♥︎︎Capítulo 5♥︎︎

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Seok Jin se sentía orgulloso de sí mismo. Ya llevaba dos semanas yendo al gimnasio y había bajado alrededor de cinco kilos entre dieta y ejercicio. No había sido tan malo comenzar a comer más vegetales y comida saludable, se sentía con mayor vitalidad que antes y con más ganas de ayudar a su madre con los quehaceres del hogar. Era como si su energía se hubiera renovado.

Ese día se despidió de Alexander quien sonreía al escuchar como algo se rompía. NamJoon nuevamente rompió algo y él debía ir a arreglarlo, si es que tenía arreglo. Por lo que no se pudieron quedar hablando demasiado y tuvo que partir a su hogar. El sol comenzaba a ponerse así que aceleró su paso, ese día planeaba preparar una cena deliciosa a su bonita madre.

Pasó por el parque donde había algunas personas haciendo ejercicios...entre ellas, JungKook. Aceleró el paso esperando que no lo viera, desde que había empezado el gimnasio no lo había visto o, mejor dicho, escapaba de él. Así que esperó tener suerte en esta ocasión...pero como no siempre las cosas salían como esperaba, el omega logró alcanzarlo tomándolo del brazo con una gran sonrisa que, por un instante, lo hizo temblar de miedo.

-Hola hyung.-bien, esa sonrisa psicótica no ayudaba nada a calmarlo-bonito olor a jazmín-¿fue su imaginación o había apretado su brazo?-¿nueva loción?

-Ah...sí, eh...debo irme a casa-intentó zafarse, pero el agarre era fuerte y no pudo escapar.

-Venga a casa, hyung, mamá y papá no están y me siento solo, hágame compañía-¿era posible que una sonrisa pudiera helarle la sangre? Oh, claro que sí, y el omega era capaz de usarla en su contra.

Sin rechistar lo siguió a su casa, ingresando a la silenciosa morada con Kook sosteniéndolo firmemente del brazo, soltándolo únicamente cuando logró cerrar con llave la puerta, su única vía de escape.

El menor volteó a verlo, cruzándose de brazos y con esa sonrisa que le daba escalofríos. Le recordaba a esa carita que solían usar las personas que estaban enojadas para dejar en claro que su humor era pésimo ese día con esa determinada persona. Sí, JungKook era esa carita pero mil veces peor.

-B-bueno...ya estamos aquí...-miró hacia un costado, buscando alguna forma de huir ¡Por Dios que si estuvo evitando al menor durante todo ese tiempo fue para volver a hablarle cuando estuviera seguro de su cuerpo y fuera digno de él!

­-De quién es ese olor a jazmín, Kim Seok Jin.-oh por el amor a Jesucristo, su voz era mil veces peor que su sonrisa.

-¿Eso importa realmente?

-¡Claro que sí!-exclamó molesto el omega-¡Eres mi pareja destinada! ¡El único aroma que debe mezclarse con el tuyo es el mío!

-Espera... ¿acaso me has traído hasta aquí para hacerme una escena de celos?

-¡Por supuesto! ¡Soy el único omega con el que debes estar!-cuando el menor intentó tomarlo del brazo, lo alejó al recordar que a pesar de haber bajado de peso aún tenía grasa en su cuerpo que no lo hacía ver bien, aunque eso pareció haber enojado más al chico-¿Acaso ahora lo prefieres a ese omega? ¿Por qué? ¿Qué te da que yo no podría darte? ¿Eh? ¡Vamos, dime! ¿Acaso es una chica? ¿Es eso? ¡Yo puedo ser mucho mejor que una! ¡No necesitas que...!

-¡Ya cállate!-gritó molesto ante las palabras de JungKook, bien comprendía que su omega interior se comportara así por el sentimiento de ser su pareja destinada, podía llegar a comprenderlo.

Pero dolía pensar que JungKook sólo era así con él por ese lazo invisible que, a pesar de no unirlos aun, estaba presente entre ellos, demostrándole que fueron hechos el uno para el otro. Sin embargo ¿realmente era lo que Kook querría? ¿Era el alfa indicado para hacerlo feliz?

Vio la mirada sorprendida del omega y recién en ese instante cayó en cuenta de que le había gritado. Quiso disculparse, él por lo general no era así, sin embargo no supo cómo pasó pero estaba seguro que JungKook había acortado la distancia entre ellos en tiempo récord, de otra forma no explicaría cómo fue que logró besarlo tan apasionadamente como lo hacía, enredando con firmeza y posesión los brazos alrededor de su cuello.

El gesto lo nubló y cuando menos lo notó ya estaba correspondiendo, tomándolo firmemente de la cintura.

🌺Acomplejados🌺

JungKook no lo podía creer, definitivamente no podía creer que estaba besando a Kim Seok Jin. ¡Se sentía en el paraíso! En especial cuando el alfa comenzó a corresponder, tomando la confianza suficiente para tomarlo de la cintura y hacerlo retroceder hasta la pared más cercana donde lo acorraló dejándose llevar por completo por sus instintos.

-Se viene lo bueno, se viene lo bueno-cantaba Kook diablo apareciendo en uno de sus hombros.

-Marca y cachorros, así no le quedará duda a nadie de que es tuyo. Bien hecho, JungKookie-Kook ángel festejaba arrojando papelitos de colores.

-Por primera vez me uniré a la palomita maricona para festejar-Kook diablo hizo aparecer una botella antes de darle un sorbo largo.-¡Salud!

JungKook dejó de prestarles atención cuando Jin comenzó a tantear su cadera. Estaba tan excitado y lo necesitaba tanto que hizo que colocara ambas manos en su trasero ¡Quería que lo tocara sin vergüenza! ¡Que tocara cada parte así como pensaba hacer él con su alfa! Casi sonrió en medio del beso al sentir el primer apretón en esa zona, le había gustado sentirlo y esperaba sentir mucho más. Sus manos tocaron el pecho del mayor, sintiéndolo por sobre la tela y deseando que no tuviera nada de ropa. Quería contemplar a su pareja por completo, quería ver a su perfecto alfa desnudo frente a él para luego sentirlo en su interior, llenándolo por completo, entrando en él incontables veces. Ah, si sus padres supieran los pensamientos que solía tener de seguro lo encerraban en un convento.

Sus manos siguieron descendiendo hasta el miembro del alfa, el cual rozó con su mano. Necesitaba sentirlo, saber cuál sería su tamaño, tomarlo entre sus manos y darle el placer que se merecía. Dios, sonaba igual a una ninfómana, pero no le interesaba. Era su menor preocupación.

Sin embargo, no llegó a tocar con firmeza esa zona porque Jin se separó de él, agitado y negando con la cabeza.

-No...esto...está mal.-decía casi perdido, JungKook apenas podía reaccionar.

-¿Qué?... ¿Por qué...?-¿Acaso estaba mal estar a punto de tener un encuentro íntimo con su pareja destinada? Bien, lo normal era salir a citas y demás antes de que eso pasara, pero el orden de los factores no altera el producto, así que no tenía nada de malo.

Seok Jin volvió a negar antes de ir a la puerta, abrirla con la llave que estaba ahí y escapar de él.

-¿Qué? ¿No habrá marca?-Kook diablo parecía decepcionado.

-¡Esto es tu culpa! ¡Por abrir la botella de vino antes para festejar!-Kook ángel no perdió el tiempo y le arrojó la botella a la cabeza.

-Ahora verás ¡Palomita maricona!-en un chasquido, ambos desaparecieron en medio de una pelea, dejando a JungKook solo, aun excitado y pensando en las palabras de Seok Jin.

🌺Acomplejados🌺

¿Cómo fue que terminó aceptando esa salida? Ah, tal vez porque Lisa insistió durante más de dos horas, molestándolo hasta que harto de escucharla aceptó acompañarla en su salida con los hermanos Park.

¿Cómo terminó todo? Con él caminando sin rumbo por el centro comercial mientras las dos chicas estaban perdidas en alguna tienda que ellos no sabían. Nunca antes había salido con Lisa, por lo general ella tampoco insistía pero esta vez estuvo insoportable. ¿Qué fue lo que la hizo comportarse así en primer lugar? Además ¿para qué lo quería en esa salida? ¿Acaso era para que JiMin no se sintiera solo cuando lo dejaran para irse a alguna tienda de ropa?

-YoonGi, estoy cansado ¿quieres ir a tomar algo? Yo invito-JiMin le mostró una de sus relucientes y cautivadoras sonrisas, esas que hacían a su corazón derretirse y a su voluntad irse al carajo.

Pero no chilló como colegiala a la que su crush la saluda por primera vez, aunque estuvo cerca de hacerlo. En su lugar simplemente asintió antes de comenzar a seguirlo hasta una cafetería bonita donde pidieron algo simple antes de sentarse en una mesa pequeña a esperar.

El omega no lo miraba, simplemente jugaba con una servilleta de papel, parecía tímido mientras jugaba, se veía adorable, casi como un ángel. Sus dedos repiqueteaban en la mesa de madera, incómodo pero con una máscara de indiferencia que no permitía que notaran sus nervios. No quería que el mayor lo hiciera o seguro se vería ridículo ante él.

-Y ¿cómo te ha ido en la escuela?-preguntó de repente JiMin, aun sin poder mirarlo a los ojos.

-Bien, normal-contestó cortante y reprimió un chasquido al saber que había sonado mal, podía ver los nervios crecer en el omega-¿Y tú? ¿Cómo te ha ido en la universidad?-al menos podía hacer el intento de seguir la conversación para que él no pensara que no quería hablar.

-Un poco difícil, pero bien.-lo vio sonreír a medias-eh...YoonGi, yo...quisiera hacerte una pregunta.

-Adelante.-enarcó una de sus cejas, esperando que los nervios no consumieran al mayor cuando fuera a preguntar.

-A usted... ¿le molesta que yo sea su pareja destinada?

Procesando información. Esto puede demorar un tiempo.

Información proce...ah, aun no. Procesando información, por favor sea paciente.

Listo. Información procesada.

¡¿Por qué un omega tan hermoso como Park JiMin iba a preguntar una estupidez tan grande como esa?! ¡Quien debía preguntar al respecto era él! ¡Después de todo tendría que ser JiMin quien se molestara por tenerlo a él como pareja destinada, no al revés!

Por primera vez observó con sorpresa al omega, demostrando más emociones de las que había demostrado en todo ese tiempo. Vio al chico sonrojado seguir observando la servilleta y cuando les llevaron sus pedidos, decidió responder a la pregunta.

-¿No deberías molestarte tú porque yo soy tu pareja destinada?-fue en ese instante en que él lo miró.

-¿Qué?

-Lo que escuchaste ¿no tendrías que estar tú molesto? Después de todo no soy el alfa que te mereces tener como pareja destinada. Sólo mírame y mírate. Si estuviera contigo solamente te haría pasar vergüenza, eres un omega muy hermoso y yo un alfa desastroso.-fue sincero, tenía que serlo para que JiMin se arrepintiera a tiempo antes de que él terminara rendido ante el bonito omega.

🌺Acomplejados🌺

JiMin miró sorprendido a YoonGi ¿Por qué estaría molesto porque él era su pareja destinada? ¡Era ilógico! Desde que se enteró que era su pareja no había hecho más que alegrarse.

-¿Bromeas?-el alfa lo observó interrogante-es que...la verdad, desde que supe que eres mi pareja destinada yo...he estado muy feliz y ansioso de verte...me gustas mucho en realidad.-confesó, su voz casi hecha un susurro inentendible, su sonrojo llegando hasta sus orejas.

No se animó a mirarlo otra vez, simplemente se mantuvo en silencio, jugando con la galleta con chispas de chocolate que había pedido. Pasaba sus dedos por el chocolate, sus manos temblando ante el silencio prolongado. ¿Cómo tomaría eso YoonGi? Mejor dicho ¿Cómo lo tomó? Después de todo su confesión ya no tenía marcha atrás, tampoco quería que así fuera.

-Sé sincero-se mordió el labio ante la voz seria y asintió-¿estoy en una cámara oculta? Porque no encuentro otro motivo por el cual me estés diciendo esto.

-¿Por qué no?-preguntó dudoso, ladeando la cabeza confundido.

-Es que...es imposible, yo, tú...seríamos la pareja dispareja. La gente volteara a verte y se preguntará por qué estás con un alfa tan raro como yo, y estoy seguro que no quieres eso.-sonrió, a pesar de la seriedad con la que el menor hablaba, se veía sumamente adorable todo temeroso, pensando en él y en el qué dirán cuando eso era lo que menos interesaba.

Levantándose de su asiento se acercó hasta él, sus manos tomando el pálido rostro para levantarlo en su dirección. Sonreía dulcemente, acariciando con sus pulgares las mejillas y viendo esos pequeños ojos bonitos agrandarse ante su acción. Contempló con cariño cada facción, sintiendo las manos grandes, delgadas y pálidas tomar las suyas más pequeñas. Se inclinó, perdido en la mirada de su alfa, y le brindó un cálido y breve beso en los labios. Sabía que no eran los únicos en la cafetería, estaba seguro que muchos ojos curiosos los veían. No le importó.

-No me importa el qué dirán, YoonGi, no si estás a mi lado.

🌺Acomplejados🌺

HoSeok sintió su espalda chocar contra la pared y un par de labios estamparse con los suyos, un conocido alfa que lo había estado acosando de esa manera durante esas dos semanas. Como era la costumbre, intentó alejarlo los primeros treinta segundos (la primera semana se resistía por, al menos, un minuto) antes de ceder y dejarse besar por el menor. Sus manos se aferraron a los hombros ajenos e hizo el menor ruido posible, estaban en el salón vacío, en medio de un receso y aunque todos los alumnos estuvieran afuera, eso no garantizaba el hecho de que alguien no pasara por ese lugar y los viera. Bien, no estaban cometiendo ningún delito, pero no era bien visto que hicieran eso en medio del horario escolar a pesar de ser pareja destinada.

En medio de los fogosos besos, sintió las manos grandes cubrir su pequeño trasero y apretarlo con fuerza, instándolo a que saltara y rodeara la cadera con sus piernas. Bien, aceptaba los besos, pero no tenían que llegar a ese extremo. Al menos no aun ¡Mucho menos sin ser siquiera pareja!

-E-espera...-pidió alejándose con esfuerzo, pero TaeHyung pareció ignorar su pedido al dirigirse a su cuello y besarlo con ganas.-TaeHyung, es en serio.-nuevamente sintió otro apretón en su bonito y pequeño traserito junto a una succión en su cuello que, estaba por demás de seguro, dejaría marca-¡Ya basta!-terminó por gritar, usando toda su fuerza posible para alejar a Tae de los hombros.

-¿Por qué me detienes?-preguntó perdido, sus ojos aun brillantes por el placer y, por dentro, HoSeok se dijo que eso le pasaba por meterse con un adolescente que tenía todas las hormonas alborotadas.

-Estamos en pleno salón de clases y tú me quieres follar-apretó las manos del alfa para que entendiera a qué se refería-y encima me has dejado un chupetón en el cuello, ¿Cómo hago para ocultarlo? No tengo pañuelos ni bufandas.-casi golpea al menor cuando se sacó su pañuelo para envolverlo en su cuello, la marca Gucci en cada rincón de tela de la prenda-¿es en serio?

-Fue mi culpa, te ayudo.-dijo tranquilamente, HoSeok aun podía sentir las manos en su trasero.

-¿Te molestaría quitar las manos de donde las tienes?-con sus manos se aseguraba de crear la distancia necesaria para que no volviera a caer en la tentación de querer "violarlo" nuevamente.

-Sí-¿era posible que quisiera matar a su alfa destinado?-es que...es muy suave y pequeño, se acopla perfectamente con mis manos.-bien, ya era todo, dándole un fuerte empujón lo separó de él.

-Escucha, TaeHyung, si quieres que tengamos una relación o algo, al menos espera a que no esté en mi horario de trabajo ¿sí? No quiero tener problemas después con tu madre por...

-Ella está de acuerdo.

-¿Qué?-bien, eso lo había tomado desprevenido.

-Que ella está de acuerdo con que haga esto, dice que si te marco más rápido entonces no tendré competencia-aclaraba y el omega sentía que no podía ser verdad.

-¿Qué? No, imposible, esto...no...-HoSeok quiso irse del salón, pero la mano de TaeHyung lo tomó.

En sus ojos vio determinación y supo que no saldría muy bien de esto.

🌺Acomplejados🌺

Marcó el número de su madre con la otra mano, asegurándose de que su omega no se le escapara. Espero paciente a que atendiera y, en el tercer tono, así fue.

-¿Hijo? ¿Pasa algo?

-Necesito que excuses a HoSeok, que inventes que se fue antes porque estaba enfermo o yo que sé. Pero necesito que lo hagas ahora.-su voz era seria y sabía que Hye entendía sus motivos.

-Bien, entiendo. La vieja aula de música está en desuso, nadie se acerca ahí.-cuando cortó él sonrió volviendo a guardar su celular.

Tomó el bolso del omega y su propio bolso antes de salir del salón de clases, arrastrándolo por los pasillos que sabía estarían solitarios hasta llegar a la vieja aula de música donde cerró con seguro antes de arrinconar nuevamente a su pareja.

-Listo, así nadie va a molestarnos.-vio los finos labios moverse, dispuestos a quejarse, pero estampó los suyos con fuerza y necesidad.

Sus manos volvieron al redondo y pequeño trasero, apretándolo nuevamente mientras en su mente imaginaba una y mil formas de poseer a su omega.

Ah, esa sería una tarde larga, definitivamente.

🌺Acomplejados🌺

JiSoo buscó a TaeHyung. Según lo que su amigo le había dicho iría pronto con ella, pero estaba tardando y se estaba preocupando. Así que no le quedó de otra más que caminar por cada pasillo y buscar por cada aula hasta encontrar a su amigo.

Sin embargo, cuando estaba en el patio, el olor reconocido a preticor la detuvo. Volteó, Jennie, una alfa un año mayor que ella, hablaba con su grupo de amigos tan feliz y animada que sintió deseos de estar a su lado. Hacía más de cuatro años en que supo que era su pareja destinada, pero en todo ese tiempo jamás se arriesgó a acercarse para hablar con ella. La vergüenza de su cuerpo y su rostro eran tantas que no podía siquiera mirarla a los ojos.

Bajó la mirada, recordando que estaba buscando a Tae y dio media vuelta dispuesta a seguir y olvidarse de un amor que jamás tendría principio.

Kookie y TaeHyung traviesos 7u7 

Lamento la demora pero no se me ocurría nada para el capitulo :v espero la proxima actualizar rapido ya que este no es un fic largo, no creo que pase los veinte capitulos

Nos vemos! besos💋💋💋

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro