—Jung Hoseok, pasó mucho tiempo desde que nos vimos por última vez —Dice Jimin sin poder creer a quién tenía enfrente después de tantos años.

Este le regaló una bonita sonrisa.

—Igualmente, estás más hermoso ahora Jimin, digo no es que no fueras hermoso antes, pero... bueno ya sabes que quiero decir —Rasco su nuca algo avergonzado, sonrió al igual que el peli-rosa.

—Gracias por el cumplido. Porque no pasas a mi oficina y hablamos sobre lo del trabajo.

—Por supuesto —Acepto.

Ambos se adentraron a la oficina.

—Toma asiento por favor Hoseok. —este lo hace. —¿Supongo que bienes por lo del empleo verdad? Lo siento tengo que verme profesional.

Serie el castaño.

—Si por supuesto, mire el anuncio en internet y quise rápidamente venir por él, además que cuando mire tu nombre y tu rostro me comunique de inmediato.

Jimin asiente mientras saca el contrato.

—Bueno te explico. La razón por la que ocupo a alguien para la danza contemporánea es porque me voy a retirar un tiempo. —empieza a explicar— Estamos a unas semanas para un recital de baile y ya no puedo dar la clase.

—¿Por qué? ¿Estás enfermo o algo así? —pregunto  preocupado.

—No, claro que no. —Negó rápidamente— Solo que bueno… Estoy embarazado —El castaño lo miró sorprendido por eso, aunque algo decepcionado— Estoy esperando gemelos y es algo más arriesgado seguir con los movimientos que realizó. Según el médico debo de tener cuidado, ya que podría ser peligroso.

—Ya veo… —murmuró— Felicidades por tus bebes, no sabía que estabas casado.

—Lo estoy. —Dice algo sonrojado— Tengo otro hijo que también está tomando la clase, se llama Soobin. Es un buen niño, en realidad todos lo son.

—¿Entonces quieres que me haga cargo sobre lo que resta de las semanas para el recital? —Jimin asiente.

—Sí y también para que puedas dar clases aquí, mientras disfruto la etapa de ser padre sabes —Se alzó de hombros— La paga será buena, tienes clases de lunes a jueves, el horario es de 3 de la tarde a las 5 pm, lo modificamos mejor para así poder venir yo a ver qué tal lo haces, aunque no dudo porque eras el mejor de la universidad —Lo halago— ¿Quieres el empleo Hoseok?

El castaño asintió.

—Claro aceptó, ¿cuándo empiezo? —Pregunta entusiasmado.

—El lunes comenzamos, estaré aquí para presentarte a mis alumnos y enseñarte de una vez la coreografía, sé que podrás aprenderla fácilmente. Eso sería todo, este es tu contrato. —le entrega la hoja de papel para que lo firme— Firma aquí y aquí.

Hoseok lee el contrato hasta llegar a fírmalo, Jimin lo selló y se levantó de su lugar, acto imito Hoseok.

—Bienvenido a mi academia de danza Hoseok. —estiró su mano y este la estrechó.

—Gracias Jimin, te prometo ser el mejor maestro que hayas contratado —Siguieron tomados de la mano hasta que Jimin la soltó algo incómodo, pues sentía la penetrante mirada del castaño.

—Esto sería todo, nos vemos el lunes Hoseok.

—Si claro nos vemos el lunes, Jimin.

Ambos después de hablar un poco salieron del edificio. Jimin fue al estacionamiento por su auto al igual que Hoseok, quien no dejaba de mirarlo durante el camino.

—Nos vemos Jimin —Se despide el castaño entrando en su auto.

Jimin lo despide igual, entra a su auto y estaba por arrancar, pero en eso le llega un mensaje de su esposo.

Jungkookie ❤️
»Amor te espero en esta dirección, Soobin está conmigo ven cuando termines lo de tu entrevista.
Te amo.

A Jimin le pareció extraño, pero condujo a la dirección donde su esposo le mandó el mensaje, ya había olvidado lo que le dijo sobre la casa de sus padres, tal vez era ahí donde quería que fuera. Condujo hasta el lugar, al llegar pudo ver una hermosa mansión, si era más grande que donde ellos vivían.

Se sentía extraño este lugar, había un enorme jardín con algunos jardineros cortando las pequeñas ramas, parecía una de esas mansiones de películas antiguas, era como de tres pisos. Jimin entró con su auto, aparcado a lado del de su esposo y el de Namjoon.

Sí, definitivamente están aquí.

Bajo de su auto y fue recibido por dos mayordomos.

—Señor Jeon Jimin, los señores Jeon lo esperan en la sala privada, síganme por favor.

