¿Hablar? No fue exactamente lo que hicimos y en parte era mi culpa. Pedí una ducha antes y esa ducha se transformó en otro momento íntimo.

Tenía la carne sentida por sus dientes y sus chupones. Probablemente la piel de mi culo lucía terriblemente maltratada, pero no fue exactamente así. Contrario a eso, me corrí como un demente más de una vez. En la ducha pegado a los azulejos húmedos, mientras Jinnie golpeaba mi punto dulce una y otra vez con su voz ronca diciendo cosas dulces a mi oído.

"Es contigo con quién pertenezco, justo aquí y así" y frases similares, fue lo que dijo constantemente mientras me follaba a una pulgada de mi vida.

En tantos años de vivir en este mundo como un dhampir y haber tenido algunos memorables romances (más o menos) fue la primera vez que me sentí realmente vivo. Y siempre con él, desde que conocí a Jinnie. Definitivamente creía en esa cosa de destinados, en ese hilo rojo que nos unía. O como sea si nombre.

Sentí esa conexión sobrepasar todos los niveles de cordura más de una vez. Yo quise hablar, intenté hacerlo, pero cuando sus dientes se clavaban en mí—a pedido pura y exclusivamente mío—me sentía nuevamente en una nube de éxtasis de la que no quería bajar nunca. Mi orgasmo se volvía el triple de intenso y mi cuerpo temblaba entre sus brazos para luego ser sostenido por él, ser sacado de la ducha. Secado, claramente no fui vestido, pero si dulcemente depositado en mi cama.

Una excelente manera de decir que me dejó hecho polvo.

En el proceso de la madrugada, también me alimentó, con su sangre. Recuerdo latente como Jinnie mordió su muñeca; sangre roja y espesa brotó de él. Se me hizo agua la boca cuando me alcanzó y sentí su sabor.

"Mmm~..." Pareció algo así como: el sueño de un sueño. Yo tenía mi propia sangre que bebía de animales por elección propia de hacía un largo tiempo ya, pero la sangre de Jin, carajo. Era tan dulce, me sentí saciado al instante y a la vez jodidamente sediento por más cuando succioné con mas ímpetu y le robé un gemido dándole una sensación de placer que dilató sus pupilas al máximo volviendo sus ojos negros (no del tipo demoníaco que cubria hasta la esclerotica) sino solo sus orbes, negras como un lago en el que me hundía sin reparo. Ojos negros que me miraron en todo momento y luego, por supuesto, se metió entre mis piernas una vez más, besó entre mis muslos, jugo con mi polla y me vine en su boca donde también se bebió hasta la ultima gota de mi esencia.

Para las siete de la mañana me desperté aturdido por su propia voz susurrando algo que me costó oír.

Se veía tenso, sus músculos duros en la zona de su espalda. Llevaba puesto un pantalón deportivo que pude reconocer como mío pero que caía deliciosamente por sus caderas anchas.

Se veía mejor en él, si quieren mi opinión.

— ¿Jinnie? —me dí cuenta tarde que no intenté leer su mente debido a que era complicado cuando la dejaba totalmente en blanco para mí, pero podría haberlo agarrado desprevenido—. ¿Con quién hablas? —pregunté confundido.

Él se giró y me dejó ver el pálido de sus ojos, sus pupilas eran muy finas, parecían casi blancos hasta que se enfocó en mí y se dilataron un poco. Su piel exquisitamente palida y sus labios rojos con su cabello finalmente negro lo hacían parecer un sueño. O una bestia perfectamente hermosa sacada de alguna historia de terror donde la víctima se entregaría sin prejuicios ni temores a sus garras.

Sus pasos fueron lentos y agraciados, me perdí en él unos segundos mientras se acercaba sigiloso a mi lado de la cama y se sentó allí acariciando mi cabello.

— ¿Sabes por qué no puedes leer mi mente? —susurró grave y con seriedad.

Fruncí mi ceño confundido—. Porque aprendiste a dejarla en blanco luego de estar en manos de mi hermano —susurré.

Él sonrió sin gracia y con tristeza mientras su dedo trazo una línea en mi mano, el silencio fue bastante ensordecedor y mi ansiedad fue en aumento.

— ¿Jin? —dije con un hilo de voz.

Él levantó la mirada y sus ojos se fijaron en los míos, demandé una respuesta en silencio y un movimiento leve de cabeza debido a su extraña actitud y pregunta.

— Verás. La verdad es que-...

¡Jungkook!

La voz de Lisa y el tono desesperado que vino de mi sala hizo que nos movieramos a una velocidad desquiciada, para estar abajo segundos después de verla horrorizada y con ojos húmedos mirando hacia la puerta. Tenía mis manos en sus hombros para preguntarle que sucedía mientras ella miraba atónita y luego me daba cuenta de la figura masculina frente a la puerta abierta parado justo en medio de los primeros rayos de sol matutinos que golpeaban mi puerta en ese horario.

Tenía mis ojos tan abiertos como los de Lisa, imposible de parpadear y atónito ante la vista de Jungkook, pálido con su torso descubierto, pantalones deportivos negros, descalzo y su cabello negro como la noche. Todo él frente a mi puerta con los rayos de sol dandole de lleno en su piel cristalina.

Mierda. Entonces la teoría de vampiros den creando más diurnos era definitivamente cierta.

Miré a Jin a un lado de mí, no dejaba de observar a Jungkook con brazos cruzados y mirada nostálgica. La risa de mi mejor amigo, el mismo que llevaba muchos años sin ver la luz del día, sin saborear el calor de los rayos del sol luego de perder su humanidad por culpa mía, llegó a mis oídos como un sonido dulce y melodioso.

Sus hombros temblaban a la par de su risa divertida y un poco desquiciada, Lisa corrió hacia él y se quedó pasos más atrás, dandole su momento, pero extendiendo su mano para tocarlo. Estoy seguro que revivió una situación aterradora un par de años atrás cuando Lisa recién comenzó a trabajar con nosotros.

Una niña de unos siete años fue raptada y masacrada frente a Jungkook en una misión fallida. La primera víctima que no pudo salvar, tan pequeña e inocente con mucho por vivir que mi mejor amigo vió ser asesinada por bestias similares a él. Horas más tarde, cuando volvimos de la misión y estaba amaneciendo, Jungkook no pudo con la culpa y decidido corrió a la puerta para dejarse ir.

En ese entonces él y Lisa no era nada más que compañeros, aunque Jungkook le había dejado en claro sus intenciones, Lisa no cedía. Hasta ese momento en que casi lo perdimos en cenizas. Ella lo arrastró de nuevo a la habitación y dijo tantas cosas que apenas puedo recordar entre sus gritos horrorizados, minutos después había confesado sus sentimientos hacia Jungkook. Básicamente, sintió la misma atracción latente desde un inicio, al igual que sucedió con Jinnie y conmigo. Puedo entenderlo mejor ahora.

Luego de eso, lo cuidamos, pero ella se hizo cargo de todo, hasta que Jungkook pudo regenerar las partes heridas. Sin embargo ahora, él estaba riendo y gozando de la matutina luz solar. Cuando Lisa tocó su espalda y Jungkook giró, sus colmillos estaban relucientes y orgullosos y sus ojos eran una copia de los palidos de SeokJin. Lo primero que hizo fue tomar a Lisa de la nuca y besarla.

Carajo, aún no acostumbro a ver la muestras de cariño de estos dos. Sonreí, miré a Jinnie buscar mis ojos y alzar sus cejas. Me sentí feliz y a la vez extraño. Si razonaba en la raza clásica de vampiros nocturnos y la diurna, debía admitir que la raza clásica podía mantener sus ojos de un color meramente humano hasta antes de revelar su naturaleza. La diurna, en cambio, terminaba perdiendo toda humanidad incluso en sus ojos. Jungkook era dueño de unos ojos negros intensos que ya no estaban ahí y no estarían nunca más.

Los extrañaría como extrañaba con locura los ojos miel de SeokJin. El mismo que ahora se acercaba a paso lento a mi.

— ¿Lo sabías? Me refiero ¿Estabas seguro? —pregunté.

Él se encogió de hombros—. No estaba seguro. Dudaba si la transformación era al morderlo o sólo al darle mi sangre —respondió—. Supongo que la teoría de la sangre era suficiente. Una mordida... —se encogió de hombros—. Definitivamente una mordida no sirve cuando ya es vampiro —susurró mirando a la pareja que ahora se abrazaba entre los sollozos amortiguados de Lisa.

Mi puerta se cerró de repente y me asusté hasta que noté dos de los dedos de Jinnie moverse mientras su ceño fruncido y mirada estaban fijos en mí puerta. Mierda, olvidaba todos los talentos que tenía... Con sus dedos o su mente. Mierda.

— Estás sonrojado, bastardo —dijo JK sacándome de mis pensamientos—. ¿Qué tal mis ojos de psicópata?

— Jungkook —regañó Lisa a sus espaldas.

— Te ves como un bastardo psicópata, efectivamente —respondí—. Guarda esos colmillos. Ya te vimos, princesa.

Su sonrisa relajada y su forma de obedecer mi orden me dió un cálido sentimiento y simplemente nos abrazamos al mismo tiempo y a la par. De tanta tragedia, algo bueno sucedió para Jungkook. Aunque hubiese deseado no arruinar a Jinnie para llegar a este fin.

Hubiese deseado no arruinar a ninguno.

"¿Oh?" La voz sorprendida de Jungkook interrumpió mi carril de pensamientos y detuvo el tiempo para mí cuando preguntó a Jinnie: ¿Puedes leer mi mente?

Soltándolo, giré en dirección a Jinnie y lo miré—. ¿Qué?

TaeHyung volteó y me miró confundido, sus ojos miel preguntándose que estaba pasando.

— Supongo que puedo hacerlo. No estaba seguro, hasta que pude oírte —respondí, TaeHyung se soltó de Jungkook y me miró con su hermoso ceño fruncido.

Ese mismo ceño que hacía cuando estaba cerca de correrse, pero era con la intención de aguantarlo. Hasta que se dejaba ir. Tan hermoso, tan perfecto, tan mío.

— Creo que solo funciona si estamos en la misma habitación. Fuera de esta, si no puedo verte y tú a mí, no creo que sirva. Si estabas pensando algo antes de verme, no pude oírte —dije, y luego añadí—. No es tan fuerte nuestra conexión. Yo no te mordí.

Los ojos de ambos se abrieron, incluso Lisa se acercó a verme con sus grandes ojos que siempre intentaban ver más allá de lo que dejabas ver.

— No me digas lo que eso significa —dijo Jk de entre los tres.

— ¡Lamento la interrupción de la reunión a la que no fui invitado! —dijo Lucas, viniendo de la central de mando y luego deteniéndose para mirar a Jungkook—. Oh, tenemos dos. Eso me agrada —mencionó señalandolo.

TaeHyung apretó sus dientes y me miró fijamente antes de dirigirse a Lucas—. ¿Qué sucede?

— Dos cosas —respondió—. Hyungsik mencionó a su alfa Min que tú quieres conocerlo para entregarle a Jimin, así que tienes una cita en dos horas —me dijo el dhampir.

— ¿Cuál es la segunda? —pregunté antes que TaeHyung.

— Tenemos un viaje reservado a Rusia en la noche —mirando a TaeHyung añadió—. Tu hermano tomó el mando del V'okulltizme.

La respiración de TaeHyung y Lisa se estancó, pude sentirlo con fuerza en mis oídos. Sus ojos miraron hacia los míos y se estrecharon un poco:

— Lo sabías ¿Cierto? —preguntó en un susurró, luego de un momento.

Tragué el nudo en mi garganta e intenté detener esta sensación de falta de aire (que no necesitaba en realidad) pero el nudo en mi estómago y en mi garganta se profundizó junto con su mirada oscura y herida. Fue como si el ataque de pánico que negué todo este tiempo, estuviera finalmente a punto de florecer.

