🌻Narra Gulf 🌻
Cada día es la misma rutina, me mandan y obedezco, cada objetivo es uno menos en la tierra, se va con el creador o con el de abajo, depende si es un pecador y la verdad ser una máquina de asesinar desde los 15 años, siempre ha sido un placer ver como suplican por sus vidas.
Mientras pongo una bala en su cerebro, mi trabajo es, limpió y a mis 24 años nunca he fallado o he sido descubierto.
Llegó a mi departamento ya cansado de mandar al infierno a dos estúpidos infieles.
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◈◈◈Departamento◈◈◈

Voy llegando a mi departamento, lo abro y siento que alguien se encuentra en su interior, sacó mi arma y silenciosamente camino buscando quien entró.

—¿Esta vez a quién mandaste al infierno? —dice su amigo Mild.

—¡Mierda! Mild… Así te pongo una bala en el cerebro —regaña Gulf.

—Baja tu arma, ¿cuántos fueron esta vez?

—Esta vez fueron dos Mild. Dos infieles. Ya sabes trabajó es trabajó.

—¿Qué te parece si vamos a beber a un bar? —propone Mild.

—Me vendría bien un par de tragos. Me voy a duchar y salimos.

—No te tardes.

—Una ducha de una hora sería bueno.

—¡No te atrevas! O me iré sin ti —regaña Mild.
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◈◈◈Bar◈◈◈

🌻 Narra Gulf:
Vamos llegando a un bar que me gusta salir a beber, en general me gusta salir solo, pero esta vez llego Mild de una misión y no le negaría una salida. El lugar está casi lleno, pero como soy conocido siempre me tienen mi mesa desocupada o me la desocupan para que yo la ocupé, nos sentamos con Mild e hicimos nuestros pedidos.

—¿Cómo te fue? —interroga Gulf.

—Un objetivo difícil de cazar esta vez, pero nada imposible de asesinar.

—Ya veo, lo mismo para mí, dos infieles que suplicaban por sus vidas, pero él trabajó, no es pagado si no mueren y eso hice, los mandé con los de abajo.

Nuestros tragos llegaron y empezamos a beber con Mild y luego un par de chicas nos invitan a bailar, odio bailar y Mild las acompaña y yo sigo con mi trago en mano.  Un sujeto solo en una mesa 7 llamó mi atención, es bastante guapo y yo necesitó diversión esta noche.
Me acercó a su mesa y lo saludó, se ve muy serio y eso me encanta domar a las bestias como él. Giro a verme y tenía unos ojos que derrochan sensualidad, sus ojos son penetrantes. Esta noche tú debes ser mío.

—¿Cómo estás? ¿Me puedo sentar? —dice Gulf.

—¿Quieres sexo? —pregunta el desconocido.

—Muy directo, eso me gusta.

—¿Quieres o no? —pregunta nuevamente el desconocido.

—Claro que si quiero —tomo un sorbo de su tragó Gulf.

—Entonces vamos a un Hotel —propone el desconocido.

—Vamos entonces.

—Pagaré y nos vamos.

—Ok.
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◈◈◈Hotel◈◈◈

—¿Qué papel te gusta jugar? —pregunta el desconocido.

—Soy versátil, ambos —responde Gulf.

—Ok, yo seré él activó.

—No tengo problema —manifiesta Gulf.

—Eso si me gusta que pase de todo, caricias y besos.

—No tengo problema tampoco.

—Eso sí, si te he visto no me acuerdo. ¿Estás de acuerdo con eso?

—¡Genial…! Después del sexo. ¡Jamás en mi puta vida te he visto!

—¡Perfecto!

Lo tomé de la nuca y di el primer paso y lo empecé a besar mientras iba quitando su chaqueta, tenía una camisa negra ajustada que resaltaba su tonificado cuerpo.
Quitó mi chaqueta y con una agilidad mi polera y yo su camisa quedamos a torsos desnudos y qué magnífico cuerpo él de este hombre. Estoy seguro de que lo disfrutaré esta noche, que pena que solo será esta vez y luego no te recuerdo. Empezó a besar mis pezones y sentir su lengua, jugar con ellos era la gloria, en general me gusta ser él activó, pero una vez que me toque ser consentido no estaría mal. Se detuvo y se quedó mirando mis ojos y sonrió de lado una sonrisa ¡Malditamente sexy!

—¡Chúpamela! —ordena el desconocido.

—Como gustes.

Escucharlo, darme órdenes fue fantástico amo jugar sucio, empezó a besar su cuello y quitar su correa, desabotonar su botón y bajar su cremallera. Me arrodillé, bajé su pantalón y bóxer, este hombre debe estar muy orgulloso de su miembro, es realmente grande y se ve muy apetitos que se me hace agua la Boca.

—Ummm… Me gusta.

Tome su miembro y lo empecé a lamer desde su base a su punta, dibuje círculos en su punta, sentía su pre-semen y mordí mi labio está sabroso. Sin esperar más la metí en mi boca completa y empecé a dar vaivén saboreando cada parte de su miembro, sentí como sus manos tomaron mis cabellos y empezaron a jugar con él. Sus gemidos son música para mis oídos y escucho como me dice que se va a correr y aumento mis vaivenes quiero hasta la última gota de este miembro. Su semen invadió mi garganta y es exquisito que no podía dejar de lamer su miembro. Me levanté del piso y me dirigí a sus labios y nos empezamos a besar como si nos conociéramos de toda la Vida, como si no fuéramos dos extraños.

—¿Delicioso? —interroga Mew.

—Demasiado —responde Gulf.

Sus manos viajaron a mi pantalón y sobre ello frotaba mi erección, solo cerraba los ojos deseando que este hombre ya me penetrará. Sin darme cuenta ya estábamos en la cama desnudos y besaba cada parte de mi cuerpo y yo me aferraba a las blancas sábanas de bajo mío. Me retorcía del inmenso placer que este desconocido me daba, en general solo tengo sexo rápido y chao, pero este hombre es un Dios en el sexo. Metió mi miembro en su boca y sin piedad me daba vaivén rápido y desenfrenados mientras con un dedo invadía mi entrada haciendo círculos que me excitaban y me hacían gemir fuertemente y me hacían menear levemente mi cadera.
Mi excitación fue demasiada que acabe en su boca y este empezó a lamerlo y parte de mi semen lo llevo a mi entrada para lubricarme, introdujo un dedo y dolió hace tiempo no soy sumiso y metió otro dos de sus dedos estaban haciendo maravilla en mi entrada y los movía con agilidad.

—¡Mierda! ¡Mete ya tu miembro! —regaña Gulf.

—Ruégame —habla el desconocido.

—¡Yo no le ruego a nadie!

—Mi amor a mí me rogarás.

Metió otro dedo y sus tres dedos eran la gloria, los movía tan magníficamente que no me quedo otra que rogar.

—Ahh… Ah… Te lo ruego… Hazlo…

—Eso me gusta más.

Se posicionó en medio de mis piernas y me penetro sin piedad, empezó a subir y bajar de forma desenfrenada y yo gemía locamente suplicando más rápido.

—Suplica más por mi miembro. ¿Te gusta?

—Ah… ¡Estás loco…! ¡Me fascina…! —manifestó Gulf.

—Y a mí tu entrada tan apretada… Ahh ¡mierda! ¿Dónde estabas todo este tiempo?

—Si te contará dónde… Ahh siiii —gemía más Gulf.

Este hombre me tiene en el paraíso, gemía tan fuerte que me importa una ¡puta mierda! Si todo el hotel me escuchaba. Tome mi miembro y lo masturbé tan rápido que me vine muy rápido y él dio unas estocadas más y lleno mi entrada con su semen. Salió de encima de mí y cayó a mi lado, con suerte mantenía mi respiración y él la suya, me besó una vez más, como amaría dejar este trabajo y tener a mi lado un hombre como él cada día.
¡Despierta Gulf! El Sexo acabó, es hora de volver a tu realidad y esta es tu realidad, solo fue sexo con un extraño y ahora deberías irte.

—Supongo aquí acabo todo, si no te he visto no me acuerdo —dice Gulf.

—Claro que sí, «si te he visto, no me acuerdo»

—¡Perfecto! Me iré a asear y me largó.

—Como gustes, a no ser que quieras hacerlo otra vez —ofrece el desconocido.

—Tentadora propuesta, iré al baño y vuelvo.

Después de tener sexo con aquel extraño, cada uno se fue por su lado y yo volví al bar a seguir tomando.

—¿Dónde habías ido?

—Por sexo.

—Veo que te fue superbién, sonríes radiante.

—Era bastante bueno, que lo hubiera secuestrado y lo tendría en mi cama todos los días.

—¡Maldito goloso! —se burla Mild.

—Sigamos bebiendo será mejor. ¡Salud!

—¡Salud!

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Perdón por la falta de ortografía 🙏
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