—Claro gracias.

Jimin siguió al mayordomo, y joder Jimin no estaba equivocado en nada, era super grande por dentro y tenía una bonita sala, había muchos cosas doradas con cuadros que de seguro valían mucho dinero. Siguieron avanzando hasta llegar a otro pasillo más grande, se podía oír el rechinar de sus zapatos, parecía abandonada la gran mansión, se podía sentir la soledad en ella.

Si aquí crecieron Jungkook y Namjoon solos, entendía por qué su novio se sentía tan solo en su niñez, pues Jungkook le llegó a contar muchas cosas sobre cuando era niño y él sin fin de veces que la pasaba solo a cargo de unas niñeras. Al llegar al salón pudo ver a su esposo sentado aún lado de Soobin, el cual no tardó en correr a sus brazos.

—¡Papi! —Jimin lo cargo y Jeon se acercó también a su lado.

—Hola, cariño —Besó sus labios y ambos miraron a los señores Jeon ponerse de pie.

—¿Ha pasado algo?

—Solo quiero escuchar lo que tengan que decir y me nos vamos —Jimin asintió de acuerdo.

Jimin y Jungkook tomaron asiento en la gran sala junto a su pequeño hijo, del otro lado estaba Namjoon y Seokjin de igual manera estaban más nerviosos que él. Los señores Jeon eran algo intimidantes, y realmente todos estaban con mucha tensión por el momento incómodo.

—Por favor díganos —rompió el silencio Jungkook— ¿Para qué nos citaron a todos aquí?

Los señores Jeon los miraron para después suspirar alto y derrotados, el señor Jeon miró a sus hijos con sus respectivas parejas, se dio cuenta de muchas cosas que se estaban perdiendo por culpa de su ambición, así que tenía que arreglarlo.

—Los reuní aquí a todos con la intención de decirles algo importante —Empezó a decir mientras sus hijos lo miraban desconcertantes— Desde que recuerdo nunca fui buen padre para ustedes, siempre fui muy terco, frío y muy estricto, nunca estuve con ustedes en sus logros, ambiciones, sueños y todas esas cosas —Suspiro profundo dejando salir todo rastro de querer llorar— Fuí muy injusto en haberlos hecho pasar por tantas cosas que no querían, por ejemplo Namjoon.

El moreno lo miró con su ceño fruncido.

—Te obligue a tomar una carrera que no querías hijo, tú querías ser un rapero famoso, escribías buenas canciones. Tal vez no lo notaste, pero las pocas veces que venía a casa te escuchaba con tu música a todo volumen, haciendo rimas extrañas, pero hermosas. —Su voz sonó algo quebrada y el moreno tenía sus ojos acuosos— Cuando me dijiste que querías ser compositor y rapero yo... yo me opuse inmediatamente. Te obligue a ser un suplente mío para ser CEO. Fue mi primer error de muchos. Lo siento hijo, lo siento mucho.

No se esperaban eso del señor Jeon. Hubo un silencio no tanto incómodo, lo que ellos le decían a su hijo era totalmente sinceró, se miraba arrepentido.

Prosiguió.

—Jungkook —Lo mencionó y este lo miró, Jimin tomó su mano para darle algo de apoyo— Mi hijo menor, el más rebelde que pude tener, siempre fue mi dolor de cabeza, pero no lo malinterpretes hijo —Aclara— Te hice sentir mal mucho tiempo. Siempre quisiste tener una empresa de videojuegos. Los amabas tanto que pensé que con el tiempo se te pasaría y serías un hombre maduro, pero jamás pasó; seguías en todo ese mundo de computadoras y temí por ello, pero lo que no me esperaba fue cuando me comentaste que te enamoraste de una persona que no era de nuestro estatus social —Jungkook se tensó, sabía por dónde venía todo esto. —Te lo prohibí cuando lo presentaste a la familia, le dije cosas horribles, aún más cuando supe que serías padre. Yo acepté que te hicieras cargo del pequeño que está sentado en las piernas de tu ahora esposo. Siempre fui injusto contigo, te obligue a renunciar a ese sueño, me arrepiento tanto de lo que te hice sufrir.

Jungkook quería llorar, porque esas palabras no las quería escuchar ahora, él hubiera preferido escucharlas cuando era más joven y necesitaba algún consejo de su padre, no ahora que tenía una familia y que perdió a alguien importante en el pasado.

¿Qué mierda quería con todo esto?

