Capítulo 8: The Talk

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8. La Charla

Lucius estaba en shock, Harry Potter iba a hacer que el lado oscuro ganara, oh, él sabía que el chico estaba de su lado por un tiempo pero Tom y Harry acordaron esperar hasta que Harry estuviera fuera de la escuela para hacer algo relacionado con la guerra, pero ahora no va a haber una guerra, lo estaban haciendo legalmente. No podía creerlo. Todo lo que aprendió anoche sobre Dumbledore fue impactante. Lo que el hombre estaba dispuesto a hacer a la gente, y el hombre los había llamado malvados. Harry le había dado una pila de leyes a Lucius para que las revisara y se asegurara de que las había leído correctamente y quería que fueran válidas. Sabía que Severus y Harry habían trabajado durante más de dos días revisando las leyes y colocándolas en los montones correctos. Lucius y Tom debatieron con ellos sobre algunas de las leyes, pero al final se pusieron de acuerdo. Severus había servido las comidas, incluyendo los tés. Originalmente iba a venir por la tarde, pero decidieron hacerlo por la mañana con una visita a Rita por la tarde.

Severus estaba preparando el té de la mañana cuando Tom, Lucius y su amo entraron en la cocina. Los tres se sentaron y Severus comenzó a servir el té y algunos bocadillos ligeros para el almuerzo. Parecían agotados, "¿Han terminado con los debates?" Preguntó, estaba de cara a Tom para poder escapar de usar el 'Amo'. Había pasado el tiempo haciendo pociones mientras repasaban lo último de las leyes. Su Amo, Lucius y Tom habían pasado horas trabajando en esas leyes.

"Hemos terminado". Su Amo respondió, "Nuestro próximo trabajo es ir al Ministerio a presentar los cambios, después de informar a Rita, por supuesto. Me voy a sentar a ver cómo Dumbledork se vuelve loco". Tomó un sorbo de su té.

Tom había pasado parte de la noche anterior en el banco creando su nueva identidad. "Tengo que asignar mis asientos y poner mi nombre para la presentación en el próximo Wizengamot. ¿Pusiste tu nombre para la presentación?" Severus se levantó y comenzó a limpiar los platos.

"Sí, me pregunto qué tal si llevamos a Rita con nosotros, la animamos a estar en el Gran Comedor mañana, para conseguir una bonita foto de eso, o incluso un recuerdo desde aquí". Suministró Harry, tocó el brazo de Severus y lo guió para que volviera a sentarse. "Tendremos una charla esta noche". Le dijo a Severus en voz baja.

"Sí, amo". Severus bajó la cabeza, pero sintió los dedos de Harry bajo la barbilla y le empujó la cabeza hacia arriba.

"No hay nada de qué avergonzarse Severus. ¿Quieres unirte a nosotros?" Le preguntó a Severus.

Severus miró a su Maestro "No estoy seguro".

"¿Crees que será prudente que vaya con vosotros?" Preguntó Lucius.

"Lo he pensado. Tenerte con nosotros será una declaración. Estamos haciendo cambios importantes. Además, como Lucius nos presentará, sería mejor que nos vieran con él ahora. Si esperamos, la gente pensará que estoy bajo una maldición o algo así. Si le damos a la vieja cabra un hueso mayor que mirar, podemos usar su distracción para hacer nuestro trabajo". dijo Harry.

"No me reconocerán en el Ministerio. Dumbledore también se preguntará quién soy". Les dijo Tom. "¿Los miembros de su Orden?" Preguntó Tom cambiando de tema, "¿Vamos a eliminarlos a todos o sólo a unos pocos elegidos?".

"Si están en el Ministerio, serán destituidos de sus puestos, sin embargo, no creo que tengamos que sacarlos a todos, no todos son culpables, sin embargo, me pregunto cómo será la próxima reunión ya que Minerva no estará, junto con nuestros Weasley y Granger".

Tom pensó durante unos minutos. "¿Tienes una idea de quién y cuándo?"

