Kim Jennie ingresó a su salón, trayendo consigo su característico olor a vainilla, inmediatamente se dirigió a la banca que comparte con Jisoo, una de sus mejores amigas, ambas junto a Minatozaki Sana forman un trío icónico dentro del instituto, sin embargo, ella se sienta con Park Jihyo, su novia, dejándolas abandonadas, según Jisoo.

Es inevitable sentirse cautivado ante la presencia de Jennie, ella se impone a donde quiera que va. Quizás es su deslumbrante belleza lo que atrapa a los demás o sus ojos que se asimilan a los de un felino que contienen una feroz mirada, pero es imposible no notarla, Jennie tiene un aura fuerte y facciones suaves o igualmente fuertes, dependiendo de lo que ella quiera lograr. 

Jennie es esa chica.

Y claro, entre el gran cúmulo de admiradores de la señorita Kim se encuentra Roseanne, la tímida líder del equipo de básquetbol, quien observaba desde la distancia cómo Jennie ingresaba al salón con su habitual aura de confianza y elegancia. Aunque siempre había admirado a Jennie desde lejos, nunca se había atrevido a acercarse. Se sentía atraída por su presencia magnética y su encanto natural, pero temía ser rechazada o no estar a la altura de las expectativas de alguien como Jennie.

Claro, pero eso cambió hasta que Jennie declaró sus sentimientos por ella.

Oh, pero Roseanne no es tonta y a pesar de los pocos días que han transcurrido desde entonces, ella no ha dejado de sobrepensar la posibilidad de que aquello no sea más que una mala broma por parte de Kim. 

Y si quería conquistar a la inalcanzable Kim Jennie tendría que jugar sus cartas con destreza.

—Se le saldrán los ojos de tanto verte —murmuró Jisoo, notando la indiscreta mirada que Roseanne mantenía desde hace rato en Jennie.

—Ya estoy acostumbrada —respondió indiferente.

—¿La besarás? —inquirió Jisoo, ganándose una mirada de sorpresa por parte de Jennie—. Es decir, una broma no es buena sin algo de acción, ¿no crees? 

—Ya me declaré, ¿qué más quieres?

—¿No crees que una novia es suficiente?

—Un concierto sería suficiente —presionó Jennie, sabiendo que los padres de Jisoo trabajaban en uno de los estadios más importantes de Corea y que fácilmente podrían conseguirle boletos sin mover un solo dedo.

—Te odio.

—¿De qué crees que estén hablando? —Rosé trataba de leer los labios de las Kim, pero le resultó imposible—. Aww, es tan hermosa.

—¿A qué hora le entregarás el ramo? —preguntó Lisa en respuesta.

—Shh, no quiero que escuche.

Todos presenciaron el romántico gesto, hubieron muchos aplausos y vitoreos, pero lo que hizo más feliz a Roseanne fue ver la hermosa sonrisa de la chica frente a ella.

Como agradecimiento recibió un abrazo y un beso en la mejilla, lo que pintó de un tono rojizo tan intenso sus cachetes que temió que fuera permanente.

creen que jen se enamore o que sea interés?

gracias por leer!!!