❁¡No quiero volver a verte!❁

A todo lado que iba, era prácticamente inevitable verlo al menos una vez al día, en cualquier parte aparecían anuncios en dónde él la mayoría de veces aparecía en primera plana y si no es en la calle lo veía en la televisión o en el periódico. No podía entender porqué el mundo era tan cruel con ella, en verdad desea olvidarse de todo. Ya no soportaba más éste dolor.

-Mamá ¿Puedo hablar contigo?- pide la azabache y su madre asiente caminado junto con ella hasta la sala.

-¿Qué ocurre Aome?- pregunta.

-He estado pensando mamá y creo que lo mejor para mi es irme por un tiempo...- hace una corta pausa- me gustaría irme de intercambio por unos años.

La madre mira a su hija con asombro y al mismo tiempo con preocupación.

-¿Estás segura Aome?- cuestiona no muy convencida.

-Si mamá, por favor, necesito estar lejos de aquí por un tiempo- insiste casi en súplica.

-Esta bien hija, si sientes que es lo que necesitas te apoyo- sonríe abrazando a la azabache.- prométeme que cuando vuelvas no habrá dolor en tus ojos.

-Lo prometo mamá- corresponde el abrazo.

Compañía Taisho

Una semana después

Tarde

Los empleados del sitio iban de un lado para el otro investigando los datos más recientes sobre algún hecho que los llevará con el paradero de Ryūkamanari pero hasta ahora no pudieron averiguar nada, es como se él se ubiera esfumado sin dejar rastro aunque por lo visto cierta hanyou tenía otros planes en su mente.

-Papá, en verdad necesito hablar con la abuela Irasue, te lo suplico- pide tratando de seguirle el paso por los pasillos.

-No hablaremos más de ésto Yukanna...- contesta fríamente- se bien para que la buscas y mi respuesta es no.

-¡¿Acaso no quieres volver a ver a mamá?!- cierra sus manos en forma de puños y Sesshomaru detiene abruptalmente su caminar.

-Concentrate en tus deberes primero y si tanto amas a tu madre solo déjala ir- es lo único que dice y continúa su camino encerrándose con llave en su oficina.

-¿Por qué siempre es así?- frunce el ceño alejándose del sitio.

En otra oficina las cosas marchaban aún peor, Inuyasha esperaba recibir buenas noticias pero por lo visto todo estaba en su contra por el momento. No había hecho más que investigar y rastrear de todas las maneras posibles a Ryūkamanari pero le fue imposible conseguir algo. En verdad todo éste asunto le tenía exhausto.

-Tengo leves sospechas de que Ryūkamanari utilizó algún método para camuflarse con las personas pero se que sería algo imposible puesto que yo soy la única que provee a los youkai los amuletos de camuflaje y es lógico que yo jamás le daría uno a ese tipo- explica Susaku tomando asiento en uno de los sofás de la oficina.

-¿Será posible que exista otro método para hacerse pasar por un ser humano?- se pregunta Inuyasha.

-Investigaré sobre ello, no te preocupes- da un suspiro de cansancio- has trabajado toda la noche sin descanso ¿No crees que te vendría bien un receso?

-¿Cómo puedes decir cosas cómo esas en un momento así, Susaku? Si no solucionamos ésto cuanto antes una nueva guerra podría surgir- se levanta de su asiento mirando fijamente por la ventana.

-No entiendo como terminamos así, recuerdo con claridad que hace miles de años los cuatro clanes estábamos en paz y armonía. Tu padre y el abuelo de Ryūkamanari, el legendario dragón azul, eran buenos amigos sin embargo los desacuerdos entre la dinastía Inu-Youkai y la dinastía Ryū provocaron el distanciamiento de ambos bandos- agacha la cabeza- tal vez nada pueda volver a ser igual.

-Lo sé y si no acabamos definitivamente con el maldito de Ryūkamanari, el esfuerzo y sacrificio de todos se perderá- frunce el ceño sabiendo que él tuvo que renunciar a Aome para protegerla aunque en éste punto de la vida ya no estaba tan seguro de que su decisión fue la correcta. Justo ahora todo tenía que empeorar.