—Ni siquiera estuve cuando murió. No te apoye y más sabiendo que tenías aún bebé contigo, sin saber nada de cómo alimentarlo o cambiarle el pañal. Fui muy injusto contigo hijo —Sus lágrimas no se retuvieron más y empezó a llorar al igual que la señora Jeon— Te di la espalda y solo te miraba en la oficina triste con esas enormes ojeras bajo tus ojos agotados, con el pequeño Soobin en su cunita al lado de ti mientras trabajabas.

—Solo quiero decir que lo siento, no fui buen padre y nunca lo fui a decir verdad. Lo siento, perdónenme hijos, y también lo siento Soobin, porque fui muy cruel contigo y me siento el peor abuelo del mundo. Ahora que ambos están haciendo su vida con sus parejas, yo solamente quiero desearles lo mejor, solo espero que me perdonen. A mí y a su madre.

Claro que estaba arrepentido de todo lo que les hizo a sus dos únicos hijos, sus lágrimas son prueba de ello, su esposa se paró para abrazarlo y ella también habló.

—Yo tampoco fui buena madre, quiero que sepan que estamos arrepentidos de todo lo que les obligamos hacer, lo sentimos tanto y no queremos perderlos. No podemos cambiar el pasado, pero si el futuro aunque sea un poco tarde para esto, lo siento yo también hijos, lo siento mucho.

Tanto como Namjoon y Jungkook estaban desconcertados por toda esta situación, la confesión de perdón de sus padres los dejó sin habla. Jimin y Seokjin los estaban apoyando en este momento que era difícil para ellos, los dos se levantaron del sofá al mismo tiempo dejando a sus parejas perplejas.

Namjoon habló primero.

—Si tienen razón, no son los mejores padres que pudimos tener, no son los super héroes que veíamos en ustedes, son humanos que se equivocaron, pero al final de cuentas no podemos juzgarlos por cómo nos criaron a mí y a mi hermano. Pero también sé que todo lo que nos hicieron fue horrible, nos quitaron nuestros sueños para sus propios sueños y beneficio —espetó con dureza, los señores Jeon sintieron el rechazo de su hijo mayor— Así que un "lo siento"no cambia el daño ya hecho y eso de cambiar el futuro ¿Qué? Nada pueden reparar porque el daño ya está hecho, son mis padres, pero no creo llegar a perdonar algo como esto.

Seokjin se paró enseguida a tomar la mano de su moreno.

—No puedo darles una respuesta, no la que quieren escuchar de mí, si me disculpan, ya me retiro.

Namjoon salió de ahí tomando la mano de su novio, Jungkook lo miró irse y tomó la mano de Jimin también para irse juntos.

—Mi hermano tiene razón, aunque quieran pedir perdón por todo, no es así de fácil, no es simple. —Dice tragando grueso— Nos hicieron mucho daño, me rechazaron, rechazaron a mi ex pareja y mi hijo, y también a mi ahora esposo —estaba muy enojado e impotente— Solo queremos tiempo, esto no es fácil para nosotros. No esperen rosas después de las puñaladas en la espalda, porque jamás voy a olvidar cómo trataron a mi primer amor, y cómo trataron a mi hijo. Con permiso.

Salió con su hijo llegando a fuera de la gran mansión donde en algún momento vivió. Todo esto de 'lo siento' y palabras de arrepentimiento le parecían falsas, alguna excusa para que ellos hagan algo por ellos. No sabían hasta qué grado llegó él lo siento de sus padres, no les cría una mierda y tenía que hablarlo con Namjoon.

Por otro lado, Jimin miraba de reojo a su esposo, Jungkook subió a su propio auto y Jimin al suyo. Su cara era de suma molestia y no era para menos pues sus padres nunca fueron un apoyo para ellos desde niños, sentía que debía hablar con él en cuanto llegaran a la casa, pero cuando lo hicieron se encerró en su oficina sin querer hablar con nadie.

Jamás lo miró de ese modo, dejó que se desaguara solo, después hablaría con él sobre esto. Solo esperaba poder ayudarlo y comprender un poco más sobre todo lo que ambos escucharon.

En otro departamento un moreno estaba de igual manera, llorando y tomando como nunca antes lo hizo. Mientras su novio lo esperaba en su cama sin poder dormir por no poder hablar con él para poder ayudarlo.

Jimin y Seokjin, se sentían impotentes por no poder ayudarlos como querían. Solo ellos sabían lo que sufrieron de más jóvenes.

Incluso a mí me cuesta perdonar a mis padres por cosas super turbias que me hicieron. Aún no superó como se burlaban de mi por tentar contra mi vida. Sigo sin entender que tenía de gracioso.

Lo siento quería desahogarme jejee