Saliendo del estudio, Bennett siguió con la vista a su compañero mientras este se subía a una moto, listo para irse. Normalmente Ben solía marcharse en su carro, o a veces se daba el lujo de irse caminando como cualquiera, sin preocupación; aunque fuese o no fuese por aquel distintivo color de cabello turquesa que traía, de cualquier modo ese nombre llamaba la atención donde sea.

—¡Hey, Bon! —. Bennett se acercó al nombrado con una sonrisa radiante.

Ambos a pesar de no estar en escena o en lugar de trabajo, habitualmente se llamaban por sus nombres artísticos cuando se dirigían la palabra: era algo que Bennett descubrió por accidente, al momento de tratar de acercarse al pelicían en reiteradas ocasiones.

—¿Qué pasa?

—¿No te vas a despedir de mi? —se hizo el ofendido, deteniéndose justo al borde de la acera, frente al mayor.

—No. —Ben respondió enseguida, antes de dirgirle la mirada y proseguir— Ni pensaba hacerlo. Sabes que no quiero nada de un rarito como tú. —se burló estrechando su mano. Su tono de voz sonaba algo indiferente en su mayoría.

—¿Y sigues con eso? —Bennett suspiró apretando los labios, a veces no entendía el humor del otro, que solía parecer simpático con sus comentarios, por más que no le veía sonreír tanto ni mostrarse alegre— Ya deja esa frase. No me gusta.

—Sí, como sea. Aún no puedo olvidar la primera vez que la dije y casi lloraste antes de salir de escena hah. —dijo Ben, y le observó alzando una ceja— Eras un niño novato, era obvio que algo así iba a pasar.

—Ahá, muy gracioso. —bramó el más bajo, encogiendo los hombros— Ya aclaré que esa vez me había caído una mugre en el ojo y por eso me fui de escena, no tiene que ver con mi desempeño. —se excusó Bennett por centésima vez, haciendo un puchero.

—Bueno, hasta mañana supongo. —Ben le guiñó un ojo para echar a andar la moto—. Esta cosa es tan ruidosa, después voy a devolverla. —se dijo a si mismo, y el pelimorado en frente asintió al instante apretando los labios— Y ya deja de hacer expresiones extrañas. Tu cara me molesta.

—Sí... de acuerdo. Que te vaya bien. —Bennett se despidió con la mano desviando la mirada luego de que el mayor se fuese. Lo último dicho lo había desanimado un poco.

Bennett no tuvo mucho que hacer en lo que restaba de tiempo, por lo que regresó con cuidado a su departamento, en un llamativo edificio donde también algunos de sus compañeros se hospedaban, incluido po supuesto, Ben. Este último pasaba lejos en distintas zonas de la ciudad y otras veces fuera de ella debido a las ocupaciones laborales urgentes, por lo que se le veía por allí muy poco este tiempo. Bennett igual esperaba que esas temporadas arduas en su área de trabajo musical tuvieran un descanso igualmente.

Le gustaría ver a Ben seguido aunque este hombre casi ni le devolviese la mirada.

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—Bien, chicos ¡estén preparados! Sé que saben lo que quiero. —animó Mike como de costumbre, ordenando los papeles del guión y detallando otras sutilezas con el staff— Entran en cinco.

El azabache discutía por última vez los detalles de la escenografía, para tener en claro orden que nada estaba incorrecto. Mientras tanto los demás ensayaban el resto faltante para sus siguientes escenas. Algunos sólo lo hacían por diversión, aún sabiendo su papel y sus líneas al revés y al derecho. Sabiendo que a Mike le gustaba lograr perfección en menos de cinco tomas.

—Está todo listo, pero me inquieta tu jodida cara. —comentaba el oji-verde a un lado de cierto actor bajito que le acompañaba— ¿Te parece ensayar o ya tienes todo claro? Te noto despistado estos días. —Ben ofreció una soda al aludido, sentándose a su lado, trataba de ser amable— ¿Qué pasa? ¿tu novia cortó contigo o por qué esa cara?

—No tengo novia. —dijo Bennett, y abrió la soda suspirando ante el comentario del mayor.

—Pues pobre de ti. Deberías conseguirte una pronto, las chicas van a amontonarse después y te costará elegir una o dos haha. —rió el moreno, pero en eso Bennett hizo una mueca de desagrado— Tranquilo hombre, sólo bromeo. —se retractó Ben.

—No me apetece divertirme de esa forma ni tener novia. Ugh, mejor si, ensayemos ¿bien? —el pelimorado se bebió la soda y se levantó de la silla para coger el libreto. No lo necesitaba, pero lo tomaba por si acaso.

—Oye, a ver, tomaste el mío, tonto. —el mayor le quito los papeles al otro y tosió un poco para aclarar su voz— Ahora si, comencemos... —miro el papel— Quedamos más o menos en este punto. —señaló en la hoja con su dedo lo demás esta todo perfectamente ensayado.

Bennett había aprovechado el momento para recordar parte del guión y sus acciones destacadas, por lo que no había evitado sonreír como idiota al tener en mente la escena «Beso» más adelante, lo que significaba que involucraba más contacto del que ya, era poco, pero seguía siendo contacto para él. Eran pequeños pero grandes detalles.

—¡De acuerdo, sí, empecemos! —expresó, empuñando las manos, con alegría

—Veinte años y pareces de quince, qué combinación rara de apariencia y personalidad, no se si es bueno o malo. —habló Ben al ver la jovialidad con que se expresaba el pelivioleta a un lado.

—Suelen decirme que es bueno, así que en realidad prefiero creer en así.

—Oh, claro... —suspiró rodando los ojos para seguido coger el brazo de Bonnie— Bien, Carajo, me perdí de línea.

—Pero si tú mismo, ah... está ahí —apunto con su dedo a la quinta línea del guión.

—Oh si —soltó el brazo del menor y sostener mejor el libreto con su otra mano— Ahora si, empecemos —volvió a agarrar el brazo del mas bajo.

—"Ey ¿qué haces?" —preguntó Bonnie fingiendo hacer fuerza con el brazo, ah; Bennett recordaba haber ensayado esta escena, la mayoría le resultaban graciosas, al menos a él, a pesar de que fuesen a simple vista como algo bobo— "¡Suéltame!"

—"Bonnie, llevo tiempo intentando hablar contigo, pero me evitas" —Bon afirmó el brazo de su compañero para mirarle serio, pues las expresiones en escena eran lo mejor de él— "Tú y yo tenemos asuntos que resolver."

—"¡No tengo nada que hablar contigo! ¡suéltame, Bon!" —el menor apartó su brazo con algo de brusquedad que de no ser por que bajo la presión que tenía en este hubiera tirado su soda que estaba en la mesa donde tenían los guiones— Mh.. —iba a hablar pero había poco tiempo y quería llegar a la parte del beso lo entes posible— "¡No me agrada la gente como tú!"

—"Eh..." —Bon agarró ahora de las muñecas a Bonnie, estampando al mismo contra una de las paredes más cercanas para llevar a cabo la siguiente acción. Era bueno que, siempre los demás estuvieran en lo suyo y ellos en un lugar cercano a los camerinos ensayando por separado— "Tú..."

—¡Chicos a escena! —llamó un rubio delgado intérprete de Joy, fingiendo una nula alegría, allí estaba cruzado de brazos afirmando su peluca con la mano derecha— Mike nos dará mucho trabajo para hoy ya que el equipo de producción nos adelantó material.

—Bien, mejor vamos con los demás ¿vienes, Bon?

—Es más que obvio que también iré ¿sabes?

—Mmh sí, es verdad. —Bennett hizo una mueca, no era de extrañar una respuesta de ese tipo viniendo de Ben.

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—¡Bien! ¡corte! —anunció el director mostrando sus dientes en una sonrisa. Alzando su mano, dio a entender a todos que llegarían hasta allí en aquella parte.

—¡Yupi, así se hace, cada vez avanzamos más rápido, chicos! —el rubio estaba estaba al lado de Mike dando saltitos ya con su atuendo femenino puesto y preparado— Ay ¿crees que capto esta personalidad femenina?

—Tranquilo, lo haces excelente.

En escena ya habían entrado una mujer portando una estética melena albina, junto a su compañera gemela de coleta larga. Ambas platicaban con ánimos sobre sus vidas, que aunque cambiaron entre las dos con el avance del tiempo, aún existía esa chispa familiar que las hacía caracterizar como personajes y sacar una que otra sonrisa en escena.

Seguido de esta toma, habían pasado a una que duró un minuto y quince segundos, entrando con más personajes y cambiando el escenario casi por completo en menos tiempo del esperado. Detalles que iluminaban los ojos del director Mike.

Luego habían pasado a una tercera y última escena, en donde Joy, una linda rubia de ojos azules, charlaba con su amiga, Meg, una mujer albina de mechón rosa, a través del móvil. Ambas en distintos escenarios para contrastar dicha escena alegre y sencilla.

Finalmente venía la parte antes ensayada por ambos chicos. Bennett al observar a sus compañeros, se emocionaba bastante, pues no era muy distinto a una obra escolar o alguna misma de teatro; la energía, el cariño y la pasión que estos mostraban le inspiraba mucha familiaridad y confianza.

Cuando era su turno. Olvidaba todo, para empezar a dentrarse en su papel, un personaje complicado que a pesar del dolor emocional que tenía, y la vida dispajera que presentaba, le encantaba mucho el poder interpretar y dar todo de sí para hacerlo lo más humano que podía.

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Muaks, gracias por pasarse a leer por aquí otra vez jsjs

Bye☆

                 「NiakuTan」