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Edward se detuvo lentamente, manteniéndose bien alejado de la camioneta de Bella. Todavía sostenía las manos con su rosa. Todas las especies sobrenaturales estaban sumamente alertas, con los ojos entrenados en las sombras del bosque.

Las orejas de Eleanora se movieron ligeramente mientras escuchaba a James, pero escuchó que estaba a millas de distancia. El motor se apagó y Bella se quedó inmóvil mientras continuaban escuchando.

"Él no está aquí." Eleanora dijo tensa. "Vamos." dijo, desatando a Bella del asiento.

"Alicia, Emmett". La voz de Edward era una orden. Emmett se hizo cargo del auto ahora, ya que Alice todavía estaba sentada en el lado del pasajero.

Edward tomó la mano de Eleanora, bailando hacia el camino de entrada a la casa, Bella siguiéndolo. El Cisne caminó hacia su puerta y entró, pensando en una excusa creíble.

Edward y Eleanora la vieron desaparecer. Edward instantáneamente giró a Eleanora y reclamó sus labios, haciéndola jadear inaudiblemente antes de que sus ojos se cerraran y ella le devolviera el beso.

Se separaron, apoyándose en la frente del otro, mirándose a los ojos.

"Oh, cuánto tiempo he estado queriendo hacer eso". pronunció, antes de que se alejaran por completo, con los dedos entrelazados, esperando a Bella.

"No fue hace tanto tiempo". ella respondió con una risita. Antes de que pudiera hablar, ella lo hizo callar y se señaló las orejas.

El agarre de Edward en su mano se hizo más fuerte, cuando la llevó a sus labios, poniendo un casto beso en sus nudillos antes de que sus manos cayesen a los costados.

Se miraron el uno al otro, antes de lanzarse al bosque al lado de la casa, observando en la oscuridad. Escucharon los pesados ​​pasos de Bella y sintieron la presencia de James cerca.

Vieron a Bella salir de la casa y entrar en su camioneta y salir del camino de entrada a la carretera.

Corrieron tras él y Edward pisó el escalón de la camioneta, sorprendiendo a Bella. Abrió la puerta, mientras Bella entraba en el lado del pasajero, las lágrimas corrían por su rostro.

Eleanora saltó sobre la cama, haciendo que Bella gritara de horror, antes de que Edward le dijera quién era.

De repente, las luces se encendieron detrás de ellos, haciendo que Bella mirara con horror, haciendo que Eleanora negara con la cabeza.

'¿Qué tan tonta puede ser esta chica?'

Pensó mientras se apoyaba en el techo. "Edward, el rastreador está justo detrás de nosotros". habló en medio de la turbulencia, pero Edward la escuchó.

Transmitió la información a Bella, cuyo cuerpo se quedó helado. Sintió que el camión aceleraba, el motor del camión gimiendo en señal de protesta.

De repente, Bella gritó, haciendo que Eleanora se tapara los oídos, al escuchar una frecuencia de tono alto e hizo una mueca. "¡Que demonios!" maldijo en voz alta, haciendo que Edward regañara a Bella, diciéndole que solo fue Emmett quien salió de la oscuridad.

Eleanora suspiró, apoyándose en sus palmas mientras escuchaba la conversación de Edward y Bella.

"La vida se vuelve más difícil con un humano alrededor". murmuró en voz alta, su aliento caliente saliendo como vapor de la temperatura fría.

Edward se rió entre dientes cuando la escuchó desde adentro. Eleanora pensó en algo, "Edward, ¿cuál es la debilidad de un vampiro?" ella preguntó.

"Hazlo pedazos y luego quema los pedazos". susurró, lo suficiente para que solo ella lo escuchara, confiándole la información, como ella confiaba en él con su debilidad.

Ella asintió con la cabeza y de repente frunció los labios. "Así que podría haberlo matado. . ." murmuró, incrédula. Sin embargo, ella ya tenía una prioridad. Manteniendo su secreto a salvo y un humano a salvo.

Condujeron hasta la casa. Las luces del interior eran brillantes. Emmett trajo a Bella, mientras Edward ayudaba a Eleanora a bajar, después de que él estacionara.

Cuando entraron, todos estaban de pie. Laurent también estaba allí. Antes de que Edward pudiera hacer algo, Eleanora lo detuvo, "Él no es un enemigo a partir de ahora". ella entrecerró los ojos. Está aquí para advertirnos.

Laurent les informó sobre lo letal que era James. Cómo no se detendría hasta conseguir lo que quería y cómo sus sentidos estaban fuera de control. Sobre cómo quería a las dos chicas, pero eligió a Bella. No pasó mucho tiempo antes de que se fuera al clan en Denali.

Leonora parpadeó. "Entonces, él es otro vampiro como ustedes". ella dijo. Podía llevarlo, pero las posibilidades de que el bosque sobreviviera eran casi nulas.

"¿Qué cerca?" Carlisle miró a Edward. Estaba haciendo esto para evitar que su secreto saliera a la luz, y también para evitar que Charlie los culpara por la misteriosa desaparición de su hija.

Esme ya se estaba moviendo, su mano tocó un teclado discreto en la pared, y con un gemido, enormes persianas de metal comenzaron a sellar la pared de vidrio, haciendo que Bella se quedara boquiabierta cuando Eleanora lo ignoró.

"Alrededor de tres millas más allá del río; está dando vueltas para encontrarse con la hembra". respondió Eduardo. "¿Cuál es el plan?"

"Lo guiaremos, y luego Jasper y Alice la llevarán hacia el sur". Carlisle explicó.

"¿Y entonces?"

El tono de Edward era mortal. "Y tan pronto como Bella esté libre, lo cazaremos".

"Supongo que no hay otra opción". Carlisle estuvo de acuerdo, su rostro sombrío.

Edward se volvió hacia Rosalie. Llévala arriba y cámbiala de ropa. Edward ordenó. Ella le devolvió la mirada con lívida incredulidad.

"¿Por qué debería?" ella siseó. "¿Qué es ella para mí? Excepto una amenaza, un peligro que decidió quedarse".

Bella retrocedió ante el veneno en su voz.

Eduardo suspiró. Eleanora decidió hablar. "Podemos intercambiar ropa". Se volvió hacia Rosalie. "¿Me prestas un poco?" preguntó con una pequeña sonrisa esperanzada.

Rosalie asintió y condujo a las dos chicas por las escaleras hacia su habitación donde Eleanora intercambió su ropa y donde tomó prestada la de Rosalie.

Tomó un tiempo debido a que Bella hizo muchas preguntas, pero lo lograron, con una Rosalie irritada y una Eleanora estresada.

Bajaron corriendo las escaleras, Eleanora cargando a Bella para frotar su olor en su cuerpo y aparecieron donde estaba la familia.

Carlisle le entregó a Esme y Alice unos diminutos teléfonos celulares plateados. "Esme y Rosalie se llevarán tu camioneta, Bella". le dijo a este último al pasar. Bella asintió y miró a Rosalie, quien miraba a Carlisle con una expresión de resentimiento.

"Alice, Jasper, tomen el Mercedes. Necesitarán el tinte oscuro en el sur". Ellos también asintieron.

"Vamos a tomar el jeep". Carlisle le dijo a Edward.

"¿Qué pasa con Rosa?" preguntó mientras se giraba hacia su figura paterna.

"Tengo piernas, además, pensarían que estoy en un vehículo de todos modos". Eleanora dijo, señalando hacia sus piernas. Tenía la capacidad de ocultar su olor, la capacidad defensiva de un dragón.

Los Cullen sonrieron cuando Carlisle se giró hacia Alice. "Alice, ¿morderán el anzuelo?"

Todos observaron a Alice mientras cerraba los ojos y se quedaba increíblemente quieta.

"Él te rastreará. La mujer seguirá al camión. Deberíamos poder irnos después de eso". ella abrió los ojos, con voz segura.

"Vamos." Carlisle comenzó a caminar hacia la cocina.

Edward se paró frente a Eleanora y la besó en la frente para darle buena suerte y con amor. "Cuidate." exhaló, incluso si ella era capaz de protegerse a sí misma.

Ella asintió y le sonrió. "Tú también."

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