Prólogo

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Kim Seokjin y Kim Taehyung se habían casado a sus dieciocho y veinte años de edad.

Muy jóvenes, ambos soñadores, pero muy enamorados el uno del otro. Luego de ocho años de matrimonio y pasando por diferentes problemas, habían decidido divorciarse.

Todo había acabado de muy mala manera, terminando como dos desconocidos y jamás admitiendo que habían sido lo mejor del otro, pero así también lo peor.

Cinco años después, básicamente ambos en sus treinta y pico de años, el destino los vuelve a juntar por medio de sus dos mejores amigos, Jimin y Jungkook, quienes después de una relación de seis años habían decidido finalmente pasar al siguiente nivel y casarse.

En esos seis años de noviazgo, los divorciados se la habían ingeniado muy bien para no volver a cruzarse nuevamente.

Pero todo eso se iría por la borda al enterarse que deberán pasar dos semanas en un misma casa, una inmensa que, la familia de Jimin poseía.

Todo porque los novios extravagantes habían llevado a los familiares y amigos más cercanos a la pareja al lago Jinyang, dónde finalizarían las dos semanas con su enlace matrimonial.

Y obviamente no podían faltar sus padrinos.

—Jimin, dime que es una broma

—No lo es, Tae Tae —el rubio le brindaba su más dulce sonrisa.

—Lo imaginaba, maldita sea. Maldigo el día que se conocieron

—¡Oye! —el rubio lo golpeaba con sus pequeñas manos.

—Lo haré por tí

—Lo sé y estaré eternamente agradecido

—Podrias haber avisado y me traía un novio

—Pero si estás soltero

—Solo para hacerme el interesante y no tener que soportar a ese imbécil

—Taehyung —reprendia el rubio al azabache.

—Me van a deber un favor bien grande, tu y el conejo que tienes por novio.

— ¡Jk, tendrías que habermelo dicho!

—Aish, Hyung. Podrías haberlo imaginado

—Baek vendrá conmigo ¿qué se supone que le diré ahora?

—No es necesario, él lo sabía antes que tú —el pelinegro sonreía de oreja a oreja con algo de temor.

—Maldita sea, Jungkook

—Hazlo por mi

—Por supuesto, imbécil. ¡Pero podrías habermelo dicho antes de estar a mitad de camino!

—Hubieras dicho que no —ambos se miraban con algo de tensión mientras esperaban que el novio de Seokjin volviera al auto con algo de tomar y comer para el camino.

— ¿Jiminie hizo lo mismo? me refiero ¿se lo dijo a mitad de camino? —el pelinegro asentía—. Son unos bastardos.

Nadie, absolutamente nadie... Yo, vengo con nueva historia Taejin de amor y odio, porque me encantan y siempre quise escribir una, pero aún no será lanzada aún. La tengo como consuelo para cuando finalice BURNING DESIRE, porque siento que todas vamos a quedar en la nada sin esa historia. Y pues quiero brindarles consuelo con esta nueva goyita.

Les llamo la atención o no?

Con amor Niñita Nany 💜

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro