Era un nuevo día en el templo de Kamar-Taj, los soldados habían cambiado con otros tras haber hecho guardia durante toda la noche.

Izuku había despertado y actualmente se encontraba haciendo fila para buscar la ración que seria su desayuno. El pecoso ya llevaba unos 3 meces en dicho templo, ya habiéndose acostumbrado a las cosas por allí.

Hace tiempo que el templo ya se había llenado por completo, viéndose obligados a no aceptar a mas refugiados. Esto causo bastante problemas, ya que significaba que el lugar estaba saturado de personas, apenas si logrando entrar todos los residentes actuales, pero con mucha dificultad.

No fue una sorpresa para nadie cuando comenzaron a haber problemas con la escases de recursos, cada vez había menos agua, ya sea para alimentar a los habitantes como para mantenerlos mínimamente limpios.

Esto provoco que varios comenzaran a enfermarse, incluso algunos teniendo infecciones, y si bien podían ser tratados con magia, eso no evitaba que siguieran surgiendo casos.

Y en el ámbito de la comida era peor, ya que las provisiones eran cada vez menos. Las personas se estaban empezando a quejar por dichas condiciones. Aunque se enviaban a varios escuadrones a las afueras para buscar nuevos recursos, dichas misiones eran muy difíciles, terminando por costar las vidas de varios soldados, los cuales morían a manos de los villanos y Nomus.

Lo peor era que a veces estos mismos volvían con las manos vacías, bajando aun mas la autoestima de las personas.

Eso, sin mencionar que había personas con enfermedades que debían ser tratadas, desde niños con asma y personas con diabetes, hasta algunas personas resultaron estar enfermas, terminando por contagiar a varias otras personas.

Izuku se vio obligado a salir de sus pensamientos cuando finalmente llego su turno en la fila, viendo como le entregaban el que seria su desayuno, apenas un pedazo de pan y una pequeña botella de agua.

Este solo pudo suspirar, sabiendo que la situación con las provisiones iba de mal en peor con cada día que pasaba.

Sin mas, este solo se retiro, sentándose en el suelo mientras comía, viendo como algunas personas incluso estaban peleándose por un pedazo de pan. Este se iba a levantar para separarlos, pero un par de soldados se les adelanto, separando a los sujetos y llevando a uno de ellos a otra zona del refugio.

El pecoso solo volvió su concentración a su poco alimento, terminando su desayuno tras unos pocos minutos. Este se puso de pie, dispuesto a irse a seguir con su entrenamiento sobre la magia, cuando una voz conocida llego a sus oídos.

— Hey, pequeño héroe— Exclamo Lady Nagant, haciendo que el mencionado se diera la vuelta, mirando a su compañera de equipo.

— Buenos días, Kaina, ¿Cómo estas?— Saludo el chico con una pequeña sonrisa— ¿Qué necesitas?—

— Te estaba buscando, Wong nos necesita, quiere hablar con nosotros— Diría la peli morada con un tono mas serio, haciendo que el peli verde se sorprendiera por esto, antes de asentir con la misma seriedad que la francotiradora.

Sin mas, ambos se dirigieron dentro del centro del templo, justo a la misma sala en donde Izuku conoció al hechicero supremo, encontrándose a Wong junto con Melissa y Rody.

— Buenos días, chicos— Saludo el joven a sus amigos y compañeros de entrenamiento, los cuales le devolvieron el saludo con una sonrisa.

— Bien, me alegra que todos estén aquí, tengo algo muy importante que decirles— Hablo el calvo con una expresión seria, llamando la atención de sus cuatro estudiantes, los cuales prestaron suma atención a lo que diría el hechicero supremo— Como sabrán, nos estamos quedando sin recursos en general, tanto de medicamentos como alimentos, esto nos esta trayendo varios problemas, además de que los escuadrones que enviamos por mas apenas si pueden encontrar algo... Pero...—

El hechicero usaría sus poderes para hacer aparecer un holograma de color anaranjado enfrente de los cuatro, en dicho holograma se podía ver una especie de base militar, la cual era bastante grande.

— Hace unos pocas horas, encontramos esta base militar abandonada a las afueras del pais, esta puede ser una oportunidad para lograr reabastecernos, pero no podemos arriesgarnos a otro fracaso, así que he decidido que ustedes irán a esta misión— Explico el hechicero, dejando sorprendidos a los cuatro aprendices.

