Capítulo 6

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

[...]

-Y esas son las pautas a seguir para que completen el Proyecto de este fin de parcial, espero no encontrar plagios, así que citen correctamente- era la voz del maestro tutor de Nicky, quien estaba presentando pantalla en la computadora un proyecto como ejemplo.

Ahora el erizo azul se encontraba -en efecto- en clases virtuales, debido a lo ocurrido el día lunes con el enfrentamiento de Sonic y el Dr. Robotnick, la escuela ya estaba preparada con los planes de contingencia cuando ocurría un atentado así, por lo que para no perder el avance de sus estudiantes, las clases pasaron a ser vía online, pero no por mucho tiempo.

Nicky no le estaba prestando tanta atención a la clase, pues estaba jugando un videojuego junto a @superbluefans#1, que trataba de cooperar con tu compañero, dónde debían apilar bloques, mientras evitaban caer de las plataformas, si lo hacían morirían atravesados por los pinchos.

Nicky cayó de la plataforma muriendo.

@superbluefans#1 escribió dentro del juego:

«Jah que estupido»
10:34am.

El cobalto frunció el seño.

-Como odio los pinchos...

De pronto recibió un mensaje por su chat.

Tails:
«Presta atención a clases, después Knuckles te pregunta, y tú me andas preguntando a mí»
10:40am.

«Es aburrido, si ya se todo eso ¿para que escuchar?»
10:42am.

Que forma de distraerlo del juego, volvio a entrar, mientras el maestro seguía hablando.

-Hasta entonces, cuento con el presidente de curso para que les reciba el trabajo, y que por favor no olvide de ir personalmente a la casa del estudiante con necesidades especiales, para recoger su proyecto-

-Estece tranquilo profesor, lo haré- se escuchó la respuesta del presidente, que encendió la cámara en ese momento.

Nicky observó por un momento al armadillo de ojos azules, siempre era tan amable y tranquilo, dispuesto a ayudar a sus demás compañeros con una gran sonrisa.

Si fuera Nicky ya estaría quejándose porque sería trabajo extra, ¡Por Chaos! No entendía como había gente así de amable, como si su vida dependiera de la de los demás.

Y como si leyeran su mente, Knuckes escribió en el grupo que tenían los dos junto a Tails.

Knuckles:
«El presidente debería preocuparse mas por si mismo, que buscarle soluciones a la vida de los demás»
10:51am.

«Le tienes envidia al presi, me lo dijo un pajarito»
10:52am.

«Fue Tails»
10:52am.

Tails:
«¡No me exhibas!»
10:52am.

Knuckles:
«Es un creído, solo sonríe con esa cara de idiota que tiene y no le gusta pelear, se hace llamar "Pacifista" como si fuera el niño perfecto, lo que más odia un guerrero como yo, mi enemigo jurado»
10:53am.

Knuckles:
«Bah, si me aceptará un 1vs1 lo haría papilla»
10:54am.

Tails:
«Lo dice el que MENOS se preocupa por él»
10:56am.

Knuckles:
«No es así, es un tonto, porque en realidad es un debilucho, debería aceptarme el reto»
10:53am.

«Hablas como un novio celoso»
10:54am.

Knuckles
«¿Quien está celoso?»
10:55am.

«¡No niegas que es tu novio!»
10:55am.


Tails:
«Yo lo catalogaría cómo un crush/odio lo que Knuckles tiene con el presidente»
10:57am.

Knuckles:
«¡Somos enemigos campales! ¡Guerreros destinados a luchar hasta el fin de los tiempos!»
10:58am.

«Sisi lo que digas, NOVIOS»
10:58am.

Tails:
«Aún me acuerdo cuando le hiciste esa broma a Mighty cuando éramos niños, él solo quería ser tu amigo, tu por lo contrario lo arrojaste a una alberca y casi se ahoga»
10:59am.

«¡Ay si! Yo me acuerdo de eso»
10:59am.

Tails:
«¡Claro que te acuerdas, si tú lo ayudaste! ¡Ustedes dos son unos imbéciles!»
11:00am.

Tails:
«Por eso no sé volvió a acercar a los dos desde entonces, dan pena»
11:00am.

«El dijo que Metal era horrible,
y eso se castiga con la muerte»
11:01am.

Knuckles:
«Mis razones para guardarle tanto rencor son personales, por lo que no pienso compartirlas, así que como el guerrero que soy, solo manifestarse que él era y sigue siendo un idiota»
11:02am.

Después de eso ya no comentaron más, Nicky se volvió a distraer en su juego, ya luego se pondría a terminar ese proyecto, era su menor preocupación, de paso al acabar las clases le escribió a Tails para saber si esta semana habría pijamada, pero el zorrito le comentó que está vez no habría nada, debido a que aún estaría ocupado en sus cosas, y que sería mejor que él se centrará en hacer sus tareas y no perdiera el tiempo.

Nicky decidió hacerle caso y apenas acabo su llamada, siguió continuando su proyecto, pensaba acabarlo hoy mismo, para restregarle en la cara a su amigo que es mucho mejor que él, un reto personal ridículo que tenían cada vez que uno trataba de retarlo al otro en su zona de confort, mientras elaboraba la introducción escuchaba música.

-Kenji, ve de compras al super, ya no tenemos casi nada para comer- la voz de su mamá se escuchó desde la entrada, había venido a ver al cobalto-Ya tengo que ir al trabajo, y necesito unos huevos para hacer un pastel para Tania.

-¡No quiero ma'!- se quejó estirándose en su silla gamer haciendo berrinche, odiaba que le cortarán la concentración -Mejor comprale un pastel de una pastelería, sabrá mucho mejor de lo que sea que tú prepare-¡Auch!-

Un zapato le cayó encima golpeando su cabeza.

-¡Cuento tres y debes estar afuera!- amenazó con su otro taco en mano.

-¡Espera ma' no hay que recurrir a la violencia!- la mujer levantó el zapato aún más alto para lanzarlo -¡Voy! ¡Ya estoy saliendo!¡No me pegues!- casi tropezando de por medio tomó su abrigo y salió corriendo de la habitación, tomando la lista de compras que le hizo la eriza de púas moradas.

-Que niño- se quejó la mayor, se acercó a la ventana de la habitación viendo como su hijo ya iba por la vereda con cara de amargado y quejándose.

Nicky había llegado ya al centro comercial más grande de la ciudad, siempre hacia las compras ahí, además no estaba muy lejos de su casa. Aunque en realidad no era en lo que quería gastar su viernes, pero le tocaba por ser el único varón disponible de la casa, y el hijo mayor.

-Siempre me toca a mí, que fastidio...- mascullaba entre dientes aún molesto de que su mamá le interrumpirá su tarea.

Ingresó al lugar, y tomó una canasta con ruedas, en realidad la lista no era tan grande como pensaba, así que en poco tiempo saldría, y de paso si tenía tiempo quería pasar por el salón de juegos, podría jugar en un arcade que le gustaba mucho, también tenían juegos de Sonic y Metal ahí.

Empezó a recorrer el lugar, tomando productos como; harina, galletas, café, papel higiénico, pan y siguió hasta llegar al lugar de dulces, observó que en la lista pone; 5 cajas de Sonitas, las miró con cierta molestia, pero saco las cajas una por una para tirarlas dentro de su canasta.

-¿Sabor nuevo?- leyó la nueva presentación del cereal -"Compra Sonitas con un sabor explosivo, siéntete como Sonic en sus vacaciones derrotando a enemigos con su sonrisa en su barco" -levanto una ceja -Empiezo a dudar del director de marketing, esto es ridículo- miró con fastidio la caja, pero aún así la metió en el la canasta -A Tania le encantará.

Y siguió buscando lo demás de la lista.

-Una caja de huevos...- busco con la mirada -parece que están siempre en el pasillo 12- se dirigió al lugar.

-¡Hah! ¡Corre!- Cuando trató de dar la vuelta en la esquina, del pasillo de enfrente salió corriendo un möbian despavorido.

Nicky esquivó a tiempo, mirando por sobre su hombro como ese niño de pelaje color turquesa se perdía, intrigado de saber qué había sido tan aterrador.

-¡Permiso!- otro möbian salió del mismo pasillo corriendo.

-¡Llamen a la policía!- Y dos más le siguieron.

Ahora sí tenía mucha curiosidad de saber qué era eso del que todos huían ¿Será un ladrón?

Cuando asomó su cabeza con preocupación para observar, notó con sorpresa el origen del terror de los Möbian, una enorme sonrisa surcó sus labios al reconocer ese color azul metálico.

Metal Sonic se encontraba concentrado tratando de descifrar un código imposible de analizar para sus lectores digitales, su sistema operativo parecía querer echar humo del complicado y avanzado nivel del conocimiento de jeroglíficos que requería está tediosa tarea.

No sabía si en la hoja estaba escrito Leche deslactosada o Leche descremada.

Hacer las compras era toda una batalla cuando trataba de analizar la letra de su creador.

-¡Metal!- Nicky se lanzó para abrazar al robot desde la espalda.

El androide sintió la amenaza inminente gracias a sus avanzados sensores de movimiento, que advirtieron de la presencia de Sonic the Hedgehog, por lo que se volteó y tomó del brazo al erizo para arrojarlo contra el estante, el ruido fue ensordecedor para varios transeúntes que iban de paso, algunos salieron corriendo tras reconocer al robot y ver el disturbio y caos ocasionado.

-Auch... Grandes reflejos- Nicky aun entre los desechos levantó su mano en forma de pulgar reconociendo la defensa del robot como algo digno de admiración.

El androide le dió un análisis rápido al erizo frente a él notando sus diferencias con el individuo Sonic the Hedgehog, puesto que quién estaba delante de él era Nicky, ante este resultado contundente -y clara equivocación- su modo ataque se desactivo volviendo a la normalidad, se dió media vuelta continuando con la lista de compras que tenía.

El de anteojos trató de levantarse, observando como el robot se alejaba con un carrito, eso confirmo sus sospechas.

Metal Sonic estaba de compras.

Era la primera vez que se lo topaba así, que curioso, se levantó y sacudió el polvo que se le adhirió para ir detrás del erizo metálico, tomando su pequeña canasta de compras.

Metal seguía concentrado en la lista, dónde sea que él caminara la gente salía corriendo despavorida, lo que menos querían era salir lastimados, Nicky observa aquello con cierta diversión.

-Gente de mente cerrada, no saben reconocer a un increíble héroe cuando lo ven, solo porque se ve medio muerto- y golpeó con su mano el brazo del más alto el cual desprendió un sonido metálico.

El robot le miró poco convencido, y algo ofendido por su comentario.

-¡Pero yo si lo hago!- aseguró con una gran y nerviosa sonrisa abrazando del brazo a Metal. -¡Además me enteré que peleaste otra vez con Sonic en la escuela!- el robot le miró silencio, casi parecía listo para escuchar otra ofensa -Oye, lo digo en serio, yo te doy las gracias, porque así ya no tuve que ir a la escuela, aunque las clases virtuales son tan aburridas ¡En el vídeo te veías increíble!-

Siempre buscando la manera de halagarlo, el robot cerró por un momento sus ojos holográficos analizando la situación, al abrirlos siguió tranquilamente su camino logrando zafarse del agarre del menor.

El robot siguió revisando la lista de compras que el doctor había elaborado para él.

-Si te preguntas qué hago aquí, claramente no te vine a acosar- Nicky siguió al robot desde atrás -Solo vine de compras, así que es una casualidad toparnos, yo ya casi tengo todo listo ¿Quieres que te acompañe?- propuso con cierta ilusión.

El robot parecía no escuchar, seguía sacando las cosas de las despensas, pero al ver que no lo apartó fue respuesta suficiente para que el menor le siguiera con esa sonrisa que se traía.

Avanzaron con un par de compras más, hasta que finalmente Nicky decidió soltar ciertas palabras:

-Es increíble, un día eres capturado por un científico loco, luego estás cayendo a tu muerte segura, y de pronto eres rescatado por tu héroe- aquel comentario pareció captar la atención de Metal quien se detuvo un momento en silencio -pero no es el héroe que crees, sino otra cosa- hizo una breve pausa mirando fijamente al más alto -¿Metal, sabes que fue eso que me salvó en el barranco?- la sonrisa que había tenido hace un momento se vio borrada cuando la seriedad se reflejo en su rostro.

Desde lo ocurrido ese día en el barranco, se había cuestionado la identidad de "eso" pero con tantas cosas en la cabeza y el hecho de no toparse muy seguido con su robot favorito, habían hecho que perdiera el rumbo, pero era claro que no lo había olvidado.

Nicky esperaba obtener una respuesta del mayor, lo que sea serviría, porque estaba seguro que sea lo que el gordo de su jefe había estado buscando al capturarlo, eso lo inmiscuía en sus planes, y por ende tenía el derecho de saber qué era "eso" que lo había salvado, y que seguramente lo había estado observando desde las sombras.

El robot seguía guardando silencio.

No muy lejos del par estaban dos robots; uno rojo y otro amarillo, que los observaban minuciosamente, escondidos debajo de una pila de cajas.

-¿Por qué este niño Nicky es tan descarado con nuestro hermano mayor?- Orbot salió a flote molesto por la actitud muy familiar que tenía el azul con Metal. -además ¿por qué no lo ahuyenta? Solo debe cortarlo a la mitad y será suficiente.

-Sera de su agrado, seguramente...- responde el amarillo.

-¡No es justo! Mientras él puede pasear con nuestro hermano mayor libremente agarrado de su brazo, nosotros tenemos que arrastrarnos en las sombras vigilando como ratas- su envidia era muy notable al igual que su frustración.

-Sí, quisiera estar en el carrito mientras él...

-¡Nos empuja!- completó el rojo.

-¡Si!- ambos robots se emocionaron mientras se tomaban de las manos.

Ambos se miraron soñando despiertos en aquella lejana escena en sus cabezas, verse juntos con el azul como una familia real, dando vueltas, riéndose hasta quedar sin oxigeno, y vomitar, como lo hacían los niños möbian normales.

-¡Cállense ya los dos o les cortó los circuitos!- una voz se escuchó dentro de la cabeza de ambos robots quienes se asustaron al reconocer la voz de su creador -Es suficiente con que mi lindo y preciado Metal vaya de compras, pero siempre ese erizo envidioso lo termina enfrentando, dejándonos sin comida por semanas, así que en esta ocasión quería mantenerlo vigilado, ¡y agradezcan pedazos de hojalata que aún tienen vida útil para mí, así que hagan bien su trabajo!-

-Si jefecito- dijo nervioso orbot.