Sí, la sensación burbujeante de pánico y terror a perderlo estaba haciendo efervescencia dentro de mí. Mierda.

— Lo susurró a mi oído las últimas horas —respondí intentando no sollozar como una criatura indefensa.

Pude sentir el segundo exacto en que la bilis de TaeHyung subió junto con la mía al mencionarselo a él en voz alta. El aliento que Lisa contuvo salió de repente, Lucas agachó la cabeza y el silencio de JK checando a Tae fue ensordecedor.

Mi boca se secó y me costó hablar por primera vez:

—Cada vez que él quiere, lo escucho, todo el tiempo.  Es constante, está dentro de mi cabeza sin que pueda sacarlo, excepto cuando estoy contigo... —susurré mirando a TaeHyung con su rostro pálido y serio.

Siempre supe que era mala idea decirle esto.

— ¿Qué estás intentando decirme? —susurró sin aliento. Su voz grave se clavó como puñal en mi pecho.

Mis ojos ardiendo, la calma que intenté mantener o pretender (ya no lo sé) simplemente se esfumó de mí. Reemplazada por la desesperación de poder llegar a perderlo debido a lo que estaba a punto de confesar.

Relamiendo mis labios secos, sintiendo que el suelo debajo de mí era temporal y pronto caeria al vacío.

— SeokJin —Tae dijo mi nombre en un susurró severo que me removió hasta los huesos—. Solo dilo.

— ¡Lo desprecio! —grité dándome cuenta que mis lágrimas ya habían resurgido de mis ojos sin mi consentimiento—. Te juro que lo hago. Lo aborrezco. Me da asco, todo de él. Su apariencia, lo que me hizo. Lo que soy por su culpa, lo que significa para mí a causa de eso —dije entre sollozos.

TaeHyung tenía sus ojos húmedos y su ceño fruncido, estaba rompiendo su corazón.

El resto no me importó, estaban Lisa, Lucas y Jungkook, pero no me importó mientras Jinnie se rompía frente a mí.

— Soy un monstruo por su culpa. Si cierro los ojos tengo pesadillas tan lucidas que me vuelven un maldito desquiciado esquizofrénico. Si hay silencio, su voz está constantemente en mi cabeza. Si hay oscuridad a mi alrededor juro que puedo verlo con claridad ¡Y lo odio! Lo odio tanto, te juro... —su voz quebrada, su esclerotica roja debido a su llanto y la forma en que cayó de rodillas frente a mí me dejó pasmado y perdido—, pero no lo puedo evitar... No lo puedo detener. Sólo tú calmas las bestia dentro de mí. Él me hace-... Él hace que yo-... —sus brazos se envolvieron en mis caderas mientras presionaba su rostro a mi muslo y me rompía en mil pedazos su estado.

Mi mano viajó a su cabello negro lacio y acaricié allí. Se rompió en menos de cinco minutos y perdió el control. No se parecía en nada al vampiro cara de poker que encontré días atrás por primera vez de nuevo. Y me estaba doliendo el pecho de la desesperación, frustración y tristeza que podía sentir emanar de él.

— ¿Q-qué te hizo?—susurré con mi voz ronca entrecortada, reviviendo cada herida que jamás sanó dentro de mí por no poder salvarlo en el pasado.

Su mano enmarañó la tela de la camiseta que me puse antes de bajar y sus sollozos se intensificaron. Estaba tan roto.

— Vínculo Carmesí —susurró Lucas.

Los brazos de SeokJin se aferraron a mí. Mis ojos lo miraron y confundido fruncí mi ceño.

Lucas relamió sus labios y evito mi mirada—. Comparte un vínculo con tu hermano. Es inevitable, él fue su creador. Entre vampiro y dhampir es una conexión diferente... —suspirando tomo el valor de mirarme a los ojos—. Se le llama "Vínculo Carmesí" debido a la sangre del dhampir y la conexión que viene con eso. Es inevitable que-...

Mis brazos se aferraron a Jinnie mientras la bilis amenazaba con subirme a la garganta—. ¿Qué? —demandé.

