『Chapter 04: "농도"』

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

.
.
.

Porque con sólo un suspiro tuyo haces que mis ojos queden fijados en ti

↬━━━━━━━━━━━━━━━━↫


Efímero: Aquello que dura por un período muy corto de tiempo.

「농도」➥「concentración」

↬━━━━━━━━━━━━━━━━↫

·

·

·

×

Los ojos somnolientos de Jimin se caían sin su consentimiento, no debió quedarse hasta tarde mirando dibujos animados en el comedor.

Cuando todo se empezó a tornar negro, sintió un golpe en su brazo, exaltado sacudió su cabeza y se giró a ver a su compañero de banco.

—No te duermas... por lo menos no con esta profesora —le susurró Taehyung a pocos centímetros de su oído.

El rubio asintió aún un poco dormido y observó el pizarrón delante de él. La profesora escribía algo en el, así que por costumbre agarró su lapicero y comenzó a copiar.

Desde que el chico de baja estatura llegó al Instituto, sólo habló con unas pocas personas de su clase, pero tampoco es como si se llevara mal con los demás. Ahora su grupo social se reduce en Taehyung, Hoseok y Seokjin, y de vez en cuando hablaba con el misterioso chico.

Hablando de él, a Jimin hay algo que le molestaba, que hacía que arrugue su nariz cada vez que pensaba en ello, como lo estaba haciendo ahora. Y es no saber el nombre del muchacho, siempre que pensaba en él debía llamarlo por apodos o crear un nombre para él, ejemplos como: “Chico misterioso”, “El chico de la biblioteca”, “El chico de los libros”, “Chico letras”, “Chico tierno” y entre otras.

Un puchero se formó en sus labios y suspiró, no le gustaba, pero también no quería recaer en algo tan bajo como para llamarlo o dirigirse a él en sus pensamientos como: “El come libros”, no como lo demás lo hacen.

Sabe que no lo conocé y que acaba de llegar hace unos pocos días, pero precisamente quiere conocerlo y no dejarse influenciar por lo que le dicen.

Los minutos habían pasado y él junto a Taehyung se dirigieron en busca de “El dúo de los Seok”, así le decía Taehyung a Seokjin y Hoseok.

—Aquí están —fue lo que dijo el castaño cuando encontró al dúo hablando en una esquina de los pasillos, era recreo y el bullicio era impresionante.

—¡Holaaaa! —saludó Hoseok energético, siempre parecía que estaba al cien, mientras que a su lado, Seokjin les regalaba una sonrisa.

Taehyung y Jimin regresaron el saludo, entonces los cuatro comenzaron a caminar juntos por los pasillos, hablando de varias cosas.

Hasta que sus caminos se duvidieron cuando el más bajo de los cuatro les avisó que iría al baño y que ellos sólo siguieran con el recorrido.

Entró al baño que se encontraba completamente vacío, los cubículos de un lado y del otro los lavamanos con un extenso espejo cubriendo toda esa pared.

Entró a uno de los cubículos para hacer sus necesidades, al salir había alguien lavándose las manos... ¿en qué momento entró? No oyó nada.

Un joven alto y de cabellos violetas observaba su reflejo. Al parecer se dio cuenta de su presencia cuando le sonrió a través del espejo.

—Hola —una voz masculina y grave había salido de los labios del alto, Jimin parpadeó un par de veces antes de sonreír y hablar.

—Hola~ —devolvió el saludo con carisma el bajito, alzando su mano mostrando sus gorditos y cortos dedos de bebé.

—¿Eres nuevo? Nunca te he visto por aquí —comentó el muchacho, Jimin ladeó su cabeza.

—Sí, hace unos días acabo de llegar —contestó Jimin, aunque era extraño que no lo haya visto, se ha recorrido la mayor parte del Instituto.

—Ah, perdón por ser irrespetuoso y no presentarme antes, soy Chanyeol —se presentó el muchacho para luego regalarle una bella sonrisa al más bajo, éste le devolvió el gesto y se acercó ahora con más confianza al lavamanos.

—Soy Park Jimin, un gusto —contestó Jimin mirando al muchacho a través del espejo.

—Bueno, creo que nos seguiremos viendo entonces, Jimin-ah —se despidió el muchacho antes de que Jimin pueda decir algo, tragándose sus palabras, pero sólo salió del lugar unos segundos después.

Fue un momento efímero pero lindo para Jimin, estaba interactuando, sabe que es estúpido emocionarse por cosas así pero... el temor por ser rechazado y quedar en soledad era una gran inseguridad que tenía antes de mudarse.

Esperen, él le dijo: “Jimin-ah”.

Jimin transformó su boca en una pequeña ‘o’ por la impresión.

—¡Entonces es un Hyung!

Entró a la Biblioteca en silencio, saludando ya a la bibliotecaria como siempre, se dirigió al estante donde se encontraba el libro que ha estado leyendo estos últimos días y luego de tomarlo, comenzó a caminar entre estantes para ver si se encontraba cierta personita por allí.

Hasta que en el último pasillo en la sección de novelas más específico en la zona de género Misterio, se encontraba cierto chico de cabellos grises casi blancos sentado con sus piernas entrelazadas y un libro entre sus manos.

No quería interrumpir la lectura del muchacho, así que con total silencio, se sentó del otro lado del estrecho pasillo.

Era increible la concentración del joven en las palabras impresas en esas hojas, hasta que Jimin sin querer chocó su codo contra el estante detrás suyo golpeándose y de paso hacer ruido, así llamando la atención del peligris que levantó su mirada rápidamente totalmente aturdido por el repentino ruido.

—Perdón, perdón, perdón, no fue mi intención desconcentrarte, sólo sigue leyendo —le mostró su hermosa dentadura dejando ver aquella paleta chuequita que le daba un aspecto más aniñado y tierno.

El contrario asintió un poco confundido pero siguió con su lectura. Jimin se acomodó y desvió su mirada al contenido de aquel libro...

¡Pero era inevitable que sus ojos no se desviaran en aquel chico!

Es como un imán, bueno... no tan así pero... ¿A quién engaña? Es eso.

—No me mires... no me dejas concentrarme —Jimin se exaltó al escuchar la voz del muchacho, y sus mejillas se volvieron dos tomatitos al ser atrapado.

—L-lo siento mucho —se disculpó el rubio cuando el contrario le regaló una efímera mirada pero a la vez tímida para luego volver a su lectura.

Soltó un pequeño suspiro y tomó de mejor forma el libro...

«Espera Park Jimin, ¿cómo sabía que lo estábamos observando? ¿tan obvios somos?».

Sacudió su cabeza, y se concentró en el libro entre sus manos. Aunque era casi imposible para él no desconcentrarse ante la presencia de aquel chico.

Ahora, ¿por qué se acercaba a él más allá de todos los comentarios que le dijeron sobre él? Bueno, siempre lo veía solo desde que llegó al Instituto, y lo admitiría, había algo que le atraía y le daba demasiada curiosidad.

Es por eso que hace el intento de acercarse a un chico tan arisco como lo es el muchacho frente a él, cuyo nombre no sabe hasta ahora.

Si que iba a ser difícil esto.











Nicxnita©

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro