🐺ଳ

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Yoongi le extendió la mano a Jimin para ayudarlo a subir por el empinado sendero. Él se la aceptó impulsándose para así seguirle el paso.

Hacía el oeste del clan de los dragones de escamas negras se encontraba una zona repleta de puro bosque, donde solo crecían árboles de olivo y arbustos de abelia. Ninguna otra planta de tierra más que esas dos nacían ahí. Una pequeña cascada tenía su presencia en lo más profundo del lugar, con plantas acuáticas que se amontonaban en las orillas. Sin animales que le habitarán, y eso se podía notar en el perceptible silencio que flotaba en el ambiente, siendo solo las copas de los árboles agitándose con el viento el sonido que acompañaba las pisadas de ambos.

Ladeó el rostro mirando por el rabillo del ojo hacia atrás. Nunca había traído a Jimin antes. Este lugar era muy simbólico para él, le generaba un cumulo de sensaciones que no estaba acostumbrado a sentir. La melancolía, la nostalgia, la perdida y la culpabilidad eran cosas con las que no estaba familiarizado y que además lo ponían incómodo, no le agradaban. Tal vez por eso se demoró tanto en traer a su compañero. Bueno, por ello y por esa sensación de vergüenza de no haber venido hasta ahora.

Y es que hoy al despertar lo primero que se encontró fue con una de las imágenes más hermosas que alguna vez pudo ver. A su preciosa pareja de costado mirando hacia él, con las largas y albinas pestañas cayendo sobre sus cientos de pequitas, los labios durazno y abultados en una especie de puchero que le hacía lucir como un bebé. Las hebras blancas como las nubes revoloteando de forma desordenada sobre la frente y mejillas del menor, cayendo sobre la almohada con gracia pese a lo desalineadas que estaban.
La imagen le hizo pensar que si Yeo hubiese conocido a Jimin probablemente lo habría pintado cientos de veces. Él no era pintor, y sus manos no tenían esa delicadeza ni don, pero si la tuviera no dejaría de crear pinturas de aquella hermosa musa alojada a su lado buscando su calor.

Viendo aquella tranquilidad con que dormitaba, el subir y bajar de su pecho tan pausado, la respiración apenas perceptible y su aroma que desprendía tanta paz y ensueño fue que decidió que era momento de llevarlo a ese lugar. Más ahora que el Brat'shi sería mañana, el mismo día que tendría que dejar Daegu. Yoongi le dijo a Jimin que vendría a verlo cada seis meses, pero esa era solo una estimación. Tanto podría estar de vuelta en un mes como dentro de un año. Todo iba a depender de lo que tendría que hacer en Alemania, por eso no podía prolongar más esto.

Así fue, que después de que el menor se despertara y tomarán el desayuno, Yoongi le pidió que procediera a cambiarse pues irían a un lugar antes de que tuviesen que separarse para que los chicos ayudarán al omega a prepararse.

Durante todo el trayecto Jimin permaneció en silencio, caminando por momentos junto a él y por otros unos pasos detrás, cuando el terreno se lo impedía. Sin hacer un solo cuestionamiento de a dónde iban. Infinitamente lo agradeció, necesitaba acomodar sus ideas y mentalizarse para ese conjunto de sensaciones que iban a volver a él.

Ellos anduvieron por un par de minutos moviéndose entre los gruesos troncos de los árboles y los desniveles de la tierra hasta que se empezó a escuchar el ruido de la cascada avisándole que ya faltaba poco para llegar a su destino.

Jimin se posicionó a su lado, aprovechando que el terreno ya no era tan incómodo ni empinado, la tela de sus vestimentas se rozó por unos segundos, pero ninguno dijo algo al respecto.

Yoongi vació sus pulmones y su pecho se hundió sintiendo un peso que antes no estaba hasta que tras un par de pasos más se detuvieron frente a dos enormes árboles de olivo. A diferencia de los otros, estos estaban prácticamente pegados, sus troncos ramificados unidos como si fuesen uno, y sus raíces debajo de la tierra probablemente entrelazadas entre sí. Además, del lado contrario había un pequeño arbusto de abelias, cada árbol tenía uno, finalmente, al frente de estos se alojaban cientos de jazmines aun hechos capullos.

Pasó saliva sintiendo como su garganta dolía, ese trago parecía llevar acido, pues hizo arder su estómago de una forma en lo absoluto grata, ahí estaba esa jodida sensación que odiaba. Le ponía de malas y lo irritaba, ya lo estaba haciendo. Sus dientes se apretaron -rechinaron- los unos con los otros mientras inhalaba profundo, tratando de calmarse. No estaba funcionando.

Entonces sintió una calidez que bloqueó instantáneamente su malestar, Jimin le estaba tomando la mano. Ladeó el rostro buscando su mirada, preciosos ojos grises con oliva lo recibieron. La forma en como lo miraba, tan llena de cariño, anhelo y amor, como si a través de ella Jimin le estuviese diciendo lo importante y valioso que era en su vida. Estaba seguro de que nunca lo había expresado verbalmente, pero le encantaba, porque era justo lo que él también sentía por el omega.

Jimin apretó su mano con ternura, trasmitiéndole calma.

-¿Está bien, Hyung?-

Esa dulce voz acarició su oído interno y se adentró como un bálsamo. Inhaló profundo, sosteniendo con fuerza el agarre entre sus manos. El malestar poco a poco iba disminuyendo.

-Lo estoy. Debes preguntarte ¿Qué hacemos aquí? ¿Cierto?- cambió el tema.

-Sí- Jimin cortó sus miradas observando rápidamente todo el lugar -No recuerdo que hayamos venido aquí alguna vez, y tampoco recuerdo que alguien haya mencionado que existía un bosque repleto de árboles de olivo cerca del clan-

-No lo hicimos- tiró de su mano haciendo que dieran dos pasos más cerca de los grandes árboles -Debajo de cada árbol se encuentran mis hermanos... O lo que había quedado de ellos-

Eso pareció captar toda la atención del menor, quien dejó su sonrisa por un gesto más neutro. Yoongi continuó.

-A Joohyun le gustaban los olivos, a Beomgyu las abelias y a ambos los jazmines blancos- el alfa miró hacia los dos árboles -Cuando un hijo muere siendo un infante, los dragones tienen la costumbre de enterrar sus cuerpos bajó una planta, pues se cree que un pequeño fragmento del alma inocente de estos se trasmite y crece junto a ella. Como una segunda vida. Este bosque pertenece a mi clan, Chaerin y Jihoon decidieron sepultar los cuerpos aquí. Ella prohibió que alguien se acercarse, es por ello por lo que no vas a ver a ninguno de nuestros miembros por aquí... O, a algún animal-

Jimin asintió, con los ojos fijó en los dos árboles. Luego vio hacia el alfa encontrándose con una expresión entre melancólica y nostálgica, algo que estaba seguro nunca antes le había visto expresar.

-Joohyun... Beomgyu, disculpen no haberlos venido a visitar hasta ahora- su voz pareció titubear.

Pese a que era un infante de no más de cinco años cuando aquello sucedió, siempre se ha sentido culpable y lleno de impotencia. Las imágenes de ese día se repiten frescas y muy reales en sus sueños cada cierto tiempo. Los primeros años aparecían cada noche, ahora, llegan debes en cuando como un tormentoso recordatorio. Uno de que pudo haber hecho algo más que esconderse mientras veía a sus hermanos ser desmembrados por los vampiros, o eso cree.

-¿Quiere llorar? Está bien que lo haga Hyung-

-No puedo- tomó una calada profunda de aire -Nunca he podido llorar-

O al menos desde que tiene uso de razón sabe que es así. Nada lo ha hecho llorar. Cuando sucedió lo de sus hermanos él solamente estaba lleno de irá pese a ser muy pequeño, cuando sus padres se separaron solo sintió un pequeño vacío al no tener el calor constante de Jihoon cerca y ante la indiferencia de Chaerin sobre su persona. Cuando entrenó duramente sometiéndose a dolorosos ejercicios que mallugaban su cuerpo juvenil hasta provocarle moretones, raspones e incluso huesos rotos. Cuando fue golpeado por Chaerin al entrenar. Cuando tuvieron que romperle las piernas para que dejarse de sentir tanto enojo y no se trasformara. Nada absolutamente nada de eso le sacó una lágrima.

Suspiró alejando ese pensamiento. Yoongi soltó sus manos. Hincándose con las dos rodillas en el suelo, juntó sus manos una palma sobre el dorso contrario e igualmente las posicionó sobre la tierra mientras se inclinaba rozando su frente contra el suelo.

-Disculpen mi descaro y desvergüenza por venir ahora y no haberlo hecho durante todo este tiempo- volvió a hablar reincorporándose del torso, pero permaneciendo de rodillas -Él es Jimin, es mi compañero... Es un dragón albino, y es justo como Jihoon los redactaba en sus cuentos. Adora la naturaleza, no le gusta la violencia y es un curioso de la vida. Lo habrían amado... Tanto como yo lo hago-

El enlace le permitió saber lo sorprendido, dichoso y agradecido que el omega se sentía ante esas palabras. Podía escuchar los latidos desbocados del corazón ajeno viajando por el aire hasta sus tímpanos cuando dijo lo último y sus feromonas siendo liberadas sin control, evidenciando la creciente alegría.

-Creí que ya era momento de que lo conocieran y él a ustedes- esta vez, los ojos verdes buscaron a Jimin. El omega le observó con las mejillas semi sonrojadas y las pecas sobre exaltadas -Sé que tuve que decirte antes, pero la última vez que pisé este lugar debí estar entre los diez u once años... No me sentía con la libertad de venir ¿Con qué cara?- volvió a mirar los árboles -¿Con qué desfachatez podría parame aquí? Después de todos estos años sin hacerlo. Te habría traído desde el primer día si no fuese por mi...

-Está bien. Necesitabas tiempo para estar listo, yo lo respeto- dijo el albino en tono de voz Comprensivo y afable.

Jimin se arrodilló a su lado, haciendo también una reverencia.

-Joohyun Noona ... Beomgyu Hyung- su voz, su mirada, toda su atención iba dirigida a los enormes árboles frente a ellos -Gracias por proteger a Yoongi- los ojos pino se clavaron en el hermoso perfil del menor.

Jimin entrelazó sus propias manos colocándolas sobre su regazo y sonrió.

-Él es increíble. Me rescató de una vida no grata, y todo este tiempo me ha cuidado y enseñado. Ahora está permitiendo que yo aprenda a cuidar de mi- cerró sus ojos llevando sus manos enlazadas a su frente como si estuviese implorando -Gracias por protegerlo, por permitirle vivir. Él me dio mi libertad. Yo también lo amo, y les prometo que siempre voy a cuidar de él-

Volvió a abrir los ojos, encontrándose con un semblante estupefacto de parte del mayor.

-Jimin- susurró enternecido.

-Hyung. Tus hermanos te amaban, tú mismo lo dijiste, o somos los tres o no salimos. Recuérdelos de esa manera que ellos deben estar orgullosos y felices de ver el ser increíble en que se ha vuelto-

Yoongi sonrió de lado conmovido.

-Me faltó agregar que también eres muy inteligente y bueno con las palabras-

El omega le regresó la sonrisa.

-Y que tengo dos hermanos de clan, ambos alfas y compañeros con los que haré un juramento de hermandad mañana-

-Creo que los habrías vuelto un tumulto de gritos eufóricos si estuviesen aquí, con esa noticia-

-Usted también lo habría hecho si les dijeras que puedes absorber los rayos de las tormentas-

Ambos se observaron. Si el tiempo fue largo o corto no se dieron cuenta, solo estaban enfocados en admirarse el uno al otro, en disfrutar de un momento que ambos eran conscientes no podrían repetir prontamente.

-Jimin- dijo el mayor -Gracias por confiar en mi todo este tiempo-

-Gracias a ti por también hacerlo- por no dejarme caer.

Nunca lo haría cachorro.

Jimin abrió los ojos con un rubor en sus mejillas, haciéndole saber a Yoongi que no tenía intención de que se enterase de eso último.

Recuerda que, si direccionas el pensamiento a mí, va a llegar.

Aún estoy aprendiendo a cómo utilizarlo, se excusó el omega. Movió sus pequeñas manos de forma ansiosa por sus propios muslos atrayendo la atención contraria.

-¿Qué sucede?-

-Quisiera un abrazo ¿Puedo?-

Yoongi sonrió de lado. Extendió sus brazos dejando libre su torso, él omega le miró lleno de ilusión. Buscó la mirada del mayor encontrándose con un asentimiento en forma de parpadeo en ellos, entonces se empujó desde las piernas hacia el pecho del mayor con tanta fuerza que terminaron cayendo sobre el pasto con un pequeño quejido de parte de ambos.

Jimin le rodeó el cuello con las manos y recargó la mejilla derecha sobre el pecho del alfa sintiéndolo subir y bajar en compañía de los latidos del corazón. El brazo derecho de Yoongi tomó por los hombros el pequeño cuerpo y la otra mano le acarició los cabellos. Las feromonas de ambos se liberaron, mezclándose entre ellas, sus vientres ardieron. Jimin casi deja escapar un ronroneo de satisfacción, de no ser porque sus ojos capturaron algo.

-Hyung...

-¿Umh?-

-Miré- señaló hacia los árboles.

Yoongi giró el cuello, los capullos de jazmín alojados a los pies de los árboles empezaban a retoñar. Se abrían lentamente despertando al día y recibiendo los pocos rayos de sol que se filtraban entre el ramaje de los olivos.

-Yo no lo he provocado- aclaró el omega.

-¿No?-

-No. Tal vez... Son Noona y Hyung-

-Puede ser- respondió simple.

Yoongi apretó más el cuerpo del menor, dispuesto a quedarse un poco más en aquella posición, Jimin pareció estar de acuerdo con la idea pues se deshizo contra su cuerpo recibiendo los mimos. Volvió a mirar a aquellos dos frondosos y fuertes árboles.

Joohyun, Beomgyu... Gracias.

****

-El fénix siempre ha sido el enemigo natural de los dragones. En una época dónde todas las criaturas que habitaban la tierra eran de descomunales tamaños no fue extraño que las dos criaturas más semejantes entre ellas se volvieran enemigos. Peleaban por los pocos dominios que les eran cedidos-

El Gran Sabio se acomodó mejor sobre su asiento y procedió a acariciar al bonito conejo de pelaje blanco que descansaba en las piernas de su ropaje. Cortesía de Yeojin, quién le pido hace tres días se lo llevara al hombre, ya que era el único al que aceptaba en su hogar.

Jimin venía a visitarlo cada que podía, pasaba un rato escuchando sus relatos y obteniendo respuestas sobre cosas del pasado que solo él podía darle. El Gran Sabio era un alfa cercano a los dos mil novecientos años, y desde lo acontecido con su clan se había aislado de todos como una forma de auto castigo. Nadie lo visitaba al menos que él diera autorización o mandase a llamar por alguien, como lo hizo con él cuando recién salió de la membrana. Le contó que en todos estos años su compañero o compañera no ha aparecido, y que nunca ha tenido una visión sobre ello, por lo cual está seguro jamás le conocerá... Al menos no en esta vida.

A Jimin la idea de vivir tanto tiempo recluido, alejado incluso de tu mismo clan, de los tuyos, le resultaba algo tormentoso y tortuoso. Nadie debería estar solo, menos alguien que por los relatos tan positivos que Yeojin y los habitantes del clan Voda -que era al que el Gran Sabio pertenecía- le contaban lo evidenciaban como un buen ser. Por ello le había solicitado permiso para visitarlo y hacerle compañía.

Aunque al inicio el alfa argumentó que no era necesario que ocupase su tiempo en él, con los días lo fue aceptando. Jimin incluso podía asegurar que el hombre contaba las horas para su llegada, pues siempre lo recibía en la entrada de la sequoia con esa amable y gentil sonrisa longeva.