Lucas suspiró y miró a SeokJin quien siguió aferrándose a mí con fuerza—. Se siente inevitablemente atraído hacia él —susurró—, en muchos sentidos.

Después de sus palabras no supe quién se aferró más fuerte al otro. Si Jinnie a mí o yo a él.

— No es culpa de SeokJin, es más fuerte que él. Puede aborrecerlo y aún así desearlo. No es voluntario, está por encima de él y no importa la distancia puede escuchar al bastardo si este quiere comunicarse con él o jugar con su cabeza —Lucas suspiró, SeokJin ya no sollozaba, pero seguía aferrado a mí mientras yo miraba a la nada—, por eso los rumores en los pasillos del V'okulltizme dicen que los supuestos vampiros diurnos tienen a sus parejas, los ex dhampirs atrapados con ellos debido a este vínculo inevitable.

El silencio en la habitación fue tan ensordecedor, al punto que me hizo sentir mareado. Si no estuviera siendo sostenido por Jinnie (o si él no se estuviera aferrando a mí) probablemente estaría a punto de desvanecerme.

No me dí cuenta cuando Jimin se unió a nosotros a la sala, hasta que su voz resonó detrás nuestro:

— Es un vínculo superficial, pero fuerte. Investigamos mucho con SeokJin —exclamó—. Tiene la ventaja de que tú existas —dijo suavemente—. Lo suyo y lo de tus amigos —mencionó señalando a Lisa y a JK—. Se llama "Vínculo del destino" es más fuerte e intenso. Eres su destinado y eso debilita el vínculo Carmesí, pero aún así la única forma de romperlo es...

— Quiero matarlo —dijo la voz de Jinnie amortiguada a mi cadera, pasando el nudo en mi garganta y mirando hacia abajo, me encontré con sus ojos rojos, la esclerotica entintada en sangre resaltaba sus ojos palidos—. Me hace sentir enfermo, no deseo esto. No lo quiero —dijo con su voz temblorosa—. No puedes leer mi mente porque él mismo me bloquea en ocasiones de ti. Si bien puedo dejar mi mente en blanco, no soy tan bueno contigo. Tú me haces sentir muchas cosas y él me obliga a desconectarme de tí —dijo con ira.

Rompiéndose de nuevo frente a mí y rompiéndome con él al punto de no resistir mi propio peso y caer de rodillas junto a él. ¿Por qué todo tenía que ser tan horrible? Saber que mi hermano podía meterse en su cabeza, aún a la distancia y jugar con él, me enfermaba. Me sentí tan inservible, tan enfermo.

— Voy a matarlo —susurré como si estuviera en un trance que mantenía mi ira al borde—. Voy a matarlo con mis manos —susurré—. Te juro que voy a liberarte de él de una vez por todas —juré con mi mano sobre su mejilla pálida, acariciando su belfo inferior rojo.

Él era mío, solo mío. Y no me importaba, ya no me importaba, hacía un tiempo tener que matar al único familiar que tenía "con vida". Mi hermano y yo somos desconocidos hace deecadas, y era el jodido momento de poner fin a su delirio y existencia. Valdría la pena borrarlo de este mundo por alguien como SeokJin.

— Yo lo haré —susurró con su voz ronca y sin fuerzas—. Mientras te tenga conmigo, puedo hacerme cargo —dijo calmándose mientras se ponía de pie y tiraba de mí en dirección a sus brazos para estrecharme allí—. Promete que te quedarás conmigo sin importar qué —susurró con desesperación.

—Estoy aquí. Sin importar qué —dije con dificultad. Sus brazos me tenían con una fuerza abismal que complicó mi respiración, pero no me importó.

Estaba aquí hasta el final con él. Jodidamente terminaríamos esto juntos.

Les debo la imagen, la IA no andaba de buen humor.

Llegué mas temprano que tarde. L@s leo y sus teorías también 🔥🔥

Se nota que se viene "The final Battle" ahre UwU sonaba mejor en ingles 🙂‍↔️
Les dejo un fuerte abrazo y que tengan bonito fin de semana 🫂 perdón si hay errores de deditos.

Con amor niñita Nanykoo 💜