10 DE MARZO DE 1976

Después del baile, Gwen sintió que James se estaba volviendo distante. No solo a ella, sino a todos. Mira constantemente en pensamientos profundos y no reconoce a las personas que lo rodean.

Hoy es el cumpleaños de Remus, lo que significa que ha pasado casi un mes desde que James Potter ha estado completamente sin vida. Mientras James se distanciaba de la gente, Gwen se acercaba más al compañero de Pociones, Apollo. platónicamente. Es un buen amigo. Él la animó en los momentos tristes.

"Yo solo- No entiendo, donde salió mal. Simplemente parece diferente a él hoy en día desde el baile". Gwen divagó.

"Gwen. Deberías hablar con él."

"Lo intenté. Pero cada vez que me acerco a él, simplemente se va. Como wow grosero". La chica puso los ojos en blanco.

"¿Obligarlo a hablar?" Apolo no tenía ningún otro consejo. Le gusta salir con Gwen. A él le gusta ella, platónicamente. Ella escucha sus problemas y viceversa. Es una gran y saludable amistad, a diferencia de todos esos otros Slytherins. Realmente no podía ser amigo de ellos, ya que la mayoría son mortífagos jóvenes en secreto.

"Tienes razón. Ya es suficiente. Quiero decir que estoy aquí, él puede hablar conmigo si las cosas no fueran lo suficientemente buenas".

"Acordado." Apolo asintió.

"Será mejor que me vaya. Es el cumpleaños de Remmy y bueno, siempre tenemos fiestas de pijamas en su cumpleaños. Buenas noches, Pollo".

"Será mejor que me vaya. Es el cumpleaños de Remmy y bueno, siempre tenemos fiestas de pijamas en su cumpleaños. Buenas noches, Pollo". Ella se despidió de él y se fue a la fiesta de pijamas.

Murmuró la contraseña y entró en la sala común de Gryffindor. La mayoría ya estaban dentro de sus dormitorios y ya estaban acostumbrados a que Gwen estuviera en la torre. Llamó al dormitorio de los chicos.

"Adelante." Una voz que reconoció como Peter.

Al entrar en la habitación, los chicos la miraron excepto James. Ellos sonrieron y le hicieron señas para que se sentara a su lado. Todos estaban sentados en el suelo jugando sorprendentemente al monopolio.

"¿Pensé que ustedes odiaban el monopolio?" Gwen sonrió. Es porque siempre terminaban en la Prisión, también conocida como la versión Muggle de Azkaban, y también ella los hizo ir a la bancarrota.

"Solo odiamos cuando jugamos con una maníaca como tú, Winnie". Remus se rió entre dientes.

"¡Oye! Solo porque seas el cumpleañero, no significa que puedas insultarme". La chica se acercó a darle un abrazo. Remus es un gran abrazador. Definitivamente 10/10. "Feliz cumpleaños Rem". Ella susurró. Ella le entregó una caja grande.

"¿Qué es esto? Ya me diste regalos".

"Cierto, pero los chicos y yo lo planeamos hace meses". Gwen sonrió, "Ábrelo".

Al abrir la caja, Remus inmediatamente se rió. Dentro había una maleta con su propio monograma Profesor R. J. Lupin.

"¡Bueno, feliz cumpleaños, profesor Lupin!" Gwen dijo en lo que Sirius y Peter repitieron.

"Gracias. Lo has dicho al menos 50 veces hoy".

"Lo siento, mi mejor amigo no solo cumple dieciséis años una y otra vez".

"Basta de tonterías. Estoy seguro de que puedo vencerte en Monopoly esta vez, Gwen". Sirius dijo con aire de suficiencia.

"Estaré en la cama. Bebiendo". James murmuró. Todos lo miraron como si fuera un ser extraño o como muggles, dijo un extraterrestre. Las únicas veces que James habló hoy fue para felicitar a Remus una vez y hablar aquí y allá. Pero ahora, ¿quiere beber toda la noche?

"Jaime." Gwen dijo con severidad.

"¿Qué?"

"No evitaré que tomes un sorbo, pero evitaré que te emborraches en el cumpleaños de Remus". Ella resopló.

"Sí lo que sea."

"¡Oye! ¿Cuál es tu-" una mano tiró de Gwen para detenerla. Era Remus, negó con la cabeza básicamente diciendo que no presionara a James. "No. Rems, él necesita escuchar esto. James Fleamont Potter, no he estado más que decepcionada por tus acciones estas últimas semanas. Lo digo en serio. Estás siendo un mal compañero en este momento. ¿No puedes al menos fingir para estar bien, hoy es el cumpleaños de Remus y no estás siendo más que un pedazo de culo. Nunca te había visto así. Honestamente, estoy increíblemente molesta. Entonces, si no quieres perder mi amistad . Será mejor que actúes correctamente".

"Yo-" Los chicos sabían por lo que estaba pasando James. No podían decirle a Gwen ya que se trata de ella. Estaba pasando por un desamor. Remus conocía los sentimientos de Gwen y se lo contó a James, lo cual, por supuesto, no creía.

"Gwen. Está bien". dijo Remo.

"No, no es-"

"Tienes razón. Lo siento. A todos ustedes. Es solo que las cosas han sido difíciles últimamente. Perdí el humor por todo. Lo siento". James miró hacia abajo haciendo que Gwen se ablandara. Sabía que era un poco duro, pero él lo necesitaba.

James Potter acaba de darse cuenta de cómo sus acciones afectaron a todos, especialmente a Gwen, que no sabe nada. No tenía la intención de molestarla, solo estaba triste. No podía pensar con claridad. Verla constantemente alrededor de Apollo Greengrass también empeoró su condición. El chico no quería actuar como un novio celoso, así que no pudo decir nada. Todo es simplemente complicado.

"Entendemos Prongs". Sirio suspiró. Él sabía mejor lo que su hermano estaba sintiendo en este momento. Un par de noches atrás, se había emborrachado y derramado todos sus sentimientos sobre Sirius y Remus.

"Yo solo- sabes que la amo bien." James dijo borracho.

"Conocemos a Cornamenta". Sirio suspiró.

"No es culpa de ella. Simplemente me odio a mí mismo porque no importa lo que haga. Ella simplemente está ahí. Simplemente es la chica de la que estoy enamorado". El chico de las gafas resopló.

"¿Qué pasa si te decimos que ella también te ama?" Remus intervino.

"La mayor mierda de la historia". James se burló. "A ella le gusta ese tipo de Greengrass".

"Jamie. ¿Qué pasó?" Gwen preguntó en voz baja. Ahí está su voz suave, hablándole de una manera tan amorosa. No. Solo está tomando la señal equivocada. El estaba ciego, ciegamente enamorado.

"Estoy bien. Estoy bien. Pero quiero beber". James tomó un trago de un flash. Probablemente whisky de fuego. Los chicos y él tenían escondites de ellos para tiempos difíciles.

"Está bien. Pero te juro por Rowena, no te emborraches".

"Promesa."

"¿Podemos comenzar el monopolio ahora?" Sirio sonrió. Aliviando la tensión acumulada dentro de la habitación.

"¿Listo para ir a la bancarrota?"

"Por supuesto." Sirius se burló.

-Lunático, tengo miedo. Peter dijo mientras miraba el rostro de Gwen y Sirius, ambos tenían ese destello de picardía. Cuando Sirius pierde, hace cosas raras. Como rodar por el suelo, intentar dar una voltereta hacia atrás y todo tipo de movimientos.

"Yo también Wormy. Yo también." Remus negó con la cabeza.

James miró a Gwen. Estaba llena de tanta pasión, especialmente durante este tipo de juegos. Admiraba cada cosa de ella. ¿Cómo se supone que debe seguir adelante? Tal vez... ¿encontrar otra chica? No. Eso está mal en muchos niveles, pensó James. ¿Cómo podía siquiera pensar eso? Suspiró, tal vez debería dejarlo ser. Sería malo si sin querer arruinara su amistad. El chico tomó un sorbo de su bebida.

El juego terminó con Gwen haciéndolos quebrar a todos, como de costumbre, y Sirius casi se rompe el cuello al intentar hacer volteretas. Peter y Remus tuvieron que aferrarse a él. Después de eso, Gwen se quedó dormida en el suelo. A lo cual, los chicos jugaron piedra, papel o tijera para elegir quién debía llevarla a la cama. James suspiró y la cargó él mismo. La colocó en su cama y no pensó que fuera apropiado dormir a su lado en este momento. Cuando estaba a punto de irse, Gwen se despertó, medio despierta y dijo: "¿Jamie? Será mejor que no te vayas". James suspiró y tiró de ella hacia atrás en su cama. Dormía en el suelo con un colchón que transfiguró. A medida que la noche se oscurece, los Merodeadores se quedaron profundamente dormidos.

Nota del autor:

2 capítulos más para el final de la Parte I.