Era de noche y justamente en el centro de la ciudad, más específicamente en un museo, en la zona central permanecía una gema preciosa de color blanquecino: una Esmeralda del Caos. Habitaban cuatro guardias dando sus rutinas nocturnas cuidando aquella gema preciosa, aunque dos de ellos no estaban al pendiente del estado de la valiosa piedra.

— Oye Fernando, Tom y Vicente se quedaron dormidos, hay que hacerles una broma de venganza por lo de la otra vez, ¿no crees?

— Si, tienes razón, vamos a por las máscaras,¿no?

— ¡Si!

Salieron corriendo a la oficina de los velas de aquel desolado lugar. Mientras tanto, en aquel techo de cristal sujetado por algunas protecciones, se encontraba un erizo cubierto con un traje negro que dejaba ver solo sus ojos, también portaba una pequeña mochila negra donde ocultaba algunas herramientas bastante pesadas.

Sacando una de ellas, era una goma atada en una cadena gruesa, la amarró a una de las decoraciones exteriores y pegó la goma al vidrio. Después, sacó un pequeño láser, hizo un círculo que fue sujetado por la goma negra para evitar que cayera, removió el cristal y sacó una cuerda larga y la amarro a una decoración en forma de ave, dejándola caer por aquel hueco. Viendo que ya había llegado al fondo de aquel lugar se dejó resbalar por ella, cayendo de manera felina_ ágil _ se dirigió a aquella cabina de cristal quitando este de la manera más cuidadosa posible y colocándola por sus pies.

Sacó de su mochila una Esmeralda del Caos idéntica a la que estaba en ese suave almohada aterciopelada. De manera segura y cuidadosa intercambió ambas gemas colocando nuevamente el vidrio, escucho voces venir por uno de los pasillos e hizo que se notara como '' tocaba'' el vidrio, y gracias a ese aspecto los guardias_ los cuales traían en la mano máscaras de payaso_ se alteraron.

— ¡Ey, tú!

— Ugh — se volteó encontrándose con los guaruras, soltó el vidrio de manera descuidada (pues ya no valía la pena fingir que no hacía nada malo) haciendo que se rompiera y se cayera la gema falsa logrando hacer sonar la alarma, corrió hacia la cuerda y se trepó en ella. Escaló lo más que pudo y salió del lugar.

—toma una radio— Aquí A-12 necesito refuerzos, ¡están robando la Esmeralda y se trata de Darkblue! (Recibido)

— ¡Vuelve aquí! —miró al techo viendo que el erizo ya se había ido completamente— ¡maldición!

Sus compañeros despertaron y los cuatro salieron del museo, vieron que aquel mobian iba en una motocicleta amarilla a toda velocidad mientras atrás de él iban las patrullas.

—hablan a través de un altavoz— ¡deténgase o estará en varios problemas!

—aumentó la velocidad pasando por una carretera cruzada, en la cual estaba un tráiler esperando la luz verde del semáforo haciendo que chocara con la moto con su carga, saltó antes del impacto y siguió corriendo. Aunque... El ladrón sujetaba su abdomen — ¡M-Maldita sea! —gritó al sentir un disparo en su pierna haciéndolo caer— ¡n-no!

— uno de los policías baja de uno de los autos, le apunta con una de sus pistolas— ¡coloca la mochila en el suelo!

— Dios mío...— susurró y colocó la mochila en el suelo.

— Estás bajo arresto — le pone las esposas—, tienes derecho a guardar silencio y todo lo que digas será utilizado en tu contra — lo meten a la patrulla principal y proceden a irse.

[...]

Al día siguiente, en un lugar lejano al paradero del anterior sujeto.

En una oficina color marrón oscuro, se encontraba un erizo azebache con betas rojas y ojos color sangre mirando atento la televisión, su atención era notoria ante el noticiero de medio día.

'' Se dice que el gran asesino y ladrón Darkblue, a sido arrestado ayer a la media noche en el museo de la ciudad en un intento de robar una valiosa Esmeralda del Caos, los oficiales dicen que se le darán mas de 50 años de cárcel por sus crímenes causados... ''

—Apaga la televisión y se deja caer en el respaldo de su silla— ¡No puede ser!, ¡lo atraparon y yo no estuve allí!, ¡T-Tanto tiempo buscando para que al final lo atrapará un policía cualquiera! —jaló sus púas con frustración.

— Tranquilo, Shadow —se acercó a él—. No deberías de estresante tanto, te dará derrame en un ojo —dijo burlón un erizo azebache de betas grisáceas, el hermano menor del otro moreno—. Desmienteme, anda —le incitó.

— Odio cuando tienes razón, Meph. —suspiró irritado.

— Eh...oye—se sentó en la esquina de un escritorio—. En la última semana de tus vacaciones me informaron que otros criminales habían robado las seis esmeraldas del caos que resguardaba nuestro equipo —miró a otro lado para evitar la mirada regañona y acusante de su hermano.

— Ve las horas en las que a ti y a tu inteligencia se les ocurre avisarme, ¿Por qué no me dijeron? —se levantó de su asiento y caminó hacia el de ojos serpiente.

—Bueno...—nervioso—el jefe sabe que te pones un poco...especialito con los casos que involucren a ese tipo. ¡El me dijo que no te mencionara nada!...al menos hasta que pasara una semana más —rascó su nuca un poco y regresó su mirar al  hermano mayor.

— ¿Qué más hace falta que sepa?, ¿Que Winnie Pooh viene a la ciudad? —sarcastico habló y después suspiró— ¿Sabes entonces en qué prisión está Darkblue?

— Me informaron que está en una prisión de alta seguridad, la que vigila G.U.N en específico —baja del escritorio y lo toma por los hombros—. No pensarás en ir a verlo, ¿Cierto?

— Pero por supuesto que sí, ¡Es una joya que he buscado durante un lustro! —se aparta y busca un objeto en el cajón de su escritorio, toma unas llaves y cierra nuevamente el espacio.

— Bueno...si te ayuda en algo. Dicen que tiene vínculos con otros criminales a pesar de que siempre se le ve solo, quizás... puedas sacarle algo.

— ¿Ya entiendes por qué te quiero mucho? —dijo burlón, pero alagando la información—. Necesito preguntarle algo acerca de eso y otros crímenes si es posible.

— Pues ya qué, vamos. —dijo el oji-reptil con una sonrisa nerviosa dibujada en su rostro.

[...]

En una prisión de alta seguridad, se encontraba aquel delincuente con los clásicos trajes de color naranja y una camisa blanca por debajo. Estaba sentado en la cama de su celda, se notaba distraído y un tanto adolorido, claro ¿a quién no le duele recibir un disparo en la pierna derecha?

Se notaba su pelaje azul y sus ojos más intensos que todas las esmeraldas puras de la tierra juntas. Miraba con los vista bloqueada hacia el techo del lugar.

— "Me van a matar cuando se enteren''—pensó, después escuchó otras voces y miró hacia la puerta de hierro.

— ¡Ey, escoria! —hace ruido con un tubo de fierro pasándolo por las rejas de la celda, aunque su voz sonaba temerosa.

— Agh —se tapa los oídos— ¿Qué demonios quieres? —se para— ¡agh! — se contrae y se sienta nuevamente por el dolor.

— T-Tienes visitas...—abrió la puerta dejando pasar al oji-carmín (su hermano se quedó afuera en el auto por seguridad) después de eso la volvió a cerrar.

— ¿Hm? —extrañado miro al presente— ¿Qué quieres tú?

—Se pone al frente de él— Mi nombre es Shadow the Hedgehog Dark, agente de primer rango de G.U.N, mucho gusto —le extiende su mano un poco emocionado, pues al fin veía la cara que tanto quería revelar—

—Desconfiado corresponde al saludo— ¿Hola?