De repente la puerta se abre con brusquedad entrado cierto kitsune y a simple vista se podía notar lo molesto que estaba.

-¡Inuyasha!- cierra sus manos en forma de puños- ¿¡Me puedes explicar por qué demonios estaba Aome en el aeropuerto Sakamoto dispuesta a tomar un vuelo a Londres?!

-¿¡Qué dijiste?!- abre los ojos como platos.

-¡Ella llevaba varias maletas y por tu bien espero que no haya sido culpa tuya...!- no termina el ragaño pues Inuyasha sale a toda prisa sin esperar respuesta.- ¡No me dejes hablando solo perro!

<<Maldita sea Aome ¿¡Qué demonios planeas hacer ahora?!>> piensa mientras enciende su automóvil con dirección al aeropuerto indicado por Shippo.

Aeropuerto Sakamoto

Noche

-¡Los pasajeros con destino a Londres por favor abordar en éste instante!- dicen desde un altavoz.

La azabache se pone de pie y respira ondo dispuesta a abordar, toma sus dos maletas y comienza a caminar. No se echaría para atrás, ella sabe que será duro pero debía olvidar todo lo ocurrido en el sengoku y sobretodo a Inuyasha o no podría continuar con su vida. No habrá marcha atrás.

-¡Aome! ¡Espera!- grita una voz masculina con desesperación, ella obviamente lo reconoció pero prefirió no voltear y continuó caminando.- ¡Maldición Aome!- la alcanza y sin previo aviso le toma de la muñeca.

-¿Qué haces aquí?- pregunta sin verle a la cara.

-¡Eso es lo que yo debería preguntar! ¿Por qué demonios vas a tomar un vuelo a Londres?- cuestiona.

-No es tu problema Inuyasha, suéltame ahora mismo- trata de zafarse de su agarre.

-¡No lo haré! ¡No dejaré que vayas de mi lado!- la abraza contra él con la esperanza de hacerla reaccionar pero ella ni siquiera le correspondió el gesto, al contrario, trataba de alejarlo.

-¡Suéltame Inuyasha!- se hace para atrás- ¡No quiero volver a verte! ¡Tú mismo querías apartarme de tu vida! ¿Y sabes qué? ¡Lo has conseguido!- lágrimas bajaban por sus mejillas y comienza a correr hacia su avión.

-Espera Aome, no te vayas...- iba a ir tras ella pero en cuanto lo intentó solo fue cuestión de segundos para que la prensa, reporteros y gente común fueran hacia él complicando que fuera tras la azabache.- maldición...

Pasaron varios minutos hasta que pudo deshacerse de ellos y corrió a detener a Aome pero para cuando llegó... Ya fue demasiado tarde. El avión ya había despegado y con el, su amada azabache. Ahora no podía más que arrepentirse por querer alejarla, tal vez ella ni siquiera vaya a volver, la había perdido a causa de sus miedos e inseguridades.

<<Aome, si algún día nos volvemos a ver, prometo que no volveré a apartarte de mi lado. Yo siempre te voy a esperar, todo ésto fue mi culpa y espero que si regresas puedas perdonarme>> piensa Inuyasha golpeando su cabeza una y otra vez contra una pared de las instalaciones.

<<Inuyasha, tal vez mis sentimientos por tí jamás desaparescan y no se sinceramente que es lo que nos depare el destino pero si nuestros caminos se llegaran a cruzar solo... No voltees a verme>> piensa Aome mirando fijamente por la ventana y despidiéndose del que una vez fue su hogar y de quién una vez la protegió con su vida.

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Inuyasha y Aome se distancian cada vez más, Ryūkamanari permanece oculto, Yukanna está sola en su misión de traer de regresa a su madre Rin y aún peor, Aome se fue a Londres y nadie sabe viendo vuelva ¿Acado se fue para no volver jamás?

¿Inuyasha y Aome se volverán a encontrar?

¿Cómo reaccionarán si eso sucede?

¿Yukanna podrá localizar a su abuela?

¿Por qué Sesshomaru no quiera ayudarla a traer de regreso a Rin?

Esto y más en "Inuyasha y Aome: Sentimientos a través del tiempo" 💠💠💠

Nota: perdónenme por la demora, me quedé sin Internet 😢