Imagen: Desconocido.
KING: "Los cobardes viven, pero no mueren rápido como los tontos" — Frases que nunca dijo King.

⩺ Prologo ⩹
Cadenas rotas, jaula expandida

"No importa cómo muere un hombre,
sino como vive. El acto de morir
no es importante, dura tan
poco tiempo."

— Samuel Jhonson

( . . . )

Su respiración era agitada, gastándose velozmente nada más ingresa a su caja torácica, su boca abierta donde se perdía más el aire. La adrenalina como el miedo son sus muletas, sin contar las mejorías quirúrgicas, dejo muy atrás a los guardias que gritaban un seudónimo de su nombre; un apodo, una burla a un nombre que nunca pidió tener.

No entendía lo que sucedía, su cerebro no podía procesar correctamente al no estar acostumbrado en intenso estrés, no le gustaba. Le dolía horriblemente la cabeza, pólvora hacía asquearlo al saber de dónde provenía, más no podía calmarse o siquiera tomarse unos minutos para descansar; su hogar empezó a llenarse de moscas, avispas como él quiere llamarlos. Las avispas eran asesinas de abejas trabajadoras como de otros insectos más pequeños, uno solo no puede haber mucho problema, pero un grupo completo de ellas haría peligrar una colonia.

Desconocía parcialmente las muchas palabras que le lanzaban, pero algunas como "fenómeno" o "réplica" eran las más llamativas de su diccionario, como si aquellos apodos desagradables lo harían regresar con la cabeza abajo; puedo no entender muchas cosas, pero no un tonto. Eso hicieron bien en enseñarle.

Por suerte, logró despistarlos al esconderse en un pequeño cuarto oscuro, cerrando la puerta con cerrojo guardo silencio ansioso a sus perseguidores pasar de largo, no hablo ni respiro, espero pacientemente que estuvieran demasiado lejos. No escucho más apodos hirientes ni sus pasos, a excepción de la alarma que lo mareaba por lo fuerte que era, exhalo profusamente aliviado de estar (por ahora) en un lugar seguro.

Sus músculos se tensaron, la adrenalina se agotó dejándolo inactivo, retrocedió hacía la pared cercana y se deslizo hacía abajo, el suelo frío casi se sintió como una quemadura por su cuerpo caliente, no ayudando mucho al no tener más que una bata sencilla que cubría su alta figura.

Sus rodillas se doblaron a su pecho, sus brazos lo rodearon para abrazarlas mientras lagrimas oscuras borbotaban de sus ojos anaranjados. No entendía nada del como paso, recuerda un poco los chequeos rutinarios y de un momento a otro, ser obligado a salir de su 'hogar' mientras sus creadores perecían por objetos largos parecidos a una varita de metal, el cual rugían escupiendo pequeños balines del mismo material y se horrorizo al verlos caer sin vida. Todo hecho por las avispas que ingresaron a la colonia, ¿en busca de qué?

No lo sabía ni quería saberlo, solo quería llorar, acurrucarse y dormir.

Sin embargo, sus temores fueron interrumpidos cuando una luz destellante apareció en su visión mojada. Limpiándose el líquido oscuro excesivo de sus ojos, miro alerta y confundido la luz roja parpadeante, dándose cuenta tardíamente que el cuarto supuestamente vacío, no estaba tan vacío como pensó.

Con cuidado, se enderezo apoyándose con la pared, realmente no quería avanzar al estar totalmente oscuro más que la luz rojiza que llamaba su atención era tan baja la luz que era imposible imaginar de donde provenía. Su curiosidad era fuerte, muchos de sus creadores le dijeron que la curiosidad era mala, tal emoción solo lo llevaría a eventos desafortunados, de nunca salir de su 'hogar' al ser el lugar más seguro del mundo; aun así, él se sintió egoísta en saber de lo que era.

