Entre los que estaban combatiendo contra las filas de la "Legión Ardiente" se hallaba un General Orco, uno de los tantos que se hallaban allí y comandaban las feroces ofensivas para ir recuperando terreno. Fue entonces que Mitsurugi reconoció a aquel militar de piel verde que había visto tiempo atrás, durante la "Campaña de Axel". El chico de cabello rubio abatió a cualquier enemigo que se interpusiera en su camino. La hoja de "Gram" cercenó el cuello de otro Can Manófago y de ahí fue acercándose hasta aquel Orco, quien se volteó para hablar con una de su raza, quien le entregaba un informe sumamente importante.

- Así que el campo de batalla nos vuelve a llamar, ¿no lo cree de esa manera, General Nazgrim?.- Preguntó el Espadachín, llevando a que el Orco se volteara y empuñara su Hacha de Guerra, con la cual le apuntó al pecho del joven pero éste se mostró tranquilo, fresco, sereno. Alzó sus manos, "Gram" estaba en su vaina, sin embargo, el militar lanzó su arma por el aire, dándole al pecho de un "Aranasi", la cual cayó muerta y bajo un grito de agonía que se perdió en la distancia. El rubio no podía dar crédito a lo que había visto, ese enemigo no estaba detrás suyo hacia unos segundos. Su cuerpo le tembló, por primera vez, ante el asombro. 

Por su parte, Nazgrim, acompañado por aquella Orco, se acercó y lo miró de cerca.

- Te recuerdo: Eres el chico que lideró la recuperación del Pueblo de Axel.- Lo observó con aquellos ojos y de ahí colocó su mano sobre los hombros del rubio.- Mitsurugi Kyouya, si, así es. Ese es tu nombre. Jejeje, para esta guerra tienes que estar atento, niño. No es como las de tu Mundo, sino de aquí son violentas y tenaces.- Tomó su Hacha de Guerra del cuerpo sin vida del "Aranasi" y lo volvió a mirar.- No dejes que el terreno, supuestamente, "limpio" sea tu perdición. Analiza hasta debajo de las rocas, ¿quién sabe qué cosas se ocultan allí?.- Dejó ese consejo.

No podía negarlo, aquel General de "La Horda" seguía siendo el mismo: Frío, severo, calculador, inteligente y un gran estratega a la hora de combatir. Sin embargo, en aquellos momentos, desde el "Portal Oscuro" vio emerger a más de esas criaturas y no parecía tener fin. La "Guardia Vil" volvía a marchar, por lo que los Orcos y Elfos de Sangre volvieron a tensar sus arcos, ballestas, cargaron sus "Blunderbuss", así como también sus máquinas de asedio, catapultas, balistas, cañones y la Caballería de Lobos, los cuales se lanzaron en picada contra los Demonios. 

- ¡Hey, muchacho, no te quedes atrás y pelea, que una guerra no se gana, únicamente, con ser el más presumido. También se utiliza la astucia y la fuerza!.- Le llamó Nazgrim, quien partía al frente con los suyos. 

Las palabras del Orco quedaron en su mente y mientras que desenvainaba a "Gram", Mitsurugi no vio que un Brujo Eredar lo tenía en la mira. Su Magia Vil se hallaba concentrada en una esfera de color verde pálido, listo para dar en el blanco y de ahí disparó. 

- ¡MITSURUGI!.- Le gritó Sena y el chico reaccionó, esquivando el impacto que casi lo mataba. El suelo, donde antes había estado en su posición, comenzó a agrietarse y mostrar un aspecto de marchitarse. 

- Maldito.- Le lanzó el Espadachín una maldición al Brujo Eredar, quien lo estaba desafiando para que peleara.- ¿Qué? ¿Quieres pelear?. Muy bien, así se hará. En cuanto termine este duelo, atravesaré tu corazón.- Juró y cargó contra el enemigo.

Abriéndose camino entre los demás Brujos Eredar y Man'ari, el rubio trazó un arco que fue en dirección hacia la cabeza del rival, pero éste le lanzó un conjuro que lo mandó a volar por los aires, dejando una marca por el piso. Se quitó el polvo y cargó nuevamente, golpeando con su Espada al otro, quien no parecía ceder en ningún momento. Para colmo, otros Demonios como los "Imps" y la "Guardia del Terror" llegaban para respaldar al Eredar en su combate, por lo que Mitsurugi tenía que combatir en dos frentes a la vez. 

- ¡Vengan a mí si tienen coraje!.- Bramó el rubio y tuvo que emplear su Magia para expulsar a los enemigos que querían detenerlo.

Desde su vasto territorio en el "Vacío Abisal" y la "Gran Oscuridad del Más Allá", Sargeras presenciaba la Batalla de la Costa Quebrada con seriedad. No se mostraba contento, ni mucho menos decepcionado, sabiendo muy bien lo que tenía que hacer el Gul'Dan Alterno. Sin embargo, aquellos aventureros que venían de otro Mundo eran una auténtica piedra en su camino. Sus ojos incandescentes observaron a un castaño con una Espada y Magia que diezmaba a los enemigos que se interponían en su camino, una Diosa de caballo azul que invocaba mareas y olas, una Hechicera que provocaba explosiones por donde pasaba, una Paladín rubia que combatía con honor junto a Tirion Fordring, una peli negra que, al igual que la otra, eran Magas expertas en su campo, una Lich que congelaba a las fuerzas de la "Legión Ardiente", un sujeto de cabello negro y antifaz que tomaba posesión de los cuerpos enemigos, una rubia acompañada por un hombre de cabello en cresta y musculoso que no dejaban a ningún Demonio en pie, así como también una bella mujer de cabello negro y un Espadachín rubio junto a esa gata que lanzaba llamaradas contra todo lo que se moviera. Sí, aquello podía ser un auténtico menester, un dolor de cabeza para sus planes pero nadie llegaba a interponerse en su camino y todo aquel que lo hiciera iba a lamentarlo con creces. 

Por su parte, el "Titán Caído" observó a aquel Brujo y la Elfa de la Noche de nombre Cordana que avanzaban hacia su meta, teniendo a los que estaban a cargo de la "Tumba de Sargeras" bajo ataque constante, distraídos, había llegado su momento de tomar cartas en el asunto.

- ¡TOMA ESTO!.- Bramó Mitsurugi, quien logró destruir las defensas del Brujo Eredar.

- ¡No estás a mi altura, mocoso! ¡Solo eres un niño!.- Le espetó el enemigo pero antes de que pudiera disparar, el rubio utilizó su Magia y la Espada, atravesándole el pecho al otro, quien cayó de bruces al piso, sin vida.

- Te dije...- El Espadachín se hallaba agitado y rodeado por los cuerpos sin vida de varios Demonios que había eliminado.- Que atravesaría tu corazón.-  En aquel momento, el chico se arrodilló para recuperar el aliento, ya que peleó con todas sus fuerzas contra aquellos oponentes, sin embargo, estos no paraban de venir, por lo que se dio un pequeño descanso.

La Fiscal Sena lo vio allí, por lo que fue en su ayuda. Se arrodilló y notó de que respiraba, aunque había empleado una buena parte de su poder para combatir a los enemigos que se le interponían en su camino. Sus ojos se enfocaron en el Brujo Eredar abatido junto a los otros. Acto seguido, lo ayudó a ponerse de pie y salieron de allí con rumbo hacia una zona segura.

Por su parte, la Batalla de la Costa Quebrada no parecía marcar vencedores ni vencidos, el enemigo continuaba fluyendo desde el "Portal Oscuro" y Khadgar se encontraba liderando la defensa de la "Tumba de Sargeras" junto a Maiev y sus "Vigilantes". El peligro crecía con cada segundo que pasaba y que el enemigo no pensaba en ceder. 

Volviendo con Kazuma y los demás, éste había dado una gran ayuda para abrir una brecha entre las filas enemigas y así llegar hasta donde se encontraba la posición enemiga, el "Portal Oscuro" que resplandecía por la Magia Vil, las huestes de la "Legión" continuaban su marcha y la balanza no parecía inclinarse a favor de "La Alianza" y "La Horda", sino de que se estaba estacando cada vez más y eso no era buena señal. 

- No lo entiendo, estos desgraciados no paran de venir. Parece como si estuviéramos en un "Loop".- Quedó Aqua asustada por aquello que tenía ante sus ojos.

- Y que lo digas, a este paso nos quedaremos extenuados y no podremos continuar.- Advirtió Kazuma, quien derribó a otro "Guardia Vil".

Desde las colinas y despeñaderos, Sylvanas, Nathanos y sus "Forestales Oscuros" no paraban de arrojar flechas envenenadas contra los Demonios. En tierra, "La Horda" y "La Alianza" combatían sin descanso, incluso Thrall empleaba todas sus fuerzas y las canalizaba en las formaciones enemigas, pero eso era un ligero golpe en comparación con la avasalladora fuerza que representaba la "Legión". En un momento dado, desde el Sur, Varian y las fuerzas que comandaba junto a los otros cargaron en una espectacular embestida que llevó a que los enemigos dieran marcha atrás, siendo esa la oportunidad para terminar con la pelea. 

Sin decir nada, la "Legión" se vio en retroceso, había que tomar el "Portal Oscuro" de una buena vez. Incluso Mitsurugi se había recuperado y partió al frente, combatiendo junto al General Nazgrim y sus tropas. 

Pronto, los Ejércitos Aliados llegaron hasta el "Centro" mismo de la invasión y con ello, aquella "Puerta" que les daba el paso a esas huestes. Solo tenían que destruirlo y así frenar los avances, parecía sencillo...pero algo se ocultaba entre las sombras y maquinaciones de Gul'Dan.

[Este capítulo ha sido corto pero les explicaré de que, en la siguiente parte, es donde todo se va a poner muy feo (los que ya jugaron "Wow: Legion" lo sabrán, tristemente), sin embargo, habrá cambios en esa citada más arriba, ya que, como dije, no me gustó lo que se vio en la versión original de aquella expansión.

Espero que les guste, amigos. Nos estamos viendo.

Mando saludos y agradecimientos para todos ustedes.

Cuídense y hasta el próximo capítulo.

Buen inicio de día Jueves, Camaradas.].