-¿Quién ganaba?-

-En una disputa entre un dragón y un fénix el resultado era impredecible. Esas peleas podían durar días, semanas incluso. La resistencia, la velocidad y la fuerza eran importantes, pero sobre todo la primera. Quien lograba ser más inteligente en medir su energía y diseñar una buena estrategia era comúnmente el vencedor-

-¿Qué sucedía con el que perdía?-

-La muerte lo reclamaba- el Gran Sabio lo miró con aquellos ojos blancos carentes de visión, pero que aun así parecían ver en lo más profundo de su ser -Eran peleas a muerte, uno vivía, el otro perecía-

Jimin asintió volviendo su atención a lo que tenía en las manos. Se trataba de un libro grande, una enciclopedia antigua, con una pasta gruesa que alguna vez debió ser verde y ahora estaba parchada con trozos de tela negra mal cortados. Su interior albergaba un compendio de dibujos hechos a lápiz de criaturas que se presumen existieron antes que ellos. Shifters de la primera etapa de vida de la Tierra. Aunque, todos esos trazos venían de sueños o visiones que los anteriores Sabios habían tenido alguna vez, por lo cual, la mayoría de las criaturas plasmadas en el papel no podían confirmarse como algo que verdaderamente haya existido.

Aun así, entre todas las páginas venía un retrato de un fénix, o lo que se pensaba se asemejaba a lo que eran. Tal y como Jihoon lo explicó aquella vez, era una criatura con forma de ave, con una larga cola -casi del mismo tamaño que el cuerpo- llena de plumas que podía dividirse en tres. En el dibujo plasmado se apreciaba que los fénix contaban con dos pares de alas, las principales y unas más pequeñas alojadas debajo, igualmente emplumadas como sucedía con la cola y el cuerpo. Poseían un pico largo y sus pies eran como los de un pájaro, salvo por las garras más largas y afiladas que le acompañaban. No había color, por lo cual no podía conocer el color del plumaje.

-Nebesnny-

-¿Si?- dejó de observar el dibujo.

-¿Sucede algo?-

-Yo. Me preguntaba ¿Hay forma de matar a un dragón en la actualidad?-

-Las hay-

¿Las? Pensó para sí.

-¿Cuáles son?-

-Los conocimientos del pasado nos describen como una especie guerra, llevamos una criatura magnífica en nuestro interior y nuestros cuerpos están dotados de habilidades más desarrolladas que las de los humanos e incluso que de los otros shifters, pero somos igual de vulnerables que ellos si no entrenamos-

Tanteando el Gran Sabio colocó al conejo en el suelo, este permaneció unos segundos donde había sido depositado antes de comenzar a saltar lejos de ellos hacia ningún lugar inespecífico.

-En nuestra forma humana siempre hay un porcentaje de ganar o perder, depende de nuestra habilidad de combate y defensa. En nuestra forma dragón, solo hay tres formas: En un combate con otro dragón, por ataques militares y mediante el Rasksovbel'-

-¿Qué es un ataque militar?-

-Es el ataque hacia alguien o algo enemigo mediante el uso de armas. Los humanos las crearon y los shifters han empezado a utilizarlas en los últimos siglos-

-¿Se refiere a las pistolas?- la imagen de los vampiros utilizándolas se proyectó en su cabeza. Aun le causaba escalofríos recordar las voces y los rostros.

-También, pero en este caso, me refiero a armas de mayor tamaño, que están diseñadas para causar catástrofes y generar victimas a gran escala-

-Entonces esas armas a gran escala pueden ser mortales para los dragones-

-Las armas son muy jóvenes en comparación con nuestra especie. Nunca se ha presenciado un ataque hacia uno de los nuestros mediante el uso de ellas, pero conociendo la magnitud del daño que causan no lo descartaría-

Jimin comprende lo que el alfa esta diciendo más no logra obtener una imagen mental que le pueda ayudar a clarificarlo. No recuerda haberlo visto o leído antes en alguno de los libros que Jihoon le presta o en las películas que ha visto. Se promete preguntar más a fondo a Yoongi.

-El Rasksovbel'-

-Es un hechizo que solo puede conjurar un hechicero. Pero son poco comunes-

-¿Por qué?-

-Primeramente, porque el hechicero necesita un par de objetos difíciles de encontrar, y segundo, porque ese hechizo requiere de una cantidad exorbitante de poder. Llevar a cabo uno solo drena por completo al hechicero, pasarían siglos antes de que pudiese recuperar su poder otra vez. Si el dragón es muy fuerte el hechizo incluso sería capaz de cortar los hilos internos que unen al hechicero a la magia y deslindarlo de ella para siempre-

-Entonces ¿Es poco probable que pueda suceder?-

-Exacto. Sin embargo, ya han acontecido un par de casos aislados en siglos anteriores-

Jimin asintió para sí.

-El combate entre un dragón con otro ¿Va por la misma línea que el de un dragón contra un fénix?-

-Es correcto-

Jimin volvió a observar el retrato del fénix. Era un dibujo muy antiguo, el contorno de la criatura estaba borroso en algunas partes, y el papel amarillento. Aun así, seguía siendo absorbente e impresionante verlo.

-¿Los fénix también poseían la afinidad con los elementos?-

-Sí. No se sabe si estuvieron divididos por clanes como nosotros, pero eran afines a los cuatro elementos primarios-

-¿Se sabe en qué parte de la Tierra habitaron?-

-Entre las zonas que hoy llaman Japón, China y Taiwán. Se sabe que también estuvieron aquí-

-Sabe si es posible que ellos ¿Puedan dormir durante mucho tiempo y simplemente despertar?-

-No podría responder eso. Los dragones podemos entrar en hibernación por siglos, pero el fénix pese a ser semejante en nuestro tamaño poseía una anatomía diferente. Es complicado conocer esos detalles-

-Comprendo ¿Ha tenido alguna visión sobre ellos?-

-¿Por qué tienes tanta curiosidad?- interrogó con sutileza.

-Yo... Solo es eso, curiosidad-

-Ambos sabemos que no es así joven-

El hombre se levantó de su asiento.

-Aunque tu aura siempre permanece tranquila, puedo sentirte un tanto inquieto y ha aumentando conforme has realizado estas preguntas ¿Te ocupa algo?-

Jimin suspiró sabiendo que no podría ocultarle su pensar a uno de los pocos seres bendecidos por la Madre Tierra. Cerró el libro colocándolo a su lado sobre el mueble.

-Yo, no he podido alejar mi pensamiento de aquella vez que habló conmigo y me dijo acerca de La flat'yat-

-Nebessny, te ofrezco una disculpa- se apresuró el alfa a decir.

Jimin frunció el ceño, completamente confundido.

-¿Por qué?-

-Al contarte acerca de La flat'yat no pretendía causarte una preocupación continua, consideré que era necesario decírtelo para que no te tomase por sorpresa-

-Gran Sabio, no tiene por qué disculparse. Yo agradezco que me lo haya dicho- se apresuró él a decir -No es culpa suya, son solo estos sueños tan dispersos que no han dejado de aparecer en mis noches de forma constante lo que me mantiene tan alerta-

-¿Sueños?-

-Usted debe saber que los omegas de mi clan pueden ver escenas del futuro- el alfa afirmó con la cabeza -Yo he tenido un par de ellos desde que hablé con usted por primera vez-

-¿A qué conclusión te han llevado?-

-Usted me dijo que La flat'yat iba a volver, y yo creo que lo hará en forma de fénix-

-¿Es lo que te han mostrado tus sueños? Al Fenix-

-Mis sueños no me han dejado ver la forma de la criatura, pero tengo un sueño de una persona encapuchada sosteniendo una daga frente a Hyung. Y otro de un nido de fuego y hielo que ha aparecido en las últimas tres noches, no puede ser una coincidencia-

El hombre comenzó a caminar hacia él, estuvo tentado a ayudarle cuando vio aquellas desgastadas y envejecidas piernas moverse lentamente, pero retiró ese pensamiento de su cabeza recordado que aun con toda la edad encima que el alfa tenía se seguía considerando alguien independiente que podía valerse por sí mismo. Ya alguna vez que intentó ayudarle se lo dejó en claro.

-¿No crees que podría ser una especulación?-

-Pensé lo mismo las primeras tres noches. Que solo era mi mente reteniendo esa preocupación. Pero van más de dos semanas que sigo soñando lo mismo, y se siente demasiado real para ser un engaño creado por mi mente-

El hombre sonrió sutil y amable, las patitas de gallo en las esquinas de sus ojos se pronunciaron al igual que las arrugas horizontales en su frente.

-Estoy sorprendido- comentó -Pese a tu juventud y poca experiencia, eres consciente de los dones que vienen contigo y estas asimilando cómo funcionan muy rápido-

-Entonces ¿Estoy en lo correcto?-

-No sabría decirte-

-No puede decirme eso- comentó en un tono de voz tenue -Usted me dijo sobre La flat'yat, es porque debió verlo ¿No es así?-

-Vi un fragmento, pero no aparecía un fénix en él. El destino es tan caprichoso que me muestra lo que quiere, y cuando lo quiere-

El Gran Sabio continuó su camino hacia él con un perfecto equilibro y dirección de donde se encontraba. Poseía un oído sumamente agudo que era capaz de escuchar desde pequeñas gotas de agua caer, hasta los insectos que se paseaban por todo el lugar. A Jimin le impresionaba esa capacidad auditiva, suponía que era producto de un entrenamiento personal realizando durante todos los años de vida, pues el hombre había nacido ciego.

-Nebesnny mañana es tu Brat'shi, despeja tu mente y aleja esos pensamientos-

-Pero La flat'yat...

-La flat'yat no llegará ni hoy ni mañana eso puedo asegurártelo. Si piensas siempre en el futuro, perderás muchas cosas de tu presente que no volverán a ocurrir-

Sintió las rasposas yemas de los dedos acariciarle la mejilla.

-El Brat'shi, es una de las ceremonias más hermosas que hay entre los dragones, propia de ustedes los Nebesnny. Han pasado siglos desde que se realizó la última-

Jihoon le había dicho algo parecido hace un par de días.

-Teyra sin duda estará encantada de que visiten su estanque, ha estado sola llorando por su regreso todos estos años-

-¿Cómo lo sabe?-

-Ella me lo dijo-

-¿Usted puede hablar con los dioses?-

-A veces escuchó sus susurros en mis sueños, pero no es frecuente y muy pocas veces en mi vida ha sucedido. Ocho en estos dos milenios que llevo de vida-

El gran sabio ladeó su rostro, su largo cuello con pequeñas arrugas y una piel desgastada sobresaliendo de entre sus ropajes azulados. Retiró su mano dejando de tocarle.

-He mentido, son nueve. Hace un par de días la diosa Talen apareció-

-¿Talen?-

-Es la diosa de la bendición, hermana gemela de Teyra... Es gracias a ella que el Tem' yarost' y tú poseen esas runas en las nucas-

-¿Cómo sabe eso?- debido al largo del cabello de ambos era complicado que alguien pudiese verlas, y solo se lo habían contado a Jihoon.

-Te lo dije, el destino me muestra lo que quiere. Sé que ella bendijo su enlace y la muestra está en sus pieles-

-Las runas hacen algo ¿Verdad?- dijo recordando como hace unos días Yoongi había cambiado a una versión lobo. Una magnifica y atractiva en su opinión.

-Lo que la bendición de Talen hace es estrechar aún más el enlace de los compañeros. A esa alma que esta tejida por dos la envuelve con ciertos hilos de energía, mismos que se funden hasta volverse parte de su enlace y de ustedes. Las runas son solo una evidencia física como la marca en tu cuello, de que se ha realizado esa vinculación. Por supuesto, al tejer los hilos de tu esencia y la del Tem' yarost' con esa energía es normal que sucedan cosas o haya cambios-

-Hyung pudo convertirse en un lobo, un enorme lobo de pelaje oscuro y ojos ámbar ¿Fue a causa de ellas?-

-Así es-

-Sabe usted ¿Qué más pueden hacer?-

-Los registros que tengo de los Sabios anteriores a mí redactan que solo han existido dos parejas de dragones que han recibido las runas antes de ustedes, y las de ellos eran diferentes-

-Diferentes- susurra para sí mismo, o era esa fue intención pues el fino oído del Gran Sabio logró escucharlo con claridad.

-La runa en ti simboliza la oscuridad y la de él la luz, porque son la contra parte del otro, son los primeros en recibir esas runas. También debes de saber que en gran parte los obsequios que traen las runas están muy determinados por sus poseedores-

-¿Cómo?-

-Voy a explicarlo así. Tú tienes una segunda forma shifter, la de un lobo, la runa en ti probablemente percibió que sería útil que tu compañero también pudiese hacerlo, así que activó ese vínculo otorgándole la habilidad a él de poderse volver en una segunda forma-

-Entonces si él tiene cierta cuestión que yo no y las runas lo creen necesario puede otorgármela-

-Podríamos decir que sí. Mientras que el enlace vincula las almas de los destinados en una sola, las runas vinculan la magia, habilidades y dones que cada uno de los individuos posee a manera de que ambas partes puedan aprovecharlas al máximo. Aunque, debe haber ciertos límites-

¿Limites?

-Te daré el libro que tengo sobre las dos parejas y sus runas- su voz sonó más fuerte y decidida -No te dirá lo que las runas de ustedes hacen, pero puede darte una idea-

-Gracias Gran Sabio ¿Puedo hacerle otra pregunta?-

-Adelante-

-¿Por qué tan pocas parejas han recibido las runas?-

-Se dice que Talen solo bendice enlaces que están destinados a afrontar un destino radical-

Antes de que Jimin pudiese decir algo el gran sabio lo tomó de las manos

-Nebesnny, el Tem' yarost y tú están destinados a algo grande. La flat'yat es solo una parte de la historia y como te he dicho, no está cerca de llegar. No temas a ella ni te acongojes ante su nombramiento-

-Gran Sabio sé que no debería temer, pero no puedo no hacerlo- decidió sincerarse -Mi vida fue terrible antes de que mi alfa apareciera, si no me hubiese sacado de Busan posiblemente habría muerto hace mucho-

Y no era exageración. Las personas en Busan cada vez lo agredían más, las ultimas veces que había tenido que bajar al pueblo para comprar víveres escuchaba murmullos inquietantes, gran parte del pueblo estaba creyéndose con mayor firmeza que él era un demonio debido a su albinismo y en sus cuchicheos profesaban amenazas contra él. A su vez Taecyeon bebía con mucha frecuencia de lo común provocando que sus agresiones físicas hacia él fueran cada vez más violentas y continúas. Estaba seguro de que ya fuese que el pueblo lo terminase quemando vivo o Taecyeon lo golpease hasta el cansancio habría muerto.

-En poco tiempo se hará un año desde que conocí a Yoongi. En todos estos meses he experimentado la felicidad más plena que pude imaginar alguna vez. He conocido gente increíble, y aprendido tantas cosas que me eran ajenas e incluso totalmente desconocidas. Me han enseñado a valorar quien soy, a tener seguridad en mí mismo y a no bajar mi cabeza ante nadie-

Sonrió para si recordando a todas aquellas personas que se han cruzado en su vida a brindarle ayuda ya sea de forma directa o indirecta. Incluso tiene muy presente a Youngjae, la primera persona ajena a su vida que le hizo un obsequio y trató como un ser humano, y no como una peste. Estaba pendiente ese viaje a Jeolla para buscarle.

-Sé que sonara egoísta, pero no quiero volver a sufrir aún. Vivir atravesando por circunstancias felices y amargas es parte del ciclo de la vida y no estoy en contra de ello, solo... Deseo disfrutar un poco más de esta felicidad antes de volverme a encontrar con una situación dolorosa-

El Gran Sabio sonrió aprensivo.

