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Sumisa/Amo.

La palabra DOM, se usa para llamar a la persona dominante en un juego de roles en el sadomasoquismo, todo esto es consensuado y acordado por el sumiso y él amo, ambos saben los límites que pueden llegar a tener, así que no se asusten, sin mencionar que es un escrito jujuju.

Alabado sea el photobook de Jimin.

Caos.

Dominación.

Palabra que puede indicar poder, jerarquía y control. La cual en diferentes tipos de contextos cambia, pero que sigue siendo una palabra fuerte para muchos.

Para Aura era una palabra que le gustaba, una palabra que le hacía recordar lo bien que la pasaba los viernes por las tardes, cuando salía del trabajo para irse directamente al club que pertenecía.

Un club peculiar, dónde los miembros eran discretos, educados y disciplinados. Lucen como las personas más funcionales y tranquilas de la sociedad pero su trasfondo en el juego de roles que representaban causaba controversia para quien no entendía el mundo que era el BDSM.

Está semana abría un evento especial dónde los Doms elegirían un sumiso diferente a la acostumbrado. Era un evento único pues una vez se tiene a su sumiso, el cambiarla es complicado ya que no todos los Doms tienen gustos similares. Así que una vez que te adaptas a una sumisa es difícil soltarla, pocos pueden adaptarse, pues aunque parezca que el Dom tiene el control, su principal función es complacer al sumiso a su disposición.

Los sumisos que entraron al intercambio fueron persuadidos por sus Doms de siempre, así que los que aceptaron estaban emocionados por lo que les deparaba la noche.

Pero todos deseaban ser tomados por el Dom Park Jimin, era muy popular porque los sumisos que llegaron a estar a su disposición, no lograban siquiera describir el placer que este les había dado, perdían incluso el conocimiento debido al placer que les llego a generar.

Sin duda es un hombre atractivo, tiene el cuerpo atlético, siempre anda bien vestido, sus facciones son delicadas pero los ojos son profundos y penetrantes, tiene labios gruesos, piel marmoleada y además una manera de hablar que derrite solo con un “Buenos días”

Las habitaciones fueron asignados al azahar, el Dom se encontraría esperando a su Sumiso asignado, donde los juegos comenzarían.

Aura entro a la habitación sus tacones se escucharon caminar de manera lenta por esta, su cabello estaba atado en una coleta alta, solo portaba un abrigo rojo que contrastaba con su piel dorada, cuando llego hasta donde estaría su Dom, le costó demasiado no irse de boca, no gritar por la emoción, no mostrar alguna reacción poco apropiada para un Dom. Park Jimin estaba sentado en la orilla de la cama con las manos recargadas en la cama, un pantalón de cuero negro ajustado, su torso musculo totalmente desnudo dejando lucir un par de argollas en sus pezones rosados, su tatuaje en las costillas causaba aún más atractivo en su nívea piel.

Llevaba un par de guantes hasta la mitad de las manos, estos eran de color blanco los cuales combinaban con su máscara que también le cubría la mitad del rostro dejando ver esos gruesos labios dignos de un altar.

Aura no respiraba, pero logro reaccionar, colocándose de rodillas con las manos sobre sus muslos, cabeza baja, presentando la pose de sumisión total hacia el nuevo Dom.

—¿Qué tenemos aquí? —la voz le causo un escalofrió — creo que si te he visto por el club, eres la sumisa de Kim Namjoon, ¿Cuál era tu nombre? ¿Me lo recuerdas?

—Clo…—no pudo terminar la palabra porque sintió una bofetada que le removió cada fibra nerviosa.

—Dije nombre, no apodo de sumisa —le tomo los pómulos apretándolos con fuerza —¿Cuál es tu nombre?

—Au..Aura —parecía un balbuceo de tan fuerte que le apretaba las mejillas.

—Bien Aura, te diré mis reglas, son sencillas y siento que una cabeza bonita y vacía como la tuya las entenderá.

