Habia una vez ...¡A la mierda el cliche! Max Tennyson y el Galvan Azmuth eran los donjuanes mas deseados de 5 galaxias enteras, yendo de fiesta en fiesta, emborrachandose y chingandose a cuanto ser vivo vieran.

Un dia, Azmuth comenzo los planos de una nueva creación, y su buen amigo Max, no quiso perder la oportunidad y le comento una idea

—Si, si, ya te escuche, Max, se a que te refieres con guardar a cada Alien en el Reloj y sacarlo cuando quieras y de paso preservar a la especie como si fueses una especie de Salvador predestinado  —Se burlo Azmuth, con su usual facha y tono arrogante—. Es extremadamente impractico.

Max lo miro aun mas burlon, fastidiando la ya poca paciencia y tolerancia del Galvan.

—¿Asi que no vas a hacer nada porque es impractico? —Le cuestiono Tennyson—. ¡Azmuth! Crei que tenias mas huevos

Azmuth se burlo.

—Solo quieres un Harem sin consecuencias, pero hay mejores formas —Respondio Azmuth

Max nego.

—No es un Harem instantaneo, es buscar preservar, uniendo 2 razas

—¡Por Dios! ¿¡Es en serio!? ¿Es lo mejor que tu cerebro de Primate puede pensar? —Contesto Azmuth burlon—. ¿Esto es lo que crees que hago? Las fiestas esta bien, pero tengo un deber de preservar cada raza del universo ¿¡Tienes idea de lo complicado que es adaptar cada raza para que se adapte a cada posible variable!?

Max tan solo se rio

—No puedes hacerlo —Concluyo Max.

Azmuth se comenzo a molestar de verdad.

—Puedo hacer lo que sea, Max —Tajo Azmuth, con firmeza—. ¡Solo que TU IDEA no vale la pena!

A Max le valio.

—No puedes hacerlo.

Azmuth dedujo en seguida la estrategia de Tennyson.

—Lo que haces se llama Psicologia Inversa ¡Y ni siquiera fue descubierta en tu planeta! —Hablo Azmuth, fastidiado.

Max siguio.

—No puedes hacerlo.

Azmuth estaba enojado.

—¡No hay nada que no pueda hacer! —Respondio el Galvan.

A Max le entro y le salio por el oido.

—Un reloj que altere los genes de los aliens para... —Contesto Max, divertido.

Azmuth entro en colera:

—¡Eres un hijo de perra! —Le insulto Azmuth.

Max tambien alzo la voz:

—¡Solo acepta que no puedes! —Grito Max.

—¡No lo hare! —Grito tambien Azmuth.

—¿¡No lo aceptaras!?

—¡Pudrete, Max! —Lo mando al diablo Azmuth, completamente hecho una furia.

—¡Pudrete tu! —Le respondio Max.

Azmuth, enfurecido y estresado, se acerco a un enorme Boton rojo que decia "No Tocar"

—¡Pudrete...! ¡Pudrete TU! —Aullo Azmuth.

Entonces Azmuth toco el Boton rojo y exploto un asteroide.

Azmuth suspiro con fastidio.

—Argh...Hijo de perra —Murmuro Azmuth.

Azmuth vio con un poquito de lastima los restos del asteroide que habia destruido por su simple rabieta de genio frustrado (Si asi se le puede llamar, claro).

—¿Si vas a ha...? —Trato de indagarle Max.

Azmuth se volteo y contesto fastidiado.

—¡Si! ¡Si! Voy a hacerlo —Respondio Azmuth, exasperado y frustrado.

Max sonrio para sus adentros, sin saber que cierto Pulpo observaba todo desde atras.

Misión cumplida.