— Bien, tengo en claro que tú eres Darkblue, ¿no es así?

— Pues... supongo, ¿no?, por algo estoy aquí —le mira de forma lógica y habló con tono obvio.

— También tengo entendido que ibas a robar una Esmeralda en el museo anoche.

— Ajam...—desinteresado.

— Quiero saber por qué la robaste y para qué la querías, pues como sabrás una esmeralda del caos es más valiosa que ningún otro objeto en la tierra —le miró fijamente.

— Ah...pues sigue queriendo  —se cruza de brazos cerrando sus ojos.

—se le saltó una venita en su frente y le miró más molesto— Soy un superior, por lo tanto debes llamarme de "usted".—sacó su celular más irritado, pues le llegó una notificación de su superior. Al verla suspiró.

— Bien, "Superior Idiota Agente Shadow'', ¿me dirá algo más a parte de todo lo que ya sé que hice? — dijo apoyándose en la ''cama'' (que no era más que una barra de concreto y una almohada rellena de trapos).

— Hay un cambio de planes, vendrás conmigo al cuartel general de G.U.N, el comandante quiere verte —guardó su teléfono en su bolsillo delantero y se cruzó de brazos.

— Ah, ya veo~ —dijo coqueto— ¿Entonces "usted" —hizo comillas con sus dedos— si me puede hablar de''tú''?, Que descaro el suyo, ¿no? —dijo—...¿Qué propuesta? —le miró, el azebache de igual manera, solo que el oji-carmín se quedó embobado con sus ojos un pequeño lapso.

— ¿Se te perdió algo? —el moreno no responde— deja de mirarme...me incómoda...¡Basta! —el azabeche al fin sale de su trance y se soba sus oídos un poco adolorido—

— Te enojas muy fácil —suspira.

— ¿Y bien?

— Llama al señor que abrió la celda —pidió el azebache al oji-esmeralda—

— Hazlo tú, flojo —se mira las uñas con desinterés.

— Agh, ¡Guardia! —le llamó.

— ¿Pasa algo,señor? —dijo llegando aquel hombre.

— Si pasa algo, no me deja de molestar —dió media sonrisa para cruzar sus piernas_ la dañada arriba_ y aun recargado con sus brazos—  jeje que idiotas se ven  —cerró sus ojos de manera que se veía adorable mientras reía, después se levantó cuidadoso de la cama.

—lo mira irritado— Oficial tengo el permiso de llevarme a este criminal, así que lo regresaré más tarde —le mostró un PDF que su jefe le había mandado, el guardia lo leyó y asintió.

—Si, señor —abre la reja y ambos salen.

— Mgh... —se quejó el cobalto levemente cuando comenzó a caminar.

— ¿Sucede algo? —cuestionó ya estando a medio pasillo hacia la salida, lo miró de reojo.

—...Déjeme pensar, Ah, ¡ya se!, tengo hambre y recibí un disparo que duele de puta madre — respondió con sarcasmo, mirándole irónico.

— Lo siento, ¿si?, Intento ser amable contigo —regresó su vista hacia en frente con el ceño fruncido.

— Olvidelo... ¿Para qué me quiere ver su jefe?

— Es sorpresa — dijo enojado y serio, llegaron a una puerta de salida y paso una tarjeta de acceso que sacó del bolsillo de su saco.

— ¡¿Es un perrito?! ( todas las personas aquí tienen acceso ¿eh?) —pensó.

— No, ¿sabes?, Deberías callarte empiezas a molestar —inquirió molesto abriendo la puerta de su auto de color negro, pues ya estaban en el estacionamiento—

— Ah vale, no se puede liar con el gobierno—entra, se sienta y se queda callado mirando a otro azebache parecido al anterior en el asiento de copiloto— Oye, te duplicaste.

Ese sería un viaje muy largo ~

Edición final c:❤️