— ¿Esta seguro, señor?¿Cree que ya estamos listos?— Pregunto Rody, intentando esconder sus nervios, aunque su pequeña ave mascota, Pino, dejaba mostrar los nervios que este escondía.

— Lo están, sus habilidades con la magia son impresionante, además de que no irán solos, un escuadrón de soldados ira con ustedes para ayudarlos por si se presentan amenazas inesperadas— Respondió Wong con seriedad, pero a la vez, dando una pequeña sonrisa, la cual demostraba la confianza que este tenia sobre cada uno de sus estudiantes.

Izuku miro de reojo a sus amigos y compañeros, mientras un miedo creciente surgía dentro de si. A su mente llegaban las imágenes de todos sus amigos de la Clase A, los escenarios de sus muertes reaparecían en segundos, como si su propia mente le estuviera remarcando la posibilidad de que aquella tragedia pudiera volver a ocurrir.

— Entendido, señor, daremos lo mejor de nosotros— Diría Kaina con seriedad y firmeza.

— Me alegra oír eso, Kaina. Y solo para dejarlo claro, tu lideraras esta misión y al equipo— Informo el hechicero, mirando a la peli morada.

Kaina solo asintió ante las palabras de Wong, era lógico que ella, siendo la que mas experiencia tenia en misiones, fuera la que comandara esa operación. Melissa si bien también tenia experiencia, aun le faltaba mucho, así que la francotiradora era la mejor opción.

Sin mas, los 4 se retiraron del lugar, yendo a preparar sus cosas para la misión.

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...

Tras unos minutos, los cuatro aprendices del hechicero Supremo se encontraban a las afueras del refugio, mientras se veía como unos 20 soldados los estaban acompañando.

Estos no tuvieron que esperar mucho, cuando vieron como un gran avión aterrizada enfrente de ellos y abría la compuerta, dejándole el paso libre para abordar.

Soltando un pequeño suspiro, la mayor del grupo habló.

— Bien, prepárense muchachos, hoy volvemos a la acción... — Hablo Kaina, estando enfrente de todos.

Sin más demoras, todos se subieron al avión, el cual no tardó en alzar vuelo, dirigiéndose a las afuera del país, en donde se encontraba la base militar abandonada.

Mientras todos esperaban a que el vehículo llegara a su destino, el peli verde se mantenía con la mirada agachada, intentando esconder sus nervios crecientes bajo un rostro neutro. Aunque, esto estaba siendo en vano, ya que se le notaban los nervios.

Melissa noto el estado de su amigo, acercándose a este y poniendo una mano sobre su hombro, llamando su atención y haciendo que voltee a verla. La rubia llevo aparto al chico un poco de los demás, para que pudieran hablar con calma.

— Tranquilo Izuku, estaremos bien— Le sonrió la americana con una voz dulce y tranquilizadora— Se que tienes miedo, pero debes entender que no estas solo en esta pelea—

— Yo solo... No quiero perder a nadie mas...— Dijo el pecoso con gran pesar y tristeza, mientras sentía como sus ojos se humedecían con las lagrimas.

No obstante, este abrió los ojos sorprendido cuando sintió como los brazos de la chica lo rodeaban, dándole un cálido y reconfortante abrazo, el cual transmitía cariño y afecto hacia el pecoso.

— Todo saldra bien, Izuku... Solo confía en nosotros, todos nos hemos estado esforzando mucho para lograr acabar con todo esto— La rubia le dedico una sonrisa llena de confianza a su amigo.

El corazón del pecoso dio un brinco, mientras al ver la sonrisa de Melissa, recordaba la sonrisa de cierta peli castaña. Con una sonrisa llena de determinación, Izuku hablo.

— Si, Melissa... Todos le pondremos fin a esta guerra— 

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Tras unos 30 minutos de viaje, el avión finalmente había llegado a la localización de la base, aterrizando al lado de esta y dejando que tanto los soldados como Izuku y los demás bajaran.

— Bien, este lugar es muy grande, así que lo mejor será que nos dividamos en dos grupos, así podremos recorrer mas terreno, Izuku, tu y Melissa exploraran la zona sur de la base, yo y Rody iremos a la zona norte, cada uno se llevaran a la mitad de los soldados como apoyo, ¿Entendido?— Exclamo la peli morada francotiradora con seriedad y firmeza, dejando en claro su posición como líder.

Todos los presentes solo asintieron ante las palabras de la francotiradora, dividiéndose según sus ordenes y comenzando a buscar por las instalaciones de la base militar.

