La comunidad vampírica se había preparado para su día crucial; el mandato estaba por comenzar y aquellos vampiros buenos o malos debían ser reunidos en un solo punto, donde se encontrarían  con  los primeros vampiros  originales puros.

"Los vampiros más fuertes", como lo dejó dicho la señora  bruja.

Unos se alistan con sed de venganza, tenían un plan entre manos, los otros aceptaban la realidad de ser comandados por un nuevo vampiro sucesor.

La Luna roja por fin se posara en el cielo nocturno, en su  punto más alto a la media noche del día domingo.

La hermosa Luna sangrienta se resplandecerá.
....

Sábado al medio día.

La casa estaba hecha un caos, todo el mundo corría de un lado a otro, Tomoyo y Meiling fueron a comprar los vestidos  de mi madre y de Sakura, claro los de ellas también.

Sakura no dejaba de mirar hacia el jardín de la mansión, se veía bastante extraña y nerviosa.

—¿Estás bien?

—¿Estoy a tiempo de escapar de este mundo verdad?.—me responde  con otra pregunta.

—A dónde vayas allí iré yo y te volveré  a traer.

—Eso  es  lo que pasa, no puedo escapar porque estás ahí persiguiendome en  todo momento.

—La luna será a la media noche.

—No sé por qué siento que algo malo va a suceder.

—No temas estaré a tu lado siempre.

—Solo dices incoherencias, Shaoran.

—Claro que no, serás mi reina, debo protegerte a toda costa.

—Ya  basta, desde que llegué aquí solo han sido dolores de cabeza, me trajeron a la mente tantos recuerdos que yo ni sabía, tantas cosas que no comprendo aún y que les tengo mucho miedo.

Se abraza a sí misma, la toma en mis brazos   y la envuelvo  en ellos, la abrazó con fuerza para que sienta que siempre estaré a su lado. Pase lo que pase.

—Todo estará bien Sakura, te lo prometo.

—¡No prometas lo que no puedes cumplir!.

—Puedo cumplir en  hacerte feliz desde ya, solo si me das la oportunidad.

—Solo eres feliz chupando mi sangre.

—Quisiera devorar otras cosas, pero no lo permites.

— Degenerado, viejo decrépito. —me saca la lengua yo solo me reí  de su niñada.

....

La noche había caído, la luz de la luna estaba más en su máximo esplendor, todos estaban como locos en la casa, Shaoran y yo seguíamos en el piso que él hace una semana me había traído, seguíamos en la cama mirando el techo como si fuera la cosa más interesante de la noche.

—Te ayudaré a que seas  el rey, pero quiero que me dejes libre Shaoran, no deseo esta vida, ya te lo dije.

—Es que no es solo que yo sea rey Sakura, yo deseo una vida a tu lado.

—Pero esto no es lo que yo quiero, entiende

—Por qué huyes de lo que te pertenece, tu perteneces a esta vida.

—No estás loco, estás muy equivocado —me levanto de la cama, al igual que él.

—Te luce el vestido rojo, te hace ver hermosa.

—Dejame Shaoran, no sigas. —la habitación se sumerge en un silencio, ninguno de los dos dijo nada más, hasta que sentí que Shaoran estaba detrás mío acariciando mis brazos. —¿Qué haces? —le pregunto con tranquilidad.

—En otro momento me hubieras atacado, insultado, despellejado  —ok ya exageró— Hasta mandar a volar y te tocó, y estas tranquila, me hablas con tranquilidad.

—Por qué contigo es así, además enojada o tranquila jamás haces caso. Da igual.

Me voltea y quedamos frente a frente, sus ojos estaban totalmente dorados, la verdad Shaoran esta noche se vea más guapo de lo normal, se acerca a mi y corta la distancia entre nuestros labios, él me besa y yo le correspondo, ya se estaba volviendo costumbre esta actitud de los dos.

—Por lo menos no me muerdes—él ríe.

—Es por que, esta noche te ves hermosa y no quiero dañar la gala que tendremos.

Me tiende su brazo y entrelazo mi brazo con el suyo.

—Creerán que somos la pareja más amorosa del mundo. —le habló con ironía él ríe.

—¿Y no es así? Amada mía.

—Claro que no, Shaoran en serio, ¿porque deseas seguir fingiendo algo que no es cierto? Algo que jamás pasará.

Bajamos las escaleras y en el segundo piso estaba la familia reunida, no pues wao, gracias cálida bienvenida a mis aposentos 

Todos nos hacen una reverencia, pongo mis ojos en blanco, hasta cuando tendré que fingir este papel tal absurdo, solo es que él toma su estúpida corona y me largo, que tan tortuoso puede ser, ¡porque NO entiende que estoy dispuesta hacerle su dichoso favor y ya!.

—El  señor Hien —pregunto.

—Él salió desde que desmayaste y no ha vuelto desde entonces  pero, no debe demorar ya que no se perdería la coronación de nuestro hermano — me explica Eriol.

Comenzamos a bajar todos pero veo que comienzan a mirar como mal, ahora que les pasa, ¿les cayó mal la sangre que bebieron hace unos minutos o que? Poso mi mirada al frente, rolo mis ojos, lo que faltaba, coloco mi mano en mi cintura 

—¡Ah verdad! La gran reunión de los chupa cabras — y sigo derecho pero siento una mano detenerme, ese idiota que no entiende o solo quiere joder a Shaoran

—Que mujer mas mal educada, manejas un sarcasmo del asco —me susurra entre dientes, estaba enfadado, creo que no me salió bien su plan

—Y me tiene sin cuidado lo que pienses de mi idiota, no te perdonaré lo he me hiciste.

—Me da igual, eres una chiquilla insípida, fea, degradante... — Una fuerte voz lo interrumpe.

—¡Ya basta Watanuki! — lo regañan

—Si no se mete tu papiro, a que Shaoran te manda a volar — le susurró, como me gusta fastidiar a los que me joden la vida, Shaoran lo quita de mala gata de mi lado y seguimos caminando, los demás nos siguieron

Shaoran abrió las puertas y ahí se vio todo, una cantidad de vampiros que no alcanzaría a contar esta noche, me aferro al brazo de Shaoran, no niego que esto me aterra, ya no asusta, aterra, no podía alejarme de este vampiro por que o si no viene otro y me toma es toda.

¡Por los dioses, que esto sea rápido!.

—Y lo menos doloroso que se pueda— susurro 

—¿Qué pasa? — me mira con burla Shaoran, había pensado en voz alta, me muerdo el labio —Si haces eso me excitaras mas Sakura y esta noche la luna me pone mal.

—Pues te va tocar recurrir  a tu mano por que no tendrás nada más de mi.

El ríe a carcajadas

—Tú que sabes — murmura contra mis labios, pongo mis ojos en blanco.

....

Toda la sociedad vampírica nos quedaba mirando, unos con ojos de matar a Sakura y otros, pues les daba igual. Solo querían fiesta y comer, claro las bebidas también se incluyen.

El alcohol y la sangre abundaban en la fiesta, no sólo íbamos a beber sangre, también bebemos  alcohol, vino, champagne, cerveza; a mi me gusta.

Pero la que si anda pasándose otra vez es Sakura, no para de beber vino, copa tras copa, debe estar nerviosa, pronto iba a ser las doce de la medianoche, ambos estábamos sentados en nuestro trono mientras que  los vampiros se enfiestan; esto para Sakura es primera vez y eso que  esta suave, había que esperar cuando comience la luna roja.. Los vampiros tienden a enloquecer un poco.

—Aaahh — se queja, pero fue un quejido silencioso, me mira con dolor.

—¿Qué pasa, Sakura ? - me levanté y me arrodillé ante ella.

—Me duele horrible la cabeza, mi sangre se comienza a calentar — ya eran las once y media, por que tan repentino esos dolores.

—¿A dónde vas? —ella se para las sillas

—Al baño de niñas, tu no puedes entrar —me saca la lengua, sonrió y asiento.

Poco a poco se va alejando de mí.

—Yo de ti, no la dejaría que se aleje tanto, ¡uno nunca sabe! —lo miro mal —Calmado vengo en son de paz, además no me gusta trabajar así

—Mira quien lo  dice, él que se mete a mi habitación a matar a mi mujer.

—No soy el único Shaoran detrás de ella, así no es como te llamo, que tierna.

—CALLATE IMBECIL — lo miro de reojo, su familia estaba con él, Watanuki se veía tranquilo, sin ganas de pelear esto está noche, pero si tiene bastantes ganas de joder la vida.

Comienzo a caminar hacia  los baños.

....

Había bebido mucho vino y estoy que orinó en mi vestido.

Camino rápido hacia el baño del segundo piso, no importaba subir escaleras era así o seguir caminando con esta casa repleta de vampiros.

No se cuánto más va a durar, pero esto ya me está colmando la paciencia, podría aprovechar e irme, sería una buena opción pero   estoy invadía de chupasangres, me puede perseguir uno de esos vampiros, con lo de buenas que soy.

—Sakura —venían agitadas Meiling y Tomoyo —¿ Dónde estabas?.

—En  el baño— señaló — Haciendo mis necesidades ¿Por qué? —ellas sueltan el aire y niegan.

—vamos —me toma de la mano Meiling — No debías de separarte de Xiao Lang, así no pasará nada, ¿por qué él no vino contigo?.

—¡Por qué no lo dejé! —le respondo.

—Pero él sabe lo peligroso que es, el que vengas sola hasta acá.—se altera Tomoyo.

—Ya me vieron con él no creo... — me detengo en seco, por la puerta principal iba ingresando el muchacho que me había alertado sobre ellos y también —Pa-pa. — susurro

Comenzó a temblar, quería caer, mis lágrimas comienzan a salir, Meiling me toma con fuerza y Tomoyo me abraza.

—¿Qué pasa Sakura? No me digas  que es lo de la  otra vez... — no la dejé hablar, me suelto de ellas y me encamino hacia donde estaban ellos.

—¡Por qué! — tenía rabia, mucha rabia, él por qué está vivo y mi madre muerta, y aún peor, se olvidó de mí, ¡soy su hija!, él lo que quería  era.... Niego varias veces en mi cabeza, no, debe haber una explicación, lo miro a los ojos y él se asombra bastante, la señora con la que venía me mira mal y el chico este, estaba serio. —¿Por qué estás aquí?.

—¡Sakura, hija! — todos miraban asombrados, osea que si él está aquí es por que...

—Dime ¿QUÉ HACES AQUÍ? — le gritó, Meiling me toma de la mano, comienzan a mirarnos —¡ POR QUÉ NOS ABANDONASTE, QUERÍAS MATARNOS, NO TE LO VOY A PERDONAR, MI MAMÁ... mi mamá murió y ¡Tú no! — él agacha la mirada al suelo, veo que no tiene ni una pizca de hablar, que ridículo.

Me suelto de Meiling y me encamino hacia el jardín, Shaoran iba ingresando y lo abrazo de la cintura, le pido que me lleve otra vez donde estábamos hace unos minutos atrás.
...

Camino hacia la casa, me adentro en esta había muchos vampiros, creo que mamá invitó mucha gente, bueno era rey e  invitó a todos los vampiros que habian, debían conocer a sus nuevos gobernantes.

Todos me abren camino, saben lo de malas que me pongo cuando no puedo pasar hasta que escuchó unos gritos y eran los de Sakura, se me acelera el corazón, me quedo en la puerta mirando hacia su lugar.

Ella estaba bastante molesta, desde este punto veía como temblaba, gritaba con rabia aquellas personas que recién habían llegado.

—ERES UN IMBÉCIL PAPÁ -— ella se  suelta de Meiling y les da la espalda para salir de aquel lugar, no me había notado y llega a mi me abraza de la cintura

—¿Qué pasó? —le susurro.

—Que papá, mi papá murió en ese accidente — suspira y se medio calama —Shaoran sácame de aquí —me susurra y asiento, no podíamos demorar así que corro a nuestra habitación para que ella se calme, Meiling y Tomoyo se harán cargo de los recién llegados.

—Sakura, cariño ¿Estás bien? —ella seguía abrazada de mi, niega se aferra más a mí pecho —Debes acomodar te primero, salgamos de esto y venimos aquí a encerrarnos ¿Qué te parece? —vuelve a negar, suspiro no se que hacer.

—Me iré a arreglar, hacemos todo lo que digas y... Seguiremos en la fiesta, esta es mi nueva vida ¡No! Debo iniciar de cero, una nueva Sakura, además…

Espero que no cambie de pensar.

—No te preocupes Sakura, debe existir una explicación, el profesor Fujitaka la debe tener...

—¿Lo conoces? —asiento en afirmación —¿Cómo?

—Él es amigo de  la familia, unos 100 años si no es más,la verdad  no recuerdo pero no sabíamos que ese muchacho es su hijo, él es muy conservador, bastante reservado por lo visto.

—Ya veo.

—Y ahora es tu papá y lo que más me preocupa eres tú Sakura

—¿Yo por qué? —me acerca a ella y la abrazo

—Tengo miedo que se te despierte tu instinto asesino, no has podido controlar tu fuerza mágica y ahora que se el por qué no eras humana del todo, eres un Dhampir, pero eres más bruja que Dhampir, lo que me es raro es que, jamás has tomado sangre, ni te llama la atención y es por eso, está dormido dentro de ti.

—Shaoran me estas asustando.

Tocan la puerta.

—Pase.

—Hijo, Sakura ¿Está bien? — Ingresó mi padre, por fin había llegado, asiento.

Sakura sale del baño ya otra vez  arreglada

—Papa, abajo está el padre de Sakura —él asienta en afirmación, claro papá lo sabía desde hace rato, y me imagino que estaba esperando este día.

—Ella es un Dhampir y si no controla todo su poder, puede ser su propia muerte. — El silencio reina en la habitación.

—Papá...

Sakura miraba hacia el piso, no decía nada, ambos la miramos.

—¡Debo volver a Japón, en mi antiguo hogar deben estar las respuestas! — mi padre asienta

—¡Los tres viajaremos a Japón, ayudaré en lo que  más pueda! - ella asiente y salimos del cuarto  piso, Sakura estaba muy distraída, pensativa, nerviosa.

Bajamos todas las escaleras y llegamos al primer piso de la mansión, caminamos hacia el jardín  y ahí nos esperaban todos, el silencio abundó en nuestro jardín, miró hacia el cielo, la luna estaba en su punto alto y bastante roja.

—Llegó la hora, el momento esperado por todos. —le digo a Sakura y ella me tomó de la mano con fuerza.

Continuará...