"Sí. Severus y yo le daremos a Madam Bones una lista de los miembros de la Orden que trabajan en el Ministerio. Ella se encargará en breve de ellos. El plazo dependerá de las leyes que podamos pasar, quiero que nos establezcamos antes de hacer cambios importantes. Dumbledore no renunciará a buscarnos, pero tendrá que pasar a un segundo plano para intentar que se anulen muchas de estas leyes, además echará de menos que vayamos sacando a su gente uno a uno de forma legal. Me gustaría saber con certeza si tiene algunos votos, no creo que los tenga pero no estoy seguro". Miró a Severus. Ya había compartido con Tom la forma de eliminar a algunos de los miembros, solo esperaban la palabra adecuada de Harry para entrar en acción.

"Creo que me quedaré aquí, no quiero arriesgarme a que nos coja a los dos". Respondió Severus a la pregunta no formulada. Sabía lo que su Amo había planeado y estaba muy dispuesto a participar en ello, también quería ayudar a conseguir alguna venganza, pero no quería hacerlo mientras estuviera así.

"Te veré en el Caldero Chorreante dentro de una hora. Tengo que ir a casa a por unos papeles". Lucius dijo.

⚜⚜⚜

Cuando se reunieron con Lucius en el Caldero Chorreante y se dirigieron al Ministerio, Harry se aseguró de que Rita los siguiera. Entraron en el Ministerio en silencio, ignorando el ruido que había a su alrededor. Se dirigieron al departamento correcto del Ministerio y Harry empezó a sacar los diferentes pergaminos que estaban agrupados. Había un buen montón.

"Hola, ¿en qué puedo ayudarles?" Preguntó el empleado, mirándolos a ellos y a sus montones de pergaminos. Esto significaría mucho trabajo.

"Mi nombre es Lord Potter-Black y estoy aquí para traer mis votos por poder para reflejar los cambios que quiero que se hagan. Este montón no refleja ningún cambio en las leyes que están actualmente en vigor". Era el montón más pequeño, y la secretaria sonrió al cogerlo. La ausencia de cambios significaba menos trabajo.

"Este montón son las leyes que ahora son válidas pero que fueron vetadas originalmente". Esta pila no era tan grande, pero la secretaria la observó y asintió con la cabeza. "Se lo haré saber al Ministro, estas serán revisadas, por supuesto, para asegurarnos de que todo está en orden".

"Por supuesto, ahora este último montón es el de las leyes que ahora están revocadas". El montón era enorme. El secretario se sorprendió. "Ahora, según nuestras leyes más antiguas, estas leyes entrarán en vigor al final del día. Estoy seguro de que tienes mucho que hacer, así que te dejaremos ir". Harry sonrió. Tom intentaba no sonreír, mientras Lucius sonreía a aquel empleado.

El empleado parecía asustado y envió un memorándum volador al Ministro. No podía dejar que se fueran sin ver al Ministro. "¿Quieren esperar al Ministro?"

Tom, Lucius se giraron para mirar a Harry que sonrió "No creo que sea necesario a no ser que desee charlar con nosotros..." Sabían que no era por eso que querría hablar con ellos.

"No estoy seguro, debería llegar pronto, ¿puede esperar por favor?" Preguntó el empleado.

Asintieron con la cabeza y esperaron al Ministro y cada uno tomó asiento. El Ministro Fudge entró en el despacho "¿Qué está pasando? Quiero saber por qué se van a producir estos cambios. Nadie tiene derecho a hacerlo".

Harry se levantó y sonrió "Hola Ministro, ¿está seguro de eso Ministro? Sé con certeza que desde que presenté los cambios sí tengo ese derecho, ya que los votos de mis apoderados no fueron usados con mi permiso, causando que muchas de las leyes fueran cambiadas o revocadas. Ahora bien, según nuestras leyes eso sí me da derecho. Seguro que no me va a negar mis derechos".

El ministro Fudge se volvió y miró a Harry "Harry Potter, ¿cómo te atreves? ¿Tienes idea de lo que significa esto?"

