El reloj marco las doce, Lucy miro la hora y vio que se había hecho muy tarde.

- me tengo que ir- dijo tomando su cartera del sofá

-quedate un poco mas- respondió Matt acercándose a ella

- Matt... no puedo

-Lucy...- dijo tomandola por la cintura

-Matt...

-lucy... - se acercó más ella y sus rostros quedaron frente a frente

-Ma...- el la calló con un beso

Ella le respondió el beso dejando caer su cartera al piso, y él la guio hasta la cama sin dejar de besarla. Poco a poco le fue sacando la ropa, primero la blusa y luego el jean que llevaba puesto. Lucy nunca había estado con otro hombre que no fuera Andy, se sentía diferente, sus besos y caricias eran diferentes. Matt no quiso dejarla ir sin antes poder besarla, era una chica tan linda pero llena de problemas que poco a poco iban apagando la luz que emanaba.

............................................

Los rayos que entraban por la ventana dieron directo sobre sus ojos  y por eso hizo desperto, miro a su alrededor y tardo unos segundos en recordar donde se encontraba, sintió el brazo de el rodeando su cintura y sonrió ,se levantó y comenzó a vestirse en silencio.

- no pensas irte sin desayunar – dijo el estirándose en la cama

- de hecho si- dijo ella parada en frente- ya son las once  de la mañana

- bueno entonces podriamos desayu-almorzar - bromeo

- bueno, desayuno y me voy- dijo ella tratando de no reirse de sus ocurrencias

- ¿conoces alguna cafetería?, el desayuno de este hotel me tiene cansado

- si

-¿vamos?

..................................................

Tomaron un taxi y en menos de 10 minutos llegaron a una pequeña cafetería llamada "molly's", cuando entraron, todas las meseras saludaban a Lucy, una de ellas apenas la vio repaso una de las mesas que daban hacia la ventana.

- buen dia, Lucy ¿ lo mismo de siempre?- pregunto la señora sacando su libreta del bolsillo

- buen dia Val, si lo mismo de siempre una chocolatada y un plato de pancakes- dijo ella con una gran sonrisa

- ¿y para el muchacho? - Lo señalo con la lapicera

- para mí una taza de café y.... Una porción de torta de manzana- contesto el ojeando el menú. Val se retiro hacia el mostrador

- sos bastante conocida aca, no?

- si, cuando era chiquita solía venir acá cada domingo junto a mi papá, después me mude y cuando regrese, volví a venir

Desayunaron mientras Matt le contaba sobre su vida, anécdotas de sus viajes con su amigo Alex, y Lucy escuchaba todo atentamente, por momentos se imaginaba que era ella la que había viajado a todos esos lugares que el mencionaba, hacía rato que no se reía como en aquel momento.

Cuando salieron de la cafetería, ella dudaba si quedarse con él o no, el no quería que se marchara pero tampoco podía hacer nada para retenerla.

- gracias por todo pero tengo que volver – dijo ella agachando la mirada

- no me tenes que agradecer nada- contestó acomodándole un mechón de cabello detrás de la oreja

- adiós Matt- dijo ella

- adiós Lucy- él se quedo parado mirando cómo se marchaba hasta que ella doblo en la esquina y no la vio más

Matt se quedo en la esquina esperando un taxi para poder regresar al hotel, pensaba en Lucy, pensaba en cómo podía ayudarla, pero como podía ayudarla si al otro dia regresaría a su vida del otro lado del océano, también pensaba en que le hubiera gustado pasar mas tiempo con ella, verla sonreír después de tantas lagrimas. En el momento que iba a subir al taxi que por fin le había parado sintió que alguien le tocaba el hombro, giró y se encontró con la mirada de ella, sonrió al verla. Lucy se quedó muda no sabía que decir, se sonreía pero no hallaba una excusa que inventar por la cual había regresado

- y joven que va a hacer sube o no?- preguntó impaciente el taxista mirando por el retrovisor

- si claro - dijó extendiendo la mano para que ella subiera primero.

Cuando llegaron al hotel, Matt tomó a Lucy de la mano y la condujo a uno de los salones del Hotel, ella se preguntaba a donde iban pero confiaba en Matt y los siguió sin objeción alguna.

En el centro del salón se hallaba un gran piano blanco, y los ojos de ella resplandecieron al verlo.

- creo que me deberías mostrar cuán bien tocas el piano – dijo el

Ella se adelanto y se sentó, antes de empezar a tocar deslizo sus dedos sobre las teclas, cerró los ojos y comenzó, cada vez que tocaba Lucy se sentía en otro planeta como si desaparecía de la faz de la tierra, era solo ella y la música, Matt se quedó asombrado al escucharla, ya se había encandilado con su belleza pero ahora sentía que ella era única, sacó su teléfono la grabó.

https://www.youtube.com/watch?v=ja7v4JTsLVw

- claro de luna de Debussy mi favorita- dijo al terminar-¿ me estabas filmando?

- lo quería tener de recuerdo para cuando seas famosa- bromeo

- dame ese celular- dijo ella levantándose de su lugar y forcejeando con él, quedaron frente a frente y Matt no pudo resistir el deseo de besarla - acá no- susurró Lucy

Regresaron a la habitación y esta vez fue Lucy quien comenzó a besarlo con pasión, desvistiéndolo y guiándolo hacia la cama, montándose sobre el y susurrándole al oído: -haceme tuya  .Era la última vez que lo iba a ver y sentía la necesidad de retribuirle todo lo que había hecho por ella, no había sido mucho pero dada su situación para ella representaba un montón, en realidad muy adentro, ella deseaba a ese hombre pero no podía pensar en esas cosas ya que todavía seguía siendo una mujer casada, por un rato decidió dejar estos pensamientos a un lado y disfrutar.

..................................................................

Los dos se hallaban desnudos recostados en la cama mirando el techo, los dos sabían que en menos de una hora se debían despedir pero no querían arruinar ese momento con palabras cursis y promesas que no se cumplirían. Lucy tomo coraje y habló:

- creo ahora si me tengo que ir... - dijo apoyándose sobre su brazo y mirándolo

- si lo sé- dijo el acariciando su mejilla

- gracias por todo de verdad- dijo ella besándolo

- no me olvides Lucy, yo nunca te voy a olvidar- dijo el apretándola contra su pecho

Matt acompañó a Lucy hasta la entrada de hotel hasta que ella tomo un taxi, se despidieron dándose la mano y con un abrazo como dos viejos conocidos. El regreso a su habitación y se volvio a acostar  sintiendo el aroma de ella que todavía perduraba en la almohada mañana debía regresar a Inglaterra y no podía posponer el viaje

Ella llegó a casa y encontró todo desordenado tal y cual lo había dejado Andy el día que se había marchado a Las Vegas, con desgano se puso a ordenar y limpiar un poco.

)21Co