tsung se comunicó con dos de sus guerreros, Sheeva y Baraka, y les ordenó seguir a Logan y llevar a cabo un plan que tenía en mente. Quería que Logan se convirtiera en un instrumento de su venganza contra Raiden y los campeones de la Tierra.

Sheeva y Baraka se deslizaron sigilosamente por los pasillos del templo, siguiendo a Logan a distancia mientras este se alejaba del templo. El plan de Shang Tsung estaba en marcha, y lo que vendría a continuación podría cambiar el rumbo del torneo y poner en peligro a los campeones de la Tierra. 

Logan se encontraba en medio de la torre, rodeado por el silencio que solo se rompía por el viento que soplaba en lo alto de la estructura. La duda aún lo atormentaba, y las palabras de Raiden resonaban en su cabeza. La moral y la integridad eran sus principios, pero también entendía que estaban en un torneo donde las reglas eran muy diferentes.

Antes de que pudiera tomar una decisión definitiva, Logan fue interrumpido por la llegada de dos de los secuaces de Shang Tsung, Sheeva y Baraka. Mientras se preparaba para el enfrentamiento, Logan cuestionó su presencia y les preguntó por qué lo habían seguido hasta la torre. Sheeva respondió que Shang Tsung deseaba verlo y que tenía una oferta que podría interesarle.

Logan, seguro de sí mismo, respondió con firmeza: "No hay nada que ese brujo me pueda ofrecer que yo quiera". Sus garras se desplegaron, y la confrontación comenzó con Sheeva. La Shokan era formidable, con sus cuatro brazos que la convertían en una oponente imponente. Sin embargo, la velocidad y agilidad de Logan le daban la ventaja en la pelea. Después de un rápido y feroz intercambio de golpes, Logan encontró una apertura y atravesó a Sheeva por el estómago, dejándola fuera de combate pero sin matarla.

Baraka se acercó, sus cuchillas listas para la batalla, y se burló de Logan. Dijo que aún no había terminado, pero Logan, en su característico estilo sarcástico, respondió: "¿Tú? Por favor... Ni siquiera puedes vencer a Johnny". El duelo entre los dos guerreros continuó, una danza mortal de cuchillas y garras. A pesar de la ferocidad de Baraka, Logan logró superarlo y lo dejó fuera de combate.

Una vez que la pelea terminó, Logan se limpió las manos y suspiró. Sabía que debía encontrar a Shang Tsung y averiguar qué tenía que ofrecer. Aunque sus principios eran firmes, las palabras de Raiden todavía resonaban en su mente. La moral y la integridad eran esenciales, pero también debía proteger a la Tierra y a sus aliados. Con determinación, se dirigió hacia el interior de la torre, decidido a enfrentar al hechicero y averiguar cuál era su oferta.

La confrontación entre Logan y Shang Tsung estaba llena de tensión. Logan llegó al lugar, pisando fuerte y desafiante. Shang Tsung lo recibió con una sonrisa maliciosa, mientras Quan Chi, el brujo oscuro, estaba a su lado. Shang Tsung expresó su deseo de ver a Logan, y el mutante le preguntó directamente qué era lo que quería.

Shang Tsung se recreó en sus palabras y dijo: "Tengo entendido que hay algo especial en ti, además de tu regeneración espectacular y esas garras impresionantes. He sentido la energía de tu Chi y de tu alma y he notado que no eres de este mundo. He indagado más a fondo y me he enterado de que no tienes memoria. Raiden te prometió devolverte tus recuerdos a cambio de que luches de su lado, pero yo puedo ofrecerte algo mejor. Puedo devolverte tus recuerdos en este mismo instante y colmarte de inmensas riquezas. Mujeres, dinero, tierras; lo que desees será tuyo. Todo lo que pido es que te unas a nuestro bando. Serás un ganador."

Logan escuchó atentamente las palabras de Shang Tsung, entendiendo claramente lo que el brujo intentaba ofrecerle. Sin embargo, sus principios y su lealtad a Raiden eran inquebrantables. Respondió con un firme "¡NO!" y se dio la vuelta para alejarse de los dos brujos.

Shang Tsung y Quan Chi se miraron brevemente, sorprendidos por la negativa de Logan. No esperaban que fuera tan inflexible. Pero antes de que pudieran reaccionar, Quan Chi utilizó su magia oscura para detener a Logan. El mutante se vio levitando en el aire, con su cuerpo retorcido y sus huesos desgarrados por la magia del brujo. El dolor era insoportable, pero Logan no se rindió. Casi inconsciente en el suelo, sus poderes mutantes se activaron.

Ante el asombro de Shang Tsung y Quan Chi, los huesos de Logan se reajustaron y su piel comenzó a regenerarse rápidamente. Con una mirada desafiante en los ojos, se puso de pie. El mutante había demostrado que no sería tan fácil de derrotar, y la determinación ardía en su interior. Shang Tsung y Quan Chi se dieron cuenta de que Logan no sería un títere fácil de manipular y que estaban ante un adversario formidable.

Logan estaba furioso, su sangre hervía por la afrenta que Shang Tsung y Quan Chi habían intentado infligirle. Estaba decidido a luchar con todo lo que tenía, a pesar de que su oponente era Quan Chi y no el propio Shang Tsung. Quan Chi, por otro lado, estaba dispuesto a enfrentar a Logan y demostrar su poder oscuro.

La lucha entre Quan Chi y Logan se convirtió en un enfrentamiento épico, lleno de movimientos rápidos y devastadores. Ambos combatientes estaban decididos a derrotar al otro, y la ferocidad de la batalla era evidente.

Comenzaron con un intercambio rápido de golpes. Logan se movió con agilidad y aprovechó su velocidad sobrehumana para esquivar los ataques mágicos de Quan Chi. Quan Chi, por su parte, utilizó sus poderes oscuros para crear proyectiles y barreras mágicas, tratando de mantener a raya al mutante.