No tenia tacto, ni remordimiento en sus actos, desde el primer momento que Aura piso la habitación Jimin ya era su Dom y se tenía que dejar en claro.

—No me gusta repetir, hablas solo cuando lo pida, el único sonido de tu sucia boca será los gemidos y jadeos, nada de maldiciones, Amo es la palabra que debe acompañar el Si, tu palabra de seguridad será Caos —se separa de ella caminando de nuevo a la cama — ¿Entendido?

—Si amo.

—Quítate el abrigo, pero quiero que me veas directo a los ojos, no titubees Aura.

La orden fue clara, Aura miro directo a los ojos del amo Park, mientras sus manos quitaban la hebilla del abrigo, el cual dejo deslizar por sus hombros, mostrando que solo llevaba un arnés negro alrededor de su cuerpo, sus senos estaban expuestos siendo apretados por las correas, un pequeño triangulo de tela cubría la vulva caliente, pero sin mucho que imaginar pues era de un encaje que dejaba ver su perfecta depilación. Los tacones realzaban su estilizada figura, la entre pierna de Dom no tardo nada en reaccionar ante la imagen delante de él.

—Ese maldito bastardo —se relamió los labios — ¿Te ha tenido para él todo este tiempo? —sintió el calor llenándolo —eres una puta tan bonita.

Podía notar ligeras marcas al interior de los muslos, señales de sus sesiones pasadas con el Dom Namjoon, cada extensión de piel gritaba la experiencia que la sumisa Aura tenia, nada le hacía mas aguar la boca a Jimin, el saber que ella estaba preparada mas que nadie para recibirlo.

—Ven aquí —Aura camino lento hacia él, sin bajar la vista ni usa sola vez —quítame la mascara —iba a tomar el pedazo de cuero que cubría el rostro, pero Jimin se hizo para atrás —usa tus dientes.

Para esto Aura debió subirse al regazo de Jimin, acercando sus labios rojos hasta la mascara, son algo de dificultad logro tomar la orilla del pedazo de cuero, haciéndolo hacia arriba quitándolo por completo.

Ella estaba concentrada en su tarea que no noto, cuando Jimin había liberado un par de correas del arnés, para amarrarlo de manera diferente,  la arrojo a la cama doblando sus piernas un poco hacia atrás como una flor de loto a la inversa, haciendo que su intimidad quedara expuesta y sus piernas en una posición incomoda, amarro sus manos a cada talón, los pechos se alzaban con las postura luciendo ya los duros pezones de la pequeña sumisa.

—En verdad eres un bonita puta.

Dejo el torso contorsionado para ir hacia un pequeño Baúl donde saco algunas cosas. Aura sintió el peso de la cama hundirse tras de ella, luego la sensación de plástico en su boca al tener la bola de la correa de mordaza.

—Estas lista.

No era una pregunta, era más una afirmación, se paró al frente de la cama admirando su obra de arte como si fuera la pintura más perfecta del mejor museo de París.

Regreso a la cama para dejar algunos besos en las mejillas marcadas por sus dedos, bajando al cuello con mordidas leves, podía escuchar como a la joven se le agitaba la respiración con cada toque, Park sabía que la posición en la que tenía era incómoda y algo dolorosa, pero era bien recibido ese pequeño dolor por Aura, ya que la pequeña tela que cubría si intimidad estaba empapada.

—Estas manchando mis sábanas mocosa— le arrancó la ropa interior —y aún no siquiera empiezo a follarte —hizo presión sobre el clítoris hinchado —solo pensar lo bien que te sentirás me enfurece.

Se escucha el vibrar de algo entre las manos de Jimin.

—Pero no es furia contigo mi linda puta —metió dos dedos a la vagina de la chica, causando un ligero movimiento en ella que tenso el arnés lastimando un poco las piernas —estoy furioso con Namjoon, ese idiota ha podido tener a tan lindo ejemplar, eres tan obediente, tu cuerpo es tan bonito, las marcas se notan en su totalidad, puedo ver tu piel enrojecida bajo las correas del arnés.

El sonido de vibración paso de escucharlo a sentirlo, Jimin había introducido una pequeña bala vibradora en su interior húmedo, sus ojos se fueron en blanco, un gemido salió atraves de la mordaza.

—Si, así, quiero más de esos.

Se levantó de la cama jalando a la chica hasta la orilla, observando cómo la entrepierna brillaba por la lubricación que estaba generando, tomo un pequeño látigo para dar el primer azote cerca de la vagina.

Sonidos inteligibles salía por la boca de la joven, a la ves que las lágrimas comenzaban a brotar, apretaba los ojos en cada azote, su piel ardía como el infierno, incluso logro sentir un pequeño hilo de sangre entre sus muslos, este nivel de dolor no lo había experimentado, pero le gustaba.

Además que la bala seguía dentro de ella haciendo que el placer de los azotes y la sensación de invasión del objeto combinarán a la perfección, hizo su cabeza aun lado para alcanzar a ver a su amo, el cual se masturbaba con una mano libre, solo su miembro estaba fuera de sus pantalones haciendo la escena más erótica, tanto que Aura llegó a su orgasmo mojando la orilla de la cama con sus espasmos, llenando el lugar con sus gemidos sofocados.

—Oh Aura, mi dulce zorra, que preciosa imagen.

Los halagos de parte de su amo la ayudaban a seguir disfrutando, pero sentía que estaba algo débil aún no se recuperaba del orgasmo cuando sus arneses fueron movidos de nuevo dejando solo sus manos atadas a la espalda. Siento sentada sobre el miembro de Jimin de un golpe, no había sacado la bala la cual no dejaba de vibrar y estimular más las penetraciones.

—Mueve ese culo preciosa.

La piel abierta hacia fricción con los pantalones de cuero, causando ardor en sus pequeñas heridas por los azotes, por las orillas de sus labios hilos de saliva se escurrían, mientras que en su vista perdida en el placer trataba de enfocar a su amo, el cual recogía las lágrimas secas en las mejillas, las manos de Jimin apretaban los muslos y encajaba las uñas al sentir como era apresado con placer dentro de la chica.

Ella volvió a llegar con un poco entendible MIERDA.

Había roto una regla, lo cual nunca hacia, pero fue inevitable sentirse de esa manera cuando su placer era tan alto.

—Niña mala.

Jimin salió dentro de ella sacando la bala en el proceso, se quitó el preservativo que había colocado con habilidad para arrancar la mordaza y meter su miembro hasta el fondo de la garganta de la chica tomándola por el cabello embistiendo de manera brusca.

—Debo limpiar esa boca tan sucia, no debes decir maldiciones te lo dije, ¿Acaso eres tonta? ¿Uh?

Se mordía los labios al sentir la garganta de la chica, Aura se ahogaba ligeramente mientras su boca estaba llena, sentía el palpitar de Jimin dentro, sabía que su amo también llegaría pronto a su liberación y ansiaba probar su semen.

La mano libre de Jimin la atrapó del cuello para dar las últimas estocadas sin dejar entrar el suficiente aire a sus pulmones, el amo Park salió de la boca y se corrió sobre las sábanas mirando con malicia a la chica.

—Las putas desobedientes no merecen mi semen.

Aura recupero el aire que le fue robado pero sintió la decepción al no poder disfrutar de lo derramado en la cama.

—Si quieres probarlo, lame las sábanas —fue por un cigarrillo —si lo haces bien, te follare de nuevo.

Jimin ya había decido quitarle su sumisa a Namjoon, más viendo cómo Aura se inclinaba levantando el trasero para lamer sin descaro los restos de su semen en las sábanas, estaba seguro que dejaría marcas en ese culo las cuales harían que Aura jamás pensará en otro amo que no fuera él….

Este OS va dedicado a mi pequeña arbolcolorido