Lucius sonrió, poniéndose de pie, sabía que el Fudge no lo había visto ni a él ni a Tom, respondió "Sabemos exactamente lo que significa. Significa que soy el Jefe Brujo, que la Ley de Registro de Hombres Lobo ha muerto, que las criaturas oscuras ahora pueden conseguir trabajo sin tener que revelar quiénes son, y obtener atención médica. Las clases que Dumbledore prohibió volverán a existir. Sí, creo que Lord Potter-Black es muy consciente de lo que significan estos cambios". Lucius habló un poco más alto de lo normal, queriendo asegurarse de que Rita lo oyera, así como todos los que estuvieran a su alcance. El cotilleo se extendería por el Ministerio a la velocidad de la luz.

"Creo que Lord Malfoy expuso los temas principales. Hay muchos más por venir". Tom sonrió. El Ministro los miró y se sentó en la silla más cercana. "Ahora, Ministro Fudge, no querrá parecer grosero con el nuevo Brujo Jefe y la persona que más votos tiene en el Wizengamot, Lord Potter-Black".

El Ministro parecía sorprendido, mientras el secretario le entregaba los pergaminos. No sabía qué decir. Esto nunca debería haber ocurrido. Dumbledore debía asegurarse de que esto no sucediera. Estaba furioso con Dumbledore y no estaba seguro de lo que haría con los negocios que tenía en marcha. Todo el oro que iba a perder. Dumbledore le prometió que nada de esto pasaría. Tenía que arreglar esto, necesitaba ese oro.

"Creo que la próxima sesión completa para informar al Wizengamot es el próximo viernes. Estoy deseando verlo allí Minstro". Lucius declaró, con esas palabras de despedida, salieron del despacho.

Harry, Tom y Lucius estaban casi en la red floo para salir cuando llegó Dumbledore. "Harry, te he estado buscando. Debes venir conmigo".

Harry miró a su alrededor durante un segundo con cara de sorpresa "¿Estás confundido? ¿Quieres que vaya contigo? ¿Por qué iba a hacerlo?"

"Por supuesto, mi querido muchacho, tenemos que ponerte a salvo". Dumbledore sonrió ignorando lo que Harry acababa de decir, sus ojos brillaban, al mismo tiempo que intentaba asegurarse de que Harry lo acompañara y lo llevara con sus familiares. Las guardias de la sangre no estaban allí, pero podía lanzar unos cuantos y añadirles algunos encantos de compulsión.

"Así que estás confundido, y lo admites, increíble, siento que necesitas hacer algo al respecto. ¿Tal vez ver a un sanador? Por mucho que sientas que debemos hablar, me temo que es imposible, tengo mucho que hacer, espero verte cuando comience el nuevo curso". Harry sonrió y comenzó a alejarse. Tom y Lucius fueron a seguirlo cuando Dumbledore agarró a Harry del brazo.

"Harry, debes venir conmigo, no es bueno que estés lejos de tus familiares y de su seguridad". Dumbledore quiso añadir que no debía ser visto con este tipo de compañía.

Harry miró la mano en su brazo "Tenga la amabilidad de quitar la mano, señor. Estoy en muy buena compañía y muy seguro. A usted, sin embargo, le cuestiono. Está claro que está confundido y necesita ayuda. Incluso lo ha admitido. Me pregunto por sus facultades mentales. Como está claro que no has escuchado una palabra de lo que he dicho. No voy a ir con usted. No hay razón para que te involucres en donde voy. La escuela está fuera. Sólo eres mi director". Harry declaró.

Lucius se adelantó: "Profesor Dumbledore, le recomiendo que suelte a Lord Potter-Black". Lucius estaba disfrutando de esto, poner a Dumbleduck en su lugar se iba a convertir en uno de sus pasatiempos favoritos. Estaba disfrutando de que Harry jugara con él. Sabía que esto saldría en el periódico por la mañana.

Dumbledore miró a Lucius, a Tom y, finalmente, a Harry: "Ahora, muchacho, esto es importante, debemos ponerte a salvo". Empezó a tirar de Harry hacia los ascensores.

"No voy a ir contigo, y si no me dejas ir me aseguraré de que te acusen. No voy a ir contigo, ni voy a ir contigo. Si alguien me ve libremente ir contigo significaría que estoy bajo un hechizo o pociones. NO QUIERO IR CONTIGO LIBREMENTE NI POR MI PROPIA VOLUNTAD. Ahora suéltame". Dijo Harry con firmeza y en voz alta. Se preguntaba si Rita podría publicar esto mañana en el periódico.

"Soy tu tutor, Harry, y vendrás conmigo". Afirmó Dumbledore y empezó a apartar a Harry.

"¿Quieres renunciar a eso? Ambos sabemos que no eres mi tutor". Afirmó Harry en voz alta, haciendo que más gente empezara a prestarles atención.

"Ahora Harry, sabes que sólo quiero lo mejor para ti". Dumbledore sonrió, sus ojos brillaron, su mente formando sus planes. Necesitaba mantener su imagen y no quería que Harry la estropeara. Hasta el momento veía que la gente se preguntaba qué estaba pasando y eso no era bueno.

Lucius se acercó de nuevo y colocó su bastón en el brazo de Dumbledore que sujetaba el brazo de Harry. "Creo que Lord Potter-Black le ha pedido que le deje ir numerosas veces y ha declarado que usted no es su tutor".

"Sólo está mal informado". Afirmó Dumbledore.

Harry lo fulminó con la mirada y declaró en voz muy alta "Así que los duendes y el Ministerio me mintieron, estoy seguro de que les encantaría que les dijeras que están mintiendo. Estoy seguro de que al duende le encantaría verte en su Banco llamándolos mentirosos. Estoy seguro de que ya que estamos en el Ministerio, podemos ir a averiguar quién es el mentiroso, ahora mismo. ¿Esperas que crea que eres el único que tiene la razón?" preguntó Harry. "¿Sabes qué? Tengo la manera perfecta de resolver esto ahora mismo. Apuesto a que podemos hacer que Madam Bones se encargue de esto". Al oír el nombre de Madam Bones, Dumbledore soltó a Harry. Quería mantenerse alejado de esa mujer. "Ahora creo que nos iremos". Esperaba que Rita entendiera eso.

Juntos se fueron. Harry quiso lanzar una enorme sonrisa por encima del hombro a Dumbledore pero se abstuvo. Cuando volvieron a la Mansión, Harry se sentó "No puedo creer que lo haya intentado".

Rápidamente le contaron a Severus lo sucedido. "Cree que todavía tiene el control. No sabe qué leyes se cambiarán, amo". Afirmó Severus.

"Lo hará esta noche". Tom sonrió, "no se va a alegrar de no haberte arrastrado cuando vea el periódico esta noche. Habrá una edición especial, con las leyes y la escena que causó. Su próximo movimiento es que podría intentar pasar por la fianza de Severus que le hizo hacer por espionaje. Me alegro de que no me haya mirado demasiado, podría haberme reconocido".

"Ya no hay un vínculo que pueda usar. Se cortó cuando Granger nos hizo su pequeño hechizo. Mi vínculo anula los otros vínculos, por eso tu marca también desapareció. Ese es el único beneficio que puedo ver de ese maldito hechizo". Dijo Harry.

"Bien, uno menos problemas de los que preocuparse. No creo que todo se imprima esta noche, hay demasiada información, tardarán unos días en publicarla." Afirmó Lucius. "El Daily Prophet va a querer ordeñar esto por lo que vale".

"A menos que publiquemos algo antes. Sabemos que van a ir a por los pocos importantes, pero por qué no controlar lo que se publica. Acabamos de publicar algo, por qué no filtrar las leyes que la vieja cabra no dejó pasar, pero nosotros sí. Aquella ley que no permitió que más niños asistieran a Hogwarts, limitando el número de alumnos entrantes, permitiendo que sólo entraran los que tuvieran cierto nivel de dinero. Esa otra ley que utilizó para que los padres que no tuvieran ciertos ingresos no pudieran entrar también en Hogwarts con una beca. Básicamente, cualquier ley que vaya a arruinar su nombre". afirmó Harry.

