Capítulo 11

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[...]

-¿Estás bien?- una sutil sonrisa apareció en el jovial rostro de la eriza rosa, mientras se dedicaba a sostener una de las manos de la chica frente a ella, tratando de darle ánimos.

-No, ya estoy cansada de todo esto - escupió con molestia la Tenrec de pelaje verde tomando distancia de la rosada -también estoy harta de este ridículo atuendo -jaló sin tacto alguno de la delicada camisa de botones verdes que vestía.

-Vamos Surge, si no pones de tu parte ¿Cómo piensas pagar tus gastos del mes?- le reprende la mayor, pero sin intenciones de ser pesada -deberías estar agradecida de que Silver logró convencer a Shadow de que te dejará trabajar en su cafetería. - volvió a tomar con gentileza la mano de la oji-azul, para que dejara de arrugar la camisa.

En realidad tenía una sonrisa en su cara, pero se sentía tan agotada física y mentalmente por todos los sucesos que ha tenido que vivir en menos de cuatro meses, exactamente desde que decidió romper con su ex-novio, Nicky The Hedgehog.

Aún se le hacía difícil creer que su padre se encontraba hospitalizado después de verse envuelto en medio de uno de los ataques de Eggman contra Sonic, salió gravemente herido tras no solo caer de un lugar muy alto, sino que fue sepultado por escombros pesados, los doctores seguían asombrados de que aún siguiera con vida, pero estar en estado vegetativo no eran buenas noticias, porque su vida pendía de un hilo tan fino el cual ella se esforzaba por sostener del otro lado, rogando a Chaos le de la fuerza para pasar este pequeño tramo de su vida.

Es verdad que jamás tuvo una buena relación con su padre, pues éste prefería 24/7 de su tiempo recordarle en la cara lo poco femenina que era, o que jamás conseguiría un novio y memoria sola algún día, o que se consiga uno, jamás estendio la necesidad casi obsesiva de su padre de que ella tuviera un novio.

«Sabes, me gustaría creer también que Sonic es tu novio, pero esas son mentiras también»

Recordó fugazmente las pesadas palabras que su padre le dijo en algún momento, haciéndole sentirse tan pequeña y desprotegida, pero debía admitir que tenía razón.

-Yo también quisiera creer que es verdad...- miraba con pesar el cuerpo mal trecho de su padre en aquella cama de hospital, su rostro que siempre estaba iluminado con una sonrisa, ahora solo era una cara rígida.

Hasta el momento la noticia era algo que quería guardar para ella, pero debido a sus faltas recientes, tuvo que darle a conocer tanto a su tutor como al presidente de clase de su situación, para que sus notas no siguieran bajando.

Cuando hizo eso, no pudo no contarle a Blaze su situación también, su amiga se enojaría seguramente con ella si se enteraba que le había ocultado algo tan importante como esto, claro que reaccionó preocupada y se ofreció a hacer cambio de turno con ella, y al verla tan desidia no pudo desisir.

Tal vez tarde o temprano tendría que contárselo a más personas, pero sentía que de entre todas, no estaba lista para que Nicky se enterará, conociéndolo seguro querría ayudarle a pagar todo, como siempre, pero Amy no quería eso, no quería verse débil, por eso ella buscaría la forma de pagar la tarifa del hospital, aunque fuera demasiado elevada.

Entre esos días que seguía buscando empleo, inesperadamente Sonic se presentó frente a la habitación de su padre en el hospital, al principio se sintió algo descolocada, ya que no le había visto en un largo tiempo, además de que no tenía conocimiento de cómo se habría enterado de la situación de su padre.

-Amy...- le llamó, la chica pudo notar como su voz parecía dudar, como si la culpa lo carcomiera por dentro.

-Se que ahora te sientes muy culpable, Sonic- se adelantó, tomando por sorpresa al más alto -por eso no quería que supieras de esto...- es verdad que intento sonreír, o al menos mantenerse tranquila, porque no quería hacer sentir culpable al cobalto, pero se sentía tan mal en ese momento.

En un intento torpe de buscar consuelo, le dió un abrazo al mayor, en ese momento no sabía si quería darle confort a él o si egoístamente ella buscaba sentirse bien consigo misma, pero aún así no fue apartada, al contrario, éste le devolvió el abrazo, aunque sin mucha fuerza, porque se notaba que seguía habiendo dudas en su cabeza.

-Si tan solo hubiera sido más rápido...

-No Sonic, tú ya eres muy rápido- acaricio sus púas traseras con delicadeza sin romper el abrazo -pero, no siempre vas a estar para todos, no te sientas mal por mi padre - la fuerza en el abrazo del chico aumento un poco, como si se aferrada con fuerza de ella.

Amy no quería presumir, pero tenía una inteligencia emocional tan alta que le era fácil descifrar lo que había en el corazón de cada personas, y ahora mismo podía sentir el corazón de Sonic.

Como una cuerda que había sido estirada, jalada, tirada, hecha nudos, otra vez estirada y luego abandonada, esos sentimientos en su pecho eran tan caóticos y variados que apenas eran entendibles para ella, y seguramente para Sonic eran un caos.

Soledad, ansiedad, abandono, un corazón roto, su corazón estaba sufriendo de una forma tan lenta y dolorosa, que se alejaba de la perfección que ella buscaba y siempre había idolatrado en su héroe, pero saber eso no significaba que ella dejaría de quererlo como lo quería.

«Estas pasando por mucho... Oh Sonic...» unas lágrimas empezaron a bajar de sus mejillas.

Luego de una amena charla, el cobalto le ofreció ayudarle a pagar el hospital, pero ella se negó, como había dicho antes, su padre era su responsabilidad y de alguna forma encontraría la manera de pagar su deuda.

Pasaron dos días de eso, y cuando fue a pagar la primera mitad del abono, la administradora le dió una sorpresa.

-¿Cómo dice? ¿las primeras dos cuotas fueron canceladas?- se vió sorprendida.

No tardó mucho en preguntarle a Blaze si fue ella, pero la gata le aseguró que como le había comentado, iba a respetar su decisión de pagar todo por su cuenta, y difícilmente se iba a retractar de sus palabras, así que ella no fue, y era evidente que el presidente de clase o su tutor no contaban, entonces...

Amy supo de inmediato quién lo había hecho, miró la factura mientras una sonrisa aparecía en sus labios.

-Estoy segura que aunque te hubiera dicho que no, igual lo habrías hecho- estaba profundamente agradecida.

...

Claro que -aunque no le gusto- terminó aceptando la ayuda, pero ese solo era el comienzo de su travesía, por lo que siguió buscando algún empleó, pero no terminaba de encajar bien con ninguno, hasta que un día Silver se le acercó y le comentó que le encantaría ayudarla a conseguir empleo, si así podía devolver todos los gestos de amabilidad que ella había tenido con él.

-Pero ¿Cómo te enteraste?- le miró incrédula.

-Por Blaze, claro- le mostró una sonrisita inocente, pero la oji-jade no se veía para nada felíz -¿Qué pasa?- miró de reojo a la gata quien desde atrás de Amy le había estado haciendo señas de que no le dijera nada, pero con eso arruino todo, por eso se dió un golpe en la cara.

-¡Blaze!- Amy se volteó encarando con las mejillas rojas a su amiga.

-Lo lamento, es tan lindo que no pude evitarlo- se encoge en su sitio levantando ambas manos con resignación.

Después de una "pequeña" discusión, se enteró que el chico era dueño en conjunto con su novio de una cafetería, no entendía cómo Silver siendo tan joven ya era dueño de una tienda, él le explicó que era "herencia" familiar de Shadow.

-Entonces le pertenece a Shadow -se notó la decepción en su cara, ya que si era del azabache seguramente no le daría empleo.

Es decir, era un chico muy seco y frío, que cuando intentaba interactuar con él, solo la esquivaba, por lo que si no fuera por Rouge y Silver, ni siquiera pararían en el mismo pasillo, no le caía mal, pero tampoco le daba buena espina.

-Si habló con Shadow, él entenderá, además últimamente nos hacen falta manos extra -aseguró con tranquilidad tomando las manos de la chica para darle fortaleza -él no haría la vista gorda cuando de ayudar a alguien necesitado se tratara, asi que siéntete tranquila.

La chica solo pudo sonreír encantada de la amabilidad del chico, pero aún tenía muchas dudas respecto a su plan, aún así ante todo pronóstico, Shadow aceptó, y ella empezó a trabajar junto al par en su linda cafetería.

Todo iba relativamente bien, no tardó en adaptarse a su nueva modalidad de trabajo -hasta se le ocurrió proponer vender pasteles- los cuales ella se encargaría de hacer, ya que sentía que era lo que más faltaba en la tienda que solo tenía bebidas, su idea fue del agrado de ambos erizos, y Shadow le dió luz verde.

Con el dinero del trabajo empezó a ahorrar lo suficiente para pagar el hospital de su padre y sus propios gastos, y así siguió todo con tranquilidad hasta el siguiente mes, pero la inesperada noticia de que Sonic había desaparecido la dejó sin aliento.

-¿Qué te paso, Sonic?- miraba con pesar una de tantas fotografías que tenía de chico en su escritorio.

Desde que se enteró de la noticia no había dejado de estar preocupada todos los días, tanto que hasta cometió algunos errores en el trabajo, Shadow le regaño, Silver por otra parte le dió ánimos, sobre todo cuando se enteró que se sentía preocupada por el héroe de la ciudad.

-Yo también estoy preocupado por él, seguro se tomó unas ligeras vacaciones - le sonrió.

La chica se rió un poco por el comentario del albino, sintiéndose menos pesada, a comparación del inexplicable peso que cargaba el chico frente a ella, que parecía ser un nubarron inentendible para su corazón.

-Claro, seguro se fue a un lugar más cálido, el odia el frío, pero ama la playa...- aún estaba triste, pero una sonrisa apareció en sus labios.

Con todo lo sucedido sentía tan solitaria la casa, sin su padre merodeando por ahí, haciendo ruido cuando ella trataba de meditar o hacer tareas, merodeando por ahí y diciéndole sus defectos cada vez que podía.

Se sentía tan sola.

Una semana después, Amy jamás esperó recibir visitas, sobre todo no de Surge, y peor a media noche con sus maletas hechas.

¿Cómo era su amistad con la Tenrec?

Es complicado, a diferencia de Rouge que podía tener su día de chicas con ella, o con Blaze que era la voz de la razón -a veces- en sus decisiones, Surge es una amistad algo ausente y caótica, a la cual a veces tenía que agarrar del brazo para que no cometiera asesinato, y que veía cuando los planetas se alineaban, después de todo la conocía desde el jardín de niños.

Como había dicho su padre una vez que vino a una pijamada «¡Esa chica es mala influencia para tí!» y entendía perfectamente a su padre, pero como ella mismo decía «Somos nosotros los que decidimos como ser, si nos dañamos o no, depende de nosotros, no de quiénes nos rodean»

Porque creía que cada ser vivo pensante tenía el libre albedrío de decidir qué hacer con sus vidas y cómo actuar, así que no se iba a dañar por una amistad como Surge.

Ahora que recordaba, justo había visto -hace un tiempo atrás- como su amiga se había vuelto tendencia en las redes sociales, trás ser vencida por #piesligeros.

Sonrió sutilmente por el nombre tan tonto, pero estaba sorprendida de la hazaña de Nicky, pues siendo un chico de videojuegos y que aborrecía hacer ejercicio, terminó por vencer a Surge, la chica más veloz que conocía, y que llevaba entrenando toda su vida para esto.

-¿Será que el rompimiento le ayudo?- dudaba un poco, pero había visto casos en dónde tras romper la pareja ambos se volvían en la mejor versión del uno.

Bueno, para ella no era todo un enigma lo extraño y asombroso que podía ser Nicky, por un momento pensó otra vez en ese niño pequeño de diez años que conoció y se volvió su mejor amigo.

Volviendo a su amiga, ahora mismo estaba en su sala esperando la taza con leche caliente que ella le iba a traer. Ya empezaba a hacerse una idea de por dónde quería ir la chica con esas pesadas maletas que se cargaba.

-¿Kit no se sentirá solo?- le pasó en sus manos una taza caliente para que pudiera entrar en calor.

La menor no le respondió, solo tomó la taza y empezó a beber como si fuera una niña resentida con su madre que le empezaba a regañar.

-Solo necesito un lugar donde quedarme por un tiempo, si no puedes dármelo, me iré de inmediato, no quiero molestarte- pareció querer irse, pero su mano fue sujetada por la de la más alta.

-No decía eso, siempre serás bienvenida en mi casa- le sonrió.

La tenrec le dirigió una vaga mirada que oscilaba entre enfado y tristeza, para terminar por apartar con cierta dureza la mano de la chica.

-Gracias...- un leve sonrojó apareció en sus pálidas mejillas.

Amy no dejó de mostrarle una sonrisa calmada, entendía que ella era algo difícil, pero sabía muy bien que sentimientos guardaba en su corazón, por eso le era imposible enfadarse con ella, porque solo podía ver a una pequeña niña perdida y solitaria, como ella.

...

No tardó en ayudarle a la Tenrec a desempacar, le ofreció compartir habitación hasta poder acomodar mejor el cuarto de invitados que estaba polvoriento, lo cual aceptó, esa noche Surge se quedó dormida profundamente como un bebé, seguramente estaba muy cansada de caminar sin rumbo todo el día.

Desde entonces compartía su casa con la oji-azul, pero no espero que representará una carga muy pesada, pues el dinero empezaba a no ser suficiente, pero no tenía cara para decirle a la chica que su estadía estaba siendo un problema.

-Oye, quiero trabajar también.

Amy volteó a ver con la cara pasmada a Surge, la verdosa había tenido la iniciativa propia de sugerir empezar a trabajar también, lo cual la puso felíz, por eso no escatimó en enseñarle todos los trabajos posibles que habían.

-No quiero ninguno, quiero trabajar en el mismo sitio que tú.

-¿Eh?...- pensó en ese momento que la idea era buena, pero significaba otra vez molestar a Shadow, y este se podría negar fácilmente.

Al final saco fuerzas de dónde no tenía y con la mayor de las vergüenzas le pidió amablemente a Silver que hablara con Shadow otra vez para que le diera trabajo a su amiga.

-¡Tranquila! Más manos extra significan menos peso y mejor ambiente laboral -otra vez no se molestó ni le peso ir donde el azabache para comentarle el caso de Surge.

-Ella es una extraña, no quiero extraños en mi café -le miró molesto.

-¡Pero Surge no es una extraña! - insistió. -ella es amiga de Amy, y Amy es mi amiga, eso la vuelve en mi amiga- sonrió.

-Asi no funciona...- se masajeo el entrecejo de tener que aguantar tanta estupidez del más alto.

A este paso pensaba meterle toda la escuela en su cafetería.

-¡No seas malito! Hazlo por mi amiga Surge -se le colgó del brazo, aún cuando esté trataba de quitarlo de encima.

-¡Que no es tu amiga! ¡Es un extraña!- por fin se libro de él, pero Silver se quedó tirado en el suelo, no parecía querer moverse -¿Qué haces ahora?- le miró desde arriba sin entender que hacía.

-Hare una huelga, hasta que aceptes a mi amiga Surge.

-Por mi te puedes quedar así toda la noche- acto seguido tomó sus cosas y salió de la sala apagando las luces -hasta mañana.

Todo quedó a oscuras, mientras un sepulcral silencio invade la oscura sala.

-Podría esconder sus armas- pensó aún en el suelo, al ver que su plan A no había funcionado.

-¡Ni se te ocurra tocar mis armas!- le gritó el azabache desde su habitación, conociendo muy bien como pensaba el más alto.

-Esta bien, plan B...

...

-¿Entonces dijo que sí?- le miró incrédula, Silver asintio con una sonrisa de oreja a oreja. -¿Cómo lo hiciste?

-Un mago no revela sus secretos- le guiño un ojo.

Amy quiso saber qué había hecho para hacer cambiar de opinión al rígido de Shadow, pero eso quedaría como un enigma, al menos logró convencerlo, y con eso Surge empezó a trabajar esa semana en el café.

Lamentablemente Surge no parecía cumplir con el estándar de "mesero" que necesitaban, porque la chica era muy agresiva y mal educada, tanto que terminaba por ahuyentar a los clientes, en esa primera semana presentó bastantes perdidas a la tienda.

-La quiero fuera- eso fue lo único que dijo Shadow tras la breve reunión que se llevó a cabo entre todos los trabajadores, menos Surge.

-¡Por favor Shadow, dale otra oportunidad! Ella aún no se acostumbra, trataré de enseñarle mejor- Amy se puso en su camino tratando de evitar que se marchará, para tener más tiempo para hablar con él y convencerlo de que su amiga si valía la pena.

-Dije fuera- sin temor, acercó de forma despectiva su rostro al de la chica para recalcarle bien fuerte y de forma agresiva la palabra «Fuera», la rodeó y se marchó de la habitación.

-¿Y ahora qué haremos?- cayó sentada en el suelo mientras peinaba su cabello con cierta ansiedad.

¿Ahora qué harían? Surge era tan especial que seguro se negaría a trabajar en otro sitio, y luego ambas se iban a pelear y separar, y la chica buscaría otro sitio donde vivir, pero no se sentía capaz de dejarla irse sola, si podía ayudarla...

O tal vez no quería sentirse sola otra vez.

-Tranquila Amy, voy a hablar con él, para que le dé una oportunidad más -Silver intentó consolarla, mostrándole esa sonrisa tan cálida que siempre se cargaba.

A veces Amy no entendía como Silver podía ser tan amable, ella ya se consideraba alguien amable, pero tarde o temprano ciertas cosas terminan siendo tan pesadas que esa sonrisa se borra, pero él, aún cuando su corazón era tan pesado, se mantenía de pie.

Él tenía un corazón más grande que el suyo...

Al final después de una breve discusión, Silver regresó con buenas noticias para la eriza.

-Le dará una semana más para que demuestre que es capaz de atender a la gente sin gritarle sus verdades a la cara ¿Okey?- le dió una suave palmadita en la espalda para devolverle los ánimos.

-Okey- le devolvió la misma sonrisa.

...

-Así que, tienes está última semana para quedar bien con Shadow, si no, te va a correr ¿Entendido?- terminó por ayudarle a acomodar el moño de su uniforme.

-Okey, última semana , quedar bien con el jefe, está facil fresita- Surge se dejó ayudar por Amy, mientras se estiraba lista para empezar.

-Trata con amabilidad a la gente- añadió.

-Uhg... -hizo cara de asco -tú quieres un milagro.

-¡Surge!-.

-Tranquila, recuerdo todo lo que me enseñaste ayer, sonrisa, elogió y guiño, como toda una señorita- le guiño el ojo.

Amy le miró y luego sonrió de forma sutil.

-Eso si, si llego a ver a ese adefecio de Nicky, tal vez no pueda controlarme- apretó los puños furiosa.

-Ah... Íbamos tan bien...- suspiró. -Se que tienes tus razones para querer golpearlo, pero no creo que la violencia sea la solución, ya lo hablamos- intenta que la menor entré en razón.

Además no quería que una de sus personas favoritas golpeara a otra de sus personas favoritas.

La Tenrec le miró poco convencida, pero terminó por suspirar.

-Yaya, no te esponjes, haré lo que sea necesario- con una sonrisa algo intimidante, salió del cambiador.

-¿Y eso qué significa?- Amy le siguió afuera, algo preocupada.

Las amenazas de la chica eran algo que se debían tomar en serio, porque siempre cumplía lo que declaraba.

-Amy, ve a la mesa 4- apareció Silver pasándole una bandeja en las manos a la chica, está reaccionó de inmediato para cambiar de dirección hacia la mesa designada.

...

Por ahora Surge se estaba portando bien, mientras se dedicaba a tomar los pedidos, Amy en cambio entregaba los pedidos, Silver y Shadow atendían en el mostrador -este último hacia las bebidas que contenían café- por extraño que pareciera, sus bebidas eran muy buenas, y su reputación elevada, tanto que siempre se llenaba el lugar.

-Oye mira a esa chica- susurra un chico que esperaba ser atendido.

-¿La rosa o la verde?- su amigo mira con detalle a ambas chicas.

-La verde, se ve muy linda, pero tiene cara de amargada-

-Vamos, la llamó para que se acerque- le anima su amigo.

-¡No espera! ¡No estoy listo!- trata de detenerlo.

-¡Señorita, puede tomar nuestra orden!-

Ante el llamado, Surge voltea para ver la mesa, pero rueda los ojos con molestia al distinguir que eran dos parásitos maleducado, aún así se acercó.

-Bienvenido a Capuchi, la cafetería de tus sueños, puedo tomar tu orden, escoria -y guiño un ojo, aunque no le salió.

Uno de los dos chicos casi escupe el pulmón, mientras que el otro chico pensaba; «Vaya que linda» con cara de idiota.

-Señorita le han dicho que es bonita- por fin el más tímido de los dos tomó valor en darle un cumplido.

-Todo el tiempo, ahora pide la basura que vas a comer y déjame en paz.- en eso sintió un pequeño empujón en su costado, al girar notó que se había tratado de Amy, que había pasado de paso, pero le hizo una seña de que no estaba de acuerdo de cómo se estaba portando, Surge reviró los ojos con cierta molestia -Digame entonces ¿Qué se le ofrece?- y está vez mostró una sonrisa, algo torcida, pero era una sonrisa.

Ambos chicos se sintieron intimidados por esos filosos colmillos de la chica.

-Eh... Sabe que, mi amigo y yo creemos que ya no se nos apetece nada, así que nos iremos lentamente-sonrió tímido mientras se levantaba lentamente del asiento seguido por el otro chico.

-Ah no...- la chica colocó su firme mano sobre el tembloroso hombro del chico deteniendo su actuar -me hiciste perder mi tiempo, asi que o te tragas un café o te parto la cara- amenazó acercando su puño violentamente al comensal.

-Surge- Amy aparece detrás de ella para reprenderla, mientras la apartaba del chico -lo lamento, ella aún no se acostumbra a tratar con chicos tan lindos, solo es tímida.

-No es cierto.

-¡Surge!- Amy le regresa a ver molesta.

En ese momento la Tenrec sintió una mirada sobre ella, volteó con dirección de dónde venía, encontrándose con la mirada rojiza de cierto azabache que estaba en la barra, había dejado de hacer lo que hacía para mirarla fijamente.

Surge admitía que no había otro möbian que le hiciera sentir tanta incertidumbre y solo con su mirada, desde el primer momento que lo vió en la escuela, pudo sentir que de él desprendía un aura amenazante que le ponía los pelos de punta, aunque se veía tan callado y misterioso, la noticia de que barrio el piso con Nicky y el como lo dejó confirmó sus sospechas sobre él.

Era un tipo peligroso.

Ni siquiera voltearia a verle si fuera por ella, pero terminó metida en el mismo barril que él por Amy y su amistad con el novio de este. Por eso decidió regresar su mirada a la chica, y ambos comensales.

-Si, soy tímida...- agachó por un momento la mirada.

-Oh bueno, tal vez sea eso, es decir, soy tan guapo- se carcajeo el chico junto a su amigo.

Amy solo sonrió siguiéndoles la corriente, pero Surge les dirigió una resentida mirada.

Todo esto era tan molesto.

La única razón por la que aguantaba todo esto era para regresar la amabilidad de la eriza rosa y todo lo que ha hecho por ella, después de todo cuando se enteró de su situación financiera y el estado de su padre entendío que su visita le dió más problemas de lo que espero, por eso solo quería ayudarle en lo que podía.

Aunque eso tuviera que involucrar ser "amable" con la gente.

-¿Por qué no estoy detrás del mostrador? Sería menos estresante que pasearse y mover la cola para los clientes -se quejó. -además, a los clientes les agrada más que los atienda el noviecito del jefe.

-¿Sabes cocinar o preparar los postres o cafés?- la contraria negó -Bueno, ahora sabes porque estás aquí y no allá -le sonrió, pero se ganó una mala cara de la más baja -Venga, sonrisita ¿Okey?- sonrió mostrándole sus lindos dientes.

La tenrec solo imitó su gesto pero su sonrisa seguía siendo menos linda y agradable que la de la mayor.

Se volvieron a separar para llevar sus pedidos.

...

-Bueno, espero disfrute la comida- Amy había dejado uno de los pedidos a otra mesa.

-Un momento señorita- le detiene el chico algo tímido, a lo que la chica se detiene para mirarle atentamente -desde ya un tiempo había querido hablarle, porque quería saber si... De casualidad podría darme su numero- extendió algo temeroso su móvil a la chica.

-Ah bueno...- Amy se puso algo incomoda, no le gustaba que pidieran su número, aunque el chico estaba siendo amable, pero no creía que fuera el lugar correcto ¿Cómo podía negarse?

Extendió lentamente su mano con intenciones de tomar su móvil para anotar su número, ante esto el chico se le notó la emoción en su rostro de ver cumplido su sueño de tener el número de esa chica tan linda.

-No sabes leer el ambiente, idiota- el móvil fue sujetado de imprevisto por Surge quien apartó un poco a la rosada encarando al extraño -ella no quiere darte su número.

-¡Surge!- otra vez le regaño la rosada.

-Antes de que me riñas otra vez, deberías revisar la galería de este tipo- le pasó el movil a la chica.

-¡Espera no!- el chico trató de detenerla pero fue agarrado del cuello por la más baja que sin esfuerzo hizo que retrocediera, mientras la verde perotegia a la oji-jade.

-Solo pasa tomando fotos de tí cada vez que viene, ya estoy cansada de él, es un acosador de mierda- mientras ella explicaba, Amy logró entrar a la galería gracias a qué estaba desbloqueado.-además de que estudia también en la escuela con nosotras, lo que lo vuelve más patético.

Entonces encontró muchas fotos suyas, demasiadas, como si solo tuviera lugar para ella en esa retorcida galería, su cara palideció.

Es verdad que en la escuela tenía todo tipo de admiradores, y chicos que querían salir con ella, pero esto estaba a otro nivel, uno que involucraba un acoso insano.

Para ese momento los comensales que los rodeaban empezaron a murmurar sobre lo que estaba pasando afuera.

-¿Qué pasa con este tipo?- de pronto el extraño se sintió agarrado de su camisa desde atrás, eliminando su cercanía con las dos chicas.

Las chicas reconocieron inmediatamente de quién se trataba, mientras el acosador tuvo que voltear con molestia para ver en primer plano el molesto rostro del erizo que lo había sujetado.

-¡M-Manic!- por poco se cae de la sorpresa.

-Para ti Manic The Hedgehog, respeta mi apellido, imbécil -sin pena, jaló del tipo para tirarlo contra el suelo, paso encima de él para ponerse del lado de ambas chicas. -Mira, ahora por agarrar tu camisa barata me dará pobreza- sacó de su bolsillo un pequeño spray que rocío sobre sus manos, se trataba de un desinfectante.

-¡E-espera! ¡N-no me vayas a hacer nada! ¡No hacia nada malo!- retrocedió aún en el suelo, temeroso del erizo verde.

-Me parece que no sabes que acosar a la gente es algo malo- al ver que sus manos ya estaban limpias, guardo el pequeño frasco en su bolsillo, ante todo esto, se mantenía neutral, o hasta algo frío.

No había estudiante en su escuela que no supiera sobre Manic The Hedgehog, no solo por ser un chico adinerado, y que su casa parecía un estadio de fútbol, sino porque corrían rumores de él y la riqueza de sus padres y familia.

Cualquiera sabía que su familia movía a las mafias más temidas no solo de Hedgehog Town, sino de otros distritos, además de que el mismo chico era para temer, porque se corrían rumores de lo violento que era cuando tenía que resolver sus problemas pendientes, o si te metes con su música.

Nadie quería meterse con él.

-M-Mí error, yo dije algo que ofendió a la señorita, y amablemente su compañera solo la defendió- se apresuró a decir mientras sus rodillas temblaban -asi que me disculpo, aquí está el dinero de lo que pedí, con permiso- tan rápido como habló se esfumó del sitio ante la silenciosa mirada de todos los comensales y ambas trabajadoras.

-Mira, dejó propina, que desgraciado- se quejó la Tenrec contando el dinero que dejó caer en el suelo el acosador -que falta de respeto.

Manic sintió una mirada fizgona, y no se trataba de ninguno de los clientes, al voltear se encontró con la curiosa mirada de cierto albino al que había venido a ver, este al verse pillado, le saludo desde dentro de la tienda con bastante entusiasmo, casi hace derramar el café que traía en manos el azabache, este le regaña.

-¿Surge, cierto?- la susodicha se levantó del suelo para encararle.

-¿Me conoces?

-Claro, como tú me conoces por rumores, yo te conozco por los tuyos, ya sabes #bruja, mi primo te aplastó en la pista- sonrió.

La tenrec paso de verlo con intriga a una expresión de molestia, lista para agarrarle del cuello, no le importaba si era un mafioso o lo que sea, no iba a dejar que se burlara de ella.

-No vine a tirarte basura, ni siquiera me interesas- se encogió de hombros mientras tomaba el móvil del acosador y se lo pasaba a la oji-azul. -¿Te gusta la venganza? Conozco un buen método para exponer tipos como él en las redes, y todo lo que necesitas ya lo tienes en las manos - sonrió -se que sabrás darle buen uso.

Sin más, rodea a ambas chicas para adentrarse en el establecimiento.

-Por cierto Amy, te queda bien tu traje de sirvienta- se mofa.

La eriza rosada se avergonzó, queriendo tirarle la bandeja que tenia a la cabeza, pero terminó por desistir de sus pensamientos llenos de furia, porque sabía que era mejor no tener a Manic en su contra.

«Pero que tipo tan... Irrespetuoso» pensó algo consternada Surge.

-¿Cómo así decidiste venir hoy?- Silver estaba a un lado de Manic, para tomar su orden.

-Primero, siéntate conmigo- sin tapujo, jaló del brazo al más alto para sentarlo a su lado -ya sabes que no me gusta que la gente me hable desde arriba.

-Pero estoy en el trabajo, luego...

-Tu noviecito se va a enfadar conmigo, ya se- bufa con burla -me importa un culo, Shadow se puede tragar un kilo de mierda ¡Me escuchaste bien, Shadow! ¡Vales mierda!- insultó y hasta le hizo el dedo de en medio al azabache, quien no estaba nada felíz viendolo desde el mostrador -Jajaja no me puede tocar.

Silver solo tenía cabeza para pensar en el alto autocontrol que tenía el azabache, pero seguramente cuando cerrarán en la noche, este le iba a reprender por tener amistades tan cuestionables como la del erizo verde.

-Yo no provocaría a Shadow, sobre todo no cuando se despierta con el pie izquierdo- Silver trató de tranquilizar al verdoso antes de que Shadow viniera personalmente a romperle la cara.

A la lejanía eran observados por la eriza rosa, la cual sentía mucha aversión por Manic, y no precisamente por la fama que se cargaba, sino porque desde que recordaba, al chico siempre le gustó molestar a Nicky y a ella cuando eran más pequeños.

Le divertía ver el sufrimiento de su primo, y creía que se tenía muy merecido el no tener amigos, a excepción de Silver, no entendía como podían ser amigos.

Si, tal vez Amy tenía razón con decir que Manic era muy asocial, y odiaba a todo el mundo, además de que era un cabeza hueca que jamás movía un dedo para ayudar a las demás personas, pero ella no sabía el como un simple erizo con una gran sonrisa calentó el frío corazón de ese chico.

Manic lo recordaba muy bien.

Un erizo de puas verdes despeinadas había despertado con la alarma de su móvil, la apagó para mirar con molestia el techo.

Todo estaba oscuro y daba una sensación de soledad, las ventanas fueron abiertas por su mayordomo que le felicitó.

-Felíz cumpleaños, mi señor.

Este le miró de reojo, entonces recordó que hoy era su cumpleaños, pero no se veía emocionado por la noticia.

-¿Qué tiene de felíz un día que te recuerda que estás más cerca de la muerte?- se puso de pie para colocarse una bata e ir a la ducha -Bueno, eres el único que siempre lo recuerda.

...

-¿Tiene pensado algo para el día de hoy?- el mayordomo le ayudaba a tomar asiento en el gran comedor.

Habían muchas sillas vacías, y solo había comida en abundancia de su lado, el erizo miró por un momento el lugar notando las preciosas y caras pinturas que adornaban el comedor, como el candelabro de oro sobre su cabeza, o los mismos utencilios que usaba para comer bañados en plata y oro.

Ante tanta riqueza y lujo solo podía sentir un enorme vacío que era imposible llenar con todo lo que tenía.

-Invita a los sirvientes a desayunar, no podría acabarme todo esto solo- empezó a comer con tranquilidad, mientras recibía un «A sus ordenes» de su mayordomo -lo que pienso hacer hoy... Ire a clases, y tal vez me quedé a ensayar en mi club para matar el tiempo.

-Magifica elección, mi señor.

En realidad Manic no tenía ganas de ir a clases hoy, bueno tampoco lo necesitaba, pero aún así no quería estar solo, no hoy.

Ese día como costumbre subió al auto que lo llevaba a clases, en eso revisó su móvil para ver si tenía algún mensaje especial o algo similar, y se encontró uno de la presidenta de su clase.

Blaze:
«¿Ya les avisaste a tus padres sobre tu bajo rendimiento?»
7:12am.

Blaze:
«El maestro me insiste en que te haga acuerdo, pero tú no pones de tu parte, así que te recomiendo asistir a tutoría»
7:14am.

En efecto, no había nada especial para hoy, solo un avisó molesto de algo que él ya sabía, sus bajas notas eran la menor de sus preocupaciones, porque tenía tanto dinero que estudiar no era un problema solo lo hacía para matar el tiempo.

«-En otras noticias, los estándares de chico ideal suben por los cielos con la hermosa sonrisa de Sonic the Hedgehog como punto de comparación-»

Su atención fue captada por el ruido de la radio y la sintonía que escuchaba su chófer.

-Sonic...- su expresión se oscureció.

En serio pensaba que después de todo este tiempo el karma había venido a jugarle una broma o en definitiva estaba cobrando el precio de sus acciones, pero por ahora lo único que podía hacer era ser paciente y ver cómo las cosas transcurrían.

Logró observar por la ventana como cierto erizo azul caminaba algo apresurado, se trataba de su primo, Nicky, que parecía haber perdido el bus como siempre.

En realidad sentía mucha aversión por Nicky, no le terminaba de agradar por completo su primo, y a veces hasta era algo icomodo verlo a la cara.

-¿Qué tanto me miras, Manic?- le repica a su costado ya algo molesto por la mirada sutil pero invasiva que le estaba tirando hace rato el verde.

-Tienes cara de idiota, solo te lo quería recordar- se encogió de hombros para entretenerse otra vez con su móvil.

Si, su día iba a ser como los demás, tan aburrido.

«-¡Es sorprendente que nuestro Héroe Número uno hoy esté cumpliendo años! Nos gusta siempre recordar sus grandes proezas por todo el mundo-»

No solía escuchar la emisora, pues prefería perderse en la música e ignorar a la gente si era posible, pero hoy se sentía diferente, sentía que tenía ganas de escuchar de Sonic.

Se sentía tan solo...

-Oye Manic- escuchó como alguien le llamaba.

-¿Qué?- volteó con dirección a la voz, se retiró por un momento los audífonos para ver al líder de su club.

-Hoy estás desafinado, asi que ya despierta, o vete a casa, porque no voy a soportar que alguien nos retrasé, debemos ganar el primer lugar en el festival del siguiente año- le reclama el líder.

Aunque los demás integrantes temblaron del pavor, el chacal frente a él no le tenia miedo, porque su ego era tan grande como su idiotez.

Manic le miró de reojo, y simplemente se encogió de hombros para irse del sitio sin decir más.

Aquí tampoco le querían.

Y eso que había pensado que tal vez el club le ayudaría a no pensar que hoy era su cumpleaños, pero se sentía peor que antes.

Sería sencillo organizar una mega fiesta y contratar gente que asista y lo tratara como su amigo, pero ya estaba cansado de tanta falsedad y odio, por un lado nadie se atrevía a ser su amigo por esos rumores que corrían, otros le tenían miedo, otros pocos lo trataban con odio porque no les agradaba, y la poca gente que lo trataba bien solo era porque necesitaba algo de él, un favor o dinero.

Nadie se preguntaba cómo estaba, o si ya había comido, o si se sentía bien, o qué tal había ido su día, o qué pensaba, o su música favorita...

...

Y aquí estaba, sentado en una banca de tantas en el parque principal de la ciudad, entonando su guitarra, mientras escribía en su libreta favorita las notas que se le iban ocurriendo para la nueva canción que pensaba componer.

Tenía un estudio de grabación con las herramientas más lujosas y caras a su disposición, pero él prefería venir a este sitio, odiaba pasar mucho tiempo encerrado, prefería sentir el viento golpear su rostro, y ver a la gente caminar de un lado a otro.

No se sentía solo.

-¡Manic!- pudo escuchar como alguien le llamaba, aún con la música a alto volumen lo escuchó, pero cuando pensó en buscar al dueño de esta sintió como alguien lo zarandeo de lado a lado del hombro -¿Qué haces aquí? ¿Estás bien?- sin mucho problema, el otro erizo tomó asiento a su lado.

El erizo de púas verdes le vio algo desconcertado, pensando; «¿Quien es este cara de idiota?» se quitó sus audífonos para no ser tan grosero, tratando de verlo bien.

Ese rostro, Manic conocía ese rostro, ese chico era ese nuevo estudiante del extranjero que vino a su salón de clases, si, era su compañero de clases, si mal no recordaba se llamaba...

-¿Silver?- levantó una ceja tomando algo de distancia con él.

-Recordaste mi nombre, que bien- le sonrió cortando esa distancia que antes había puesto el mayor.

-¿Qué quieres? ¿Viniste a pedirme algo o qué?- no pensó mucho para ponerse a la defensiva.

Ese cara de estúpido y la enorme sonrisa que se traía, si no le tenía miedo, o lo trataba con odio, significaba que quería algo de él, asi que mientras más rápido diga que quiere más rápido se irá de su campo de visión.

