—No sé en qué estaba pensando ¡Por Dios! — Me maldecía a mí mismo por la idiotez que acababa de cometer. Yo, Hoseok de apenas veinte años de edad en serio me estaba volviendo loco, ¿Como era posible que me iba a reunir con ese tal ''Suga''?, el trato estaba hecho, después de mi primer trabajo que terminaba en diez minutos me iba a reunir con él en una cafetería cerca de la universidad.

—Si ese sujeto llega a ser una farsa me largo de ahí inmediatamente— Susurre para mí mismo mientras me preparaba mentalmente detrás del mostrador de la tienda en cual trabajaba.

La curiosidad me llevo actuar sin pensar, a parte mi falta de tiempo y dinero me estaban llevando al límite, la relación con mis padres apesta, en especial con mi padre, desde el día que me encontraron casi follando con mi mejor amigo de mi ciudad natal, casi me echan a patadas hasta que decidí irme de ahí.

Cuando menos lo pensé, diez minutos ya habían pasado y el reloj ya marcaba las cinco de la tarde, me apresure a entrar al café donde habíamos acordado. Realmente estaba nervioso, mis manos sudaban, me logre sentar cerca de la ventana y ordene un té para calmar mis nervios, cuando un mensaje me saco de mis alterados pensamientos.

''Bebé, estaré ahí en cinco minutos, estoy ansioso por verte''.

— ¡Carajo! el tipo vendrá en cinco minutos, aún tengo tiempo de arrepentirme y salir corriendo— Pensé casi con el impulso de levantarme, tomar mis cosas y partir, pero luego pensé en lo mucho que me encanta mi carrera y que no quiero abandonarla, respondí el mensaje dando mi ubicación exacta y la manera en la que iba vestido, tome un sorbo de té, jugando con el azúcar en la mesa y la cuchara que la acompañaba.

— ¿Bebé ?...— una voz profunda me saco de mis pensamientos, el cuerpo se me erizo con esa simple palabra, mi respiración se empezó agitar, el corazón se me iba a salir del pecho, la voz provenía detrás de mí, por lo que yo me decidí a girarme y ver a un tipo muy bien parecido, demasiado guapo diría yo. Su piel tan blanca como el mármol; su ojos negros tan profundos que por un momento jure que leían mi alma, sus labios delgados color rosa que relamió de una forma tan sensual y luego sonrió de lado mientras sus ojos negros me analizaban de pies a cabeza, su cuerpo bien definido, vestía un traje Hugo Boss de color negro, sus grandes manos y sus largos dedos parecían una obra de arte, su cabello negro combina con todo el, en su muñeca izquierda adornaba un reloj Rolex, se veía tan masculino, tan elegante, tan hermoso, todo él era una obra de arte, parecía como una obra de Miguel Ángel estuviera frente a mí y hubiera tomado vida.

—¿S-suga?— Mis torpes labios pronunciaron su sobre nombre, sentía que la cara me ardía con solo verlo, mientas el volvió a embozar una sonrisa que hizo parar por un segundo mi corazón.

—Si, soy Suga, en realidad mi nombre es Min Yoongi— Hizo una leve reverencia para luego sentarse en la silla frente a mí, sus ojos seguían mirándome tan intensamente.

— Mucho gusto ... Jung Hoseok— Hice una leve reverencia con mi cabeza, las manos me empezaron a sudar, este tipo era tan sensual, hasta su voz era sensual, apuesto que es una broma de mal gusto, ¿Por qué un tipo tan guapo como el estaría en un sitio en Internet como ese?

— Bueno, entonces ¿Te gustaría negociar? — Entrelazo sus dedos y su cara se tornó seria, sin perder ese encanto de seducción.

— ¿Negociar? — Pregunte algo confundido—¿Es algo así como un contrato? señor Min...

—Dime Yoongi, o si quieres entrar en calor desde ya... dime Daddy— La forma tan natural con la que dijo ese último me sorprendió de tal manera tanto como la forma tan sexy que se escuchó provenir eso de sus labios — Y claro que me refiero a un contrato, no haría esta clase de cosas sin uno— Finalizo mientras hacia una expresión relajada y se echaba hacia atrás en su silla.

—Señor Yoongi, si tengo que firma un contrato... ¿Podría contestarme unas preguntas?— Era demasiado bueno para ser real, de seguro era un tipo que solo quería acostarse conmigo y estaba haciendo un "teatrito" pero tenía que confirmar esto de una vez por todas.

— Claro bebé, pregunta.

—Ok... Usted ¿Por qué quiere un sugar baby? porque... Por lo que veo, usted podría tener a quien quiera cuando quisiera y como quisiera sin necesidad de esto, y ¿No se trata de una farsa verdad? porque si es así le voy a romper la cara a golpes— Solté sin ninguna duda, aunque por dentro estaba temblando, Yoongi soltó una risita incrédula y me miro sonriendo, saco una tarjeta de su bolsillo, era una tarjeta de presentación.

¡¿"Min Yoongi, presidente del Banco Min''?! Mis ojos se abrieron de par en par al encontrarme con el presidente de uno de los bancos más importantes de Corea, ¿Como era posible que este tipo estuviera frente a mí y estuviera a punto de cerrar un trato de ese nivel con un sujeto como yo, que conoció hace una semana ?.

— Y la razón por la que quiero un Sugar baby es simple, quiero algo nuevo, sabes Hoseok, soy una persona que le encanta el control, me encanta que la gente me necesite y ver a un chiquillo como tú que necesita ayuda y saber qué puedo hacerlo a cambio de follarte cuando quiera y como quiera, me hace excitarme más, aparte no tengo tiempo para una relación, y sé que esto nos beneficiara a ambos, yo te ayudo y tú me ayudas a desahogar toda la tensión sexual que acumulo en la semana— Su expresión se mantuvo seria al decir eso, saco un folder de su portafolio y lo puso sobre la mesa deslizándolo a mi dirección junto una pluma.

— Léelo bebé, toma todo el tiempo del mundo.

Saque un papel blanco de aquel folder amarillo, era un contrato de Sugar Baby bien detallado y concreto:

Yo________________________ el día _________________ a las ____________

Me comprometo a ser el Sugar Baby de Min yoongi, hasta que uno de los dos decida terminar el contrato en buenos términos o si el Sugar baby rompe la regla número 3 del contrato, también queda cancelado si ambos tanto como Sugar daddy y Sugar baby rompen la regla número 7.

1- El sugar baby tendrá que llamar a su propietario Daddy la mayor parte del tiempo

2- Si el Sugar Daddy quiere obsequiarle algo a su sugar baby, el sugar baby tiene que aceptarlo sin protestar.

3- El sugar baby no podrá tener sexo con nadie más aparte de su sugar daddy

4- El sexo es obligatorio

5- El sugar daddy estará pendiente de todas las necesidades de su sugar baby (financieras, medicas, académicas etc.)

6- El sugar baby tendrá que acompañar a su Sugar daddy a diferentes actividades (viajes, citas, eventos etc.) siempre y cuando la ocasión lo demande.

7- No divulgar lo que sucede a la hora del sexo con nadie más, esto es tanto como el sugar daddy y el sugar baby.

Firma del respectivo Sugar daddy_________ Firma del respectivo sugar baby _________

El contrato estaba bien definido y directo al punto, '' tener sexo con un tipo mientras me da dinero '', genial, soy una puta, aunque solo tendría un cliente y eso no me parecía tan mal.

— Ok señor Yoongi ¿Si firmo esto eso significa...?

— Significa que serás mío bebé...— Dijo sin ni siquiera titubear, este tipo era sorprendente.

Tenía tantas cosas en mi mente, mi dignidad se iría al carajo cuando firmara esto, sería el esclavo sexual de alguien que no conozco, pero mi carrera es lo que importa en esto, no tengo ayuda de nadie, y que un tipo guapo y rico me ofrezca su ayuda a cambio de mi trasero... creo que lo vale. Tome la pluma y lo firme antes de arrepentirme.

Yoongi tomo la pluma y firmo su parte del contrato también mientras sonreía satisfecho.

—Bien... trato hecho — Dije nervioso frunciendo los labios nervioso.

—¿ Trato hecho que ...?— Yoongi me miraba de una forma tan intensa que sentía que la piel me quemaba, comenzó a trazar la pluma encima del contrato señalando una de las reglas mientras se mordía el labio, era la regla número uno.

— Trato hecho...Daddy — mi voz sonó temblorosa, mi cara ardía, mi respiración se agito una vez más al ver como Yoongi mordía su labio mientras sonreías.

— Aun tenemos que cerrar el trato como se debe bebé.

— ¿Como se debe ?— Estaba algo confundido, ¿A caso íbamos a traer a unos abogados o qué?

— Si, ya sabes... tú debajo de mí... jadeando con la cara roja de placer mientras te hago mío— ¡Ahhh! esa maldita forma de hacerlo sonar tan natural me sorprendía cada vez más.

La voz se me corto al escuchar eso, mis ojos se abrieron como platos, este tipo sabía lo que hacía, su mirada seguía clavada en mí, parecía como si me desnudara con solo mirarme, solo imaginarme esa escena hizo que me excitara un poco.

— Esta bien Daddy, vamos a cerrar el contrato de una vez por todas.

—Bien, Daddy te dará un "dulce", bebe.

ESTOY MUERTA CON EGOO AHHHH

DISFRUTEN EL CAPITULO UWU <3