Tom pensó durante unos minutos y asintió con la cabeza. "Vamos a ver lo que se imprime esta noche, le daremos nuestros propios giros. Quiero que se liberen las clases". Afirmó Tom. "Lucius, ¿por qué no escribes algo para que lo publiquemos?"

Lucius les dedicó una leve sonrisa, "Cualquier cosa para arruinar su nombre, será un placer" y se fue a su Mansión, Tom lo siguió de vuelta a la Mansión Malfoy. Sabía que Harry quería hablar con Severus.

"Severus ven aquí y tengamos nuestra charla". Dijo Harry. Severus se movió y se arrodilló en el suelo frente a Harry. "No, no, nunca Severus a menos que tengas que hacerlo por el vínculo, pero no quiero que nunca hagas esto".

Severus dejó escapar un suspiro de alivio y se acercó a la silla frente a Harry, "Gracias, Maestro. Todavía estoy tratando de aprender lo que este vínculo nos hará".

"Lo sé, por eso quiero que hablemos. Severus no me importa que sirvas, ya que has declarado que es necesario hacerlo, sin embargo, no quiero que hagas nada con lo que no te sientas cómodo. Nada de arrodillarse frente a mí a menos que sientas la necesidad de hacerlo. Me gustaría que me dijeras si tienes algún tipo de necesidad de ese tipo o si el vínculo cambia".

"Sí, amo, hasta ahora lo que he sentido es el deseo de seguir sirviéndole. Lo de arrodillarme fue más por asegurarme de que me vieran bien". Severus declaró "No siento ninguna necesidad de hacer más que servir en este momento. El vínculo parece haberse asentado".

"El vínculo me dice que se ha asentado, pero Severus sabemos que es sólo un parche por ahora. El lazo requerirá más después. Ojalá supiéramos más al respecto. Tenemos que conseguir que Tom nos ayude a mirar ese hechizo. No reconocí parte de la traducción".

"Lo sé, Maestro, ya he sentido el deseo de que tome el control en todos los aspectos de mi vida. No es algo constante pero creo que irá a más". Respondió Severus en voz baja.

"Yo también he sentido ese aspecto, pero será a tu ritmo, Severus. Nada ocurrirá si no lo deseas. Tú tomas la decisión, tú tienes el control. ¿Entiendes?"

Severus se estremeció por un segundo, parecía perdido en sus pensamientos, y finalmente respondió "Sí, Maestro, lo entiendo y se lo agradezco Maestro". Severus se acercó a Harry y volvió a ponerse de rodillas, "Por favor amo, soy suyo".

Harry le tocó la barbilla, inclinando la cabeza hacia arriba para que pudieran verse a los ojos, "Sí, Severus, eres mío y te cuidaré".

Severus se inclinó hacia delante y Harry lo subió a su regazo, Severus apoyó la cabeza en el hombro de Harry y acurrucó el resto de su cuerpo en el regazo de éste. Harry se inclinó hacia atrás y se limitó a acariciar el pelo de Severus y a dejar que su mano se frotara en un círculo alrededor de la espalda de Severus. Se quedaron así durante mucho tiempo, simplemente abrazados.

Severus se sintió seguro por primera vez en mucho tiempo. En realidad, nunca se había sentido seguro. Además, tenía a alguien que estaba dispuesto a cuidar de él. Era una sensación extraña. Estaba acostumbrado a estar solo y a no ser querido. Su Maestro estaba cambiando esos sentimientos. Estaba relajado y le abrazaban, eso era algo que siempre había querido, alguien que le abrazara.





***
N. T
Severus precioso, me pongo soft y me dan ganas de llorar

Si fuera Harry le pondría una orden de alejamiento a la cabra loca, en fin

Nos leemos mañana Nifflersitos

Ranita de chocolate 🐸🍫

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