Jimin estaba junto a Taehyung en su caballo que era el más atrasado, solo podía observar como Soyeon era rodeada por Yoongi quien manejaba el caballo de dicho pelinegro.

Narra Jimin:

Estaba metido en mis pensamientos hasta que vi al caballo donde cierto pelinegro cabalgaba junto con cierta rubia, y un pensamiento salvaje apareció.

"¿Quien se cree esa tipa con mi Yoongi?" ¡¿Qué?! ¿Mi Yoongi? Dios, creo que todo lo que ha pasado estos tres días me han hecho mal en la cabeza, como puedo pensar que algún día alguien como Yoongi me hará caso.

Él tiene un algo que me atrae, pero estoy un poco confuso pues nunca sentí eso hacia alguien más, cuando estoy junto a él siento como algo se remueve en mi estomaguito.

Cambiando de tema, ahora estoy junto a TaeTae cabalgando, llevamos una hora así y todo a nuestro alrededor son espacios de plantío desiertos.

La tipa esa dijo que la casa de sus creo padres se encontraba a unos kilómetros de donde la encontramos.

Como estaba un poco aburrido decidí entablar una conversación con Taehyung quien era buena persona además de educada.

-Tae.-Lo llamé.

-¿Qué pasó?-Preguntó tranquilamente.

-Nada, solo que estoy un poco aburrido y quería hablar con alguien.-Dije un poco tímido.

-Ah no hay problema conmigo, dime lo que quieras.-Exclamó un poco alegre, al parecer también él estaba aburrido.

Sonriendo empecé a conversar con Taehyung de cosas triviales, como cuáles eran sus colores favoritos que eras el negro, verde y blanco, comida que más come que es el japchae y la carne lo cual me hizo reír un poco, entre muchas otras cosas hasta que toque un tema un poco delicado.

-Tae, ¿por qué tú y Yoongi robaban?, si no quieres responder no hay ningún problema.- Se lo pregunté pues ellos no parecen ser malas personas y desde que conocí como eran ellos en realidad esa pregunta me rondaba por la cabeza.

-No hay problema, bueno Jimin, como verás no todos nacemos en cunas de oro, yo y Yoongi somos un claro ejemplo de eso, la mayoría de nuestra infancia crecimos en la calle sin ningún tipo de apoyo, solo eras nosotros dos en un mundo de maldad, sufrimos demasiadas cosas, como hambre y violencia de otros como nosotros, yo no tengo nada que ver con Yoonginie..-Sonreí al ver como llamaba a Yoongi.- Pero a la edad de 5 añitos, él un año mayor que yo me encontró vagando en las calles acogiéndome como a un hermano pues mis "padres" los cuales no se deberían llamar así, me abandonaron pues para ellos era un error. Sucedió algo similar con Yoon pero con lo mucho que llevo con él no me ha contado la verdadera razón de por qué estaba en la calle, al parecer es algo que lo marcó de por vida.-Yo solo escuchaba atentamente sintiéndome un poco triste de como la vida había tratado a aquellas dos personas las cuales se veía a leguas eran de gran corazón.

El rubio de ojos miel suspiró y continuó hablando.

-Nosotros no llevamos ningún tipo de educación por lo cual conseguir trabajo era muy complicado, y así pasaron los años sobreviviendo como payasitos de crucero, hasta que sucedió un problema y tuvimos que dejar de hacerlo, pero un día vagabundeando juntos conocimos a un tipo el cual nos habló acerca de robar, y como lo vimos como un camino fácil así fue como nos metimos al mundo de la ratería.-Estaba impactado por todo lo que estaba escuchando.

-Empezamos con navajas y después con pistolas, nunca creí que pasaría por algo como eso pero así lo fue, he cometido al igual que Yoongi muchos errores pero nunca fue nuestra decisión pues en la vida de la calle y el robo era matar o ser matado.-Mi boca estaba abierta, lo que acababa de decir me dejó aturdido.

Taehyung tenía la intención de seguir relatando, pero lo detuvo la voz de Yoongi que exclamaba que ya estábamos cerca del por el momento futuro refugio.

Volteé a ver a mi compañero y le di una sonrisa reconfortante pues este parecía un poco compungido.

Narrador en tercera persona:

Las cinco personas a caballo estaban cada vez más cerca de un refugio prometedor.

Ya se podía visualizar la casa de dos pisos a lo lejos.

-Es esa.-Dijo Soyeon señalando la vivienda, rozando su flaca mano con el brazo de Yoongi quien no sintió nada de aquel roce.

El castaño de ojos negros estaba un poco incómodo con Soyeon muy pegado a él, cosa que nunca sintió con Jimin.

Pero la rubia había sentido una enorme atracción hacia el líder del grupo, y ya traía un plan en mente para que este le hiciera caso.

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F por mí. :D

Hey, estamos de vuelta. 😎

¿Les gusta?

Espero que estén bien, cuidense ¿vale?  Lavense bien las manos y, por favor, eviten salir de casa.

Mmm, si han olvidado a alguien... ¿Cómo lo han hecho?

1/4.