-Señor, ¿podemos comprar cereal Sonitas? ¡Salió una edición limitada!- sugirió cubot emocionado tomando una de esas cajas.

-¡Cierren la boca!- les gritó en cólera, trás un breve silencio soltó -Traigan veinte cajas.

Ambos robots festejaron.

...

Mientras el trío festejaba, Nicky y Metal habían desaparecido de su campo de visión.

Ante todas las ideas y situaciones que se le pudieron ocurrir, Nicky no se esperaba para nada que el androide lo tomara entre sus brazos para meterlo dentro de un pequeño armario, metiéndose junto a él.

El erizo al verse muy cerca de su ídolo sus mejillas se pusieron rojas del calor, apenas si podía tomar distancia, pero el espacio no ayudaba, siendo muy corto y algo oscuro, para lo único que había espacio era para su corazón alterado y la mirada brillante del robot sobre la suya.

-¡¿M-me dices q-qué hacemos aquí?!- al más alto le miró con esas grandes e intimidantes iris rojizas poniendo tímido al menor -¿Qué pasa?- insistió.

En ese momento el robot apartó la mirada del contrario para enfocarla en la pared a su lado, y en un instante de sus ojos se empezó a proyectar un vídeo, Nicky observó esto asombrado.

Metal le estaba respondiendo a su pregunta, entonces ¿le iba a mostrar qué era "eso"?

Concentró su mirada en la proyección, podía ver lo que ocurrió ese día, pero desde la perspectiva de Metal, podía escuchar como Eggman apartaba la mirada frustrado, ante esto Metal se elevó en el aire volando hacia el precipicio, iluminando con su visión el cilindro donde iba cayendo Nicky, entonces logró atraparlo a tiempo, en ese momento su mirada se enfoco en el rostro del cobalto.

Ante este lindo recuerdo Nicky sonrió sutilmente, Metal era realmente compasivo y humilde, no por nada lo admiraba tanto, y aspiraba a ser igual de cool que su héroe.

Pero en ese momento ocurrió una explosión, y podía ver que la grabación se oscureció, mostrando destellos rojizos y amarillos, muy cerca de mostrar la silueta de "eso", entonces cuando pensó que podría verlo, una luz cegadora los interrumpe.

-¡Estás bajo arresto, criminal!- la puerta había sido abierta con brusquedad mostrando que ambos estaban siendo rodeados por más de veinte policías. -¡Y deja al rehén también!

El androide paro la grabación, mirando con esos lugubres ojos a los policías, quienes por un momento temblaron algo temerosos y expectantes a cualquier movimiento suyo.

Metal al analizar la situación, le dedicó un ligero vistazo a Nicky, y el menor comprendió que le quiso decir, sujetándose con fuerza de sus hombros, ante la respuesta acertada el robot no dudo en usar la fuerza contra esos individuos insignificantes.

Sin pudor, expulsó una potente onda electromecánica inhabilito las armas de los policías las cuales explotaron en el momento dejándolos a ellos desorientados y algunos inconscientes por la explosión, ante esto varias despensas y repisas habían sido arrasadas sin piedad.

Metal da un paso en frente saliendo del pequeño armario de forma imponente, el cual también había quedado destruido, dejó suavemente en el suelo al de anteojos y lo analizo rápidamente para comprobar que no tuviera ninguna herida, al confirmar que su estado de salud era óptimo, se apartó y tomó lo poco que quedaron de sus compras y se elevó en el aire saliendo disparado como una bala para no volver.

Apenas si unos policías habían logrado entrar en si, tratando inútilmente de atrapar al robot, pero fue imposible, el androide era muy poderoso.

Por poco los lentes de Nicky salen disparados ante esa última onda, se peino el fleco que se había desarreglado, y al colocarse bien los anteojos observó el enorme orificio que había dejado en el techo Metal, suspiró amargamente.

-Maldición, no tuve tiempo para decirle que tuviéramos una cita- bufó para agacharse y tratar de recoger las cosas de su canasta que habían salido disparadas.

Además había perdido la oportunidad de saber qué era eso.

-¡Jovencito, ¿te encuentras bien?!- preguntó uno de los oficiales que al parecer si le había importado su estado.

Nicky se levantó del suelo y asiente con la cabeza junto a una sutil sonrisa ante su respuesta.

Se encontraba de maravilla.

El que no se encontraba nada contento con esto era cierto científico que había observado todo desde las sombras, mientras sus dos robots lloraban la perdida de sus veinte cajas de Sonitas.

-¡¿Por qué el mundo es tan cruel?!- lloraba Cubot.

Orbot en cambio miraba desaprobatoriamente a Nicky, sobre todo le molestaba ver esa sonrisa en su rostro.

El erizo azul tomó todo lo que pudo y se fue a pagar sus compras, al salir del lugar pensó que había hecho una buena compra, y que nada faltaba.

...

-¡Cómo que no trajiste huevos!- gritaba hecha una cólera la mujer.

-¡Es que! Bueno... No había!- se excusó el azul.

La verdad Nicky no quería explicar todo el mini altercado en el que se vio envuelto con un robot asesino -del cual estaba ligeramente obsesionado- detalles menores.

Además si mal no recordaba, justo cuando trató de saludar a Metal, éste lo arrojó contra la estantería de las leches donde también estaban los huevos, todos se rompieron.

-¡Pues hubieras ido a comprar en otro sitio! ¡Kenji, piensa niño! ¡Piensa!-

-¡Ma'! ¡Tú también me exiges mucho! La calle es peligrosa hoy en día, y así mandas a tu único hijo solit-¡Auch!- no acabo de hablar porque una caja de cereal le cayó en la cara.

-¡Kenji!- los ojos de su madre estaban hechos llamas.

Día Lunes.

-Odio los lunes...- como un perezoso gato naranja, Nicky se quejaba del día menos agradable de la semana.

Ese horrible lunes que te anticipa que tus vacaciones han culminado para darle inicio a otra tortuosa semana más esperando con ansias que llegué ese hermoso viernes para descansar plácidamente.

En efecto, la cara del cobalto se veía demacrada, debido a que no había esperado que el presidente le regresará de vuelta el proyecto que presentó mencionando que no había citado bien, y por ende debía hacerlo todo de vuelta, eso le arruinó su domingo.

Ahora mismo había llegado a su casillero para tomar los libros que vería hoy, en eso su mirada se apoya brevemente en el cubículo de alado, el cual le pertenecía a Amy.

La verdad con todo lo que había pasado ni siquiera habia pensado en la eriza, seguramente ella debía estar festejando aliviada de no tenerlo como una carga -seguro- y además de que ella mismo le específico que esperaba no verlo pronto, pero indudablemente se había olvidado que ambos eran vecinos de casilleros.

Tarde o temprano deberían volver a verse.

Nicky ahora mismo de lo que si estaba seguro era que quería apoyar la decisión de Amy, así que si ella no quería verlo, él lo entendía y le daría su espacio, como lo estaba haciendo.

Era solo que no había esperado encontrarse con la sorpresa de ver a otro möbian ocupar el lugar de la eriza rosa hoy.

-¡Hey Nicky! Nos volvemos a encontrar de nuevo- esos ojos le saludaron con una sonrisa brillante y cálida.

-Eh eres tú...- Nicky trató de hacer memoria el nombre de aquel erizo -¿Silver, no?

-Si te acuerdas de mí, después de todo- Éste asistió complacido.

"¡Claro que me voy a acordar de tí! El chico que estaba muy, pero muy pegado a Amy" farfullo en su cabeza, aunque en realidad ese conflicto seguía a medio resolver.

Viendo a ese erizo otra vez, aún no entendía qué tipo de relación tenía con la eriza rosa, aunque a este punto ya eso no importaba, claro que aun le dolía saber que eran muy cercanos, eso era un hecho, además tampoco entendía qué hacía ese erizo en el casillero de Amy.

Se sentía algo incómodo por lo intrusivo que era el albino, apenas si se habían visto una vez y ya le hablaba con toda la confianza del mundo, siendo tan amable.

Sospechoso.

Seguía pensando -como toda su vida- que alguien tan bueno no podía existir, seguramente solo le hacía una sonrisa falsa. Tipos como él eran los que menos le agradaban, y esa sonrisa estúpida en su rostro le recordaba a su héroe menos favorito, Sonic the Hedgehog.

-Se supone que ese es el casillero de Amy-

-Ella me comentó un poco desesperada que quería cambiar casilleros conmigo, amablemente acepté cuando me explicó la razón- sonrió. -Tú.

Que directo, pero no podía notar ni una pizca de maldad en sus palabras, como si genuinamente vinieran desde el fondo de su corazón.

Nicky desconfiaba de él, podía tener algo de razón en lo que dijo, pero aún no entendía qué relación tenían esos dos, Amy jamás se lo aclaro, consideren eso como orgullo de hombre, pero no dejaba de sentirse amenazado por esa cara amigable.

Silver sintió ciertas vibras raras proveniente del cobalto, y esa mirada fija que tenía sobre su persona provoco timidez en su mirada y compostura, sus mejillas se pusieron un poco rojas sabiendo a ciencia cierta qué era lo que perturbaba ahora mismo al cobalto.

-Seguro sigues molesto por habernos visto abrazados ¿No es cierto?- se encogió en su sitio mortificado.

-Eres un descarado- Nicky no podía sentirse más ofendido por su comentario -¿Cómo lo dices así tan abierto? ¿No tienes vergüenza?-

-La vergüenza la tengo, ahí está- admitió rodando los ojos con obviedad, pero sin dejar de detonar esa timidez y torpeza de sus acciones, parecía un niño pequeño, de pronto tomo un fuerte bocado de aire -No soy muy bueno explicando a la gente lo que pienso, a veces lo terminó de arruinar, no quiero hacerlo contigo- y sonrió de soslayo con sinceridad.

Nicky levantó una ceja algo inquieto por sus palabras, otra vez su tono había sido amable y sin prejuicios, decidió seguir escuchando lo que tenía que decir antes de continuar su reclamó.

-Mi disculpas si te ofendí, aún no entiendo del todo las tradiciones y cultura de este lugar maravilloso- su mirada dió un vistazo rápido a todo su alrededor -de dónde vengo ni siquiera sabemos el concepto de la vergüenza o cosas similares, no lo entendía hasta que lo leí de un libro, estoy aprendiendo cómo funcionan las amistades, y mi sueño aquí es hacer muchos amigos- confesó -Cuando llegué, Amy fué la encargada de recibirme al ser parte del comite de bienvenida, ella fue muy amable al ayudarme y también me ofreció su amistad, en cambio yo no había podido hacer nada para agradecer su generosidad, cuando entonces vino a mi llorando y confesando que su novio se había olvidado de su aniversario, me sentí muy mal por ella, y de verdad quería conocerte.

-Si ya se, soy horrible- admitió poco entusiasmado. -¿Ahora quieres golpearme? Porque tengo clases y no quiero faltar, pero podemos mover la pelea para la salida- estaba por escribir en su blod de notas para recordarlo.

-¡Nono! ¡Nada de eso! No hablo de pelear- se apresuró a aclarar el error.

-¿Ah no?- guardo el blod de notas.

-No fue por eso- le aseguró -Amy me había hablado tantas veces de tí antes de aquel día, comentando que eras muy listo y que cuando algo te gustaba le dedicabas tanta pasión, y que eras su primer amigo de la infancia muchas cosas buenas que me dió curiosidad, quería verlo con mis propios ojos- en ese momento la mirada de ambos erizos cruzaron caminos -pero cuando me pidió que fingiera ser su novio, no pude negarme.

Ahora Nicky entendía, todo fue un gran mal entendido, un mal entendido que él solito se busco en primer lugar, ahora se sentía mal por haberse molestado con aquel chico que no tenía la culpa aquí, aunque no quitaba que seguía poniéndolo incómodo.

-No dejes que tu pasado defina tu presente- otra vez su mirada mostró compasión -todos cometemos errores, pero eso no nos hace malas personas, de los errores se aprenden, si hay que agradecer al pasado, vivir el presente y soñar con el futuro, para vivir una vida plena, ese es mi lema- sus dientes se lucieron en esa hermosa sonrisa que formularon sus labios.

El cobalto se había quedado callado pensando en sus palabras, esas palabras que habían golpeado extrañamente su pecho, era claro que removieron sus sentimientos, como si hubieran aclarado su mente.

Eran las palabras justas que había necesitado escuchar.

Silver volvió a sentirse algo tímido por esa mirada fija, por lo que decidió romper ese silencio de nuevo.

-De dónde vengo disfrutamos los pequeños detalles- otra vez una linda sonrisa surco sus labios -Asi que, me vuelvo a disculpar por causar este mal entendido- sus manos buscaron a estrechar con suavidad la mano libre del cobalto. -estoy emocionado por ser tu vecino de casillero.

Al ver fijamente esa relajada, amigable y brillante expresión llena de compasión Nicky se sintió ciertamente perturbado, el contrario era muy amable, demasiado para su gusto, pero tenía cierto encanto que lo diferenciaba a otras personas.

Se sentía auténtico.

-Espera ¿De dónde dijiste que vienes? ¿Eres estudiante de intercambio?-

-¿Eh?- el albino pareció pensarlo - se podría decir que sí.

-¿De dónde eres?- ahora parecía intrigado, dando un paso en frente acortando la distancia entre ambos.

-Ah bueno... De lejos, claro- se encogió aún más en su sitio desviando brevemente la mirada.

-¿Qué tan lejos?- insistió.

-Ya sabes, lejos de lejos, muy lejos- volvió a apartar la mirada.

A Nicky le parecía sospechoso la postura algo incomoda que había adoptado el albino ante sus preguntas personales, muy curioso.

-¿Ya acabaste?- de pronto una voz interrumpe la batalla de miradas que tenía el par.

Ambos erizos observaron al azabache que había llegado, cargaba su mochila, tal parecía habia venido a buscar al albino.

Nicky le miró claramente sorprendido, era su héroe de las sombras, el azabache de la tienda y también el misterioso chico de la voz baja pero intimidante.

