"Nunca me sentí tan jodidamente débil "

Nuevamente Yoongi era un desastre, sentado en la cama con bolsas debajo de sus ojos y una cara de desvelo mezclado con resaca. Soñar con Hoseok era algo que hacia cada noche, lo amaba, lo amaba como nunca había amado a nadie, pero sabía que Hoseok estaba mejor, o lo estaría, no tenía el valor de buscarlo, aunque sea para verlo de lejos, el miedo de salir corriendo abrazarlo lo invadía porque sabía que era débil, si lo veía otra vez sucumbiría ante él, y no podía permitirse lastimarlo otra vez, Min Yoongi de 28 años había tomado una decisión, mudarse a Japón en un mes, desde allá dirigiría su compañía ya que después de Corea, Japón era la sede más importante, tal vez si se aleja de el por mucho tiempo, pueda controlar ese deseo que le carcomía el alma.

Hoseok por su parte seguía igual, su corazón no sanaba, estaba dando lo mejor en su nuevo trabajo, el primer día había sido une éxito ya que recibió elogios de todo el mundo, tenia tiempo hasta para terminar su tarea al llegar a casa, incluso estaba empezando a sentir que todo era mejor, pero no por mucho tiempo, el recuerdo de su daddy lo torturaba nuevamente.

— Hoseok ... El señor Kim te quiere en su oficina — La voz de Jin saco de sus pensamientos al castaño que rápidamente tomo los papeles que estaban en su escritorio y se dirigió a la oficina de su jefe, al entrar hizo una reverencia y camino con cuidado frente al escritorio color negro.

— Sientante — Sonrió Nam mientras apoyaba sus codos sobre el escritorio y entrelazaba sus dedos mirando fijamente a Hoseok, el castaño obedeció y lo miro nervioso. — Esta vez no te llamo por trabajo — Hoseok lo miro sorprendió sin poder decir una palabra, pero por un momento pensó que tal vez Namjoon lo iba a despedir, la cara que puso en ese momento hizo reír al mayor. — Cálmate pequeño, no te hablo para despedirte — Hoseok empezó a pensar que su rostro era demasiado predecible y delataba sus pensamientos.

—Lo siento señor Kim — Se disculpo haciendo una pequeña reverencia.

—En realidad te hablaba porque quiero pedirte que me acompañes a cenar, ¿ te parece ?

—Oh ... quiere decir... ¿ Una cena de trabajo ? — la pregunta del castaño hizo reír de nuevo a Namjoon y este negó.

—No es una cena de negocios, no hablo de eso, solo quiero llevarte a cenar, ya sabes por tu nuevo trabajo, es un regalo de mi para ti — Hoseok no pudo contener su sonrisa, su jefe parecía intimidante pero era muy amable, o eso aparentaba.

—Oh señor muchas gracias, pero no se moleste, en serio me siento muy alagado.

—No tienes porque agradecer, solo acepta, te parece ¿Hoy ? .... después del trabajo — Hoseok mordió su labio nervioso pensando en la propuesta de su jefe, ya que seria de mala educación rechazar.

—E-esta bien, muchas gracias — Hoseok se levantó de su asiento haciendo una última reverencia y salió de la oficina soltando una gran bocanada de aire.

—El señor Kim te estará esperando en su auto después del trabajo Hoseok — Sonrió Jin mientras veía a Hoseok salir de la oficina de Namjoon, Hoseok asintió sonriendo y se dirigió a su escritorio.

Jin entro a la oficina de Namjoon y dejo un folder sobre la mesa y Namjoon lo tomo revisando cada hoja de papel.

—Todo lo que me pidió esta aquí señor.

— Así que también conoce a Jeon ¿ eh ? — Namjoon leía cada párrafo pasando pagina por pagina, hasta que una hoja lo detuvo de inmediato, sus ojos se habían iluminado como si hubiera encontrado absolutamente la respuesta a todo — Jung Hoseok ...¿ así que conoces a Min Yoongi ? — La sonrisa llena de malicia que se formo en los labios de Namjoon en ese momento era mas que todo de satisfacción.— Creo que esto es lo que se llama, destino, o sera ¿ suerte ? — Jin seguía mirando con seriedad a Namjoon y este no dejaba de sonreír — Buen trabajo Jin, nunca me decepcionas, vigila a Hoseok, aun no sabemos que tipo de relación tenían esos dos, pero para la cantidad de dinero que gasto en él y estas fotos en el evento de caridad junto a él creo que esos dos ... eran cercanos — Jin hizo una reverencia y se retiró acatando las ordenes de su jefe.

Al salir de la oficina miro de reojo a Hoseok, inconscientemente sonrió al ver como el menor trabajaba con tanta dedicación, por un momento le recordó a su pasado, cuando lo único que quería era superar a Namjoon, quería ser mejor que su jefe, tenia potencial, pero siempre fue oculto por la sombra del gran Kim Namjoon, Jin se acercó al escritorio de Hoseok y este lo miro sorprendido para luego darle una sonrisa tan radiante como la primera vez que lo vio.

— Señor Jin— Cada vez que Hoseok lo llamaba "señor Jin" siempre lo hacía sentir especial, era la única persona que lo veía con admiración y respeto, por primera vez se sentía así.

Jin noto que Hoseok estaba comiendo un postre y tenía algo de crema batida cerca de la comisura de su labio, el mayor se acercó a la cara de Hoseok y limpio los rastros de crea batida con su pulgar que luego llevo a su boca lamiéndolo directamente, Hoseok lo miraba con los ojos abiertos de par en par y Jin sonrío de lado, Hoseok se apresuró para alejarse un poco con la cara completamente roja, tomo una servilleta y oculto sus labios por si tenía más restos de comida.

— L-lo siento — Se disculpo apenado el menor y Jin solo sonrió .

— Estuvo delicioso — El mayor sonrió nuevamente tan seductoramente que parecía un modelo de revista, y se retiró a su lugar de trabajo, a Jin le estaba empezando a gustar tener a Hoseok cerca, sentir que había alguien que lo veía como él se merecía, tal vez si podía ganarle en algo a Namjoon.

La tarde había pasado casi volando, Hoseok estaba nervioso ya que aún le esperaba la cena con su jefe, al salir del edificio Namjoon lo esperaba junto a su auto Jin al aparecer iba hacer el chófer esa noche, el mayor miro a Hoseok mientras sonreír, solo se le vino a la mente el momento que habían tenido en la tarde y su cara automáticamente se puso roja.

—¿ Estas bien ? — Pregunto Namjoon al notar el acto de Hoseok acercándose al menor mientras colocaba cuidadosamente sus mano sobre el hombro de Hoseok y Hoseok asintió.

— Solo estoy nervioso — Susurro Hoseok y Namjoon no pudo evitar sonreía abriendo la puerta para que Hoseok entrara al auto.

El camino fue silencioso, Hoseok se dedicaba a ver las luces de la ciudad, hasta que sintió la mirada de Jin por el espejo retrovisor, Hoseok desvió de inmediato la mirada, por su mente pensó que ahora Jin lo vería como un descuidado por el incidente de la tarde y se sentía apenado. Hoseok era demasiado inocente. Después de un momento habían llegado al elegante restaurante, al entrar el menor noto que era estaba casi vació, pero el motivo era que Namjoon había reservado una parte del restaurante para esa noche, obviamente Hoseok no sabia nada de eso.

— Ordena lo que quieras — Sonrió Namjoon y Hoseok asintió, ambos ordenaron un filete y verduras salteadas, acompañado con un buen vino, por un momento los pensamientos de Hoseok recordaron la cena con su daddy, los ojos del castaño estaban apunto de llenarse de lagrimas pero fue fuerte, no quera dar esa impresión a su jefe.

— Muchas gracias señor Kim, me siento muy alagado — Namjoon lo miro mientras tomaba un sorbo de vino.

—No me lo agradezcas, la verdad quería cenar contigo desde que te vi en la galería de artes.

— ¿En serio ?

—Me pareciste muy interesante desde el principio — Namjoon miraba a Hoseok con una sonrisa de lado mientras sostenía su copa de vino desde el tallo y la agitaba suavemente. — Eres realmente mi tipo ...— Susurro Namjoon y esto hizo que un escalofrió le recorriera a Hoseok en toda la espalda.

Por algún motivo, Hoseok estaba cada vez mas nervioso, noto que la forma en la que Namjoon lo miraba no era normal.