-¿Qué? Oh no, vine aquí a dibujar- se apresuró a explicar -cuando de pronto ví como llegaste con tu instrumento y te pusiste a tocar, me gustó mucho como sonaba esa música, sin poder evitarlo, te terminé por dibujar -lo último lo menciono con cierta pena, mientras le mostraba al más bajo la libreta de dibujos que tenía mostrándole el dibujo que había hecho de él.

Manic no podía verse menos sorprendido al ver el dibujo del menor, con curiosidad tomó la libreta en su manos para observar mejor lo que el chico había dibujado, encontrándose con un boceto realmente hermoso de él, le encantó tanto como aún con un simple lápiz había capturado perfectamente el paisaje que lo rodeaba, con mucho detalle y en tan poco tiempo.

-Tienes... Mucho talento.

-¿Yo? ¿Talento?- mostró confusión -Vaya, siempre me dicen que lo hago todo mal, así que ¿así se siente hacer algo bien? -sonrió.

-¿No has pensado en vender tu arte? Podrías ganar mucho dinero- le regresó la libreta, mientras acortaba esa distancia que hace un momento él mismo había puesto.

-No, no lo hago por dinero, solo me gusta dibujar cosas lindas-

-¿Soy lindo?- volvió a arquear una ceja.

-Muy lindo- levantó el pulgar el señal de afirmación.

-Eres muy extraño.

-Me lo dicen a menudo, ya estoy acostumbrado -se encogió de hombros con simpleza -¡Ah! Pero casi lo olvido -arrancó el dibujo de la libreta con cuidado y se lo dió al más bajo -ahora es tuyo, siéntete libre de hacer con el lo que te plazca, hasta tirarlo a la basura está bien, siempre que sea lo que quieras.

-¿Qué dices? ¿Cómo podría tirar el arte a la basura? -se quejó perplejo- creo que te falta aprender a valorar tu propio arte, es increíble... - otra vez vio el dibujo, una sensación extrañamente cálida abrazo su corazón.

¿Por qué se sentía nostálgico?

-Oye Manic...- le llamó desde su costado, sacando de su pequeño ensimismamiento al más bajo, quien le dedicó una mirada algo afligida -¿Tienes hambre? ¿Quisieras ir a comer algo?- sonrió.

Así que... ¿Esto era sentirse feliz? Porque ahora mismo podía sentir que sus ojos se bañaban en lágrimas pero no de tristeza, este chico era diferente a cualquier otra persona que hubiera conocido, no esperaba ni quería nada de él, más bien le estaba ofreciendo lo que tenía a él.

Su estómago rugió de hambre.

-Si, me gustaría -intentó imitar la brillante sonrisa que el más alto le dedicó, pero la suya salió algo torcida.

Y ese día Silver paso de ser a un simple compañero de clase en su mejor amigo.

-Por cierto, cortesía de la casa- le susurro al oido mientras le daba la bebida favorita del verdoso.

-¿No te lo va a cobrar tu novio o algo por el estilo?- se burló - ví como dejó a mi primo, es un desgraciado horrible -tomó la bebida para darle un buen sorbo. -solo dime la verdad, si te esta golpeando o algo por el estilo, yo haré lo imposible para arrancarte de sus brazos.

-No sufro de maltrato ¿Por qué todos creen que si? -se cruzó de brazos algo ofendido -más bien, Shadow es muy amable, claro que cuando tiene que regañarme lo hace con justa razón... Bueno, pero no me gusta cuando me regaña por usar su cepillo de dientes por error...

-El amor es ciego- expresó afligido -mira cómo te tiene -agarro a su amigo de los brazos para agitarlo -¡Dime ¿Qué tiene esa cosa de amable?!- ahora le dió la vuelta para apuntar despectivamente al mostrador donde podía ver que el azabache le estaba echando una mirada fulminante. -¿me va a matar, cierto?- se rió con soberbia.

-No tiene sentido que responda, porque en primer lugar ni siquiera le tienes miedo a Shadow.

-Bingo- hizo una pistola con su mano y apuntó al albino disparando un guiño con una ladina sonrisa algo coqueta.

El mayor aprovecho para terminar su bebida, mientras él albino se lo pensaba un poco antes de preguntarle lo que quería saber, aprovechando que había venido por su propia cuenta.

-Queria hablar de algo contigo - le menciona ganándose una mirada curiosa de este -pero no aquí, hay mucho ruido.

-Bien, vamos afuera entonces- se levanta sin problemas de su asiento y toma de los hombros al más alto con mucha confianza, -¿Pero a tu noviecito no le molestará que te tome prestado?- dirigió una filosa mirada hacia atrás para dirigirle otra mirada cargada de burla al oji-rojo que seguía con ese semblante serio y molesto.

-No, Shadow sabe que eres mi amigo- sonrió.

-Cierto...- por un momento su sonrisa disminuyó.

Al final terminaron por salir a hablar fuera de la tienda, donde había menos ruido.

-Bien, soy todo oídos, ¿Qué quieres saber?- le sonríe.

-Bueno... -su voz titubeó por un momento, casi sentía que sus manos se ponían algo heladas de ese sentimiento complejo que sentía de solo pensar en lo que quería saber -me preguntaba si... Uhm... Si...

-¿Quieres saber de Nicky?- le interrumpió antes de que se mordiera la lengua de tanto hiperventilar, lo cual el más alto agradeció -¿A poco los rumores eran ciertos y te gusta el cara de idiota?- levantó una ceja.

-No son ciertos, solo estoy preocupado por él...- aclaró. -Fue mi culpa todo ese mal entendido, y por eso quiero arreglarlo cuanto antes.

El verdoso le dedica una mirada llena de reproche, no le gustaba para nada que fuera tan amable con todos, porque por esa misma amabilidad terminaba envuelto en situación complicadas, y está era una de esas situaciones, pero no podía no echarle una mano al menor.

-En realidad no me llevo tan bien con mi primo, y hace tiempo que no voy a casa de mis tíos, asi que no sabría darte respuestas de él- se encogió de hombros -pero podría darte la dirección en dónde vive.

-Sí se dónde vive, pero no creo que nadie quiera que se aparezca de la nada en tu casa alguien que no te agrada.

-Tienes razón- solo se encogió en su sitio, no podía refutar ese hecho -entonces ¿te doy su número? -propusó.

A Silver le pareció buena idea, por lo que terminó aceptando, pero algo le decía que tal vez no era la mejor opción.

-Oye, ya me voy, pero si de casualidad quieres salir a algún lado, llámame -con el típico gesto que le haces a alguien para que no olvide llamarte y una sonrisa ladina, se despidió -y vendré por tí - con un guiño, se retiró en su limusina.

Silver le despidió amigable con los brazos bien arriba, pensando en que ahora podría tener un justificativo para escribirle al azul, pero mientras él pensaba en todas las posibilidades, desde la parte de arriba de la cafetería, en el apartamento que Silver compartía con Shadow, unos ojos profundos le observaban silenciosamente.

Silver caminaba de un lado a otro algo nervioso, mientras esperaba que le llegara alguna respuesta. Había intentado escribirle al erizo azul, pero no había recibido respuesta alguna de él.

-No creo que escribirle sea la mejor manera de acercarse- le riñe el azabache que leía el periódico detrás de él, mientras tomaba su taza de café. -No va a responder.

-También pensé en eso, pero creí que tal vez como ya no se mostraba tan recio a mi precensia, me contestaría -suspiró.

-Aun tienes mucho que aprender sobre cómo funcionan las relaciones interpersonales -da un sorbo a su taza -bueno, no soy el mejor para decir este tipo de cosas, pero estoy seguro que así no funciona.

Bueno, tampoco podía culpar al menor, ya que jamás había tenido la oportunidad de interactuar con más chicos de su edad, hasta que decidieron enviarles a esta misión.

-Todo esto se debe a la paliza que le diste -le reclama un poco frustrado-¡Ahora nunca querrá vernos a la cara!- cayó de rodillas al suelo afligido.

En aquel momento que discutieron sobre si Nicky era o no Sonic, Silver había asegurado que aún no estaba al 100% seguro que de que el chico fuera Sonic, pero en realidad era él quien no quería creer que Sonic se estaba haciendo pasar como un estudiante llamado Nicky, porque si asi era, había actuado tan bien que hasta había engañado a su predicción y su habilidad para leer corazones.

De todas formas, aquella pelea causó que el cobalto se alejará, justo lo que había temido, Sonic iba a empezar a evitarlos, y él no quería eso, genuinamente dentro de su corazón, no había querido causarle problemas al azul, pero tal vez se sentía demasiado inquieto por la situación que estaba siendo algo invasivo.

En serio tenía muchas ganas de volver a ver al cobalto.

-Pues eso creé él, si lo intenta, no dudaré en ir a su casa y sacarlo a golpes -formó con resentimiento un puño con su mano, apretándolo con fuerza.

-¿Qué hablamos sobre golpearlo?

-Tu método pacifista no nos está llevando a ningún lado- amonesta molesto, pero toma un bocado de aire para calmarse -soy muy paciente, pero esto se está llendo de mis manos, por ahora GUN no sospecha nada, pero eso no asegura que no nos tengan vigilados, si se dan cuenta, le dirán al cuartel, y la misión se verá frustrada.

-¿Sospechas de Rouge?- el azabache asintio.

-Parece ser que hay que tomar medidas drásticas- en ese momento dejó su taza de café sobre la mesa.

-¿A qué te refieres?

-Si no podemos contactar con el idiota, haremos que quien mejor le conoce nos diga donde está- sonrió.

-¿Quién le conoce mejor? Espera -el albino se muestra escéptico -te refieres a... -recibió un asentamiento por parte del más bajo.

-Ya sabes qué hacer.

El albino asiente, aunque sentía que tal vez no era la mejor idea que se le podía ocurrir al mayor en estado de sobriedad.

-Mighty ¿Estás ocupado?- una voz suave que no buscaba ser impertinente, llena el gran espacio que era el recibidor de cierto laboratorio.

El armadillo se encontraba bajando un par de macetas de un altillo en su laboratorio, ya que pensaba hacer algo de "limpieza" aprovechando que las vacaciones de invierno estaban a la vuelta de la esquina, después de la entrega del proyecto final y los exámenes parciales, pero no pudo evitar no prestarle total atención al erizo recién llegado, tras reconocer al dueño de esta tranquila voz.

-Silv, ¿Qué te trae por aquí? Hoy no hay nada pendiente en el cronograma- tiró lo que tenía en manos para saltar de la escalera, aterrizó en el suelo y se aproximó al albino para recibirlo con un gentil abrazoque el más bajo correspondió -¡No me digas!- añade algo asustado -¿Espió tiene algún reclamó sobre cómo he administrado el jardín este último mes?-

-No, en realidad vine por otra cosa- trás separado el abrazo, no pudo evitar formular una expresión que reflejaba inquietud, inquietud que notó de inmediato el armadillo.

-¿Vas a preguntarme qué pienso de los rumores esos sobre tu novio y tú?- otra vez se adelantó, dejando sin espacio al contrario de explicarse -Ya aclaraste ese mal entendido, y la gente ya no está haciendo tanto alboroto, además, tu noviecito tiene amenazado a todo el mundo, así que ¿Qué podría preocuparte?- el más bajo negó con la cabeza -¿Entonces?- levantó una ceja sin entender.

-Pense que cuando aclarara todo, Nicky vendría a clases de nuevo, pero sigue sin asistir...- su mirada pareció reflejar cierto desdén mesclado con una clara intranquilidad -y me preguntaba si de casualidad tú... ¿Sabrías algo de él?

-Nada, la última vez le escribí como su presidente de clase para comentarle que está semana serían los parciales, pero ni siquiera se digno a decir «Okey» me dejó en visto -se quejó.

Era claro que se sentía molesto por esa actitud tan retraída que había mostrado el azul, pero conociéndolo, era seguro que se sentía tan apenado de la situación, que no daría la cara en un buen tiempo.

«¿Aun que eso signifique perder el parcial?» Mighty no estaba del todo seguro, Nicky tenía buenas notas, pero las faltas, y el hecho de no haber elegido un club este parcial seguramente arruinarían sus calificaciones y hasta podría desaprobar.

-¿Tú crees que algo malo le pasó?

-No, no creo, lo único que se es que Tail trajo un permiso que ha ido extendiendo a lo largo del mes, y que estaba firmado por sus representantes - le explica, pero al ver su incertidumbre, se le hizo difícil no decirle lo que él creía podía ser cierto, o era cierto -Silv, mirame- le pidió ganándose la mirada triste del más bajo -Yo creo que Nicky no ha venido a clases, por tí y Shadow.

-Pero ya aclare los malos entendidos - añade.

-No se trata de eso Silv, se trata de orgullo, Nicky seguramente se siente destrozado.

-¿Por qué?

«Porque le gusta tu novio, y no te soporta» Mighty pensó, pero está vez ya no tuvo el valor de decírselo.

-No se, solo dale tiempo..

Lamentablemente eso era lo que menos tenían, tiempo, y Shadow se encargó de recalcarle eso muy bien, pero por ahora la conversación iba muy bien, justo como él quería.

-Tails ¿Sabes dónde está? -el armadillo levanto la ceja algo confundido -Solo quiero... Hablar de algo con Tails- sonrió. -pero no sé dónde encontrarlo.

Migthy le miró para nada convencido, pero esa sonrisa del más bajo terminó derritiendo su corazón.

-Esta en el club de robótica, que se encuentra en el bloque 3B, se supone que ya nadie está obligado a quedarse en sus club hasta terminar la semana de exámenes, pero según Ray, Tails no quiere salir de ahí, no habla con nadie, apenas habla con Ray, prueba aver si tienes suerte.

Silver le dió un fuerte abrazo al rojizo como forma de agradecimiento, se marchó sin esperar más para ir en busca de ese salón, mientras Mighty solo podía mirarlo con cierto pesar.

-Oh Silver, me sorprende que seas tan bueno aún con un tipo que te quiere quitar al novio- se veía afligido por lo irónica que podía llegar a ser la vida.

...

Silver estaba algo nervioso, ya que aún no estaba acostumbrado a hacer misiones solo, porque solía pensar de más por su inseguridad y así terminaba por arruinar todo, por eso era pertinente que Shadow estuviera con él para que no se metiera en problemas, pero el mayor le explicó muy bien que esto era algo que él debía arreglar por su cuenta, pues ya venía siendo hora de que camine sin tomarlo de la mano, además de que él necesitaba estar presente en el club de natación, porque había prometido a los más pequeños que en la siguiente clase les enseñarla a sumergirse y nadar bajo el agua.

Por fin había llegado al bloque 3B, llegó al club gracias a qué preguntó amablemente a varios estudiantes dónde quedaba el salón de robótica, hasta que consiguió llegar.

El pasillo que daba al club estaba completamente desolado, y el ambiente se sentía algo pesado, ciertas luces del pasillo parpadeaban dándole un aspecto algo lugubre, notó entonces que de dentro del club se asomaba una tenue luz, junto a un desquebrajado murmullo que se arrastraba debajo de la puerta hasta llegar a sus oídos.

«Alguien está adentro» su mirada se endureció, no tardó en pegar su oreja a la puerta para escuchar mejor.

«-Se ha logrado estimar que la tasa de delincuencia ha ido en aumento este último mes, las apariciones del héroe de la ciudad se han reducido a cero, acaso ¿Nuestro héroe número 1 no quiere aparecer en público?-»

«Espera...» su expresión detonó confusión «Esa es la noticia de Sonic...» una noticia que ya estaba muy quemada por todos lados, la gente que quería mucho al erizo azul no dejaba de sentirse afligida por su desaparición.

Se suponía que está semana se llevaría a cabo ese evento en su honor, lo sentía algo muy rebuscado e innecesario para alguien que llevaba perdido un mes, pero entendía que no era cualquier tipo, era Sonic the Hedgehog, el héroe más amado no solo de Hedgehog Town sino del mundo.

Con algo de valentía abrió lentamente la puerta notando una luz tenue salir de esta, el rechinar de la puerta le puso las púas de punta, pero al ver que solo se trataba de la puerta se tranquilizó tras tres bocados de aire profundos, finalmente ingresó al lugar.

«-Ante toda esta ola de delincuencia, la gente se pregunta ¿Dónde está Sonic the Hedgehog? ¿Dónde está nuestro héroe?-»

Lo primero que vio fue que el sitio estaba a obscuras, excepto por una pequeña pantalla que transmitía aquella noticia y a su vez alumbraba la sombra de una figura que estaba quieta frente al objeto.

«-Ante toda esta ola de delincuencia, la gente se pregunta ¿Dónde está Sonic the Hedgehog? ¿Dónde está nuestro héroe?-»

Esa parte se volvió a repetir, y otra vez se repitió.

«-Ante toda esta ola de delincuencia, la gente se pregunta ¿Dónde está Sonic the Hedgehog? ¿Dónde está nuestro héroe?-»

Cómo si estuviera en un bucle sin fin, la figura solo se movía lo suficiente para regresar la grabación a esa parte en específico.

Silver ya cansado del apagado y tenebroso aspecto del sitio, decide encender la luz, encontrándose al zorrito amarillo que había estado buscando -quien se había tratado de la silueta que vislumbró hace poco- inmediatamente notó que todo el sitio estaba en caos, con basura y restos de comida por todas partes, hasta olía algo mal, por lo que su cara reflejó cierta repulsión, quería vomitar.

-Ehm... Hola...- por fin se atrevió a hablar al ver que el zorrito ni se inmutó ante su presencia, pues seguía reproduciendo la noticia en ese bucle.

Siguió sin responder.

Silver se ve ciertamente afectado por su estado, pues su rostro reflejó tristeza, ya que si sus sospechas eran ciertas, quien más estaba afectado por la noticia de Sonic, era él...

-¿Tú sabes dónde está él, cierto?- su voz, que antes sonó tímida, ahora detonaba una seriedad sobria de todo pesar.

De una forma casi abrupta o instantánea, el zorro volteó la cabeza para encontrarse la mirada algo nerviosa del albino, sus ojos azules miraron con una profunda incertidumbre los ambar del más alto, transmitiendo en esa larga mirada una frustración reprimida y horas de sueño acumulado de no haber podido dormir bien de tanta ansiedad y preocupación.

Esa mirada inyectada de un sepulcral silencio logró intimidar lo suficiente al albino para reconsiderar si el hecho de venir a confrontarlo fue buena o mala idea.

-¿Quién?- quería, ante cualquier duda, serciorarse si había escuchado mal, pero su mirada fija no se apartó del más alto.

-Sonic- intentó no titubear, pero era difícil.

Un silencio sepulcral inundó aquel taller, mientras ambos chicos no dejaban de luchar con sus miradas, hasta que de un momento a otro, las luces de la habitación comenzaron a parpadear, y en ese instante el zorro amarillo desapareció de su sitio.

-¿Qué?- algo pareció apretar su garganta, tal vez el desconcierto que sintió ante tal movimiento, pero no tardó en empezar a buscar con la mirada al más bajo, pensando en que había escapado, junto a su oportunidad de saber dónde estaba Sonic.

Las luces no dejaban de apagarse y prenderse, haciéndole complicada la tarea de localizar al zorro, hasta que sintió como algo realmente duro y frío golpeó sin temor su rostro tirandolo contra el suelo, si no fuera por la pared habría salido disparado por la ventana.

-Agh... No estaba listo- farfulla con la espalda contra el suelo, mirando el opaco techo del lugar.

Ese golpe le había aturdido lo suficiente como para necesitar un respiro y olvidar brevemente su nombre, pero se puso de pie en cuanto pudo, aún así por las mismas recibió otro golpe -esta vez en su costado derecho- mandándole contra un montón de chatarra metálica que estaba tirada por ahí, haciendo demasiado ruido en su caída.

Otra vez se quedó sin aire, pensaba ponerse de pie tranquilamente para analizar la situación, pero no pudo pensar lo suficiente al verse interrumpido por lo que parecía ser una cola robótica que con un filo prominente iba directo a su cabeza.

-¡Espera! ¡No vine a pelear!- logró esquivarlo por poco al tirarse por un costado, pero terminó rodando por todo los demás restos de basura metálica haciéndose pequeños cortes en sus brazos y piernas. -¡Dame un momento!- pidió al ver que la cola metálica no paro solo ahí, sino que arremetió como pudo contra él tirandolo al suelo otra vez.

Soltó un quejido adolorido, su espalda dolió por ese golpe, pero otra vez no le dió tiempo ni de respirar porque la cola volvió a lanzarse contra él, Silver ya algo cansado de esto, decidió no esquivar en esta ocasión, sino que con sus manos desnudas agarró el brazo y lo sostuvo con fuerza frenando su ataque.

-¡Te dije, vine a...! ¡Hablar!- peleaba fuertemente contra la cola que no dejaba de removerse de un lado a otro tratando de librarse del agarre del erizo, para pesar de este, no tenía tanta fuerza en sus brazos como le habría gustado tener, haciendo la tarea aún más complicada.

Silver supuso que el menor se estaba ocultando entre las sombras usando el parpadeo de las luces a su favor, por lo que tendría que si o si intentar salir de ahí para ganar tiempo, o eso pensó antes de ver como otra cola salía de las sombras sujetando el brazo que agarraba la otra cola.

-¡Espera! ¡No, suelta!- trató de librarse de la otra cola, pero está consiguió apartar su mano del brazo número uno, jalando de él para levantarlo del suelo, mientras el primer brazo se enrollaba en su cuello y brazo libre, finalmente salió otra tercera cola que lo tumbó contra la pared sacándole el aliento -eso último si dolió... Dolió mucho...- aún así, con el dolor que sentía, levantó un pulgar en señal de que lo estaba haciendo bien. -Bien hecho, me tienes atrapado...- por fin dejó de resistirse, después de todo era ya inútil con esos tres brazos que lo tenían totalmente inmovilizado.

Otro silencio abrumó la habitación, momento en el que Silver se dedicaba a recuperar el aire que había perdido.

-Tenía mis sospechas respecto a tí y ese tipo de nombre Shadow, pero no pensé que vendrías directo a la boca del lobo- de entre las sombras emergió Tails, con un semblante serio o hasta algo irritable, Silver notó que esos brazos metálicos en realidad salían del pequeño zorro, como si fueran parte de él, como sus colas, y aún tenía otro brazo metálico libre para usar en su contra -Ahora me vas a decir ¿Por qué buscas a Sonic?- sonrió de forma casi psicótica mientras acercaba amenazante su cuarta cola hacia el cuello el más alto -Si no hablas ahora, no dudaré en abrirte la garganta, así ya no hablaras nunca más.

Ni con la amenaza y sus claras intenciones de cortarle el cuello el Albino no flaqueó, al contrario sonrió sutilmente.

-Asi que sí sabes dónde está Sonic...

En realidad Silver ya había tenido sus sospechas hace mucho, mejor dicho, fue Shadow mismo quien teórizo que si Nicky era Sonic, ese zorro molesto que le seguía a todos lados, el mismo que había ayudado varias veces al héroe de la ciudad, debía ser su cómplice, y tal parecía sus sospechas fueron acertadas.

Ante esto el oji-azul frunció el entrecejo, y sin temor movió su mano listo para degollarlo.

-No vine a pelear, solo quería llegar a un acuerdo...- ante todo, el albino se mantuvo firme sin titubear.

-Sonic no está a negociación- aseguró con alta determinación, su mirada casi parecía destilar fuego -asi que mejor prepara tus últimas palabras...

-Si me haces algo, Shadow vendrá a por tí -trató de disuadirlo por segunda vez.

-Si piensas que le tengo miedo a tu "novio" créeme que estás equivocado, porque no hay nada que me asusté más que perder a Sonic, así que no pienso entregarlo- escupió -si, tal vez venga a por mí, pero para ese momento me habré encargado de tí, no quedará rastro alguno de que estuviste aquí, y el ácido me ayudara con esa tarea- volvió a sonreír de forma siniestra.

Silver entendió en ese momento que la muerte era inminente, junto a la nítida necesidad del amarillo en querer partirle el cuello, por lo que se vio obligado a actuar en defensa propia.

-Pido disculpas con anticipación - en un instante las colas mecánicas fueron destrozadas por una fuerza desconocida e invisible, permitiéndole librarse --pero no me dejaste opción, habría querido llegar a un acuerdo contigo, pero no se pudo- dió un salto hacia el frente tomando con gentileza la cabeza del más bajo entre sus delgados dedos -Lamento la intromisión, pero necesitaré entrar a tu cabeza.

Tails no entendió qué había pasado con sus colas, pero no pudo hacer nada por tratar de defenderse contra la fuerza abrumadora que ganó en un instante el contrario, su cuerpo no reaccionaba a sus órdenes, era casi como si algo lo estuviera sujetando con fuerza, pero no podía ver que era, en ese momento pudo observar como Silver era rodeado por una especie de aura brillante, y luego todo se volvió oscuro.

Había perdido el conocimiento.

«Pero... Sonic... Quiero ayudarte»

«-Entonces, cuida de mi siendo Nicky, mi pequeño amigo»

«Ya no soy un niño»

«-Lo sé...eres mi ultima esperanza»

La cabeza de Silver empezó a doler mientras muchas imágenes y recuerdos de la vida de aquel zorrito aparecían en su cabeza, junto a un dolor insoportable en su cabeza y un zumbido doloroso que parecía querer romperte los tímpanos, de pronto el aura de tono verdoso que lo rodeaba se desvaneció.

Tails cayó de rodillas tras no soportar su propio peso, pero fue sujetado con suavidad por Silver, quien solo podía reflejar incertidumbre en su misma perplejidad, ayudó a recostar en el suelo al pequeño zorrito adormilado, al cual observó en silencio.

-Él... No me quiere ver- sus ojos parecieron empañarse en lágrimas -no... Él no tiene el valor para verme- ante los complejos sentimientos que lo abordaron, se sintió desprotegido, sintiendo como cada uno invadía su corazón causándole un dolor insoportable.

Peor que sentir todos sus huesos tronar, peor que sentir una daga en el corazón, peor que sentir como un rayo te cuece a fuego lento, peor que sentir como la persona que más quieres en el mundo ha decidido abandonarte por su propia cuenta, sin pensar en ningún momento en volver atrás.

En momentos como estos solo podía darse consuelo él mismo en un vacío abrazo que apenas le transmitía calidez más allá de su propio desasosiego, esa incertidumbre de no saber si algún día volverá a ser verdaderamente felíz.

Se sentía tan solo...

Su cuerpo temblaba, no pensó que sus propios sentimientos se mezclaran con los del pequeño zorrito, pudiendo sentir sus emociones y recuerdos dolorosos, ese amor y devoción que Tails sentía por Sonic era inexorable e inquebrantable, hasta el punto de querer dar su vida por él.

Ahora entendía lo importante que era Sonic para este zorrito.

Pero Sonic también era importante para él...

-Disculpa, no quería lastimarte...- le echo una lamentable mirada al zorro con esa sonrisa apagada en su rostro -Yo solo quería...- su mirada se agachó, su garganta dolía, sentía que otra vez empezaría a llorar -me siento tan mal...- inútilmente intentó limpiar las lágrimas que bajaban por sus mejillas.

Ahora mismo tal vez le costaría un poco levantarse y seguir adelante, por eso decidió quedarse así, quieto, hasta sentir que sus emociones volvían a estar bajo su control.

...

-No recordaras nada de nuestro encuentro, y todo lo que destruí está igual a antes de venir, asi que descansa mientras- había colocado al zorrito sobre aquel mueble para que descansará más cómodo -tú también cargas con un gran peso sobre tus hombros, pequeño - sonrió de forma gentil sin importarle que hace poco lo mataba -espero pronto te reconcilies con él, no es bueno pelearse con alguien que quieres mucho.

Sin más abandonó el lugar, mientras sacaba su móvil, en dónde empezó a buscar un número en específico, al encontrar a Shadow, le marcó.

-¿Qué encontraste?-.

-No puedo darte los detalles, pero ahora estoy 100% seguro de qué Nicky y Sonic son uno mismo.- por un momento se creó un breve silencio del otro lado de la línea, preocupando un poco a Silver, por lo que intento romper ese silencio -¿Cuál será el siguiente movimiento?

De pronto frente a él apareció el azabache, quien había creado un partal hasta su ubicación, en dónde apareció, sujetando una piedra brillante de color verdoso en su mano.

-Ya lo dijiste-.

-¿Si?- mostró cierta confusión en su agotado rostro, su sonrisa había desaparecido.

-Debemos ser amables, hasta que él confiese- pero por otro lado, una sonrisa se dibujo en los labios del azabache.

Continuará.

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N/A:
En definitiva, este es el episodio que más me ha costado hasta el momento ¡Hasta más que el anterior que dije que me costó! Fue una barbaridad, no solo el bloqueo o porque mi estado de salud empeoró, sino que la sola idea de todo el episodio fue una piedra en mi zapato.

Habían partes donde me preguntaba, ¿Es necesario? Y otras dónde ¡Es necesario! Este episodio es toda una pasada, pero no quiere decir que no me guste, es solo que es un episodio muy pesado y poco digerible, espero que con todo igual les haya gustado.

¿Lo peor? Es que tuve que partir el episodio a la mitad o iba a quedar inmenso, y eso que ya es largo, bueno, Tomenlo cómo compensación de dos semanas sin sacar nada.

Bueno, solo diré que no siempre el que más sonríe es quien está verdaderamente felíz (⁠。⁠•́⁠︿⁠•̀⁠。⁠)

En este episodio hubieron 3 protagonistas, me pueden decir ¿qué tienen en común o que palabra clave se repite entre las tres historias? (El que me diga la respuesta, dedicación segura para el siguiente episodio→)

Ya se, antes dije que en el próximo episodio se seguiría el embrollo de Nicky, pero tuve que cortar por presupuesto ¡Pero en el siguiente si va a salir Nicky! Es seguro, aunque no se si le echan de menos ¿Le echan de menos? XD

Nicky tipo: ¡Hey yo soy el protagonista!

Yo; jah, hablo el personaje secundario.

Nicky: ಥ⁠╭⁠╮⁠ಥ

¡¿Sorprendidos de saber qué Shadow y Silver tienen una cafetería?! Yo en lo personal tenía está idea desde los primeros borradores de la historia (que por cierto han ido cambiando bastante) y quería si o si que tuvieran un café juntos, jsjsj amo el cliché de la cafetería, no me pueden culpar ಥ⁠‿⁠ಥ

A ver, el episodio es muy largo y pasan muuuuchas cosas, asi que voy a recapitular lo más escencial en las tres historias.

Primero, Amy, se nota que después de romper con Nicky le cayó un balde de puras desgracias, pobre mi niña, no tienes por qué sufrir tanto ಥ⁠‿⁠ಥ ) pero en parte eso ayudo a que su casi muerta amistad con Surge reviva de la tumba, ¿Qué piensan de su amistad? ¿Amy hace bien en esforzarse tanto por ayudar a Surge? ¿Surge merece la ayuda? ¿Les agrado su mini Historia? (Me pareció muy gracioso ciertas interacción de Surge con Amy)

Por cierto, aún queda pendiente la paliza que Surge le dará a Nicky cuando se le encuentre, que por cierto será prontooooo~

Otro detalle que casi se me pasa, se me partió el corazon cuando Amy trata de consolar a Sonic, se nota que muchas cosas pasan por su cabeza ahora mismo.

Oh, pero aquí vamos a la parte que más me costó hacer, la historia de Manic, tenía muchas dudas al respecto, y entre los bocetos originales tenía planeado algo completamente diferente, pero luego recapitule y trate de comprender mejor al personaje de Manic (que es un personaje que me gusta) lo cual me llevo un tiempo, pero tras tenerlo bien entendido, por fin pude darle una mejor caracterización.

No quiero que les caiga mal Manic, se que en las pocas apariciones que ha tenido parece una piedra en el zapato de quién acompañe, y lo es, pero es porque aún no han visto totalmente la cara de su moneda, y lo que he mostrado en este episodio a penas es un pedazo de lo que guarda, y respecto a sus secretos, Pero si, es un personaje algo peculiar.

¿Qué teorías o comentarios tienen al respecto de él en lo que se contó de su historia? Cómo si amistad con Silver, o sus pensamientos sobre Sonic ¿Que oculta? (Dedicó cap→)

Me encantó bastante escribir como Manic y Silver se hicieron amigos, me parece muy lindo, y como por ahí dicen, por cada amante de la música, tiene a su amigo artista, jsjsjs

Por cierto, Manic con la percepción de la realidad alterada, le sudan los huevos que tiene a qué le cae del culo Shadow y no le pesa la lengua para insultarlo cada que puede, y aún así Shadow no lo mata, ¿Qué pasa aquí? Jajajajah Manic Untouchable <⁠(⁠ ̄⁠︶⁠ ̄⁠)⁠>

Tiene suerte que Shadow tiene una paciencia de aquí al infinito, se que no se nota, porque parece que Shadow siempre anda agresivo, pero en realidad él es muy paciente, (hasta diría que más que Silver) y las veces que se ha visto muy enfadado, siempre tienen que ver con cierto erizo azul, así que ya saben, menos irá contra el negro, él no tiene la culpa de ser negro (⁠ ⁠'⁠◡⁠‿⁠ゝ⁠◡⁠'⁠)

Ojo, en todo el episodio estuve tirandoles en la cara el "noviazgo" de Shadow y Silver, y que aún sigue como algo ambiguo, pero está vez quería hacerlo en forma de diversión, me da mucha risa por ratos, es tan lindo, pero pronto, muy pronto explicare el origen de su relación.

Ahora mi otra parte favorita pero depresiva a más no poder, la historia de Silver.

Digo, para ser un personaje lleno de inocencia y que solo sonríe, este no ha sido su día, y créanme que tenía la inmensa necesidad de mostrarles este lado de la moneda que pocos ven.

Cómo leí en varios comentarios desde que Silver apareció por primera vez, y como Nicky decía, alguien que solo sonríe no puede ser bueno, o que muchos siguen dudando de que Silver sea amable, pero yo confirmo que es un ángel, en todo el sentido de la palabra, genuinamente le nace ayudar a otros, y por eso no se centra en cumplir la misión que tiene, por eso Shadow se lo anda puteando por pendejo, xd

Claro que nadie es perfecto, y en dónde hay bondad hay oscuridad, espero pronto llegar al episodio donde contaré más la historia de Silver, porque esto también solo es una pequeña punta.

Ya, centrandome de regreso a la historia de Silver, en efecto, Shadow tenía sospechas y esas sospechas terminaron siendo ciertas, por eso Silver decidió confrontar a Tails (que por cierto me gustó escribir su pelea, pero Tails las tenía de perder desde el inicio, es fuerte, pero Silver... Bueno, el no es normal) al final Tails terminó siendo más de lo que aparentaba.

Por cierto, recuerden que en esta historia Tails tiene la misma edad que Nicky, no es para nada un niño o mucho menos pequeño, está en toda su adolescencia rebelde, (además a propósito hice referencia a Nine) me encanta, siento más a este Tails como un Nine, ahora con esta nueva perspectiva de su personaje entenderán su forma de actuar en escenas y episodios anteriores, además de confirmar que él sabía de Sonic.

Se me agüito el corazón con la escena final de Silver, y como se siente respecto a Sonic, son sentimientos muy complicados que él no entiende completamente, o la vida solitaria que vive Manic, y las tragedias que ha pasado Amy, sin contar las menciones honorificas cómo Surge y Tails, es en definitiva un episodio muy deprimente (y no hablo de deprimente gracioso como el de Kit, esto si deprime) (su parte menos fav o más triste→)

¿Mi parte fav? Bueno, me dió risa varias partes de Surge con Amy, y Amy ahí haciéndola de mamá regañona y lo mismo Shadow regañando a Silver en todo el episodio, o Manic insultando a Shadow, también cuando Silver intento hacer una huelga y el Shadow le dejo plantado ahí en el piso, pobre cosita fea... (¿Y si parte fav?→)

Me gustó la escena final, Silver todo abatido y el Shadow felíz porque por fin ha confirmado sus sospechas, pero ahora ¿Qué significa eso? ¿Qué creen que haga Shadow la siguiente vez que vea a Nicky/Sonic? (Dedicó cap→)

Mención Honorífica a los ojos que observaban a Silver desde el departamento ¿Qué o quién creen que sea? (Dedicó cap→)

Llegamos a la parte del dibujo, en esta ocasión prepare este de acá.

Personalmente no me terminó de convencer del todo, pero desde que pensé que quería que tuvieran un café, me decidí por hacer este dibujo (que ya es viejo también) Espero les guste. (Por cierto, me gusta recalcar en esta historia que Silver le gana por unos cuantos centímetros de altura a Shadow, jsjsjs)

Yo sé, a este punto de la historia hasta yo dudo de que sea Sonadow/Shadonic la historia, pero creanme que si lo es, solo falta mucha paciencia y amor hasta que los clavos se acomoden perfectamente, entonces, todos serán recompensados, así que no me maten por ahora.

Espero que este episodio sea el primero y último tan largo que hago, espero y los siguientes sean más cortos, ya que lo que menos quiero es aburrirlos con la historia, pero recuerden que todo lo que yo escribo tiene una razón de ser.

No estoy segura, pero se supone que regresaré a clases en Noviembre, y la razón por la que he estado publicando sin mucho retraso está historia es por mis vacaciones, asique no sé si aún cuando vuelva a clases se mantenga mi casi inexistente horario de capitulo nuevo cada martes, esperemos que sí, porque está historia me está emocionando mucho.

Lo malo, es que como comenté, mi salud ha empeorado un poco, y estoy teniendo algunos problemas, pero espero que todo se solucione rápido.

Iré a ver Fnaf la película en cines este sábado, espero no salir decepcionada.

Ptt. Es muy probable que cancele MAR, mi otra historia Sonadow en emisión.

Sin más que decir, no olviden de comentar, dar estrellita ★ y compartir la historia con sus amigos, me hace muy feliz<3

Nos vemos en la siguiente actualización!
Bye!

By:
|@LuliTan2|

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