-¡Shadow!- inquirió con sorpresa -Ya iba a acabar, pero se me presento una emergencia- se excusó con una sonrisa algo inquieta.

Nicky miró a ambos fijamente, espera ese nombre... ¿No era ese tal Shadow del que hablo Knuckles hace un tiempo? ¿Acaso se conocían también?

-Pues ven, tenemos ese experimento de química, y no quiero que me llamen la atención por mi pareja- su voz parece enarcar la última palabra muy seriamente.

Nicky notó que el albino se puso aún más nervioso.

-¡Sí, está bien! Ya voy- tomó distancia del cobalto agarrando sus libros y cerrando el casillero apresurado, pero cuando parecía marcharse recordó algo -¡Cierto! Me olvidé presentarlos, Shadow, Nicky, Nicky Shadow ¡Ahora dense las manos!- junto las manos de cada uno con mucha alegría.

Nicky observó esto algo incómodo y apenado, sonrió de medio lado al azabache, quien seguía teniendo esa expresión neutral y algo fria.

-Oye...- tomó la palabra el cobalto llamando la atención del vetado -Shadow ¿cierto?, un gusto, ahora se tu nombre- sonrió -otra vez, gracias por ayudarme en la tienda el otro dia, ¡Sigo pensando que estuviste genial!- sus ojos volvieron a llenarse de brillos emocionado.

El azabache por su parte ni se inmutó, seguía silencioso, tras un suspiro pesado, apartó la mano del mas bajo para darse la vuelta y seguir su camino.

Nicky al ver esto se quedó mudo sin saber que sentir o pensar, en eso el albino se adelanta a decir:

-¡Disculpa a mi pareja! ¡Él es muy tímido, eso es todo!- una risa por aquí y otra risa por acá, se despidió con un fuerte apretón de manos hasta correr detrás del azabache perdiéndose cuando ambos giraron en la esquina del pasillo.

Nicky nota todo esto con decepción, cuando cierta cosa resuena en su cabeza.

-¿Pareja?- repitió esa palabra muy intrigado.

¿Esos dos eran pareja?

En ese momento de su nariz empezó a escurrir sangre manchando parte de los cuadernos que traía en sus manos.

¿Qué acababa de pasar?

-¿Qué es esto, Mighty?- preguntó Nicky ante el papel que le habia entregado el armadillo frente a él.

-Es un avisó, si no te decides por un club pronto, vas a ser llamado a la dirección- le explicó con sencillez, el cobalto le miró con frustración -Yo no tengo la culpa, solo soy un mensajero, pero te aconsejo que intentes hacerlo, no me gustaría que te llamen la atención, amigo.

Nicky quería protestar pero Mighty no tenía la culpa, al contrario.

Cuando llegó la hora del descanso, el cobalto observó con asombro como él presidente se acercó a él pidiendo un poco de su tiempo, por lo que Nicky tuvo que despedirse de Tails y Knuckles que iban apurados a comer.

Conocían al presidente, se demoraba mucho dando sus quejas, así que era una batalla perdida, Nicky lloro internamente, adiós a sus pasteles de chocolate.

Pensó que sería más duro con él, debido a su complicada relación, supuso que le tendría coraje, pero al contrario, estaba siendo muy amable con él, ahora se sentía muy mal por ser una escoria.

-¿Por qué no te decides aún por un club?- le pregunta algo curioso mirando esa expresión tan desanimada que se cargaba el más bajo.

-No es eso, es que ya me sacaron de dos clubes, y la verdad no sé si será tan necesario participar en esto.

-Lo es, Nicky- le reprendió el oji-azul -Sin esa nota puede que no puedas pasar de año- Nicky soltó un lamentable suspiro, en eso el armadillo hizo memoria de ambas veces que le reportaron el como el cobalto fue retirado de dos clubes -Ahora que lo pienso, estabas en robótica junto a Tails y Ray ¿Por qué te sacaron?-

-Bueno, es divertido ensamblar un robot, pero no cuando usas el generador de la escuela para darle energías.

-¿Fuiste el responsable del apagón de marzo?- Nicky se encogió avergonzado.

-Fui un estúpido.

-Tranquilo amigo, no eres estúpido, cualquiera puede cometer ese error- le alentó.

-Dos veces.

-Nadie es perfecto, y todos vamos aprendiendo....- por poco y lo que dice es "Tremendo imbécil".

-Sí, pero así no piensan los del club de química.

-¿Qué les hiciste?-

-Explote el curso... Mala idea llevar dinamita.

-¡¿Quién lleva dinamita a la escuela?!- le reprende.

Ahora recordaba que el cobalto había dejado de asistir a clases en abril, la verdad que nunca le informaron sobre esto, mejor dicho ni siquiera estaba obligado a dirigir a sus compañeros en las actividades extracurriculares, pero al ser Nicky una excepción cerca de desaprobar, le metieron esa tarea extra.