Dicha base era bastante grande, contando con al tres pisos visibles, aunque esto apenas era la punta del iceberg, ya que debajo de lo que se veía a simple visa, habían mucho mas pisos subterráneos, llegando a ser un total de 10 pisos.

Cunado los dos grupos ingresaron a la base, rápidamente notaron como esta se encontraba en un estado bastante deplorable, las luces estaban apagadas o rotas, las computadoras presentes ya no funcionaban y todo era un completo desorden, esto podía deberse tanto por el tiempo que llevaba dicho lugar abandonado, como por el ataque de algún grupo de villanos, lo cual no seria una sorpresa, considerando la situación en la que se encontraba el mundo actualmente.

No tardaron mucho en descubrir los pisos inferiores, yendo a investigar rápidamente en busca de cualquier cosa que pudiese serles de utilidad. Tanto los soldados como los aprendices a hechiceros se encontraban alertas ante cualquier cosa que pudiera ser una amenaza.

Las horas pasaron y todos habían logrado encontrar varias provisiones, tanto alimentos enlatados como algunos equipos médicos que aun servían. Si bien no eran mucho, eran mejor que nada, les ayudarían por un tiempo, lo cual también les ayudaría a encontrar mas recursos.

— Bueno, algo es algo— Diría Rody con una pequeña sonrisa, estando ya todos reunidos.

— No conseguimos mucho, en total, diría que solo nos alcanzaría para una semana como máximo, si es que repartimos bien todos los alimentos— Diría de forma pensativa la rubia de lentes, mientras todos cargaban con varias mochilas, llenas de todos los materiales que lograron conseguir.

— Al menos es algo, lo mejor será volver al refugio, es peligroso estar afuera tanto tiempo— Diría el pecoso con seriedad, recibiendo un asentimiento por parte de sus compañeros.

Pero en eso, los cuatro usuarios de magia se detuvieron de golpe, abriendo sus ojos al sentir algo.

La magia también les daba la capacidad de sentir la presencia de otros seres vivos que estuvieran cerca, era un hechizo básico, pero muy útil.

Y en ese momento, sintieron una presencia bizarra y desconocida acercándose al refugio, al mismo tiempo que todo el lugar comenzaba a temblar, casi como si se tratara de un pequeño terremoto.

— ¡¿Que diablos esta pasando?!— Exclamo uno de los soldados, sorprendido por tal hecho.

— ¡Todo el mundo, salgan de inmediato!— Ordeno Kaina al ver como todo el lugar comenzaba a derrumbarse por los temblores.

Sin perder no un solo segundo, los cuatro hechiceros presentes crearon escudos de energía sobre todo el grupo, comenzando a correr hasta la salida de dicha base militar, mientras varios escombros caían sobre ellos, pero el escudo los protegía sin problemas.

En el caso de los escombros mas grandes, la peli morada de encargaba de destruiros con un disparo de su cañón, así fue hasta que lograron salir.

No obstante, apenas salieron, estos no tuvieron ni un segundo para descansar, esto debido a que vieron algo que los hizo quedar en completo shock.

— ¿P—Pero que es esa cosa?— Tartamudeo con miedo y nervios uno de los soldados.

¿La razón?. Era que como a un kilometro de la base, se podía ver como un enorme Nomu de unos 80 metros, el cual se acercaba a dicha base, con cada paso que el enorme monstruo daba, se producían aquellos temblores.

Tomura había expandido su ejercito de Nomus a una enorme velocidad últimamente, así que no era una sorpresa el ver a varios de estos monstruos rondando por allí, buscando algún héroe que quedase con vida o a algún refugio. 

La imagen de aquel ser dejo completamente en shock a los presentes, sabían que ahora Tomura poseía muchos mas materiales para crear Nomus mas poderosos, pero nunca se imaginaron que llegaría a tal nivel.

Por el tamaño de aquella cosa, se imaginaron que debió ser una persona con un Quirk similar a la de la heroína ya fallecida, Mount Lady.

— Jaja maldición...— Se rio con pánico uno de los soldados, viendo como aquella cosa se acercaba mas a ellos con cada paso.

— ¡No se queden ahí!¡Vayan a la nave, nosotros les daremos tiempo!— Grito con firmeza la francotiradora peli morada, sacando de su shock a los soldados y a sus compañeros.

Los aprendices a hechiceros reaccionaron ante las palabras de su líder, y con solo intercambiar miradas estuvieron de acuerdo, sabiendo lo importante que era el llevar los recursos al refugio.

Así que, sin mas demora, les dieron sus mochilas a los soldados, los cuales comenzaron a correr a toda velocidad hacia el avión, mientras que los usuarios de la magia miraron al Nomu con seriedad.

— Bien, consideren esto como un entrenamiento para probar nuestras habilidades— Le diría la peli mirada a sus compañeros— ¿Están listos?—

— Por supuesto que si— Respondió el peli verde con una mirada determinada, siendo respaldado por Melissa y Rody.

Ante esta respuesta, una sonrisa se dibujo en los labios de la mujer.

— Bien, entonces vamos— 

Al decir eso, todos activaron sus respectivas habilidades.

Izuku fue rodeado por un brillo anaranjado, mientras circulos mágicos rodeaban sus manos y pies.

Melissa tomo con fuerza su escudo, el cual emitió un brillo anaranjado.

Rody miro de reojo a Pino con una ligera sonrisa, al instante, la pequeña ave rosada comenzó a brillar de el mismo tono anaranjado, mientras poco a poco aumentaba su tamaño y cambiaba de forma, en pocos segundos, aquella pequeña ave ahora era un enorme e imponente fénix hecho de pura magia, el cual extendió sus alas, listo para volar.

Kaina no perdió el tiempo y se subió al fénix junto a Rody, no sin antes darle una ultima mirada a sus compañeros.

— Nosotros iremos a la izquierda, ustedes encárguense de la derecha— Diría la peli morada, recibiendo un asentimiento de ambos.

Sin mas, aquel fénix emprendió vuelo a gran velocidad, dirigiéndose hacia el enorme monstruo.

— ¿Estas lista?— Le pregunto el pecoso a su amiga, la cual le sonrió con confianza.

— Nací lista—

Sin mas, ambos usaron unos circulos mágicos para propulsarse, dando un gran salto en dirección del monstruo.

Por su parte, el enorme Nomu abrió su grotesca boca, mostrando una gran cantidad de filosos y deformes colmillos, su mirada fija en aquella base, solo teniendo como misión el destruir todo lo que estuviera a su paso. El causar destrucción por donde sea que vaya, tal como quiso su amo.

No obstante, este soltó un horrendo alarido de dolor cuando una ráfaga de energía de color anaranjado impacto contra uno de sus ojos, reventándolo en el proceso.

Rápidamente el monstruo se regenero de aquel daño, fijando su vista en los causantes de aquel ataque.

— ¡Buen tiro!— Exclamo Rody con una sonrisa, antes de que ambos esquivaran un manotazo de la criatura.

— ¡No te quedes quieto, ataca a los puntos visibles!¡Sobre todo a los ojos, así crearemos mas aberturas!— Exclamo la peli morada, mientras volvía a cargar su rifle, aun estando sorprendida y maravillada por lo poderoso que había resultado ser aquel disparo.

El fénix de magia comenzó a lanzar grandes y poderosas ráfagas de fuego directamente al rostro de la criatura, concentrándose sobre todo en sus ojos, logrando segarlo de momento, provocando mas furia del Nomu.

Por su parte, Melissa e Izuku usaban los circulos mágicos como plataformas para impulsarse a gran velocidad alrededor del monstruo, buscando algún punto débil.

— ¡Ataca a las partes traseras de las rodillas, rápido!— Grito Izuku, recibiendo un asentimiento por parte de su compañera.

Ambos aprovecharon que el Nomu estaba segado y concentrado en los ataques de Rody y Kaina. Izuku salió disparado como una bala, logrando conectar un poderoso golpe en la parte trasera de la pierna del Nomu, mientras que Melissa rodeo su escudo de magia, antes de lanzarlo con todas sus fuerzas, dicha arma corto en la parte trasera de otra pierna de la criatura como si fuera una cierra.

Este ataque en combinado logro desestabilizar a la criatura, la cual comenzó a perder el equilibrio, pareciendo que estaba por caer, lo cual les saco una sonrisa a los hechiceros, mas al ver como sus soldados llegaban al avión y entraban en este.

Sin embargo, la sonrisa de Melissa se borro cuando vio como la boca de la criatura se abría y una luz asomaba de esta y fue peor cuando el coloso le apunto a ella tras haber regenerado sus ojos.

Todos vieron con horror como un enorme rayo de energía salió de la boca de la criatura y le daba de lleno a la rubia, provocando una explosión enorme que sacudió todo el lugar.

Izuku miro en shock aquella escena, estando a punto de gritar, cuando vio un brillo entre el polvo. Para su alivio, vio como Melissa estaba intacta, siendo rodeada por una cúpula de magia, la cual la había protegido del ataque.

— Terminemos con esto de una vez— Diría con seriedad la rubia, desapareciendo su barrera y posicionándose al lado de su compañero de cabellera verde.

— Se regenera, pero no sabemos que limites tiene, pero si se parece un poco a los otros Nomus, entonces sus Quirks son controlados por su cerebro, si lo destruimos, debería morir— Diría con seriedad el pecoso, recordando todo lo que sabia en general sobre aquellos monstruos.

Melissa solo asintió ante las palabras del pecoso, informándole el plan a sus compañeros a través del comunicador en su oído.

Y de esta forma, los cuatro hechiceros salieron disparados como cuatro cometas en dirección del monstruo.

— ¡Oye feo, estoy por aquí!— Le grito el peli castaño de un solo brazo, su fénix disparando una gran cantidad de llamas hacia el rostro de la criatura, la cual daba horrendos alaridos de dolor al sentir como su carne se quemaba.

Kaina usaba su segundo Quirk, aquel poder que le dio Afo cuando trabajaba para ella y que le permitía flotar, disparando grandes y poderosas ráfagas de magia con su rifle directo a las articulaciones del monstruo, para restringir sus movimientos, logrando hacer que este no pudiera usar sus brazos.

Gracias a esto, Izuku y Melissa se propulsaron a gran velocidad hacia arriba, con la rubia usando su escudo y barreras para protegerlos a ambos de los rayos de energía que la bestia disparaba de sus grotescas fauces.

La francotiradora apunto su rifle hacia la cabeza del monstruo, concentrando una gran cantidad de magia y lanzando un poderoso ataque, el cual le termino volando el cráneo a la criatura y dejando su cerebro al descubierto.

Esta era la oportunidad perfecta.

El peli verde y la rubia intercambiaron miradas y asintieron. El chico coloco sus pies en el escudo de su compañera, la cual comenzó a canalizar mucha magia en dicha arma, haciendo que brille en un tono anaranjado.

Y en un segundo, el chico salió volando como una bala directo al cerebro del monstruo, logrando conectarle un poderoso golpe, el cual genero una enorme explosión, mientras que el gigantesco Nomu lanzaba un ultimo rugido de furia.

Melissa creo un circulo mágico, usándolo como plataforma para atrapar al pecoso.

— ¿Estas bien?— 

— Si, estoy bien— Respondió Izuku, el cual había protegido su cuerpo con una barrera mágica, para evitar ser afectado por la explosión.

Todos vieron como el cuerpo sin cabeza del monstruo caía de espaldas hasta impactar contra el suelo, generando un gran estruendo.

— Bien señores, el trabajo esta hecho, volvamos rápido al avión antes de que aparezcan mas de estas cosas— Diría con seriedad Kaina, recibiendo un asentimiento de los demás.

Estos se comunicaron con los soldados, informándoles del resultado de la batalla, para después dirigirse hacia donde se encontraba el avión, subiendo a bordo y empezando a dirigirse de regreso al refugio de Kamar—Taj.

El ambiente de los presentes había mejorado bastante, no solo lograron conseguir mas recursos para los refugiados, sino que también habían derrotado a un poderoso Nomu del tamaño de un edificio, algo que sin dudas les subió la confianza a todos.

Una pequeña sonrisa se dibujo en los labios de Izuku, mientras veía a sus compañeros. Con los eventos que acababan de ocurrir hace apenas unos minutos, sentía como poco a poco al esperanza volvía a su ser.

Con ese nuevo poder y con la compañía de sus amigos, sentía que tenían una oportunidad de derrotar a Tomura y acabar con esa maldita guerra.

Después de tanto, las cosas finalmente estaban mejorando...

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...

¿Verdad...?

Fin del Capitulo.

Solo tengo algo que decir, y es que hasta yo se que este capitulo me quedo muy flojo.

Simplemente no tenia inspiración, quería darle mas profundidad a la relacion entre Izuku y sus nuevos compañeros, pero no se si lo logre.

Además, sentía que el fic estaba avanzando muy lento, así que quise quitarme ese detalle lo mas rápido posible.

De todas formas, a partir del siguiente cap las cosas se pondrán mucho mas intensas. Dejen su voto para apoyar a esta historia y comenten sus opiniones por favor.

1-10¿Que les pareció?.

¿Que les gustó?.

¿Que no les gustó?.

Sin mas que decir, nos vemos.