Logan avanzó con sus garras de adamantium reluciendo a la luz de la luna, realizando un corte en el brazo de Quan Chi. A pesar de la herida, Quan Chi no se detuvo y lanzó un hechizo de sombras que envolvió a Logan momentáneamente, cegándolo. Logan, sin embargo, usó sus sentidos agudos y su experiencia para seguir rastreando a su oponente.

La lucha se volvió más intensa a medida que avanzaba. Quan Chi intentó atrapar a Logan con cadenas mágicas que surgían del suelo, pero el mutante las cortó con sus garras. Logan saltó con fuerza y asestó un poderoso golpe a Quan Chi, lanzándolo contra una columna. A pesar de las heridas, el brujo no se dio por vencido y contraatacó con un rayo de energía oscura que envió a Logan tambaleándose hacia atrás.

Logan se recuperó rápidamente y cargó contra Quan Chi, realizando un giro acrobático que terminó con un golpe de sus garras en el pecho del brujo. Quan Chi cayó al suelo, herido y debilitado, mientras Logan se mantenía firme.

La batalla continuó con ambos luchadores agotados pero decididos. Logan finalmente logró superar a Quan Chi, y sus garras se hundieron en el torso del brujo, provocando un grito de dolor. Quan Chi cayó al suelo, derrotado y casi inmovilizado.

La lucha llegó a su fin con Logan triunfante y Quan Chi gravemente herido. Logan demostró su valentía y habilidades como luchador, mientras Quan Chi se retiró en derrota. Logan había demostrado su inquebrantable determinación y su poder como mutante.

Tras la lucha, Logan se puso de pie, miró con intensidad a Shang Tsung y lanzó una advertencia: "Te lo advierto, no soy un perro faldero. Soy Wolverine. Si intentas algo contra mí otra vez, te aseguro que no vivirás para contarlo." Su mirada reflejaba su seriedad y su disposición de enfrentar cualquier desafío.

Después de su advertencia, Logan se alejó sin mirar atrás, dejando a Quan Chi gravemente herido en el suelo. Shang Tsung había subestimado al mutante y ahora se daba cuenta de que debía encontrar una forma de neutralizar o eliminar a Logan del torneo de Mortal Kombat si quería alcanzar sus siniestros objetivos. La historia estaba lejos de terminar, y la rivalidad entre Logan y Shang Tsung estaba lejos de resolverse.

Después de la feroz batalla que Logan tuvo con Quan Chi, se reunió con sus compañeros y amigos de la Tierra para compartir lo que había ocurrido. Todos estaban asombrados por la descripción de Wolverine de la batalla con Quan Chi. Raiden elogió a Logan por no haberse dejado convencer por Shang Tsung y por haber derrotado a Quan Chi con tanta ferocidad.

Mientras los peleadores de la Tierra seguían discutiendo lo sucedido, Shang Tsung anunció el próximo combate: "¡Ahora pelearán Cyrax contra Wolverine!". Logan miró con desprecio a Shang Tsung y, sin decir una palabra, se dirigió a la arena de combate. Cyrax estaba concentrado y listo para la batalla.

La pelea entre Logan y Cyrax fue intensa y de corta duración. Logan decidió no sacar sus garras de adamantium y en su lugar, usó sus puñetazos, demostrando su capacidad para resistir sus impulsos mortales. La lucha fue feroz, y aunque Cyrax era un adversario formidable, Logan consiguió dejarlo fuera de combate.

Sin embargo, la sorpresa llegó cuando Shang Tsung anunció que el ganador era Cyrax. Todos los presentes, tanto peleadores de la Tierra como del Outworld, quedaron perplejos por el resultado. Shang Tsung explicó su decisión argumentando que Wolverine no sufrió daño alguno debido a su regeneración, lo que hacía imposible competir de manera justa. Por lo tanto, anunció que Wolverine sería descalificado del torneo.

La decisión de Shang Tsung de descalificar a Wolverine del torneo dejó un sabor amargo en la boca de todos los peleadores de la Tierra. La incredulidad y el enojo se manifestaron en murmullos y expresiones de desaprobación. Los guerreros estaban indignados por lo que consideraban una medida injusta y arbitraría.

Logan, a pesar de la descalificación, mantenía su determinación intacta. Sabía que había hecho lo correcto al no dejarse llevar por la sed de sangre y al preservar la vida de Cyrax. Su promesa a Raiden era más importante que cualquier victoria en el torneo de Mortal Kombat.

El mutante se acercó a su amigo Liu Kang y le entregó la responsabilidad de vengar la injusticia cometida. "Liu Kang... sé que puedes hacerlo, amigo. Acaba con Shang Tsung y gana este torneo en nombre de la Tierra," le dijo con confianza. Liu Kang asintió en señal de aceptación y determinación. Cargaría con la responsabilidad de luchar por todos los peleadores de la Tierra y, de alguna manera, honrar la lucha de Logan.

Raiden, el Dios del Trueno, miró a Logan con gratitud y seriedad. "Juro por mi vida que cumpliré mi palabra y te ayudaré a recuperar tus recuerdos, Logan. Puede que este torneo haya tomado un giro inesperado, pero no hemos perdido la esperanza," aseguró el protector de la Tierra.

Con el ánimo renovado y una promesa de justicia, Logan decidió retirarse de la arena por el momento. Observó la lucha entre Liu Kang y Shang Tsung con la esperanza de que su amigo pudiera prevalecer y llevar a cabo una venganza apropiada.

FIN.

(Se que este capitulo iba para Cyrax, pero honestamente mejor le di este capitulo a Logan que a un personaje que solo tiene 4 minutos de protagonismo)