-Voy a decirte algo y espero que esto te haga estar más tranquilo- su tono de voz le recordó a Jimin a la de un abuelo tratando de reconfortar a su nieto, extraño tomando en cuenta que nunca conoció a los suyos -Recuerdas que hablamos de la persona que te hizo daño en nuestro primer encuentro-

-¿De Taecyeon?-

-Sí ¿Recuerdas lo que te dije?-

-Lo hago. Dijo que me lo encontraría en un par de años en el continente de los humanos. Él sería un niño que sufriría mucho como castigo por lo que hizo en esta vida. También dijo que mi encuentro con él sería importante-

-Exactamente. Tienes buena memoria. El encuentro con ese niño marcará la cuenta regresiva para que La flat'yat llegue. Él aún no ha nacido y desde que lo haga hasta que te lo cruces van a pasar años-

Los ojos de Jimin se ampliaron.

-Eso quiere decir...

-Que al menos los siguientes tres o cuatro años no tendrás que llevar a La flat'yat en tus pensamientos tan constantes-

Tres o cuatro años, Yoongi iba a irse solo por dos. Una parte de él sentía un poco de alivio, pero la otra no quería confiarse y ceder ciegamente a las palabras tranquilizadoras del alfa. La flat'yat tal vez no llegaría en esos dos años que su compañero estaría fuera, pero cientos de cosas más podrían trascurrir en ese tiempo. Un día él estaba corriendo a casa de Taehyung a pedir especies para hacer la comida y en la tarde de ese mismo día estaba recibiendo la noticia de que Taecyeon había perdido la vida en un combate. El destino ya le había mostrado que muchas cosas podían cambiar en cuestión de minutos.

-Gracias por contármelo- hizo una reverencia de más de noventa grados, el alfa no iba a verla, pero esperaba que el sonido provocado por sus ropas y articulaciones le dieran una imagen o idea de lo que estaba haciendo -Podría pedirle un último favor-

-Te escuchó-

-Mis sueños o visiones no son tan precisas como yo lo quisiera, supongo que es porque soy muy joven y aun no sé cómo utilizarlas correctamente, pero usted es un Sabio, lleva en el alma y la sangre ese don- humedeció sus labios -Si usted tuviese otro vistazo al futuro o hubiese algún cambio ¿Podría decírmelo?-

El hombre sonrió.

-Por supuesto Nebesnny. No pude ayudar a los tuyos cuando fueron arrancados de su hogar, pero puedo enmendar ese error contigo. Voy a ayudarte en todo lo que pueda. Tienes mi palabra-

Jimin sintió que su pecho de calentaba, el tono de voz tan cálido que el Gran Sabio había utilizado se sentía familiar y cómodo. Era como aquella vez en que Jihoon lo abrazó y le hizo sentir una calidez paternal. Era imposible, pues Jihoon era padre de Yoongi y el Gran Sabio no tenía descendientes, pero en el cuerpo y el alma Jimin los percibía como familia. Incluyo más que con sus propios padre y madre.

-Además, si hay algo en lo que debes centrar tu atención sería en el Tem' yarost'- aquella voz lo trajo de sus pensamientos al presente.

-¿Mi alfa?-

Asintió en respuesta el mayor.

-Como sabrás, el límite de vida de un dragón es de dos mil años aunque pueden durar más, los sabios solemos vivir más tiempo- hizo énfasis en lo último -Siguiendo la primera premisa, se dice que al llegar a los cien años de vida el cuerpo tanto humano como dragón alcanzan la madurez completa, y comienza a desarrollar todas sus habilidades y poder-

Eso capturó su atención de inmediato, siempre estaba interesado en aprender más acerca de su condición como dragón.

-Con el Tem' yarost' sucede que apenas está rozando los veinticinco años, pero su cuerpo ya obtuvo la madurez necesaria-

-No comprendo muy bien Gran Sabio-

-En su estado actual, si la ira lo rebasa él sería capaz de destruir un país sin mover un dedo. Posiblemente para sus treinta la mitad de un continente, para los cuarenta el continente entero y para los cincuenta más allá de eso. Es solo una especulación, las cifras podrían ser más cortas-

-¿Más cortas?-

-Su cuerpo maduró antes de los cien años, superando mis expectativas-

-¿Cree que se deba a la ira?-

-La ira en su interior es un catalizador, pero él por su cuenta ha demostrado ser alguien complemente bueno para los entrenamientos. Es un guerrero en cada célula del cuerpo, su madurez anatómica probablemente se debió a si mismo-

-Ahora lo recuerdo. Usted me dijo que cuando llegase cierta madurez la ira lo iba a alcanzar- se le comprimía el pecho de tan solo pensarlo -¿Se refiere a esto?-

-No. En este momento su cuerpo está listo para comenzar a desarrollar todas sus habilidades al máximo. Así como estas y su poder, la ira va a seguir aumentando, aunque no sé cuánto tiempo tardará en llegar a ese punto de descontrol-

-Gran Sabio. Usted no sabe ¿Por qué Hyung lleva esa ira tan inmensa dentro?-

-No. Es algo que he intentado averiguar desde años- Jimin le observó con curiosidad -Cuando el Tem' yarost' nació, los otros dos sabios y yo percibimos esa ira de inmediato, fuimos los únicos- confesó -Aquella vez los lagos en Voda se agitaron, la tierra en Zelmya se sacudió violentamente, los vientos cerca de Veter se volvieron feroces y los volcanes cerca de Ogon' expulsaron magma. Fueron eventos que sucedieron independientes uno del otro, pero el mismo día en que el nació. Desde aquella vez imploré a nuestra Madre Tierra que me diese una explicación, le supliqué al agua que hablara con ella, pero nunca he obtenido una respuesta-

En sus expresiones faciales se evidenciaba que el Gran Sabio verdaderamente intentó obtener esa información y que se sentía decepcionado por no haberlo conseguido.

-Solo he averiguado que el dragón en su interior vive hundido en la ira, que es quien empuja por salir y consumir todo en un mar de caos. El humano es bueno controlándolo y mediándolo, tiene una templanza y determinación estupenda. En todo el tiempo que estuvo lejos de Daegu jamás perdió el control, pero si la ira crece, si el dragón se hace más fuerte, no sé si podrá mantenerlo abajo como lo ha hecho hasta ahora. Es ahí donde tú tomas un papel importante-

Jimin no separó los labios para preguntar y en cambio permaneció viendo al alfa, sabiendo que obtendría una explicación.

-Tú. Tú eres la luz en la oscuridad del Tem' yarost' como él es la oscuridad en tu luz, sus almas fueron hechas la una para la otra. Tú eres una criatura de paz por naturaleza, y él una criatura de caos. Solo él puede empujar el enojo de ti hacia afuera y solo tú puedes evocar la calma en él-

El Gran Sabio dio dos pasos al frente y le tomó de los hombros sin fallar, había adivinado su estatura y a que altura estarían ellos.

-Nebesnny, nunca, nunca te pongas en un peligro inminente- su tono de voz se hizo más grave -El masacró tres aquelarres buscándote, no dejó ni un solo vampiro con vida, no puedo ni imaginar que sucedería en unos años si te viese en peligro-

Jimin tampoco podía dimensionarlo, ni siquiera podía hacerse una imagen de que tan desastroso eso podría ser, y eso que le había visto matar vampiros con un simple vaivén de su cola de dragón cuando fue a rescatarlo a Luna Carmesí. Yoongi ha sido magnifico con él todo este tiempo, y con todos alrededor, tanto que seguía sin ser capaz de imaginárselo volviendo todo un infierno.

-Mantente seguro. Mientras estes a salvo tanto el hombre como la criatura escamosa estarán tranquilos, verte en peligro podría alterar la ira y volverlo más peligroso. No te pongas en ningún riesgo- era más una súplica y demanda que una petición.

Eso le hizo pensar ¿En qué tan fuerte Yoongi podría llegar ser? Ya lo era. Ninguno de los hijos de los líderes de clanes se asemejaba a su fuerza, Jooheon tampoco. Namjoon a veces hacia comentarios que dejaban entrevisto que la diferencia entre sus fuerzas era muy palpable, siendo la de Yoongi la mayor, y Seokjin le tenía un respeto increíble. Algunas veces incluso le llegó a llamar Alfa, en ese tono que utilizaban los miembros de un clan para dirigirse a su líder.

-¿Puedo ser igual de fuerte que Hyung?-

-La fuerza de ambos es diferente. Una está hecha para destruir, la otra para crear. Juntas, pueden lograr un sinfín de posibilidades-

-Comprendo. Gran Sabio ¿Sería posible que yo sanase la tierra en América?-

-En tu estado actual no. Eres muy joven aun, purificar un territorio tan extenso podría drenarte la vida, pero en un par de años es probable que puedas hacerlo ¿Quieres sanar esas tierras?-

-Sí. Hyung me contó la historia de lo que sucedió con los humanos que vivían ahí. Es desolador saber que la misma especie se destruyó y todo por intereses efímeros, pero la Madre Tierra no tiene la culpa de ello. Yo quiero ayudarla a sanar-

-Es una acción muy noble de tu parte. Pondré todas mis suplicas y plegarias para que puedas conseguirlo-

-Gracias-

El hombre le sonrió retirando las manos que tenía sobre sus hombros.

-Gran Sabio- dijo tomando una de las manos entre las suyas, evitando que esta se alejara de él -Yo, creo que se equivoca en algo con respeto a la ira de Hyung-

El rostro del mencionado se frunció confuso.

-¿A qué te refieres?-

-He tratado con el dragón de Hyung. No es malo. Yo he sentido su calidez, es atento, cuidadoso, e incluso permisivo, pero él nunca ha recibido afecto. Por el contrario, todos los clanes en Daegu le temen, su propio clan lo hace, y las provincias alrededor le tienen sobrenombres amenazadores y relatos poco alentadores- se detuvo unos segundos para tomar oxígeno y procedió -La beta que trabajaba para Taecyeon me dijo alguna vez que si un animal crece siendo golpeado, o se vuelve manso obedeciendo a todos, o se hace agresivo para atacar a todos ¿No cree que encasillar al dragón de Yoongi como una bestia ha provocado que el dragón se crea que solo es eso?-

El Gran Sabio no supo que responder, y Jimin vio eso como una oportunidad para seguir hablando.

-Él siempre intenta tomar el control y atacar a todos, pero yo creo que lo hace porque se ha convencido de que eso es lo único que sabe hacer, crear caos. Y la ira que se aloja en el interior solo alienta al dragón a perder más la razón-

-Dices que la ira es independiente del dragón y que nosotros hemos orillado a que este sea así- la voz del hombre de pronto sonó baja, carente de alguna emoción, pero si con cierto tono cohibido, como si se hubiese dado cuenta de algo importante que ignoró todo este tiempo.

-Creo que han contribuido en gran parte a ello. Yo pienso que se convenció de que lo único que sabe hacer es dañar a los demás, entonces presiona a Hyung para ir a la superficie. Hyung no tiene una buena relación con su dragón, lo considera y se considera una amenaza-

-Y eso provoca que la criatura más se enfade-

-Justamente. También pienso que, si Yoongi y su dragón trabajasen juntos, si ambos se diesen cuenta de que no son una amenaza y se otorgaran una oportunidad las cosas podrían ser diferentes. Usted lo dijo, la ira va a crecer, pero no va a rebasar a Hyung solamente, va a rebasarlos a ambos. Estando en sincronía tal vez puedan hacerle frente ¿No cree?-

-Es una posibilidad... Si tu suposición es cierta ¿Lo has hablado con él?

Negó con la cabeza -No lo he hecho, a penas y he convencido a Hyung de que deje salir a su dragón unos minutos. He tratado con mi alfa lo suficiente como para saber que al primer indicio de que el dragón quiera desobedecer lo enviará abajo sin una segunda oportunidad, así que planeaba primero persuadir al dragón y poco a poco convencer a Hyung-

-Eres muy inteligente. No solo llegaste a la conclusión de que su dragón no es malo por naturaleza, también estas planeando la forma de hacer que se unan y trabajen juntos-

-Yo amo a mi alfa, amo el humano y al dragón que es. Y acepto la ira que viene con ellos. Pero quiero su bienestar más que a la ira, quiero que ellos se sientan libres de confiar el uno en el otro-

Jimin miró hacia su vientre.

-Mi parte omega estuvo durmiendo durante mucho tiempo, al despertar fue muy reservado y no me contaba nada. Cuando fui llevado al aquelarre me molesté en un principio porque no me ayudó, pero luego comprendí porque hacia las cosas de esa manera. Él sabía que Jin Hyung y la pareja de Jooheon Hyung se encontraban en ese lugar. Las cosas han resultado bien para nosotros, porque confío en él y pese a mi inexperiencia y desconocimiento mi dragón confía en mí. Deseo que Hyung y su dragón también tengan ese tipo de relación-

-Nuevamente, tus intenciones son sumamente admirables, y creo que la posibilidad del riego se reduciría en gran medida. Crees que podrías...

El alfa repentinamente comenzó a toser. Soltó su mano llevándola hacia su estómago mientras la otra cubría su boca, dio un par de pasos hacia atrás y se encorvó sobre su torso tosiendo un par de veces más. Cada vez que tosía un gemido lastimero le acompañaba al final, el último fue tan agudo y doloroso que erizó los poros del omega quien angustiadamente no pudo aguantar más viéndole.

-¡Gran sabio! ¿Qué le sucede? ¿Está bien?-

Jimin se acercó al alfa, con la preocupación palpable en el rostro y la voz, colocó una mano sobre la espalda del hombre y otra más la extendió hacia la mano que rodeaba el estómago. El hombre aceptó su tacto, para reincorporarse. Inhaló profundo y volvió a toser seguidamente, pero más bajito y sin el gemido.

-Estoy bien pequeño Nebesnny. Es solo este cuerpo que ya está muy desgastado- su voz ronca y rasposa por la tos.

-¿Necesita algo? Jihoon Hyung sabe mucho de curaciones. Yo podría traerle algún medicamento de su parte-

El mayor negó con una suave sonrisa acentuando sus arrugas, tratando de recuperar la compostura.

-Estaré bien. Estas cosas son normales cuando cargas tantos años en los huesos-

-¿Seguro? Tal vez podría traerle algo para amenorar el dolor-

El hombre posó una de sus manos sobre su coronilla y le acarició los cabellos albinos.

-Tenerte aquí es una caricia al alma y a la tranquilidad. Hablar contigo y escucharte desvanece mi conciencia sobre mi cuerpo mallugado. Es lo único que necesito-

-Está bien, pero si se siente más mal me lo dirá ¿Verdad?-

-Por supuesto-

Dejó de acariciarle los cabellos.

-Ya debes irte ¿No? -

-Yeojin me dijo que me llevaría a uno de los invernaderos acuáticos que tiene aquí-

-Esa niña, es muy audaz y perspicaz. Será una buena líder-

-¿Líder? Pero, creí que su hermano tomaría ese papel. Él es el mayor-

-Todos creen que así será, pero no están en lo correcto. Ella va a asumir el liderazgo y lo hará de una manera estupenda... Pero ese va a ser un pequeño secreto entre nosotros ¿De acuerdo?-

-Por supuesto-

Al apenas y elevó las comisuras en una sonrisa.

-Nebessnny. El Tem' yarost' va a partir mañana ¿No es así?-

-Lo hará, en cuando la ceremonia finalice- trató de disfrazar el desánimo en su voz.

-Bien. Necesito que hagas algo por mi mañana ya que no podré estar ahí-

-¿No irá? me habían dicho que son los sabios los que efectúan este tipo de ceremonias, creí que usted estaría ahí-

El realmente esperaba que el Gran Sabio estuviese presente, no solo por el aprecio que le había acogido en estas semanas, sino porque este evento podría ser una buena forma de que el alfa interactuase con los demás después de tanto tiempo en reclusión.

-Cuanto lo deseo, pero no me es posible. Teyra ha elegido al otro Sabio de este clan para que oficialice la ceremonia, yo voy a percibirlo todo desde aquí-

Jimin hizo un puchero -¿Enserio no puede ir? Yo deseaba obtener su aprobación-

-No asistiré, pero tienes mi aprobación y voy a dártela-

El Gran Sabio metió una mano dentro de su propia túnica y extrajo un pequeño cofrecito de madera oscura, había runas grabadas en toda la superficie, pero debido a lo viejo que era la mayoría estaban borrosas haciéndolas difícil de comprender. Abrió el cofre y un pigmento azul marino se apreció dentro.

-Yo Namhan el Gran Sabio del clan Voda te otorgo la bendición de Los Sabios para efectuar el Brat'shi, que tus compañeros y tú mañana puedan sellar su hermandad hasta el fin de los tiempos-

Hundió un dedo en el pigmento azul y lo llevó hasta su frente marcando una línea vertical, volvió a untar sus dedos y agregó tres círculos junto a la línea, arriba de esta.

-Tienen mi bendición Nebesnny-

-Muchas gracias, Gran Sabio. Se lo haré saber a Nam y a Jin Hyung-

-Tráelos la próxima vez-

-¡¿Enserio?!- preguntó completamente emocionado. Llevaba días queriendo que el Gran Sabio conociese a sus hasta ahora únicos compañeros de clan, y se había abstenido de insistir porque sabe perfectamente que solo pueden pasar las personas con las que el alfa desee hablar.

-Claro, creo que es momento de conocer a tus hermanos-

-¡Muchas gracias!- sin pensarlo lo abrazó, fue tanta su emoción que saltó fuerte haciendo que ambos se movieran -¡Cielos! Discúlpenme, discúlpeme- se soltó haciendo una reverencia al darse cuenta de su osadía.

Lo más que había hecho era tomar las manos del hombre, nunca le había abrazado porque el alfa no era una persona muy afectiva. Esperaba no haberle hecho sentir incómodo o molesto.

-Está bien, es bueno ver que tu energía de nuevo fluye estable y constante-

El hombre cerró la pequeña cajita con el pigmento y volvió a meterla dentro de su túnica.

-Con respecto a lo que necesito que hagas por mi mañana-

****

-Ya sal-

-Pero-

-Sal o entro yo a sacarte-

-Soso, no lo amaneases-

-No es una amenaza, solo le estoy pidiendo con un poco de dureza que salga-

-Claro que no-

-Ya deja de quejarte-

Jimin corrió la cortina mostrándose ante las dos mujeres, quienes dejaron su riña para mirarlo.

-¡Cielos! ¡Wow! ¡Cielos!-

Jimin rio ante las expresiones que Sojin hacia. Ella no dejaba de mirarlo de pies a cabeza, sus ojos miel estaban más abiertos de lo normal y la expresión hecha por sus rojizos labios le recordaba mucho a las caricaturas de las películas que veía.

-Las escamas que me tuvieron y la garra que me crío-

-Ya Soso, cálmate- la alfa insistió tirando del bonito vestido vino que la omega portaba en un intento por llamar su atención y que hiciera caso a sus palabras.

-Es que Keumjo, no lo estás viendo. Se ve increíble- dijo ella con un tono de voz exaltado y maravillado -Pareces algo salido de un retrato de un pintor famoso, demasiado irreal-

Jimin sonrió apenado mirándose en el espejo ovalado de la habitación que compartía con Yoongi.

La verdad es que debía admitir que a él también le gustaba como lucía.

Traía puesto un vestido. Después de un buen tiempo se había animado a ponerse uno de nuevo. Bueno, eso en gran parte se debía a que durante los entrenamientos usar uno resultaba incómodo en muchos aspectos, y a que no tenía caso estropear prendas tan bonitas en una sola puesta, pero hoy podía consentirse volviendo a utilizar uno.

Este vestido era de satín y en tono blanco, al igual que su tono de piel, de hecho, si era observado de lejos estaba seguro de que daría la apariencia de estar desnudo. La prenda llegaba a la mitad de sus muslos y poseía un corte en V en el pecho con encaje dejando una amplia vista a su nívea piel, al ser de tirantes delgados también relucían sus clavículas. Era suelto y se amoldaba al cuerpo de quien lo portara.

No había joyas ni en muñecas, ni en dedos, ni en tobillos, y no debería haber en el cuello, pero Jimin había insistido en llevar el collar con el símbolo del Yoongi, aquel que utilizó la primera vez que porto un Brial. El collar era lo único de otro color, pues en la cabeza llevaba una corona de flores armada de: orquídeas, ciclamen y lirios del valle. Todas, flores de color blanco. Su cabello caía libre sobre sus hombros.

Tampoco llevaba maquillaje sobre el rostro, salvo por un toque de humectante en los labios, y por un glitter blanco que acentuaban sus clavículas, cortesía de Nancy quien le había ayudado a arreglarse y quien insistió en que era necesario que llevarse un poco de brillo. Un glitter de tamaño más pequeño fue esparcido en sus brazos y piernas, tan leve que solo se iba a apreciar cuando los rayos del sol se posasen sobre él.

Unas sandalias blancas de cuerda fina llegaban poco más arriba de sus tobillos en una especie de enredadera, totalmente lisas y sin tacón.

Parecía una autentica nube. Blanco por todos lados con excepción del collar.

-Estas hermoso ¿Yoongi ya te vio?-

-Aun no, Noona-

Nancy y Yeojin, quienes se ofrecieron para ayudarle a alistarse le pidieron -técnicamente suplicaron- a Jimin que lo sacara de la habitación, porque a ellas aún les generaba cierto miedo. ¡¿Cómo crees que vamos a hacer eso nosotras?! ¿Y si se enoja? Pídele que salga, por favor Jimin. Él tuvo que hacerlo, y tras un intercambio de palabras y un par de besitos esquimales acordaron que se verían en el estaque de Teyra. Las chicas habían partido hace diez minutos a su clan, para alistarse y llegar a tiempo a la ceremonia, no sin antes avisarle que Sojin y Keumjo llegarían en un rato para llevarlo.

-Ya decía yo-

Ladeó el rostro confundido.

-Tienes todo completamente en tu lugar. Nada desordenado. Si Yoongi te hubiese visto así, no lo estaría-

Sus mejillas ardieron. Comprendió perfectamente a lo que la chica de hebras largas de refería.

-¡Sojin! Contrólate-

-Keumjo, ni lo intentes, si a ti también se te van los ojos-

La alfa de hebras anaranjadas desvió la mirada completamente avergonzada al verse descubierta. A Jimin siempre le causaba ternura verla tan apenada, más con su altura y porte.

-No sé de lo que estás hablando- dijo cruzando sus brazos frente a su pecho. Ella iba a arrugar esa bonita camisa coral si seguía apretando sus brazos contra la tela.

-Claro que sí. Ni te sientas apenada, si no fuera porque sé que es pareja de Yoongi ya lo hubiese besado-

Jimin abrió sus ojos ante esa confesión.

-¿Qué? Eres mi tipo-

-Pero soy un omega- y ella también lo era.

-También me gustan los omegas- respondió con simpleza, como si fuese algo evidente e irrelevante.

Ella era muy directa con sus palabras y con expresar lo que pensaba. A Jimin en cierto modo le agradaba su actitud, era todo lo contrario al estereotipo de omega que tenían en Busan. Además, tenía una confianza increíble sobre su persona y no se doblegaba ante nada.

-Deja de decir esas cosas Sojin, vas a hacerlo sentir incómodo-

-No lo digo con esa intención ¿Lo sabes?- ella le miró -Desde aquella vez que te vi salir de tu caparazón te me hiciste lindo, pero sé que hasta ahí- ella sonrió, su maquillaje le daba la apariencia a una modelo de esas revistas de moda que tenía en su templo -De igual manera sé que en algún momento llegara alguien-

Jimin frunció en entrecejo, la duda abarcaba todas sus facciones y no pasó desapercibida ni de Sojin ni de Keumjo.

-¿Qué?- preguntó la alfa.

-Ustedes... ¿No están juntas?-

-¿Keumjo y yo?-

Asintió.

-No, para nada-

-¿Enserio? Yo, siempre veo que están juntas, y su relación es tan... Estrecha-

-Es porque somos amigas de infancia. El templo de sus padres queda a kilómetros de frente al mío. Tenemos casi la misma edad, nos criamos juntas-

Él asintió.

-Y es verdad que me ha ayudado en mis celos y yo en los de ella, pero no somos pareja-

-Eso estuvo de más- comentó la alfa.

-Tienes casi treinta y cinco años, deja de avergonzarte, y él esta enlazado, no es como si no supiera de lo que estoy hablando-

-Sojin, ya-

Jimin sonrió. Justo por eso pensaba que estaban juntas.

-Disculpen si las incomodé-

-Está bien. No eres el primero en pensar que tenemos una relación más allá de la amistad. En fin, ya es momento de irnos-

-Es cierto, en media hora será medio día-

-¿Te hace falta algo Jimin?-

-No Noona- inhaló profundo mirándose una última vez en el espejo -Ya estoy listo-

-Entonces, andando-

***

-¡Yuyu!-

-¡SolSol! ¡DoDo!-

La pequeña de hebras naranjas se soltó del agarre que Seokjin tenía en su mano y corrió hacia donde los gemelos se encontraban junto a sus padres. Se habían vuelto muy buenos amigos en las últimas semanas.

-Mira Sol- la pequeña le mostró lo que llevaba en las manos, eran tres campanillas chinas en un resaltante color azul.

-Estas muy bonitas-

-Son para que se las demos a Omma. Cada uno le dará una-

Ella entregó las dos flores una a cada uno de los gemelos.

-Al tío Minnie le van a gustar mucho-

-Mucho- repitió Doyoung.

-¿Dónde las conseguiste?- la pequeña Solar había intentado conseguirlas, pero Jihoon Hyung le dijo que en Daegu esas flores no crecían.

-Acompañé a Jinjin a la frontera ayer. Las estaban vendiendo las personas con quienes intercambiamos víveres-

-¿Te fuiste esa esa cosa de madera?-

-En la carretilla ¡Sí!-

-¿Y no te dio miedo? Se mueve muy feo-

-Si me dio miedo, pero solo era mi bruno interior así que me repetí-

-¡Silencio Bruno!- corearon los gemelos.

Ella miró a ambos sorprendida.

-¿Cómo lo sabían?-

-Vimos esa película con el tío Gigi-

-¿Ya la vieron?-

-Sí, nos gustó mucho-

-¿Es su favorita?-

-No. Nuestra favorita es El Castillo Vagabundo-

-No he visto esa ¿La vieron con appa?-

-¡Sí! Tienes que decirle que quieres verla. Es muy bonita-

-Sí, muy bonita- repitió el gemelo menor.

-Eso haré. ¿Saben dónde está appa?-

-Umh- Solar empezó a ver hacia todos lados. Doyoung le imitó.

Había muchas personas en el lugar. Los lideres de todos los clanes ya se encontraban ahí, sus parejas y sus hijos les hacían compañía. Los betas y los comandantes también. Algunos miembros pertenecientes a cada clan se encontraban ahí. No era posible traer a todos, la zona donde se encontraba el Teyra gråter no era tan amplia como la que usaban para realizar el Bålsjen, así que solo habían incluido a ciertos habitantes de los clanes.

-¡Sol! ¡Sol!- Doyoung tiró de la manga de la blusa de manga larga que su hermana llevaba -Ahí, ahí, ¡Tío Gigi!- señaló con la mano que sostenía la flor y sus ojitos brillosos.

Solar se movió tratando de ver entre la gente y lo distinguió entre todas las personas. El tío Gigi era alto, y siempre andaba vestido de negro, justamente como hoy.

-¡Yuyu! Ahí está, junto a Jiji Hyung y la alfa de ojos verdes-

-Es cierto-

Yuqi le observó encantada a la distancia con sus iris anaranjados. Ella era consciente de que no era su padre, pero lo quería como uno. Desde el momento en que Seokjin y Namjoon la llevaron al Castillo en el Cielo y percibió los aromas del omega y del alfa entremezclados se sintió reconfortada y segura.

No es como si no se sintiera así con sus otros padres. Jin la quería y le había protegido todos estos años, él la alimentaba y era gracias a su sangre que su sistema sanguíneo estaba purificado. Aunque peleaba con Namjoon la realidad es que lo aceptó como su tercer padre desde aquella vez en que casi le revienta la cabeza con una piedra. Es solo que cuando Jimin la sostenida en sus brazos y le contaba cuentos, o cuando se sentaba junto a Yoongi a ver una película y el alfa le permitía hundirse en su costado en un abrazo que nunca era correspondido, ella también se sentía en casa.

Su subconsciente le decía que pese a ser una vampira y no poseer un lazo de sangre con ninguno de estos shifters, estaba segura de que los tres alfas y el omega la apreciaban, cada uno a su manera.

-Doyoung ¿A dónde vas?-

-Tío Gigi- fue su única respuesta.

La pequeña observó al gemelo varón hacer el ademán de caminar hacia Yoongi.

-¿También quieren ir a saludarlo?- preguntó la de hebras naranjas.

-Queremos, pero ya va a empezar la ceremonia-

Es cierto. Namjoon y Jin se encontraban a las orillas del lago, ambos forrados en pantalones y camisas de manga larga de un blanco reluciente, uno a lado del otro, aguardando a que Jimin apareciera. Si no fuese porque esto era una ceremonia de hermandad, parecería que estaban a punto de casarse.

-Podemos ir a saludarlo después de la ceremonia- dijo ella con tranquilidad -¿Creen que quiera jugar con nosotros?-

-Al tío Gigi no le gusta jugar- enfatizó Solar sosteniendo a su hermano del brazo -Dodo y yo hemos intentado que juegue con nosotros, pero él prefiere vernos jugar o ver películas-

Yuqi asintió sabiendo que lo que su amiga decía era cierto. Ella también lo había intentado, pero a su appa de ojos verdes parecía no agradarle la idea. Nos era severo como Seokjin o Namjoon cuando declaraban que no iban a jugar con ella por hoy, pero sutilmente él declinaba la oferta.

-Me gusta ver películas con el tío Gigi- comentó Doyoung provocando que las dos infantas le mirasen.

-Dodo ¿Acabas de formular una frase por ti mismo? Sin repetir lo que digo- los ojos de Solar estaban explayados, llenos de una sorpresa ilusionada y contenta -¿Lo hizo?- preguntó mirando a Yuqi -¿Lo hiciste?- preguntó ahora mirando a su gemelo de nuevo, no pudiendo esperar una respuesta de la pequeña Yuqi, quien fue tomada desprevenida por esa pregunta.

Doyoung elevó sus hombros tratando de restarle importancia, pero Solar no pensaba igual.

-Él lo hizo- respondió Yuqi segundos después, mirando a su amiga.

-¡Estupendo! ¡Bien hecho, Dodo!- ella abrazó a su gemelo por los hombros, besándole la frente con ternura y cariño -Appa y Omma se pondrán contentos-

Al ver esa escena la sangre en el cuerpo de Yuqi hirvió por un momento. Consumiera mucha, poca o nada de sangre, su temperatura normalmente era baja, pero rara vez hervía agitada en sus venas. Solo sucedía cuando veía o apreciaba algo que también anhelaba tener, justo como la escena que presenciaba ahora. Solar abrazaba a Doyoung, dándole besitos en la frente y felicitándolo con una enorme sonrisa. Ellos eran shifters y liberaban feromonas fáciles de percibir por su fino olfato de vampiro. Sin embargo, ella podía percibir las feromonas más no comprender de forma concreta que sentimientos, sensaciones o estados de ánimo contenían estas. Aun así, viendo la escena, ella intuía que la gemela mayor estaba contenta del logro de su hermano.

Infló las mejillas haciendo un pequeño puchero y habló.

-¿Crees que Minnie omma tenga pronto bebés? Quiero un hermanito- expresó Yuqi.

Ella no era tonta, a diferencia de los vampiros que no estaban clasificados por sub géneros, los shifters si lo hacían. Los alfas no podían embarazarse al menos que uno de ellos fuera mujer, y ella tenía dos padres varones.

-Sería increíble. Seríamos cuatro, podríamos jugar a muchas cosas-

-Hay que decirle a omma-

-¡Si! Pero- Solar puso una expresión pensativa, parecía tratar de recordar algo -Tae omma nos dijo una vez que Doyoung y yo crecimos en su pancita porque Kookie appa nos puso ahí-

-¿Cómo?-

-No quiso explicarnos más-

-Entonces ¿Hay que decirle a Yoongi appa que ponga un bebé en Jimin omma?-

-Sí, creo que si-

-Hay que decirle pronto-

-Sí, si no creceremos más y ya no podremos jugar con él-

-Hay que decirle después de la ceremonia-

-¿Qué van a decirle a quién, pequeños traviesos?-

La suave voz de Taehyung interrumpió a los pequeños. Se acercaba a ellos, portando una camisa de satín azul cielo junto a un pantalón negro, sus cabellos de maple caían libres hasta casi la mitad del cuello, semi lacios y desordenados. Jungkook venía unos pasos detrás de él y portaba una camisa de manga de color café chocolate e igualmente pantalones negros, sus hebras oscuras también caían libres por todos lados.

-Nada omma- apresuró Solar a contestar -¡Adivina! Dodo dijo una frase sin imitarme-

-¿Enserio?- Taehyung observó a su hijo -¿Lo hiciste pequeño?-

Doyoung no respondió.

-Lo hizo. Créeme omma, pero ya sabes cómo es Dodo-

-Está bien- Taehyung se inclinó hacia su pequeño -Cuando él se sienta listo, nos lo dirá ¿Verdad, cariño?-

Unos segundos después el pequeño asintió de forma apenas perceptible y sin ningún cambio en el rostro. Jungkook le extendió los brazos y el pequeño no dudo en extender los suyos para que le cargara.

-Yo también quiero- exclamó Solar extendiendo los brazos hacia Taehyung.

-Tae omma no puede cargarte ahora cariño, pero yo te puedo sostener con mi otro brazo- dijo Jungkook.

-¿Por qué no puede?- cuestionó ella frunciendo el ceño en confusión total.

Los padres se observaron entre si dándose un par de miradas que Yuqi ya les había visto hace a Jin y Namjoon alguna veces. Eran ese tipo de miradas que revelaba una complicidad derivada de ocultar algo que solo era de conocimiento entre ellos dos.

-Les diremos después de la ceremonia- respondió Taehyung con sencilles.

Solar parecía dispuesta a abogar para obtener otra respuesta cuando la voz del gemelo menor se escuchó.

-Tío Minnie-

Voltearon. Efectivamente, Jimin omma había llegado. Yuqi sintió que se enamoraba, el omega se veía tan bonito con aquella vestimenta, sus ojos picaron emocionados ante un recuerdo vago de su verdadera madre luciendo un vestido largo del mismo color en que Jimin lo traía.

***

Jimin se sintió cohibido en cuando el cuchicheo fue silenciado y todos los pares de ojos se posaron sobre él. Todavía no se acostumbraba a tener la atención de tantas personas sobre su persona, lo ponía muy nervioso y ansioso.

Una mano se colocó sobre su hombro desnudo, ladeó el rostro encontrándose con una reconfortante y segura sonrisa.

-Todo va a salir bien-

Le sonrió a Sojin en un gesto de agradecimiento que esperaba ella hubiese captado. Las personas se fueron abriendo, creando un camino hacia el estanque. Todos con sus ropajes de telas finas y diseños variados que los distinguían del clan al que eran pertenecientes. Hombres y mujeres, inclusos algunos infantes, portaban finas y delicadas piezas de joyería. Extrañamente, la vibra y la sensación que los invitados proyectaban no era como aquella vez en el Bålsjen, todos ellos estaban luciendo prendas hermosas, pero con un cierto significado más ceremonial, sutil y formal, sin ese toque dionisiaco de aquella ocasión.

Inhaló profundo hasta sentir que su tronco se elevaba y suspiró pausado, alongando la salida de oxígeno convertido ya en dióxido por su nariz. Sentía que el estómago se le estrujaba de los nervios, sus piernas incluso parecían temblar.

Vas a hacerlo bien cachorro, la voz de Yoongi resonó en su mente.

Movió los ojos tratando de buscarlo, pero a esta distancia y con toda esa gente interpuesta no le fue posible encontrar su figura. En ese momento agradeció internamente a Talen por aquellas runas, la voz de su compañero al contrario de alterarlo, le hizo sentirse más en confianza.

Gracias le trasmitió.

Seguido de ello dio el primer paso hacia el estanque. Él quería esta unión, era momento de dejar los nervios y la timidez a un lado e ir por ello. Con cada paso iba enderezando su postura, alargando la espalda, bajando los hombros, abriéndolos para que su pecho sobresaliera, y elevando el mentón, sus manos rozándose sutilmente contra la tela de su vestido, evitando tomarla y hacerla jirones como antes lo hacía, tan solo acariciando la tela ante el movimiento natural.

Las personas lo miraban, algunos con admiración, otros con respeto, no comprendía el ¿Por qué? Pero era mejor que sentirse juzgado o acosado, como cuando iba por las calles de Busan y la gente lo miraban despectivamente.

Estando más cerca, se encontró a Seokjin y Namjoon, vestidos de blanco desde los pies hasta la cabeza, ambos alfas le sonreían. Entre ellos, uno o dos pasos más atrás se encontraba el Sabio del Agua, quien iba a efectuar la ceremonia. Del lado derecho del estanque se encontraban los líderes de cada clan, sus parejas y sus respetivos hijos a cada lado de ellos. Finalmente pudo encontrar a Yoongi, se encontraba junto a Chaerin, y sorpresivamente, Jihoon también estaba ahí. Su alfa le miró trasmitiéndole seguridad.

Jimin le sonrió antes de mirar hacia la izquierda, donde ya hacia Taehyung y Jungkook junto a los gemelos y Yuqi, y junto a ellos estaban sus amigos de Gwangju. Casi se le hacen acuosos los ojos. Después de tantos meses al fin podía verlos de nuevo: Hyejin y Wheein tomadas de la mano, ambas con el cabello suelto y portando unos bonitos vestidos largos en tonalidades ocres que iban a juego, a su lado Hoseok con ese resaltante cabello de nuevo rojizo y Hyungwoon con las hebras moradas. Los cuatro sonriéndole con ese cariño que le obsequiaron al conocerse. Iba a correr a abrazarlos en cuando la ceremonia acabase.

Seokjin y Namjoon le extendieron las manos y Jimin tomó cada una con las propias llegando finalmente hasta ellos.

-Bueno, no nos dijiste que hoy ibas a venir arreglado como un pequeño querubín- exclamó Namjoon a manera de que solo ellos pudiesen escucharle.

Jimin rio bajito, miro a Seokjin.

-¿Listo pequeño hermano?- consultó Jin, y a Jimin le vibró el pecho escucharlo decirle así y no "omega" como acostumbraba a hacerlo. Miró a Namjoon.

-No vas a poder librarte de mí-

Esta vez los tres rieron.

Apretó las manos de ambos alfas.

-Estoy listo- respondió firme y seguro.

Los tres observaron al Sabio.

Era por mucho más joven que el Gran Sabio con el que convivía, pero portaba los mismos ropajes azules del clan Voda, además de que le transmitía esa misma sensación de respeto y sabiduría.

-El día de hoy- la fuerte y grave voz del beta resonó en el aire -Nos hemos reunido ante el Teyra gråter un lugar glorioso y respetado por todos los clanes. Otorgado por la diosa Teyra a nuestros hermanos los Nebesnny-

Todos permanecían atentos a lo que el Sabio decía.

-Tres de sus descendientes, dos alfas y un omega, han decidido honrar a su clan y a sus principios mediante la efectuación del Brat'shi. La unión de las almas- dio unos pasos hacia la derecha para dejar de interponerse entre ellos y el estanque -Para ello, primero deberán entrar en las aguas del gråter-

El beta alargó su brazo moviéndolo de forma horizontal en una clara invitación para que se introdujeran.

Sin soltarse de las manos, los tres dieron el primer paso y comenzaron a adentrase. Las plantas flotantes se movieron hacia las orillas abriéndoles paso, el agua templada empezó a mojar tela y piel con cada paso. Fueron solo un par de pasos hasta que se detuvieron, el agua apenas rozaba las rodillas de los alfas mientras que al omega le llegaba poco más arriba de los muslos mojando la terminación del vestido.

Jimin estaba seguro de que terminaría todo mojado, pues podía sentir el agua trazando su camino por los ropajes hacia arriba, lo mismo sucedía con las prendas de Jin y Namjoon.

-Oh sagrada Teyra, tú que eres justa, que has derramado tus lágrimas por nuestro bienestar y respetado el destino -el Sabio alargó los brazos hacia el frente con las palmas viendo al cielo y continuó hablando -Abre tu manto y cubre a tus protegidos, otórgales la bendición para atar sus hilos en una sólida hermandad que perdure junto a tu eternidad-

El agua del estanque pasó de una tonalidad azul a un verdosa bajo su atenta mirada y las de los demás espectadores, al mismo tiempo que empezó a moverse haciendo que las flores flotantes giraran alrededor de ellos.

-La Diosa Teyra ha abierto la ventana del vínculo- dijo el Sabio -Es momento de que hagan vuestros votos y firmen el pacto- el hombre los miró fijamente con sus hipnotizantes ojos aguamarina -Si sus votos no son sinceros ella rechazará el enlace-

Los tres asintieron.

Seokjin sacó una pequeña daga cuyo mango era blanco y tenía grecas grabadas, dichas grecas eran propias de su clan, pues las había visto en el único libro que había en la biblioteca del Gran Sabio que las mencionaba. Jimin supuso que el Sabio debió dársela a Jin mientras él llegaba al lugar. Observó al alfa girar la daga y extendérsela a Namjoon quien la sostuvo por el mango con firmeza. Sus ojos azules se oscurecieron un poco y sus facciones se volvieron serias mientras paseaba sus ojos de Seokjin a Jimin y viceversa.

-Yo, Namjoon de los Nebesnny, pongo mi alma, hueso y carne en este enlace. Juro proteger a mi hermano Jimin y a mi compañero Seokjin hasta mi último aliento, y de no ser así, que caiga la penitencia de Teyra sobre mi hasta el fin de los tiempos- tras decir aquellas palabras realizó un profundo corte vertical desde su palma hasta la parte interna del codo.

La sangre en un rojo oscuro brotó de la albina piel manchando la camisa de manga larga. A Namjoon no le importó, tras terminar el corte el agua del estanque cambio a un ámbar y las flores siguiendo girando con mayor velocidad alrededor de ellos. Namjoon extendió la daga a Seokjin, quien la tomó con la misma firmeza con que el otro alfa lo había hecho.

-Yo, Seokjin de los Nebesnny pongo mi alma, hueso y carne en este enlace. Juro proteger a mi hermano Jimin y a mi compañero Namjoon y de no ser así, que caiga la penitencia de Teyra sobre mi hasta el fin de los tiempos- él realizó el mismo corte permitiendo que en cuestión de segundos la sangre también brotase de su piel.

Gotas carmesí cayeron, el agua viajó de la tonalidad ámbar a la roja y en esta ocasión el pasto que rodeaba el lago empezó a crecer al menos unos diez centímetros más de lo común. Provocando que los espectadores retrocedieran un poco.

Jin le extendió la daga a Jimin, quien la tomó sin poder despegar su mirada de la sangre en ella. Sangre de un alfa que lo había interceptado en el bosque, sangre de otro alfa que le ayudó en el aquelarre, sangre de los dos alfas que pertenecían a su clan, sangre de sus hermanos.

Detestaba la palabra sangre, detestaba verla, porque la relacionaba íntimamente con la guerra y los conflictos, sin embargo, mientras veía el líquido carmesí resbalándose por la afilada cuchilla metálica no sintió ningún tirón molesto en su estómago o alguna sensación de angustia. Porque en ese momento, y viendo los colores en el estanque, Jimin se daba cuenta de que tenía a dos alfas que le habían acogido como parte de su familia sin siquiera conocerle y que estaban dispuestos a dar la vida por él.

Justo con él lo haría.

Apretó el mango de la daga y miró los dos pares de ojos azules.

-Yo, Jimin de los Nebesnny, pongo alma, hueso y carne en este enlace. Juro proteger a mi hermano Seokjin y a mi hermano Namjoon hasta mi último aliento de vida y de no ser así, que caiga la penitencia de Teyra sobre mi hasta el fin de los tiempos... Hasta mi último mi latido- hizo el corte vertical, su sangre brotó como una cascada, a borbones, cayendo sobre el agua, misma que se torno de un naranja.

Alargó su brazo buscando unir la palma de su mano con la de los otros dos, quiénes le imitaron.

Por un segundo el viento pareció desaparecer, las copas de todos los árboles alrededor dejaron de mecerse y el sonido de los pájaros u otros animales le secundó. Entonces el estanque cambió a un intenso color violeta, y las aguas se menearon agitadas a un punto en que las flores acuáticas fueron absorbidas por el remolino. El agua giró y giró eufórica, llena de fuerza comenzó a cambiar de colores, pasando por una hermosa gama de tonos cálidos hasta los fríos, yendo y viniendo, hasta que tomó impulsó y salió disparada por los aires cubriendo a los tres Nebesnny en una especie de domo.

Los espectadores abrieron sus ojos sorprendidos y un poco asustados al ver aquella barrera acuosa que les impedía saber lo que sucedía dentro.

-Teyra ha aceptado la unión- exclamó el Sabio en tono fuerte y certero hacia todos los presentes.

El domo se volvió blanco como las nubes, se serpenteó rápidamente como una fuente inagotable de agua y de un solo golpe se detuvo. Alrededor del estanque el pasto volvió a crecer, en esta ocasión acompañado de flores de tonalidades blancas todas lo suficientemente juntas como para cubrir el suelo creando la ilusión de ser un manto blanco. Los pájaros en los diversos árboles trinan al unisonó en un cántico sonoro que remueve la tierra y entonces el domo explota, agua cae de los cielos convirtiéndose en cientos de mariposas de diversos tamaños y colores. Mariposas que revolotean como si fuesen un grupo de aves volando juntas, ellas se mueven por todo el espacio y finalmente se dispersan permitiendo que vuelva a verse el interior del estanque.

Ahí, los tres jóvenes se encuentran en el centro, con las ropas totalmente secas, aunque el agua este fluyendo a la misma altura que cuando entraron. Lo atrayente y sorprendente no es ver como el agua no toca sus pieles ni las telas de sus ropajes, sino las hermosas marcas en las muñecas derechas -justo donde se encuentra el pulso- de los tres.

-La marca del Brat'shi ha aparecido en la piel de los Nebesnny. Podemos dar por concluida esta ceremonia-

Las personas elevan sus manos al aire, y en lugar de gritar miran al cielo implorando un agradecimiento, por haber tenido la oportunidad y el regalo de observar tal unión.

Jimin puede ver los ojos de eterno agradecimiento de todas las personas que les acompañan, unas les observan con aceptación, les regalan sonrisas llenas de felicidad, otras, permanecen con su vista al cielo agradeciendo, casi los puede ver ponerse de rodillas.

Una mano se posa en su hombro, él regresa la mirada encontrándose con los rostros de los alfas. Hermosas e invaluables sonrisas creadas por sus labios, las heridas en los brazos de los tres se han curado.

-Es oficial. Somos hermanos del alma- exclama Namjoon con completa alegría.

Los tres se abrazan llenos de euforia y felicidad juntando sus cabezas.

***

-Entonces ¿Va a permanecer en tu piel para siempre?-

-Así es-

Taehyung le acarició la muñeca con ternura, delineando la marca.

-¿Dónde están los gemelos?-

-Jugando con Jungkook. Esos dos pequeños diablillos traman algo, y la pequeña Yuqi los estas secundando-

-¿No vas a hacerles compañía?-

-En un momento iré con ellos-

Jimin le acarició la mejilla a su mejor amigo con ternura, obteniendo dos preciosos orbes miel observándole.

-¿Qué sucede?- preguntó el menor.

-Nada. Solo luces extrañamente bien hoy, y hueles a leche- tras terminar la frase sobre abrió los ojos mirando al castaño -Taehyung, tú-

Aquella hermosa sonrisa simétrica se formó elevando sus pómulos.

-Estoy embarazado-

Jimin ahogó un grito no queriendo alertar a las personas cercanas a ellos, y abrazó a Taehyung por el torso pegando su mejilla al hombro de este al ser de menor estatura.

-¿Desde cuándo? ¿Por qué no me habías dicho?- se alejó un poco sin romper el abrazo para buscar la mirada.

-Mes y medio, tal vez dos. Jungkook fue el que comenzó a notar el cambio de olor hace dos semanas, así que le pedí a Jihoon Hyung que me hiciera una prueba, apenas hace cuatro días me lo confirmó. Quería esperar a que pasase el Brat'shi para decirte, pero creo que mi aroma es muy fuerte-

Cierto, Taehyung no poseía un buen olfato.

-No te preocupes, yo... Estoy tan feliz- observó el vientre de Taehyung, todavía era muy pequeño y la camisa holgada que traía lo cubría aún más -Voy a ser tío de nuevo- le volvió a abrazar.

-Jimin-

-¿Sí?-

-Si es niña quiero que se llamé Joohyun, y si es niño Beomgyu-

-Como los hermanos de Hyung- se separó -¿Estás seguro?-

-Completamente. Ese hombre te salvó, este Jimin que estoy viendo ahora jamás lo habría visto sino hubiese sido por su ayuda- expresó con certeza -Además, nos ha permitido quedarnos aquí, Jungkook tiene un buen trabajo en el clan y mis hijos no tienen que crecer bajo normas tan radicales y opresoras como lo harían en Busan. Quiero darle a este pequeño uno de esos nombres en agradecimiento-

-Comprendo. Si esa es tu decisión está bien Tae-

-¿Crees que haya algún problema? Yo pedí el consentimiento a Jihoon Hyung en cuando me confirmó que esperaba un bebé, pero aún no le he preguntado a Yoongi Hyung ni a la alfa Chaerin-

-Umh, yo creo que no habrá problema con Hyung, acerca de la alfa... Hablaré con ella-

-Gracias Minnie- recibe un beso en la frente -Enserio espero que sus respuestas sean positivas-

-Lo serán- rompió el abrazo para tomarle las manos -Promete que me dejarás acompañarte en este proceso-

-Por supuesto, no lo querría de otra forma-

-¿Qué te ha dicho Jungkook?-

-Esta emocionado. Desde hace tiempo ambos queríamos otro bebé, pero como continuábamos en Busan nos absteníamos de tenerle-

-Estoy muy feliz por ustedes ¿Sol y Do, ya lo saben?-

-En un rato se enterarán ¿Qué hay de ti? ¿Lo hablaste con Yoongi Hyung?-

-Yo...

-¡Jimin! ¡Jimin! ¡Ayúdame!-

Vio a Hoseok correr hacia él con el cabello agitado y una expresión de susto, dio zancadas escondiéndose tras su espalda buscando ocultarse. Como si eso fuera posible. El alfa le sacaba al menos unos quince centímetros de cabeza y su cuerpo era considerablemente más ancho que el propio.

-¿Qué sucede Hyung?- sintió como el mencionado colocaba las manos sobre sus hombros desnudos.

-Ellos no me dejan tranquilo- susurró asustado -No han parado de seguirme-

-¿Quienes?-

-Los blancos-

-¿Los blancos?-

-Los que se parecen a ti, pero en una versión más grande-

Jimin comprendió a qué se refería Hoseok cuando vio a Jin y Namjoon caminar hacia ellos con pasos decididos y la mirada fija en su amigo, ambos pares de ojos casi brillaban en violeta.

-Él es nuestro- dijo Namjoon, apenas llegaron a dónde ellos.

-No se supone que debería sonar así- le regañó Seokjin.

-No he dicho nada que no sea cierto, es nuestro-

-Ni siquiera los conozco-

-Él es Seokjin, yo son Namjoon, y eres nuestro compañero-

Pudo escuchar un pequeño chillido ahogado proveniente del alfa de hebras rojizas.

-Pero yo soy un alfa, y ustedes dos también-

-Eso no importa, no para nosotros-

Seokjin dio un paso más hacia adelante. Los dedos de Hoseok se hundieron con fuerza en los hombros desnudos del omega.

-¿Tú también lo sientes? La atracción y la necesidad ¿No es así?-

-¿Lo haces?- insistió Namjoon.

-Hay- comenzó el tono bajo -Hay algo que me llama hacia ustedes. Tengo la necesidad de abrazarlos, y de darles un beso, pero pensé que era cosa mía-

-No lo es, tu alma está llamando a las nuestras-

-Jin y yo nos hemos encontrado hace un par de meses, y cuando quisimos enlazarnos nos dimos cuenta de que nos hacía falta algo, alguien, hoy cuando llegaste percibimos tu aroma. Tú eres lo que nos hace falta-

-¿Tienes algún problema con que los tres seamos alfas?- consultó el mayor de los presentes. Una preocupación disfrazada se podía encontrar en lo profundo de sus iris.

-No, es solo que yo, estoy un poco confundido, no sé... Esto es tab repentino, yo...

Jimin colocó su mano sobre la del shifter ardilla.

-Puede tomárselo con calma. Estoy seguro de que Jin y Nam Hyung no van a presionarle en nada, pero debe saber que la decisión que elijas ellos van a cuidar bien de ti Hoseok Hyung-

Hoseok se movió a manera de que sus rostros pudieran encontrarse.

-Espera ¿Por qué estas tan tranquilo? ¿Por qué lucías hace ratos tan... ¡Lo sabías! Por eso insististe en que viniéramos- exclamó acusatoriamente.

El omega rio bajito cubriendo su boca con la palma de su mano.

-No. Lo hice porque enserio quería verlos y que conocieran mi nuevo hogar-

-Y porque lo sabía- a completó Seokjin -Si no lo sabes, los omegas albinos pueden ver parte del futuro. Él nos dio entender hace un tiempo que probablemente éramos un caso de Menage, pero no quiso darnos más detalles-

-Si les decía iban a irle a buscar hasta Gwangju-

-No es así-

-Ustedes fueron en busca de Sick cuando el aquelarre se incendiaba solo porque él me hizo un rasguño en la mejilla. Estoy seguro de que lo habrían hecho-

-Sick merecía morir, nadie lastima a nuestro hermano y sale impune-

-Estoy completamente en acuerdo con Namjoon-

Jimin elevó una de sus albinas cejas con una expresión que decía "Lo ven"

-Pero tal vez tienes un poco de razón ¿Por qué no le dijiste a él?-

-Porque ustedes tres tenían que conocerse y darse cuenta en persona, esa es la parte ensoñadora cuando encuentras a tu compañero, compañeros en este caso-

-Eres una cosa muy inteligente snowball- agregó Hoseok volviéndose a incluir en la conversación.

-¿Snow qué?-

-No es nada-

-Hyung ¿Qué es eso que dijo?-

-Te lo diré otro día-

Hoseok se colocó frente a los dos alfas. Miró primero hacia Seokjin, observando sus hermosos ojos azulados que le miraban con un cariño anhelante, volvió la mirada ahora a Namjoon, quien también poseía ojos del mismo color, pero en una tonalidad más oscura, él lo miraba con un anhelo ardiente. Los dos hombres prácticamente se lo comían.

Hoseok silbó bajito.

-Debo confesar que creí que me quedaría con Hyungwon sembrando plantas toda mi vida-

Los analizó de arriba hacia abajo con mayor atrevimiento. Él liberó un par de feromonas, no tan intensas como las de un omega, pero si lo suficientemente notorias para los alfas dragón. Su aroma era considerablemente suave, pero dejaba a relucir su recién descubierto entusiasmo al estudiar a sus potenciales parejas.

-Ustedes me agradan, son como una versión más TallBig de Jimin y él es muy lindo y baddas- Seokjin y Namjoon sonrieron, Jimin frunció el ceño porque no comprendía ciertas palabras que el pelirrojo estaba utilizando, sin embargo, no cuestionaba nada, pues por las sonrisas de los otros dos albinos estaba seguro de que debía ser algo agradable, tal vez un cumplido. Luego preguntaría -Pero no soy alfa fácil, quiero una cita, varias de hecho, y muchas flores- declaró.

-Un gran ramo de flores por cada cita- dijo Namjoon.

-Mejor una planta en maceta, no se marchitan en un día y viven más-

-Bien, una maceta entonces-

-Y espero que les guste bailar, al menos uno de ustedes dos tiene que ser capaz de hacerlo. Si no esto no va a funcionar-

Jimin rio bajito recordando aquel baile en Gwangju. Hoseok andaba demasiado feliz debido a algo que había tomado, cosa que en la actualidad ya sabía se le conocía como bebida alcohólica, pero pese a tambalearse y hablar arrastrando las palabras bailó y bailó hasta que los dragones hicieron presencia y la fiesta terminó.

-Vas a bailar toda la noche hasta desfallecer, te lo aseguro- dijo Namjoon con firmeza y seguridad.

-Bien, vamos por la misma línea. Creo que podemos conocernos y descubrir si esto realmente puede funcionar-

-De acuerdo-

-¿Vas a quedarte?-

-Snowball nos ofreció quedarnos un par de días ¿Verdad?- Jimin asintió, recordando que minutos atrás el alfa de hebras rojizas había utilizado dicho termino para referirse a él.

-Quiero que conozcan el clan, la alfa Chaerin me dio su aprobación-

-Perfecto- comentó Namjoon -Es perfecto para que...

- ¡JinJin!- una aguda e infantil voz atrajo la atención de los cuatro.

Yuqi corría hacia ellos, con su overol blanco que llegaba hasta sus tobillos, y una camisa de manga larga del mismo color. Seokjin le había intentado convencer de que usara vestido, ella siempre andaba en shorts o pantalones debido a que jugaba mucho y se movía por todos lados. Quería verla usar un vestido de nuevo, pero la pequeña se negó argumentando que después de la ceremonia jugaría con Solar y Doyoung, si utilizaba vestido no podría moverse a gusto. Ni Seokjin ni Namjoon intentaron persuadirla de más.

-¿Qué sucede nena?-

Hoseok miró a la pequeña de cabellos anaranjados pegada a la pierna de Seokjin.

-¿Tenemos una hija? ¿Cuándo sucedió eso?-

-Ellas es Yuqi, una vampiro. La he criado estos últimos años, sus padres eran amigos muy cercanos míos-

Hoseok asintió. Inclinándose hasta poner una rodilla en el suelo para así quedar a la altura de la pequeña, que lo miraba con esos enormes ojos naranjas que parecían un par de clivias recién floreadas.

-Pero que hermosa estás ¿Te gustan las flores?-

-Me gustan las flores de la casa de mami-

-¿Mami?-

-No deja de repetir que Jimin es su omma- comentó Namjoon -Ya le hemos dicho que no es así-

-Si lo es ¿Verdad omma?- preguntó la pequeña mirando con cariño a Jimin.

-Por supuesto cielo-

-Ya no caigas en su juego Jimin, es una chantajista-

-Deja a Yuqi tranquila-

-¿Ya vas a defenderla de nuevo, Jin? ¿Enserio?-

-¿Ya vas a comportante como un niño de nuevo, Namjoon? ¿Enserio?

Hoseok rio con fuerza atrayendo la atención de los presentes. Entreabrió los ojos encontrándose con la mirada de la pequeña.

-¿Ellos siempre son así?-

-Todo el tiempo- ella ladeó el rostro -¿Tú serás el padre responsable?-

Los ojos del alfa se abrieron un poco más de la cuenta.

-¿Cómo?-

-Siempre que Jinjin está feliz desprende un tipo de feromonas diferentes a las normales, y lo está haciendo ahora al igual que Joonie ¿Tú vas a ser mi otro papá?-

-¿Eso quiere decir que desde ya me estas aceptando?-

-Depende- declaró.

-¿De qué?-

-Sabes jugar a las escondidas. Jinjin y Joonie son muy malos-

-¡Oye!- exclamaron con indignación los mencionados.

Hoseok volvió a reír.

-Soy excelente jugando a las escondidas. Soy una ardilla-

-¡¿Enserio!- los ojos de la pequeña brillaron emocionados -Puedes saltar de árbol en árbol como si estuvieras volando-

-Así es. Y sí, puedo hacerlo- él quiso correr uno de los mechones naranjas que colgabas a los costados de la cara de la pequeña, pero no se atrevió, sentía que era muy apresurado de su parte tomarse esa confianza -Aunque no puedo prometer ser el padre responsable, pero jugaremos todas las veces que quieras-

-Está bien- ella asintió convencida -¿Vendrás a casa con nosotros?-

Hoseok elevó el rostro buscando ayuda en las miradas de Seokjin y Namjoon, ellos tampoco parecían saber que decir.

-Hoseok Hyung aun no puede ir a vivir contigo cielo- Jimin se acercó acariciándole los cabellos -Él tiene un hogar al que volver-

-¿Cómo appa y tú? Que viven En el Castillo en el cielo-

-Exacto. Él también tiene su Castillo en el cielo en un lugar lejano, pero tal vez en un tiempo venga a vivir con ustedes-

-Pero si se va no podremos jugar a las escondidas- ella infló las mejillas en reproche.

Hoseok se atrevió a tomar una de las pequeñas manos de la niña.

-Yuqi ¿Recuerdas al chico que estaba a lado de mi hace ratos?-

-¿El chico uva?-

-¿Chico U... Oh si, justamente él- ella asintió -Él es tu tío, el tío Hyungwon. Él y yo vivimos juntos desde hace mucho tiempo, no sería correcto que lo abandonase sin más ¿No crees?-

-Él podría vivir con nosotros-

Todos sonrieron ante las palabras de la niña.

-Tal vez, está bien sí por el momento jugamos los siguientes días y volvemos a hablar de ello después-

Ella pareció pensarlo, su rostro evidenciaba que no estaba convencida.

-Jugaremos todo el tiempo que quieras- Hoseok elevó su dedo meñique, a lo que la pequeña también acercó el suyo enredándolos en una promesa.

-De acuerdo, pero vamos a jugar todos los días-

-Acepto-

Ella le apretó la mano. Hoseok le regresó el gesto con una sonrisa y se reincorporó.

-Así que somos familia después de todo- dijo hacia Jimin.

-Parece ser que si-

-Entonces Hyungwon es el nombre del chico de hebras moradas que viene contigo-

-Así es. Es mi mejor amigo, hemos vivido juntos desde que éramos pequeños y llevamos más de cinco años trabajando en la florería-

-¿Dónde está él ahora?-

-Umh, un alfa de ojos finos y un omega de hebras castañas se acercaron a él hace ratos a ofrecerle una bebida-

Jimin casi estaba seguro de que hablaba de Jooheon y Changkyun.

-Y Coraline Rabbit y Hyelin, las chicas que venían conmigo también. Ellas estaban hablando con la amiga de vestido rojo de Jimin-

Sojin sin duda alguna. Jimin estaba seguro de que ellas iban a congeniar, Wheein tenía también un carácter fuerte, y Hyelin era una alfa que siempre andaba vestida como modelo, algo que a Sojin le gustaba.