-Te sorprendería saber cuántos lo hacen- entonces le sonrió.

Que tétrico.

-¿Entonces vas o no a buscar un club?- insistió.

Nicky otra vez farfullo, la verdad que no quería a estas alturas buscar un club porque seguro le harían mucho Bullying por la mala reputación que se ganó tras haber Sido terminado por Amy, algunos aún se seguían burlando, ese desanimo fue fue notado por el presidente, quien pareció deducir qué pensaba.

-Sabes, no quiero dejarte solo, aunque mi deber como presidente solo llega hasta los avisos, pero si quieres- sugirió -yo te puedo acompañar, así no estarás solo ¿Okey, amigo?-

-¡¿Harías eso por mi?!- el erizo le miró como los ojos llenos de emoción, recibió un afirmación por parte del rojizo. -¡Gracias! Porque es seguro que si le digo a Tails se va a enojar conmigo, y no puedo contar con Knuckles, él anda ocupado con sus propias cosas.

-No es nada, mañana empezamos ¿De acuerdo?- Nicky asintio.

Ambos se despidieron, quedando en que mañana en la hora antes del final de clase -la hora asignada para los clubes- irían a visitar los que más llamen la atención del cobalto.

Los pasillos extensos de aquel lugubre lugar se extendían hasta donde la vista se perdía, como laberintos tenebrosos de los cuales un möbian normal se lo pensaría dos veces antes de entrar.

Entre las sombras se movía a pasos pesados y arrastrando un metálico sonico que resonaba en el sepulcral silencio del sitio, unos iris rojizos se podían distinguir en esa negrura abismal.

La silueta del robot se logró distinguir cuando entro a la sala principal del edificio, en dónde había una gran lesa redonda con un tablero holográficos muy avanzado, sentado frente a él podía ver la figura de su creador.

-Querido Metal, mi niño- la voz del doctor resonó en la amplia y blanca habitación -Necesito hablar contigo.

El androide se aproximó hasta el mayor, estando cerca a él se quedó quieto esperando sus palabras.

-Se que sabes que te vigilo, pero finges ignorancia- el robot ni se inmutó, siguió rígido con la mirada al frente -Tuve la oportunidad de observar tu pequeña cita con el roedor azul, pero no vine a castigarte por interactuar con el enemigo- de pronto el anciano se puso de pie, su mirada reflejaba ambición, era claro que otro plan siniestro se había formulado en su cabeza -Desde ahora vas a seguir esa rata azul de muy cerca, estoy seguro que muy pronto Sonic se revelará, pero para eso, El pequeño mocoso es la clave, lo sabes bien ¿No?

El robot asintio.

-El ha estado bajo mi mira desde hace años, pero los resultados siguen siendo ambiguos, aún así el altercado en mi laboratorio y la aparición de él deja claro que el niño es la respuesta- tomó distancia para acercarse al gran tablero en dónde al tipear ciertas teclas se presentó una proyección de Sonic y a su lado había un erizo azabache. -Esta vez estoy más cerca de descubrir qué ocultas, Rata azul.

Metal observó a ambos erizos en la pantalla, entonces bajo la mirada pensativo.

-Y claro, debes pasar desapercibido, si tienes la oportunidad de matar al erizo que me robó, hazlo- una fuerte risa se escuchó en toda la sala.

Continuará.


N/A:
Amo meter clubes en mis historias, aunque pareciera que no son relevantes.

Bien, trate de corregir los horrores ortográficos más que pude, pero aún así me pude salvar, así que cualquier error disculpar.

No voy a comentar mucho sobre el cap, solo diré que me encanto escribirlo y todas las cositas que pasan, sobre todo amo las partes donde aparece Metal, y el como junto a Nicky hacen las compras y como Metal lo cuida de los policías.

También me encantó el encuentro de Silver y Nicky, como por ahí dicen en los comentarios, Silver es todo lo bueno que necesito en esta vida ¿Y sus partes favoritas? (Dedicó cap→)

¿Alguna parte menos fav? ¿Les gustó cómo se manejo el capítulo? Trate de hacerlo ligero y más digerible, pero es imposible no tirar cada dos por tres datos random posiblemente importantes.

¿Qué es lo que más pueden destacar del episodio de hoy? Mighty hace su aparición por fin, ya quería que saliera, ¿Por qué será que se lleva tan mal con Knuckles? Además el plan raro que se le ha ocurrido a Eggman parece peligroso ¿Que trama?¿Teorías? (Dedicó cap→)

Lo bueno, Nicky ya resolvió su duda sobre la relación que tenía Silver con Amy, pero ahora otra duda surge ¿Cuál es su relación con Shadow? Nicky parece abrumado por saber la respuesta.

Sin más que decir, no olviden de comentar, dar estrellita ★ y compartir, me hace muy feliz<3

Nos vemos en la siguiente actualización!
Bye!

By:
|@LuliTan2|

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro