⛓️Chapter sixty six!

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

No tuvieron luna de miel.

Al finalizar la ceremonia, todos volvieron al campamento. Había mucho trabajo por hacer, los enfrentamientos no se detenían y debían estar listos para acabar de una buena vez con todos los rebeldes que se convirtieron en una catástrofe real.

Hoseok no salió del laboratorio hasta que pudo preparar el suero de defensa que se administraría al ejército de legendarios. Jimin se encargó de vigilar cada uno de sus pasos, pidiendo explicaciones detalladas del procedimiento y no perdiéndolo de vista.

El líder no terminaba de confiar en la palabra del beta, y se encargó de demostrarlo al mantenerlo vigilado las veinticuatro horas del día.

—¿Estás seguro que va a funcionar? —preguntó el omega Park, mientras analizaba minuciosamente el componente líquido que estaba almacenado en ampollas de cristal.

—Sí. —Hoseok ya estaba irritado. No era la primera vez que el omega le hacía la misma pregunta, y realmente comenzaba a ofenderse. Él sabía lo que hacía, y por qué lo hacía.

Estaban reunidos en un amplio salón, un grupo completo de médicos estaban preparando las inyecciones, mientras algunos soldados se encargaban de mantener el orden de los lobos legendarios para que el procedimiento fuese rápido y en orden.

—El componente debe administrarse directamente en la yugular, el alfa en su forma humana. De esta manera el mecanismo de defensa se activará más rápido —explicó Hoseok a los hombres y mujeres que estaban ahí para ayudarle.

Luego de ello, la presencia del líder de los legendarios llenó el salón. Yoongi dio pasos seguros hasta donde Hoseok le esperaba con una inyección preparada. Tal y como lo pidió días atrás, él sería el primero en recibir el componente para asegurarse que su ejército no corriera ninguna clase de riesgos.

—Me conmueve tu pasión y liderazgo —murmuró el beta, mientras desinfectaba el área a inyectar.

—Jódete Jung —gruñó Yoongi, para luego hacer contacto visual con su esposo.

—Relájate o haz el intento —pidió Hoseok—. De lo contrario, va a doler el doble.

El alfa lo hizo. Recordó la noche de su matrimonio y como lo selló en medio de las piernas de su esposo, perdiéndose en el placer infinito que le otorgaban sus besos, sus caricias y sus palabras. Esos recuerdos hicieron que el lobo en su interior dormitara gustoso, sobre todo cuando recordó los mimos recibidos y la renovación de la marca que presumía en su cuello.

En cuestión de segundos sintió el pinchazo en el cuello, luego un líquido que quemó todo a su paso. Yoongi se tensó, ardía como la mierda, pero era soportable y no sentía nada más que lo alertara.

—El ardor es normal —informó Hoseok, como si fuese capaz de leerle los pensamientos—. El efecto pasará en algunos minutos.

El alfa se puso de pie, no estaba mareado y eran buenas noticias. Caminó hasta donde Jimin estaba, dejando escapar una sonrisa pequeña al verlo preocupado por su estado.

—¿Te sientes bien? —preguntó el omega, con sus manos atrapando el rostro del alfa.

—Estoy bien, esposo —respondió, para luego besar la frente del omega.

Yoongi adoptó la costumbre de llamarlo esposo. Desde que se casaron no hizo más que llamarlo así, en todo momento y lugar, el alfa siempre le recordaba lo que eran, en lo que se convirtieron tras decir sus votos, y para Jimin resultaba abrumador, en demasía cálido y correcto.

—Hagan pasar a los demás —ordenó el líder de los legendarios, cuando se aseguró que todo estaba bien.

Un grupo de cincuenta repartidos entre hombres y mujeres ingresó al gran salón. Entre ellos iba la hermana de Yoongi y un tenso Jungkook, quien se mostraba reacio a recibir una inyección.

—¿Duele mucho? —preguntó el menor de los Min, notando como su tía arrugaba la cara en gesto de dolor.

—Es soportable —respondió RueSo—. No lo pienses mucho y hazlo.

Jungkook estaba dispuesto a refutar, pero terminó abandonando esas ideas cuando miró a Taehyung ingresar al salón. Él no quería verse como un cobarde frente al omega que le gustaba, es por ello que se sentó de inmediato en el lugar correspondiente y esperó a que uno de los médicos le colocara la maldita cosa esa con líquido dudoso y nombre extraño.

Sin embargo, el toque indeseado no llegó con la rapidez que esperaba. Jungkook frunció el ceño, animándose a mirar a la mujer de bata blanca que estaba de pie a su lado derecho.

—¿Qué ocurre? —preguntó desconfiado.

La mujer se limitó a darle una sonrisa amable, y cuando habló lo hizo dirigiéndose exclusivamente a Hoseok, quien era el encargado de dirigirlos.

—El alfa está demasiado nervioso y tenso —hizo saber al beta de cabello gris—. No creo que se calme por sí solo, recomiendo administrar un sedante para que pueda recibir el componente.

—Proceda —autorizó Hoseok, atento a cada uno de los movimientos de la mujer para asegurarse de que el alfa joven no corriera riesgos.

Sin embargo, Jungkook explotó en una ola incontrolable de pánico. No pudo controlar sus instintos, no cuando miró que la mujer intentaba sedarlo, llevándole a recordar el momento exacto que fue atrapado para que lo subastaran.

—¡Aléjate! —gritó con fuerza, para luego transformarse en un lobo de pelaje marrón claro.

Todas las personas soltaron exclamaciones llenas de sorpresa, y los demás legendarios se agitaron por el comportamiento de uno de los suyos. La reacción del joven lobo era la que se usaba cuando estaban bajo amenaza, todos los demás miembros de la manada pudieron percibirlo, amenazando con desatar el caos para protegerse entre ellos.

En ese instante, Yoongi tuvo que intervenir para que ninguno de los demás perdiera el control de sus pensamientos, gruñó la única orden de mantenerse quietos, imponiendo su dominio de líder, y siendo obedecido por todos ellos para alivio de todo el personal médico.

Mientras que, Taehyung no se lo pensó en correr hasta el lobo que gruñía a todo lo que se acercaba.

—Tae, no te acerques, puede dañarte —intervino Hoseok, notando las intenciones del omega.

—Él jamás me lastimaría —aseguró Taehyung con una determinación que hizo retroceder al beta.

El omega de cabellos azules se acercó hasta el animal furioso que se había arrinconado en una de las esquinas del salón. El silencio que se formó alrededor era tenso y nervioso, mas ninguno fue capaz de romperlo, pues temían que el mínimo sonido desatara la agresividad del alfa y terminara lastimando al sucesor Kim.

—Kookie —llamó el omega con mucha suavidad, mientras continuaba acercándose—. ¿Puedes reconocerme? Soy Tae.

El lobo le gruñó con fuerza cuando el omega intentó acariciarlo. Taehyung apartó la mano, pero no retrocedió, manteniendo la mínima distancia entre él y el alfa.

El omega soltó un suspiro, miró con preocupación al lobo que temblaba levemente y se desesperó aún más cuando volvió a intentar tocarlo recibiendo más gruñidos que aumentaban el comportamiento agresivo. Al cabo de algunos minutos sin lograr avances, decidió ser más práctico y radical.

Utilizó su voz de omega para doblegarlo.

Reconóceme alfa, soy Kim Taehyung... yo soy tu dueño.

Los aromas definidos del omega, el poder de su voz y la mirada de ojos mieles contribuyeron para que el alfa legendario se doblegara a su completa voluntad. De pronto, el lobo dejó de gruñir, ya no temblaba, ni mostraba rastros de amenaza; se convirtió en un animal manso que se dejó caer al suelo, apoyando la cabeza en las patas delanteras y moviendo la cola al reconocer el dominio de su amo.

Las mejillas de Taehyung explotaron de color rojo, quería desaparecer del mundo. Diosa... él no era así, no era ningún dominante, y tampoco le gustaba aprovecharse de las ventajas que su rango le ofrecía. Pero fue la única manera, o al menos eso se decía para no sentir culpa.

Se inclinó para poder acariciar las orejas peludas que se movieron bajo su tacto. Sonrió enternecido, el lobo de Jungkook era pachoncito, con mucho pelo y una cola animada que continuaba agitándose con su presencia.

Taehyung continuó acariciándolo por un momento más, permitió que sus aromas impregnaran la presencia del lobo, concentrado en calmarlo para que le hiciera caso y no volviera a sentirse amenazado.

—Nadie va a lastimarte, cachorrito —murmuró, concentrado en los ojos del lobo que no se apartaban de los suyos.

El lobo lamió la mejilla izquierda del omega con la rapidez suficiente para aturdirlo. Las mejillas del peliazul volvieron a enrojecer, con la diferencia que en esa ocasión también terminó sonriendo.

—Cambia a tu forma humana —pidió, soltando una risa cuando el lobo ocultó la cabeza entre sus patas delanteras—. Vamos, hazlo. Te prometo que no te dejaré solo.

Taehyung pensó que su petición sería ignorada; sin embargo, un minuto después se encontró con la imagen de un joven desnudo y avergonzado que le miraba con timidez, ilusión y muchas emociones más que le hicieron sentir extraño, pero en el buen sentido.

—Necesito una bata —pidió Taehyung, pero Yoongi fue más rápido.

El alfa le entregó una muda de ropa a su sobrino, se encargó de regañarlo con la mirada, bufando cuando Jungkook le respondió con una sonrisa inocente.

El menor de los Min se colocó la ropa con rapidez, se puso de pie y tomó la mano derecha del omega que tenía intenciones de alejarse.

—No, no te vas a ir de mi lado —dijo, para luego abrazarlo con fuerza, tan sólo siguiendo los instintos necesitados de su lobo y de él mismo.

—Jungkook...

—No te dejaré ir, omega —advirtió, importándole muy poco que todos los que estaban en ese lugar los miraran—. Me importas demasiado como para hacerlo.

—Jungkook, la inyección —le recordó Taehyung, pero de igual forma sus brazos estaban rodeando la cintura del alfa.

—Ah, eso —farfulló con torpeza.

El omega salió de los brazos del menor y lo hizo caminar hasta donde estaban colocando el componente que los mantendría protegidos. Cumplió la promesa de estar a su lado, durante el proceso, las manos de Jungkook sostuvieron las de Taehyung, mirándose a los ojos e ignorando lo demás.

Y una vez más, los sentimientos del omega Kim quedaron claros en su mente y en su corazón.

Él realmente estaba enamorado de Min Jungkook.

Los ejércitos volvieron a movilizarse durante la madrugada.

Wheein dio aviso desde la base de control del movimiento repentino de Kaisa; el alfa desplegó sus propias tropas y tomaron gran parte del bosque cercano al campamento, era evidente que planeaban atacar, y para ello debían estar listos.

—La fuerza aérea está lista, mi líder —avisó Mina. La omega estaba de pie frente a Jimin, dando los últimos reportes antes de comandar a su ejército y atacar desde el cielo.

—Preparen las armas —ordenó el omega a la general—. Quiero que masacren el bosque y los hagan salir de su escondite.

—Como ordene —aceptó Mina, para luego ofrecer una reverencia y tomar uno de los aviones de combate que estaban listos para alzar vuelo.

El líder estaba en el exterior del campamento. SeokJin ya había tomado un grupo de soldados para dirigirse al frente de batalla. Jackson y RiuSang lo acompañaban con sus tropas correspondientes, pues los rebeldes planeaban conquistar las montañas, y eso era algo que ni su comandante ni su líder pensaban permitir.

Taehyung se quedó al lado de su amigo, debido a que Jimin continuaba dando órdenes a sus generales, escuchando reportes y tomando en cuenta las sugerencias que ellos tenían para darle.

—En cuestión de minutos viajaré hasta el mar para reunirme con mi ejército —informó Amira al omega Park—. La guardia de hierro tiene preparados los buques de guerra, así que la fuerza naval está lista para atacar, mi líder.

Los buques de guerra ya estaban en el mar, esperando órdenes. La ubicación exacta era a cinco kilómetros al este del campo de guerra, y a diez kilómetros del campamento. Jimin sabía que Kaisa también contaba con fuerzas guerrilleras que sabían atacar en las aguas, pero confiaba en su ejército y en la fortaleza de liderazgo que Amira Sang había demostrado hasta ese momento.

—Destrózalos, general Sang —habló Jimin, provocando una sonrisa ladina en la mujer.

Amira tomó uno de los helicópteros y en cuestión de minutos lo puso a funcionar hasta llegar al buque principal de su ejército.

Los demás generales se quedaron con él, ya que su especialidad eran los ataques por tierra. De ese modo, G-Dragon tomó control de los cañones portátiles, eligiendo a sus mejores soldados para manejarlos; Taeyang y su mejor escuadrón tomaron los tanques de guerra que maniobraron hasta rodear los puntos frágiles del bosque; HyunJin y un pelotón se armaron de metralletas; Yoongi controló a todos los lobos que estaban usando armaduras con púas filosas capaces de destrozar carne y huesos con facilidad.

Y, por último, Jimin y Taehyung se armaron con lanzagranadas.

El ataque aéreo comenzó poco tiempo después. Múltiples aviones volaron encima del bosque, disparando proyectiles que no tardaron en incendiar el lugar.

El ejército lunar comandado por la general Mina hizo que los rebeldes salieran al campo de batalla, donde un fuego cruzado dio inicio de inmediato.

















































Ya empezó el desvergue ALV 🏃‍♀️

No tengo idea de cómo narrar la guerra Aiudaaaaa 😭

Estoy pensando en narrar por partes, es decir. Narrar lo que pasa con SeokJin, luego con los generales, con Jimin, con Taehyung, Yoongi. Ir cambiando sucesivamente de escenario para hacer la cosa más fluida, ¿les parece bien o es mucho enredo?

Que Diosito me ayude unu

Espero que el capítulo les haya gustado, muchas gracias por leer. ❤️

⛓️Yoon~

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro