MADISON

Me detengo para que pueda decirme lo que sea que tenga en mente, aunque no esperaba que saliera a buscarme.

No conversamos nada, todo el rato estuvo pendiente de su celular, así que tengo un poco de curiosidad por el hecho de que esté aquí afuera.

-Madison...-Suena nervioso.-Te quería decir algo. Si es que tienes unos minutos....

-Por supuesto, te escucho.-No quiero tener problemas con nadie, así que esta es una buena oportunidad para dejar las cosas claras.

-El día de tu audición... yo solo... quería decirte que no le hagas caso a Connor, le gusta molestar por cualquier cosa. Nunca quise hacerte sentir incómoda por tu baile ni nada parecido al irme tan rápido. Me surgió un problema de último momento... eso es todo.

-Ah, es por eso... No te preocupes, yo ya había decidido no hacerle caso, se nota que tiene un sentido del humor bastante... peculiar.

-Sí, de hecho solemos ignorarlo la mayor parte del tiempo.

-Una de mis hermanas es muy parecida a Connor, estoy acostumbrada a lidiar con personas así de peculiares.-Digo pensando en Elena.

-¿Tienes hermanas?

-Sí, tengo dos hermanas mayores: Bella y Elena. Y una hermana menor, se llama Liv.-Me alegra que no lo sepa, por lo general todos están al tanto de quienes son mis hermanas y se interesan más por ellas que por saber algo de mí.- ¿Tú tienes hermanos?-Sé que tiene una hermana, porque me encargué de investigarlos a todos antes de venir a esta audición.

-Sí, tengo una hermana menor Hailey, ella se encargó de crear esta banda sin que ninguno de nosotros nos enteráramos.

Y eso también lo sé, porque el video está en YouTube y ya lo he visto, varias veces de hecho.

Eso suena raro, pero debía saber a lo que me enfrentaba al venir a la audición. Y a pesar de eso, nada me preparó para tratar con Connor y que cambiara la canción que debía bailar, pero justo por eso se fijaron en mí.

Tal vez Connor no ha hecho las cosas tan mal, aunque no pienso decírselo.

-Vaya, ¿y cómo te lo tomaste cuando supiste que estabas en una banda?-Pregunto divertida, aún recuerdo sus expresiones cuando se enteraron de que estaban siendo grabados para un programa en vivo.

-Mal, tuve muchas ganas de estrangularla cuando supe que había estado subiendo videos de nosotros a escondidas y sobre todo cuando llamó a un programa para una entrevista y una presentación en vivo.

-Sí, admito que ya lo vi. A pesar de todo estuvo entretenido.-Digo recordando sus expresiones.

-Me alegra que nuestra incredulidad te cause gracia Madie.

-Bueno, los demás chicos no se veían tan paranoicos cómo tú. Jesse incluso le mandó saludos a su mamá.-Digo recordando esa parte del vídeo.

-A mi papá no le hizo para nada gracia lo que pasó, pero al menos puedo decir que después de todo fue una buena idea, a pesar de que él se opuso.

-Oh, ¿y ahora te apoya?

-No, de hecho mis padres se terminaron divorciando. Claro, no a causa de la banda, pero en general no tenían una buena convivencia.-Lo observo tratando de adivinar cómo se siente respecto a eso, ya que su tono no fue ni de tristeza ni alegría, supongo que fue más parecido a la resignación que a otra cosa.

Eso me deja aturdida unos segundos, mis padres siempre han estado juntos y no sé cómo me sentiría si se separaran, han tenido discusiones, pero nada fuerte hasta el momento. Todo lo han sabido superar.

En un gesto por demostrar mi apoyo le doy un leve apretón en uno de sus hombros.

-Yo creo que hiciste bien en seguir tu sueño por la música y estoy segura que muchas personas piensan igual. Y lamento lo de tus padres.

-No te preocupes, no es nada de otro mundo. Miles de parejas se divorcian todos los días.

-Sí, en eso tienes razón.-Mis padres llevan cerca de veintisiete años de matrimonio y papá pasa casi todo el día en su trabajo.

Nos quedamos en silencio un momento y entonces vuelvo a hablar:

-Tus ojos son muy azules.-De seguro ya lo sabe, pero qué más da. Es lo único que se me ocurrió decir para que no haya silencio.

El silencio no me agrada cuando estoy con más personas, o incluso estando sola. Simplemente no me agrada estar a solas con mis pensamientos, no son muy agradables que digamos. Es por eso que he recurrido a tomar en ocasiones pastillas para dormir, sólo espero que me sigan haciendo efecto.

-Algo de eso me han dicho...-Suena divertido.

-Pero seguro que no te han dicho qué clase de azul es. Según mi conocimiento en colores podría ser el tono azul bebé. Porque es mucho más claro que el azul que todos conocen y más claro que un tono celeste, incluso si fuera un celeste pastel...-De inmediato me arrepiento de haberlo dicho, ahora me mira con más curiosidad

-Espera, acabas de decir ¿azul bebé?-Pregunta. A lo mejor no fue el mejor tema de conversación que se me pudo ocurrir, pero es lo que hay.-No sabía que existía un color que se llamara así.

-Claro, lo que pasa es que hay muchas tonalidades diferentes de los colores que conocemos. El azul bebé es uno de ellos. Hay muchos tonos de azul, por ejemplo: azul, azul claro, azul eléctrico, azul oscuro, cobalto, azul cobalto, azul marino, índigo, zafiro...

-Ya me quedó claro que conoces muchos tipos de azul. Nadie me había dicho que el color de mis ojos era precisamente el "azul bebé". Por lo general los suelo clasificar en: azul y celeste.

-Esa es la clasificación típica Kyle, a mí me gusta conocer más. Y siempre hay una primera vez para todo, ¿no? Tuve el privilegio de ser la primera en decirte que tus ojos son de la tonalidad azul bebé. Ahora puedes responder eso, en vez de un aburrido: "azul", la próxima vez que te lo pregunten.

-Sí, supongo que puedo responder eso.

-¿Sabes lo triste que es que lo confundan con el color celeste?-Digo de forma dramática, sacando el payaso que llevo dentro. Algo habitual en mí cuando me pongo nerviosa, tal vez por eso no salgo con nadie.- Ahora tendrá más visibilidad gracias a ti.

-No me imagino lo triste que debe ser para ese color, es casi invisible.-Dice Kyle divertido por la miserable vida del color.

De nuevo hay silencio, aprovecho para ver mi celular y me fijo en la hora. Ya se me está haciendo tarde.

Al menos hoy pudimos hablar sobre los colores de forma tranquila. Con algo se empieza.

-Bueno Kyle, fue un gusto hablar contigo sobre la casi inexistente vida del color azul bebé, pero ya debo ir a casa. Nos vemos.-Me despido.

-Madie, si quieres te puedo llevar. Por la tarde no tengo ningún compromiso y no supone ningún problema para mí.

-No te preocupes Kyle, con mis piernas llego a todas partes. De igual forma, muchas gracias.-Está bien que hayamos podido hablar hoy, pero quien me asegura que no me lleve a un lugar solitario y me mate. No gracias, paso de eso.

Una vez que llego a la calle, saco mi aplicación de GPS para ver por donde me queda más cerca. Me fui desde la casa de Thomas, que está a unas cuadras de mi casa. Entonces...

-¿Quieres subir?-Me doy vuelta hacia donde escuché la voz y veo a Kyle, quien está en una moto. ¿Cómo lo hizo para subirse tan rápido? Ni idea. Luego veo que cerca de donde nos encontrábamos se estacionan las motos y me siento tonta, por un segundo creí que podría ser un vampiro y por eso fue tan rápido.

Adiós a la posibilidad de tener a mi propio Stefan Salvatore. O Damon, cualquiera me sirve.

-Creí que te había dicho que no Kyle.-Digo viendo la moto, mucha seguridad no me da, siento que podría salir volando de ahí en cualquier minuto. Además, mamá tampoco es muy fanática y me ha instalado cierta inseguridad respecto a ellos.

-Resulta que saldré a dar una vuelta, no me molesta ir a dejarte. Así sé que llegas bien a tu casa.

-¿Es seguro?-Pregunto desconfiada.

-Siempre ando a una velocidad segura, y uso casco. No pasa nada. ¿Ves? Hay dos asientos, te entrego un caso y estarás bien.

-¿Estás seguro de que no pasa nada? Aún no quiero morir, hay muchas series y películas que debo ver antes.

Sobre todo las películas de Disney, las antiguas son mis favoritas.

-Seguro, por lo general siempre viajo solo. Y la única vez que una chica se subió conmigo no recibí ninguna queja.

-¿Y esa chica era tu novia?-Ah, la sutileza no es lo mío, pero admito que tengo curiosidad. Es casi la única información que no está en internet.

¿Estás o no estás soltero Kyle Novak?

Aunque claro, eso no es de mi incumbencia. Ni me interesa tampoco.

-Esa chica era mi hermana. Aunque solo se subió conmigo una vez, después le regalaron una.-Dice divertido.- ¿Por qué el interés tan repentino sobre si tengo novia?

Porque es casi lo único que no está en internet, quisiera responderle.

-Porque te estás ofreciendo a llevarme en tu moto y también por simple curiosidad. Además de que en el caso de que tengas novia, seguro no le haría gracia que te ofrezcas a llevarme.

-No tienes que preocuparte de nada. Mi última relación acabó hace casi un año. Por lo que no tengo novia, así que nadie se molestará si te subes conmigo a esta hermosa moto. ¿Y tú?-Pregunta con interés

-¿Y yo qué?

-¿Tienes novio?

-Creí que esa pregunta ya la había respondido. No tengo novio, estoy esperando encontrar a mi propio Austin Moon o un vampiro, lo que llegue primero.

-Debía estar seguro... ¿De dónde es Austin Moon?

-De una serie de Disney.

-¿No son para niños pequeños esas series?-Pregunta curioso

-Para nada, los niños pequeños no lo entenderían.-Digo pensando en Liv.-Son tramas...complejas.

-Por supuesto...-Dice divertido.

-¿Qué es tan gracioso?

-Nada. Entonces... ¿quieres que te lleve?

Vuelvo a mirar con desconfianza la moto, pero luego de unos cinco minutos en que Kyle me explica que estaré bien, termino aceptando su oferta.

Así que me pongo el casco que me extiende y me siento tras él.

Una vez que la moto arranca no miento al decir que cierro los ojos y me pongo a rezar. A rezar para que no choquemos.

De a poco abro mis ojos y me doy cuenta de que estoy abrazando a Kyle como si mi vida dependiera de ello, cosa que fue así durante los primeros segundos en que creí que moriría.

Él no dice nada respecto del abrazo, pero yo voy soltando de a poco el agarre, mientras me dedico a mirar las calles llenas de autos y de algunas personas que van caminando.

En mi cabeza se reproduce la canción Into You de Ariana Grande y me siento casi como ella. Claro que en el video Ariana sale con el que se supone es su novio y yo voy con un chico con el que recién hablé de algo más o menos normal, como lo son los colores.

Definitivamente mis expectativas son demasiado altas.

La moto va parando de a poco, ya que nos estamos acercando a un semáforo en rojo y quedamos al lado de otra moto. En donde igual conduce un chico, no logro reconocer a la persona detrás de él hasta que se da la vuelta y me mira.

¡¿Cómo no reconocí ese pelo rubio que sale del casco?!

Es Elena y parece realmente una loca, cuando me grita:

-¡Madie! ¡¿Eres tú?!

Y yo en vez de responderle, desvío la mirada y en cuanto la luz del semáforo pasa a verde, grito:

-¡Acelera!-Kyle me hace caso y logramos dejar atrás la moto en donde iba Elena, no me sorprende verla en una, ella siempre ha dicho que le encanta cualquier tipo de adrenalina.

Pero ahora me vio y en la moto de un chico que no conoce. Seguro va a querer una explicación que la deje satisfecha.

Debo ir inventando una historia que sea creíble para ella.

Cuando ya estamos cerca de llegar a mi casa, casi le tengo que gritar a Kyle para que me escuche.

Una vez la moto se detiene, estamos a unas dos casas de la mía.

-Gracias por traerme Kyle.-Digo mientras me saco su casco.

-No tienes nada que agradecer. ¿Ves que andar en moto no es tan malo como pensabas?

-Algo, la verdad es que me pareció hasta un poco entretenido, aunque no creo que lo repita tan frecuentemente.

-Bueno, me halaga que te hayas subido en una moto conmigo, ahora solo tendré que convencerte para que lo vuelvas a hacer otra vez.

-Suerte con eso.-Respondo divertida.

-Veo que te gustó abrazarme.

Vaya, así que sí lo notó.

-Para serte honesta, creí que moriría. Fue por auto reflejo, nada más.

-Eso sí que me ha decepcionado, por un segundo creí que lo hacías a propósito

-Ya ves que no... En fin, gracias por traerme, adiós.

-¡Espera! Me gustaría pedirte algo...

-¿Qué cosa?-Pregunto confundida

-Eh... ¿Me darías tú número de celular?

-Creí que Connor ya te lo había guardado.

-Sí, Connor se lo sacó a Jazmín. Y yo no necesito su ayuda para hablar contigo. Además me siento mucho más cómodo pidiéndotelo a ti, así sé que tú estás al tanto.

Ahora que lo pienso... Sí, me siento más cómoda de esta manera.

-Bien, te daré mi número.-Y por alguna extraña razón decirlo en voz alta hace que mis mejillas se sonrojen.

Kyle me pasa su celular y me encargo de guardar mi contacto y luego él hace lo mismo con el mío.

-Está listo. ¿Alguna otra consulta?-Pregunto mirándolo porque ahora que lo pienso él ha impedido que me marche dos veces ya.

-¿Crees que quieras salir conmigo?-Su pregunta provoca que por un segundo deje de respirar.-Olvídalo, fui muy rápido.

-Ehm... Yo... ¿Habrá helado?-Bien, eso no era lo que estaba pensando en responder.

-Si eso quieres, entonces sí. Habrá helado.-Responde sonriéndome.

-Genial, me gusta el helado... Y me gustó el viaje en moto. Así que gracias por todo.

-De nada, me alegra oír que te haya gustado. ¿Me darás un beso de despedida?

Este chico es más rápido y astuto de lo que creía. En el mismo día me llevo en su moto, tiene mi número de celular y ahora esto.

Y yo ni sé cómo coquetear por lo nerviosa que me pongo.

Pero de todas formas me vuelvo a acercar a él y observo que su cabello quedó despeinado por haberse quitado el casco. Síp, es bastante atractivo.

Así que con mayor razón de la forma más rápida que puedo le doy un breve beso en la mejilla y me alejo de él en segundos.

-Ya es hora de que entre a mi casa. No puedes distraerme por más tiempo.

-¿Yo te distraigo?-Pregunta de vuelta.

-Ahora mismo, sí.

-Pues entonces estamos a mano.

(...)

Una vez que ya todos se enteraron de que yo quede seleccionada para la grabación del video, mamá estaba tan feliz que incluso cocinó mi comida favorita, estuvo preguntándome como fue todo y cómo me sentí cuando lo supe.

Yo les conté todo y omití la llamada de Connor y que uno de los chicos me trajo hasta la casa, y oportunamente Elena no mencionó que me vio hoy en la moto de Kyle.

Aun así después de comer Elena se apareció en mi habitación con la pregunta que me imaginaba que diría:

-¿Entonces quién era ese chico?

-¿Qué chico?-Pregunto haciéndome la tonta.

-El chico que te llevaba en moto, duh. No soy estúpida Madie y además en cuánto te lo pregunté, tú gritaste: ¡Acelera! Y eso te dejó en evidencia hermanita.-Dice Elena muy divertida, como es de costumbre, me hundo yo sola.-De lo más bien podrías haberme ignorado.

Concuerdo con Elena, Madie. Fuiste un poco tonta al gritar eso, la pudiste haber ignorado simplemente.

"Y ahora me lo dices Ariana" Le respondo a mi conciencia.

Decido que es mejor decirle la verdad, después de todo ella podría inventar algo peor, no me quiero ni imaginar cómo funciona su loca y retorcida cabeza.

-Fue uno de los chicos de la banda con la que trabajaré.

-¿Cuál de ellos se ofreció a llevarte?

-Da lo mismo Elena, fue uno de ellos y ya está. ¿Feliz?

-Algo, pero quiero saber quién será mi futuro cuñadito. Dime el nombre Madie. Además ibas pegada a él, a mí no me engañas, te gusta.

-No va hacer tu cuñado, y da lo mismo el nombre.

-Entonces, ¿por qué tan roja Madie? ¡Dios! Tu cara, espera te tomaré una foto.

-Ya deja de molestar a tu hermana menor Elena, ¿no tienes nada mejor que hacer?

-Lo siento, el código de hermanas lo exige así, es imposible no molestarte cuando te sonrojas de esa forma.

-¿Qué Código de hermanas?

-Uno que acabo de inventar Madie.

-¿Por qué no me hablas mejor de otra cosa?- Pregunto con la absurda ilusión de que deje de molestarme. -¿Me puedes decir tú con quién ibas en moto?-Pregunto curiosa, tengo una idea, pero igual quiero saber con quién iba.

-Con Griffin. Lo acompañé mientras estaba en una sesión de fotos. ¿Y? ¿Te gustó el paseo en moto?

-No fue tan malo como pensaba.

-¿No fue tan malo el viaje o la compañía?-Pregunta con tono pícaro

La compañía 100 de 10, opina Ariana.

-Supongo que ambas. Los chicos fueron amables conmigo. Me agradan.

-Me alegro, estoy segura de que ya tendré el placer de conocerlos más adelante.

-Supongo que sí.-Espero que eso sea más tarde que temprano.

(...)

Después de que Elena se fuera de mi habitación, estuve hablando con Derek y Thomas.

Derek me estuvo enviando muchos mensajes con emojis felicitándome y Thomas empezó a molestarme, porque decidí contarle parte de mi conversación con Kyle.

-Llegué a la conclusión de que le gustas a Kyle. Porque vamos... ¿en serio le gustó la conversación de los colores y el tono azul bebé? Lo siento Madie, pero esa conversación no fue ni de lejos interesante. Además de que te pidió tu número de celular, el chico no es nada tonto.

-Reconozco que fue lo primero que se me ocurrió, pero a mí sí me gusta el tema de los colores. ¿Por qué a él no podría gustarle?

-Porque es el tema más soso del que puedes hablar con alguien y te lo digo con todo el cariño que te tengo Madie. Le gustas o a lo mejor le diste gracia o pena, esa también es una opción. Y eso es lo que uno hace cuando una persona te atrae Madie, prestarle atención y no importa si esa persona habla de algo de lo más estúpido, a ti siempre te parecerá interesante si quién habla te atrae o te gusta.

-Vaya, ¿desde cuándo te convertiste en el sabio Thomas? Y por eso ya no hablo de los colores contigo, te parece aburrido. Y yo que paso minutos en internet averiguando más tonalidades...

-Es que lo es Madie, hay temas mucho más interesantes que saber eso. Y yo siempre he sido sabio, no puedo creer que no lo notaras antes-Dice ofendido.

-Bueno, mejor hablemos de otra cosa. No has visto la serie sin mí, ¿verdad?

-Eso suena a algo que tú harías, no yo.

-No, cómo se te ocurre. Eso sería una traición enorme, nunca haría eso.-Por eso la vi antes, así no estoy ansiosa por saber que pasa después.- ¿Y cómo sigue el tema de tú ya sabes quién?-Le pregunto, a pesar de saber la respuesta.

-Lo sabes mejor que nadie Madie, la soledad y yo somos uno solo. Y lo prefiero así.

-No has conocido a alguien que...

-Por favor hablemos de esto otro día Madie, siempre me aconsejas lo mismo y te lo agradezco, pero... ¡Mamá, ya voy! Lo siento Madie, mamá está de nuevo mandando esos emojis que no logro entender todavía. Mañana hablamos.

-Está bien, descansa Thomas.-Y corta la llamada.

Después de que haya pasado mucho tiempo viendo las redes sociales como: Instagram, Twitter (en donde siempre encuentro alguna discusión sin sentido) y Tik Tok, decido que es buen momento para dormirme.

Siento que alguien golpea la puerta de mi habitación y seguido de eso, aparece mi mamá en la puerta.

-Pensé que estarías durmiendo Madie. Entré porque vi una luz saliendo de tu habitación. Recién se quedó dormida Liv y la venía a dejar a su cama.

-Me quedé viendo videos, ahora iba a dormir. ¿Cómo estuvo tu trabajo hoy?

-Entretenido, estuve haciendo unas investigaciones para la revista. Siempre debo mantenerme informada acerca del mundo de la moda y sigo tan fascinada cómo cuando empecé a modelar.

-Me imagino, es sólo ver la ropa que usan Bella y Elena para notar los cambios. Me alegra que ellas me ayuden a elegir ropa, así siempre estoy a la moda.-Digo y luego bostezo.-Creo que ahora sí tengo sueño.

-Bueno, entonces te dejo dormir, solo quería decirte que estoy muy feliz por ti. ¿Quién diría que mi niñita sería una gran bailarina?

-Bueno ya no soy una niñita, tengo veinte años mamá.-Le respondo divertida.

-Ah, esas son tonterías. Tú y tus hermanas siguen siendo mis niñitas, Bella nunca se ha quejado por eso, incluso diría que le gusta que le diga así.

-Bueno, entonces a Bella le gusta, pero yo estoy bien con ser solo Madie.

-Bien: solo Madie. Venía a decirte que ya es hora de que te duermas.

Me acuesto y me tapo casi por completo. Siento que mamá besa mi cabeza, antes de acomodar las sábanas de manera que quede más o menos ordenado.

Aunque casi siempre las sabanas quedan de un lado de la cama, al parecer me muevo mucho sin siquiera darme cuenta.

-Eso haré, descansa mamá.

-Duerme, mi niñita número tres.-Escucho que dice divertida, antes de cerrar mi puerta.