Caminando despacio, dejando atrás el miedo por la curiosidad que era su guía, llego a lo que supone él; una caja grande llena de botones y teclados, el bonito rojo encima de un botón negro, un centro de control si recuerda bien al oírlo de parte de sus creadores. No tenía idea para que servía, pero los vio usarlos para mover aquellos brazos artificiales para darle su comida e instrucciones o también para cambiar la iluminación, así que debía ser lo mismo ¿no?

Con ciertas dudas, lo presiona sin saber lo que podría ocurrir. Un fuerte soplido lo sobresalta, alejándose unos pasos cuando las luces alumbraron enfrente de él algo, sus ojos manchados miraron confundidos, temerosos e intrigados lo que ocurría. Enfrente de él había una clase de capsula, pero no tenía el tamaño de sus creadores o de él, era más pequeño; otra luz roja lo guía a presionar otro botón, el cual lo presiona por mero impulso.

Al presionarlo, la cortina metálica que lo protege del mundo (o se esconde de él en este caso) se revela para enseñar, del otro lado del vidrio reforzado antibalas; un objeto puntiagudo color negro, sus ojitos se abrieron en grande por impresión al serle familiar. ¡Se parecía a ese objeto que cargaba el personaje de su cuento! Un príncipe si mal no recordaba, sus creadores fueron tan buenos con él al completar con perfección las pruebas que le dieron algunos cuentos como recompensa, no había palabras en los libritos al no saber leer (aún); pero las imágenes fueron suficiente en hacerlo saltar de emoción.

Recuerda a un personaje, que más tarde descubrió que se llamaba "caballero" (que tonto nombre), cargaba el objeto puntiagudo con gran maestría para derrotar una bestia terrorífica para rescatar a una mujer. Obviamente no lo entendió a la primera y tuvieron que explicarle más o menos, pero ahora mismo él supo lo que era al recordarlo.

Una espada.

Una espada intricada y tan bonita, de un color negro oscuro cual la noche. La empuñadora tenía otro tono negro combinado con el purpura, lo más llamativo era la pequeña joya azul brillosa que se iluminaba por la luz artificial entre la empuñadora y la hoja.

No sabía porque guardaban una espada, pero algo empezó a resonar dentro de él, terribles ganas de tenerla en sus manos. Observando el comando, miro curioso la luz siendo verde encima de otro botón, verde se suponía que significaba liberación ¿verdad?

Adoraba el verde.

Lo presiono sin contratiempos, el vidrió que los mantenía separados se abre cual puerta para darles la oportunidad de tomarlos. Rodeando la caja de control, quedando enfrente de la magnífica espada oscura, con su corazón palpitando con una emoción desconocida; alza su mano para tomar el mango.

Niebla oscura broto lentamente al tomarlo y terriblemente justo a tiempo cuando los guardias llegaron al ser notificados de otra brecha en ese lado del edificio, alzando sus armas a la criatura alta que sostenía aquella arma confiscada; ojos anaranjados fosforescentes e iris blanco los miraron.

El gatillo se presionó.

Un grito inhumano resonó por todo el cuarto.

Palabras: 1121

[King].—¡ME ENCANTO LOCOOOO! Era como yo lo tenía en mente, lamento si no se entiende bien, pero creo di suficientes pistas para entender de que va a tratar la trama ¿no? Y si no, ¡JA! ¡Sos demasiado lento XD! Nah mentira-

En el siguiente capítulo se mostrará como es la espada, no es mío el dibujo y quería ponerlo acá, pero me dio hueva así que equizde. Ahora que releo, me trajo vibras de Jujutsu Kaisen noma- bueno, por si las dudas, se agrega referencias a Jujutsu Kaisen aunque no me vi el anime ni el manga, lol.

¡Espero les haya gustado este inicio! ¡No dude en votar si les encanto y comentar de cómo les pareció! Acepto cualquier cosa para mejorar ;).

Sin más...

¡Do svidaniya!~ 🐙

Palabras: 1245