-¡Appa!- la niña salió corriendo.

Los cinco pares de ojos la vieron dar un par de zancadas con sus zapatos blancos hasta enredarse en una pierna. La de Yoongi.

-¡Appa! ¡Appa!- gritó ella emocionada.

Yoongi se le quedó viendo, pareció decirle algo.

-Se me olvido decir. La gremlin adora a Yoongi- susurró. Namjoon cerca del oído de Hoseok.

-No le llame así Hyung- reprochó Jimin.

-¿Ves? Tú también la defiendes- posó una mano sobre el hombro de Hoseok atrayendo su atención -¿Dime que tú serás el compañero buena onda que no cae ante los ojitos de ese torbellino?

Hoseok observó a Namjoon.

-Pero ella es tan linda-

-Ya caíste, ya caíste. Te he perdido a ti también- dijo Namjoon con cierto tono dramático.

-Appa ¿Adivina qué?- comentó la infanta desenganchándose de la pierna del alfa para así tomarle la mano, hablando en un tomo más bajito e inclusive recto.

-Al menos con Yoongi se comporta-

-Ella suena demasiado formal- agregó Hoseok.

-Lo respeta mucho- dijo Seokjin refiriéndose a Yoongi -En la casa y con los demás no deja de correr y brincar, pero cuando esta con él es sumamente obediente y respetuosa-

-Bueno, yo también lo sería, la primera vez que conocí al alfa de Jimin, a Hyungwon y a mi nos temblaba todo-

Namjoon y Jin voltearon a verlo con el ceño levemente fruncido. Oh, Hoseok olfateó los celos en el aire sin disimulo alguno.

-No lo decía de esa forma. Las feromonas de ustedes los dragones son demasiado fuertes, hasta para mí que también soy alfa me afectan. Y las de él son muy imponentes-

-Bueno, en eso debo darte algo de razón, las feromonas de Yoongi son especialmente más fuertes. No comprendo ¿Cómo no te afectan?-

Jimin ladeó el rostro encontrándose con las miradas de los alfas.

-¿La pregunta es hacia mí?-

-Claro, tú convives más tiempo con él, y no pareces ni un poco afectado-

-Bueno, es que yo no siento las feromonas de Hyung tan fuertes- respondió con sinceridad.

-¿Enserio no...

-Él es mi otro padre- interrumpió la pequeña sacándolos de su conversación.

Se dieron cuenta de que Yoongi y Yuqi ya se encontraban frente a ellos.

-Puede convertirse en una ardilla- agregó ella con entusiasmo y una sonrisa que podría verse a distancia.

Yoongi elevó la mirada hacia Hoseok, asintiendo en forma de saludo, el contario le respondió con una pequeña inclinación y la mirada desviada, dejó de miraralo para encontrase con los ojos de Namjoon y Seokjin.

-Felicidades por el Brat'shi -

En cuando dijo eso, tanto Seokjin como Namjoon hicieron una reverencia de poco más de noventa grados.

-Gracias por permitirnos este enlace, tienes nuestra palabra de que en tu ausencia y aun ante tu regreso nada va a ocurrirle, vamos a protegerle hasta el final-

Yoongi asintió con la cabeza en modo de agradecimiento.

-Namjoon- le observó fijamente.

-Sí- dijo a la par que enderezaba la columna.

-Mide lo que hablas con mi compañero-

La saliva se le atoró en la garganta al mencionado, quien un poco más y comenzaría a toser.

-Cla-Claro-

El alfa de ojos verdes iba a volverse hacia Jimin cuando una aguda voz interrumpió.

-Yoongi appa ¿Puedes poner un bebé en Minnie omma?-

Namjoon tosió repetidas veces mientras a Hoseok se le pintaban las mejillas de un tono cercano a su cabello y Seokjin abría los ojos a una magnitud que parecía que saldrían de sus cuencas.
Taehyung quien se mantuvo ausente de la conversación, ahogó un sonido de sorpresa.

-¡Yuqi! ¿Qué estás diciendo?- exclamó apenado el mayor de los presentes.

-Quiero un hermanito ¿Me lo darás?- miró a Yoongi -¿Si?- esta vez lo hizo hacia Jimin.

El omega se sentía un poco acalorado, la petición que menos esperaba que la pequeña hiciera fue dicha. Lo estaba más, porque en todo este tiempo no habían vuelto a hablar acerca de ello.

-Appa...

Ella observó a Yoongi, expectante y ansiosa por una respuesta. Yoongi se inclinó un poco ante ella.

-Hablaremos de eso en otro momento ¿Puedes ir con con tus amigos un momento?-

Ella pareció pensarlo, pero cuando Yoongi picó su nariz con ternura las dudas se disiparon. Ese toque en su nariz era el único gesto cariñoso que el alfa hacía hacia ella, en la mente de la pequeña Yuqi era como recibir un abrazo, porque ella sabía que su padre de ojos verdes no era tan afectivo como los demás.

-Está bien Appa- ella le hizo una reverencia antes de retirarse sin discutir o decir algo más.

-Que injusto, yo me lanzo una pelea de media hora para hacer que entre al baño y en menos de un minuto la convenciste de que se marchara- expresó Namjoon con un pequeño puchero.

Yoongi no respondió nada, en cambio buscó establecer contacto con su compañero.

-Ya es hora Jimin-

Con esa simple frase la pequeña sonrisa en los labios del omega desapareció.

-Nosotros nos retiramos, estos dos white scales me van a invitar uno de esos tragos servidos en esos tarros de madera- Hoseok cogió por la muñeca a cada alfa tirando de ellos.

-¿Bebes?- preguntó Namjoon, quien al igual que Seokjin se dejaron hacer siguiendo al shifter ardilla.

-Les dije que las citas son para conocernos-

-¿Estamos en una cita?-

-Sí, y se están demorando en ofrecerme una bebida. No están haciendo muchos meritos-

Cuando las voces del trío se alejaron al punto en que fue imposible seguirlas oyendo Taehyung habló.

-Yo también me retiro. Que tenga un buen viaje Yoongi Hyung, y un retorno próximo- realizó una reverencia.

-Gracias-

Taehyung sonrió retirándose. Jimin comprendió que se abstuvo de hacer la pregunta sobre los nombres de los hermanos a Yoongi porque no era el momento. La mirada del alfa se posó sobre él.

-Alfa-

-No he tenido oportunidad de decirte lo hermoso que te vez hoy- comentó el alfa mirándole de pies a cabeza -Aunque no recuerdo haberte comprado ese vestido-

-Lo conseguí en la frontera con Ulsan hace un par de días-

-Comprendo. Luces precioso... Y ese collar-

-¿Le gusta? Quería llevar algo suyo-

-Me agrada... Mucho- dijo mientras extendía la mano para acariciar la mejilla derecha del omega con el dorso.

Jimin se recargó dejándose hacer por el mimo, le gustaba demasiado cuando Yoongi le mimaba, acariciando sus mejillas, haciendo remolinos en su cabello, o frotando su vientre. Su pecho se contrajo sabiendo que iba a pasar un buen tiempo antes de volverlas a recibir. Por ello talló su mejilla contra la mano del mayor tanto como pudo, aplazando el momento.

El alfa le dejó ser durante unos minutos, paseando sus dedos por la albina piel, perfilando el puente de la nariz del omega, así como sus pómulos y el contorno del rostro, hasta que se detuvo.

-Yoongi- dijo en un tono bajito y suave mirando fijamente a los orbes pino que le regresaban la mirada.

-¿Vas a cuidar de nuestro hogar?-

-Por supuesto- respondió con firmeza.

-¿Cuidaras el regalo de Yeo?-

-Claro-

-¿Cuidaras de ti mismo?-

Le llevó unos segundos responder.

-Yo... Eso haré-

Yoongi le acarició los cabellos.

-No estés triste-

-No lo estoy-

-Hasta hace cinco minutos los rayos del sol golpeaban a todo lo que podían, ahora está nublado y las nubes grises cargadas de lluvia-

Jimin mordió su labio inferior con cierta exasperación, esta conexión tan profunda con la madre naturaleza y su pésimo control sobre sus emociones a veces no resultaba en una buena combinación.

-No puede pedirme que no me sienta así cuando estás por irte-

-Jimin...

El omega interrumpió.

-Aun puedo irme contigo- dijo firme -Estamos a tiempo, si tú me lo pides...

-Ya hablamos de eso cachorro- interrumpió el mayor -Debes quedarte aquí-

-Hyung...

-No cielo, no está a discusión-

Suspiró profundo. Yoongi nunca le ha negado nada, pero estaba seguro de que estaba vez no sería así. El alfa no iba a permitirle acompañarlo, dijera lo que dijera.

Bufó bajito y miró al mayor con resignación.

-¿Puedo hablar con tu dragón? Será solo un momento- abultó los labios -Concédeme eso ¿Si?-

-De acuerdo, pero solo uno momento-

Asintió en respuesta.

Unos segundos pasaron antes de que los ojos pino fuesen reemplazados por unos ámbar con la pupila alargada. El dragón observó sus manos humanas con curiosidad y extrañeza, al parecer estaba descubriendo que se encontraba al mando.

-Nyynevi-

Los ojos ámbar dejaron de observar las manos para mirarlo a él con una notable y poca común expresión de confusión en el rostro. Claro, el dragón en si era por mucho más expresivo que Yoongi.

-Es la combinación de ideal'nyy y gnev que quiere decir ira perfecta, porque tú eres perfecto- comentó con cierta timidez -¿Te gusta? Creí que llamarte solo "Dragón" no sería agradable-

El alfa dio un paso hacia él.

-Me... Gusta- la voz del dragón era más rasposa y grave, pero tenía un cierto toque de gentileza que la hacía contrastar.

Sonrió satisfecho ante esa respuesta. Llevaba días pensando en ello, en darle un nombre al dragón de Yoongi. Claro que era consciente de que este ya tenía varios sobre nombres dados por los clanes y las provincias alrededor de Daegu, pero todos tenía la connotación peligro impresa, no eran nombres agradables.

Sintió la mano derecha del mayor posicionarse en su cadera atrayéndolo hacia su pecho, la otra subió desde atrás hasta su cabeza, comenzado a acariciarle el cuero cabelludo, como aquella vez en que se encontraba en la palma del dragón. Los dedos -ahora- humanos masajeaba su cráneo con delicadeza.

-Bi ¿Bien?-

-Sí, es perfecto- respondió en un diálogo que estaba seguro de que el dragón recordaba, obtuvo esa confirmación cuando vio los ojos ámbar brillar aún más.

El alfa tiró de él acercándolos, haciendo que sus pechos se pegasen.

-Nyynevi, por favor obedece a Hyung- él no pareció muy contento con esa petición. Decidió intentar algo -¿Quieres volverme a sostener un tu mano?- casi pudo ver la emoción disparada de los orbes ante esas palabras, lo sabía. Era más sencillo convencer al dragón de Yoongi a que este mismo. Decidió proseguir -Yo quiero que me sostengas de nuevo, y si obedeces a Hyung estoy seguro de que él te dejará hacerlo ¿Lo harás? ¿Obedecerás?-

El alfa chasqueó la lengua con un poco de fastidio, pero finalmente asintió, mirándole con toda honestidad, casi prometiéndole que cumpliría su petición.

-Lengua- dijo repentinamente.

-¿Lengua?-

-Lengua- volvió a decir.

-¿Quieres intentar ducharme como esa vez?-

Negó.

-Lengua- repitió.

Jimin no comprendía.

-Celo-

-¿Celo ¿Mi celo?-

El alfa afirmó. Siguió sin comprender.

Antes de tan siquiera intentar preguntarle al alfa lo que intentaba decirle el fuerte aroma del mayor entró por su nariz ¿Era así de penetrante e intenso hace unos minutos? Jimin no estaba seguro de que fuese así, pero si lo estaba del calor que comenzaba a sentir su cuerpo. Así como de sus pequeños pezones que comenzaban a encresparse y endurecerse bajo la tela de satín. Sus piernas temblaron y la humedad amenazó con brotar de una zona inferior íntima, tuvo que apretarlas. Sintió unas uñas largas raspando, acariciando su vientre por encima de la tela, estaban alargadas ¿En qué momento se pusieron así? Tampoco lo sabía, pero se estaban presionando contra su vientre.

-Nyynevi- iba a romper la prenda si continuaba con eso.

El aroma del alfa se volvió aún más intenso, enviando un tirón a su columna vertebral. Cielos, Jimin sentía que un jadeo estaba atorado en su garganta, empujándose molesto por salir de una buena vez junto a su aliento caliente. Y lo hubiese hecho de no ser porque el aroma contrario disminuyó de golpe, así como la temperatura en su cuerpo y el ajeno.

-¿Estas bien?- parpadeó varias veces de manera lenta, reconociendo el tono de voz de quien le hablaba.

-Hyung- susurró con la voz levemente adormecida.

-Disculpa esa estupidez-

-¿Qué sucedió?-

-Mi celo esta próximo. Ese estúpido dragón te estaba molestando-

Haciendo cuentas de aquella conversación que tuvieron, era probable que en un par de días, tal vez una semana el celo del mayor llegase. Un celo que duraba todo un mes, lo tenía muy presente.

-Hyung ¿Vas a estar bien?-

-Lo estaré cachorro-

Jimin era consciente de que en estos momentos no sería capaz de ayudar al alfa como este lo hizo cuando el celo le vino, y no porque le diese miedo, sino porque no sabría cómo tratar al mayor. Sin embargo, eso no era impedimento para que se sintiera un tanto inquieto con la idea del mayor estando en celo lejos. No comprendía el por qué, pero su parte omega no estaba nada contenta con ello, y en cierta-extraña forma él estaba de acuerdo.

-Jimin-

-¿Umh? ¿Si Hyung?-

-Te perdí por un momento ¿Estas bien? -

-Lo estoy- se mordió la mejilla interna -Hyung, ten cuidado con tu celo-

-Lo tendré cachorro-

Jimin asintió en respuesta y entonces le extendió un pequeño sobre de color amarillento que había encargado a Sojin antes de la ceremonia y que después de ella volvió a obtener.

-¿Qué es esto?- preguntó tomando la carta.

-El Gran Sabio me pidió que te la entregará. Dijo que no la abrieras hasta que cumplas años-

-Eso será en un par de meses, podrías dármela cuando nos veamos-

-Lo sé, pero él enserio me insistió en que debías llevártela desde ahora-

-De acuerdo- dobló un poco la carta introduciéndola en uno de los bolsillos tarseros de su pantalón.

-Realmente no quiero que te vayas-

Yoongi solo le colocó una mano sobre el hombro y besó su frente por debajo de la corona de flores.

-Vas a estar bien, Jimin. Eres fuerte. Hay más coraje y valentía en ti de lo que crees

-Es gracias a ti-

-No, es tuya. Solo tuya- enfatizó -Los demás y yo solo te ayudamos a descubrirla, pero te pertenece a ti- le sostuvo de los hombros apretándoselos con seguridad -Eres un omega fuerte. Nunca olvides eso-

Asintió, cielos, adoraba tanto cuando Yoongi le dedicaba ese tipo de cumplidos. Le hacía sentir como si el alfa confiara plenamente en él y en sus capacidades.

-Voy a hacerte una petición-

-¿Cuál?-

-No quiero que me lleves en tus pensamientos de forma constante- el bonito ceño del omega se frunce al escuchar eso.

¿Por qué no lo haría? Es su alfa quien está por irse, su compañero y la otra parte de su alma. Es imposible no pensar en él.

-Cántales a tus flores, entrena con Chaerin, aprende nuevas cosas con el Gran Sabio, enséñales el lugar a tus amigos de Gwangju, convive con los demás, incluso, visita la frontera con Ulsan si deseas volver a hablar con los chicos que conociste ahí- Yoongi le sostiene el rostro por el mentón acariciándole la barbilla con el dorso del dedo -Disfruta de ellos y de este lugar en estos dos años. Cuando mi sanción concluya vendré por ti y te llevaré a conocer el mundo-

-¿Lo dice enserio?- sus ojos chispearon emocionados.

-Lo hago, vamos a ir a todas partes. A cualquier lugar que quieras conocer-

-A Jeolla-

-¿Quieres volver ahí?-

-A visitar a Youngjae Hyung-

-Bueno, si ese es tu deseo haremos la primera parada ahí-

-Gracias Hyung-

El alfa sonrió solo elevando la comisura del lado izquierdo.

-Ya debo...

-No, aun no... Por favor- tomó la mano del mayor.

Yoongi negó levemente, rodeó al contrario por la cintura con ambas manos y lo acercó a su cuerpo.

-Jimin, abre tus labios cariño- obedeció.

Yoongi unió sus bocas en un beso.

La lengua del mayor de adentró en su cavidad buscando la suya, Jimin la extendió dejándose hacer ante los movimientos circulares que la contraria hacía.

Jimin saboreó el Elkisering de la boca ajena. No le permitieron beber, pero Yoongi había tomado un par de tarros demostrando su buena resistencia al alcohol. El sabor era tan dulce y amargo a la vez, jamás había probado algo así y en conjunto con la esencia de ambos era una mezcla demasiado intensa. Lo estaba envolviendo en un vértice de placer.

La punta del músculo rosado tocó su campanilla.

¿Cómo?

Sintió dos cosas acariciándola.

Por la vida. Yoongi había cambiado su lengua normal por la reptiliana. Lo que estaba acariciando su campanilla y se empujaba hacia su garganta eran las dos bifurcaciones de la larga lengua.

-Ahg~

Ellas estaban tocando la tierna y húmeda cavidad, acariciando una zona técnicamente imposible de palpar, y eso por el contrario de causarle nauseas lo estaba mareando de una forma que nunca antes había sentido. Tuvo que enterrar los dedos en la camisa del mayor al no encontrar otro sostén pues sus piernas temblaban.

La lengua continuó palpándole la garganta y la campanilla, moviéndose tan ágil y escurridiza. Se sentía familiar, como si ya antes la hubiese sentido. Un par de caricias más y el musculo se retiró dejando una sensación de vacío y llevándose un suspiro de su parte.

-No es justo- protestó aun sosteniéndose con fuerza de la camisa del mayor pues las piernas no le respondían -Hizo esa cosa con la lengua y liberó feromonas-

-¿Funcionó?-

Asintió todo ido y con la visión borrosa, tenía tantas ganas de llorar, y no de tristeza.

-Umh~ ronroneó afirmando con la cabeza, se sentía muy relajado, como si su cuerpo no pesase absolutamente nada.

-Inhala profundo, no querrás que los demás se den cuenta-

Sus mejillas se sonrojaron. Ladeó el rostros agradeciendo que las personas se encontraran un poco apartadas de ellos, de otra forma habrían percibido la exitación en sus feromonas.

-Es... Su culpa- reprochó.

Yoongi sonrió, se acercó al oído derecho del menor y susurró en voz ronca.

-Pórtate bien cachorro. Vendré a verte en seis meses-

Le besó la frente antes de retirarse. Sorprendentemente las piernas no le fallaron y consiguió mantenerse en pie.

Durante diez minutos permaneció en la misma posición, con el bullicio a sus espaldas y las conversaciones inentendibles que iban de boca en boca. Se quedó observando como la silueta del mayor se hacía más pequeña a cada paso hasta que no fue capaz de verlo más.

Ya más respuesto, el pecho se le encogió y las nubes se volvieron más oscuras. Trataría de evitar que la lluvia llegase a Daegu. Al menos por hoy lo intentaría, porque no podía asegurar nada los siguientes días.

Cuídate... Mi ira

***

Un mes después

-¡Arg!-

-Inhala profundo, hasta acá puedo escuchar tus latidos. Tienes que controlar tu respiración-

Miró hacia la mujer de hebras oscuras y ojos verdosos. Era su cuarta semana entrenando con ella y sentía que la vida se le iba.

Chaerin era dura. Le hacía despertarse todos los días a la seis de la mañana sin tregua alguna. Siendo consciente de su falta de ganas por correr, ella le obligaba a correr durante una hora por todo el bosque mientras le perseguía. La velocidad de la mujer era increíble en su forma humana, sumamente veloz y ágil, pasaba la superficie irregular del bosque como si fuese un terreno plano y liso. Siempre lo capturaba.

Ella también le obligaba a hacer acondicionamiento todos los días antes de comenzar el entrenamiento. Series de ejercicios que eran varios y específicos para fortalecer cada músculo. Sintió que iba a desfallecer la primera semana, el entrenamiento con Yubin había sido una caricia a lado de la forma de entrenar de la alfa.

Cuando ellos terminaban de acondicionar el cuerpo, empezaban a entrenar. Lo que fuese que escogiera, arco, lanzamiento de lanza, manejo de escudo, combate cuerpo a cuerpo, lo que fuese ella lo llevaba hasta el límite haciéndolo entrenar por más de tres horas consecutivas.

Él terminaba jadeando, con los pulmones colapsados y los músculos engarrotados, mientras ella apenas soltaba una gota de sudor y una especie de suspiro que más bien era un burla.

Ya podía ver de dónde Yoongi sacó esa exigencia al momento de entrenar.

Ella era un monstruo en ello, y le agradaba.

El algún momento Jimin le había preguntado si estaba bien que entrenarsen todos los días y por tanto tiempo. Ella era la líder del clan, y seguramente tenía otras ocupaciones. Chaerin solo le respondía cosas como: No obstruye en mi trabajo, no tengo algo que atender hoy, pero en una ocasión, ella le había dicho "Tienes espíritu de guerrero, voy a ayudarte a ser más fuerte". Aquella vez se sintió sumamente contentó, no solo por el cumplido, sino porque se sentía familiar, como si ella se abriese a él.

Chaerin era una alfa de carácter, nunca sonreía y era muy formal con todo su clan, incluso con la gente cerca de su círculo, algo que había notado en las últimas semanas que convivían más. A Jimin le agradaba, no por ser la madre de su alfa, sino porque la mujer por si sola le generaba un respeto y una admiración natural. Realmente deseaba volverse más cercano a ella y a su vez que ella se abriese más a los demás.

Sintió un empujé y arqueó su espalda sintiendo el viento del golpe pasar frente a su rostro.

-Concéntrate-

Fue lo único que dijo antes de volver a arremeter contra él.

Algo que también debía mencionar es que ella era sumamente exigente en cada rublo que entrenaban, y durante el combate cuerpo a cuerpo lo era más. Veloz, ágil, y a diferencia de Yoongi no media sus golpes, atacaba con toda su fuerza y vaya que sus golpes dolían. Los moretones que salían en su piel eran la clara evidencia.

Intentó retroceder para recuperar la compostura, pero ella no lo permitió, cada paso que él daba hacia atrás ella lo alcanzaba con una zancada y un golpe nuevo. Se reponía sumamente rápido.

Le tomó por el hombro con fuerza con la mano derecha para retenerlo mientras empuñaba la izquierda en un golpe impulsado desde atrás que iba directo a su costado. Ya sabía lo que iba a hacer, en cuestión de segundos Jimin dio una pequeña inhalación y se flexionó sobre ese costado recibiendo el golpe con sus dos manos. La fuerza y velocidad con que ese golpe iba casi lo hace trastabillar hacia atrás, afortunadamente sus piernas cada vez estaban más fortalecidas y resistentes, permitiéndole resistir la fuerza del golpe y no ceder a la caída.

-Has mejorado tu velocidad de reacción, pero aun te falta más fuerza en los puños. Bien hecho- dijo ella separándose.

Bien hecho. Ella lo alcanzó en menos de cinco segundos.

Chaerin rompió la postura terminando esa pelea más no el entrenamiento. Llevaban poco más de una hora, ella solo le estaba dando un respiro para que sus pulmones dejaran de contraerse y sus músculos no se agarrotaran.

Inhaló profundo calmado su respiración, permaneció en esa posición observando de reojo a la alfa. Chaerin era sumamente atractiva, sus absorbentes ojos verdes heredados a Yoongi, su tes clara, esas cejas delgadas que le daban un énfasis a su mirada, las facciones maduras, su cuerpo atlético con algunas cicatrices ya sanadas en piernas, brazos y posiblemente torso que en lugar de hacerle ver grotesca le pegaban increíble con su musculatura y tamaño.

Era hermosa, pero sin duda lo que más atraía la atención de ella en este momento era su cabello, su lacio y largo cabello negro. Desde que la conoció siempre le vio portándolo a la altura de los hombros, y solía recoger esas pocas hebras sueltas en una coleta pequeña, desde hace un mes o tal vez dos eso cambió. Ahora ella lo traía unos cinco o seis centímetros más abajo del hombro y sin ataduras de por medio, dejando que volase libre por a su alrededor. Sospechaba que Jihoon indirectamente tenía que ver en algo con ese cambio, él y la alfa acostumbraban a verse por las tardes en la zona del bosque hacia el oeste del clan. Lo sabía porque en una ocasión que caminaba por esa zona los descubrió.

Ambos eran discretos y frente al clan se seguían portando como si cada uno estuviese por su lado, pero Jimin estaba seguro de que cada vez estaban más liados. Tal vez cuando Yoongi volviese se encontraría con la noticia de que la orden de exilió de Jihoon estaba retirada. Él esperaba eso.

-Su cabello luce bonito- se atrevió a decir.

La mujer inclinó la mirada observando un par de mechones que caían rebeldes sobre su hombro.

-Gracias- sí, no esperaba más.

Jimin se enderezó.

-Líder Chaerin- ella le miró expectante elevando sus cejas -¿Lo estoy haciendo bien?-

-Aprendes muy rápido y eres muy consciente de los detalles que debes corregir, si continuas así en un año estarás listo para enfrentarte a lo que se te ponga al frente-

Escuchar eso le llenaban de entusiasmo.

-¿Puedo hacerle otra pregunta?-

-Adelante-

-La forma en la que me esta entrenado ¿Es como entrenó a Yoongi?-

Ella se giró por completo hacia él.

-No. Entrené a Yoongi no para volverse un guerrero como a ti, si no para controlar a su dragón. Fui más dura con él, y sus entrenamientos más desgastantes-

En este mes Jimin experimentó un cansancio y un dolor terrible debido a los entrenamientos tan pesados que la mujer le ponía, no deseaba ni imaginar como estaría su cuerpo si estuviera sometido a los entrenamientos que ella le dio a Yoongi.

-¿Quién es más fuerte, usted o él?-

-Por el momento yo, en un par de año es posible que se inviertan los papeles-

Chaerin tampoco era conocedora de que la ira en el interior de Yoongi venía con él desde que nació, pero al menos tenía muy presente que la fuerza y poder que su hijo poseía iba a crecer hasta sobrepasarla en algún momento.

-Porte en posición de nuevo- ordenó ella.

Si, el descanso terminó. Jimin se acercó, quedando a medio metro de distancia, iba a colocar sus brazos en posición cuando vio algo en el cabello de la mujer.

-Tiene una hoja alfa- instintivamente se inclinó hacia ella invadiendo el espacio personal, percibiendo su fuerte aroma a ginebra, tomó la punta de la hoja retirándola con cuidado -Listo- soltó la hoja permitiendo que el viento se la llevase. Volvió su mirada a la mujer y sintió un escalofrío.

Esos ojos verdes e inescrutables que siempre parecían estar apagados y libres de emociones ahora estaban brillando sin dejar de mirarle.

-Alfa Chaerin-

Sintió una de las manos de la mujer sobre su vientre.

-Estás gestando-

¿Eh?

-No yo, eso no es posible. La prueba que me realizaron fue negativa-

Ella le levantó la camisa y presionó la palma de su mano contra su vientre desnudo sin pena alguna, deslizó los dedos por la piel y tanteó enterrando el filo de sus uñas, su vientre ardió.

Sensible, muy sensible. Expresó su omega. Le está sintiendo.

-Lo estás haciendo. Llevas vida en tu vientre- afirmó la alfa.

*******

🐉¡Buenas noches gente linda!🐉

Al fin, al fin ¡Al fin! Pude actualizar 😵‍💫

Enserio que cuando es fin de semestre los profes se emocionan hasta el tope. Una disculpa por la demora, iba a actualizar hace dos semanas, pero la uni no dejó.

Ya no puse el aviso de capítulo largo, creo que los siguientes ya van a ser así jeje.

Espero haya sido de tu agrado.

En efecto, Hobie era nuestra tercera rueda en esa relación entre Jin y Nam. En su momento pensé en emparejarlos con Hyungwon, que es un omega, pero un Menage de alfas se me hizo más interesante. Más tomando en cuenta que van a ser tres hombres criando a una pequeña vampira.

Las runas aún contienen más secretos entre ellas, que adelante se irán explicando.

Sí, Jimin no recuerda lo acontecido en su celo con la lengua bifurcada. Hay momentos que están perdidos en su cabeza sobre ese día. Pero al dragón no se le escapan.
Probablemente si escriba sobre el celo de Yoongi, aunque tal vez sea en un espacial al finalizar la historia.

Yoongi apenas y puede tolerar a los gemelos y a Yuqi cerca por miedo a lastimarlos. Se va a ir de bruces al saber que va a ser padre.

¿Quien crees que sea el bebé?

Cómo pista diré que en la vida real pertece a un grupo del cual hay miembros que ya han salido en la historia.

Si hablasemos de niveles de poder, Ni Yoongi ni Jimin están a la mitad de lo que serían. Son muy jóvenes y tal y como el Gran Sabio lo dijo, con excepción de Yoongi, el cuerpo de Jimin aún no ha alcanzado su madurez.

~Información~

Rasksovbel' viene de la frase Gibel' Raskola Vesov que quiere decir: Condena del destrozo de las escamas. No olviden el término, va a ser importante en próximos capítulos.

Nyynevi derivado de ideal'nyy y gnev, en efecto quiere decir ira perfecta. También voy a darle un nombre al dragón de Jimin.

Namhan es el nombre de un río de Corea del Sur. El Gran Sabio al igual que los líderes con excepción de Chaerin tienen nombres de ríos.

Imagenes de las flores


Árboles de olivo.

Arbustos de abelia- Flores blanco con rojo

Campanillas chinas - Flores azules

Clivias- Flor naranja

Jazmin - Flor blanca inferior


Orquídeas -Flor blanca inferior

Ciclamen - Flor blanca superior

Lirios del valle - Flor blanca al centro. Parecen campanillas.

El vestido de satín y las sandalias.

Capitulo dedicado a: Mochi_Min_09, hollyMar, DafneCarolinaFHernnd y xxx_min_

Y a: Elisarayparkjimin, espero estés bien nena. Un fuerte abrazo.

Bien, con la buena noticia de que ya estoy por culminar mi semetre. Así que no voy a tardar dos meses en actualizar como ahora 🥴

Posiblemente en dos semanas o tres llega el siguiente capítulo.

Lamento enormemente la demora.

Si aún sigues aquí:

🐺¡Muchas gracias por leer!🐺

Gracias por obsequiarme tu tiempo y espacio. Gracias por tu paciencia.

PD: No hay actualización para Delight💊, pero está semana SWLS ⚜️ si la va a tener.

PD 1: Ya saben, mi compañera de edición en galería.

PD 2: Si alguien tiene curiosidad. Las imágenes de las portadas que puse en mis historia son del Manwha Unromantic, es un omegaverse ya finalizado que presenta a un omega dominante. Totalmente recomendado. El personaje de mis portadas es el alfa.

Tengan un buen inicio de semana.

🐉Un fuerte abrazo y muchos besos virtuales. Cuidense mucho🐉

Espero leerlos muy pronto.

🐺Nastia🐺

Junio-19-22

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